Ciudad Mkuu

—Tsk... vaya. En fin, no pasa nada. Raticate podrá descansar un poco, al menos.

+400 experiencia

—¡Bewear! ¡Te toca!

Unas fuertes pisadas se oyeron, y el gran oso apareció, con ganas de "abrazar" cosas.

—¡Doble Filo!


BEWEAR: Normal/Lucha
Peluche: el daño recibido por movimientos de contacto directo se reduce a la mitad, pero si el movimiento recibido es de tipo fuego, recibirá el doble de daño, sea físico o no.
Salud: 250/250 (10)
Fuerza: 200 (20)
Resistencia: 140
Agilidad: 2/2
Movimientos:
-Giro Vil (40 Potencia, Siniestro)
-Fuerza Bruta (90 Potencia, Lucha, baja en 10 fuerza y resistencia propias (Base 70, +20 STAB))
-Divide Dolor (suma los PS restantes de ambos combatientes, los divide en 2 y los reparte entre ambos) (Usos: 2/2)
-Doble Filo (90 Potencia, Normal, recibe 1/2 del daño producido (Base 70, +20 STAB))

 

—¡Cuidado, Bewear, eso es un movimiento de fuego, no dejes que te dé! ¡Responde con Doble Filo!


BEWEAR: Normal/Lucha
Peluche: el daño recibido por movimientos de contacto directo se reduce a la mitad, pero si el movimiento recibido es de tipo fuego, recibirá el doble de daño, sea físico o no.
Salud: 218/250 (10)
Fuerza: 200 (20)
Resistencia: 140
Agilidad: 1/2
Movimientos:
-Giro Vil (40 Potencia, Siniestro)
-Fuerza Bruta (90 Potencia, Lucha, baja en 10 fuerza y resistencia propias (Base 70, +20 STAB))
-Divide Dolor (suma los PS restantes de ambos combatientes, los divide en 2 y los reparte entre ambos) (Usos: 2/2)
-Doble Filo (90 Potencia, Normal, recibe 1/2 del daño producido (Base 70, +20 STAB))

 

Liza White

Guiada por Furaha, acabamos llegando al lugar donde se encontraba una gran parte de los habitantes de ciudad Mkuu, a la espera del comienzo de la celebración. Admiré en silencio el palacio del Gran Frika frente a nosotros mientras nos abríamos paso entre las personas, logrando escoger el lugar indicado para ver perfectamente lo que estaba por suceder, teniendo en cuenta la baja estatura de mi acompañante.

De un momento a otro se abrió un pasillo entre la muchedumbre, permitiendo el paso a cuatro personas, dos hombres y dos mujeres. La voz de Furaha llamó mi atención al escuchar que se trataban de los Cuatro Sabios a los que tendría que enfrentarme tras el desafío de las marcas, y no pude ocultar mi emoción al poder verles en persona en aquel instante. Wigo, Sumu, Giza y Wadudu, especializados en los tipos fantasma, veneno, siniestro y bicho respectivamente.

Y tan distraída estaba, que no me percaté del silencio que se había generado hasta que Furaha me dio un codazo, instándome a aplaudir junto a ella. Me coloqué de cuclillas para poder ver lo mejor posible, y fue entonces cuando divisé a un hombre muy anciano, subido a un pokémon de lo más extraño. El Gran Fikra, al fin tenía la oportunidad de verle. A simple vista, y mientras nos hacía saber el motivo de su presencia, sentí cierto respeto hacia una figura como lo era él en Udan. No había tenido la oportunidad de oír demasiadas cosas sobre él, pero la admiración que todos le profesaban era suficiente para mí.

Entonces, la noticia fue dicha: Nyota había aparecido finalmente. Una gran sonrisa se dibujó en mis labios, recordando a aquella entrenadora formidable de la que tanto me habían hablado, y a la que tenía tantísimas ganas de conocer al fin. Y al saber que se encontraba tan cerca de mí, en el castillo, la emoción crecía por momentos. Incluso pensé en intentar acercarme un poco si se me permitía, al menos solo para poder verla.

Pero la emoción y el ambiente festivo se disiparon abruptamente en cuanto distinguí la figura de un ataud abrirse paso. Mi cuerpo se enfrió, y mi expresión se ensombreció drásticamente. Nyota estaba...

Muerta.

Pero eso no era todo. En medio de la conmoción, un nombre conocido salió a la luz. Maji. Tachaban a Maji de asesino y de criminal, parte de una asociación de enmascarados. Que él había sido el culpable de tal atrocidad.

Incapaz de procesar todo lo que estaba ocurriendo, me giré hacia Furaha al notar algo raro en ella. Furaha... estaba llorando. Aturdida, hice un esfuerzo por acercarme a ella, extendiendo una de mis manos hacia ella para intentar calmarla, y fue entonces cuando noté que mi mano temblaba, al igual que ella.

