La patrulla espacio-temporal

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por Eco, 16 Abril 2011.

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    Eco

    Eco Iniciado

    Tauro
    Miembro desde:
    9 Abril 2011
    Mensajes:
    15
    Pluma de
    Escritor
    Título:
    La patrulla espacio-temporal
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Comedia
    Total de capítulos:
    2
     
    Palabras:
    1099
    Título: La patrulla espacio-temporal.
    Sinopsis: Un grupo de superhéroes mediocres deberán hacer frente a su incompetencia para poder salvar el curso del tiempo.
    Género:Humor/Fantasía/Ciencia ficción
    No. de palabras del primer cap:892
    Advertencias:Nombres poco imaginativos XD
    Tipo:Long fic


    Os dejo el primer capítulo que es cómo un prólogo a la historia

    Capítulo 1: ¡Tengo superpoderes!
    Era un día normal en el instituto “rarevoice”, en el que se enseñaba cómo modificar la voz mediante distintos aparatos electrónicos usados en grabaciones de canciones, video clips, películas…
    Pero más allá de lo que ocurre en un colegio, en la calle, se escribían mensajes de amor en parques, se dibujaban graffitis en las paredes…
    Pero lo más importante era lo que sucedía en el centro de la “calle diferente”, no era exactamente una calle, sino un callejón sin salida que tenía un papel pegado con celo en el que ponía:”Está usted en la calle diferente”.
    Era un callejón bastante grande dónde cualquier cosa podía ocurrir, habían acróbatas, monos, monos acróbatas…
    Y sobre todo lo más raro de allí eran unos críos que decían tener superpoderes.
    Uno lanzaba una pelota, el otro saltaba, la recogía en el aire y la volvía a lanzar.
    El caso es que saltaban muy alto, cómo 1 metro de altura, lo que hacía flipar a demasiados crédulos que los halagaban sin más.
    Yo estaba tumbado bajo la sombra de un árbol, aunque al parecer al árbol no le agradó mucho la idea y me golpeó, salí disparado unos doscientos metros en el aire y caí encima de otro árbol, y por supuesto me volvió a golpear.
    Pasó así una hora hasta que un árbol, ya harto, me plantó en el suelo de un puñetazo.
    ¿Qué cómo puede moverse y disgustarse un árbol? Ya os dije qué en ésta calle sucedían cosas raras, muy pero que muy raras.
    Y al final llegó Kevin, era el mandamás de toda la calle, ni que decir que hasta los niños con “superpoderes” flipaban al verle zurrar árboles.
    Kevin, al verme otra vez encallado en el suelo por los árboles me sacó y me repitió lo de todos los días:”Nunca llegarás a ser cómo yo, enano”.
    Esto me irritó y le intenté golpear, pero había desaparecido, cómo todos los días.
    Él amaba a una chica: Lara, la única que no quedaba impresionada ante él.
    Kevin también tenía sus “superpoderes” cómo casi todos los demás.
    Kevin podía planear, levantar 10 veces su peso y echar fuego por la boca.
    Cosas normales por esa calle.
    Cada vez que lo veía, Lara apartaba la vista y se iba.
    Eso enfurecía a Kevin, y por eso fingía ignorarla, por lo que ninguno de los dos sabía lo que realmente pensaba el uno del otro.
    -Dios mío que tontos son los dos-decía yo con tono de burla pero realmente lleno de rabia-
    -Sí, sí, qué tontos son, pero seguro qué a ti te gustaría ser Kevin-replicaba burlón el primero que me oía decirlo-
