de Dragon Ball - Dragon World vs Visitantes demoníacos

Hola, es mi primer fanfic aquí ^^. Este es un crossover que voy escribiendo, pero a pesar de serlo, los protagonistas son los de DB y toda la acción ocurre dentro del Dragon World, funcionando como una nueva saga 2 meses luego de derrotar a Kid Boo.

Es por eso que no lo publico en la sección de Crossovers; además para mantener el misterio, no voy a revelar de qué anime son los nuevos personajes xD quienes los reconozcan tendrán mejores ideas previas, pero no hace falta saberlo, porque se van revelando las cosas necesarias durante la trama.

Como los primeros capítulos me quedaron demasiado cortos, colgaré los primeros 6 para empezar, y luego seguiré a ritmo de 1 capítulo diario, o tal vez 2, si voy escribiendo muy rápido, que a la fecha voy en el 23.

Bueno, empiezo y espero comentarios y que les guste!


1.- Algo aparece en la galaxia

Ahora que el último de los Kaioshin se había fusionado con su fiel ayudante Kibito, debían proseguir con sus labores divinas. Por ejemplo, barrer el planeta de los supremos kaioshins, pues la batalla contra el Boo original había levantado polvo y tierra alrededor de todas partes, y el planeta era demasiado sagrado para traer gente de otros lados a limpiarlo.
-¡Apúrate! ¡Rápido, no seas holgazán!- El viejo kaioshin leía revistas para adultos, y a Kibitoshin le tocaba barrer. Estaba todo saliendo mal.
-¿No es mejor reparar los daños que ha sufrido este planeta, en vez de sólo barrerlo?
-¡Por qué me cuestionas! Sólo barre, yo sé en qué orden se hacen las cosas.
-Viejo mañoso…
-¡Te oí!
De pronto, un sentimiento extraño cruzó las cabezas de ambos personajes divinos. Era una sensación de incertidumbre. Los dos se vieron obligados a mirar al sitio de donde venía aquella presencia.
-¿Qué es eso tan raro?- Se sorprendió Rö Kaioshin- ¿De dónde habrá salido algo así?
-¿Había sentido algo parecido antes, antepasado?- Kibitoshin rompió su escoba de la pura conmoción, pero la regeneró sin que el anciano se diese cuenta.
-No lo sé… puede ser que sí, pero no estoy seguro.
-¿No sabe?
-¡Por si no te has dado cuenta ya soy muy anciano, y he tenido una vida de muchos eones, así que es natural que no lo recuerde todo! Qué te has creído…
-Pero si usted es un dios. ¡Usted DEBE recordarlo todo!
-¡Ahg! Cállate y sigue barriendo. Lo que quiera que sea esa presencia, no parece muy amenazadora, pero la vigilaré atentamente por si resulta ser peligrosa.
A Kibitoshin eso no le parecía nada normal, porque era un ki de características anormales, y en toda su vida como Dios jamás había sentido nada parecido. No parecía un ki muy alto ni poderoso, así que intentó restarle importancia. Luego de la amenaza que significó Majin Boo para el universo, era muy difícil que surgiera algo peor.

De todos modos ya había comenzado a entrenar por las mañanas, para aprovechar sus nuevos poderes de guerrero fusionado por los pendientes pothara, y dejar en evidencia que ya no era más aquel dios soso que se vio superado ampliamente por unos simples mortales de raza saiyajin. Debía alcanzar sus poderes, y así la galaxia quedaría protegida. Por el momento, debían confiarles la paz en el universo a ellos…


