MI LADO FEMENINO Esta historia cuenta sobre la vida de un joven estudiante de secundaria, que un día despertará con un gran cambio en él. Gracias a ello se le dará varias oportunidades que antes no se le había dado. Pero también muchos nuevos conflictos sentimentales tendrá en su camino. CAPITULO I: LA OPORTUNIDAD DESEADA Comenzaba el nuevo año escolar en la escuela secundaria Gral. Martins. Los alumnos con pesadez iniciaban su primer día de escuela, era normal en cualquier adolescente que al terminar sus vacaciones volvieran al colegio con fastidio. Uno de esos fastidiados alumnos era James Garden, quizás el más molesto de todos ellos por regresar a la escuela. Este joven de cabello púrpura y de ojos amarillos, era bastante dejado de lado por los otros estudiantes, principalmente por su clase social. A diferencia de todo el resto que venían de familias adineraras, él en cambio había podido ingresar a esta prestigiosa escuela gracias a sus excelentes notas, las cuales le permitieron ganarse una beca en la institución. Sin embargo no todos eran tan distantes con James, en este tiempo en la escuela pudo ganarse la amistad de Aaron Thompson. Este muchacho de cabello negro y ojos del mismo color, en comparación al resto, era una persona muy amigable y alegre. Sus padres habían hecho una gran riqueza luego de que se ganaran la lotería. A causa de ello y al igual que a James, el resto no lo veían como uno de los suyos, sino como un chico que se hizo rico gracias a la suerte que tuvo su padre. No obstante esto no les molestaba ni a James, ni tampoco a Aaron. Ellos mientras tuvieran esa gran amistad que los unía, jamás iban a necesitar de nada más. Pero si había algo que ambos no tenían, y eso era el amor de alguna hermosa chica. Ninguno de los dos era demasiado afortunado en eso. Por un lado Aaron era demasiado enamoradizo, todo el tiempo trataba de tener una cita con cada chica de la escuela, pero siempre era rechazado. Mientras que James sólo tenía ojos para una sola chica de allí, y ella era Catherine Lorenz, una linda chica de ojos verdes y cabello largo hasta la cintura de color castaño. Pese a que ella si provenía de una familia aristocrática, de todas formas siempre se comportaba de forma gentil con James, quizás al ser ella de esa forma hizo que el muchacho quedara maravillado con la joven. —Maldición, se hacen muy cortas las vacaciones, ¿no lo crees James? — Las quejas de Aaron pasaron desapercibidos para su amigo que se encontraba mirando embobado hacia otra dirección, en donde estaba la chica de sus sueños. —Mírala Aaron, ¿no te parece que hoy está más linda que de costumbre? — Al verla, James siempre imaginaba a su querida Catherine con alas de ángel, es que en verdad creía que era una. Las fantasías de él siempre terminaban en el momento que quería darle un beso a la chica. —James, no es por desalentarte, pero no tendrías que soñar siempre con ella. Si hay una familia rica de verdad en esta escuela, eso son precisamente los Lorenz. Recuerda que el padre de Catherine es el magnate millonario más importante del país. — Si bien no le gustaba desanimarlo, Aaron no quería que su amigo fantaseara con algo imposible. —No tenías que recordármelo Aaron, sé muy bien que ella no está a mi alcance. Pero aun así… — Se quedó mirándola nuevamente, sin importar que le dijeran, él no podía dejar de soñar con ella. — Catherine siempre va a gustarme, aunque no exista ninguna posibilidad de estar a su lado, nunca podré quitarla de mi corazón. — Esta bien amigo, si tú piensas de esa manera no hay problema, igualmente… — Poniendo una cara picarona. — ¿Qué te parece si mientras vamos a conocer algunas chicas mientras te decides a declarártele a Catherine? — ¿Qué estás diciendo?, es nuestro primer día de clases, ¿Cómo se te ocurre pensar en algo así? —Amigo mío, este es el mejor momento para conocer chicas, estoy seguro que debe haber muchas nuevas alumnas. Piénsalo, tendremos más posibilidades de conseguir novia con las de nuevo ingreso. — Aaron sujetaba fuerte del cuello a James, no se daba cuenta pero siempre que hablaba de mujeres se ponía muy efusivo. —E-Está bien, pero suéltame, me estoy quedando sin aire. — Casi ahogándose pudo soltarse de su compañero, pero no tuvo más remedio que seguirle la corriente a su mejor amigo y estar con él en la cacería de chicas. Luego de acordar lo de conocer a las nuevas alumnas, ellos ingresaron a su salón, pero como de costumbre llegaban tarde, inclusive en su primer día de escuela. Esto fastidio muchísimo a la maestra, lograron ganarse las primeras reprimendas del año escolar. — ¡James, Aaron!, ¿se puede saber en qué están pensando?, llegar tarde el primer día, me extraña de ti James, tienes muy buenas calificaciones, pero si sigues a este vago terminaras mal, ¿no te preocupa tu futuro? — La solterona Emma Carpenter, era una mujer madura de cabello verde que le llegaba al cuello, y de ojos color granate. No era una mala persona, sabia lo mal que solía pasarla James por haber ingresado gracias a la beca y por no pertenecer a una familia rica. Por esa misma razón no quería que el chico arruinara su estaría en la escuela. —Lo siento mucho señora Carpenter, no volverá a pasar. — James estaba realmete arrepentido por la demora, sabía que no había comenzado de la mejor manera en su primer día. —Maestra, por favor no regañe a James, fue mi culpa que se entrara tarde al salón. Si tiene que decir algo debe ser a mí, él no tiene nada que ver. — Más allá de todos los defectos que se le pudieran encontrar a Aaron, no se podía negar que tenía un buen corazón. —Me imagino que tú tienes mucho que ver en esto joven Thompson, está bien, por esta vez se las dejo pasar. Pero será mejor que no se vuelva a repetir, ¿lo han entendido? — Los muchachos dijeron que si al instante que también se sintieron aliviados por no ser castigados. Después de escuchar la pequeña reprimenda por parte de la maestra Carpenter, James y Aaron se fueron a ubicar a sus lugares. Como era de esperarse ambos estaban sentados uno al lado del otro. Cerca de James también se sentaba su amor imposible, Catherine. —“Catherine, como quisiera