—Madre... la madre que me cuidó, la madre que me protegió... aunque quiero escuchar tu voz... aunque quiero coger tu mano... aunque quiero verte... tú ya no estás aquí —Cubone lloraba muy tristemente, abrazando el hueso grueso de su madre. Rojo, que aún llevaba las heridas del combate contra Giovanni, se dirigía hacia la Torre Pokémon junto a Pikachu y su nuevo pokémon: Cubone; llevaba un ramo de flores para presentar respetos a los pokémon difuntos. Mientras caminaban, Cubone, que cargaba con el hueso grueso de su madre, cayó al suelo. —¿Estás bien? La tumba de tu madre está en el último piso, si entras a tu pokéball... Cubone se puso de pie con mucho esfuerzo y volvió a cargar el Hueso Grueso de su madre, Rojo se agachó y decidió cargar a su pokémon. —Es demasiado grande para él y no lo puede usar... el hueso que llevan por arma los Marowak... siempre lo lleva entre sus brazos como recuerdo de su madre — Eso pensaba Rojo mientras se volvía a poner de pie con Cubone entre sus brazos. —Él nació en esta Torre Pokémon, era obvio que recordaría cosas... hace apenas dos meses que el Team Rocket mató a su madre y la destrucción de la organización criminal no le trajo nada de felicidad. —Meditó acerca de su batalla con ellos mientras subía por las escaleras del recinto. De pronto un hueso salio volando hacia Rojo, pero Pikachu lo detectó a tiempo y bloqueó el ataque con gran facilidad, sorprendiendo a su entrenador. Luego este se puso a mirar atentamente a su alrededor. —¡¿Cubone salvajes?! —Rojo al fin vio a los agresores, eran una pareja de Cubone —¿Por qué están molestos? De pronto el Cubone de Rojo se bajó de los brazos de su entrenador y se acercó a los pokemon salvajes, quienes lo llevaron consigo. El entrenador y Pikachu decidieron seguirlos, después de una breve caminata se detuvieron. —Eso es... ¿el nido de esos Cubone? —Rojo estaba alejado a una distancia prudente, no quería molestar a los pokémon. El exterior del nido estaba repleto de cajas de cristal. Rojo recordó su aventura en la Torre Pokémon —Esas cajas... las usaba el Team Rocket... los Cubone son precavidos con los seres humanos, asi es... La organización criminal quería los huesos de los Cubone, los capturaban antes de ellos pudiesen protegerse. Rojo miraba detenidamente el nido que estaba repleto de rocas debido al derrumbe. —Ha colapsado por dentro, la zona de alrededor también está derrumbada. Al Cubone de Rojo se le ocurrió una idea, este hizo movimientos para que los pokemon salvajes lo siguieran, tras ellos estaba su entrenador. Después de una larga caminata, llegaron al lugar. —Aquí es... donde estaba su nido... —habían llegando al nido en el que estaba el Cubone de Rojo. Este al detenerse justo en frente puso una mirada de tristeza y vio una visión de un momento feliz que vivió junto con su madre y empezó a llorar un poco, luego secó sus lagrimas y les ofreció el nido a los pokémon salvajes que agradecieron el gesto y este se alejó de ellos, tras ellos a una distancia prudente estaba Rojo con una mirada de preocupación y tristeza. —¿Estas seguro? ¿Quieres darles ese nido en el que tú y tu madre vivían? Cubone empezó a hacerle gestos a Rojo con su Hueso Grueso. —Estás con nosotros, por eso... ¿No necesitas una casa? —Rojo intentaba traducir lo que Cubone quería decir. El pokémon asintió. —Su cara ha cambiado, él ha madurado... ahora puede ponerse de pie solo. — Rojo se sentía aliviado Al fin llegaron a la cima de la Torre Pokémon y se pararon justo en frente de la tumba de la madre de Cubone, Rojo dejo unas flores y su pokémon el Hueso Grueso de su madre. —Cubone, tu mamá... fue asesinada por el Team Rocket y también... él viajará con nosotros, no me puedo convertir en su madre, pero... prometo que no dejaré solo a tu pequeño. —Rojo puso una rodilla en el suelo, juntó sus manos y cerró sus ojos. Cubone intentaba imitar a Rojo, pero no le salía bien. —Se hace así, junta tus manos —Rojo juntaba sus manos de manera lo suficientemente lenta para que Cubone pudiese copiarlo. —Cierra los ojos y háblale desde tu