Long-fic de Inuyasha - La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

que bien amix hoy o mañana

bueno t qedo estupendo cielso

me imagino a sesshy con pelo de arcoiris q mala es sango su pelo plateado como se lso arruinaa!!

hay bueno cielos cielso y ahora ok inuyasha ya esta enamorado de kagome peor kagome ta confundida q chvre
esperoo llerla la conti prionto eh amix

bye

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

Hola a todos!!!

Muchas gracias por el apoyo que me brindan y mil disculpas por la tardanza en la publicación del capítulo..... Pero aquí estoy publicando el quinto capítulo, realmente este capítulo es un poco cómico (bueno aunque en todos los capítulos en los que Miroku haga algo indevido va a haber sus partes cómicas jeje)... Espero que les guste el capítulo y les digo que el próximo seguramente lo publico o el miércoles o el jueves!!!

Bye!!!
5. Una nueva hechicera

Las cosas estaban un poco mas tranquilas entre Sesshomaru y Sango ya que Sango se distraía regañando a Miroku y reprendiéndolo con unas cuantas cachetadas y golpes, debido a su comportamiento de mujeriego y pervertido

Los días pasaron; ya tenían dos semanas de conocerse y eran muy buenos amigos, las riñas entre Sango y Sesshomaru eran prácticamente nulas, aunque de vez en cuando había un pequeño desacuerdo entre ellos, pero ya Sesshomaru había aprendido la lección y prefería estar de acuerdo con Sango en lo que fuera posible.

Un día bastante común para Sango y Kagome, ellas recibieron una carta de la Srta. Sakura


Queridas Kagome y Sango:

Reciban mi mas cordial saludo y mis mejores deseos de que se encuentren bien; les envío esta carta para que sepan que una alumna que se acaba de graduar irá a la ciudad de Karditsa, les pido por favor que la ayuden a integrarse como ustedes lo han hecho, su nombre es Ayame Ishimura, tiene 20 años y esta bastante ansiosa por conocer a mis alumnas predilectas, ustedes, chicas deseo que ella también se pueda integrar al grupo de amistad que han formado.

Se despide la Srta. Sakura Reed

PD: Sango recuerda que no debes usar tus poderes para fines vengativos sin importancia

- Vaya, pues me parece que vamos a tener que ayudar a esta chica – Dijo Sango
- Si... pero estoy intrigada por algo – Dijo Kagome
- ¿Por qué cosa?
- Bueno, es que la Srta. Sakura sabia que nosotras habíamos formado un grupo de amigos – Dijo Kagome -pero ella no sabía que tu habías usado tus poderes para cambiar el color de cabello de Sesshomaru
- Es cierto, pero recuerda que ella sabe muchas cosas y que ella puede vigilarnos – Dijo Sango – Aunque no siempre lo hace solo de vez en cuando
- Bueno, tienes razón.. pero aún estoy algo intrigada
- Bueno, recuerda que ella sabe que yo no soy muy cumplidora de las reglas me imagino que por eso me vigila más a menudo
- Sí, tienes razón, ahora hay que arreglar el cuarto de huéspedes para que Ayame pueda estar tranquila allí – Dijo Kagome

Kagome y Sango arreglaron la habitación que ahora sería de Ayame, ellas no sabían cuando iba a llegar Ayame pero de algo estaban seguras que sería pronto ya que la Srta. Sakura tenía un costumbre de avisar las cosas bastante tarde...

Sango y Kagome salieron con el grupo de amigos, que ya era bastante grande, y les dijeron que una nueva chica iba a llegar pronto y más de una advertencia fue recibida...


- Sesshomaru, se te agradece que seas agradable cuando llegue Ayame – Le dijo Kagome
- Y tú ¡Miroku! Ni se te ocurra sobrepasarte con ella, porque si lo haces verás lo que es un buen hechizo – Le dijo Sango y sin más le dio una cachetada
- Pero Sango, esta vez no hice nada – Le dijo Miroku mientras se daba masajes en la mejilla que le habían golpeado
- Bueno, pero esa es solo la advertencia – Le dijo Sango – demás conociéndote es probable que hayas estado pensando cualquier cosa
- Ya Sango, creímos que ya no lo ibas a golpear sin razones – Le dijo Kagome
- Bueno, pero es una buena razón golpearlo por cualquier pensamiento
- Bueno, pues entonces creo que ya estaría desfigurado – Dijo Inuyasha sin evitar reírse
- Jajaja, Si, creo que ya no tendría cara – Dijeron Rin y Sesshomaru
- Bueno, primos gracias por el apoyo – Les dijo Miroku

Ese día culmino rápidamente para todos, al parecer el ambiente no tenía muchas ganas de hacer que el día durara mucho más tiempo, del que ya había aparentado durar, los chicos se despidieron y se fueron cada quien a dormir.

En la mañana siguiente Kagome se levanto y salió de la casa pero al salir se dio cuenta que una chica de cabellos rojos y mirada dulce estaba en la puerta de su casa apunto de tocar...

- Hola – Le dijo Kagome – Tu debes de ser Ayame Ishimura ¿cierto?
- Si – Le dijo Ayame – vengo porque la Srta. Sakura me a dicho que ustedes me iban a recibir sin ningún problema
- Es cierto – le dijo Kagome – Pero ven entra no es necesario que te quedes afuera
- Gracias – Dijo mientras entraba a la casa – Vaya, para ser una casa chiquita por fuera, es una mansión por dentro
- Bueno, eso es solo por dentro – Le dijo Kagome con una sonrisa – Ven que te llevo a tu habitación debes estar cansada del viaje
- Sí, gracias

Kagome llevo a Ayame a su habitación y al instante fue a despertar a Sango para avisarle que Ayame ya había llegado

- ¿Sango? – Le dijo Kagome tratando de despertarla – ¡Sango!
- ¡¿Qué paso?! – Dijo alterada – Ah, eres tu Kagome ¿Qué sucede?
- Bueno, te quiero avisar que ya llego Ayame
- Ah que bien, ya la llevaste a su habitación
- Por supuesto se veía bastante cansada – Le dijo Kagome- Oye ¿Qué tal si preparas el desayuno?
- Pero, a ti te toca esta semana – Le reprocho
- Sí, pero yo voy a ver si Ayame necesita algo y la voy a ayudar a organizar sus cosas
- ¿Ella no tiene poderes?
- Sí, pero la quiero ayudar – Le dijo Kagome – Anda, has el desayuno
- Esta bien, pero la semana que viene tu haces el desayuno de todos los días
- Sí, si lo que digas

Sango fue a preparar el desayuno y Kagome fue a ayudar a Ayame a recoger algunas cosas pero en realidad lo que hizo fue advertirle de Miroku, y decirle los nombres del grupo al que se iba a integrar; Sango poco después entro a la habitación para avisarles que el desayuno estaba servido; luego de comer Sango y Kagome salieron con Ayame al lugar donde siempre se reunían con Sesshomaru, Rin , Inuyasha y con Miroku, al llegar ellas tuvieron que esperar por los demás, aproximadamente cinco minutos después, ellos llegaron


- Hola chicos – Les dijo Kagome con una sonrisa – Ella es Ayame
- Mucho gusto mi nombre es Ayame Ishimura – Les dijo Ayame con una pequeña reverencia – es un placer conocerlos
- Mucho gusto, yo soy Miroku Tsukishiro – Le dijo Miroku
- Ah, ¿tu eres del que me tengo que cuidar? – Dijo Ayame – Bueno, pues me pareces inofensivo
- Jajaja, me parecen que ya le advirtieron de ti Miroku – Le dijo Inuyasha – Hola, mi nombre es Inuyasha Hiraguisawa y ellos son Sesshomaru, por desgracia mi hermano y Rin Urashima – Le dijo a Ayame señalándolos
- Ah, pues mucho gusto a los tres – Dijo Ayame – Tu eres Inuyasha, Kagome me dijo que eres bastante simpático y así parece ser
- ¿En serio? ¿Kagome te dijo eso? – Dijo interesado Inuyasha
- Sí, yo se lo dije al igual que le dije que todos eran simpáticos y que Miroku era un pervertido y además mujeriego – Dijo Kagome tratando de defenderse
- Bueno, si, pero me dijiste que en especial Inuyasha era el más simpático de los chicos
- Jajaja, Bueno chicos – Dijo Kagome – tengo que admitirlo Sesshomaru, Miroku, Inuyasha es más simpático que ustedes dos
- Jajaja, eso ya lo sabíamos – Dijo Sesshomaru – Además no te preocupes eso no importa
- Oye Ayame, ¿hace cuanto te graduaste? – Pregunto Rin
- Bueno, me gradué hace seis días y hace cinco días que salí de la escuela para venir con Sango y con Kagome
- Jajaja, como de costumbre – Dijo Sango – la Srta. Sakura nos aviso tarde
- Sí, pero era de esperarse – Dijo Kagome – a ella siempre se le olvidan ese tipo de cosas
- Sí, a la Srta. Sakura una vez llego a visitar a la Srta. Tomoyo y ella no sabía que venía - Dijo Rin entre risas – Y le dijo que ella creía haber enviado una carta para avisarle de su visita... jeje al final todo salió bien
- Bueno, ya que los chicos de seguro se incomodan – Dijo Kagome – Ayame se me olvido decirte que Kikyo vive en esta ciudad y con ella hay que tener cuidado
- Vaya!, que mal a mi me dijeron Kanna y Kagura que muy pronto irían a visitar a Kikyo – Dijo Ayame – Ellas son realmente insoportables
- Sí, en realidad lo son – Dijo Kagome – oigan chicos ¿qué tal si vamos al templo que fuimos la otra vez?
- Si, me parece buena idea – Dijo Inuyasha – pero espero que esta vez no suceda lo mismo que aquella
- Ni me lo recuerdes – Dijo Sesshomaru – De tan solo imaginarme con el cabello de colores otra vez me da rabia
- Jajaja, bueno pero tu me retaste y además te sirvió ya que ahora eres un poco mas caballeroso, no creas que es mucho, pero algo es algo

Ellos se fueron al templo y esta vez habían unas cuantas personas y entre esas personas había un chica de cabello marrón y según Miroku un cuerpo estructural