2.- Búsqueda de Spiritia

En la negrura del espacio, la misteriosa forma surge de la nada y mira a su alrededor. Sólo vio estrellas hasta los confines. Pero no era la primera vez que llegaba a un sitio desconocido y buscaba alguna señal de vida, así que sabía lo que hacer. Atravesó el espacio a miles de veces la velocidad de la luz y llegó al centro de la galaxia en un corto instante. Parecía ser que sólo había cuatro escasas galaxias, una baja cantidad. No parecía buen lugar para conseguir la Spiritia que le garantizaba la subsistencia; seguramente las formas de vida eran muy pocas y ella con su grupo agotarían el suministro de valiosa Spiritia en menos de un siglo, teniendo que migrar de nuevo.
Aterrizó en un planeta desierto, pero pronto comprobó que no lo estaba, ya que sólo quedaba una población de 32 criaturas extraterrestres. Ella se acercó hacia ellos y los estudió con su mirada intensa.
-Spiritia 16.- Dijo de uno.
-Por favor ¡Ayúdenos! Nuestro pueblo desapareció hace muchas décadas a manos de la armada del gran Freezer. ¡Dijeron que nuestro planeta no se podía vender a buen precio, y lo arrasaron entero!
-Spiritia, 24.- Estudió a otro, sin prestar atención. Estornudó por culpa del aire enrarecido.
-Fue por culpa de unos guerreros, que se hacían llamar los Saiyajin. ¡Se jactaban de ser los guerreros más poderosos de la galaxia, y no pudimos hacer nada contra ellos! Nuestros combatientes más fuertes fueron vencidos en un solo golpe.
-Spiritia 3 ¡Inútil! ¡Inútil!
-Por favor, nuestro planeta está muerto, y ya no nos queda alimento. Le vimos venir desde el espacio sin usar ninguna nave espacial. Por favor ¡Llévenos con usted!
-¡Inútil! ¿Llevarlos conmigo?
-Sí, por lo que más quiera. Se los suplicamos. Somos los últimos que quedan de nuestra especie.
-¡Spiritia inútil!- Y lanzó un enorme chillido, comenzando a volar para ir a otro planeta cercano.
-¡¡Por favor no se vaya!! Le podemos dar todo el oro, o lo que quiera ¡Incluso este planeta! No nos deje aquí abandonados…
La figura femenina bajó a la superficie agrietada del mundo y se acercó al líder del pequeño grupo.
-¡Saiyajin! ¡Freezer! Sueño de Spiritia.
-¿Quiere que le llevemos con ellos? Eso es muy peligroso, no se lo aconsejo.
-¡¡Saiyajin!! Gran Spiritia, si son fuertes.
-¡Pero… está bien, si es lo que desea. Haremos lo que quiera, con tal de salir de este planeta.
La llevaron hasta una nave espacial estrellada, mientras le comentaban que el gran Freezer desapareció de pronto, y que las personas de su ejército luchan desde entonces por obtener el mando de su armada, así que hacen guerras espaciales unos contra otros. Esa nave se estrelló y todos los tripulantes murieron, pero en sus computadoras había datos de todos los planetas que la armada tenía como objetivo.
-A ver.- Usaron sus tentáculos para teclear.- La última vez que se supo de Freezer, se dirigía a un llamado “planeta Tierra”. Los soldados de la armada no han vuelto a ir, por temor a desaparecer.
-¡Planeta Tierra!- Se sorprendió ella soltando otro chillido. Los extraterrestres usaron sus tentáculos para taparse sus trompetas-oídos.
La figura proveniente de otra realidad distante se envolvió a sí misma y a los 32 habitantes en una esfera de energía, y rápido los llevó hacia la Tierra. No hacía falta revisar las coordenadas en la computadora, siempre a donde iba, ese mundo estaba ubicado más o menos por donde mismo.