corazón. —Rojo observó como Cubone lo había imitado perfectamente y este cerraba sus ojos. El espíritu de Marowak salió de la tumba y gentilmente acarició el rostro de su hijo, cosa que este notó y abrió sus ojos muy despacio, cuando los abrió no había nadie frente a él, pero este cogió el Hueso Grueso de su madre y comenzó a brillar. Para sorpresa de Rojo, Cubone había evolucionado a Marowak. —Parece como si hubiese recibido la fuerza de su madre... —Pensó Rojo sorprendido. De pronto el Hueso Grueso de Marowak cayó al suelo, Rojo sorprendido lo recogió. —Este es el hueso que utilizabas antes, parece que también creció. —Rojo observaba el hueso detenidamente. —Pero aun así... el suyo sigue siendo mas grande ¿verdad? —Rojo y Marowak comparaban los dos huesos. —Tu madre era muy fuerte ¿Cierto? —preguntaba Rojo, mientras casi instantáneamente Marowak asentía. —Pensaba que tenía que protegerlo, pero ahora, es un adulto... los pokémon... no, los seres vivos... soledad, tristeza, no importa la forma que tengan, ellos tienen las fuerzas de superar un pasado traumático. — Pensó Rojo mientras observaba a Marowak detenidamente. —Desde que nacemos y estamos con nuestros padres, desde ese momento... nuestra madre... —Rojo se despedía de la tumba de la madre de Marowak y se fue al centro pokemon. Pueblo Paleta. En una casa del pueblo empezó a sonar un teléfono. —¿Hola? ¡Ah! ¡Rojo! — La madre de Rojo descolgaba el teléfono. —Es muy raro que me llames ¿Pasó algo? — Preguntó preocupada —No, nada en especial... Ahora me dirige a la Zona Safari ¡Iré a capturar una Chansey y te lo regalaré! — Contestaba Rojo a la preocupación de su madre. Luego ambos empezaron a hablar de cosas sin importancia durante un largo tiempo. —... sí, sí, cuídate mucho. —Se despedía la madre de Rojo. —¡Ah! ¡Mamá! ¡Gracias! —Colgó Rojo de repente, dejando algo sorprendida a su madre. —¿Será que se dio cuenta de lo que siento en mitad del viaje? —Pensaba su madre algo sorprendida. —Bueno, mientras se lo esté pasando bien no importa. —La madre notaba que el viaje de Rojo había hecho madurar un poco a su hijo. —Ha pasado mucho tiempo ¡Qué nervios! —Rojo estaba algo nervioso por que no llamaba muy seguido a su madre y no sabía que decir. —Creo que lo mejor era decírselo de forma normal. —Rojo se calmaba los nervios poco a poco. —¡Vamos a la siguiente ciudad!— —Madre... el no poder oír tu voz... el no poder coger tu mano... el que ya no me puedas abrazar... es muy, muy triste pero... estoy bien ya no te preocupes... por que ya no estoy solo... no lo olvidaré... tu cara, tu voz, la sensación de tus manos, tu presencia, las cosas que me enseñaste, que me criaste, que me protegiste, que me amaste... gracias...adiós mamá... hasta que nos volvamos a ver... — Marowak se despedía de su madre mientras en un campo de lavandas estaba el espíritu sonriendo. FIN Bueno antes que nada agradecimientos a Kiwi Este fic es uno secundario del principal. Si os ha gustado la historia y queréis saber mas o entender mejor esta podéis ir al fic principal https://fanficslandia.com/tema/historia-de-una-leyenda.59143/
Oh qué lindo fic tan comfy <3 Si bien Cubone de Lavanda es una temática sobreexplotada, no siempre se ve la perspectiva post-evento, es decir, siempre es una novelización de la misma desde su punto de vista o hacer énfasis en los feels del mismo, pero no suele verse una historia a parte que se construya a parte. El gesto para con la pareja de Cubone fue tiernita y resulta acertado haberle dado la evo haciendo énfasis en que ha madurado porque, en parte, también ha aprendido a dejar ir. Aunque en ese sentido hubiese sido muy simbólico que el Cubone hubiese dejado el hueso sobre la tumba para "devolvérselo" a la madre al darse cuenta que podía llevarla en el pensamiento y no con un recuerdo físico. Y OMG Red se acordó que tiene madre! Eso si qué es nuevo en un fic de los juegos xD
Me alegra verte de nuevo Plushy, me alegra que siempre pienses en la novelización de la primera gen y te llevas una pequeña sorpresa xd, me alegra que te haya gustado la maduración de cubone y sobre todo la de Rojo xd. Pd: Haber cuando te pones al día con mi xd
