Contenido oculto Este microrrelato participa en la actividad "¡Agosto te desafía!" de SweetSorrow . Es para el reto número 25: "Extiende una mano hacia tu derecha, y sin mirar, coge el primer objeto que encuentres. En tu escrito debe aparecer este." En mi caso el objeto que encontré fue un reloj de pulsera que uso para ir al trabajo y bueno, se me ocurrió lo siguiente. Espero que os guste. La cuenta atrás Miró la hora una última vez y pensó. Cuánto tiempo había perdido contando el tiempo. ¿Por qué lo había hecho? ¿Por qué se ligó a un reloj y a un horario? Al final, lo único que marcaba ese reloj eran los segundos que se iban agotando en el contador de su vida. Había ido corriendo, de aquí para allá, devorando el tiempo que le quedaba de vida, devorando cada instante, más rápidamente, en lugar de pararse, simplemente pararse a disfrutar. Y era ahora, en su lecho de muerte cuando caía en la cuenta de lo absurdo que había sido todo eso. En lo absurdo que había sido ligarse a un reloj, a un simple aparato que lo único que hacía, era recordarle el tiempo que le quedaba para disfrutar. —Es absurdo —susurró—, ya no queda tiempo. Y simplemente, dejó de pensar en ello, para siempre. —Hora de la muerte, 23:47 —dijo el doctor que se encontraba al lado de aquel cuerpo ya sin vida.