- Bueno, pero de haber sabido que aquí habría una chica tan hermosa hubiese venido antes – Dijo Miroku
- ¡¡¡Miroku!!!! – Dijo Sango – Será mejor que no te le acerques a la chica
- ¿Qué tienes celos Sango? – Le dijo Miroku – tu sabes que tu eres la única chica que mis ojos pueden ver – Le dijo mientras veía su pecho
- ¡¡¡Pervertido!!! – Le dijo Sango y le dio una cachetada
- Jajaja, vaya Kagome me parece que tenías razón respecto a Miroku
- Sí, Ayame lo sé – Le dijo Kagome quien estaba hablando bastante a gusto con Inuyasha – Oye Inuyasha ¿aún visitas el lago?
- Por supuesto que sí.. – Le dijo Inuyasha – aquella vez te dije que ese lago me recordaba a mi madre pero ahora lo visito por un motivo mas fuerte
- ¿qué motivo? – Pregunto Kagome
- Pues, que allí me dijiste la verdad... y allí me siento muy feliz por saber que nuestra amistad es bastante fuerte
- Pues que bueno – Le dijo Kagome – ya también visito el lago, mas bien hoy en la mañana iba para el lago pero vi a Ayame y pues me distraje con ella
- Jajaja, creo que nos deberíamos reunir mas a menudo en ese lugar – Dijo Inuyasha
- Pues yo también lo creo ¿qué te parece si nos vemos hoy en la noche? – Le dijo Kagome – Pero ¿qué hago? – Pensó
- Pues, será que nos veamos esta noche
- Claro – Dijo - ¿Por qué? ¿Por qué me siento así? – Se pregunto así misma

Luego de unas cuantas horas en el templo y de distraerse al ver como Miroku recibía cachetadas constantemente de parte de Ayame y de Sango, sin mencionar a la chica de cuerpo estructural, todos se fueron a sus casa ya que la noche se estaba acercando y debían irse


Cuando Kagome, Sango y Ayame llegaron a la casa Ayame se ofreció a preparar la cena y Sango y Kagome lo aceptaron, pero mientras Ayame preparaba la cena Kagome decidió salir a caminar un rato


- ¡Ahora vuelvo! – Dijo Kagome para salir de la casa – Vaya no entiendo que es lo que me esta pasando... – Se dijo así misma en voz alta - ¿Por qué? ¿Por qué cada vez que lo veo me siento así? – Continuo
- Kagome ¿hablando sola? – Escucho provenir de alguien que conocía muy bien
- ¡Kikyo! ¿Qué haces aquí?
- Pues salí a caminar... – Le respondió – Me parece que ya llego aquella chiquilla llamada Ayame.... Kagura y Kanna me hablaron de ella
- Pues sí ya llego, y será mejor que no la molestes
- Tranquila Kagome, aún espero que lleguen Kagura y Kanna para poder distraerme con ustedes – Le respondió de manera fría y se fue
- ¡Vaya!, pero que fastidiosa es Kikyo, ¿Por qué no se da por vencida? – Volvió a hablar con ella misma – me parece que Sango y yo vamos a tener que darle su lección... Pero tendrá que ser luego ahora voy a comer para poder ver a Inuyasha

Kagome volvió a la casa y durante la cena se mantuvo callada pensando en que iba a ver a Inuyasha y en que n comprendía lo que le pasaba cada vez que lo veía...

- Bueno, ahora me voy a dormir estoy muy cansada – Dijo Ayame mientras se levantaba de la mesa
- Que tengas buenas noches – Le dijo Sango – Kagome yo también tengo sueño así que hasta mañana
- Si, que tengan buenas noches las dos

La noche llego, y ya Kagome había salido de la casa para poder llegar al lago, al llegar vio que ya Inuyasha se encontraba allí esperándola y justo en ese momento la luna brillo con todo su esplendor, la luna que varias veces había sido testigo de algún encuentro de ellos o de algunos suspiros de cada uno...

- Hola Inuyasha – Le dijo Kagome
- Hola que bueno que has venido – Le dijo Inuyasha – en realidad tenía muchas ganas de verte y hablar contigo
- Pero ¿qué cosas dices? – Dijo Kagome mientras se sentaba a su lado – Todos los días nos vemos y todos los días hablamos
- Lo se, pero hacia mucho que no te veía bajo la luz de la luna – Le dijo
- Bueno, pero es porque no nos habíamos vuelto a encontrar
- No, no es cierto, yo he venido un par de veces a este lugar cuando tu estas – Le dijo Inuyasha – Pero por miedo no me acercaba
- Pero, Inuyasha.. tu eres mi amigo sabes que puedes hablar conmigo cada vez que quieras
- Claro... tu amigo... – Le dijo un poco desanimado
- ¿Qué sucede Inuyasha?
- No, nada... Bueno ¿qué quieres que hablemos? – Le dijo
- Pues, no lo se
- Ya lo se... tu cumpleaños se acerca ¿no es cierto?
- Sí, ¿cómo lo sabes?
- Bueno, pues es que Sango lo menciono hace un par de días
- Ah, claro... es dentro de cinco días – Le dijo Kagome sonriendo – voy a cumplir los 20 años
- Pues, que bueno... dime ¿qué quieres de regalo? – Le pregunto Inuyasha
- Pues, no lo se... a mi no me interesan mucho ese tipo de cosas... – Le dijo Kagome – Me interesan las cosas que vienen cargadas de sentimientos, además no me agrada celebrar mi cumpleaños
- Pues entonces ya se lo que te voy a regalar... Pero ¿por qué no te agrada celebrar tu cumpleaños?
- ¿Qué me vas a regalar? – Dijo Kagome cambiando de tema
- Pues, eso es sorpresa vas a tener que esperar –Le dijo Inuyasha – Creo que no quieres hablar de eso - Pensó

Luego de un rato hablando Inuyasha y Kagome se despidieron y cada quien regreso a su casa; Kagome cuando llegó a su casa se acostó en su cama intrigada por el regalo de Inuyasha

- Realmente no me interesan estas cosas pero ¿Por qué estoy tan emocionada por ese regalo? A mi no me gusta celebrar mi cumpleaños ... – Se dijo así misma – Será mejor descansar no quiero preocuparme más de lo que ya estoy – Y así Kagome se quedo dormida

En la casa de Inuyasha el estaba en su habitación observando a las estrellas...

Espero que ese día también me acompañen de la manera que lo hacen ahora – Dijo refiriéndose a la luna y a las estrellas – Esa noche va a ser muy especial... Será mejor dormir – Dijo y se acostó para poder dormir – No, no puedo dormir, aun sigues en mis pensamientos Kagome – Dijo mientras unos suspiros salieron de su boca – Toda tu, aun estas en mi mente... Pero deseo dormir para llenarme de ti en mis sueños – Dijo Inuyasha para luego quedarse dormido

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

¡Amiga! Me gustó mucho este capítulo. Me agrada tú narrativa, en cada detalle que pones de la vida en común de Sango y Kagome se nota la amistad tan profunda entre ellas dos, no es fácil vivir con una amiga, pero ellas se llevan muy bien. Por otra parte, Miroku sí que da risa, es un pervertido de primera. Me gustó la aparición de Ayame. Ah y esa maldita kk como siempre arruinando los momentos con su sola presencia. Me dejas intrigada. ¿Por qué no le gusta celebrar su cumpleaños a Kagome? Y ya quiero saber qué le va a regalar Inuyasha. Me gustó mucho este capítulo, esperaré ansiosa el siguiente. Besos.

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

ta chido tu fic, Miroku tal cual es, y ese hechizo contra Mi Amado Sesshomaru, pobrecito, ya quisiera tar yo para reconfortarlo...

Espero la conti....

Cuidate

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

ayy peor q lido mi inu enrelaida
primera ves q el es el caballeroso no?

jeje y lindo

y sexi
ejem ejem ><

bueno te udo

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

wow :O.O que buena que te quedo la conti me gusto mucho yo espero que inuyasha le pueda dar ese regalo a kagome que sera hay pero que intriga espero que le sigas a la conti :wiiii me despido :chau cuidate :besitos
:kaome2010

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

Hola!!!

Gracias a todos por los posts! He tenido problemas con mi computadora y la están formateando porque tenía virus al parecer mañana me la entregan o talvez pasado mañana así que para esos días estoy publicando la continuación! Muchas gracias por el apoyo!!!!

Bye!!!

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

Hola a todos!!!

Miles de disculpas por haberme retrasado tanto! Pero de verdad que pareciera como si mayo no hubiese sido mi mes!! al menos no con la computadora!!! Pero ya todo está arreglado así que podré continuar con la publicación del fic... Millones de gracias por el apoyo.. Y por haberme retarsado tanto publicaré dos capítulos y mañana otro!


6. Un beso… algo inevitable


En el día siguiente Kagome se despertó bastante apresurada ya que se había quedado dormida y seguramente Sango y Ayame estaban esperando por el desayuno; pero al bajar ya Ayame había preparado el desayuno así que sin decir nada se sentó para desayunar, Sango y Ayame se quedaron calladas y el desayuno estuvo bastante incomodo...


Al terminar de desayunar ellas se arreglaron y salieron para verse con los demás en donde acostumbraban hacerlo, ellas llegaron primero y poco después llegaron los demás


- Hola chicas – Les dijo Rin – Disculpen la tardanza pero es que Inuyasha el día de hoy decidió dormir de mas
- Hola, bueno no se preocupen por eso – Les dijo Ayame – De cualquier manera hace poco que llegamos
- Oigan, ¿qué vamos a hacer hoy? – Pregunto Sesshomaru
- Pues, no lo se – Dijo Sango – Pero yo necesito hablar con ustedes – Dijo – Inuyasha ¿por qué no vas y te quedas con Kagome mientras yo hablo con los demás?
- Ah, claro – Dijo – pero ¿de qué van a hablar?
- Pues.. del cumpleaños de Kagome – Le dijo al oído – Así que ve con ella
- Si, claro... luego me cuentan – Dijo mientras se iba con Kagome
- Bueno chicos como sabrán el cumpleaños de Kagome es dentro cuatro días – Les dijo Sango – Es decir el 11 de agosto
- Vaya, el tiempo si pasa rápido – Dijo Rin
- Claro, pero ¿qué vamos a hacer? – Pregunto Sesshomaru
- Pues, no lo se en realidad a Kagome no le gusta celebrar mucho su cumpleaños – Dijo Sango – ya que hace que ella recuerde que su padre no esta mas con ella
- Pero, hay que hacer algo... va a cumplir 20 años – Dijo Rin – por mas que le duela no puede dejar de celebrar ese
- Si, yo se lo digo todos los años pero ella prefiere simplemente dejar que el día pase de largo
- Pues, este año no será así – Dijo Ayame – Este año vamos a hacerle una fiesta
- Si, es buena idea – Dijo Miroku – Pero Sango ¿no crees que se vaya a molestar?
- Por supuesto que no... eso creo – Dijo – pero eso no importa le vamos a hacer una fiesta sorpresa
- Pero ¿quién la va a distraer para que no llegue a la casa antes de tiempo? – Pregunto Sesshomaru
- Pues, creo que el mas indicado será Inuyasha – Dijo Sango
- Bueno, me parece buena idea – Dijo Rin – Pero cambiando de tema ¿cuándo falleció el padre de Kagome?
- Pues de eso ya cinco años, el murió el 5 de Junio – Les confesó Sango – Ella aun no olvida esa fecha ya que es muy difícil, porque su padre ese día se despidió diciendo que volvería al día siguiente pero en realidad nunca regreso
- Vaya, debió de haber sido un golpe fuerte para ella – Dijo Ayame
- Pues, si ya que esa vez ella tenía el presentimiento de que su padre no debía de irse pero ella no le dijo nada ya que solo pensó que eran cosas de ella
- Pues... si que se debió haber excluido del mundo o tal vez algo así – Dijo Miroku – Ya que como ella tiene la habilidad de las premoniciones y de presentir algunas cosas... y justo en ese momento no hacerle caso a sus poderes
- Pues si, pero las cosas suceden porque tienen que suceder – Dijo Sango – aunque ella muestre siempre un sonrisa cálida yo se que en su corazón aun esta presente la tristeza de haber perdido a su padre... y lo peor del caso es que tres meses antes su querida abuela había fallecido y ella aun no se recuperaba de la tristeza de su abuela
- Vaya, ahora estoy reconsiderando la idea de hacerle una fiesta – Dijo Rin – Me parece que su corazón aun esta de luto
- Pues a mi también me parece eso pero yo la quiero ver feliz nuevamente – Dijo Sango – así que vamos a celebrar su cumpleaños con una fiesta sorpresa


