Self-insert Mi Ángel Guardián y mi Ángel Caído.

Esta historia trata sobre una joven humana, de 16 años de edad, la cual logro llamar la atención de dos jóvenes sin darse cuenta, los cuales se llamaban Darkel y Shadow, ambos de 18 años de edad, sin embargo ambos jóvenes no eran tan normales que digamos, ya que uno (Darkel) era un ángel oscuro y el otro (Shadow) era un ángel guía o guardián, sin embargo la joven logro conquistar el corazón de ambos provocando una fuerte y estrecha relación con ella. Ambos ángeles son totalmente diferentes, ya que uno fue enviado para protegerla y el otro es un ángel caído, además de su profundo amor por la joven, de modo que siempre que se encuentran o sienten la presencia de uno de ellos, se asen todo tipo de trucos para deshacerse de alguno, creando todo tipo de escenas divertidas y graciosas.
Esta historia tiene algunos personajes peculiares en los que resaltan 2 jóvenes ángeles, 3 humanas y un demonio.

Aquí les dejare algunos de los personajes de mi historia. Algunos personajes son amigos míos.

Rose Kater (Yo): Es una joven humana de 16 años de edad, estatura normal a su edad, piel blanca, ojos color miel y cabello castaño, algo ondulado y por debajo de la cintura. Es la protagonista principal de la historia y la razón principal de las peleas entre Darkel y Shadow. Su personalidad es tranquila, siempre se preocupa por sus amigos, en especial por Darkel y Shadow ya que estos son como 2 niños peleando. Le encanta leer libros de terror o de amor, (Lo sé, una extraña combinación.) además siente cierta atracción por Darkel, mientras que a Shadow lo veía solo como su ángel guardián hasta que este se confesó a ella. Tiene un pequeño don que le permite diferenciar a los ángeles, tanto Guardianes como Caídos, y a los demonios.

Shadow Celestial: Es un joven Ángel Guardián/Guía de unos 18 años de edad, estatura normal, piel pálida, ojos celestes como el cielo, cabello rubio, con rulos y un tanto opaco, y unas majestuosas alas blancas y una aureola sobre su cabeza, que solo otro ángel y Rose pueden ver. Es el ángel guardián de Rose y el enemigo declarado de Darkel. Shadow es muy tranquilo y pasivo, siempre y cuando Darkel no trate de tocar a Rose. Le encanta observar el cielo, su hogar, y también leer junto con Rose algún que otro libro de amor y aprovechar esos momentos para decirle cosas bonitas, a pesar de que ella no se dé cuenta de su amor.

Darkel Heck: Un joven Ángel Caído de unos 18 años de edad de edad, es un poco más alto que Shadow ,pero no mucho, piel algo tostada, ojos color carmesí, cabello negro, lacio y brillante, y una alas enormes y negras. Es un ángel caído y la contra total de Shadow. Su personalidad es algo arrogante, impulsivo, frío y muy problemático, en especial cuando ve a Shadow. Adora escuchar canciones de bandas de rock, leer libros de terror y suspenso, cada que ve a Rose, espera el mínimo momento en que Shadow baje la guardia, se acerca y no para de coquetearla, algo que ase molestar a Shadow. A pesar de su personalidad fría esta profundamente enamorado de Rose, aun que el solo diga que juega con ella.

Akira Sendou (akira-chan): Una joven de 16 años de edad, estatura normal, ojos azules, piel clara y cabello castaño, lacio y largo hasta la cintura. Es una de las mejores amigas de Rose. Al igual que Rose puede ver las alas y aureolas de los ángeles y diferenciar a los demonios, de modo que sabe que son en realidad Darkel, Shadow y Daimon. Es una joven de personalidad dulce, siempre al tanto de sus amigos, es muy inteligente y algo alocada a veces, cada que ve a Darkel y Shadow peleando no duda un segundo en separarlos, por las buenas o las malas.

