En el brillo de sus claros ojos, nunca imaginó que su castigo sería el exilio… o al menos eso pensaba… mientras caía a una velocidad incalculable, veía pasar por sus ojos las nubes, el cielo que aun era solo luz matizada entre el gris y el blanco. En toscos y desesperados aleteos perdió una pequeña parte de su plumaje, estas caían blancas y brillantes… y poco a poco al tocar la tierra perdían su fulgor. Lucifer quien aún veía su pecado repetido una y otra vez, estaba cruzando por el limbo de la tierra, y al estar a solo unos metros de esta, solo piedra calcinada, grisácea y agrietada, cayó por un agujero que parecía estar hecho para él. Al cruzar la línea del horizonte entre el cielo y la tierra, quedó inconsciente en el aire, y fue poco a poco perdiendo la divinidad, su piel se tornó más pálida, sus uñas se agrietaron, su cuerpo se volvió esquelético, su cabello se emblanqueció de su rubio con un fulgor único y se fue cayendo hasta quedar calvo. Unas gotas que caían de unas estalactitas lo despertaron, se levantó de su sueño, y se dio cuenta de que había caído en una cueva angosta, un gran haz de luz lo deslumbraba y al mirar sus pies desnudos y fríos, notó su figura desnutrida, sus ropas semi rasgadas, su piel marchita, su reflejo de espejo en la charca a la cual había caído, un pequeño estremecimiento recorrió su cuerpo, sentía un frío indescriptible, y justo en ese instante un haz de luz más potente cayó y rebotó sobre la charca, dejando un piso negro a su alrededor y unos muros desnudos, los cuales eran más grandes que el agujero por donde llegó, se acercó a la orilla de la charca, y una escalera apareció ante sus ojos, esta rodeaba el pilar original y desembocaba en un oscuro infinito. Lucifer comenzó a bajar lentamente, tembloroso de su nueva condición, se cubrió son sus alas que aún conservaban su divinidad, y vió como una de las albinas plumas cayó delante suya, inmarcesible y etérea cayó muy lentamente en un bailoteo inocente alrededor del pilar; Al llegar al pie del pilar y la fuente, vio justo enfrente de él una gruta, al menos dos veces más grandes que él mismo, al caminar a través del rocoso pasillo, sus alas y su aureola iluminaban su paso, al terminar este desembocaba en una cueva inmensa, tanto así que esta tenía su propio horizonte, bajo por las escaleras que conducían al nivel de piso de la cueva, y al llegar a este aparecieron ante él los años venideros, se veía a sí mismo y como la gente tenía la idea temerosa de nunca acercarse a él, vió el sufrimiento de las guerras, las muertes innecesarias, la ignorancia del ser humano, sintió entonces en carne propia el sufrimiento de perder a alguien más, amó, odio, rió y lloró. Entonces vio como Dios daba vida al primer ser humano, y cuando pudo tomar conciencia y reincorporarse de su trance, Dios creó a la mujer y de forma descarada y burda se le insinuó y habló de sí mismo para que intentasen ser Dios. Eva al caer en el engaño de Lucifer, le dio energía suficiente para recuperar su estado físico, no así su divinidad, entonces lucifer esperó paciente y cuando caín mató a abel, intentó recrearse a sí mismo, y en consecuencia quemó su piel y la dejó enmarcada con rasguños quedándose de un color bermellón; Fue entonces cuando Dios entró en su consciencia y le preguntó: ¿Por qué crees que te hice bajar aquí? deja de intentar alcanzarme, reflexiona sobre la tarea que te e impuesto y cúmplela, en ese mismo instante vio como una cascada desembocó en el medio de la cueva, y con ella cayó un alma... cain, este no habló, y Lucifer solo lo reconoció por su marca en el rostro, lo miró y vio como caminaba de manera espontánea hacia un trozo de muro y se sentaba frente a él. Lucifer observó atentamente y vio cada uno de sus pecados, tanto morales como físicos, se impresionó de ver como Caín se retorcía de dolor por sus actos, y con una empatía casi telepática pedía perdón a Abel a sus padres… entonces este desde su mismo lugar lloro un líquido negro, el cual al tocar el suelo se dirigió rápidamente al cuerpo de Lucifer, este se inmuto pero nada pudo hacer más que recibir el líquido, y sentir el dolor de Caín e inmediatamente después perdonarlo, puesto que, sus intenciones eran puras. Al ser absuelto Caín tomó una apariencia serena, y se dirigió fuera de la cueva, por la gruta hasta la fuente, subió las escaleras de piedra y una luz que tocaba todo su cuerpo le otorgó divinidad y le permitió ir al paraíso. Empatiza con ellos, y si sus sentimientos son puros perdonarlos en mi nombre. Lucifer comprendió entonces su misiva y se dispuso a mejorar el lugar al cual todas las almas no arrepentidas llegarían; Sacrificó sus alas y su aureola, los últimos símbolos que le quedaban para comprobar que alguna vez fue un angel, rodeó con fuego algunas partes del lugar, y intentó crear naturaleza, pero al crearla esta se marchitaba instantáneamente, por lo que sólo había árboles desnudos y semi petrificados, consoló a todo aquel que creyese todo perdido, y lamentó a aquellos que no pedían perdón de corazón y los enviaba al limbo, donde sufrirían eternamente la angustia de sus pecados Lucifer dió cuenta entonces de que nunca fue abandonado por Él, sino que le fue otorgada una tarea diferente. Observa desde entonces y con una mirada compasiva a todos aquellos que llegan hasta su cueva, donde él les da un hogar y les permite una última oportunidad, el sigue ahí, volviendo a las personas conscientes, y con una empatía infinita y una paciencia aún mayor, espera atento el día en que sea su propio turno de sentarse y pedir perdón.