    Yo me tumbé ésta vez en un banco y por fin pude dormir.
    Al despertar me quedé sólo, excepto por Lara que estaba sentada enfrente mía, en otro banco.
    -¿Lara?-dije extrañado, ya que ella nunca había estado tanto tiempo en aquel lugar-
    -¿Y tú por qué no usas tus superpoderes?-respondió con otra pregunta.
    Yo quedé atónito ante su firme pregunta, ya que ella nunca me había hablado.
    -Contesta-respondió firmemente-
    -Pu-pues porque no tengo-contesté ahora con pánico-
    -No me hagas reír, todo el mundo tiene aquí, sino no podrías entrar-respondió con la mirada seria-
    -Pu-pues lo intentaré…-dije yo pensando aún en qué era imposible que ella se riera-
    Me levanté y puse la postura característica de son Goku haciendo un kamehameha.
    -Ejem, ¿qué haces?-dijo Lara aún más seria-
    -¿Un kamehameha?-dije yo con las piernas temblando de pánico ante la chica cada vez más mosqueada-
    -¡¿KAMEHAMEHA?!¡¿TE RÍES DE MÍ, CHAVAL!?-Dijo gritando cómo una loca y mientras su pelo se convertía en serpientes.
    -No, lo siento.-dije llorando de terror-
    -Muy bien, perdonado-contestó ella volviendo a ser normal-
    -Ayuda…-susurré de puro pánico-una niña loca me quiere asesinar…
    -¡¿QUÉ DICES DE UNA NIÑA LOCA?!
    -¿Nada?-susurrando de nuevo-
    -¡Pon las palmas de las manos juntas!-gritó sin más-
    -¡Sí, mi capitana!-dije asintiendo y haciendo lo que me decía-
    -¡¡Ahora concéntrate en las manos!!-dijo con un tono aún más severo-
    -*snif* sí, mi capitana-dije llorando y mirando las manos.
    -¡¡¡Y AHORA DEJA DE LLAMARME CAPITANA Y VISUALIZA UN RAYO SALIENDO DE LAS PUNTAS DE TUS DEDOS!!!-Gritó excitada y con tono demasiado severo-
    -¡Ayudadme!-grité llorando y visualizando el rayo-
    Sorprendentemente un rayo caluroso salió de mis dedos y alcanzó a Lara, dejándola inconsciente.
    Me acerqué a ella y me puse a llorar pensando ser un asesino, y en ese instante llegó Kevin.
    -¿¡Pero qué has hecho!?-dijo Kevin exaltado-
    -Me dijo que le disparara un rayo a la cara-dije yo llorando-
    -Lara…-decía triste Kevin mientras acariciaba su cabello-¡Es culpa tuya!-dijo enfurecido-
    -Lo sé-dije sin parar de llorar-
    -¡¡MUERE!!-dijo Kevin convirtiéndose en un dragón gigante-
    -Eso es nuevo-dijo Lara-
    -¡Lara! No estás muerta-dijo alegre Kevin-
    -¿Me tomas por blandengue?-replicó Lara-Puedo aguantar el rayo de un mediocre.
    -Eso me ha dolido-dije secándome las lágrimas-
    -Él no llega ni a mediocre, ni siquiera tiene poderes-dijo burlándose Kevin-
    -Pues le acabo de enseñar uno, para que lo sepas-dijo Lara enfadada-
    -¿Que has hecho qué?-contestó enfadado Kevin-
    -Cómo lo oyes, y además le he enseñado uno de nivel medio-dijo con tono burlón-
    -Eh, chicos-dije yo-
    -¡¿Qué quieres?!-contestaron a la vez muy enfadados-
    -¿Me puedo ir ya a mi casa?-dije asustado-
    Siguieron discutiendo sin contestarme así que me fui a mi casa feliz porque había descubierto la magia de ese lugar, pero triste porque me habían gritado más de 10 veces.
     
  2.  
    Eco

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    2
     
    Palabras:
    2698
    Capítulo 2,nadie ha comentado el uno T.T
    No de palabras:2.377
    -------------------------------------------------
    Capítulo 2: Crock, el niño sin sentimientos