Dicen que es mejor llegar tarde que no llegar nunca. Me tomé mi tiempo en comentar este pedido y creo que valió la pena la espera. Debo decir que es un escrito con una mezcla de sentimientos, de momento de triste, en otro reflexivo, en otro tierno. La temática que escogiste es muy buena y el sentido que le diste quedó muy bien. Es agradable el punto de vista de los acontecimientos desde la perspectiva del pequeño Cubone, de como a pesar de lo sucedido sigue adelante, y ahora con la compañía de Rojo para que lo guíe. La maduración que presenta no es solo física, también mental; aceptar lo ocurrido y tener determinación para continuar. Fue un gesto muy tierno el que le dejara el nido donde nació a los otros Cubone. Me sorprendió que evolucionara así por así, pero es lo ideal para los que pensamos que las evoluciones de los Pokémon no son simplemente por las batallas, que hay algo más que los hace crecer para ser más fuertes. Mamá Marowak dió su vida para proteger a su hijo, ahora le toca a él tomar su lugar y proteger a alguien más como agradecimiento. En cuanto a lo técnico no noté mayores errores, pero si algunos detalles como palabras que quedaron pegadas; te recomandaría releer para ubicar esos detalles. Y también hay palabras que parecieran que no encanjan bien, como si faltara otra que las conectara. Hasta la próxima. Éxitos~
A esto lo llamo el inicio de una trágica historia TnT Me siento un poco ignorante en cuanto a Pokémon, porque no pude sacarme el pensamiento de que se me hacía muy raro que los Cubones tuvieran nidos -dato que desconozco-, pero el que sí creo poder rebatir es aquel donde dices que el nido de los salvajes se mantuvo destruido desde el ataque del equipo Rocket... Me parece que tuvieron tiempo suficiente para reconstruirlo / conseguirse otro o no sé. El Cubone me puso triste, su historia es muy triste Dx Pero fue agradable saber que logró levantarse y continuar a pesar de lo que sentía. Al igual que Plushy, me hubiera parecido un detalle que también dejara el hueso de la madre, pero lo mantuvo tanto tiempo que tampoco es imposible de creer que se lo quedara. Que escribieras la narración en cursiva y los diálogos normal -sobre todo aquellos que eran pensamientos- me super voló la mente xD Tuve que leer muy despacio para mantenerme dentro del hilo de la historia, pero eso es porque estoy super acostumbrada a que los pensamientos se escriban en cursiva. De paso, creo que te caería bien no separar los diálogos que están uno después del otro si son de la misma persona, algo como: Creo que le da al texto un sentido diferente, no sé... Contenido oculto: Correcciones ^ aquí repites mucho 'pokémon', yo soy una loca con las repeticiones, no me gusta resaltar tanto la misma palabra, pero no es que sea un error. Si te parece bien está bien. ^ éste, con acento porque se refiere a algo / alguien que ya fue nombrado. ^ cuando leo esta oración siento que ni siquiera pasó una "breve caminata" por algo muy sencillo: la coma. Da la intención de que las acciones son inmediatas, sin mucho tiempo de por medio, por eso te recomendaría utilizar un punto y seguido. ^ creo que aquí falta un 'que'. La organización criminal quería los huesos de los Cubone, los capturaban antes de que ellos pudiesen protegerse. ^ dejó con acento, verbo en pasado. ^ sufrí una especie de colapso (?) Porque empieza como si hablara con Cubone, pero termina con la madre de Cubone, y todo está en minúsculas sin nada a demostrar que hubo un cambio de "receptor"... Si pones mayúscula en "Él" se verá mejor. ^ 'Ahora me dirigiré a la...' y, claro, el punto entre Safari y la exclamación junto al género de la y el lo puesto luego. ^ Al igual que en el texto del principio, todo en minúsculas... Además de, luego de 'estoy bien' va una coma y 'por que' va junto... -snif snif- La madre lo observa irse toda orgullosa... -rompe a llorar- (?) Espero no haber sido muy pesada Dx Un placer haber removido estos sentimientos c': ♡~