One-shot de Naruto - El regalo

Otro día en la aldea de la hoja el sol resplandecía fuertemente sobre la montaña de los kages, dando inicio a un agradable y cálido clima. Un par de semanas habían pasado desde que Tsunade se había vuelto la quinta Hokage, así como un par de días desde que Sakura se había vuelto su alumna, pues esperaba con ansias volverse más fuerte para así poder traer de regreso a su compañero de equipo Sasuke Uchiha.

Los entrenamientos diarios la había dejado agotada pues, para mejorar sus reflejos y resistencia la mujer le arrojaba una serie de balones explosivos que debía evadir constantemente (cosa que con la tremenda fuerza que las lanzaba era casi imposible), pero finalmente hoy tendría su día libre, con motivo del cumpleaños número *** (censurado por órdenes de la Hokage) de Tsunade, a lo que la pelirrosa aprovechó con ánimos para buscar un regalo para su maestra siendo también su manera de expresar lo agradecida que estaba por haberla recibido a ella como su discipula.

- Bien, tengo que buscar un buen regalo para mi maestra- Decía con emoción Sakura mientras cerraba su casa dispuesta a recorrer las tiendas hasta encontrarlo.

Las horas pasaron, mientras que la chica recorrió una tras otra todas las tiendas que conocía, esperando encontrar algo que su maestra en verdad apreciara, desde la floristería de la familia de Ino, hasta la tienda de armas de Tenten pero ninguno de los lugares a los que fue encontró algo que fuera del agrado de Tsunade.

- ¿Qué puedo hacer? – Decía Sakura con preocupación sentada en una de las bancas del parque, las horas pasaban y se quedaba sin lugares a los cuales ir.

- Veo que tienes un pequeño problema- Dijo una voz desde arriba.

Sakura levantó la mirada encontrándose con un ojo color negro y una máscara frente a ella.

- ¡Ah! – Gritó la joven al verlo tan cerca, poniéndose de pie y alejándose unos pasos.

- Hola – Dijo como siempre Kakashi al tiempo que levantaba su mano en señal de saludo.

- Kakashi sensei – Dijo Sakura al reconocerlo.

- Así es, ¿Qué es lo que sucede Sakura? – Preguntaba su maestro al verla preocupada.

- Bueno…sucede que hoy es el cumpleaños de mi maestra y he estado recorriendo todas las tiendas de la ciudad, pero no soy capaz de encontrar algo que le guste- Decía con preocupación la joven.

- Así que eso era- Decía Kakashi comprendiendo la situación mientras sacaba su libro -No te preocupes, te ayudaré- Habló finalmente con amabilidad el ninja que copia.

- ¿Lo hará? – Dijo ilusionada la pelirrosa a su maestro.

- Por supuesto, déjamelo a mí, antes de esta tarde tendrás tu regalo – Dijo el Kakashi finalmente desapareciendo.

Sakura se levantó del banco con emoción, pues por fin podría regresar a su casa a descansar un poco, su sensei le resolvería el asunto del regalo, por lo que solo tendría que buscarlo más tarde para obtener el regalo, corriendo a gran velocidad finalmente se acercaba a su casa, pasando por uno de los callejones más… vergonzosos de la aldea de la hoja pues allí es donde generalmente había tiendas de lencería, licorerías y las casas de apuestas más populares. Sakura odiaba pasar por allí, hasta que una voz conocida pronto la hizo detenerse.

- ¿Conseguiste lo que te pedí? – Era la voz de Kakashi sensei.

- Por supuesto, tan grande como pediste- Era una voz que le sonaba conocida.

Sakura se asomó levemente, percatándose de quienes eran con sorpresa.

- Kakashi sensei y Jiraiya- Dijo nerviosa Sakura al ver a esos dos pues… un regalo para Tsunade elegido por Jiraiya de seguro era muy mala idea.

No podía ver que traían en las manos pues se encontraban en un punto difícil de ver, por lo que solo se limitó a escuchar lo poco que podía de la conversación.

- Son demasiado grandes, no creo que quepan ahí – Respondió Kakashi a la pregunta

Sakura aspiro sorpresiva cubriendo su boca a la vez que se encontraba sonrojada, enserio esperaba que fuera una broma, pero la mente de la pelirrosa pronto comenzó a volar…mientras pensaba que podría haber sido aquello que le habían comprado a su maestra.

<< En la mente de Sakura. >>

-Aquí tiene maestra, un regalo de mi parte- Decía Sakura con ánimo mientras le entregaba un pequeño paquete a su maestra.

