Disclaimer: Los personajes no son míos, u.u aunque realmente a Yuki lo tengo atrapado en mi casa D= digo... no son míos xD Fue escrita para un reto pidiendo la creación del foro de Furuba =) Entre Reyes y Príncipes –¡Princesa Tohru! –La chica miró al pequeño rubio con cariño. Momiji siempre le estaba poniendo títulos a su nombre. –¿Me dejas ser tu Rey? –Huh –desde hace unas semanas, el pequeño le seguía declarando su amor eterno a la castaña. Ella, siendo tan buena, no encontraba la manera de rechazarle sin lastimarlo. –Bueno Momiji, lo que sucede es que las princesas tienen un príncipe. –Eso lo sé, Tohru–. El conejo se sentó al lado de ella y, con una expresión de resignación, resopló mientras colocaba su cara entre sus manos. –Yuki es sin lugar a dudas un buen príncipe. –¿Verdad que sí? –La sonrisa que adornó la cara de la chica hizo que al pobre le diera un salto el corazón –Realmente estoy muy feliz con él. –¿Sabes? Hatori me ha dicho que soy un Rey. – el Souma se levantó y se colocó en frente de la chica– Y por ley, el Rey siempre obtiene lo que quiere, Tohru. –El joven acercó su cara y la chica no pudo evitar sonrojarse. Después de todo, Momiji era una versión miniatura de un joven guapo y elegante. En el momento en el que la chica pensó que el pequeño rey la iba a besar, cerró los ojos con fuerza. Para su sorpresa, unos cálidos labios se posaron sobre su mejilla. Confundida, abrió los ojos y observó la risa burlona del conejo. –Espera unos años a que crezca, Tohru. –El menor se arrodilló frente a ella y tomó una de sus manos entre las suyas –Entonces te demostraré que los Reyes somos mejores que los príncipes. –Depositó un segundo beso en la parte posterior de su mano y, sin siquiera esperar respuesta de la joven, se dio la vuelta y salió de la casa. La flor de los Soumas se quedó sin palabras. "Piensa en Yuki" se dijo así misma mentalmente, pero sin importar cuánto se esforzara, sus pensamientos se desviaban al joven Rey. Sin lugar a dudas cuando Momiji creciera, Tohru se encontraría en problemas. "Es tan mono, que de seguro se pone mejor que Yuki". Sacudió la cabeza alejando el pensamiento y avergonzada se dedicó a preparar la cena para su novio. Mientras cocinaba, un pensamiento rondaba su cabeza: Si lo pensaba realmente, un rey conejo sonaba mejor que un príncipe rata.
AWWWWWWW! Esto es condenadamente awesome, *-----* En serio, la convicción del pequeño, el anhelo, y sus palabras dulces. Te demuestra que la esperanza viene de la falta de perseverancia. ¿Realmente no le demostró ese pequeño, con palabras tan simples que Los Reyes son mejores que los príncipes? Yo diría que sí, Muy buen escrito, buena ortografía, debes trabajar en pequeñas cosas, pero está muy bien.