Mientras Sango les comentaba esto a los demás Inuyasha y Kagome hablaban tranquilamente en una plaza cercana


- Kagome... ayer me dijiste que no te agradaba celebrar tu cumpleaños – Le dijo Inuyasha - ¿Se puede saber por que?
- Bueno... creo que será mejor que te lo diga yo a que te lo digan los demás
- ¿A que te refieres?
- Inuyasha no soy tonta yo se que Sango esta hablando con los demás por mi cumpleaños – Le dijo Kagome-Además seguramente Sango ya les esta contando la historia de porque no me gusta celebrar mi cumpleaños y prefiero que lo sepas por mi y no por los demás
- Pues... – ¿Como lo supo? Pensó – Esta bien, dime ¿por qué?
- Bueno, verás hace cinco años el 5 de Junio mi padre falleció y yo me sentí culpable de su muerte ya que yo había tenido el presentimiento de que el no debía salir aquel día, pero justo en ese día no le hice caso a mis poderes, mi padre aquel día se despidió de mi diciendo que volvería el día siguiente, pero nunca regreso... Por favor no digas nada – Le dijo Kagome porque vio que el le iba a decir algo – Yo para ese momento aun no me recuperaba completamente de la muerte de mi querida abuela que había sido tres meses antes, cuando me enteré de la noticia de mi padre... sentí que el mundo se me caía encima pensaba que entonces pronto moriría mi madre y en ese momento me apegue mucho mas a ella – Unas lágrimas empezaron a brotar de sus ojos – Lo se han pasado cinco años pero aun siento que por mi culpa el ya no esta con migo, que por mi culpa el murió
- Kagome... No fue por tu culpa – Le dijo Inuyasha mientras la abrazaba – La vida es así... Yo nunca pensé que pudieras tenar tanto sufrimiento en tu corazón
- Lo que pasa es que... prefiero esconder mis lágrimas y mostrar una sonrisa todos los días – Le dijo Kagome – Porque cuando lloro las personas a mi alrededor se sienten mal – Su voz empezaba a volver a la normalidad ya estaba dejando de llorar – Yo prefiero llorar sola y así nadie lo sabe – Le dijo finalmente con una sonrisa – Por favor no le digas a Sango ni a los demás que estuve llorando
- De acuerdo no les diré pero tienes que prometerme que cada vez que quieras llorar, llorarás y si estas con nosotros pues me avisas y yo te acompaño a algún lugar en donde no estén ellos
- ... Bueno... pero a mi no me gusta llorar y admitir que quiero llorar me va a costar mucho
- Pero, por favor inténtalo – Le dijo Inuyasha – hazlo por mi
- Pues esta bien – Le dijo Kagome – Pero solo porque tu me lo pides
- De acuerdo... Parece que ya terminaron de hablar –Dijo Inuyasha – Ya están viniendo para acá


Los chicos llegaron con Inuyasha y Kagome, y por supuesto Sango se percato que Kagome había estado llorando así que inmediatamente esta le pregunto si había estado llorando, e Inuyasha la ayudo inventando una excusa que a Sango no convenció mucho pero parecía ser cierto; luego de un tiempo hablando se dieron cuenta de que ya se hacía tarde así que decidieron irse a sus casa para verse al día siguiente esta vez en el templo


Sango, Ayame y Kagome llegaron a la casa y Kagome sin decir nada fue a su habitación con la excusa de estar muy cansada


- Padre... – Dijo Kagome al entrar en su habitación – Cuanto te extraño... El cielo parece estar triste – Dijo al asomarse en la ventana – Hoy las estrellas no brillan como en las noches anteriores y la Luna esta escondida detrás de aquellas nubes oscuras; al parecer el cielo esta tan triste como yo – Dijo y unas lágrimas brotaron de sus ojos – Vaya, una vez mas estoy llorando, me parece que después de haber abierto esa puerta es un poco difícil cerrarla... Pero yo me prometí a mi misma no llorar nuevamente por tristeza así mi corazón se este haciendo añicos – Dijo para luego secarse las lágrimas – No lloraré mas, lo siento padre si te hice sentir mal, y a ti también abuela querida... Les prometo que daré mi mejor esfuerzo para poder divertirme o tal vez estar feliz el día de mi cumpleaños – Se sentó en su cama y busco un libro que tenía debajo de su almohada – Creo que es buena idea escribir en mi diario esta promesa para nunca olvidarla – Ella escribe la promesa y guarda nuevamente su diario – Por ahora no tengo hambre solo quiero soñar para descansar mis ojos – Dicho esto se acostó y se quedó dormida


Los días pasaron y cada día dejaban sola a Kagome con Inuyasha y este le preguntaba si necesitaba llorar pero siempre recibía la misma respuesta “No” era lo que le día con una gran sonrisa aunque en esos momentos su alma le pidiera a gritos que llorara; ya había pasado el tiempo y en la noche del 10 de agosto Kagome tuvo un sueño bastante particular


- Kagome... Kagome –Le decía una voz que ella creía conocer
- ¿Quién es?... ¿Quién esta allí? – Pregunto Kagome
- Soy yo Kagome... Es tu padre – Cuando la voz dijo esto Kagome abrió los ojos y se vio en un lugar oscuro en el cual habían dos sillas y en una de ellas estaba sentada una persona – Acércate hija siéntate conmigo
- ¿Padre?... No, no entiendo – Le dijo mientras se sentaba – Es primera vez que sueño contigo
- Porque es primera vez que me necesitas realmente... Hija... No quiero que sufras – le dijo – Yo no morí por tu culpa, solo fueron cosas del destino, tu no eres culpable de nada... Yo estoy bien y quiero que tu también estés bien
- Pero padre es que te extraño tanto – Dijo y unas lágrimas brotaron de sus ojos tanto en el sueño como en la vida real – Te necesito padre, tu siempre eras un apoyo para mi... Yo te quiero demasiado
- Lo se hija, y yo también te quiero... Pero no quiero ver como destruyes tu corazón evitando llorar cuando es lo que mas necesitas hacer – Le dijo para daré un abrazo – Hija... no puedes dejar de expresar tus sentimientos porque tu y solo tu sabes que ellos son los que mas magia poseen sobre todo si hablamos del sentimiento del amor
- Padre... Extrañaba tus abrazos – Le dijo
- Hija mía ya me tengo que ir... Feliz cumpleaños numero 20 – Le dijo – Tu abuela y yo estamos bien así que no te preocupes ella también te desea feliz cumpleaños.. Y por favor prométeme que llorarás cuando tengas ganas de llorar
- Si, padre te lo prometo
- Y por cierto hija... Hoy pueden suceder muchas cosas y debes dejar que sigan su curso normal
- ¿A que te refieres padre?
- Pues, que hoy te podrán pasar muchas cosas y quiero que las experimentes todas... Tal vez así suceda algo muy bueno – Le dijo para luego desaparecer


Kagome se despertó exaltada ya que era la primara vez que su padre aparecía en sus sueños..


- ¿Tal vez deba cumplir lo que le prometí a mi padre? – Dijo – Ya deben de estar por entrar a mi cuarto para felicitarme será mejor que actúe como si estuviese dormida – Lo dijo y se recostó de la cama cerrando sus ojos para que creyeran que estaba profundamente dormida


Poco después, Kagome se quedo dormida solo porque Sango y Ayame no entraban aun y como sus ojos estaban cerrados no pudo hacer otra cosa que quedarse dormida y además quería ver si nuevamente su padre aparecía en sus sueños nuevamente, lamentablemente su padre no apareció y al parecer sus amigas habían decidido actuar con indiferencia ese día solo para que ella no sospechara de la fiesta sorpresa; Kagome decidió entonces levantarse después de despertar desilusionada por que su padre no había vuelto a aparecer en sus sueños; fue al comedor y allí estaban Sango y Ayame al verla le desearon felicidades de manera indiferente, ella no les presto atención, se sentó a desayunar y luego de terminar lo poco que se sirvió en el plato decidió salir a caminar un rato


- Vendré mas tarde – Dijo al salir de la casa
- ¿Qué le sucederá? – Pregunto Ayame - ¿Se habrá molestado porque no la felicitamos como es debido?
- No lo creo, creo que es algo de fuerza mayor – Contestó Sango – Solo espero que no este así el resto del día
- Si, yo también


Kagome camino un rato bastante largo pero camino a ninguna dirección, solo caminaba necesitaba pensar, creía que el lago le ayudaría pero allí iba a recordar a Inuyasha y se iba a distraer por eso prefirió ir a “donde el viento la llevara”; Sango y Ayame se preocuparon por la tardanza de Kagome y decidieron ir a buscarla, en el camino encontraron a Inuyasha, Sesshomaru, Miroku y a Rin les dijeron lo que sucedía y entre todos decidieron buscar a Kagome
Kagome por otra parte estaba bastante cerca del lago pero decidió tomar otro camino para no tener que ir al lago


- Vaya, ya me he tardado bastante – Dijo Kagome – Seguramente ya preocupe a Sango y a Ayame... Será mejor volver a casa y continuar con al indiferencia hasta que sea la hora de la fiesta – Dijo y se fue a la casa


