Mi novia el arma definitiva (Nejiten)

Mi novia el arma definitiva (Nejiten)

Mi novia, el arma definitiva (Nejiten)

¡¡Hola !!, este es mi segundo finc... quisiera agradecerlo a mi beta Kuroi Sakura, que me ayuda bastante, muchas gracias Kuroi-chan, bueno espero que les guste... nos vemos!!


Pov Neji
Mi nombre es Neji Hyuuga, vivo en la Capital de Konoha asisto en la escuela preparatoria de mejor calidad que hay aquí. No puedo decir mucho de mi familia, nunca la conocí, sólo a mi tío y a mis dos primas: Hinata y Hanabi. Una es de mi edad, la otra es más pequeña.

Siempre me costó trabajo expresar mis sentimientos. Decir un: Hola, ¿cómo estás? era mucho para mí. No tengo muchos amigos, sólo cinco: Lee, Naruto, Kiba, Sasuke y Shikamaru.

Desconocía qué era el amor; nunca creí que me hiciera falta. Hasta que un día la conocí a ella, bueno más bien ella me conoció a mí. Recuerdo que un día llego conmigo y se presentó.

Flash Back

—Hola.

Volteé a ver quién era y pude divisar a una chica de delgada figura, cabello marrón; con un peinado algo extraño que consistía en dos chonguitos amarrados con dos moños, unos ojos marrones como el chocolate y de tez ligeramente morena; mostraba una amplia sonrisa, parecía que estaba feliz de verme.

—Hola —contesté fríamente, después de todo apenas la conocía.

—¿Cuál es tu nombre? —preguntó sonriendo.

—Hyuuga Neji —respondí intentando que saliera a flote mi incomodidad.

—Lindo nombre —sonrió.

—¿Cuál es el tuyo? —pregunté sin quitar los ojos de mi cuaderno depues de todo era de mala educación pedir un nombre sin decir antes el tuyo.

—Ama Tenten —respondió alegremente.

—¿Qué se te ofrece? —quería que dejara de preguntarme tantas cosas.

—Yo… nada es sólo que quería conocerte —quedó confundida, tento como para bajar la mirada
—Ya veo —respondí bastante frío.
El silencio se hizo evidente. Yo no diría nada para que dejara de insistir y por lo visto ella también se quedaría callada, sólo mirándome. ¿Por qué me miraba? ¿Qué era lo que pasaba? ¿Tenía algo o qué?
Comenzaba a molestarme que me mirara así, justo cuando le iba a preguntar el porqué, la muchacha habló.
—¿Sabes? me gustan tus ojos —sonrío mientras me miraba de frente

—¿Qué? —ahora si estaba confundido.

—Me gustan tus ojos… son como espejos. Cuando ves el cielo tus ojos son azules —volvió a decir tranquilamente.

—Ya veo —dije apenas un poco feliz, nunca nadie me había dicho que mis ojos le gustaban. Normalmente les daban miedo ya que eran blancos, muchos incluso llegaban a pensar que estaba ciego.

—Son tan lindos —aseguró mientras se sentaba a mi lado.

Otra vez hubo un enorme silencio, tan incómodo para mí como para ella…

—Dime, Neji… —dijo mientras miraba al cielo.

—¿Qué sucede? —contesté sin dejar de ver mi cuaderno.

—Tú… bueno a ti te gustaría… —estaba nerviosa, su voz lo demostraba, mientras jugaba con sus dedos.
—A mí me gustaría… ¿qué?—no prestaba mucha atención a lo que ella hacía, sólo veía mi cuaderno.

—¿Te gustaría salir conmigo? —preguntó más nerviosa de lo que estaba antes; parecía que se había sonrojado o algo parecido.

—¿Para qué? —respondí con dureza.

—Tal vez podríamos ir a comer a algún lado —sugirió mirándome a los ojos.

¿Qué se supone que debía hacer? ¿Ir a comer a algún lado? ¡Qué confuso! Ahora que lo pienso bien, creo que a esto se le llama cita ¿no? Nunca me he fijado en esto y creo que no me da muchos ánimos ir.

—Entonces, ¿irás? —ahora había puesto una cara de “por favor”.

¿Qué creía, que con esa cara iba a ir? Lo siento mucho pero incluso aunque ponga esa cara, soy difícil de convencer y en verdad no me dan ánimos de ir a un lugar a comer.

—Está bien —contesté sin mucha esperanza; quería que dejara de fastidiar.

—Nos veremos a las seis en la cafetería que está al lado de la escuela —dijo mientras se marchaba y se reunía con un grupo de amigas.

—Hmp —solté aburrido. Había aceptado y ahora tenía que cumplir mi palabra; mas no me complacía mucho ir a una cafetería con una chica de extraño peinado en la cabeza.

—¿Quién era ella? —preguntó una voz muy familiar. Lee, un chico de extraño peinado en forma de tazón y unas cejas muy grandes; sin embargo siempre era positivo y a veces incluso tolerable.

—Tenten —respondí tranquilo.

—Ya veo… ¿y a qué vino? —cuestionó sin quitarle la mirada de encima.

—No es de tu incumbencia —hablé sin prestar atención.

—Entiendo —dijo aún observándola.

Después de que Lee dejó de observar la figura de Tenten que se perdía entre demás estudiantes, nos dispusimos a ir al salón que nos correspondía. La clase parecía ser eterna… miraba a las aves volar de un lado a otro siendo libres.

Sonó la campana que todos amaban; aquello significaba que la escuela había terminado. Sin embargo, a mí no me importaba mucho si seguía o si se detenía, ahora debía de regresar a la casa de mi tío para comenzar a vestirme como era apropiado para la dichosa cita en la que me había metido.

