Lo que siempre pasa La pequeña criatura redonda se quedó observando todo a su alrededor en cuanto las puertas de aquel silencioso edificio se abrieron, temiendo pasar más allá de la seguridad que le confiaba el umbral. Sin embargo, la habitación que se presentaba ante sus enormes y brillantes ojos color del jade era espaciosa, ordenada y emanaba tanta calidez que logró convencerse de adentrarse un poco más. Tímidamente caminó hasta el centro del lugar, escudriñando los alrededores aún en estado de alerta. Unos cuantos pasos más consiguió dar antes de que otro pokémon apareciera desde uno de los pasillos y se le acercara. Su cuerpo era grande y rosado, con una forma semejante al huevo que cargaba en su vientre, tres largos mechones se extendían a cada lado de su cabeza y sus ojos eran negros y pequeños. Un Chansey. ―¿Qué sucede, Chansey? ¿Ha llegado alguien? Su mirada alarmada rápidamente buscó la fuente de aquella voz, dando con una joven y bonita mujer que le sonrió. El pokémon intruso no pudo evitar contagiarse de la alegría que brotaba de esa humana, consiguiendo así perder sus tontos miedos. Ella se acercó y se arrodilló para quedar a su misma altura, sin perder la sonrisa. Él la observó anonadado, pensando en lo lindo que era su cabello y que se parecía mucho a su tono de piel, para luego corresponder su gesto. Repentinamente entusiasmado, extendió la mano que sostenía su más preciado tesoro para compartirlo con ellas. Ambas lo observarlo con sincera curiosidad, instándolo en silencio a que terminara de expresarse. Grave error. El pokémon tomó una gran bocanada de aire antes de continuar mientras su cuerpo esférico se hinchaba por ello, nervioso pero encantado al mismo tiempo ante la expectativa. No conocía a esta persona, mas le agradaba. Ella y su Chansey eran tranquilas y pacientes con él, además de que estaban tan dispuestas a escucharlo. ¿Qué más podía pedir? Lentamente exhaló, jurándose a sí mismo esmerarse como nunca para que sus nuevas oyentes disfrutaran al máximo de su dulce melodía. Y comenzó a cantar. Al principio todo marchaba a la perfección. Chansey y la mujer portaban una radiante sonrisa mientras lo oían atentas cantar. No obstante, los bostezos no tardaron en aparecer junto a sus ojos que se cerraban por la repentina pesadez en sus párpados. Finalmente no lograron resistirlo más y cayeron rendidas al suelo. Esa acción, tan conocida para él, consiguió detenerlo en medio de sus palabras, bajando su improvisado micrófono al tiempo que el enojo destellaba en su verdosa mirada. Inmediatamente, y con un movimiento que le era demasiado rutinario, quitó el capuchón dispuesto a liberar su furia. Varios minutos después, las puertas del Centro Pokémon se abrían para darle el paso a un indignado Jigglypuff quien abandonaba aquel horrible lugar, dejando atrás a unas dormidas Joy y Chansey con su merecido escarmiento por no valorar su bella música.
Awww. Mientras leía estaba...¿cómo es que se llama este pokémon? ¡Claro que lo recordaba! Pero no su nombre. Me gustó mucho el tinte que le diste al principio, la narración me pareció amena, divertida e inocente. Lo llevaste de una manera adorable, aunque al final cayó en lo típico, considero que hubiese quedado mejor que no hiciese su típica venganza con el plumón, ¿no lo crees? Ya que así hubieses completado armoniosamente el cómo comenzó el escrito, con esa inquietud de que sucediera lo mismo, pero, ya harto este adorable pokémon hubiese suspirado y ni energías le bastarían para hacer aquello que suele hacer, mostrando que está harto...un lado quizás, más humanizado. Aún así, me gustó C:
Me pasó lo mismo que a Kai, recordaba a ese pokemon, pero no recordaba su nombre. Pobre Jigglypuff, las personas no saben apreciar su bella voz xD No leí el género del escrito antes de comenzar a leer por lo que, al inicio de la historia, creí que se trataba de un fic de misterio o suspenso. También concuerdo con Kai en que, la historia tuvo el típico final de las historias de este pokemon. Tan bien que le cayeron Joy y Chansey... Corrijo unos pequeños detalles: Contenido oculto La historia me gustó, hacía bastante que no leía algo de Pokemon y fue agradable volver a leer sobre esta serie, además narras muy bien y eso hace que la lectura sea fluida y agradable. Saludos :)
Awwnns... Andaba recorriendo fics de Ao3 y llegué a éste, cuando vi que en realidad lo teníamos en casa me regresé de inmediato para leerlo con calma, darle sellito y comentarlo xD Pobre Jigglypuff, su voz es un don y una maldición al mismo tiempo: ¿De qué le sirve cantar hermoso si nadie puede escuchar su melodía? Y más traumante debe ser ver cómo otros disfrutan "ruido" sin consecuencia alguna pero con la suya se duermen :( A sido lindo y un poco crusheante poder leer sobre las penas de este simpático poke.