3.- Historia de multiversos

-¿De dónde habrá salido esa presencia misteriosa?
Kibitoshin no podía seguir barriendo, pues la figura se movía a una velocidad inimaginable hasta para los saiyajines. Había atravesado media galaxia, y ahora iba hacia… ¡No era posible!
Se acercó corriendo hacia el anciano Kaioshin, y por poco se tropieza con su propia escoba. La mandó a volar hasta dejarla en órbita, con tal de correr lo más rápido posible.
-¡Qué demonios está pasando!
-Shhh, cállate que no me dejas ver. Además eres un dios, no debieras decir “demonios”.
-Oh, ¡Discúlpeme! Pero necesito saber qué es lo que sucede.
-¿Quieres cerrar tu bocota? ¡Con mil demonios!
Kibitosin cerró su boca y se inclinó para mirar en la bola de cristal del respetable anciano. La mujer tenía aspecto humanoide, y pudo fijarse que el anciano Kaioshin estaba más interesado en sus atributos de buen tamaño, en vez de preocupado por cualquier posible amenaza que ella significase.
-¡Pero no sea tan pervertido! ¡Oh, respetabilísimo supremo kaiosama anterior!
-Espero que traiga amigas de donde ella vino, jejeje…
-¿Por qué no la habíamos detectado antes? ¿Cómo es que tiene esa velocidad tan increíble?
-Es imposible que la hubiéramos detectado antes, porque no es de aquí.
-¿Cómo dice?
-Ahhh… mejor te lo confieso. Ustedes los jovencitos no tienen idea de nada, no sé qué les enseñan en las escuelas para dioses.
-Por favor, cuénteme lo que sepa.
-Entonces siéntate.- Y se lo dijo sin quitar la vista de su bola de cristal- ¡Ella viene de otro universo!
-De otro universo… ¡¿De otro universo?!
-Así es, viene de otro universo. Aparte de este, hay infinitos universos posibles, y este es sólo uno, aunque por supuesto el más interesante y fabuloso de todos.
-Entonces hay más universos…
-Así como lo oyes. Son universos totalmente diferentes, hasta en el más mínimo detalle pueden diferenciarse, o también pueden ser muy parecidos, pero jamás iguales.
-Pero, yo supongo que en todos los universos hay dioses como nosotros.
-¡No! No tiene por qué haberlo, o tal vez haya dioses en todos, pero son por completo diferentes. Toma un folleto.
Sacó de un bolsillo un tríptico y se lo pasó a Kibitoshin.
-Aprenda sobre los multiversos, y sus enigmáticas criaturas… universo caracol mutante, universo Ranma, Dragon World, universo Shipudden, universo Atenea, universo de Aralé… oiga, yo juraría que el Dragon World y el universo Aralé son el mismo.
-¡No lo son no seas menso!
-Universo Magus, universo Lavos, universos Lavos 2, universo Lavos 3… hay bastantes universos de Lavos, eso debió ser triste. Universo Robote…
-¡Ese universo ni siquiera lo termines de nombrar, que viven puros engendros allí!
-Bueno. Universo Gundam, universo Gundam B, universo Gundam C… vaya, eso se hace repetitivo. Hay espacio hasta la Z, deben ser universos muy populares.
Pero nada en claro sacó con ver listados de universos, además el tríptico era mágico y tenía como cien mil hojas. Mejor seguir por la bola de cristal al ser misterioso, a ver qué tramaba en este universo.