Debía llegar puntual por respeto. Comencé a caminar rumbo a la cafetería, aunque mi tío me preguntó donde iría, no respondí… no tenía por qué hacerlo.

Llegué a la cafetería; aún faltaban dos minutos para la hora indicada, así que me recargué en un poste a esperar.

Ya habían pasado 10 minutos después de las 6 y no me gusta esperar, así que decidí irme. Sin embargo, algo me lo impidió.

Una multitud enorme de gente bloqueó todas las salidas posibles. No sabía por qué corrían de un lado a otro, así que decidí voltear a donde la gente se alejaba y descubrí que la razón era simple: estaban atacando la cuidad.

Aviones dejaban caer sus bombas sobre los edificios más grandes de Konoha que de inmediato se venían abajo; creo que incluso mucha gente quedó debajo de ellos. De repente, una bomba cayó justo encima del edificio más cercano a mí, no tuve el tiempo suficiente de correr; ¿en verdad era el fin?
Cerré mis ojos aceptando lo que el destino tenía que darme y pude sentir una brisa fuerte cerca de donde yo me encontraba. Al abrir los ojos, ella estaba en frente de mí. Su brazo se parecía al de un robot, la sangre estaba mezclada entre los cables. Volteó de forma lenta y me miró fijamente; sus ojos estaban llenos de lágrimas, pero no soltó ni una.

—Neji… ¿puedes guardar un secreto? —su voz se oía entrecortada.

Por impulso propio me acerqué a ella y la abracé, pensé que tal vez eso la haría sentir mejor. Pero al abrazarla, no pude sentir su corazón…

Incluso su cuerpo estaba frío, parecía que estaba muerta. Sus ojos ya no mostraban ése brillo con el que los había visto antes, lo único que hizo fue quedarse ahí quieta… ninguna reacción o un gesto; nada…
Ni siquiera correspondió el abrazo, sólo se quedó quieta. Su mano comenzó a volver a ser como la de un humano y después se desmayó. De nuevo pude sentir el calor de su cuerpo y sus latidos comenzaron a normalizarse.

Comienza la historia…

En la preparatoria de la capital de Konoha, se encuentra una chica de dos chonguitos mirando el cielo…

—Aún no puedo creer que eso suceda —baja la mirada, apretando con fuerza el barandal.
En ese momento siente una mano en su hombro, voltea lentamente y para su sorpresa, es uno de sus mejores amigos.

—Hola, Tenten —saluda el joven sonriendo.
—Lee… ¿qué haces aquí? —la chica lo ve y sonríe.

—Nada, ¿no puedo estar contigo?

—Claro. Es sólo que me preocupaste —mientras suspiraba y volteaba de nuevo al cielo…

—¿Qué ves, Tenten? —pregunta extrañado el chico, sin embargo no recibe respuesta de su compañera, quien sólo se dedica a mirar el cielo.

—¿Tenten? —cuestiona el chico de nuevo.

—¿Eh? —los ojos de la chica cambiaron— ¿Qué sucede, Lee? —pregunta confundida y nerviosa.

El chico pudo notar un cambio en su mirada pero no hizo nada, solo calló y se sentía tan fatal… era la novia de su mejor amigo desde hace unos meses y llevaba bastante tiempo queriendo a esa chica, pero no lo podía evitar. La joven poseía una sonrisa tan bella que a su criterio era tan cegadora… no podía evitar sentir ese sonrojo al verla sonreír; tan radiante, tan bella.

Lee comenzó a dibujar una sonrisa en su cara. Sin embargo, ante él apareció la persona que tanto envidiaba, que tanto despreciaba y a la vez quería… la que era el dueño del corazón de la chica de su vida y a la vez su mejor amigo.

—Lee, ¿qué haces aquí? —preguntó mientras se sentaba en la banca más cercana.

—Nada, Neji —sonrió por el propio impulso, ya que ganas no tenía de hacerlo.

—Neji… buenos días —saludó la chica demostrando su afecto hacia él.

—Hola, Tenten —una apenas notable sonrisa surgió de los labios de Neji.

—Creo que yo salgo sobrando —Lee se volteó para que nadie lo viera triste.

—¿Qué dices, Lee? No es cierto —Tenten sonrió intentando darle ánimos a su amigo.

—Tenten tiene razón. Te puedes quedar, Lee —dijo Neji mientras lo miraba fijamente.

—No los quiero incomodar —mencionó Lee bajando la mirada y marchándose— ¡No dejen que el poder de la juventud se apague! —exclamó antes de perderse entre la multitud.

—Es raro —aseguró la chica mientras lo veía marcharse.

Sin embargo, ninguno de los dos sabia lo que Lee ocultaba dentro. Muy en el fondo de él, sentía odio hacia Neji y aunque dijo que se marchaba por no incomodar, en realidad se marchaba porque le dolía ver a ellos dos juntos. Eso era algo que no toleraba y estaba dispuesto a terminar.

Bueno eso es todo por hoy, gracias por pasar
hasta la siguiente edicion ¡Sayonara desu!
!Nipa!

 

Re: Mi novia el arma definitiva (Nejiten)

bueno si... es una adptacion pero lo unico que tomare a base sera esto..
lo demas sera mio, ya que estoy informada sobre lo que seria si fuera exaptamente igual
a la serie Saikano, se consideraria plagio, entonces me cerrarian el finc, eso es algo
que no hare, de aqui en adelante todo sera de mi imaginacion, ahora bien lamento
si realize OoC, no pense que estuviera arruinando la presonalidad de los personajes
lo lamento mucho ya que ellos no me pertenecen, gracias por sus recomendaciones,
espero hacerlo mejor para el siguiente capitulo.