Eres rara (nalu)

Eres rara.

Últimamente, a Natsu se le había pegado la maldita costumbre de usar esa frase, y si bien ya la usaba bastante seguido antes, ahora él y Lucy no podían mantener una conversación sin que de repente el peli rosa dijera “eres rara” ¡Ella era totalmente normal, maldición! De hecho, comparada con el resto de los miembros de Fairy Tail, ella era tan normal que daba lastima.

—Eres rara, Lucy —Y ahí estaba de nuevo, con su maldita frasecilla cliché.

— ¡No quiero escuchar eso de un anormal como tú!

Si, la paciencia de Lucy estaba llegando al límite. Y Natsu Dragneel, como buen idiota ignorante que es, solo seguía señalando lo extraña que creía que ella era. Día tras día, misión tras misión, todo el maldito tiempo el insistía en decir “Eres rara” como si buscara alguna clase de respuesta o explicación para ello.

Por eso, pocos se sorprendieron cuando vieron a la chica suspirar cansada y reposar la parte superior de su cuerpo en la barra del gremio, donde ella sabía que una maga de posesión de almas la aconsejaría. Aunque Mirajane no siempre era la mejor opción.

—Vaya Lucy ¿Qué te tiene tan decaída? —preguntó Mira con una sonrisa colocando un vaso con jugo de manzana junto a ella.

—Natsu Mira, es Natsu—respondió bebiendo un poco de jugo con cara molesta.

— ¿Qué hizo nuestro dragón favorito esta vez?

—Se divierte molestando, solo eso. Insiste en que soy rara.

—Pero, eso no es nada nuevo, ¿Y por qué estás tan molesta?

—Antes no me molestaba Mira, ¡Pero ahora lo dice cada que me ve! ¡Hasta lo susurra dormido!

—Eso solo significa que piensa mucho en ti ¿no? —Sugirió con una sonrisa adorable.

—Olvídalo— Se resignó Lucy antes de suspirar y alejarse del lugar.

Pero si Mirajane se rindiera así de fácil, no sería la mejor autoproclamada Cupido de todo Fiore. Es por eso que cuando vio al Dragón Slayer acercarse, no lo dudo siquiera un segundo antes de meterse donde no la llamaban.

—Oye Mira, ¿has visto a Lucy por aquí? Creo que encontré una buena misión y quería preguntarle.

—Ah, Lucy se fue a casa, dijo que estaba algo cansada. —Natsu suspiró resignado— Por otro lado Natsu, Lucy comentó que últimamente has estado diciendo que ella es rara. Natsu asintió.

—Lo es, Lucy es demasiado extraña.

—Vaya ¡pero a mí me parece normal! ¿Qué es tan extraño?

—Por ejemplo… es… amh… había algo…que no recuerdo pero… —A Mirajane le resbalo una gota por la cabeza, clásico de Natsu. —Bueno, Lucy tiene algo diferente.

—Natsu—Llamó Mirajane sonriendo enternecida— ¿has pensado que quizás la palabra que buscas no es “rara” sino “especial”?

— ¿eh?

—Deberías hablar con Lucy.

Natsu miró a la albina confundido, dudo un poco, pero decidió ir a casa de Lucy, al fin y al cabo, bien podría hablar con ella, y ya de paso, dormir una siesta en su cómoda cama y comentarle lo referente a la misión. Y por otro lado, también tenía hambre, quizás Lucy tenía algo de fuego o algo más que comer. Mirajane suspiró y sonrió, eran realmente más lentos de lo que creía.

—Lucy~ —Canturreo Natsu entrando por la ventana, mientras la rubia salía de la cocina con un plato de sándwiches.

— ¡Natsu! ¡Sal de mi ca…! —Lucy se lo pensó un poco mejor y suspiró (aparentemente, hacerlo estaba de moda últimamente) para luego extenderle el plato con sándwiches— ¿quieres?

Natsu tomo uno y se lo devoro a la velocidad de la luz, luego se lanzó a la cama de Lucy y se acurruco allí con una estúpida sonrisa gatuna.

—y ¿Qué quieres? —Pregunto Lucy cruzando sus brazos.

—Misión—Respondió simplemente extendiéndole el papel que la maga tomo y leyó cuidadosamente.

—Está bien, es mañana ¿no? Entonces ya puedes irte.

—No, Mira dice que debo hablar contigo —Si Mira lo dice, no puede ser bueno. —Sobre lo rara que eres.

—Fuera —Sentenció con un aura oscura alrededor de ella.

—No, no, no, no quise decir eso es… amh… ¡Especial! ¡Mira dijo que eras especial!

— ¿Especial? —repitió inclinando un poco la cabeza a un lado.

—No lo entiendo, solo sé que hay algo raro en ti, mhhh, en algo eres diferente pero yo… no sé qué sea. —Divagó buscando las palabras correctas, más confundido que otra cosa.

— ¿diferente de…que? Natsu, no entiendo.

—Diferente de las demás chicas…probablemente. Por eso creo que eres rara pero, Mira dice que eres “especial” ¿tú entiendes, Lucy?

Lucy se sonrojó y sorprendió bastante. No abría la boca la boca y parpadeaba incrédulamente, realmente ¿Natsu realmente estaba diciendo “eso”? ¡Pero claro! Al idiota le gustaba y ni él se había dado cuenta. Normalmente, ella se habría sorprendido tanto que lo habría mandado a volar fuera de su casa, pero algo hacia que ella estuviera simplemente feliz. Sonrió por la ternura de su “amigo” y se sentó junto a él, quien la miraba esperando una respuesta.

—Tú… Realmente no necesitas entenderlo ahora Natsu.

Natsu la miró confundido, examinándola como si se le hubiese zafado un tornillo o algo por el estilo, pero simplemente bajo la mirada evitando mirarla y susurró.

—Eres muy rara, Lucy— Lucy sonrió, porque si estaba en lo cierto, la traducción era literalmente “me gustas mucho, Lucy”.

Y si era si, a ella no le importaba para nada ser rara para Natsu.

Fin

Esta es mi historia numero 10 de Fairy Tail (tan pocas T.T) Así que ¿qué mejor forma de celebrarlo que con un NaLu? espero no haberme equivocado mucho. solo debo aclarar, que si tuviese a mi Musa delante mio, le lanzaría el mouse por la cabeza. La muy malvada me ataca cuando quiero dormir y me ignora cuando puedo escribir. finalmente, y sin mas incoherencias que agregar me despido (les pediría que comenten, pero sé que no lo harán)
Aixa-chan fuera~