confesarte lo que siento, eres tan especial, tan única, ¿Cómo podría acercarme más a ti?” — Esa era una pregunta que James constantemente se hacía para sí mismo, aunque nunca encontraba respuesta a la misma. —James, James, la maestra te está llamando. — Sacándolo de su sueño, Aaron le dirigía la palabra al joven antes de que por segunda vez fuera regañado por la profesora, pero… —Eh, ¿q-q pasa Aaron?, ¿necesitas algo? — El muy tonto no se daba cuenta que tenía frente a su pupitre a una rabiosa maestra que ya hacia como diez minutos que lo estaba llamando para que resolviera un problema en el pizarrón. —Esto ya es demasiado…James Garden, fuera de mi clase. — Todo el salón reía a carcajadas, por segunda vez recibía una llamada de atención, pero ahora con castigo incluido. Mientras Aaron miraba preocupado como su amigo salía del aula. Tras transcurrir el día, finalmente Aaron decidió posponer la búsqueda de chica para otro día, ya que veía que su compañero estaba algo fastidiado por la mala jornada que tuvo. James de inmediato se fue hacia su casa, su padre solía trabajar hasta tarde por lo que no podía estar cuando él llegaba. En cuanto a su madre se dedicaba fervientemente a la cocina, por lo que ni bien llegaba su hijo, ella ya tenía su comida preparada. —Hijo, hoy te he preparado una suculenta comida para saciar tu apetito estudiantil, puedes sentarte a comer. — La señora Garden, pese a ser una mujer madura, era verdaderamente bella, ella tenía unos bellos ojos azules y un largo cabello rosado que sobrepasaba su cintura. —Lo siento mamá, pero me duelo un poco el estómago, voy a recostarme un momento. — Rara vez James se negaba a comer, pero ese día se sentía algo molesto, pero también triste, lo que hacía que perdiera su apetito. —Pero…hijo, ¿no quieres que te de algo para el dolor de estómago? — Decía afligida la mujer. —No hace falta mamá, se me pasara luego de descansar. — James se dirigió a su cuarto, apago las luces del mismo y se dejó caer pesadamente en su cama. Tenía muchas cosas en su cabeza, pero una en especial ocupaba gran parte de sus pensamientos. — Catherine, eres casi inalcanzable, ¿qué puedo hacer para acercarme a ti?, daría lo que fuera por conseguir algún tipo de relación con ella. Ya muy cansado el joven se quedó completamente dormido. Había caído en sueño con aquel deseo en su mente, el de tener la posibilidad de acercamiento con Catherine. Al llegar un nuevo día, la alarma de su celular lo despertó, era el momento de levantarse para ir otra vez a la escuela, pero algo había cambiado en él durante esa noche. — Debí haber comido algo ayer, tengo tanta hambre. No importa me desayunaré bien antes de irme a la escuela. —Ni bien se levantó, James fue al baño a lavarse su rostro, para despejarse del todo, pero se llevó una gran sorpresa al verse en el espejo. — ¿Que estoy viendo?, es una…chica. —De repente reacciono. — Aaah, pero...pero… ¿Qué significa esto?, ¿Por qué…por qué soy una chica? — Los gritos de la chica James casi se oyeron en toda la calle, y la nueva vida del adolescente estaba por comenzar. PROXIMO CAPITULO: JOSEPHINE, LA CHICA DEL CABELLO PURPURA
CAPITULO II: JOSEPHINE, LA CHICA DEL CABELLO PURPURA Ese mañana, James se había levantado para ir a la escuela como siempre lo hacía, pero la repentina metamorfosis que sufrió su cuerpo le daba un giro a su rutina diaria. —No puede ser… — La chica James se veía en el espejo de pie a cabeza, no había ni el más mínimo rasgo de masculinidad en todo su cuerpo. Totalmente diferente a como debía ser un chico, en él veía a una preciosa muchacha de hermosas curvas. — Debe ser una pesadilla, yo no puedo ser esa de ahí. — Por más que lo mirara de una parte a otra, todo su ser se había vuelto completamente femenino. —James, hijo, apresúrate y ven a desayunar. — Su madre como acostumbraba le llamaba para que desayunara, lo que hizo que él se pusiera aún más nervioso de que lo llegara a ver así. —Esto está muy mal, si mamá me llega a ver así como se lo explicaré. — Sin perder el tiempo comenzó a buscar en su guardarropa algo que le cubriera la mayor parte de su cuerpo, en especial su cara. Así fue como encontró un saco muy largo, lo suficiente como para cubrir su nuevo aspecto. Luego de estar cubierto por el saco, la chica James bajo hacia la sala para poder irse sin ser visto por su madre. Para que no lo descubriera la dueña de casa, caminó con mucho cuidado para hacer el menor ruido posible. —Debo irme con cuidado, mi madre seguramente este en la cocina haciendo… —Hola hijo, ¿te ibas a ir sin desayunar? —M-Mamá, yo…tengo algo de prisa. — Estaba en verdaderos problemas, seguramente ella le descubriría su tan inesperado cambio de sexo. —Mmm, ¿te pasa algo hijo?, noto algo raro en tu voz, aparte, ¿por qué llevas ese saco tan largo?, apenas puedo verte. —Eh,n-no es nada mamá, estoy un poco resfriado eso es todo. Llevo este abrigo para no tomar frio, ves, soy muy responsable, Jajaja. — Trataba de comportarse lo más natural posible, pero se estaba olvidando de un pequeño detalle que también descubrió su madre. —Oye, tu cabello… ¿siempre estuvo así de largo? — Dijo enseguida notando los largos mechones de pelo púrpura que salían a la vista. —Hay mamá, como se nota que no me prestas atención, hace mucho que me he dejado el pelo largo. Bueno, discúlpame pero tengo que irme, hasta luego. — Emprendió enseguida su marcha hacia la escuela. Encaminándose hacia la escuela ya sin llevar puesto ese molesto saco sino su uniforme de la escuela. Era tiempo de pensar sobre lo acontecido. —Vamos James, piensa. De un momento a otro me despierto siendo una chica, Ahora la pregunta seria, ¿Cómo fue que paso esto?, y más aún, ¿Cómo haré para volver a la normalidad? — Eran más sus dudas que sus certezas hasta ese momento, pero para el muchacho o mejor dicho muchacha, las dificultades de este cambio apenas comenzaba. Mientras caminaba la chica James, un par de jóvenes estudiantes de otra escuela observaban a lo lejos a la bella chica. —Mira amigo, esa niña…es muy sexy, ¿no lo creen? —Tienes razón compañero, y viene sola. —Es cierto, ¿porque no nos acercamos a ella?, podríamos