Para la actividad ¡Una canción, un drabble! 4.0 Contenido oculto: Fight Song Luchadora Contemplo con nostalgia los últimos trazos del atardecer. Sentada en la cama, con el móvil olvidado entre las sábanas arrugadas y la alfombra sepultada con horribles borradores, sólo entonces me permito el cuestionar mis propias decisiones. ¿Éste es el camino correcto? ¿Mi camino soñado? ¿Pasar por tantas penurias valdrían de algo el día de mañana? ¿Acaso sería capaz de cumplir aquello que deseaba? Presencio cómo el añil se impone ante los demás colores, engullendo cada matiz cálido hasta acabar en una noche negra y sin luciérnagas galácticas que lo acompañen. Me estiro lo justo para encender el velador y la habitación resplandece de luz, apartando a las sombras. Y entonces lo recuerdo. Porque fui advertida, por supuesto que sí. Todos a mi alrededor tuvieron una opinión para dar, un consejo que transmitir, un imperioso “devolverte los pies a la Tierra”. Y lo comprendía, lo comprendía muy bien. Mi sueño era ambicioso y demasiado inalcanzable, un ideal infantil que había subsitido por trece años a mi lado. ¡Debería haberlo pensado mejor! Pero ésta era la meta que deseaba con todo el alma llegar alcanzar. Si me detenía ahora, si me rendía antes las adversidades y regresaba a casa, ¿podría darme por satisfecha? ¿Podría catalogarlo como un “di todo de mí y aún así no funcionó”? ¿De verdad me había esforzado? ¿Hasta tal punto en que mi renuncia ahora no representaría una espina de la que jamás podría escapar? No, claro que no. Porque aún sentía deseos de luchar. Incluso si las complicaciones me impedía ver la luz de salida y garras siniestras me sujetaban de los pies, no me daría por satisfecha hasta lograrlo. ¿Pero en serio sería posible para mí? ¿Este sueño podría alguna vez ser alcanzado? Jamás lo sabría de no intentarlo. Ya había dejado todo lo que me lastimaba atrás, ¿qué significaba correr un riesgo más? Siempre habrían maneras para salir a flote de cualquier situación si confiaba en mi poder. Y por mi sueño sería una luchadora.
Hasta en los momentos más difíciles luchar por los sueños es realmente lo que debemos hacer. Si no lo hacemos, siempre nos quedará el "y si" y nadie quiere quedarse con esa espina. Realmente, que alguien te desanime a intentar alcanzar tu sueño, es un aliento más para alcanzarlo, porque nadie tiene el derecho para hacerlo. Nadie. Absolutamente nadie. En fin, me ha gustado el relato. Espero leer más cosas tuyas. ^^