- Oh, ¿Para mí? – Preguntaba halagada su sensei -No debiste moles…- Su sonrisa pronto se borró al ver lo que contenía su paquete.

La mujer sacó de la caja un enorme sostén con la palabra “Vie-ja” escrita en ambas partes del mismo.

- Sakura…! ¿Qué significa esto? - Decía completamente ofuscada Tsunade mientras golpeaba su mano con el escritorio.

- Yo…puedo explicarlo- Decía completamente aterrada la pelirrosa mientras sentía como su cabello se erizaba producto del miedo.

<< Fin de imaginación >>

- No, no, no- Decía aterrada Sakura mientras intentaba borrar aquella escena de su mente.

Pronto recordó que debía seguir mirando la conversación entre su sensei y el maestro de Naruto.

- Sakura estará feliz de tener un regalo- Fue lo último que dijo Kakashi antes de disponerse a salir del callejón para buscar a su alumna.

La kunoichi al ver que acercaba, pronto corrió a esconderse a su casa, pues tenía miedo de recibir aquel penoso regalo que Kakashi le había conseguido. Permaneció en su cama cubierta por sus cobijas esperando no ser encontrada, sintiendo miedo y una profunda depresión por no haber hecho nada por su maestra.

El tiempo pasó, y la joven pese a todo eso termino quedándose dormida, quizá producto del cansancio físico que había estado acumulando.

Para cuando despertó, el día estaba por culminar, porque preocupada, pronto se vistió para ir con su maestra.

- Tal vez no tenga un regalo…pero debo ir o la maestra pensara que lo olvidé, de alguna manera me las arreglo- Dijo la joven al tiempo que se cambiaba y salía con rumbo a la torre Hokage.

Una vez allí, su rostro pronto palideció al ver al hombre de cabellos plateados frente a la Hokage.

- Oh, Sakura justo estuve buscándote todo el día – Dijo su sensei al verla – vine a entregarle tu regalo a la señorita Tsunade.

El ninja que copia le entregó lo que parecía ser una bolsa de amplio tamaño con lo cual hacía difícil ver su contenido.

Sakura simplemente sonrió mientras que por otro lado su inner finalmente revolvía sus pensamientos.

* Tienes que hacer algo sino lady Tsunade nos matará * Decía el inner en su cabeza.

- Sakura, ¿Compraste esto para mí? – Decía realmente halagada la Hokage al tomar el obsequio al tiempo de que se disponía a abrirlo.

Sakura se reía, mientras que por dentro era un mar de pensamientos, realmente preocupado de lo que aquel paquete pudiese contener, y para colmo, una visita terminó de alertarla aún más.

- ¡Tsunade feliz cumpleaños! – Decía burlonamente Jiraiya saltando para abrazarla.

Tsunade sin dudarlo lo golpeó, alejándolo de inmediato y dejándolo inconsciente en frente de la puerta.

- Lamento eso- Dijo la mujer rubia antes de continuar abriendo su regalo.

Al abrirlo, los ojos de la princesa de las babosas se agrandaron de sobre manera, como si algo la hubiese sorprendido mucho.

- Esto es… - Decía sin creer lo que veía.

Sakura preocupada simplemente se colocó de espaldas a su maestra, cerrando los ojos con miedo mientras aquel fuerte escalofrió que sintió momentos atrás había regresado.

- Lo…lo siento maestra, por favor no me expulse- Decía aterrada.

- ¿Expulsarte? - Contestó extrañada la rubia – ¡Pero si me encanta!

Sakura sorprendida por la respuesta se incorporó nuevamente, solo para darse cuenta de en la caja había 2 botellas de sake de konoha con las palabras “feliz cumpleaños”, “Tsunade sensei” grabadas en cada botella.

- Sake edición especial tradicional de Konoha, lo estuve buscando por mucho tiempo pero nunca pude conseguirlo- Decía feliz Tsunade al tiempo que se servía un poco en una copa.

- Te dije que… las botellas no eran tan grandes para la bolsa de regalo- Dijo un inconsiente Jiraiya aclarando finalmente a lo que se referían en aquel callejón.

Tsunade se acercó a Sakura y finalmente con un abrazo agradeció la amabilidad de su alumna a lo que ella desde ahí solo termino por decir “gracias” a su sensei quien miraba alegre la escena.

Si, el día había traído sus dificultades, pero después de todo había salido bien en el cumpleaños número ci….

- Shhh – Dijo Tsunade interrumpiendo al narrador.

Oh cierto… lo siento, en el cumpleaños de la señorita Tsunade.

Fin​