Kagome al llegar a la casa se percató que no había nadie y se imagino que era porque se preocuparon tanto que decidieron salir a buscarla, por eso se quedó en la casa ya que en algún momento ellas iban a regresar a la casa; pasaron veinte minutos y sintió que alguien había llegado, ella estaba tranquilamente acostada en e sillón de la casa pero al sentir que alguien llego decidió sentarse, para su sorpresa Sango al verla corrió para abrazarla


- Kagome – Dijo entre llantos mientras la abrazaba – Me preocupaste mucho
- Sango... Yo dije que iba a regresar – Le contestó – No tenían que salir a buscarme y mucho menos pedirle ayuda a los chicos
- No te preocupes, nos da mucho gusto que te hayamos encontrado – Dijo Rin con una sonrisa – Por cierto Feliz Cumpleaños – Dijo Rin y los demás la felicitaron
- Gracias, Rin, y a todos gracias también – Les dijo con una gran sonrisa
- Oye Kagome, aquí en la entrada hay dos cartas – Le dijo Inuyasha – Y son para ti
- Si, ya creo imaginarme de quien son – Dijo y fue a recoger las cartas – efectivamente una es de mi madre y otra es de la Srta. Sakura, las leeré mas tarde
- Kagome debes prometerme que la próxima vez que salgas no tardarás tanto tiempo – Le dijo Sango – Me preocupaste bastante sobre todo por la actitud que tenías al irte
- Claro, lo prometo – Le dijo sonriente- y discúlpame si me comporte mal pero es que no me sentía muy bien que se diga
- ¿Estabas recordando a tu padre?
- Bueno... si pero fue solo porque soñé con el y me dijo algunas cosas que aun no entendía muy bien – Les dijo – Pero bueno chicos ¿a dónde vamos a ir hoy?
- Lo sentimos Kagome, pero hoy tendrás que salir con Inuyasha ya que nosotros tenemos algunas cosas de las cuales encargarnos – Le dijo Rin
- Ah.. – Dijo – Así que ¿me van a distraer con Inuyasha? – Pensó – Bueno de acuerdo vamos Inuyasha
- Claro


Inuyasha y Kagome salieron y los chicos aprovecharon el momento para arreglar las cosas; Kagome hablo un rato con Inuyasha y mas de una vez cual sería su regalo pero el solo le decía “Espera... en la noche te lo daré” a lo que ella respondía con un “de acuerdo” muy inconforme; pasaron unas cuantas horas y en el cielo se podía observar el atardecer, Inuyasha y Kagome para ese momento estaban en una colina cercana a la ciudad y desde allí admiraron el atardecer


- Kagome ¿has vuelto a ir al lago? – Le pregunto Inuyasha
- No, no e podido ¿y tu?
- Voy cada vez que puedo – Le dijo – Esta noche quiero que vayas conmigo
- De acuerdo, pero va a ser difícil escaparse de los demás
- Claro que no, van a estar bastante distraídos charlando como para percatarse que no estamos
- Bueno, si tu lo dices – Le dijo – Pues entonces iremos esta noche
- Si, que bueno... Pero creo que mejor regresamos ya debe de estar todo listo


En el camino Kagome pensaba un poco acerca lo que había sucedido y lo que su padre le había dicho en el sueño


- Padre ¿a esto te referías?... ¿A que debía de aprovechar y dejar que siguieran su curso las cosas que podían suceder hoy en la noche... en el lago? – Se preguntaba
- Kagome, ya llegamos recuerda que debes actuar sorprendida
- Si.. lo se Inuyasha – Le dijo con una sonrisa – Abre la puerta
- De acuerdo – Inuyasha abrió la puerta y todo estaba oscuro
- ¡Vaya! Me parece que no hay nadie en casa – Le dijo Kagome
- Pues, eso parece – Le contesto Inuyasha
- ¡¡SORPRESA!! – Exclamaron todos para salir de sus escondites y alumbrar la casa nuevamente
- ¡Vaya! Que susto – Dijo Kagome fingiendo – Muchas gracias chicos realmente pensé que no harías nada para mi cumpleaños Sango
- Pues ¿cómo crees eso? Sabes que eres como mi hermana – Le dijo Sango – Además hacia ya cuatro años que no celebrabas tu cumpleaños
- Si, lo se pero dejemos eso en el pasado y vamos a disfrutar de la fiesta
- De acuerdo – Respondieron todos al unísono


Después de un largo rato charlando con los chicos Inuyasha se le acerco a Kagome para poder ir al lago y como había dicho Inuyasha antes los demás ni se dieron cuenta que ellos dos habían salido


- Bueno, Kagome ahora quiero que cierres tus ojos – Le dijo Inuyasha
- De acuerdo – Le contesto y cerro sus ojos – Pero no vayas a hacer que me caiga ni nada por el estilo
- Claro que no solo confía en mi
- Si, yo confío en ti Inuyasha


Inuyasha la guió por todo el camino, hasta el lago y cuando llegaron Kagome sintió un olor a rosas por todo el lugar


- Ya puedes abrir los ojos – Le dijo Inuyasha
- De acuerdo – Kagome abrió sus ojos y se quedo impresionada por lo que veía, en todas partes habían rosas rojas y en el lago se podía ver el reflejo de la luna llena que esa noche en particular brillaba mas que nuca con la ayuda de cientos de estrellas; y además gracias a la leve brisa que había en el lago el olor de las rosas era mas fuerte y algunas rosas perdían sus pétalos – Que... Que hermoso
- Feliz cumpleaños Kagome – Le dijo Inuyasha con una gran sonrisa
- Gracias Inuyasha, que feliz me siento
- No tienes porque agradecerme ya que esto es solo la primera parte de tu regalo
- Pero ¿Qué falta?
- Ya verás – Le dijo Inuyasha
- De acuerdo
- Kagome... ¿Quieres bailar con migo?
- Inuyasha... Pero no hay música
- ¿Acaso es tan necesaria? – Le dijo Inuyasha que ya estaba tomando a Kagome de la cintura para poder bailar
- Pues, creo que no


En este momento empezaron a bailar y al parecer el viento les creo una sinfonía, la cascada esta vez hacía fuertes sonidos pero estos eran opacados y cambiados de tono por el viento, bailaron y bailaron pero luego se separaron y se sentaron entre la rosas


- Inuyasha ¿Cómo supiste que me encantaban las rosas rojas y sobre todo que yo no podía negar una pieza de baile ya que me encanta bailar?
- Pues... Me lo dijo el viento – Le dijo para sonreír de manera pícara
- Inuyasha ... Por favor dímelo
- Kagome, tu eres una hechicera ¿por que no crees que el viento me lo pudo decir? – Le dijo Inuyasha – Después de todo las palabras se las lleva el viento
- Bueno, no preguntare nada mas solo quiero estar aquí
- Kagome.. Hay algo que te quiero decir – Le dijo Inuyasha par ponerse frente a ella
- Si me puedes decir cualquier cosa
- Kagome... Esto es muy importante y sería la ultima parte de tu regalo – Le dijo y se acerco mas a ella – Kagome... Yo... Yo te amo y creo que te amo desde el primer momento en que te vi
- Inuyasha... No, yo no puedo corresponderte y lo sabes muy bien
- Si, lo se... Pero por favor solo permíteme – En ese momento se acerco y le dio un beso que inmediatamente fue correspondido por ella


Justo en ese momento el viento soplo aun mas fuerte y muchos pétalos de las rosas crearon un remolino alrededor de ellos, al parecer esa noche todos los elementos estaban de acuerdo con ese beso, que estaba lleno de amor, ternura y pasión.


7. Los celos


Después de aquel beso Kagome se quedo sencillamente sin palabras no sabía porque había correspondido ese beso cuando se supone que a ella no le debe gustar el, y mucho menos sabia porque su corazón al separase de ese beso su corazón empezó a latir a mil por hora; luego del beso se quedaron callados ninguno sabía que decir, decidieron volver a la fiesta y nadie se percato que ellos no habían estado por largo tiempo...


Pasaron unos cuantos días y Kagome no sabía que decirle a Inuyasha cada vez que lo veía su corazón se aceleraba pero ella no quería admitir que lo que sentía era el sentimiento mas bello de todos el que florece después de la adversidad, el sentimiento que puede nacer en cualquier momento... El amor, se negaba a admitir aquel sentimiento ya que ella no podía estar enamorada de Inuyasha porque nunca podrían estar juntos debido a la “Maldición” de las hechiceras...


Seis días después de la fiesta de Kagome, ella se encontraba con sus amigos pero sintió que debía ir a la casa así que en compañía de todos fue a la casa; se encontraba un poco alarmada tenía el presentimiento de que algo importante sucedería, entro a su habitación y allí sobre su mesa de noche estaban dos cartas, la carta de felicitación de la Srta. Sakura y la de su madre, en ese momento empezó a leer la de su madre


Querida Kagome:

Hija mía, te deseo un muy feliz cumpleaños... Espero que el día de hoy si puedas disfrutar de el, recuerda hija que nosotros te queremos mucho y deseamos tu felicidad, si tu estas triste nosotros sentimos tu tristeza y durante estos días hemos sentido mucha nostalgia ¿estas bien?