    Amanecía un nuevo día y me desperté, sólo para comprobar que lo del superpoder no había sido un sueño.
    Me levanté de la cama y me cambié, desayuné y me cepillé los dientes,
    Ahora estaba preparado, tomé una lata y la dejé encima de la mesa.
    Junté las palmas, me concentré en ellas e imaginé el rayo.
    Pero el rayo no salió, sólo sentí un estirón, cómo si el rayo se golpeara contra las puntas de los dedos intentando salir.
    “Imposible”, me dije.
    -¿Qué haces?-dijo asustándome mi hermano pequeño-
    -Na-nada-dije yo con vergüenza-
    -Mentiroso-dijo el mirándome fijamente-
    -Pero si es cierto…-respondí a tiempo antes de que saliera por la puerta.
    Un rato después fui al colegio y esperé a que empezaran las clases.
    Cuando empezaron la fila se dirigió al aula y empezó la clase de historia de la música.
    Por si os lo preguntáis, sí, en mi ciudad todos están obsesionados con la música.
    Siempre hay esas historias y leyendas en las que una música mágica salva a los héroes, ¿no es así? Pues aquí todo el mundo está obsesionado con que hace miles de años unos valerosos héroes salvaron a la ciudad frente al ataque de un dragón usando diversos instrumentos cómo arpas, flautas y platillos.
    El profesor empezó a explicar una aburrida historia sobre cómo nos salvaron y entonces dijo algo que me llamó la atención:
    Entonces el ladrón robó la flauta mágica al héroe y se la llevó a su rey.
    Pero cuando el rey tocó la flauta se escuchó una horrible melodía que destruyó todo el lugar, pues había sido tocada fuera de su hogar”
    -Con que era eso-pensé-, así que sólo puedo usar los superpoderes allí.
    -¡Riventon, ¿En qué piensa?!-Gruñó el profesor-
    -En nada, señor-respondí asustado-, en nada…-murmuré mientras pensaba en volver a “la calle diferente”-
    Al llegar la hora del descanso fui al patio de la escuela y me encontré con Lara.
    -Riventon, preste atención-dijo ella burlona-
    -¿Desde cuando me diriges la palabra?-respondí con tono desenfadado-
    -Si te preguntan, desde nunca-me contestó seria-
    -Okey, no problem, no intentaré darle celos a Kevin…-dije yo maliciosamente-
    -¡Oye!-replicó enfadada-
    -Era broma, era broma-respondí tratando de calmarla-
    -Bueno, ¿vas a venir?-dijo impaciente-
    -¿Ir a donde?-Contesté tratando de averiguar algo-
    -A la calle-respondió extrañada-¿No te ha dicho Kevin por e-mail lo de que hoy irías a la visita guiada?
    -Kevin no tiene mi e-mail, Lara-la informé-
    -Ya me lo suponía-suspiró Lara-¿Es que no podéis llevaros bien?
    -Intentó asesinarme, ¿Cómo quieres que me lleve bien con él?-repliqué malhumorado-
    -Vamos, no fue así, él solamente quería matar al árbol que había detrás de ti-me rectificó Lara-
    -Eso sólo son excusas-afirmé yo-, abandonando ese tema, ¿cómo quieres que vayamos a la calle?
    -Sencillo, parando el tiempo-me informó segura-
    -¿Puedes hacer eso?-la interrogué-
    -Yo no, pero tu sí-aclaró Lara-
    -Vale, ya lo entiendo, estás loca-respondí yo en tono sarcástico-, si yo sólo puedo lanzar un pequeño rayo, ¿como voy a parar el tiempo?
    -Te enseñaré.-dijo poniendo sus dedos entrelazados-Imítame.
    Separó los dedos y ésta vez juntó los dorsos de las manos, las bajó y las puso donde está el corazón, yo la imité.
    -Y ahora, piensa en un reloj parándose poco a poco-me dictó Lara-
    Cada vez que el reloj iba más lento mis latidos también se hacían cada vez más lentos, hasta que empecé a sentirme mareado y caí al suelo.
    -Funciona, el tiempo se para, sigue así-me alentaba Lara a cada rato-
    Y al fin el tiempo se paró y desperté del desmayo.
    -¿Qué pasa aquí?-decía observando el paisaje-
    -Esto es lo que pasa cuando el tiempo se para-me respondió Lara-