Hane Youkia (HaNeko): Una joven de 15 años de edad, estatura normal, ojos verdes, piel clara, cabello castaño medio rubio, ondulado, hasta por encima de la cintura. Es una de las mejores amigas de Rose. Ella solo ve a Darkel, Shadow y Daimon como chicos normales. Es de personalidad simpática, divertida y muy dulce, cuando ve las peleas entre ambos solo se dedica a observar y reír.

Daimon Tekai (Daimon Scorpion): Un joven de 17 años de edad, estatura normal, ojos carmesí, piel clara, cabello negro y lacio. Es un buen amigo de Rose. Al igual que Darkel y Shadow no es una criatura normal, pero lo que lo diferencia de ellos dos, el es un demonio, lo que no le hace tener un buen perfil ante el guardián de Rose, Shadow, mientras que para Darkel solo es una criatura anormal mas. Es muy tranquilo, modesto y muy educado. Cada que ve las peleas de los dos jóvenes ángeles solo se limita a observarlos serio o mirar a otro lado.

Este solo es un pequeño adelanto de la historia, sumada la presentación de los personajes.
Espero les agrade y pronto subiré el primer capítulo.

 

Aquí tengo el primer capítulo.

Capitulo 1:

Como de costumbre, antes de ir al colegio.
— ¡Mama!— dije desde mi habitación, bastante nerviosa y alterada.
— ¿Que sucede cariño?— respondió con calma.
— ¡¿Has visto mi uniforme?!— Pregunte revisando mi armario, con una enorme montaña de ropa detrás de mí.
— No cariño— Respondió.
— ¡Noo!— dije ya bastante alterada y buscando como loca mi uniforme.
— Otra vez el mismo problema...—Dijo una vos masculina detrás mío.
— ¡Cállate Shadow!— Reproche al chico que se encontraba recostado en la ventana de mi habitación.
El solo suspiro— ¿Quieres que te ayude?— pregunte fijando sus preciosos ojos celestes, como el cielo, en mi.
— ¡NO! no necesito tu ayuda...—Le respondí algo molesta.
— No entiendo porque te enojas con migo...yo no fui quien perdió tu uniforme— respondió tranquilo el rubio.
— ¡Cállate no necesito que me eches en cara mi error!— Dije aun más molesta, fijando mis ojos en el.
El me miro algo apenado y bajo su vista— Lo lamento Rose...— Dijo con desilusión en su vos.
Lo mire y luego mire a un costado, el solo quería ayudarme y fui yo la que le dijo cosas malas, era su deber ayudarme y yo solo me comporte como una niña pequeña— Yo igual...—dije mirándolo y me acerque a él— No has hecho nada malo...fui yo que me comporte como una niña...— Dije mirándolo muy apenada y luego baje la cabeza.
— Rose...—dijo casi en susurro, puso su mano debajo de mi cabeza y me levanto la cabeza de modo que lo mire a los ojos.
— Shad... ¿me perdonas?— Dije casi en susurro, estaba totalmente pérdida en sus profundos ojos celestes.
— Como no a serlo...no puedo enojarme con mi protegida—Dijo con una sonrisa.
Lo único que pude a ser fue abrasarlo— Gracias Shad—Me separe un poco de él y mire mi habitación— Ya busque por todos lados...pero no encontré mi uniforme...—Dije algo desilusionada.
— ¿Supongo que aceptaras mi ayuda ahora?—Dijo viéndome, yo asentí— Bien. Pues es sencillo, esta doblado allí...—Dijo señalando mi escritorio.
Yo mire, tenia razón, estaba justo frente a mis ojos, doblado prolijamente sin una sola arruga—Shad... ¿tu lo pusiste ahí?—Pregunte tranquila.
— Lo encontré tirado ayer...así que le lave, planche y lo puse a la vista, para que no se te pierda y haga tarde...—Dijo y suspiro.
— ¡Demonios! es muy tarde...—Mientras él hablaba solo decidí vestirme.
— ¿Rose me estabas escuchando?—Pregunto algo molesto al ver como tomaba mi bolso con mis libros.
— Claro...—Dije con una sonrisa— ¡Gracias Shad!— Y le di un beso en la mejilla.
El se puso ligeramente rojo—No... No fue nada— dijo viéndome.
— Como digas...vamos apúrate... ¡Llegare tarde!— Dije saliendo de mi habitación.