Hija recuerda tu no eres la culpable de la muerte de tu padre así que ya deja de preocuparte por eso y vive tu vida con verdadera felicidad

Bueno, se despide:
Tu madre que te adora


Cuando Kagome termino de leer la carta de su madre se asomo por la ventana y observo el cielo; luego entraron todos a la habitación de Kagome y se percataron que estaba llorando ella al verlos sonrió y empezó con la carta de la Srta. Sakura


Querida Kagome:

Bueno Kagome primero que nada Felicidades en tu cumpleaños numero 20, tu sabes que yo no soy de ese tipo de personas que hacen un testamento para una felicitación así que prefiero ir directo al grano, así que Felicidades

Ahora por otra parte un alumno de la escuela de magia de mi querido Syaoran va a llegar a tu casa dentro de seis días así que te agradezco que estés pendiente de el y que lo integren al grupo como hicieron con Ayame, por cierto se llama Kouga Satoshi

Bueno se despide:
La Srta. Sakura Reed


Cuando Kagome termino de leer esta carta sus ojos eran todo un poema, las manos le temblaban y se repetía constantemente “no, puede ser... es hoy”


- Kagome ¿te pasa algo? – Le pregunto Sango
- Es... es hoy – Seguía diciendo Kagome
- ¿Qué Kagome? ¿Qué es hoy? – Le pregunto Rin
- Hoy... hoy llega uno de los alumnos de Syaoran Reed
- ¡¿Qué?! – Dijo Sango - ¿Cómo lo sabes?
- Pues, es que la Srta. Sakura en la carta dice que llega dentro de seis días y esta carta me la mando en mi cumpleaños
- ¡¡¿QUÉ?!! – Dijo Ayame – Kagome ¿Por qué no habías leído la carta antes?
- Bueno porque... – En ese momento recordó que después del beso con Inuyasha se le habían olvidado las cartas y un leve sonrojo se apoderó de sus mejillas – Porque... no lo se me distraje en la fiesta
- Bueno, eso ya no importa, lo que tenemos que hacer es... – Dijo Sango – chicos disculpen que les pidamos ayuda pero. ¿Serían tan amables de ayudarnos a arreglar el cuarto de Kouga? Sobre todo, Inuyasha, Miroku y Sesshomaru ya que son hombres
- Si, claro sabes que cuentas con mi ayuda Sango – Le dijo Miroku
- Si claro, Inuyasha y yo también ayudamos – Dijo Sesshomaru – Después de todo ¿Para que están los amigos?
- Si, y como yo también soy amiga de ustedes también ayudo – Dijo Rin
- Bueno, muchas gracias y ahora Kagome tu vas a buscar a Kouga porque a ti te lo avisaron y esperemos que no haya llegado aun – Dijo Sango – y tu Ayame te quedas para ayudar
- De acuerdo... Pues entonces ya me voy a buscar a Kouga – Dijo Kagome para salir de la casa
- Muy bien pues ahora ¡A trabajar! – Dijo Sango
- Sango... Me encanta como tomas el control de todas las cosas – Le dijo Miroku y ante tal comentario Sango se sonrojo un poco
- Pero... ¡¿Qué cosas dices Miroku?!... – Dijo Sango aun sonrojada - ¡Ponte a trabajar!
- De acuerdo, ya voy a ayudar – Miroku sale de la habitación dejando a Sango totalmente sola
- Ese Miroku... Si es tonto, se ha estado comportando demasiado encantador conmigo... –dijo Sango – Hay Miroku ¿Qué voy a hacer contigo?...


Mientras todos arreglaban una habitación para Kouga, Kagome buscaba a un chico que pareciera no conocer la ciudad para preguntarle si el era Kouga; en realidad ya había encontrado varios pero ninguno era Kouga, repentinamente observó a un chico de cabello negro, alto y con apariencia bastante peculiar entonces decidió acercársele


- Hola mucho gusto – Le dijo Kagome - ¿Tu nombre es Kouga Satoshi?
- Si, mi nombre es Kouga... tu nombre debe de ser el mas angelical de todos – Le dijo
- Jajaja, ¿qué cosas dices? – Le dijo Kagome un poco sonrojada – Mi nombre es Kagome Higurashi
- Ves tenia razón – Le dijo – Gracias Kami por mandarme a una chica tan hermosa
- Pero ¿de que hablas? – Le dijo Kagome – Será mejor que me acompañes te vas a quedar con nosotras
- Pues, no sabes la dicha que me da que me vaya a quedar en compañía de una mujer tan hermosa – Le dijo Kouga – Pero ¿mencionaste nosotras?
- Si, yo vivo con dos amigas Sango y Ayame
- Bueno, seguramente son muy lindas pero tu serás la mas bella – Le dijo y le tomo una mano para besarla – Vamos
- Claro... – Le dijo sonrojada – Vamos a casa


Cuando Kagome y Kouga llegaron a la casa ya todos habían terminado de arreglar las cosas, y mas de una vez acorralaron a Rin y a Sango para darles un beso pero ellas se apartaban de Miroku y de Sesshomaru, aunque en ese momento Rin hubiese preferido darle un beso a Sesshomaru pero eso hubiese incrementado el amor que sentía por el y así no se podría seguir controlando; y Sango se alejaba de Miroku pero sentía la necesidad de besarlo pero no quería admitir que se había enamorado de Miroku; cuando entraron Kouga y Kagome ella se los presentó a los demás y Kouga admitió que Sango y Ayame eran bastante lindas y que Rin también lo era


- Si, Kagome tus amigas son muy bonitas – Dijo Kouga en voz alta y las chicas se sonrojaron – Pero tu eres la mas hermosa de todas
- Jajaja, gracias por el cumplido Kouga – Le dijo Kagome sonrojada – Pero, deja ya de halagarme tanto porque me voy a creer lo que me dices
- Pues, será mejor que te lo creas – Le dijo Kouga y le tomo las dos manos para acercarla hacia el – Las palabras se quedan cortas para describir tu hermosura – Le dijo y se le acerco para besarla pero en ese momento Inuyasha los interrumpió
- Porque no dejan las escenas para mas tarde cuando nosotros no estemos – Dijo Inuyasha en tono sarcástico
- Kouga por favor suéltame – Le dijo Kagome – chicas muéstrenle su habitación a Kouga
- Kagome ¿Por qué no se la muestras tu? – Dijo Inuyasha completamente celoso
- ¡¡¡Inuyasha!!! ¡ERES UN TONTO! – Le dijo Kagome y se encerró en su habitación
- Inuyasha ¿Por qué le dijiste eso? – Le pregunto Sesshomaru después de que las chicas habían ido a mostrarle su habitación a Kouga
- Porque.... pues porque... – Musito Inuyasha
- Porque estas celosos – Completo Miroku – eres increíble Inuyasha aunque sea tu ya la besaste nosotros aun no lo hemos hecho
- Si, hoy lo intentamos pero siempre se alejaban de nosotros – Dijo Sesshomaru
- Bueno, si y tengo que decirles que fue la experiencia mas increíble que he vivido – Dijo Inuyasha recordando aquel beso – Pero aun ese tonto de Kouga me da mucho coraje, quería besar a Kagome y eso no se lo iba a permitir
- No creo que ella tampoco se lo iba a permitir – Dijo Miroku – Se ve que ella tiene ojos solo para ti
- Bueno Inuyasha me parece que vas a tener que disculparte con Kagome por lo que hiciste – Dijo Sesshomaru
- Si, será lo mejor pero no creo que me deje entrar a su habitación ya que debe de estar un poco molesta por lo que le insinué
- ¿Un poco molesta? – Dijo Sango quien acababa de regresar con las chicas y con Kouga – Seguramente ya se esta desquitando con todo lo que hay en su habitación o tal vez hasta llorando, no me sorprendería ya que hoy la vimos llorar
- ¿Tu crees que este llorando? – Pregunto Inuyasha preocupado
- Pues, si eso sería lo mas razonable – Dijo Sango – Después de todo me e dado cuenta que ella te quiere no solo como un amigo
- Inuyasha, será mejor que te disculpes con Kagome – Dijo Rin
- Si, ya voy – Dijo Inuyasha y se fue para la aviación de Kagome – Kagome puedo pasar – No recibió respuesta – Kagome estas allí
- Si, aquí estoy – Dijo Kagome entre sollozos
- Kagome... ¿Estas llorando?
- No... – Dijo Kagome pero su voz decía todo lo contrario
- Kagome, ¿Me permites pasar? – Volvió a preguntar
- La puerta esta abierta – Respondió Kagome


Cuando Inuyasha entro a la habitación de Kagome ella se encontraba acostada boca abajo en su cama llorando; Inuyasha al verla así cerró la puerta de la habitación y se sentó al lado de ella .


- Kagome... Disculpa si te hice sentir mal – Le dijo Inuyasha – De verdad que soy un perfecto tonto
- Si lo eres... – Le dijo Kagome y se sentó al lado de Inuyasha
- Lo siento mucho - Le dijo Inuyasha y le dio un abrazo - ¿Me puedes perdonar?... No me gusta verte llorar por mi culpa por favor perdóname
- ... Inuyasha me dolió mucho lo que me dijiste – Le dijo Kagome – Kouga es solo un nuevo amigo que acaba de llegar tal vez sea demasiado confiado pero el es un nuevo amigo y nada mas
- Lo se, pero no lo puedo evitar Kagome Yo Te Amo, y verte así de cerca con el pues... – Dijo Inuyasha – Pues, me puso demasiado celoso
- Inuyasha... sabes que yo no puedo corresponderte... – Dijo Kagome y su comentario desilusionó a Inuyasha - ...Pero las personas no podemos engañar a los corazones y mucho menos a los que están enamorados, Inuyasha tu me gustas mucho pero nosotros no podemos tener nada porque yo podría desaparecer así como lo hizo tu madre
- Kagome... Con solo saber que tu gustas de mi es suficiente – Le dio Inuyasha con una sonrisa
- Bueno Inuyasha creo que va a ser mejor que salgamos, me imagino que todos están en la puerta de mi habitación tratando de escuchar nuestra conversación – Dijo Kagome y cuando abrió la puerta allí estaban todos pero ellos no pudieron escuchar nada de lo que hablaban – Bueno chicos vamos a mostrarle la ciudad a Kouga
- Buena idea yo quiero ir con tigo – Dijo Kouga mientras tomaba de la mano a Kagome, a Inuyasha se le notaban los celos en la mirada así que Kagome soltó a Kouga
- Mejor, vamos como el grupo de amigos que somos – Dijo Kagome
- De acuerdo – Contestó Kouga mientras salían de la casa


Llevaron a Kouga al templo en donde mas de una mirada de odio y celos por parte de Inuyasha las sintió Kouga, Sesshomaru y Miroku estaban, muy divertidos con el asunto pero a la vez trataban de alejarse con Rin y Sango para poder hablar con ellas de lo que sentían aunque Rin ya sabía que Sesshomaru la quería el se lo quería volver a demostrar pero ella se alejaba y se iba con Kagome o con Ayame; por otra parte Miroku intentaba confesarle a Sango lo que sentía por ella pero siempre que veía a una chica se distraía un poco lo cual ocasionaba una buena cachetada de parte de Sango.


