La decisión de Hinata

La decisión de Hinata

Capítulo 1:

Hola, me llamo Hinata Hyuuga, vivo en la aldea de Konoha, soy un chuunin y tengo diecisiete años, hoy les contare una pequeña historia de amor en la cual me encuentro involucrada junto con mis compañeros de equipo, Shino-kun y Kiba-kun, no piensen mal, no me involucro amorosamente con ambos, sólo con uno pero somos los protagonistas del relato.

-Muy bien equipo, es todo por hoy-dijo Kurenai-sensei a las 4 de la tarde al terminar nuestro entrenamiento.

-¿Cuándo será el siguiente entrenamiento?- Pregunto Kiba-kun entre jadeos.

-Lo más probable es que la próxima semana, tengo mucho papeleo que hacer para entregarle al Hokage- Respondió con cara de abrumada.

-Nos vemos la semana siguiente- Dijo Shino-kun tan sombrío como siempre y después desapareció como de costumbre.

-Bueno Hinata, te acompañaré a tu casa- Ofreció Kiba-kun.

-Cla… claro Kiba-kun- Dije mientras asentía -¿por qué no vamos a casa de Shino-kun para ponernos de acuerdo y… pues… salir a algún lado?-

-No hay problema-

-Gracias- Dije con una sonrisa.

Kiba es lindo… a su manera pero no me veo con él en el futuro… al menos que seamos sólo amigos… ¿o sí? A parte no creo gustarle… ya casi llegamos a casa de Shino. Espero que esté en casa, desde que empezaron los problemas con mi papá hay mucha tensión en mi casa y ahí es donde menos quiero estar ahora. Kiba toca desesperadamente la puerta, me imagino que quiere ir a su casa a descansar… soy solo una molestia para él, seguro es piensa de mí.

-Perdón Kiba-kun- Dije sonrojada.

-¿por qué me pides perdón Hinata?- se veía desconcertado.

-Por hacerte venir hasta aquí, puedes ir a tu casa si quieres, me puedo regresar sola a la mía.

-No eres una molestia para mi, eres mi amiga- dijo poniendo su brazo alrededor de mi cuello y acercándome a su cuerpo.
No me sentía muy cómoda así pero de todos modos me sonroje, que tonta soy. Debo aprender a controlarme. Shino abre la puerta y nos encuentra abrazados… bueno más bien que Kiba me abraza, frunce los labio, debe estar incomodo. Me solté de Kiba para acercarme más a la puerta.

-¿podemos pasar?- le pregunté a Shino

-Claro, no hay nadie en mi casa, iba a preparar el almuerzo, por si se quieren quedar- Su voz se notaba extraña, no debe de estar acostumbrado a socializar…

-No creo, tengo que llegar a mi casa en un rato- Dijo Kiba.

-Cre creo que si me quedare-

-No sabía que sabes cocinar- Dijo Kiba con una sonrisa.

-Hay muchas cosas que no saben de mí- Dijo muy cortante.

-Yo creo que… mejor me voy- Agregó Kiba poniéndose de pie – ¿Vienes Hinata? – Me preguntó.

-No, prefiero quedarme un rato-



-Sí, eso me imagine, los dejo- Se despidió mientras salía por la puerta.

-Cre creo que fuiste mmuy grosero con KKiba-Kun- Dije tartamudeando.

-Es la persona más odiosa que conozco, me da igual si me odia o no- Respondió con su usual tono frío.

-Ya sé que lo odias, ¿por qué eres así?
-Porque no me gusta que la gente se entere de mi vida… no les debe de importar, eso me molesta de la gente que todos son chismosos.

-Shino-kun… no sabía que pensaras así, no todos son como tú dices… intenta ser un poco mas social, hazlo por mí- Dije con un tono entre confianza y consuelo.

-Hinata… tú perteneces a uno de los clanes más prestigiosos de la aldea, no tienes que preocuparte. Ya debe tener tu padre planeada toda tu vida.

-Mi padre… él es mi problema, no quiero vivir la vida que él ha preparado para mí. Quiere que me case con alguien de un clan de otra aldea, ya está haciendo los planes… No quiero pero… no tengo fuerza para negarme y confrontarlo. Lo odio

-¿Por qué no le dices esto que acabas de decirme?-

-Parece fácil, él le da a todos una cara gentil aunque autoritario aunque es mas lo segundo que lo primero…

Necesitaba que me reconfortaran… me puse de pie, corrí y abracé a Shino, se nota que no ha dado muchos abrazos pues no sabía dónde poner sus manos pero no importaba, no me quería separar de él… nunca.