4.- Buscando a Míster Satán

La pequeña hija de número 18 necesitaba conocer más mundo que aquella pequeña isla donde estaban alojando, así que su madre decidió llevarla a Ciudad Satán a cobrar el dinero que el susodicho le debía. Ya que se dejó perder en el fracasado torneo de las artes marciales, tenía que ir a cobrar la suma de dinero correspondiente. Lo primero que harían sería buscar una gran mansión para vivir fuera de la isla, y alejarse por fin de ese viejo calenturiento de Roshi. Si Krillin no quería dejar la isla, lo arrastraría con ella a patadas.
-Ese Satán seguramente va a rehusar pagar, así que debo pillarle cuando esté lejos del tal Boo. Ya no estoy en condiciones de que me conviertan en chocolate otra vez.
Hablaba sola pero la pequeña Marron escuchaba todo. Hablar de chocolate sólo hacía rugir su estómago de hambre.
-Oh tranquila. Mami ya te conseguirá algo de comer.
Pero antes debía hacer pagar a Satán, así que esperó a las afueras de un banco a que alguien lo asaltara. Así vendría Satán presumiendo ser un héroe y ella lo increparía.
-¡Ah, perfecto! Ya lo están asaltando.
Y una sombra se vio venir desde el aire. Era Gohan, que bajaba hacia la carretera y comenzaba a hacer poses ridículas.
-Oye, hijo de Goku.
-Mi nombre es Gohan…
-Ya sé, da igual, sólo quiero que me digas en donde vive el papanatas de Satán.
-¡Oigan, el gran Saiyaman se llama Gohan!- Dijo un peatón, y todos empezaron a cuchichearlo.
-¡Oh, pero qué es lo que he hecho!
-Sólo dime en donde vive Satán, y te dejaré seguir con tu baile.
-¡No vengo aquí a bailar! ¡Vengo a proteger a la justicia y a derrotar a los villanos que interfieren la paz! ¡Ha, huh, ha!
-Mejor me voy de aquí.- Y prendió el motor de su vehículo descapotable.
-Bueno, hasta luego.- Gohan no tenía tiempo que perder así que entró en el banco.
Número 18 continuó, hasta que tuvo que frenar por culpa de una mujer con un traje morado muy extraño, con hombreras así como las de Piccolo, que se cruzó en el camino. Tenía orejas alargadas, caninos como un vampiro, el cabello oscuro, algo como una joya ovalada en la frente, y estaba acompañada de una panda de criaturas gelatinosas con tentáculos. La mujer rara miró a 18 pero no le prestó mayor atención, estaba buscando algo.
-Humanos no.- Dijo- ¡Saiyajin!
-¿Qué dice, saiyajines?- Le tocó la bocina para que se quitara de en medio.
Los seres de gelatina se asustaron y se fueron a cualquier parte, pero la mujer siguió ahí, y se fijó en un gran letrero de un hombre con bigote y mal afeitar. Tenía un gran cinturón, y a su lado con grandes letras decía “Ciudad Satán”.
-¿Satán?
-¿Acaso no conoces a míster Satán?- Le dijo un transeúnte.- ¡Él es nuestro salvador! ¡Es el hombre más fuerte del mundo!
-¿Más fuerte? ¡Mucho Spirita!
-Si tienes una cita conmigo, yo te puedo decir en donde estará Mister Satán. ¿Seguramente lo quieres conocer, no?
La mujer extraña alzó una ceja y tomó al hombre del cuello de la camisa.
-¡Míster Satán! ¡Ahora!
N° 18 pensó en interferir, pero para ese tipo de cosas estaba el Gran Saiyaman. Además el sujeto le diría en donde estaba Satán, y también necesitaba de su paradero.
-Aahh… él vive en su gran mansión, al Norte, al frente del parque Satán, a un lado del Satán Mall, y a dos manzanas de la universidad Satán.
La mujer se fue volando en la dirección a la que apuntó la persona, y dieciocho decidió seguirla. Pero aquella mujer sabía sobre los Saiyajines, y parecía tener habilidades de combate, así que no podía exponer a su hija de tal modo. Se bajó del auto y lo guardó en una cápsula. Voló con ella rápidamente hasta el banco, en donde Gohan ya había reducido a los malhechores.
-Oye ¿Puedes llevar a mi hija a la Kame House con Krillin? Ustedes son buenos amigos, hazle ese favor.
-Eh… bueno, ¿Pero y tú?
-Gracias.- Y se la dejó en los brazos. La niña le pidió chocolates.
-Jeje, yo conozco a alguien que te puede dar todos los chocolates que quieras… pero eso no sería adecuado. Mejor te llevo con tu papá.
Alzó el vuelo, y también 18.
-¡Oh ya veo! Vas en dirección de ese ki tan extraño ¿No es así? Ten cuidado, no es una persona ordinaria. No puedo entender un ki de esas características, así que mejor no te confíes.
-Eso no me interesa. Yo sólo la sigo porque está buscando a Satán.- Y se fue sin mayores explicaciones.