Luego fueron al mercado en donde tuvieron mucha diversión con Inuyasha el celoso ya que no había manera de que ocultara los celos que sentía; por ultimo fueron al lago Kouga demostró que le había gustado aquel lugar y le preguntó a Kagome si a ella le gustaba, Kagome se sonrojo ante la pregunta ya que recordó el beso con Inuyasha y lo que hizo fue responderle con una sonrisa y observó a Inuyasha que estaba un poco perdido tal vez porque estaba pensando en el beso; un intercambio de sonrisas entre Inuyasha y Kagome se hizo presente y Kouga se dio cuenta así que para jugar con los celos de Inuyasha, decidió abrazar a Kagome, Kagome se sonrojo un poco e Inuyasha estaba que mataba a Kouga


- Kagome – Le dijo Kouga - ¿Te gusta ese tal Inuyasha verdad?
- Pues..
- No es necesario que lo digas, yo ya lo se – Le dijo Kouga – Yo soy tu amigo de ahora en adelante
- Pues gracias – Le dijo Kagome
- ¿No se te van a complicar las cosas con la “Maldición2 de las hechiceras?
- Pues si por eso decidimos ser solo amigos – Le dijo Kagome un poco desanimada
- Tranquila, en algún momento van a poder estar juntos eso lo se – Le dijo Kouga
- Gracias, por los buenos deseos – Le dijo Kagome – Pero creo que si las miradas mataran ya estarías bajo tierra
- Si, lo se Inuyasha tiene una mirada fuerte – Dijo Kouga – Será mejor que te suelte y que tu te vayas con Inuyasha
- Gracias – Le dijo Kagome mientras se iba con Inuyasha – Inuyasha ya deja de mirarlo así
- Esta bien, pero que no te vuelva abrazar de esa manera y mucho menos en este lugar tan especial – Le dijo Inuyasha
- Tranquilo el y yo solo somos amigos y ya lo hemos dejado claro
- Pues, que bueno –Le dijo Inuyasha
- Inuyasha una pregunta
- La que quieras – Le contesto
- ¿a Miroku le gusta Sango?
- Pues si, ¿cómo te diste cuenta?
- Las mujeres somos así, nos damos cuenta de las cosas – Le dijo Kagome con una sonrisa
- Pues, me parece que Sango no se a dado cuenta – Le dijo Inuyasha
- Claro que se dio cuenta es solo que ella al igual que Rin y yo no nos debemos enamorar de las personas sin poderes mágicos – Le dijo Kagome- Pero al corazón no lo podemos controlar, Sango esta enamorada de Miroku pero no quiere darse cuenta de la realidad
- Vaya ¿Cómo sabes todo eso?
- Y ate lo dije Inuyasha las mujeres nos damos cuenta de las cosas – Le dijo Kagome – Además yo puedo leer los sentimientos de una persona a través de la mirada
- Pues, ¿por qué no te habías dado cuenta de que yo te amaba y que te amo? – Le dijo Inuyasha
- Pues, porque hay ciertas cosas que no me gusta admitir – Le dijo – Ya lo verás Rin y Sesshomaru pronto se darán ese beso que tanto anhelan y el pobre Miroku pues va a tener que aprender a no distraerse con otras chicas para poder ganar la confianza de Sango y poder besarla
- Bueno, que alegría pero me parece que a Miroku le va acostar un poco – Dijo Inuyasha entre risas
- Pues, si pero si de verdad quiere a Sango lo tendrá que hacer
- Me parece que les voy a tener que decir lo que me estas diciendo ahora
- Pues, si para eso te lo decía – Le dijo Kagome - ¡Chicos ya es hora de regresar se esta haciendo tarde!
- Si, ya se esta acercando la noche – Dijo Inuyasha – ¿Nos vemos mas tarde? – Le pregunto Inuyasha a Kagome en un susurro
- Por supuesto – Le contestó


Todos regresaron a sus casa a dormir y mientras dormían Inuyasha y Kagome estaban en el lago conversando y confesándose lo mucho que se amaban, luego de unos cuantos besos Kagome decidió regresar a casa e Inuyasha también....


Una nueva noche había sido testigo de las confesiones de estos dos enamorados que probablemente no iban a poder estar juntos.

Muchas gracias por el apoyo... Espero que les hayan gustado los capítulos y esperen a mañana para el próximo!

Bye!!!

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

¡Hola amiga! ¡Qué alegría saber de ti!

Me gustaron mucho estos dos capítulos. Jamás me hubiera imaginado que las muertes de su abuela y su padre le hubieran causado tanto dolor a Kagome, al grado de que cinco años después siguiera sin poder reponerse. Me gustó que su padre le hablara en sueños para que ella lo pudiera superar.

El pasaje en donde Kagome e Inuyasha se ven en el lago, bailan y al final se besan, te quedó de lo más tierna y bonita que pueda haber. Fue muy bella.

La aparición de Kouga me sorprendió, pero también, lo comprensivo que se portó con Kagome, haciéndose a un lado para que ella pudiera disfrutar su amor con Inuyasha, aunque esté prohibido, pensé que tomaría ventaja de la condición de Inuyasha.

Es lindo ver como Miroku y Sesshoumaru siguen intentando con Sango y con Rin respectivamente. Espero que Miroku entienda y deje de distraerse con otras chicas.

Que al final Inuyasha y Kagome aceptaran y se confesaran su amor y se besaran quedó tiernísimo.

Te repito que me gustaron mucho estos capítulos, llevas muy bien la historia. Cuídate mucho por favor.

Estaré esperando tu siguiente capítulo con ansias.

BESOS!!!!!!!!!!!!!

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

nooo


xq no podrian estar justos a

cielso

wow!! te quedo buenisima esa conti eh amix

siguele prontis

bye

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

Hola!

Muchas gracias por los posts! Me agrada que les siga gustando la historia... Hoy les publico 2 capítulos más porque no pude publicar cuando dije! Espero que los disfruten

8. Kagura, Kanna y Kikyo ahora juntas


Un nuevo día comenzaba estaban Sango, Ayame, Kouga y Kagome disfrutaban de un delicioso desayuno que había preparado Ayame, para luego salir con sus amigos, pero antes de salir de la casa Kagome tuvo un mal presentimiento y se lo transmitió a las chicas ellas le dijeron que estarían pendientes de cualquier cosa, y decidieron salir de la casa, llegaron al templo que era el lugar donde se iban a ver e inmediatamente Miroku y Sesshomaru acorralaron a Kagome para hablar con ella e Inuyasha se quedo con los demás para distraerlos


- Kagome ¿Cómo sabes todo eso que nos dijo Inuyasha? – Le pregunto Sesshomaru
- Pues, yo se lo dije a Inuyasha es porque las mujeres tenemos esa habilidad
- Pero, es que lo dices ahora tan confiada – Replicó Miroku
- Chicos, chicos tranquilos, les diré le verdad – Les dijo Kagome – Pero debe de estar Inuyasha también ya que no quiero tener secretos con el
- De acuerdo yo lo busco – Dijo Sesshomaru, entro al templo y le dijo a Inuyasha lo que Kagome había dicho así que el salió con Sesshomaru – Aquí esta mi hermano
- Bueno, ahora si se los puedo decir – Dice Kagome – Lo que sucede es que yo tengo sueños
- Como todas las personas – La interrumpió Miroku
- Si, como todas las personas pero mis sueños son en realidad premoniciones – Dijo Kagome – Bueno yo soñé tu Sesshomaru besabas a Rin y que Miroku besaba a Sango
- Pero entonces ¿Cómo sabes cuando es un sueño y cuando es una premonición? – Le pregunto Sesshomaru
- Pues, porque las premoniciones son totalmente distintas a los sueños ya que ellas vienen cargadas de energía en cambio los sueños son simples divagaciones del alma – Les dijo Kagome- Además yo conozco a Rin y sobre todo a Sango que la conozco de toda la vida y yo se que ellas los aman a ustedes pero recuerden que nosotras las hechiceras tenemos una “Maldición” como historia de amor y por eso no podemos estar con las personas sin poderes
- Si, eso lo sabemos – Dijo Inuyasha
- Vaya, que suerte tiene Ayame – Dijo Kagome
- ¿Por qué lo dices? – Le pregunto Sesshomaru
- Pues, porque Ayame y Kouga e van a enamorar y pues ella no tendrá que padecer de este dolor tan horrible que es amar a alguien con quien no puedes estar – Dijo Kagome y los chicos asintieron con la cabeza – Pero bueno... Será mejor ir al templo y recuerda Miroku debes comportarte si realmente amas a Sango compórtate
- Si, lo se y muchas gracias Kagome – Le dijo Miroku
- Aun tengo este mal presentimiento – Pensó Kagome mientras entraba al templo


En el templo estaban muy tranquilos Sango, Kagome, Rin y Ayame siempre se quedaban admirando un paisaje que se podía ver por una de las ventanas del templo, y esta vez no fue la excepción solo que esta vez Kagome estaba abrazando a Inuyasha mientras contemplaba aquel paisaje, Sango estaba al lado de Miroku, Rin estaba con Sesshomaru y Ayame con Kouga


- Sango, tu eres alguien muy especial para mi – Le dijo Miroku
- Gracias, por las lindas palabras... Pero ¿No crees que la vista esta hermosa? – Le dijo Sango un tanto apenada
- Si, pero no mas hermosa que tu Sango
- Miroku... Por favor no hagas esto – Le dijo Sango – No vayas a decir que me amas porque no tendré mas remedio que besarte
- Pues entonces... Sango Te Amo, Te Amo con todo mi ser – Le dijo Miroku y se para enfrente de ella
- Mi... Miroku... Solo lo dices para que yo te bese
- Claro que no... Lo digo porque es la verdad, porque es lo que siento – Cuando el dijo esto el iba a continuar hablando pero los labios de Sango lo callaron


Por otra parte estaba Rin hablando muy amenamente con Sesshomaru pero el se empezó a poner empalagoso


- Rin, yo te amo – Le dijo Sesshomaru
- Lo se Sesshomaru... tu sabes que yo también te amo – Le dijo Rin
- Rin... tu eres la mujer mas importante y mas especial que tengo en la vida, tu eres mi sol, mi luna, mis estrellas, eres el aire que respiro sencillamente eres mi vida
- Sesshomaru, por favor no digas mas – Le dijo Rin con unas lágrimas en su cara
- No llores mi vida, solo digo la verdad – Le dijo Sesshomaru
- Sesshomaru ¿Por qué haces esto? – Le dijo Rin – Sabes que no te puedo corresponder pero yo lo hago, sabes que no puedo estar con tigo
- Lo se pero te tengo que decir lo que siento – Le dijo Sesshomaru y la acorralo en una pared - ¿No crees?
- Si... pero por favor Sesshomaru retrocede un poco – Le dice Rin porque el ya estaba a escasos centímetros de sus labios
- ¿Por qué? – Le pregunto Sesshomaru
- Por favor... Sesshomaru – Le dijo Rin pero el la callo dándole un tierno beso que fue correspondido


Por otra parte del templo estaban Ayame y Kouga hablando muy amenamente y se dieron cuenta que Sango y Miroku se besaban al igual que Rin y Sesshomaru; ante esto ellos se vieron a la cara y un leve sonrojo se apoderó de sus mejillas, al parecer el amor empezaba a tacar a estas dos personas...