-Hinata, se que lo necesitas pero la comida se quemará si no lo apago- Dijo viéndome a la cara.

No quería quitar mi cabeza de su hombro tan pronto…

-Claro, perdón Shino-kun- Dije separándome lentamente de él para después secarme las lagrimas con las mangas de mi sweater.

-¿Quieres un plato de comida?- Preguntó.

-No, gracias, no tengo hambre- Respondí mientras me acercaba a la mesa para sentarme.

-Preparé mucha comida, yo como poco y creí que Kiba y tu iban a comer- Dijo él sentándose en frente de mí.

-Si comeré pero en un rato. Ahorita no tengo apetito- Admití.


Shino siempre es muy silencioso pero más cuando comía, no se me ocurría de que hablar con él porque sé que cualquier pregunta que le haga me va a contestar cortante y no estaba de humor para ese tipo de respuestas. Quizá otro día cualquiera si podría escucharle, lo conozco bastante pero me gustaría conocerle más.

-¿piensas regresar pronto a tu casa?- Preguntó. Me sorprendió que hablara, debe de sentirse incomodo por mi compañía.

-Pues… la verdad no sé, tenía pensado regresar antes de que anochezca-

-Son las 5, tienes como una hora y media, ¿hay algo que quieras hacer?-

-Sólo distraerme… con lo que sea-

-¿Quieres seguir entrenando?

-Acabas de comer, te va a hacer mal-

-Vamos, tú sólo descarga tu ira contra mí, yo sólo esquivaré o me dejaré-

-Shino-kun, no tienes porque hacerlo, estaré bien así-

-Como quieras-

-Gracias por ofrecerte Shino-kun. Creo que iré a casa de Kiba-kun y después a la mía-

-No te preocupes… nos vemos otro día-

-Perdón por no quedarme a comer-

-Estoy acostumbrado a hacerlos sólo-

-Eres muy comprensible, me gustaría que fueras más abierto con lo que piensas y reflexionaras lo que piensas sobre la gente-

Shino se limitó a hacer un ruido de desagrado. Me puse de pie y el también lo hizo.

-Gracias Shino-kun, me ayudó mucho hablar contigo, te quiero mucho- Dije mientras me acercaba a abrazarlo, le di un beso en la mejilla y me fui de su casa.

Andaba algo confundida, ¿tendré que casarme con quien quiera mi papá? ¿Podré elegir? ¿Elegiré bien? Estoy muy chica para casarme… no quiero llegar a mi casa y enterarme de que mi papá ya avanzó con su plan. Todo el camino a casa de Kiba me la pasé pensando en que hacer o cómo reaccionar ante lo que me diga… pero… lo más importante es que debo encararlo… aunque me cueste.

Al llegar a casa de Kiba toqué la puerta, sólo fui a su casa para pasar el tiempo, no pensaba quedarme mucho tiempo recalco pensaba…

-Hola Hinata, me imagino que vienes a ver a Kiba, está en su habitación, puedes pasar- me saludo su hermana, Hana.

-Hola Hana-chan, gracias. Con tu permiso- Dije mientras entraba en su casa.

Al entrar a la habitación de Kiba encontré lo mismo de siempre, un desastre total. Mi compañero estaba sentado al borde de la ventana viendo el cielo, se veía muy pensativo, cosa rara en él. Toqué la puerta, él se asustó.

-Hinata, creí que te ibas a quedar con Shino toda la tarde-

-Ese era mi plan pero me sentía algo incomoda oyéndolo hablar- Dije entre risitas.