tener alguna posibilidad con esa preciosura. —Es una buena idea, vamos con ella. — Ambos se cruzaron la calle para encontrarse con la niña de cabello púrpura que venía caminando algo distraída por su problema. —Maldición, por más que pienso no se me ocurre nada sobre lo que le paso a mi cuerpo. — ¿Y qué le paso a tu cuerpo preciosa?, yo lo veo muy bien. — ¿Eh?, ¿Quiénes son ustedes? — Pregunto ella algo enojada. —Ey,ey,ey, no es para que nos trates así primor. Yo me llamo Richard, y este de aquí es mi compañero Ben. Sólo queremos saber si no necesitas algo de compañía, estas calles son peligrosas para una chica como tú. —No gracias, se cuidarme bien yo sola, con su permiso. — Antes que se retirara, uno de los sujetos la tomo del brazo. —Eres una maleducada chiquilla, nosotros solo queríamos ayudarte. —Pues no me hace falta su ayuda, déjenme en paz, si no voy a… — ¿Vas a qué?, ¿piensas gritar para que alguien venga a ayudarte? — ¿Gritar?, ja… — ¿Qué te causa risa niña tonta?, vendrás con nosotros. —Eso ya lo veremos. — La chica James iba a golpear al sujeto, pero en ese preciso momento… — ¡Alto!, dejen de molestarla. — Gritó haciéndose el héroe un joven estudiante. — ¿Tú quién eres mocoso? —Soy el salvador de las jóvenes doncellas en apuros. Yo soy el genial y magnifico, Aaron Thompson, el caballero. — Lo había dicho de una forma tan vergonzosa, que tanto los dos embusteros como la chica James se le quedaron viendo. —¨ No puede ser, que nadie se entere que es mi amigo.¨ — Se tomaba la cabeza. —Ben, encarguémonos de este payaso. —Sí, le enseñaremos que con nosotros nadie se mete. Los dos fueron con intenciones de agredir a Aaron, pero no se esperaron que este fuera un gran peleador. En un abrir y cerrar de ojos, él solo pudo encargarse de ambos. —Wow, es increíble. — Dijo impresionada la chica por la habilidad de Aaron con sus puños. —Linda señorita, ya no tiene por qué temer, ahora yo estoy aquí para protegerla. —¨ ¿Desde cuándo es un guardaespaldas? ¨, gracias por tu ayuda, ahora si me disculpas, tengo que irme. —Oye espera, ¿eres de la escuela Gral. Martins?, ¿verdad? —S-Si… —Entonces, ¿por qué no nos vamos juntos?, de paso puedo cuidar de que nadie intente atacarte. —Pero…no creo que sea necesario. —Oh vamos, no seas tímida. — Enseguida él la tomo de la mano y se la llevo hacia la escuela. —¨ ¿Por qué me sonrojo?, él es mi mejor amigo, además yo soy un hombre, ¿En qué estoy pensando? ¨ —Por cierto linda, ¿Cómo te llamas?, no me has dicho tu nombre aún. —Jam…digo…Josephine, me llamo Josephine. —Qué bonito nombre. ¨ No lo puedo creer que este yendo de la mano con una chica tan linda como ella. Hoy es mi día de suerte, no puedo esperar a que me vea James llegar con ella.¨ Para Aaron es quizás el mejor día de su vida, pero para la chica James, mejor dicho Josephine, sus problemas iban incrementando su espantosa jornada. PROXIMO CAPITULO: LA NUEVA SENSACION DE LA ESCUELA.
Holaaa!!! Gracias por la invitacion ^^ que divertido se ve y fuero de lo normal jiji sera gracioso al ver la cara de su amigo cuando se entere de la verdad jeje ¿como hara james para volver a la normalidad? tengo mucho intriga el como lo solucionara...sin duda este sera un fic muy divertido n_n espero con ansias la conti :D El capitulo fue un poco corto u.u podrias, por favor, alargar un poco mas el proximo capitulo, siii *-* ? jeje es que esta muuuy bueno :) Sayo y cuidate!!
¡Oh por Dios! Ah sido fantastico Generalmente la comedia no es mucho de mi agrado (lo se parezco emo, ¿por qué a quien no le gusta reirse?) pero bueno tu has hecho que esta historia me atrape, oh pobre James, ahora es una chica y lo peor de todo es que si intenta no llamar la atención eso es lo que más dificil se le va ha hacer. ¿Pero que fue lo que le sucedió?, ¿Y como es posible que su madre no note nada raro?, Bueno si lo notó, lo que quiero decir es que como no se dio cuenta de que era una chica y ¿ahora que va ha hacer?, No creo que a su madre le haga mucha gracia que llegue y le diga -Mamá soy una chica, ahora soy Josephine. Aunque sería divertido, apuesto a que se desmaya. Bueno gracias y me avisas (si no es mucha molestía) para el proximo capi. Sayito y lindo día!
CAPITULO III: LA NUEVA SENSACION DE LA ESCUELA Un par de adolescentes iban de la mano en dirección a la escuela. Cualquiera que los viera diría que eran una parejita de novios. Aunque para la chica esa idea ni se le pasaba por la cabeza, más teniendo en cuenta que en realidad ella era un chico. —Oye Aaron, no es necesario que me lleves así, me estas apretando muy fuerte mi mano. —No podemos descuidarnos mi pequeña Josephine, en cualquier momento podrían aparecer otra vez esos abusivos. Por eso es mejor que te sujete bien fuerte de mi mano. —Puede ser, de todas formas yo creo que… — ¡Tu no temas mi bella Josephine, mientras tu servidor se encuentre a tu lado, ningún rufián se atreverá a acerté daño, no te preocupes!, jajaja. —¨ Precisamente por eso me preocupo.¨, supongo que no tengo otra opción. — Suspiro resignada. Ni bien ambos llegaron a la escuela, no paso ni unos minutos para que todos los alumnos comenzaran a murmurar sobre la chica que venía acompañando a Aaron. —Oigan, ¿quién es ella?, y ¿Qué hace con ese tonto chico Thompson? —No lo sé, nunca antes la había visto por aquí. — ¿No les parece que es realmente linda?, miren las curvas que tiene, y ese rostro tan angelical. —Sí, es verdad. No puedo creer que una chica así venga de la mano con ese inepto de Aaron, seguramente la ha engañado de alguna forma. El murmullo de los estudiantes continuaba y llegaban a oídos de Aaron, cuyo orgullo ya estaba casi por las nubes. —¨Jejeje, tal como lo pensé, todos han quedado con la boca abierta. Ya era hora de que dios se acordara de este joven noble y gentil, pero no puedo bajar los brazos, ahora lo siguiente será ganarme el corazón de Josephine. Si ella se convirtiera en mi novia, yo seria, yo sería…¨ — La mente de Aaron comenzó a fantasear con esa posibilidad. Sueño de Aaron… — Aaron, tú, tú…me gustas. —Josephine, yo también…te amo con todo mi corazón. — ¿Lo dices en serio Ari? —Claro que si tontuela, tú