5.- Medición de Spiritia

El nuevo universo de sólo 4 galaxias parecía interesante. La flota había llegado a un lugar del espacio en donde había multitud de naves. El comandante se comunicó con ellos ordenándoles rendirse en nombre del gran Freezer, y les habían comenzado a atacar. Resultó ser que la tecnología de la armada de Freezer era ridícula, y sus naves inferiores, pero al parecer había seres con poderes propios y algo llamado “poder de pelea”, los cuales estaban poniendo en apuros a los pilotos.
-Gavil.
-Diga, Lord Gepernitch.
Él desplegó imágenes de los soldados de Freezer.
-Reunir hombres a través de los universos para mantener nuestra flota es tarea costosa, y estos individuos los están destruyendo. Ve y enséñales.
-Claro, Lord Gepernitch. Iré con Gravil.
-No. Quiero que Gravil se quede en esta nave. Este universo es diferente a los demás… lo siento. ¡Siento la Spiritia fluir como agua en un manantial! Gravil sólo saldrá en caso de urgencia.
Gavil entonces salió sólo, y tomó un puñado de soldados para su escuadrilla. Como era su costumbre, salió en su Mecha FBz-Saubergeran aunque no lo necesitase, pues era más divertido maniobrar naves caza variables.
-Veamos la belleza de estos soldados de Freezer.
Pero una de las naves grandes comenzó a dispararle repetidamente, al notar que él era quien estaba al frente. Esquivó 2 y 3 disparos de energía, y tuvo que transformar su mecha para esquivar el cuarto y el quinto tiro. Con su caza en forma de aeronave, fue a toda velocidad hacia la nave insignia, pero uno de los soldados de freezer con un casco para resistir en el espacio le lanzó una bola de energía, y destruyó su mecha.
-¡Ahg! Sujetos molestos hay en todos los universos.
No podía regresar por un mecha nuevo, así que tenía que pelear contra ellos.
-Sólo son pequeñas escorias sin nada de belleza.
Antes de aniquilarlos revisó el nivel de Spirita que tenían, y no estaban tan mal.
-500… 400… ¡1.260! Esto no está tan mal. En este universo podremos recolectar más Spiritia que en el universo Shippuden. Nadie tenía tanto poder allí… tal vez no sea bueno matarlos a todos tan rápido ¡Jeje!
-No te entretengas, Gavil.- Escuchó la voz de Lord Gepernitch en su mente- Muy pronto iremos a un lugar donde la Spiritia es tan alta, que rebasa a la de miles de universos juntos. ¡Será una época de deleite para nosotros!
-¿De verdad existe un lugar así? Entonces acabaré con estos pobres soldados, no tienen belleza.
Solamente se dedicó a volar atravesando todas las naves una por una, hasta que quedaron destruidas e inútiles. No hacía falta cansarse por tan poco, y no perdió una sola pluma de sus alas.
-¡En nombre del gran Freezer! Ríndete o te aniquilaré.
Era un soldado con cuernos en su cabeza, el cual le apuntaba con alguna clase de arma inservible. Temblaba de miedo, y Gavil se acercó mientras el soldado retrocedía unos pasos.
-¿Qué es eso que llevas en tu ojo?- Preguntó.
-¡Ríndete en nombre del gran Freezer!- Y jaló el gatillo, pero el disparo rebotó en Gavil.
Este golpeó al hombre en el estómago y repitió la pregunta.
-Es un rastreador.- Contestó escupiendo sangre verde.
-Un rastreador…
Se lo quitó y se lo puso igual que el soldado. Tocó unos botones y aparecieron en pantalla un montón de símbolos.
-¡Yo no sé leer este idioma! ¿Qué es lo que dice?
-Sirve para medir el poder de pelea de los oponentes.- El soldado quedó agonizando por las hemorragias.
-Ah… entonces es similar a un medidor de Spiritia. A mayor poder de pelea, la Spiritia debe incrementarse.
Decidió llevárselo a Lord Gepernitch para que lo analizara, y terminó de destruir todo mientras se limpiaba algo de polvo de sus alas blancas. Hubo gente que pensó que era familiar de Freezer por el color de su pelaje, blanco y morado, pero a Gavil no le gustó semejante comparación y los eliminó sin siquiera absorber algo de Spiritia valiosa.