Por otra parte estaba Inuyasha con Kagome hablando


- ¡Lo sabia! – Exclamó Kagome – Por fin se han besado
- Si, finalmente se besaron – Le dijo Inuyasha con una sonrisa
- Si... como nosotros, pero no podemos hacer nada mas – Le dijo Kagome
- Pero, no importa – Le dijo Inuyasha – Quiero decirte algo muy importante
- Lo que quieras Inuyasha
- Escúchalo bien, yo no soy así de cursi pero me gusto lo que escribí el día de tu cumpleaños después de aquel beso
- ¿Qué escribiste? – Le pregunto Kagome
- Aquí voy: “Nunca supe que podría sentirme así, como si nunca antes hubiese visto el cielo, quiero desvanecerme dentro de tu beso, cada día te amo mas y mas, escucha mi corazón ¿Puedes oírlo cantar diciéndome que te de todo mi ser?, las estaciones podrán cambiar de invierno a primavera pero yo te amo hasta el fin del tiempo” - Cuando Inuyasha termino de decir esto a Kagome se le salieron unas cuantas lágrimas y lo que hizo al reaccionar fue darle un dulce y tierno beso

- Gracias Inuyasha - Le dijo Kagome
- No tienes porque agradecerlo – Le dijo Inuyasha


Cuando todos salieron del templo aquel presentimiento volvió a reinar el corazón de Kagome, sentía como si alguien la observara o tal vez alguien estaba por llegar. Sus dudas fueron rápidamente aclaradas, porque al estar en el mercado de la ciudad vio a dos mujeres que acompañaban a Kikyo, esas mujeres ella las conocía muy bien


- ¡No! – Exclamó Kagome – Ya llegaron
- ¿Quiénes? – Le pregunto Sango que todavía no se había dado cuenta de que cerca de ellas se encontraba Kikyo
- Ya están aquí, Kanna y Kagura – Les dijo Kagome – Y tan bien que habíamos estado durante estos días

Kanna, Kagura y Kikyo se acercaron hacia donde estaban ellas y se dirigieron estrictamente a Kagome


- Kagome... espero te de alegría ver a mis viejas amigas – Le dijo Kikyo
- Por supuesto que no – Le dijo Kagome - ¿Cómo me voy a arreglar de que ellas estén aquí?
- Bueno, es que yo pensé que te gustaría saber que ahora si te haremos la vida imposible – Le contesto Kikyo – Además ya sabemos que ustedes dos son los hijos de aquella mujer llamada Izayoi – Les dijo Kikyo a Sesshomaru y a Inuyasha
- ¿Qué tiene de malo es? – Le dijo Inuyasha
- Pues que ustedes no tienen poderes, por ende no deberían tener nada con ellas –Dijo Kagura
- No tenemos nada con ellas – Les dijo Sesshomaru
- Por favor, ¿crees que no sabemos que ustedes se aman? – Dijo Kanna – En algún momento tendremos las pruebas para que la Srta. Sakura las lleve lo mas lejos posible para que sufran
- Pues si estas tan segura de eso ¿Por qué no nos vigilan? De cualquier manera ya lo han estado haciendo – Les dijo Kagome
- Bueno, no es mala idea pero nosotras también tenemos nuestras vidas – Dijo Kagura – Aunque nos encanta fastidiarlas
- Pero no se preocupen, estaremos en contacto – Les dijo Kanna y sin mas la tres se fueron
- ¡Huy! Pero ¡que molestas son! – Dijo Sango
- Si, que coraje me da – Dijo Rin – Yo no las conocía pero vaya si que son fastidiosas yo pensaba que Kikyo era bastante pero ahora las tres juntas pues, me quedo sin palabras
- Si, pero que bien te defendiste Kagome – Dijo Ayame – Por supuesto estoy acostumbrada a esas tres y Sango también
- Si, lástima que no estaba muy pendiente de eso – Dijo Sango un poco sonrojada viendo a Miroku
- Bueno, lo que me intriga es ¿qué tiene de malo ser hijo de Izayoi? – Dijo Sesshomaru
- Bueno...... es que Izayoi fue la que se caso con un humano... – Dijo Kagome un poco dudosa
- Ahh, bueno pero no es tan malo eso – Dijo Kouga – Después de todo el amor no es algo que se puede olvidar así nada mas
- Si, y eso es lo que les molesta a Kanna, Kagura y a Kikyo... – Dijo Kagome – Que nosotras tengamos a una persona a la cual amar
- Pues, me parece que se les va a hacer difícil encontrar a alguien que las ame – Dijo Sesshomaru riéndose
- Pues, para que lo veas si les a costado sobre todo con los que ellas aman – Dijo Sango
- ¿Ellas aman a alguien? – Pregunto Ayame
- Pues, si son Bankotsu, Renkotzu y Naraku – Dijo Sango – Pero ellos no les prestan atención
- Si, pero es por esa actitud que tienen – Dijo Kagome
- Pero es que ¿quién les prestaría atención a ellas? – Dijo Miroku
- Quien sabe – Contesto Rin – Pero no nos preocupemos por ellas mejor ya vamos a continuar con nuestro paseo
- Claro! Será lo mejor


Continuaron con su paseo en el cual varios abrazos y suspiros de parte de las parejas incomodaron un poco a Kouga y a Ayame; al finalizar el paseo, porque ya era tarde, todos se despidieron con un tierno beso de parte de sus amados


Un nuevo día había transcurrido en la vida de estas hechiceras enamoradas; pero esta vez una duda quedo en el pensamiento de Kagome “¿Qué irán a hacer Kikyo, Kanna y Kagura?”, pero prefiere no hacerle caso a esos pensamientos y acostarse a dormir con las palabras dichas por Inuyasha en el templo... Leves suspiros se escapan de la boca de esta hechicera enamorada quedándose profundamente dormida al igual que sus amigas enamoradas


Por otra parte también están los chicos enamorados incapaces de dormir pensando en lo maravilloso que había sido ese día; luego de un buen rato de insomnio se quedaron dormidos con la imagen de su amada en la mente...


Así nuevamente una noche llena de estrellas fue testigo de una demostración de amor de todos los enamorados....








9. Llega la Srta. Sakura


La siguiente mañana Kagome fue la primera en levantarse por culpa de un sueño bastante extraño...


En el sueño llegaba la Srta. Sakura a visitarlas ella hablaba de algo pero las palabras eran incomprensibles sus labios se movían pero no emitía ningún sonido; fue la primera vez que tenía un sueño como ese, estaba bastante intrigada ya que no supo que les decía la Srta. Sakura y mucho mas porque la Srta. Las visitaba... No podía distinguir si había sido un sueño o una premonición y eso era lo que mas intriga le ocasionaba...


Decidió entonces salir un rato a caminar para sacar de sus pensamientos aquel sueño que había tenido, fue hasta una colina que se encontraba cerca del lago y allí se sentó a pensar... Pero fue interrumpida por alguien


- ¿Kagome? – Le dijo alguien que se acercaba
- ¿Quién es? – Pregunto Kagome ya que no había reconocido la voz
- Es Inuyasha – Le dijo y se sentó a su lado para darse cuenta que los ojos de Kagome estaban cerrados - ¿En que piensas?
- Inuyasha... – Dijo Kagome y abrió sus ojos – Es que estoy desconcertada por un sueño que tuve
- ¿Qué clase de sueño?
- Bueno, no estoy muy segura yo tengo la habilidad de la premonición – Le dijo – Pero no puedo distinguir si este fue solo un sueño o una premonición y eso me preocupa
- Bueno, tal vez deberías dejar de pensar en eso – Le dijo Inuyasha – Piensa en cosas alegres, como el amanecer que esta apunto de suceder
- Si, es buena idea pero ahora que me doy cuenta ¿Qué haces levantado a esta hora? – Le dijo Kagome
- Bueno, no lo se muy bien, pero repentinamente sentí que debía venir para este lugar – Le dijo Inuyasha – Así que vine y te encontré aquí
- Pues... Que bueno que hayas sentido que debías venir para este lugar
- Si, fue muy bueno – Le dijo Inuyasha para luego abrazarla


Minutos después de que el amanecer había finalizado Kagome decidió irse a la casa para que no se preocuparan porque ella no estaba allí y entonces Inuyasha la acompaño para no dejarla sola; al llegar a la casa ya todos estaban despiertos y estaban preparándose para salir...