eres la única chica a la que amo. —Ari soy tan feliz, por favor bésame, necesito sentir la dulce sensación de tus besos. —Si eso es lo deseas linda, entonces… — Sus labios comenzaron a acercarse lentamente hasta que… Fin del sueño de Aaron… —Sí, si eso pasara… ¡Seria el hombre más feliz del mundo! — Gritaba eufórico, era tanta su alegría que su grito fue escuchado por toda la escuela. —Oye compórtate, todo el mundo nos está mirando, ¨ ¿Y ahora qué le pasa? ¨ — Ella lo miraba, mientras él dirigía su vista hacia la nada con cara de idiota, bueno la única que tenía. — ¿Eh? ,Jaja perdóname, por momentos estoy exaltado. ¨ No puedo rendirme, tengo que hacer lo posible porque ese sueño se haga realidad¨ — Recordando lo que sintió mientras se imaginaba el casi beso que iba a tener en sus fantasías con Josephine. —Intenta no ponerte más así por favor, y apresúrate o nos van a regañar. —No te preocupes, eso no va a pasar, yo tengo mucho peso en esta escuela. Minutos después de entrar a la clase… — ¡Aaron Thompson, de nuevo llegas tarde! — Los tímpanos de todos los alumnos habían quedado verdaderamente afectados por los gritos de la profesora Carpenter. —Lo siento maestra, es que no me di cuenta de la hora, lo que paso fue… —¨ ¿Con que mucho peso en la escuela eh? ¨ — La chica James no se imaginaba lo tonto que podía llegar a ser su amigo. — ¡Basta de tus estúpidas escusas, me tienes cansada con tus mentiras, te iras de mi clase ahora mismo!, Y tú ja… ¿eh? — La profesora Carpenter se quedó mirando detenidamente a la persona que acompañaba a Aaron, notando que no era el chico que siempre venía con él. — Un momento, tú no eres James, ¿no es cierto? — Dijo acomodándose sus lentes para ver mejor. —Maestra, es evidente que no lo es. — Respondía Aaron sacando pecho, quería que todos sus compañeros lo vieran con la muchacha. — ¿Quién eres jovencita? —Este…yo, soy Jo…Josephine. — Soltó con muchísima timidez, ante la atenta mirara de todos los alumnos, en especial de los varones que estaban desenfrenados. —Wow, ¡miren muchachos, es la chica que vimos en la entrada de la escuela, y está en nuestra misma clase! — ¡Siii! — Exaltados totalmente gritaron los chicos como perros en celo. —Oigan, no se atrevan a tocar… — Todos ellos pasaron por encima del pobre Aaron para poder ver de cerca a la chica, en verdad lo dejaron tragando el polvo. — ¿Alguien vio al tren que me paso por arriba? — Pregunto antes de volver a desmayarse. —Cuéntame linda, ¿de dónde vienes? — ¿Tienes novio? — ¿Cuáles son tus medidas? — ¿Quieres salir conmigo? —Por favor, déjenme en paz. — Ella estaba acorralada, para colmo su torpe amigo que le iba ser de guardaespaldas se encontraba en el suelo desmayado. — ¡Silencio todos!, ¡Vuelvan a sus lugares inmediatamente! — Con la furia que mostraba la maestra Carpenter en sus gritos, fue suficiente para calmar a la jauría, por lo menos por ahora. Como cachorritos arrepentidos y agachando la cabeza, todos los chicos volvieron a sus lugares, excepto Josephine y Aaron que seguía en el suelo. —Así está mejor. Volviendo a tu tema jovencita, es muy extraño, la directora no me había avisado nada sobre el ingreso de una nueva alumna. —Lo que pasa es que…apenas llegue a esta escuela hoy, todavía no he traído los papeles de inscripción. —Pero eso es inaudito, si no te has inscripto en esta escuela, entonces tendrás que irte. Al escuchar eso, de inmediato Aaron se reincorporo como si nada le hubiera pasado. —Un momento profesora, creo que sería justo que le permitan inscribirse, después de todo aún debe estar a tiempo de hacerlo, ¿no lo creen muchachos? — Dirigiéndose al resto de los estudiantes, a lo que ellos enseguida le dieron la razón. — ¡Claro que no!, esta escuela tiene un prestigio que cuidar. Nadie puede ingresar aquí así como así, y que no se diga más. Las quejas de todos los chicos comenzaron a escucharse en el aula. Josephine en tan solo un día, se había vuelto muy popular con los muchachos, en especial por sus sugerentes medidas, dignas de una top model. — ¡Les he dicho que es suficiente!, ¡si digo que no, es no! —Espere maestra Carpenter, no es necesario que se precipite. — Estas palabras salieron de la boca de la directora Brenda Evans, que se encontraba en la entrada de la clase. Esta bella y madura mujer de cabello negro hasta su cintura y bellos ojos verdes, ya hacía dos años que estaba a cargo de la escuela Gral. Martins. — ¿Cuál es el problema profesora? —Directora, lo que sucede es que esta chica no está inscripta en nuestra escuela. Le estaba diciendo que no puede quedarse aquí, pero los chicos no entienden esto. —No se preocupe profesora, déjela que se quede. Yo me haré cargo del asunto. —Lo que usted diga señora directora. La directora dirigió su vista a la chica de cabello púrpura. —Jovencita, ven conmigo a mi oficina, necesito hablar contigo. —S-Si señora. —Josephine siguió a la directora hasta su oficina, Una vez allí, la encargada de la escuela invito a la chica a que tomara asiento. Ellas permanecieron calladas por un par de minutos, hasta que la señora Evans decidió romper el hielo. — ¿Quieres algo para tomar Josephine? — ¿Eh?, n-no, así estoy bien, gracias. —Has tenido un día muy atareado, ¿no es cierto…James? Al escuchar ese nombre la chica había quedado descolocada, ¿Cómo era que ella sabía su verdadero nombre? —P-Perdón… ¿Cómo me llamo? —Jejeje, no es necesario que finjas conmigo joven Garden, yo conozco muy bien tu secreto. —No…puede ser, ¿Cómo es que usted? La sorpresa en los ojos de Josephine era innegable, pero… ¿Quién es en realidad la directora Evans? PROXIMO CAPITULO: NUEVA VIDA DIARIA
Gracias por invitarme. Interesante, pero que raro que de repente te despiertes como persona del sexo opuesto, te juro que me impresionó el primer capítulo. Pienso que cada sexo tiene sus ideas propias y dictadas por la sociedad muy diferentes, además, claro, de un cuerpo muy diferente, así que sería muy extraño (repito) cambiar de sexo. Por otro lado, ahora James podrá entender mejor a las chicas y tal vez acercarse a su amor platonico, por lo menos como amiga. Me muero por saber quien es en realidad Brenda Evans.