Al llegar a la nave le entregó el artefacto a Gepernitch, y este comenzó a inspeccionarlo.
-Se supone que con este botón, podrá ver mi poder de pelea, y por ende, medirá toda mi Spiritia.
El hombre se sacó su máscara del rostro y dejó ver sus ojos brillantes, para cubrirse con el rastreador.
-Entonces hay que comprobarlo.
Encendió el objeto y aparecieron varios números alrededor. Indicaba el nivel de pelear de los hombres que peleaban fuera de su nave insignia.
-Este idioma es rudimentario y no hay dificultad para entender. La armada de Freezer tiene poderes de 600, u 800 puntos. Hay un sujeto con 10.800, es el más fuerte de todos. Pero es Spiritia inservible a mi propósito, insuficiente…
-Oh, Lord Gepernitch ¿Por qué no mide mi poder de pelea con ese artefacto?
Así lo hizo, pero cuando estaba superando los 23.000 la maquina explotó sola.
-Debe estar descompuesta.- Dijo- Y es tecnología inútil que no nos sirve. La Spiritia en este universo se concentra casi toda en un solo lugar, tanto que se puede sentir…
Gepernitch ordenó los preparativos para un Fold de larga distancia.
-¿Cuál será el planeta al que iremos, Lord Gepernitch?
-La Tierra.