-No puedo imaginarme que tantas cosas te dijo… es algo raro, siempre lo he pensado-

-Un poco pero, es nuestro compañero desde hace tres años y casi no sabemos nada de él-

-Yo sólo sé que se llama Shino Aburame y con eso me basta y me sobra-

-Bueno, ¿puedo pasar?-

-Claro que sí, ven y siéntate-

-Te vi muy pensativo cuando entré, ¿te sucede algo?-

-No exactamente… estaba pensando en tu situación, es algo difícil-

-No quiero hablar de eso, si estoy aquí es para distraerme y ya sabes, pensar en otra cosa-

-Está bien… ¿quieres entrenar?-

-¿Crees que soy débil?-

-¡No! Nunca pensaría eso-

-Entonces ¿por qué me ofreces entrenar?-

-Porque tenemos que mejorar como equipo, he estado practicando un nuevo movimiento con Akamaru pero todavía tenemos que perfeccionarlo y para distraerte, claro-

-Shino me ofreció entrenar también, por eso pensé que pensaban que soy débil-

-Claro que no eres débil, es para distraerte, si no quieres no hay problema-

-Prefiero recostarme un rato- Dije mientras me levantaba del marco de la ventana para dirigirme a la cama de Kiba.

-Espero que no te moleste que me acueste un rato, toda la tensión me deja agotada.

-No te preocupes, relájate mientras yo voy a buscar algo para beber-

-Lo intentare- Dije esbozando una sonrisa.

Se sentía delicioso poder recostarse un rato y olvidarse de toda la presión… demasiado bueno…

--------------------------------------Unas horas después--------------------------------------------

-¡YO TE AMO!-

-Hinata, despierta, estas teniendo una pesadilla- Me dijo una voz que no pude reconocer en ese momento.

-¿Dónde estoy?-

-En mi casa, te quedaste dormida, Shino y yo nos quedamos aquí cuidándote-

-¿Shino? ¿Dónde está?-

-Ahí, sentado en la ventana-

-Shino-kun, Kiba-kun… gracias por cuidarme, tengo que regresar a mi casa- Dije mientras intentaba ponerme de pie.

-No puedes irte a tu casa, son las 2 de la mañana, a eso de las 8 fui a tu casa para decirle a tu papá que te quedaste dormida en mi casa-

-¿cómo reacciono?

-No muy bien, quería venir a buscarte pero insistí en que no había problema con que te quedaras aquí-

-Muchas gracias, han hecho mucho por mí hoy-

-Ahora te irás con Shino para dormir en su casa porque mi mamá no está de acuerdo con que te quedes aquí-

-En mi casa no hay nadie, no hay problema con que te quedes ahí- Añadió Shino.

-Claro, si quieres, vámonos Shino-kun- Dije poniéndome de pie.

-Adiós Kiba-kun, nos vemos mañana- Dije dándole un beso en la mejilla, salí de la habitación y vi que Kiba le dijo algo a Shino en voz baja.

-Nos vemos mañana Hinata, Shino-

-Adiós- Dijo tan cortante y frio como de costumbre.

Shino se ofreció a cargarme pero preferí caminar aunque se me hizo un gesto muy lindo de su parte a pesar de ser las 2 de la mañana.

-¿Qué te dijo Kiba-kun antes de que nos vayamos?- Pregunté.

-Nada importante- Me cortó.

-Vamos Shino-kun, ¿qué te dijo?- Insistí.

-Nada más que te cuide bien y que no te toque-

-Ah- Fue lo único que pude decir, no me esperaba esa respuesta.

-No te preocupes, dormiremos en habitaciones separadas-

-Sé que nunca me harías nada, simplemente no me esperaba eso-

El resto del camino estuvimos en silencio, lo bueno es que estábamos cerca de su casa.

-Llegamos- Dijo abriendo la puerta.

-Puedo dormir en el sofá. Si quieres- ofrecí.

-De ninguna manera, dormirás en mi habitación y yo en la de mi padre- Dijo dirigiéndome a su habitación.

-Ah, esta bbien- Contesté mientras le seguía. No estaba muy cansada pues dormí toda la tarde. Creí que toda la noche iba a quedarme despierta viendo el techo.

-Esta es mi habitación, te daré un playera para que te cambies- Dijo dirigiéndose a su ropero.

-No tienes que darme ropa, ya dormí así toda la tarde-

-Pero mañana tendrás la misma ropa, estará sucia. Insisto- dijo estirando su brazo entregándome una playera gris. –Te dejo para que te cambies, buenas noches- Añadió saliendo del cuarto.

-Bu buenas noches Shino-kun-

Me cambié mi ropa por la de él, me quedaba algo justa pero no importa… ahora como no tengo sueño tengo toda la noche para pensar.