CAPITULO IV: NUEVA VIDA DIARIA El rostro de sorpresa de Josephine venía acompañado por la incertidumbre. No entendía por qué una total desconocida sabía sobre su transformación. Debería averiguar bien quién era esta tal directora Evans, y que tanto sabia ella sobre esto que le había pasado a su cuerpo. —Oh vamos James, no tienes por qué poner esa cara. Era inevitable que alguien supiera sobre lo que te ocurrió, no entiendo tu gesto de sorpresa. —No es eso directora, pero… ¿Cómo sabe usted de esto?, yo no se lo he contado a nadie, ni siquiera a Aaron que es mi mejor amigo. —Que mal que ni siquiera confíes en tus amigos, deberías creer más en ellos, joven Garden. —No está respondiendo a mi pregunta, ¿Cómo sabe usted sobre mi cambio de sexo?, ¿Quién eres tú en realidad? —Haces muchas preguntas. Por el momento no puedo decirte mi verdadera identidad, pero sí puedo asegurarte que no estarás así por el resto de tu vida. Tu condición actual puede cambiar, siempre y cuando hagas bien las cosas. — ¿Hacer bien las cosas?, ¿A qué se refiere con eso? —Jejeje, tú no te preocupes. — La directora se acercó a Josephine y puso su mano en la mejilla de la estudiante. — Si haces lo que te pido volverás a ser el mismo de antes, mientras tanto intenta disfrutar de tu nueva vida como chica. — ¿Disfrutar mi vida como chica?, debe estar bromeando. — Respondía con furia. — Esto es como una pesadilla, ¿Cómo puede decir eso? — Hehe, eres muy graciosa. Ya verás que podrás encontrarle su provecho a esto, y ahora si me disculpas tengo muchas cosas que hacer, puedes retirarte. — ¡Espere, aún tengo muchas preguntas que hacerle! —Preguntas que todavía no responderé. — Se levantó para abrirle la puerta de su oficina. — En otra oportunidad te explicaré con más lujo de detalle, hasta la próxima vez… señorita Josephine. Ni bien la directora abrió la puerta, enseguida Aaron sale disparado a abrazar a Josephine, lloriqueando como si fuera un niño. —Hermosa, ¿dime si te encuentras bien?, me alegro que estés sana y salva linda, tenía tanto miedo, ¡Buah! — Seguía derramando lagrimas tras lágrimas, al tanto que Josephine quería liberarse de los brazos de su molesto compañero. — ¡Suéltame!, ¡Suéltame!, no me dejas respirar. — Por más que Josephine intentaba quitarse de encima a Aaron, le resultaba imposible superar la fuerza de él, más ahora que tenía el cuerpo de una chica. Afortunadamente la joven del cabello púrpura iba a recibir la colaboración de alguien. —Aaron Thompson. — Dijo la directora apretando sus dientes. — ¿Quién te has creído que eres para entrar de esa forma a mi oficina? — Enseguida ella tomo una regla de metal que tenía en su escritorio y le golpea en la cabeza al tonto estudiante enamorado, haciendo que a este le saliera un chichón en el acto. — ¡Lárgate ya mismo de aquí idiota! —Lo siento, lo siento directora, pero temía por la vida de mi querida Josephine, ella que es tan suave y delicada. De solo pensar que recibiría toda la ira de una persona como usted, sentí como mi alma me indicaba que tenía que estar a su lado. — El muy idiota quiso volver a abrazar a Josephine, pero esta vez no solo recibiría el castigo de la directora, sino que la estudiante junto a la encargada de la escuela, le propinaron con sus puños un severo golpe en su cara, enviándolo así fuera de la oficina. — ¿Por qué me hacen esto a mí? — Totalmente noqueado, Aaron quedo dormido en el suelo, permaneciendo así hasta el día siguiente cuando fue despertado por el encargado de limpieza. Pero volviendo a lo importante, luego de quitarse del medio al estorbo, la señora Evans le dijo algo más a la chica James, antes de que la joven se retirara del lugar. —Recuerda lo que te dije Josephine, si haces bien las cosas volverás a ser el de antes, pronto sabrás más sobre tu metamorfosis. — Y cambiando totalmente de postura. — Ahora disfruta de tu estaría en esta escuela jovencita, que tengas un buen día, y por cierto, te registre como Josephine Flowers, dile a la maestra Carpenter que te presente con el resto de los alumnos. Luego de terminar su conversación con la directora, Josephine se dirigió a su aula. Pidiendo la autorización para ingresar al salón, finalmente luego de que la profesora supiera sobre su ingreso a la escuela, la bella chica hizo su presentación con el resto de la clase. —Hola a todos, me llamo Josephine Flowers, tengo 17 años. Deseo llevarme bien con todos ustedes, espero que me den la oportunidad de conocerlos, muchas gracias. Ni bien termino con su presentación, los chicos se volvieron locos con la ternura que mostro la chica. Sencillamente la dulzura que mostraba, unida a su belleza física, los enamoraba aún más a todos los alumnos. — ¡Eres preciosa linda, bienvenida! — Dijo a los gritos uno de los estudiantes. — ¡Serás la numero uno de la escuela! — Menciona otro. — ¡Silencio en la clase por favor! — Nuevamente la clase se le iba de las manos a la profesora por el comportamiento alborotado de sus alumnos. Una vez que pudo tranquilizar a la jauría, la profesora le permitió a Josephine ubicarse en algún asiento que estuviera disponible. —Ya que James no ha venido a clases hoy, puedes ocupar su asiento, después veremos donde ubicarte. —Está bien profesora. — La nueva estudiante se aproximó a su lugar, ante la atenta mirara de sus compañeros que no le quitaban los ojos de encima. —Ah, qué día más largo estoy teniendo, espero que se termine pronto. —Te has vuelto muy popular. — Le dijo de repente la compañera que tenía al lado de su pupitre. — Gusto en conocerte, me llamo Catherine Lorenz. —Eh, H-Hola, soy Josephine Flowers, el gusto es mío. —Seguramente los chicos van a estar detrás de ti, así que si precisas algo no dudes en decírmelo. —Gracias…Catherine. — El corazón de James se había acelerado a mil, mientras tanto debería pensar con seriedad cuál será su manera de proceder de ahora en más. PROXIMO CAPITULO: CHICA DE INTERCAMBIO
Alohaa!! gracias por avisarme jeje muy bueno el capi :D aunque aun tengo muchas dudas :/ en fin, me gusto mucho y la parte que mas me gusto fue cuando Aaron entro a la oficina de la directora y abraza a Josephine/James jakjakaka ya quiero saber cuando se entere sobre el cambio de sexo de James, pobre se le va a romper el corazon </3 Si no me equivoco, porque a veces me suelo equivocar jeje, te falto uno o dos acentos, sin duda no es nada grave, pero mejorable :) en general estuvo muy bien n_n Sayo y cuidate!!
como rayos sabe la directora de su estado sexual? y lo mas importante como se pudo volver asi? aunque eso le servira de ayuda para acercarse mas a Catherine, pero el problema mas grande son los chicos y Aaron que tu mejor amigo este enamorado de ti no es muy comun, espero que no llegue mas esto jajajaja bueno gracias por invitarme espero que me avises para la proxima y perdon por no aver pasado antes pero mas vale tarde que nunca
Hola, ¿Como estas? Me encanta pobre James tiene que mentirle a su mejor amigo (eso tiene que ser horrible), pero para su suerte la chica por la que el esta loco le ha hablado en su forma de chica (eso es bueno, ¿verdad?) pero por que la directora lo sabia no entiendo él por que ella lo sabe (tienes que explicarlo) pero bueno cuando subes el siguiente capitulo me muero por saber que pasa (si no subes el siguiente capitulo me moriré de intriga eso quieres que me muera que cruel eres TTT-TTT) y bueno sin mas que decir me despido. Bye-Bye
Cómo me hubiera encantado que siguieras escribiendo, está genialix XD En fin, yo también me pregunto quien será Evans, tal vez ella sepa por que está en el cuerpo de una chica. además la idea esta excelente y tu redacción sencilla y graciosa Si vuelves a publicar avísame, por favor
No voy a abandonar esta historia, solo quiero terminar con la que tenia antes que ya le falta poco, y claro te voy a escribir cuando comience de nuevo con Mi lado Femenino.