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Shadow:
Vi como salió corriendo de su habitación, estaba totalmente idiotizado en lo de hace un momento. Jamás me había abrazado y luego dado un beso, por más que ella sido en la mejilla, era algo que día a día deseaba. Fue algo hermoso para comenzar el día...
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Rose:

No entendía porque Shadow se había puesto rojo, supongo que no estaba acostumbrado a eso, bueno en todo caso solo dejare de a ser eso.
Baje las escaleras muy rápido, estaba tan apresurada que no note que una de las maderas estaba un poco levantadas, de modo que tropecé y caí. Sin embargo antes de sentir el golpe, sentí como si 2 brazos me rodeaban.
— Estas bien Rose...— Escuche la vos de Shadow, el cual me sostenía en brazos y me miraba algo preocupado.
— Si gracias Shad—Le sonreí y el a mi—Oye... ¿piensas bajarme?—Le dije.
— ¡Oh! lo lamento—Dijo con una sonrisa y me bajo.
— No ahí problema...pero mejor me apuro...—Dije corriendo a la cocina.
Solo escuche el suspiro de Shadow.

Fui hasta la cocina, tenía mi desayuno servido ya, por suerte. Al terminarlo, me levante mire a mi madre y mi padre y les sonreí.
— Buen día...— Les dije con una sonrisa y salí corriendo a la puerta.
— Buen día Rose—Respondió mi padre mientras seguía tomando su café.
— Buen día Rose—Dijo mi madre—Oye Rose un amigo tulló te está esperando en la puer...—Ni siquiera había escuchado a mi madre y ya me encontraba en el suelo, sobre Darkel y Shadow mirando como si lo quisiera tragar vivo.
— H-hola Darkel—Dije un tanto nerviosa, aun sin quitarme de encima de él.
— Hola hermosa—Respondió Darkel con una sonrisa, era como si disfrutara del momento.
— ¡Darkel!—Dijo Shadow mirando serio a Darkel.
— ¿Aun sigues teniendo a ese inútil como guardián, Rose?—Dijo el joven Pelinegro viendo al rubio con una sonrisa burlona.
— ¡Oye desgracia del infierno!—Dijo molesto el rubio—Mejor te quitas de ahí antes de que te asesine— Dijo muy serio.
—Shad...—Dije mirándolo raro, el jamás hablaba así, bueno a menos que pase esto.
—Tranquila Rose...solo es un angelito de Dios muy hablador—Dijo riendo el pelinegro— ¡Cállate angelito...jamás has hecho algo así...es por eso que tienes una aureola ridícula como esa— Dijo desafiante.
—Dark...—Dije mirándolo.
— ¡Ja! esta aureola no significa que no pueda a serlo....desgraciado—Respondió el rubio
— ¡Ustedes dos!— Se escucho una voz femenina— ¡Ahora mismo paren o ya verán!—Continuo bastante amenazante.

Los 3 volteamos a ver, era nada más y nada menos que Akira amenazando a mis 2 ángeles con asesinarlos si no paran su disputa. Detrás de ellas estaban Hane y Daimon. Shadow, como de costumbre, clavo su vista en Daimon, claro que aun estaba pendiente de Darkel. En fin, sonreí y me quite de encima de Darkel, el casi de inmediato se levanto, fui hasta donde Akira y los demás y caminamos juntos hasta la escuela. Yo iba conversando con Akira y Hane, Shad iba caminando al lado mío, serio como siempre que tenia a Dark y Dai cerca, Dark iba con su auricular puesto escuchando música, el iba detrás mío, y Daimon iba caminando en el centro del grupo, ignorando a Shad.