Mañana tendré que encarar a mi padre, él debe saber que lo que quiere para mí no lo deseo, prefiero mil veces casarme con alguien de esta aldea para seguir viendo a mis amigos, Sakura, Tenten, Ino, Shikamaru, todos los demás… Naruto… mi primer amor… nunca lo olvidaré pero ya no estoy interesada en él, ahora sólo me interesa… De pronto oí un ruido en la habitación contigua, salí corriendo de la habitación de Shino para dirigirme a la de al lado, al llegar encontré a Shino en el suelo, se había caído.

-¿Cómo te caíste?- Pregunté al entrar.

-No tengo sueño, ¿quieres hablar?-

-Claro, yo tampoco tengo sueño, dormí toda la tarde- Dije acercándome a la cama mientras él se reincorporaba.

-¿De qué quieres hablar?-

-Tú propusiste hablar, creí que tenías que decirme algo-

-La verdad es que estoy algo molesto contigo-

-¿Por qué no he hablado con mi papá?-

-Sí-

-¿Acaso tú ya hablaste con tu papá?-

-No, es difícil-

-Pero a tu papá solo tienes que decirle que soy tu novia, él no tiene toda tu vida planeada, sé que debí decirte antes lo que sucedía pero no pude…

-No te preocupes, me molestó saber que no le habías dicho pero… podré esperar- Dijo mientras ponía su brazo alrededor de mi cintura.

-Gracias por ser tan comprensible Shino-kun- Le dije dándole un beso en sus suaves labios, él me correspondió el beso.

-¿Piensas decirle a Kiba?-

-Ya sé que lo odias pero es nuestro compañero y lo será mucho tiempo más-

-Está bien, mañana tenemos que ir a tu casa a decirle a tu padre-

-¿Tan pronto?-

-No me parece pronto, llevamos 10 meses de novios-

-¿Po por qué no esperar un poco más?- No podía confrontarlo, estaba segura.

-Si no hablas con él lo haré yo- Dijo mientras me soltaba de su abrazo.

-No te enojes… está bien, podemos ir y hablar con él mañana-

-Gracias Hinata-

-Te odio, me haces hacer cosas que no quiero- Le dije con cara de risa. –Sabes que no es cierto, te amo- Añadí abalanzándome sobre él.

Empezamos a besarnos pero había algo que quería hacer: Ver sus ojos. Empecé a acariciar su cabello, su mejilla y agarré sus lentes, le quité los lentes y los arrojé. Me separé para poder abrir los ojos y ver los de él, no quiso abrirlos.

-Abre los ojos, quiero verlos- Le rogué.

-No quiero que los veas-

-Por favor- Insistí.

-No insistas, no los abriré.

-Entonces no verás que me quite la blusa- Intenté provocarlo.

-No quiero verlo-

-¡Shino!, sólo un poco-

-Está bien, pero no le digas a nadie que los viste- Abrió sus ojos, unos ojos cafés muy profundos y penetrantes, sentía que no podía dejar de verlos.

-No no le diré a nadie que los vi. He hecho muchas cosas contigo que no le he dicho a nadie- Dije sin quitarle la vista de sus ojos.

-Me imagino que a nadie la has dicho-

-Pues no… ¡Oye! Acabo de darme cuenta que dijiste que no querías verme sin blusa-

-Sí, eso dije-

-Eres muy lindo, cualquier otro quien sabe que cosas le gustaría hacer, no dudo que no quieras hacer esas cosas pero me gustó que lo negaras- Dije y me acerque a darle un beso.

-Es porque no quiero apurarte, eres una niña muy linda y no quiero perder tu amor ni tu amistad, esperaré hasta que estés listo-

-¿No has tenido relaciones con nadie?- Pregunté en tono serio.

-No, ¿no es obvio?-

-y… ¿Estás listo para hacerlo hoy?- Dije con tono provocativo, según yo.

-Ya te dije que no quiero apresurarte-

-Te amo Shino-Kun, estoy lista- Dije antes de besarlo.

Bueno pues éste es el primer capitúlo de mi nuevo fic, espero les guste y me gustaría que lo críticaran, comentaran y ayudaran a mejorar. BYE​

 

Re: La decisión de Hinata

he andado muy acupado ultimamente pero intentar{e subir el cap 2 hoy en la noche, espero poder, bye!!