CAPITULO V: CHICA DE INTERCAMBIO James no podía salir de un problema que enseguida entraba a otro. Sumándole lo de su sorpresiva metamorfosis, también debía pensar en la directora Evans, quien en verdad era todo un misterio para el joven estudiantes. Esta atractiva mujer le había dejado muy inquieto, debido al conocimiento que ella tenía sobre su cambio de sexo. Pero no todo eran pálidas para James, entre la tortura que sería sacarse a los exaltados alumnos por su nueva apariencia física (que en verdad era apetecible) esta nueva vida que el iniciaría como alumna del colegio iba a venir acompañado con una probable amistad con la chica de su sueños, Catherine Lorenz. —Vaya, hacía mucho tiempo que no se veía a un alumno que causada tanto revuelo. — Le decía la tierna muchacha con su habitual amabilidad. — ¿T-Tú lo crees? —Por supuesto, es más, creo que nunca vi semejante recibimiento para alguien, aunque viéndote… — Se le quedo mirando fijamente, claro Josephine estaba mas que nerviosa ante la mirada de la joven. — No me extraña para nada, eres muy hermosa. —Jajaja, creo que estas exagerando mucho, p-pero te lo agradezco. — Decía apenada por tanto elogio. — ¨ Debe ser un sueño, Catherine me dijo que soy hermosa, siempre me ilusionaba con que me dijera eso en mi forma masculina.¨ — Por un lado Josephine estaba sumamente feliz por el agasajo de Catherine, pero por otra parte, ella o mejor dicho él, sabía que esos elogios era para su nueva persona. —Sabes… creo que tú me serás de mucha ayuda. — ¿Por qué lo dices? — Pregunta incrédula. —Es que ahora que tú estás aquí mis días en la escuela no van a ser tan fatigantes, es que en verdad los chicos de acá son muy densos, en especial si tienen una chica atractiva delante de ellos, lamentablemente para ti, tú serás la victima de sus acosos. — ¿Eh?, ¿lo dices en serio? — La chica James comenzaba a preocuparse por lo que fuera a pasar con ella ahora que tenía esta nueva apariencia, que en verdad le generaba varios conflictos. —Jajaja, pero no te preocupes por eso, si tienes algún inconveniente con ellos no dudes en pedirme ayuda, no vas a creerlo pero me he vuelto una experta a la hora de escaparme de ellos. —M-Me lo imagino. — Contesto Josephine, dándose una idea de las variantes de escapatorias que haría Catherine por salir sana y salva de la escuela. Catherine y Josephine seguían charlando durante la clase, claro, cada tanto eran regañadas por el profesor ya que no prestaban atención. Cualquiera diría que ellas dos eran conocidas de hacía mucho tiempo, debido a lo fluido de su charla, no cabía dudas que estas dos chicas se convertirían en dos buenas amigas. Durante la última hora de clases, Josephine quería intentar sacarle algo de información a Catherine, claro, sobre todo en el tema amoroso, ahora que él también era chica sentía que podía hablarle libremente de ese asunto. —Dime una cosa Catherine, ¿tienes novio? — Soltó de golpe la pregunta, lo que agarro desprevenida a su compañera. — ¿Eh?, n-novio…. —Sí, seguramente siendo una chica tan bonita debes tener uno, ¿o no?, ¨ Por favor que diga que no tiene¨ — Suplicaba James por dentro. —No, no tengo novio… — Respondió la muchacha dueña del corazón de James. — Los chicos en su mayoría sólo me ven por lo físico. — Aludiendo a su escultural cuerpo, que era comparable con el de una modelo. —Ah…que pena, ¨ Viva¨ — Festejaba en su interior. —Aunque…— Esa palabra dudosa puso en alerta a Josephine. — Si hay alguien que me gusta. Al escucharla decir que existía una persona que le gustaba, James sintió como si un enorme muro se le hubiera caído encima. — ¿H-Hay…un chico que te gusta? —Sí, pero…mejor olvidemos el tema, me da algo de vergüenza hablar al respecto. — ¡Oh, vamos Catherine, anímate, es lo más natural del mundo, dime, ¿de quién se trata?! — Josephine había elevado tanto su tono de voz que la profesora Carpenter tuvo nuevamente que interrumpir su clase. — ¡Señorita Flowers, fuera de mi clase! — Grito más que exaltada, la pobre Josephine sólo pudo atinar a retirarse con su cabeza gacha, y frustrada por no conseguir el nombre de la persona que le gustaba a su querida Catherine. Ya habiendo terminado la hora de clases, todos los alumnos emprendieron la partida a sus hogares, entre ellos Josephine, que ahora estaba en un verdadero dilema por como ingresaría a su casa con esta nueva apariencia. —¨ Que día más horrible, un cuerpo diferente, alumnos detrás mío, averiguar que a Catherine le gusta un chico y lo peor…como haré para entrar a mi casa con este cuerpo, ¿Qué les digo a mis padres? ¨ —Josephine. — Se escucho que una voz femenina le llamaba. —Ah, Catherine. — La identifico de inmediato, como no hacerlo, su voz era como música para sus oídos. —Josephine, lamento mucho que te sacaran de la última clase, fue mi culpa, te distraje mucho. —Olvídalo Catherine, fue sólo un pequeño regaño de la profesora, nada grave. —Me alegro mucho, bueno, nos vemos mañana Josephine. — Se despidió amablemente la chica. —Adiós Catherine, cuídate. — Respondió la chica de cabello púrpura mientras la veía irse lentamente. Camino a su casa, la desdichada Josephine, quien había hecho todo lo posible por pasar desapercibida de la escuela sin que los chicos la vieran (en especial su amigo Aarón), tuvo la mala fortuna de encontrarse en el camino con la directora Evans, quien parecía estar esperándola. —Josephine, que coincidencia, porque no nos vamos juntas. — Recomendó la directora muy sospechosamente. —Directora Evans, ¿y ahora que quiere? — ¿Qué manera de dirigirse a su superior son esas?, sólo trato de ser educada con una de mis alumnas y acompañarla hasta su casa, las calles hoy en día son muy peligrosas. —Se lo agradezco, pero prefiero irme sola. — Rechazando el ofrecimiento contestó Josephine, y emprendiendo la retirara. — ¿Estás segura….Josephine? — Volvió a preguntar la directora, sabiendo que ella tenía guardado el secreto de James. Recapacitándolo, James se vio en la obligación de acceder a la petición de la directora y dejar que la acompañada hasta su casa. Camino a ella, la joven estudiante pensaba en la cara que pondrían sus padres al verla en esta forma y que explicación les daría al respecto. —No te preocupes. — Comentó la directora. — Te dije que todo saldría bien si me obedecías, déjalo en mis manos. — La encargada de la escuela sabía el porqué de la preocupación de Josephine, así que la intento calmar diciéndole que todo estaba bajo control. Ya habiendo llegado al hogar de James, la directora se encargo de aclararle todo a sus padres, bueno…en cierta