Aquella fue la última vez que la vi.

La muchedumbre empezó a esparcirse una vez concluído el mensaje, chocando con mi cuerpo y el de la chica, alejándonos hasta llegar a perderle de vista. La conmoción no me permitió moverme demasiado rápido, mas intenté gritar su nombre... en vano. Cuando ya casi nadie quedaba allí, comprendí al fin que la chica se había marchado, sollozando, sin haber podido hacer nada para intentar seguirla. Nyota era... ¿Su hermana? ¿Esa hermana mayor tan fuerte de la que me había hablado, y por la que se entristeció durante nuestro combate?

Sentí mi pecho oprimirse de tan solo pensar en el sufrimiento de Furaha en aquellos momentos. Pero yo... ¿Yo que podía haber hecho? ¿Qué podría... haberle dicho? Yo no... Me sentía demasiado impotente y alicaída como para tratar de ir en su búsqueda.

—Vayamos de vuelta con Emily, chicos —propuse entonces, sin ninguna emoción en mi voz. Mis pokémon asintieron en silencio.

 

—Una vez más... ¡esquiva y Doble Filo!


BEWEAR: Normal/Lucha
Peluche: el daño recibido por movimientos de contacto directo se reduce a la mitad, pero si el movimiento recibido es de tipo fuego, recibirá el doble de daño, sea físico o no.
Salud: 218/250 (10)
Fuerza: 200 (20)
Resistencia: 140
Agilidad: 0/2
Movimientos:
-Giro Vil (40 Potencia, Siniestro)
-Fuerza Bruta (90 Potencia, Lucha, baja en 10 fuerza y resistencia propias (Base 70, +20 STAB))
-Divide Dolor (suma los PS restantes de ambos combatientes, los divide en 2 y los reparte entre ambos) (Usos: 2/2)
-Doble Filo (90 Potencia, Normal, recibe 1/2 del daño producido (Base 70, +20 STAB))

 

—¡B-Bewear! ¡Resiste! ¡Usa Doble Filo!


BEWEAR: Normal/Lucha
Peluche: el daño recibido por movimientos de contacto directo se reduce a la mitad, pero si el movimiento recibido es de tipo fuego, recibirá el doble de daño, sea físico o no.
Salud: 20/250 (10)
Fuerza: 200 (20)
Resistencia: 140
Agilidad: 0/2
Movimientos:
-Giro Vil (40 Potencia, Siniestro)
-Fuerza Bruta (90 Potencia, Lucha, baja en 10 fuerza y resistencia propias (Base 70, +20 STAB))
-Divide Dolor (suma los PS restantes de ambos combatientes, los divide en 2 y los reparte entre ambos) (Usos: 2/2)
-Doble Filo (90 Potencia, Normal, recibe 1/2 del daño producido (Base 70, +20 STAB))

 

—¡Bewear, no!

Gimió Rahisi, pero fue demasiado tarde: su oso estaba debilitado.

+500 experiencia.

No obstante, aún le quedaba un pokémon. Como era costumbre, Komala apareció de pronto, abrazado a su tronco, y cuando Rahisi comenzó a realizar el baile de los movimientos Z, el pokémon se rodeó de una fuerte energía.

—¡Adelante, Komala! ¡Carrera Arrolladora!


KOMALA: Normal
Letargo Perenne: está constantemente dormido, así que no puede sufrir ningún problema de estado, y el sueño no le afecta.
Normastal
Salud: 130/130
Fuerza: 220 (30)
Resistencia: 180 (20)
Agilidad: 2/2 (65 de Velocidad)
Movimientos:
-Guardia Baja (65 Potencia, Normal, no le afectan los cambios de estadísticas rivales (Base 50, +15 STAB))
-Golpe Bajo (40 Potencia, Siniestro, sólo afecta si el rival ha usado antes un movimiento ofensivo; dos puntos de agilidad para esquivarse) (Usos: 5/5)
-Mazazo (70 Potencia, Planta, pierde 1/2 del daño provocado)
-Bostezo (adormece al rival; tras 2 turnos, cae dormido) (Usos: 2/2)
Movimientos Z:
-Guardia Baja > Carrera Arrolladora (115 Potencia, Normal, Ineludible. Sobrepasa protección, produciendo la mitad del daño original (Base 90, +25 STAB))
-Bostezo > Bostezo Z (Duerme al rival al instante, ineludible, sube además en 20 la fuerza propia)

 

—Vaya... lamento que acabe así. Fue una buena batalla. ¡Komala, Golpe Bajo!