    Todo era una misma imagen, da igual adonde fueras, todo era la misma imagen, el mismo olor, el mismo tacto, me parecía cómo si no me moviera.
    -Tendrás que seguir mis indicaciones, yo si puedo ver-dijo Lara mientras me agarraba la mano y empezaba a caminar-
    Lo único que notaba era mi propio movimiento y llegó un momento en el que pensé que estaba muerto, porque incluso mis latidos eran imposibles de notar.
    Pero entonces Lara me dijo algo que no noté muy bien pero parecía algo cómo”ya estamos aquí” o “ya hemos llegado”.
    Entonces volví a tener mis sentidos al cien por cien, excepto el olfato, porque estaba resfriado, lo que me ayudó a superar el fuerte olor que desprendía un monstruo hecho con carne podrida que reposaba en el centro de la sala.
    Era espectacular, había televisores por todos lados, las paredes eran de titanio pintado de azul y había una enorme puerta detrás de la bazofia.
    -¿Qué quieres aparentar con eso en medio de la entrada?-Gritó Lara-
    De la bazofia salió una chica de pelo largo, rubio y rizado con un lazo negro en él.
    -Lo siento hermanita, estaba experimentando robótica en los alimentos-contestó la chica-
    -¡No me llames hermanita! No soy tu hermana-replicó enfadada Lara-Además, ¿no te he dicho que la robótica se practica en la sala 12?
    -Pero me da miedo que Crock se enfade, hoy tiene un mal día-dijo triste la chica-
    -¿Qué te he dicho yo de Crock, Violet? Él no tiene sentimientos-replicó Lara más enfadada aún-
    -¿Quién es Crock?-Pregunté a las dos chicas-
    -Crock es un niño muy poderoso que tiene el poder de que sus sentimientos alteren el clima y la materia a su alrededor-me informó Lara-, pero la única pega que tiene es que no tiene sentimientos.
    -Eso es imposible, todo el mundo tiene sentimientos-rebatí-
    -Pero él no, no desde el accidente de sus padres-dijo disgustada Lara-
    -Pues yo le obligaré a mostrar sentimientos-dije yo intentando no entristecerme cómo Lara-
    -Es imposible-dijo secándose una lágrima-
    -Nada es imposible para un superhéroe, y menos para alguien que ha aprendido de la mejor-dije guiñando el ojo a Lara-
    -Tú no eres un superhéroe, eres un mediocre-contestó ignorando el halago-
    -La realidad supera a la ficción, ¿nunca lo has oído, Lara?-dije largándome por la puerta-
    -Tu novio se ha largado, Lara-dijo burlona la chica-
    -No es mi novio-contestó sonrojada pero a la vez enfadada Lara-
    Avancé por un pasillo cilíndrico que terminaba en unas escaleras.
    Mientras las bajaba miraba a través de unas paredes de cristal el fondo oceánico.
    -Éste lugar se torna cada vez más extraño-me dije-
    Y al bajar las escaleras me encontré en otro pasillo, pero éste tenía a los lados jaulas con personas.
    Unas lloraban, otras reían y otras simplemente estaban sentadas pensando en cualquier cosa.
    Llegué a otra puerta más grande aún que la de la entrada en la que ponía” sala 12” y entré.
    Había varias personas vestidas con batas sucias y desgastadas que trabajaban en una bola metálica enorme que no se dieron cuenta de mi llegada.
    Había más celdas aún que en el otro pasillo, pero aquí había bichos extraños de todo tipo de formas.
    Dos me llamaron la atención: uno era una nube extraña con cara de conejo que flotaba en el aire soltando nubecitas y el otro era un monstruo negro enorme que no tenía pies, sino que había un vórtice igual de negro que él en el suelo del que su cuerpo salía.
    -¡Guau, es increíble!-dije dirigiéndome a la nube-
    Me acerqué a ella con cautela y cuando estuve justo delante vi un botón en el que ponía:”soltar a Bufu”
    -Con que te llamas Bufu, ¿no?-le pregunté interesado-