forma. — ¿Cómo?, ¿que mi hijo fue trasferido como estudiante de intercambio a Inglaterra? — Pregunto asombrada la madre de James. —Así es señora Garden, su hijo James estará ausente durante un largo tiempo de su hogar, es un nuevo método de estudios que estamos implementando en los distintos colegios. —Y… ¿por cuánto tiempo será su ausencia?, ¿una semana? —Dos meses. — Respondió la directora sin pensarlo, la cara de sorpresa de la madre de James era más que obvia. — ¿Qué?, dos….meses, pero…eso es mucho tiempo. —Lo sé, pero es un nuevo mecanismo de estudios que queremos implementar entre Inglaterra y Estados Unidos, usted no se preocupe, todo saldrá bien, además debería estar orgullosa que su hijo fuera elegido entre tantos estudiantes. —Si lo estoy, pero me sorprende que no se haya despedido de nosotros ni que preparada sus cosas. —No fue necesario, nuestra escuela se hizo cargo de todas las cosas que James necesitaba para su viaje, y en cuanto a él…ya pronto le traeremos novedades. —Entiendo, pero igual… ¡Extrañare mucho a mi bebe! — Decía llorando exageradamente la señora Graden. —Está bien pero cálmese señora. — Trataba de tranquilizarla la directora, aunque sin resultado alguno. —Señora cálmese. — Seguía sin hacerle caso. — ¡Ya deje de llorar señora! — Y elevando mucho más su voz, por fin lograba calmarla. —Ya…estoy más calmada. — Termino por contestar la madre de James, ya habiendo derramado suficiente llanto como para una semana. —Además hay algo más que debo informales señora Garden. — ¿De qué se trata? —Como es de esperarse, al trasferir a un estudiante de intercambio, otro chico del otro país viene aquí de igual manera. Por eso he venido, ustedes deberán darle hospedaje a este alumno durante la ausencia de James. — ¿Quiere decir que un chico ingles vivirá con nosotros? —Bueno…no precisamente un chico. — Respondió la directora. — Adelante linda, ya puedes pasar. — Y de inmediato Brenda llamo a la persona que estaba fuera de la casa esperando ansiosa su ingreso. —B-Buenos días…señora Garden, soy Josephine, la estudiante de intercambio. —El estudiante de intercambio es…una chica. — Rato después de digerir la noticia, la madre de James pego un salto del sillón donde estaba sentada para abrazar a la alumna. — ¡Bienvenida querida!, ¡me da mucho gusto tenerte aquí!, siempre quise tener una niña. —Jejeje, q-que…bueno. — Le contestaba Josephine mientras seguía siendo abrazada por su madre. El plan de la directora dio resultado esta vez, ¿pero por cuánto tiempo podrán mantener este secreto? PROXIMO CAPITULO: ADAPTANDOSE
¡Hola! que buen capítulo me gusto mucho mucho jaja Pobre James va a estar 2 meses siendo una chica, pero por lo menos ya sabe por cuanto tiempo será ^^ Así que a Catherine le gusta alguien mmm ojala que sea James...y que se lo cuente a Josephine jaja así cuando se vuelva a convertir en chico él se vuelva mas cercano a ella y terminen juntos *-* Chica de intercambio que ingenioso, en lo personal nunca se me hubiera ocurrido jeje sin duda es una buena excusas...jaja que risa la señora Garden jaja fue un poco bipolar ¿no? digo porque como estaba llorando por no poder despedir a su bebé y luego al enterarse de que venía una chica de intercambio se alegro un montón porque siempre había querido una chica jaja Me di cuenta que tienes un error, en una parte en vez de colocar señora Garden pusiste señora Graden, nada grave :) estuve tan concentrada en la historia que no me fije mucho jeje Espero con muchas ansias el próximo capítulo y muchas gracias por avisarme n_n ¡Sayo y cuídate!
Hola! Gracias por invitarme a leer :) de verdad es un fic muy divertido xD Es bastante entretenido y tiene una historia muy orginal :) Ok, vamos a lo que nos convoca... ¿Quién demonios es Brenda? xD debes explicarlo, ¿acaso será ella la responsable del cambio de James/Josephine? jajaja me gusta mucho :) En fin, no te quito más tiempo, gracias por compartir tu historia, por invitarme a leer y espero que actualices pronto ;) Bye :)
Ay, no me quiero imaginar al pobre James los últimos días del mes....aparte me encantaría saber quien le interesa a Catherine. Además va a ser muy acosado por sus atractivos XD POBRE, APARTE TAL VEZ SU MEJOR AMIGO LE ECHE LOS CANES. Que buena que esta si funcionó, pobre James, excelente narrativa, esperare el sig. capi
CAPITULO VI: ADAPTANDOSE Gracias a la idea de la directora Evans, Josephine pudo inventar una buena escusa para vivir en su propia casa, mientras trataba de averiguar de qué manera volver a su cuerpo anterior. Ese fue el primer día de varios que tendrá la chica James, durante su nueva vida como estudiante femenina. En la casa de James, quiero decir Josephine…. — ¡Querida, es hora de levantarse, apúrate así tomas tu desayuno! — Le avisaba desde la cocina la señora Garden. —Hmmm, ¡ya voy mam…digo…señora Garden! — Lentamente y con pereza, Josephine se levantaba de la cama y se preparaba para bajar hacia la cocina y desayunar. — No dormí casi nada, ahhh….que noche más horrenda he pasado. Mientras tanto en la cocina, la señora Garden junto a su marido que estaba a punto de irse a trabajar a la oficina, discutían sobre el repentino viaje de su hijo como estudiante de intercambio y obviamente también acerca de su nueva huésped. —Por más que me lo digas sigo pensando que es algo muy extraño lo de este viaje, además, ¿nuestro hijo desde cuando es tan dedicado en los estudios para que le den una posibilidad así? — Se preguntaba el padre de James. —Oh, vamos Harold, tú sólo te quedas con la primera imagen de nuestro hijo, seguramente él por su cuenta se ha estado esforzando para mejorara día a día en sus estudios, y seguramente este sea el resultado de sus esfuerzos. — Decía alardeando sobre su hijo la señora James. —No lo sé, sigo creyendo que es muy raro, aparte ahora debemos hacernos cargo de una niña de secundaria, eso no es justo. —No seas aguafiestas Harold, esta chica Josephine parece ser encantadora, ya te convencerás cuando la conozcas. Precisamente en ese momento, Josephine venia bajando por la escalera para desayunar. Ella traía su uniforme escolar, el cual consistía de la típica falda, bastante corta por cierto, y la parte superior de la vestimenta muy ajustada en su delantera, debido a las curvas tan visiblemente atractivas de la chica. —Buenos días, señora Garden, señor Garden — Les saludó haciendo una reverencia. Ni bien el señor de la casa la vio, su temperatura fue en aumento excesivamente, no creyendo en la hermosura que acababa de bajar del cuarto de su hijo. —Buenos días querida. — Respondió amablemente al saludo la señora Garden, en cambio su marido permaneció callado boquiabierta y sin dejar de ver a la chica. — Hey Harold, saluda a la chica como corresponde. — Le decía a su esposo dándoles pequeños codazos para que reaccionara. — ¿Eh?, s-si. — Le contestó nervioso. — Y-Yo soy Harold Garden, soy el dueño de casa jovencita, gusto en conocerte. —Ah, e-el gusto es mío, señor Garden. — Le contestaba algo intranquila Josephine, sabiendo bien qué tipo de mirada tenía el hombre hacia ella. — ¨ ¿Cómo no?, eres un degenerado papá, mira que mirar así de esa forma tan depravada a una adolescente.