 

Re: La decisión de Hinata

Capitulo 2:

Shino me correspondió. Empecé a sentirme mal… no podía. Me puse de pie rápidamente y salí de la habitación, entré en la de él y azoté la puerta detrás de mí. Shino llego unos minutos después y llamó a la puerta, no abrí. Sólo quería estar sola.

-¡No abriré!- Grité.

-Lo siento, yo no… no quería hacer nada, sé que no estás lista- Dijo intentando consolarme.

-No fue tu culpa… fue la mía, no debí insistir sabiendo que no podía… Entiendo si quieres terminar conmigo ahora-

-No, no quiero, no soy un animal salvaje que un puede contener sus deseos sexuales-

-Eres muy lindo por eso Shino-kun- En ese momento abrí la puerta del cuarto, al salir encontré a Shino recargado contra la pared, tenía sus lentes en la mano y se frotaba los ojos, me acerque a él y me abrazó. Así estuvimos, sin decir palabra hasta que amaneció.

-Gracias por entenderme y quererme- Fue lo primero que articulé al momento que el crepúsculo empezaba a iluminar la aldea.

-¿A qué hora iremos a tu casa?- Preguntó.

-Todavía está amaneciendo, mi padre se despierta alrededor de las 8- Respondí.

-Entonces, debes bañarte y arreglarte para que vayamos- Dijo antes de besar mi frente.

-Cla claro, iré por mis ropas- Respondí mientras me separaba lentamente de él para entrar en su habitación otra vez.

Al entrar me hinque para recoger mis ropas, mientras me reincorporaba Shino entró en la habitación para entregarme unas toallas.

-Sígueme, te mostraré el baño- Dijo al momento que agarraba las toallas.

-¿No te bañaras?- Le pregunté.

-Sí, mientras tú te bañas yo prepararé el desayuno, después me bañaré- Respondió.

Entré en el baño, antes de cerrar la puerta vi que Shino se fuera en dirección a la cocina, cerré la puerta, empecé a desvestirme para después empezar a ducharme. No sé que tanto hizo Shino mientras yo me duchaba, al salir con una toalla me sequé, me vestí y la otra toalla la puse en mi cabeza para secar mi cabello, así fui a la cocina, Shino estaba sirviendo un plato de albóndigas.

-Ahora regreso, sólo me ducho y regreso- Dijo asentando el plato en la mesa para después retirarse –empieza sin mi-

Cuando el salió de la cocina me senté a la mesa a esperar que regresara, no iba a comer sin él aquí. Pasados unos minutos regresó.

-Creí que ya habrías comido- Dijo.

-No, te esperé para hacerlo-

-Ah, gracias- Masculló.

Me puse de pie y serví otro plato, lo asenté en la mesa y después él se sentó enfrente del plato. Estuvimos muy callados… amo a Shino pero… a veces no se qué hablar con él. Cuando ambos terminamos me puse de pie, recogí los dos platos y los lavé en el fregadero.

-¿Estás lista para irnos?- Preguntó.

-Sí pero no quiero- Admití.

-¿Segura que quieres ir?-

-Sí, esto es algo que quiero hacer- Confesé.

-Entonces, vámonos-

-Sí-

Al salir de su casa quería regresar, tenía demasiada presión sobre mí… sólo quería expresar ante mi padre mis deseos… aunque no los aceptara. A una esquina de mi casa bajé le velocidad de mi caminar.

-Estoy lista para hacerlo, si no lo hago ahora sé que no tendré otra oportunidad para hacerlo, Shino-kun, gracias por acompañarme hasta aquí, esto lo tengo que hacer sola y sin compañía- Mascullé.

-Está bien, sé que puedes hacerlo- Dijo antes darme un beso en los labios para después alejarse de ahí.

-Te amo Shino, pase lo que pasé lo haré- Pensé

Lentamente fui acercándome a mi casa, temblaba de miedo. Al llegar vi que la puerta se encontraba abierta. Caminé hacia la entrada, me asomé en la puerta, no había nadie cerca, caminé con confianza al comedor, al asomarme encontré a mi padre sentado a la mesa con Neji y con un hombre y un muchacho desconocidos, al parecer el muchacho me vio pues se puso de pie y salió, me pegué a la pared para intentar esconderme pero fue en vano.

-Hola, ¿te conozco?- Preguntó.

—Nno creo, ¿Quién eres? —Pregunté intentando evadir su pregunta.