 

Bueno a los que esperaban aqui les va el 2 cap.

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Flashback:

Yo iba conversando con Akira y Hane, Shad iba caminando al lado mío, serio como siempre que tenia a Dark y Dai cerca, Dark iba con su auricular puesto escuchando música, el iba detrás mío, y Daimon iba caminando en el centro del grupo, ignorando a Shad.

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Capitulo 2:

Al llegar a la escuela los 6 entramos como si nada. Hane fue a su respectivo salón de clases, ella estaba en 2 año, Akira y yo Fuimos al nuestro, ambas estábamos en 3 año y el mismo salón de clases, Dai fue a su salón, El estaba en 5 año, y por ultimo Shad y Dark tomaron su forma ángel, la cual no permitía que los vieran, y vinieron con migo y Akira.

—Rose, como tu guardián y protector es mi deber el preguntarte... ¿por qué tienes a un...—Ni termino de preguntar.
—Ya te lo dije Shadow—Le interrumpí— Daimon es un buen amigo mío...—Dije calmada.
—Pero rose el es un D...—Otra vez quedo sin terminar la frase.
— ¿Demonio?—Dije sin mirarlo
—Exacto...es una criatura más detestable que la que tiene al lado...—Dijo, mirando a Darkel.
—Es cucha angelito del diablo...— Respondió Darkel molesto— Mejor cierras el pico o te are cantar con el coro—Dijo amenazante el Pelinegro.
—no empiecen...—Dijo Akira en vos baja.
—Cierra tu el pico desperdicio de plumas...—Le respondió el Rubio a Darkel, ignorando las palabras de Akira.
—Ya verás...—Si quiera antes de acercarse, Akira le golpeo en la cabeza de un puñetazo a ambos, tirándolos al suelo.
— ¡He dicho basta!— Dijo mirándolos molesta.
—Aquí...creo que te pasaste esta vez...—Dije mirándolos un tanto preocupada—Ven ayúdame...— Dije tomando a Shad y poniéndolo en mi espalda— ¡Ahí!, hay un bebedero...creo que podríamos despertarlos si le echamos un poco de agua...—Dije tratando de llevar a Shad hasta allí.
—Buena idea Rose...—Dijo tomando a Dark y llevándolo sobre su espalda.

Al llegar al bebedero, puse a Shad, con cuidado, en un banco y Akira iso lo mismo con Dark, pero lo puso en otro banco. Akira tomo un poco de agua con sus manos y iba a despertar a Dark, mientras yo lo observaba.

— ¡Espera!—Dije deteniéndola.
— ¿Que sucede...?—Pregunto viéndome algo confundida.
—No te parece que es...como decirlo...—Dije mirando a Darkel, luego me acerqué y me arrodillé en el suelo quedando muy cerca de el—... ¿lindo...?—Pregunte sin quitarle los ojos de encima a Darkel y con una leve sonrisa.
—Rose... ¿A caso te golpee por accidente también a ti?—Me pregunto viéndome con cara rara.

La mire y reí un poco, cosa que izo que Dark se despertara y abriera los ojos, lo mire y me sentí algo extraña. Sus ojos color carmesí me miraban, pero no tenía miedo, me miraban con un aire de dulzura y compasión, me sentía segura y atraída por esos hermosos ojos.

