Advertencia: Esta historia puede contener Gore, dando una descripción por medio del escrito, se considerará que en la mayoría de los capítulos tendrán lo susodicho anteriormente. Antes de la iniciación de un capítulo se advertirá de lo que pueda contener. Advertencia del Capítulo: Gore y desmembriamento. _Prologo_ Lentamente la oscuridad me atraía, se preguntarán ¿Intente impedirlo? ¡Por supuesto que no! Aquel bello sentimiento me llenaba de euforia, no recuerdo quien fui antes. ¿Pero saben que? ¡Eso no importa! Me gusta lo que soy ahora. Este hermoso sentimiento llena de goce mi ser. Capítulo 1: El despertar ¿Oscuridad? ¿Tormento? No sabia en ese momento lo que estaba ocurriendo. Desperté sin ningún recuerdo, pero había un gran odio en mi alma. Intente ver a los alrededores para encontrar algo, pero no había señal de vida alguna. No sabía lo que era ni donde estaba, intente levantarme pero no tenía la fuerza suficiente para lograrlo. Me quedé un tiempo sin hacer nada, pero escuche unos pequeños ruidos —¡Torchic-chic-Chic! Una pequeña criatura se acercó minuciosamente, tenía un pico y parte de su cuerpo era de color anaranjado, su vista denotaba curiosidad. Me quedé inmóvil, no sabía lo que era esa criatura. —¡Chic-chic!—Volvió a musitar La criatura se encontraba a unos cuantos milímetros de mi alcance. Una fuerte sensación de hambre paso por todo mi cuerpo. Utilizando toda mi fuerza lo atrape, aquel ser sólo se retorció del dolor. —¡Chic-torchic!— Intento liberarse de mi agarre, pero fue imposible. Escuchaba como se le rompía cada hueso del cuerpo. Hasta que sólo se escuchó —¡C..hi!— Supe en ese momento que había muerto. Le arranqué el pico, las garra y por último los ojos. No se porque lo hacia, había una fuerza que me obligaba hacerlo. Sin ningún sentimiento, lo sujete y lo lance directo a mis mandíbulas. Lo mastique ferozmente a una gran velocidad, escuchaba cada crujido como un canto misericordioso. Esa sensación me encantaba, la fuerza con la que masticaba hizo que parte de la sangre fuera expulsada de mi boca. Eso me desilusiono, no quería desperdiciar nada. Mi fuerza se había recuperado considerablemente, intente ponerme de pie de nuevo, fue un total éxito. Me sorprendí al ver parte de mi cuerpo, lo que parecían mis manos eran un par de tenazas con gran tamaño y grosor, con un torso delgado, mis piernas eran delgadas, pero mis pies eran palmeados y grandes. Nada concordaba, en ese momento recordé aquella criatura, ¿Por qué no me di cuenta antes de mi aspecto? ¿Era acaso tantas mis ansias de saciar mi apetito que lo ignore por completo? No sabía que estaba ocurriendo, pero había algo que si recordaba, la ¡Sensación!. No era la misma que tengo ahora con las tenazas era…distinta. Dirigí las tenazas a mi rostro—¡¿Tenía plumas?!.— Grite sorprendido, estaba tomando la forma de aquel ser. Intente indagar más sobre mi cuerpo, pero un sonido me alarmó en ese momento. —¡Regice ice ice!—Bramo aquella criatura cristalizada— ¡Ice ice regice!— Grito fuertemente, elaborando una esfera azul proveniente de su rostro. Trate de ir hacia el, pero algo dentro de mi me lo impedía, como si fuera un instinto de supervivencia. Lanzó aquella esfera azul, lo esquive difícilmente y vi el daño que ocasiono a mi alrededor, una gran fragmentación de hielo comprimido con forma puntiaguda. Mi instinto me hizo retroceder, irme de aquel lugar era lo indicado ya que todavía no era lo suficientemente fuerte para eliminar aquella criatura. Pero esa criatura de cristal, me seguía sin descanso alguno. Atacaba sin cesar y piedad. Mi fuerza disminuía de nuevo, no quería volver a sentir ese sentimiento de no poder hacer nada. Trate de atacar de cualquier manera, pero me era imposible. Trate de alejarme lo mas que pude, pero fui acorralado en un lugar sin salida . Me encontraba en un acantilado de unos de 65 metros de profundidad en el cual se encontraba un angosto río. —¡Regice ice regice!