—Yo pregunté primero pero por educación me presentaré, me llamo Ryo Maki, déjame adivinar, tu eres Hinata, ¿verdad? —Preguntó con una sonrisa.

—Ssí. Yo soy Hinata. ¿Qué hacen aquí? —Pregunté.

—Nuestros padres están haciendo negocios o algo así.

—¿No sabes qué clase de negocios? —Pregunté.

—Creo que no negocios, más bien… un trato —Contestó con cara de pensativo.

—Pero, ¿qué están negociando? —Pregunté de nuevo con tono de súplica.

—Pues… a nosotros, quieren que nos casemos —Respondió bajando la cabeza. Esperaba que negociaran otra cosa… pensé que mi padre iba a cambiar de opinión pero no lo hizo. —¿No te dijo nada tu padre? —Preguntó Ryo.

—Sí pero… no pensé que él iba a anteponer sus ideales a los míos, creí que se iba a preocupar mínimo por un segundo por lo que quiero en mi vida pero no — Respondí con lagrimas en los ojos.

—Ahí están, veo que ya se conocen —Dijo la voz de el padre de Ryo, al oír su voz ambos alzamos la vista.

—Pasen, tenemos que hablar —Ordeno mi padre viéndome a los ojos lacrimosos.

Entré al cuarto sin voltear a ver a mi padre, me senté a la mesa junto a Neji, coloqué mis manos sobre la mesa y Neji son voltear a verme tomo mi mano con la suya.

—Bueno, hemos decidido que la boda se celebrará el segundo domingo de enero, así Hinata y Ryo tendrán 18 años —Dijo el padre de Ryo con una sonrisa de oreja a oreja.

—¿¡Enero!? ¡Pero estamos en noviembre! — Gritó Ryo poniéndose de pie.

—Hay que pensar que mientras más pronto mejor, teníamos pensado hacerlo el próximo mes pero Hisashi prefirió hacerla en diciembre, se ve que quiere lo mejor para su hija —Dijo el padre de Ryo viéndome.

—Tío, señor Toki, Hinata-sama y Ryo. Yo propongo que los dos involucrados deben de tener un cita para conocerse primero y con eso podrán tomar una buena decisión para las respectivas aldeas y no una que lleve a la desgracia —Dijo Neji viendo a todos en el cuarto y apretando mi mano.

—Cada vez que este joven abre la boca es para dar grandes ideas, debemos de hacer eso que él dijo para estar seguros de nuestra decisión, ¿te parece Hisashi? —Preguntó el señor Toki a mi padre.

—Sí, Neji tiene razón, no queremos destruir un matrimonio que todavía no se ha consumado —Dijo mi padre.

— Entonces tendrán una cita, Ryo vendrá a buscarte mañana a las 9 de la mañana sin falta — Dijo poniéndose de pie y jalando a Ryo para que lo imitara —Tenemos que regresar a la aldea para el almuerzo, si nos disculpan —añadió acercándose a la puerta, mi padre los siguió.

—Gracias por ayudarme Neji —agradecí a mi primo viéndole a la cara.

—Sé que no estás en una situación muy cómoda, me imagino que tienes que hablar mucho con tu padre así que me voy —Dijo poniéndose de pie para salir del cuarto, al momento que atravesaba la puerta mi padre lo hizo también.

—¿Te divertiste anoche? —Preguntó viéndome a los ojos.

—Perdón, no fue mi intención, me quede dodormida —dije con la vista abajo.

—Quiero que sea la última vez que eso sucede, tengo grandes planes para el clan y tú te desapareces.

—Siempre he seguido las reglas, ¿no puedes perdonarme por equivocarme una vez? —Mascullé, las lágrimas empezaron a brotar de nuevo.

—Está bien, quiero que mañana impresiones a Ryo para que se consuma el trato —Me dijo.

—Nno mme quiero cassar con él —dije en voz casi inaudible.

—Tienes que ver qué es lo mejor para todos, esto traerá grandes beneficios —Fue lo único que se le ocurrió para excusarse.

—Está bien, padre —Respondí poniéndome de pie para salir corriendo hacia mi habitación.

Necesito que me ayuden a encontrar sinonimo de decir... siento que lo repito mucho. Espero que les guste, se aceptan críticas, comentarios, tips, etc. Bye, cuidense!!