Este poema va dedicado a mi abuelo que fallecio recientemente. Rojas las rosas, roja la sangre, rojos mis ojos tras verte marchar pues desde aquel dia no deje de llorar. Te fuiste de mi lado, yo no queria pero me solte de tu mano y eso no lo pude evitar por que contar la ley de la vida no se puede luchar. Apenas recuerdo esos dias en los que a la residencia te iba a ver y tras una tarde de juegos veiamos el atardecer, apenas recuerdo esos dias en los que rebosabas de alegria era como para pedir esas ganas que tenias de vivir Pero todo eso ya paso y nunca superare lo que ocurrio. Dias antes perdiste la memoria, a mi no me dejaron ir a verte por ultima vez cuando me entere de que habias fallecido de la tristeza no me lo pude creer, entonces me sente a esperarte y los dias pasaban, y los meses tambien hasta que de una vez comprendi que no te volveria a ver. Te lo digo como el niño que veias en tus ojos y como el hombre que algun dia sere que nunca me faltara razon para llevarte siempre en mi corazon. Jose Vicente comenten....si quieren
Como poema es extraño, pero se ve que te salió del corazón... y eso le da un valor mucho más grande que cualquier otro. Es hermoso, simplemente hermoso.