    -No me hables, tengo un mal día y no querría matarte-dijo la nube malhumorada-
    -Lo siento, porfa, no me mates-dije llorando de pánico-
    -Cobarde…bien, no te mataré-dijo ella seria-
    Me fui corriendo de la celda sólo para chocarme con otra que se movía en círculo, era la del monstruo negro.
    -Hola amiguito-dijo él con voz grave-
    -Ho-hola monstruo-dije con miedo-
    Pero cuando iba a marcharme vino alguien, era un chico con cara de pocos amigos que llevaba camiseta blanca y pantalones negros. Un mechón de pelo le tapaba el ojo izquierdo y en los bolsillos llevaba cadenas metálicas.
    Entonces saqué un spray pimienta del bolsillo.
    -¡A-alto macarra!-dije disparando el spray-
    De pronto saltó hacia atrás e hizo aparecer una palma de palmera con la que hizo levantar el viento.
    Salí volando cómo 10 metros atrás y me golpeé contra una celda.
    Entonces saltó hacia mí y cayó justo encima con la punta de la palma en mi cuello.
    -Muere intruso-dijo sin mostrar ningún sentimiento-
    -¡Nooo!-gritó Lara entrando por la puerta-
    -¿Qué haces aquí, Lara?-preguntó el asesino-
    -Es su visita guiada-contestó Lara-
    -No parece muy guiada si va sólo por ahí, estaba hablando con Blackow y con Bufu-dijo enfadado el chico-
    -¿Qué más da?-replicó Lara-También se merecen compañía, aunque, ¿no ibas a ayudar a Crock, Reik?
    -Sí, es que,-dije un poco avergonzado-oye, espera, ¿desde cuándo sabes mi nombre?
    -Ahora qué somos compañeros debo saberlo, ¿no?-dijo ella-
    -¿Qué ocurre aquí?-Dijo un chico desde la celda contra la que me había chocado-
    -Ah, hola Crock-respondió Lara-, éste es Reik Riventon, te va a ayudar con tus sentimientos.
    -¿Cuántas veces he de decir que no tengo?-Replicó Crock-
    -Mil-contesté yo-, aunque no te lo recomiendo, te cansarías.
    -¿Y por qué te interesas en mis sentimientos?-preguntó Crock-
    -Porque pienso que es imposible no tener y lo voy a demostrar-contesté seguro de mí mismo-
    -Bueno, cada día me ocurre algo parecido, ¿adonde vamos?, ¿a las rutas del miedo?, ¿a las de adrenalina?, ¿o será ésta vez a las de felicidad?-preguntó Crock-
    -¿Qué dices? Vamos a ver una peli de miedo, hoy ponen “la sonrisa del vampiro”-le contesté ilusionado-Pero claro, después del colegio, Lara nos llevará, ¿no?
    -Bueno, si insistes-dijo Lara cansada de viajar con el tiempo parado-
    Nos fuimos los tres juntos y al llegar a la salida respiré profundamente tratando de prepararme para la odiosa sensación de morir que sentiría con el corazón parado otra vez.
    Cuando salimos volví a ver la misma imagen, el mismo olor, sonido, tacto…
    Seguimos andando hasta que Lara me golpeó dónde estaba el corazón.
    -¡Auch!-grité dolorido-
    Cerré los ojos por el golpe y al abrirlos estábamos en el colegio, mis latidos empezaron a volver y los niños se empezaron a mover poco a poco, hasta que las dos cosas volvieron a su ritmo normal, era cómo si nada hubiera ocurrido.
    -No me puedo creer que no haya pasado nada de tiempo-dije alegre e ilusionado-
    -No me puedo creer que esté de vuelta aquí-dijo Crock-
    -Espera-dije yo-, se me ha olvidado practicar mis rayos, joooooo.
    -Ja ja-rió de forma falsa Lara-
    -No me hace gracia-repliqué yo-
    Cuando acabó el descanso volvimos a clase, Crock se presentó cómo alumno nuevo pese a que hace años ya había estado allí.
    La clase fue normal, aburrida, pero Crock siempre tenía la misma cara.
    Al salir de clase me ilusioné.
    -¡Por fin es la hora de la peli!-Dije ilusionado-
    -Bueno, yo me voy-informó Lara-
    Lara se fue por el camino que iba hacia la calle diferente y nosotros nos fuimos en dirección a la parada del autobús.