¨ — Pensaba por dentro la chica, notando como su padre se le caían las babas con tan sólo verla. —Creo que ese uniforme te queda algo ajustado querida. — Comentaba al verla la señora de la casa. —No se preocupe señora, de todas formas la mayoría de ellos me quedarían algo ajustados, jajaja. — Mientras reía, sus melones parecían estar más apretados aún. —En eso estas en lo cierto Josephine. — Contestó el hombre, no sacando los ojos de los pechos de la joven. —Creo que mejor me iré sin desayunar señora Garden — Josephine pensó que lo mejor sería irse cuanto antes, ya que no soportaba las sucias miradas de su depravado padre. — ¿Estás segura linda? —Sí, de paso me ayudara en mi dieta, así que nos vemos luego, adiós. — Y la chica se retiró hacia la escuela, ya solos, la señora Garden le reprochó su comportamiento a su esposo lujurioso. —Debes comportante Harold, asustaste a esa muchacha. — ¿De qué hablas?, si no le hice nada malo, al contrario la trate amablemente. —Sí, mirándola de pies a cabeza como un perro en celo. —Estas exagerando, son solo alucinaciones tuyas. — Decía sin darle importancia. — ¿Ah sí?, pues más te vale Harold. — Le advertía la señora tirándole de sus orejas. Josephine creía que sus problemas nunca iban a terminar durante su metamorfosis, y ahora que veía el comportamiento tan vergonzoso de su padre, eso no hacía más que corroborar con su teoría. —Ahhh, ¿Qué habré hecho para merecer este castigo? Siguiendo cabizbaja y camino a la escuela, una voz le alegro la mañana de la joven. —Hola, Josephine, ¿Cómo estás? — Le saludaba desde una esquina Catherine. —Buenos días Catherine. —Buenos días Josephine, que bueno encontrarte, ¿nos vamos juntas? —S-Si — Respondió Josephine, intentando ocultar su enorme alegría. — ¿Y cómo te estás adaptando a tu nueva ciudad Josephine? —B-Bien Catherine, hasta ahora todo está muy bien, ¨Claro con la excepción de todos los hombres degenerados con los que me he encontrado.¨ —Que suerte tienes, a mí cuando me toco cambiar de escuela me costó muchísimo la adaptación. —Estoy segura que habrás hecho amigas en ese tiempo que te ayudaron a adaptarte. —No, eso no paso. Cuando recién llegue a esta escuela, la mayoría de las niñas me trataban mal y se burlaban de mí. — ¿En serio? —Sí, fue gracias a una persona…que todo cambio para mí. — Recordaba algo nostálgica. — ¿Gracias…a una persona?, no me digas…que esa persona es la misma que te gusta. —Así es. — Le contestó ella con rubor en sus mejillas. —¨ Maldición, ¿Cómo puede ser que no conozca a ese tipo? ¨ — Se lamentaba tomándose la cabeza. — ¿Te sientes bien Josephine? —Eh, si, es que me agarro un pequeño dolor de cabeza de repente, pero no es nada, jajaja. — Reía nerviosa. —Menos mal, entonces apresurémonos o llegaremos tarde. —Si…Catherine. — Y le siguió hasta su destino, pero tenía en claro que debía descubrir la identidad de esa persona quien había cautivado a la chica de su sueños. — ¨ Tengo que averiguar quién es ese chico, sino no podré dormir en paz. ¨ Llegando a la entrada del colegio, un pequeño grupo conformado por tres chicas parecía estar esperando por ambas. —Vaya, vaya, miren a quien tenemos aquí, las dos sensaciones de nuestra escuela. —Hola…Yvette. — Saludo con educación Catherine a esta muchacha llamada Yvette Bowery, quien venía acompañada de sus inseparables amigas, Serena y Roxana. —¨ Ellas son…las tres arpías de esta escuela, Yvette Bowery, Serena Frock y Roxana Voice, estas chicas tienes muy mala fama por aquí, encima son niñas ricas mimadas por sus padres. ¨ — Josephine ya conocía de antemano a las tres jóvenes que estaban frente de ellas. — ¿Cómo estas Catherine?, veo que has hecho una nueva amiga. —Sí, ella es mi amiga, Josephine Flowers. —Oh, Josephine Flowers, sí, he oído hablar de ti, te has hecho muy conocida en poco tiempo niña. — ¿E-En serio? —Claro…aunque puedo notar, a que se debe esa fama. — Viéndole sus llamativas curvas. — Espero que tu familia no esté metido en algún corrupto plan de negocios como lo hace el padre de Catherine. — ¿Qué dijiste? — Preguntó Catherine molesta. — ¡No te atrevas hablar así de mi padre Yvette! — La dulce joven por un momento transformó su personalidad al ver que hablaban mal de su padre. — ¿Acaso estoy equivocada?, ¿o no sabes en los negocios que suele meterse tu padre? — ¡Te he dicho que cierres tu boca antes de hablar de mi padre! —Oh, ¿y qué me harás si no lo hago? ¿Pegarme…? Cansada de las provocaciones de Yvette, Josephine salió en defensa de Catherine. —Si sigues molestando a Catherine te la veras conmigo. — Dijo en forma amenazante. — ¡¿Crees que te tengo miedo pechugona?! — Respondió con el mismo tono de voz. Ante el evidente cruce de puños que se estaba por armar, el valiente Aarón (por así decirlo) salió en defensa de su amada Josephine. — ¡Alto ahí! — Gritó él. — ¿Y tú qué quieres Thompson? — Preguntó la molesta Yvette. —Creo…que tengo la solución a su pequeño conflicto chicas. Aarón apareció justo a tiempo para detener la posible pelea de mujeres, ¿pero con qué idea vendrá para solucionar este embrollo? PROXIMO CAPITULO: CHICA PELIGROSA
Siendo sincero al empezar a leer lo primero que me entro fue el cliché de los animes y mangas por las características de los personajes y los acontecimientos y las maneras de hablar de los mismos. Aunque me encanto al principio me recuerdo a un viejo manga que llegue a leer pero luego me atrapo la historia, normalmente leo cualquier cosa aunque nunca que yo recuerde llegue a leer una comedia romántica que no fuese un comic/manga esto me gusta la manera en la que continua y también tu forma de escribir me pareció un tanto parecida a La Leyenda de Estefani pero supongo que habrá sido porque es tu estilo para escribir. Me queda mucho por leer de este y Estefani , por lo cual creo que ya has ganado un nuevo lector.
esta muy buena tu historia, hasta me dejaste con la boca abierta... Ahora se que me falta mucho para ser una buena escritora. chau besos... porfavor la conti