Siempre con la cabeza en alto el era todo un ganador, tanto a la hora de responder una prueba como hacer una canasta de tres puntos, su carisma lo sacaba adelante, su amabilidad le hacía ganar seguidores… Aún así, a pesar de la alta estima que había ganado sus ojos no podían fijarse en sus notas azules o trofeos brillantes, menos en una muchacha de igual habilidad. Sus ojos solo se fijaban en quien aceleraba su motor, el corazón. Nunca fue la más linda, las clases le costaban mucho más que a cualquier alumno normal, el deporte se le daba fatal y apenas tenía que hablar con más de dos desconocidos se ponía a temblar ¿Qué tenía de especial eso para ser la que se robaba el corazón ganador? Eso no era más que el esfuerzo. Nunca resaltó en notas, pero con esfuerzo lograba tenerlas pasables, aparte de ayudar a un que otro compañero. Si le lanzabas una pelota lo normal sería que se estrellara contra su nariz, a pesar de eso no lloraría y seguiría intentando insertar el balón al aro. Y si te esforzabas en mantener una conversación con ella lograrías encontrar a una persona dulce y cortés con amplios temas de conversación. A pesar de no ser una ganadora su esfuerzo llamaba la atención de varios, sobre todo la de cierto ganador al que le es fácil llegar a la sima y, aún así, aprecia a los que aún no han rodado cuesta abajo. Contenido oculto MicroRelato para la actividad Días de Abecedario, letra G de Ganador
Pero qué escrito más dulce *u* Eso, o yo soy una verdadera romántica... Son las dos cosas, de hecho. Algo que me ha gustado del relato es que en pocas palabras y aunque se describe más a ella como no ganadora, pero sí como gran persona, también se dan guiños del ganador, que aunque lo es, tiene la capacidad de ver el esfuerzo y admirar el trabajo de los demás, en este caso el de ella. Eso deja en claro que él también es una gran persona y que por lo mismo, creo que ambos podrían llevarse muy bien :D Lindísimo escrito ^u^