— ¿Rose?—Escuche que me llamaban pero no podía quitar mi vista los ojos de Dark.
— ¿Rose...? Reacciona...—Sentí como si me tomaban de los hombros y me movían un poco.
Me sacudí, un poco, la cabeza y mire a mi alrededor y vi a Shad mirándome algo preocupado— ¿Shad?—Dije algo confundida y mareada.
—Me alegra que estés bien...—Me respondió con una sonrisa y luego miro a Darkel, el cual me miraba despreocupado y tranquilo— Esto fue tu culpa...— Le dijo Shadow al pelinegro.
— Gracias a Dios estas bien Rose—Dijo Akira, viéndome con una sonrisa.
—Que dramáticos...—Dijo fríamente Dark— Como si fuera capaz de lastimarla...—Dijo lo ultimo molesto.
—De todas formas no confió en ti...—Respondió Shad.
—D-De que hablan...no comprendo...— Dije parándome.
Shad miro a Dark serio, mientras que el solo miro a un costado y Akira suspiro.
—Veras Rose...—Dijo Akira— Cuando Dark se despertó te quedaste helada viendo sus ojos y luego te desmallaste...—Continuo.
— ¿P-Pero porque?—Dije confundida.
Dark suspiro y me miro—Ni siquiera yo puedo saberlo... solo sé que te desmallaste y te agarre antes que caigas al suelo y luego te acosté en el banco donde me encontraba yo...—Me respondió y volvió a mirar a otro lado.
—Ya veo...—Dije algo apenada y baje la vista.
Shadow me sonrió —No importa...de todas formas estas bien—Dijo amablemente viéndome.
Le sonreí y asentí— Gracias Shad...—Le respondí y lo abracé.

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Darkel:

Era bastante fastidioso, sin mencionar repugnante, ver a Rose abrazando a ese patético ángel. Sea su Guardián o no, ella no debía ni siquiera conocerlo, hablar o interactuar con él, o al menos lo normal es que no. Al menos ella estaba contenta, ciertamente me molestaba ver a esos dos tan felices y juntos, mientras que yo solo era un mundo parte. La Sonrisa de Rose era la única cosa que me alegraba el día de mi asquerosa vida. Cuando se quedo viéndome a los ojos, me sentía diferente, no era el mismo ángel exiliado y discriminado por todos los demás, ella era la única que me sonreía como si fuera alguien normal, me asía sentir completo y feliz.

—Oye Rose...llegaras tarde a tu clase—Dije para poder finalizar ese repugnante abrazo.
— ¡Ahh! la clase de biología comenzará pronto—Dijo el niño con aspecto de niña que me había golpeado antes.
—Es cierto... —Dijo Rose con la hermosa voz que la caracteriza—Vamos Shad debemos irnos...—Dijo tomando a ese perdedor y, luego, extrañamente me miro—Dark... ¿vienes?—Dijo extendiendo su mano asía mi, con una hermosa sonrisa.
Solo la mire unos instante, totalmente idiotizado en su bella sonrisa, su bellísima sonrisa estaba totalmente dirigida a mí, tenía su Guardián a su lado y de todas maneras, desafiando su consejo, me sonreía. Tome su mano, asentí y sonreí. Realmente ella era la única persona que me trataba tan bien, que no tenía en cuenta mi pasado y ni aspecto bastante tétrico en un ángel, ella realmente me asía feliz.


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Shadow:

Bueno, era de esperarse que Rose tratase a ese inútil de la misma forma que me trataba a mí. Para ella un ángel guardián era lo mismo que un ángel caído, aunque en realidad hay claras diferencias, sin embargo yo sabía perfectamente que él no era ninguna compañía buena para ella. Solo me limite a dar un suspiro y observar, solo tenía la obligación de protegerla y aconsejarla, no podía impedir que haga o piense en algo y menos si era feliz, solo podía observar.


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Rose:

Mi día apenas había comenzado y ya me habían pasado por muchas situaciones, la mayoría muy agradables para mi, y aun tenia te enfrentar a mis profesores y compañeros de clase, sin mencionar que debía dejar a Shad y Dark sigan sus peleas, sin poder hacer nada, ya que si trataba de detenerlos me vería como una psicópata hablando al aire, recuerden en su forma ángel nadie puede verlos excepto Akira y yo.

De todas formas, iba siendo un día muy tranquilo y bello, junto a mis amigos y mis Ángeles.