Título: El Rapto (Sentir Tu Sangre Limpiar Tus Venas)Tipo: Poesía libre.Advertencias: Metáforas un tanto explícitas.Género: Reflexión gótica personalNo. de palabras: 198.Nota: Este, más que ser un poema, fue una canción de corte gótico que escribí hace tiempo, pero que por azares del destino nunca terminé la música. Sigue la línea de mis poemas (casi todos fueron planeados para ser canciones), pero ésta es una de una serie que iré publicando sobre reflexiones personales del ambiente oscuro, y espero sean de su agrado.Un segundo bastó para derrumbar el paraíso. Uñas encarnadas sobre la blanda piel, dedos que recorren, que alimentar sin querer, una sed que no cesa, sino crece sin detener hasta llegar a otro cuerpo poseer. Dos segundos. Alguien se ahoga en una gota de agua entregando en cuerpo lo que el alma ya no ofrece busca un remedio al hastío, al odio de sí mismo en oceanos de oro y plata, en tumbas sin nombre, sólo salir, como se pudiese. Los segundos han pasado, pero el dolor no se irá jamás. Y sentir tu sangre limpiar tus penas, entregarse al sueño de las cadenas. Y sentir tu vida marchar de golpe a una tumba llena de lastre. Mil segundos. El tiempo no importa, el daño está hecho, ambos lo están. El morbo del momento da paso a la miseria, esos dos segundos siempre volverán. No fue tu elección el rapto, un destino cruel fue quien te entregó. Ahora sólo te queda el llanto, y volver a entregarte a quien no te amó. Sentir tu sangre, es limpiar tus venas, entregar el alma a quien no interesas, volver a ver el cielo azul, y dejarlo todo en un ataúd.