EL DOLOR DE TU ABANDONO

EL DOLOR DE TU ABANDONO​

Era una tarde gris, las nubes tapaban la hermosura del cielo y los pocos rallos del sol que se despedían para dar paso a la noche, los mismos rayitos que podrían iluminar y dar hermosura a aquella tarde, gris y oscura; pronto las gotas de lluvia se empezaron a amontonar, formando pequeños riachuelos que recorrían las calles de aquella ciudad, a lo lejos se pudo distinguir la figura de una joven de aproximadamente 20 años, caminaba por las calles inmersa en su dolor y pensamientos, tropezaba con la gente que se apresuraba a refugiarse para resguardarse de la lluvia; pequeñas lagrimas se podrían notar que rodaban por sus mejillas y se confundían con la lluvia.
— ¿Por qué?, ¿qué fue lo que hice para que me traicionara de esta manera?, si yo lo único que hice fue amarlo.
Pensaba con dolor aquella joven recordando lo que sucedió horas anteriores.
FLASH BACK
Una joven corría por las calles con una bella sonrisa en su rostro, sus ojos expresaban felicidad, ¿el motivo?, una tarde entera con su novio; a pesar de tener ya 20 años aun la caracterizaba aquella dulzura y ternura que expresaba con su mirada, se habían quedado de encontrar a las 4:00 eran las 3:35, quería llegar antes para sorprenderlo, lo que no sabía era que esa sería una de las peores tardes de su vida.
En el transcurso vio una floristería nueva decidió ir a visitarla, pasaba feliz observando la dulzura y hermosura de aquellas exóticas flores, pero una llamo más su atención era una especie de tulipán de color blanco con manchas marrones, sencilla pero hermosa, pregunto el precio y la compro, reviso la hora y comprobó que eran las 3:15 llegaría tarde a su cita, inmediatamente salió corriendo rumbo al parque al llegar no vio a su novio fue y se sentó en una banca a esperar.
Pasada media hora cansada de esperar se dispuso a marcharse, pero entonces pudo distinguir la sombra de su novio pero…. ¿Quién sería la muchacha que viene con él? Se preguntaba confundida, cuando este estuvo lo bastante cerca la saludo.
— Hola lis tenemos que hablar — ese tono no le gustaba él siempre era dulce y tierno al saludarla.
­— Claro — respondió esta confundida.
— Aquí no, vamos a una cafetería — no fue una sugerencia, fue una orden.
Se dirigieron a una cafetería que quedaba cerca del parque al estar allí se sentaron en una silla de cuatro lis se iba a sentar al lado de su novio pero la muchacha que lo acompañaba se le adelanto.
— Bueno te cite aquí porque quiero terminar — informo este sin rodeos.
— ¿Qué? — fue lo único que pudo decir.
— si lis, quiero terminar porque nuestra relación es bastante monótona ya carece de sentimiento no nos vemos estas ocupada todo el tiempo en la universidad, etc. Aparte que estoy enamorado de otra persona — a lis le dolía cada palabra de Arthur como si le clavaran una aguja al corazón pero cuando dijo que estaba enamorado de otra persona fue como si se lo hubieran arrancado y partido en mil pedacitos.

— puedo saber ¿quién es? — pregunto con la voz ahogada.
— soy yo — oyó murmurar a la muchacha que estaba enfrente de ella, no era nada más ni nada menos que la muchacha que acompañaba a Arthur.
— y, ¿cómo te llamas? — pregunto en un susurro que ella logro oír.
— Alise — murmuro antes de levantarse y dirigirse junto con Arthur a la salida de la cafetería.
— Lo siento lis pero así debieron ser las cosas — hablo Arthur antes de salir y dejar a una lis destrozada.
FIN FLASH BACK
— ¿Porque tuviste que abandonarme si todavía tenía tanto que ofrecerte? —se preguntaba lis llorando desconsoladamente frente al parque arrodillada tapándose la cara con las manos — Jamás pensé que nuestro amor terminaría de esta manera, siempre creí que nos casaríamos y tendríamos una hermosa familia, pero veo que eso solo ocurre en los cuentos de hadas, el felices para siempre no existe en el mundo real pero es que me duele tanto que no me hallas dejado a tu lado, pero me duele más que yo no te di lo que otra si te lo dio en un par de semanas, pero ya no voy a ser tan ingenua no señor desde hoy soy otra persona — y diciendo esto se encamino hacia su casa pensando —tal vez pueda arrancarte de mi corazón, pero… jamás podre olvidar el dolor de tu abandono.
FIN!
ESPERO QUE LES GUSTE.