¿Quién, tras el espejo, asoma despacioCon temor banal, medrosa mirada?Que por algún resquicio, despistada,Su destello fiel de oro y topacio,Pero tan irresoluta y apocadaEntrever deja la marca del cansancio,Mas del gozo y la dicha extraviadaDe la fantasía cruel traspaso. Hinca su brillo ocular el infantePresa de la lágrima candorosa;De la magia le privó algún tunanteQue la vida nos brinda generosa. A tierna criatura, fin diferente.¡Necia muestra de apatía al mundo!¡El destino de éste es el presenteDel que el hombre deja moribundo! También en mi blog.Saludos.
Vi estrellas preciosas con la primera estrofa, pero las dos últimas tengo que admitir que no me gustaron para nada. Sentí que desentonaron, y me apena terriblemente. En la segunda estrofa, el tercer verso, siento como si faltara alguna palabra, no sé, lo siento raro, ¿no le hará falta un 'que'? Sana curiosidad, de mi estrellado gusto. Mucho cuidado con las mayúsculas y las comas. Ha sido un placer leerlo. Saludos.