Un líquido de tonalidad roja salía del grifo, escurriendo por sus manos, las enjuagaba y enjuagaba, esperando eliminar la suciedad; no obstante a cada momento sus manos se manchaban más. El óxido invadía el mosaico de las paredes, mientras el espejo del tocador mostraba manchas de desconocida procedencia. La desesperación la invadía, tallaba sus manos hasta el hartazgo, pero las manchas de sus manos no se iban. Las imágenes pasaban por su mente: las blancas sábanas, un cuchillo y el último grito de la persona que le había dado la vida. Una sonrisa se dibujó en su reflejo. Al final, no había ni suciedad en el espejo, ni óxido en las paredes y el agua que salía del grifo era eso, sólo agua. Luces rojas y azules entraron por la ventana y las manchas seguían sobre sus manos.
Yo pienso que escribes perfectamente bien. Y es que, me asombra bastante el uso de las palabras, porque eres corto pero tan preciso. Bueno esta vez, sentí la falta de sentimiento, tal vez porque estaba en tercera persona, pero aun sentí que lo dejaste casi incompleto, como si aun tu vieras cosas que contarnos.
¿Por qué? ¿Tal vez por qué estaba enfermo mentalmente? O simplemente porque ella estaba sufriendo mucho, una enfermedad dolorosa que no la dejaba descansar, que la hacía agonizar en vida, aquel sufrimiento y suplicas por parte de ella lo embargo para que hiciera eso. Pero aun así, el protagonista se sintió mal por ello, un tormento que sentió y segura sintiendo en su interior. Así que quedo por decirlo así, un trauma. Eso fue lo primero que se me vino a la mente. Me gusto, tal y como los escritos que escribes Mid.
Parece que el protagonista sufriera de una enfermedad mental, pero no me quedó muy claro. Sin embargo, hay algo que me gustó en todo eso, no lo sé, quizá la parte de la duda y la manera en que está narrada el escrito. Lo encontré pasable y decente C:
Wow, no había pasado a leer ningún escrito tuyo y creéme que me arrepiento. Esto fue genial, (bueno eso me pareció a mi), he recordado la escena de una película. La persona había matado a su pareja en un momento de ansiedad y desesperación, aún sabiendo lo que hacía continuó haciéndolo hasta que finalmente esa persona no se movía. Y fue cuando fianlmente reaccionó, corrió al baño de su recamara para lavarse sus manos ensangrentadas, pero la misma culpa lo hacía ver que todo a su alrededor estaba manchado por aquella sustancia que tenía y todo el lugar apestaba a ella. Limpiaba una y otra vez sus manos con el agua que salia del grifo pero aún ese color rojizo estaba en él. Las luces de las patrullas le habían avisado y al mismo tiempo sacado de su marasmo y fue entonces que confrontó la realidad a la cual se enfrentaba. Me ha gustado mucho, muy interesante y más que nada corto y preciso.