- Chicos ¿adonde van? – Pregunto Kagome
- Tenemos que ir a buscar a Kagome – Dijo Sango sin haberle prestado atención a Kagome que acababa de entrar
- Sango, estoy aquí – Le dijo Kagome
- Kagome... ¡¿QUÉ HACIAS AFUERA TAN TEMPRANO?! – Le dijo Sango alterada
- Bueno, tranquila Sango solo estaba despejando un poco mi mente por culpa de un sueño que tuve – Le dijo
- Si, Sango cálmate – Le dijo Inuyasha – De cualquier manera ya Kagome está aquí
- Bueno, tienes razón Inuyasha... ¿Inuyasha? – Dijo Sango sorprendida - ¿Qué haces aquí tan temprano?
- Este... Bueno es que sentí que debía ir a donde estaba Kagome y pues me quedé con ella – Le dijo – Y estoy aquí porque no quería que se viniera sola
- Si, eso fue todo aunque yo no estaba tan lejos, estaba en la colina que está cerca del lago – Dijo Kagome – Necesitaba despejar mi mente
- Pues, esta bien pero Kagome recuerda que nos debes avisar – Dijo Ayame que estaba sentada con Kouga
- Si, Sango te iba a despertar para que fueras a buscar unas cosas y cuando no te vio, casi se nos muere aquí mismo – Dijo Kouga – Se nota que ustedes son como hermanas
- Pues claro – Dijo Sango – Nos conocemos desde que somos unas niñas
- Si, siempre hemos sido buenas amigas – Dijo Kagome – Y Sango siempre a sido así
- Kagome... Tengo una duda ¿Qué soñaste? – Le preguntó Sango
- Bueno... Fue algo bastante confuso y aun no puedo diferenciar si era un sueño o una premonición
- Eso es extraño nunca te a pasado eso – Dijo Sango – Pero ¿Qué sucedía en el sueño?
- Bueno, les cuento... – Dijo Kagome mientras se sentaba con Inuyasha y Sango – En el sueño la Srta. Sakura nos visitaba ella nos decía algo pero yo no podía entender nada... Bueno en realidad no escuchaba nada... Ese fue todo mi sueño – Concluyó Kagome
- Vaya, es primera vez que sueñas algo así ¿cierto? – Le dijo Sango
- Pues si por eso me dejo intrigada - Dijo Kagome – Sería bueno que la Srta. Sakura viniera pero es que en el sueño las expresiones de ustedes cuando ella hablaba expresaban tristeza y rabia
- Pero ¿Quiénes estaban? – Pregunto Ayame
- Bueno, pues estábamos todos... No, no estaban ni Ayame ni Kouga – Dijo Kagome – Eso quiere decir que a ellos dos no les concernía lo que hablaban con nosotros
- Pero, ¿Qué será lo que les habrá dicho? – Dijo Kouga - ¿Crees que sea importante?
- Pues es lo mas segur - Dijo Kagome – Después de todo la Srta. Sakura no es de las personas que solo vienen de visita
- Si, Kagome tiene razón ella no es así – Dijo Sango
- Pero bueno, dejemos de hablar de estas cosas y voy a preparar el desayuno – Dijo Kagome – Inuyasha te puedes quedar para desayunar... Es mas ¿porque no buscas a Miroku, Sesshomaru y a Rin para que desayunen con nosotros?
- Si, buena idea Kagome – Le dijo Inuyasha
- Bueno Inuyasha quédate aquí y yo los busco – Dijo Sango
- Claro, seguramente quieres ver a Miroku rápidamente – Le dijo
- Pues... Bueno esta bien si, si lo quiero ver y conociéndote lo mas seguro es que te tardes mas de lo necesario – Dijo Sango mientras salía
- Pues bueno Kouga, Ayame los dejo yo voy a acompañar a Kagome en la cocina
- Si, no te preocupes Inuyasha – Le dijo Ayame
- De acuerdo, gracias – Le dijo y se fue
- Bueno Ayame estamos nuevamente solos – Le dijo Kouga – Es increíble cuanto se quieren mutuamente
- Pues si todos somos buenos amigos
- Me doy cuenta y espero que yo pueda encajar bien en su grupo
- No te preocupes por eso todos son muy buenos – Le dijo Ayame – Seguramente encajaras rápido... Es mas tu ya eres parte del grupo así que no te preocupes
- Gracias Ayame, eres muy buena
- Pues, eso es lo que me dicen – Le dijo con una sonrisa
- Jajaja, pero que modesta – Le dijo Kouga – Pero si los que te dicen eso tienen toda la razón además eres muy bonita
- Pues gracias – Le dijo sonrojada
- Y te ves mucho mas bonita así sonrojada – Le dijo y ante este comentario Ayame se dio la vuelta para que no la viera – No te voltees no te estoy diciendo ninguna mentira
- Pues, es que no me gusta que me vean cuando estoy sonrojada – Le dijo en voz baja pero suficiente alto como para que el escuchara
- Bueno, pues entonces no te veo – Le dijo y se tapo los ojos – Ahora puedes voltear
- Esta bien – Le dijo y se volteo – No es necesario que te tapes los ojos – Le dijo Ayame y con sus manos retiro las de Kouga que se encontraban tapando sus ojos
- Gracias – Le dijo un poco sonrojado – Ves eres bonita en todo sentido
- Pu.. Pues gracias – Le dijo apenada y su cara estaba en ese momento tan roja como un tomate – Pero tu también estas un poco sonrojado
- Pues si, pero es porque tu eres tan linda que apenas te veo y me sonrojo – Le dijo de manera honesta
- Gracias... Pero ¿Tu no estabas enamorado de Kagome ayer? – e dijo
- No, yo soy así con todas las chicas
- Ah, eso quiere decir que lo que me estas diciendo ahora se lo dices a todas – Le dijo Ayame de manera seria
- Pues, es probable que si... Pero ninguna antes me había hecho sonrojar – Le dijo Kouga
- ¿Cómo se si lo que me dices no se lo has dicho a otra chica?
- Pues, no lo sabes pero te puedo asegurar que es cierto – Le dijo Kouga – Con tigo me siento muy distinto... Es decir con tigo siento que puedo ser como yo realmente soy
- Y ¿Cómo eres realmente? – Le pregunto Ayame estando muy cerca de el
- Pues... – Dijo tragando hondo y bastante nervioso
- ¡Ya llegamos! – Exclamó Sango mientras entraba en la casa - ¿Qué hacen ustedes dos tan juntitos?
- Nada – Dijo Ayame mientras se separaba rápidamente de Kouga – Solo conversábamos
- Si, solo eso – Dijo Kouga
- Claro... – Les dijo Sango de manera irónica - ¿Ya Kagome termino con el desayuno?
- Si, acabo de terminar – Dijo Kagome que estaba saliendo con Inuyasha – lástima que los hayan interrumpido – Le dijo en voz baja a Inuyasha
- Pues si, si no hubiesen llegado pudo haber pasado algo interesante – Le contestó Inuyasha
- Y ustedes ¿Qué tanto secreto? – Les pregunto Rin
- Nada, luego les contamos – Dijo Kagome – Ahora vamos a comer


Inmediatamente se sentaron a comer, y luego de comer la comida tan deliciosa que Kagome había preparado todos decidieron salir un rato al templo


Estando en el templo Kagome e Inuyasha les contaron a Sango, Miroku, Rin y Sesshomaru lo que estaba pasando con Kouga y Ayame antes de que ellos llegaran y por ende decidieron irse todos en parejas y dejar solos nuevamente a Kouga y a Ayame para ver si pasaba algo


- Sabes Kouga – Le dijo Ayame estando cerca de el
- Di... Dime – Le dijo tragando hondo
- Bueno... No me terminaste de decir – Le dijo Ayame - ¿Cómo eres realmente?
- Pu.. Pues... Yo realmente soy bastante romántico – Le dijo y se acerco mas a ella
- ¿En serio? – Le pregunto Ayame pero esta vez estaba nerviosa porque Kouga estaba cerca de ella
- Pues si – Le dijo mas seguro porque en la voz de Ayame noto cierto nerviosismo
- Ah, pues que bueno... Muy pocos hombres son románticos – Le dijo Ayame
- Lo se, por eso no me gusta actuar como yo realmente soy – Le dijo Kouga alejándose de ella
- Pues no debería ser así – Le dijo Ayame mientras se le acercaba – A las mujeres nos gustan los hombres románticos... Claro no exageradamente románticos pero si nos gustan los hombres románticos
- Yo eso lo se... Pero no estoy acostumbrado a actuar como realmente soy
- Pues, con migo puedes actuar como quieras pero te informo no me gustan los patanes – Le dijo haciendo que Kouga se riera
- Jajaja, no te preocupes no soy un patán – Le dijo entre risas – Ves por eso es que me encanta como eres
- ¿Te encanta? – Le dijo Ayame sonrojada
- Pues si, porque además de hermosa eres cómica
- Bueno, son cualidades que tengo – Le confesó Ayame


Así Ayame y Kouga pasaron un rato bastante ameno y todos los demás también estaban muy tranquilos, de vez en cuando veían que era lo que hacían Kouga y Ayame pero al final del día Kagome, Rin y Sango estaban un poco desilusionadas ya que Kouga y Ayame no se habían besado y eso que les habían dado cientos de oportunidades para que lo hicieran


Pasaron varios días y las chicas se dieron cuenta que Kikyo, Kanna y Kagura las habían estado persiguiendo en los días anteriores así que decidieron no hacer nada muy comprometedor ya que no sabían que tenían pensado hacer ellas al tener las pruebas de que ellas se habían enamorado de personas sin poderes, por suerte Kouga y Ayame no tenían ninguna dificultad por estar juntos pero aun así no habían hecho nada todavía y eso tenía a Sango, Kagome y a Rin muy desilusionadas


Ya estaban en principios de octubre y las chicas no habían vuelto a ver a Kikyo, Kanna y a Kagura pero el sueño de Kagome aun se repetía y eso la tenía bastante intrigada, no tenía la mas mínima idea de que podría significar ese sueño. Por otra parte ya Kouga y Ayame eran oficialmente novios y eso los tenía a todos muy alegres ya que sus esfuerzos funcionaron, en la mañana del 10 de octubre Kagome se levanto temprano como de costumbre y estaba saliendo de su casa pero al salir estaba una carta de la Srta. Sakura


Queridas Kagome, Sango, Rin y Ayame:

Hola Kagome, se que tu eres la que encontrara esta carta así que no te vayas a asustar ni nada recuerda que yo puedo ver el futuro pero mucho mas claro que tu... Solo envío esta carta para avisarles que llegaré pronto a visitarlas con mi querido esposo Syaoran y con mi amiga Tomoyo así que espero que nos reciban bien

Se despide:
La Srta. Sakura Reed


Kagome al terminar de leer la carta se quedo totalmente impresionada ya que nunca pensaba que la Srta. Sakura fuese a visitarlas y mucho menos estando cerca de la temporada navideña que era la que mas le gustaba disfrutar; inmediatamente sus ganas de salir a caminar se agotaron y fue a despertar a Sango, Ayame y a Kouga para ,luego ir a buscar a los demás... Cuando estaban todos juntos Kagome les dijo lo que sucedía y ellos no le prestaron atención a lo ocurrido solo pensaron que lo que querían era visitarlos por un rato y que entonces en unos días se irían nuevamente pero Kagome no estaba muy convencida de eso ya que ella tenía un mal presentimiento....


Por otra parte de Grecia cerca de la ciudad de Karditsa se encontraba la Srta. Sakura conversando con su querido esposo Syaoran


- Solo espero que lo que me dijo Kikyo sea una mentira – Dijo Sakura
- Tranquila amor – Le dijo Syaoran – No creo que sea verdad después de todo Kikyo siempre a odiado a Kagome y a Sango
- Si, pero es que esta vez también esta involucrada Rin – Dijo Sakura – Ayame no tiene problemas pero Sango, Kagome y Rin deben de saber muy bien que ellas no se pueden enamorar de una persona sin poderes mágicos
- Tranquila amiga – Le dijo Tomoyo – Para eso estamos yendo para su casa... Tenemos que verificar si eso es cierto
- Si, hay que hacerlo – Dijo Sakura


Ese día la Srta. Sakura, Syaoran y Tomoyo pensaban llegar para confirmar sus dudas por lo que les habían dicho Kikyo, Kanna y Kagura en una carta....

Pues espero que les hayan gustado los capítulos! Nuevamente muchas gracias por su apoyo!
Bye!!

 

Re: La historia de una hechicera [Kagome+Inuyasha]

HOLA!!!!!!!!!

Me gustó mucho este capítulo. Así que la arpía de kk fue de chismosa con Sakura, como no tiene manera de molestar, se mete con sus sentimientos. Maldita bruja.

Ah esos Kouga y Ayame que no se animan a besarse y eso que se los ponen en bandeja de plata. Son los únicos que tienen bandera blanca.

A ver qué les dice Sakura, pero a mi me parece que lograrán vencer esa imposición absurda de que no se pueden enamorar de personas sin poderes. El amor triunfará.

TE MANDO UN BESOTE Y MIL GRACIAS POR SEGUIR CON TU FIC; ME GUSTA MUCHO; ESTARÉ ESPERANDO TU SIGUIENTE CAPÍTULO CON ANSIA!!!!!!!!!!!!