KOMALA: Normal
Letargo Perenne: está constantemente dormido, así que no puede sufrir ningún problema de estado, y el sueño no le afecta.
Normastal
Salud: 130/130
Fuerza: 220 (30)
Resistencia: 180 (20)
Agilidad: 1/2 (65 de Velocidad)
Movimientos:
-Guardia Baja (65 Potencia, Normal, no le afectan los cambios de estadísticas rivales (Base 50, +15 STAB))
-Golpe Bajo (40 Potencia, Siniestro, sólo afecta si el rival ha usado antes un movimiento ofensivo; dos puntos de agilidad para esquivarse) (Usos: 4/5)
-Mazazo (70 Potencia, Planta, pierde 1/2 del daño provocado)
-Bostezo (adormece al rival; tras 2 turnos, cae dormido) (Usos: 2/2)
Movimientos Z:
-Guardia Baja > Carrera Arrolladora (115 Potencia, Normal, Ineludible. Sobrepasa protección, produciendo la mitad del daño original (Base 90, +25 STAB))
-Bostezo > Bostezo Z (Duerme al rival al instante, ineludible, sube además en 20 la fuerza propia)

 

Liza White

Alcé la cabeza al escuchar la voz de Emily llamarme. La habíamos estado esperando sentados en un banco de madera hasta que terminase su combate, y ahora que estaba allí, no había otra que ponerse una vez más en marcha. Me levanté para recibirla, y traté de forzar una sonrisa. Pero esta salió más apagada de lo que esperaba.

—Lamento que no lo hayas conseguido, Emi, pero igual os defendisteis muy bien. Imagino que habrá revancha pronto —la felicité por su desempeño con sinceridad. Quizás, en el fondo, tratando de evadir sus preguntas. Sin embargo, pude distinguir la preocupación en su mirada, y rápidamente zarandeé mi cabeza. No quería preocuparla justo ahora—. Me fue bien, por suerte. Ahora solo queda hablar con el capitán del desierto para poder explorar nuevas zonas de Udan.

>>O-Oh, ¡y no me pasa nada! Es solo que... ¿Podemos... hablar más tarde de ello? ¿Por favor?

Desvié la mirada hacia el suelo, sin saber muy bien qué más añadir. Prefería ponerle al corriente más tarde, después de todo había tiempo de sobra mientras explorábamos.

—Nosotros iremos un momento al mercado, a comprar cebos para añadir a un pokémon al equipo. ¿Te importa si nos encontramos en el desierto? No tardaremos mucho.

Nos despedimos momentáneamente de la chica, y nos dirigimos hacia el mercado una vez más.

 

Liza White

No había sido demasiado tiempo el que habíamos invertido en conseguir que Hana se uniera al equipo, tal y como le prometí a Emily. No sabía a dónde se había dirigido, ni si habría llegado ya al desierto, pero no pasaría nada por esperar el tiempo que hiciese falta. Tendría que buscar a Tetemeko mientras hacía tiempo, para ver cómo recorrer el desierto hacia la siguiente área a explorar de Udan.

—Supongo que ya hemos terminado por aquí. Veamos qué sorpresas nos esperan al otro lado.

Así, nos encaminamos hacia el desierto Jangwa.

 

Llegué a Ciudad Mkuu apresurada. De verdad no quería pasar demasiado tiempo allí… ¡quería continuar con mi aventura! Pero seguramente mis pokémon se encontraban cansados, así que decidí que pararíamos unos momentos en la ciudad para descansar.

Regresamos a la cabaña de Chuma y mis pokémon se recostaron allí para descansar un poco. Aproveché el descanso para dirigirme hacia el mercado de la ciudad y revisar un par de cosas que tenía pendientes. Acabados mis mandados, regresé a la cabaña y descansé por un rato… luego decidimos ponernos en marcha cuanto antes; ¡la siguiente prueba nos esperaba!

 

Lucas Diamond

—¡Ahh, la ciudad de Mkuu! Hacía mucho que no pasábamos por aquí, ¿no creéis? ¡Primero debemos ir al mercado, a coger algunos zumos para Lampent! Y luego iremos directos al desierto del Jangwa: tengo ganas de hacer la prueba del capitán que se encuentra allí. Luego incluso podríamos enfrentarnos a él, ¿quién sabe?

>>De momento, ¡a gastar joyas se ha dicho! —exclamé emocionado, mientras emprendía mi marcha hacia el mercado.

A todo esto, el mercado estaba... ¿por dónde? Bueno, con suerte en un par de horitas habríamos llegado.

Creo.

 

Lucas Diamond

Volví a pasar por aquella ciudad, Mkuu, para dirigirme a Kikabila. Uf, para ir a cualquier sitio había que pasar por aquí, ¡y aún así me seguía perdiendo! Al final acabaría harto de Mkuu, ojalá pronto pudiera explorar nuevas zonas de la región.

—¿Cómo os encontráis, necesitáis un descanso? —pregunté a mis pokémon debido a la dura batalla en la que habían luchado. Parecían algo cansados, pero podían aguantar: de camino a nuestro próximo destino acabarían por recuperarse.