—Grito fuertemente, totalmente dispuesto a atacar de nuevo. No tuve otra opción que saltar en el acantilado . —¡Regice ice ice re gice!—Volvió a gritar, lanzando el ataque mientras caía de aquel acantilado. Pero no acertó, al no poder alcanzarme se alejó del lugar o eso creía yo. Caí de relleno al río del acantilado, fue demasiado fuerte el golpe, quede aturdido por unos momentos, parte de mi mano cayó sobre una roca dejándola dañada. Intentaba a aferrarme a las rocas para no seguir por la corriente del río, pero no tenía la suficiente fuerza para lograrlo, al final termine por encallar en una orilla de lo que parecía un bosque. Sangrando y con fuerza mínima, me arrastre hasta apoyarme en un árbol y así tratar de levantarme. Aquel escape mi había desgastado bastante. De nuevo una fuerte sensación de hambre invadió mi cuerpo. Busque sin cesar alguna otra criatura, pero aquel lugar se encontraba totalmente desolado, o eso creía yo. Escuche unos gritos provenientes a unos cuantos metros del lugar. —¡Grovyle usa ataque rápido hacia ese Taillow!—Grito aquel ser bípedo, aquella criatura acató la orden, pero su golpe no acertó, mientras la otra se escapa de aquel lugar volando.—¡Eres un maldito inútil!—Levantó una roca que se encontraba alrededor de el y la lanza—¡Regresa a la Pokeball!— Un destello rojo salió de aquella esfera que portaba el ser bípedo. Yo me encontraba, ¡asombrado! Esa criatura obedecía las órdenes de ese ser que parecía más inferior que los demás. Lo seguí hasta esperar la oportunidad de atacarlo sin que se diera cuenta. En unos cuantos minutos el cielo se empezó a oscurecer, yo admiraba aquel estrellado de la atmósfera, mientras que el otro ser sólo sacaba unos instrumentos de su mochila. Colocó un saco de dormir, y se acostó en el. ¡Era mi oportunidad!, rápidamente me acerqué con mis tenazas, le corté la yugular, no paraba de sangrar era simplemente ¡Hermoso! Murió rápidamente. Arranqué cada miembro de el, para poder consumirlo mejor, pero me di cuenta de algo, no podía consumirlo como aquella otra criatura, era más costoso, mis mandíbulas no tenían la misma fuerza de antes ni el mismo tamaño. La única manera en la que podía consumirlo, era cortándolo en trozos pequeños y lentamente. Diría que lo disfrute más, pero era cansado alimentarme de esa forma. Después de una hora logre consumirlo por completo, exceptuando la ropa. Me encontraba cansado, aunque había recuperado parte de mi fuerza una fuerte sensación de cansancio me atrapó, no tuve otra alternativa que dormir. Se hizo de día, me sentía dispuesto a seguir alimentándome de la otra criatura que se encontraba en la esfera. Pero de nuevo me sentía diferente. Me veía de reojo y mi forma había cambiado, estaba ¡Sorprendido!. Mi forma era exactamente como la otra criatura. Me costaba mantenerme de pie, no estaba acostumbrado, una fuerte sensación de dolor ubicada en mi cabeza me recorrió en ese momento. Estaba empezando a recordar, pero no de mi pasado, si no la de aquellas dos criaturas. Todos los momentos que vivieron, los lugares en los que habían estado. De un momento para otro el dolor se fue. —¡Así que estoy en Hoenn!—Grite con euforia y con una sonrisa sádica. —¡Esta información me va a servir bastante!—Volví a gritar—Bueno, parece que tendrás que esperar a ser consumido- Fije mi vista en la Pokeball —Próxima parada ¡La Liga Pokemon!—Grite a todo pulmón. _Fin del capítulo_