    En el autobús Crock se dedicó a hacer levitar cosas, le pregunté varias veces cómo lo hacía y cómo era posible hacerlo fuera de la calle diferente y la guarida pero se limitaba a lanzarme algo para que me callara, sin embargo, no parecía enfadado.
    Llegamos a la parada dónde debíamos bajarnos pero Crock estaba demasiado concentrado en levitar cosas.
    Había un hombre grandullón que iba a bajar en la misma parada.
    -¿Podría hacerme un favor?-le susurré-
    -¿De qué se trata?-preguntó-
    Le conté lo que debía hacer y rápidamente agarró a Crock del brazo y lo lanzó fuera del autobús, así que pudimos bajar.
    -¿Seguro que no le hace daño?-preguntó preocupado el señor-
    -Puede, pero lo necesita-le informé yo-Muchas gracias, adiós.
    -Adiós-contestó el señor extrañado-
    Crock se levantó sin problemas y con la misma mirada libre de sentimientos o pensamientos.
    Caminamos hasta el cine, entramos, compramos las entradas y nos sentamos en la sala para ver la película.
    -Va a empezar la peli-dije ilusionado-
    La película empezó normal, un poco de presentación y empezó la parte de terror.
    Una turba furiosa de vampiros perseguía a una chica que corría llena de pánico.
    Entonces los vampiros rodearon a la chica y empezaron a comérsela, sacando intestinos y otros órganos, le devoraban el cerebro y el corazón y por si fuera poco el gore, la película era en un nuevo 4-D que hacían que pareciera que la sangre realmente salpicaba y los asientos tenían unos sensores que hacían que notarás la sangre corriendo por tu cuerpo.
    “¡AAAAAAAAAAA!”Gritaban varios niños que habían ido a ver la película.
    Yo estaba escondido entre la chaqueta de Crock y la mía, temblando de terror, cosa que no hacía que no sintiera sangre deslizándose en mi cuerpo.
    En cambio Crock estaba igual que siempre, sólo a veces murmuraba:”infantiles”.
    “No funciona, es imposible asustar a Crock” pensé.
    Al salir de la película yo seguía temblando de terror y Crock seguía sin mostrar sus sentimientos.
    -Ahora vas a experimentar algo horrible, era mi as en la manga por si lo de la peli no funcionaba-le informé a Crock-
    -Lo que tú digas-respondió con su típico tono de voz-
    Caminamos y caminamos hasta la parada del autobús.
    Luego bajamos en una parada diferente a la que habíamos subido antes.
    -¿Adonde vamos?-preguntó Crock-
    -A mi casa, a comer-respondí entre risitas-
    Llegamos a mi casa.
    -¡Hola!-saludé-
    Nadie contestó por lo que no debía de haber nadie.
    -Estamos solos-informé a Crock-
    Crock se sentó en la mesa donde había un plato de lasaña verde.
    -¿Qué es esto?-preguntó Crock casi mostrando disgusto-
    -Es lasaña vegetal, pruébala-dije esbozando una sonrisa-
    Entonces Crock probó un poco de lasaña y…
    -¡Agh! ¿Qué es esto? ¡Tiene un sabor asqueroso, es una combinación de carne y verduras asquerosa!-dijo malhumorado y disgustado-
    Entonces yo comencé a reír.
    -¡JAJAJA!-reía yo sin parar-Ésta es la mejor manera de hacer que alguien muestre algún sentimiento.
    -No ha tenido gracia-dijo malhumorado Crock-, aunque, me he dado cuenta de que si siento, gracias.
    -De nada aunque, ¿Qué ocurrirá cuándo estás disgustado?-Pregunté con interés-
    -No lo sé-dijo ignorando el tema-
    -¿Vemos un poco la tele?-le pregunté-
    -Vale-contestó desinteresado-
    Encendí la tele y:
    “Interrumpimos su programación habitual para darles una noticia de última hora, en las costas de nuestras soleadas playas se ha producido un torbellino impresionante”
    -Ahora ya sabemos lo que ocurre, ¿no?-dije esbozando una forzada sonrisa-
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    Espero que os guste :)
     

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