Microrrelato Enfermedad Mental

Este escrito viene de la nada y de la nada se creó, sin ninguna inspiración, sin ninguna meta a lograr al escribir, simplemente salió y ya. Espero les guste y ya saben cualquier comentario y/o critica es bienvenida c:

Nota: Los diálogos que están dentro de las comillas, son su enfermedad, su "demonio".

Enfermedad Mental.​

No, no, ellos no entienden esto, si tan sólo supieran el daño que les puede causar ellos, si tan sólo vivieran el fuego mismo del infierno ellos no estarían así. Piensan que estoy loca, pero la verdad...

—"Eres una niña sola y mala".


—¡Cállate!.


—"Te quedarás sola, nadie está a tu lado... Tu locura es causa de mi ser, tú me das vida".


—Te maldigo, maldita seas... ¡Déjame en paz! —Mis latidos son cada vez más rápidos, siento el palpitar de mi corazón y mi cerebro, ya no puedo más, ya no puedo más con esto, ella me está matando, que salga de las sombras y me vea a los ojos.


—"¿Eso quieres?, ¿quieres verme?" —Mis ojos se llenan de asombro y temor al escuchar su voz, al pensar que ella escucho mis pensamientos.


—¡Te he dicho que me dejes!.


—"Nunca, tú eres mi vida y yo soy tu muerte" —una sombra aparece de la esquina de mi habitación, yo me encuentro en el suelo sentada y retrocedí como pude. ¿Por qué le había dicho que se mostrara?, gotas de sudor resbalan por mi frente, el miedo se comienza a ser presente. —"Aquí me tienes querida."


Comienzo a gritar desesperadamente al verla tan cerca de mí, yo ya no tengo escapatoria, estoy arrinconada contra la pared. Sus manos se posan en mi rostro y siento como arde mi piel, sus ojos negros me miran es como si me devorará el alma por pedazos.


—Aléjate, ¡Aléjate de mi! ¡Auxilio!... —gotas de sangre comienzan a caer de mi rostro, mi respiración es sumamente rápida, siento mucho frío, quiero correr pero no hay escapatoria. Ella retrocede un par de pasos, y se quita la capucha de su rostro, lo veo de nuevo, ese rostro marcado con cicatrices y heridas resientes, su boca cortada y su sonrisa malévola.


—"Siempre seremos una" —comienzo a forcejear al sentir unos brazos como me toman con fuerza, todo está oscuro, no veo nada más que simple oscuridad y frío.


—Vamos, pónganle el sedante... Esta convulsionando —comienzo a ver una luz, es cálida algo me agrada de ella pero brutalmente soy alejada. Con pesadez mis ojos se abren lentamente mientras trato de mover mis brazos, pero algo los detiene, levanto un poco la cabeza y veo mis manos sujetas con unos amarres de cuero.


—¿Se encuentra bien? —Un doctor se acerca lentamente mientras ve unas hojas, al parecer mi expediente, yo me limito a sonreír.


—Se me olvidaba que soy una enferma mental... Una loca...


—"Yo soy tu muerte y tu eres mi vida" —la vi de nuevo en las sombras siempre diciéndome lo mismo, sólo cerré mis ojos y dormí profundamente....