6.- Satán es secuestrado

La mujer misteriosa se había detenido en el aire, a ver si veía el Mall Satán, o el parque Satán, y así descubría su mansión. Número 18 se escondió tras un rascacielos, aunque al parecer la mujer no le podía detectar si no era con la vista. Eso le permitiría escabullirse y pillar a Satán antes que ella, para luego llevárselo lejos. Tal vez si amenazaba con dejarlo caer desde una gran altura, le diese el dinero que le debía.
-Satán ¡Spiritia!- Y la mujer comenzó a descender hasta su mansión.
Entró por una ventana rompiendo el vidrio a su paso, y un pequeño perro le ladró asustado. Ella lo ignoró, y N° 18 entró por la misma ventana.
-Spiritia 1 ¡Inútil!- Y la mujer se fue de la habitación ignorando al perro Bee.
Dieciocho miró por los pasillos antes de seguirle, ya que era obvio que el gordo de Majin Boo estaba dentro de la mansión, pues nadie podía verle fuera o la ciudad entraría en pánico. No quería encontrarse con esa gran masa rosa, así que inclusive iría flotando para no hacer ruido con sus pisadas. Siguió a la mujer de morado por unas escaleras, pero el problema fue que Bee también lo hizo, y con muchos ladridos. La mujer no se interesaba, pero N° 18 tenía que ser sigilosa si quería interceptar a Satán.
-Ven perrito bonito ¡Ven perrito!
Tuvo que agacharse y Bee se la acercó y le dio de lengüetazos. Ella se rió pues no se lo había esperado, pero no podía quedarse jugando. Mejor lo metía dentro de un armario o algo así, para que no hiciera ruido.
Pero en lo que la mujer misteriosa se alejaba y entraba en una habitación, Boo apareció por un rincón dando saltitos. De pronto chocaba en los muros y los dejaba destrozados, pero luego se disculpaba con Satán y a él se le olvidaba.
-¿Y tú quién eres?
18 vio todos sus planes frustrados, y Boo le preguntó qué hacía con el perro.
-Estoy jugando con él, ¡Sí! Sólo juego…
-¿Eso es jugar? Te está lamiendo, cree que tienes sabrosa la cara.
-Es que soy muy amiga de este perrito.- Boo parecía ser demasiado infantil para pensar en atacarle, así que le siguió la corriente.
-¿Eres amiga de él? ¿Entonces no quieres un chocolate?
Y extendió en su mano 3 bolitas de chocolate.
-Esos chocolates no eran antes…
-Ese de ahí era una ardilla, ese era una abeja grande, y ese era chocolate, pero lo convertí en chocolate también para sentir un sabor doble.
-Ah, bueno, entonces sí.- Y glotona se comió los tres. El de chocolate doble fue muy empalagoso- Oye ¿Y Mister Satán no está por aquí? También es mi amigo, quiero jugar con él… sí, jugaré mucho con él.
-¡Está en el baño! Pero yo sé que le da hambre e irá a la cocina después.
-¡Gracias!- Y se fue rápido mientras Boo empezó a lamer al perro, aunque no tenía la cara sabrosa.
18 le preguntó a una sirvienta dónde estaba la cocina, haciéndose pasar por una invitada. Una de las mujeres la reconoció de la pelea en el torneo, y supuso que estaba ahí para entrenar con el mejor del mundo.
-Sí, a eso vengo.- Y entró a la cocina para no avergonzarse más. Para quedar en un ridículo así, tuvo que cobrar mucho más.
La cocina era bastante amplia, pero lo raro es que estaba la mujer misteriosa comiendo fideos. Al parecer también pensaron que ella era invitada, y le dieron comida. Ella parecía hambrienta, y enrollaba los fideos telepáticamente, porque había roto el tenedor sin querer. Miró a N° 18 y leyó su nivel de Spiritia.
-Spiritia… 4. Inútil.- Y siguió comiendo con ansias.
Dieciocho comprendió que la mujer no era ninguna amenaza y también pidió comida, aunque prefirió una lasagna.
-Dame.- Le dijo ella.
-¡No! Quienquiera que seas.
La mujer extraña sólo se dedicó a hacer chillidos en señal de protesta. De pronto Mister Satán hace ingreso a la cocina y entra con paso triunfante, hasta que ve a 18.
-¡Ay mamá!- Y se va dando un portazo desesperado.
La androide aprovecha de masticar rápido y dar un nuevo bocado, y sale a la captura del falso campeón.
-¡Lasagna! Ñmm, rica.
Mientras termina de robar la lasagna la mujer rara se percata de que ese era Satán y también sale tras él, pero cuando llega, la androide 18 ya lo tenía en su poder, y con un disparo de energía rompe el techo y se lo lleva volando. Su idea era que como Boo no podía salir de esa mansión, entonces era mejor irse de ahí cuanto antes.
La mujer misteriosa vuelve a registrar 4 en el nivel de Spirita de número 18, lo que le pareció muy raro. Antes de revisar a Satán, estudió a una joven que se le aproximaba.
-Spiritia, 20. Inútil, ¡Inútil!
-¿Y tú, quién eres?- Le preguntó Videl, quien venía saliendo de un entrenamiento con una toalla al cuello.
Pero entonces ve el techo roto y piensa que fue la mujer.
-¡Boo, ven aquí rápido! ¡Alguien nos ataca!
Videl reúne energía en sus palmas, pero no consigue dispararla así como lo hace Gohan. Al menos lanzó algo de viento, lo cual ya era un progreso. Al mirar por el hoyo en el techo, ve lo que está pasando.
-¡Aaah! Están secuestrando a mi padre. ¡Boooo, ven rápido!
Pero la mujer prefirió irse haciendo su propio agujero en el techo, pues tenía que comprobar la Spiritia de la persona más fuerte del mundo.

Boo llegó, pero no quiso salir a perseguir a 18 porque ella era amiga de Satán, y lo llevaba a jugar. Además Satán le dijo que no podía salir de su mansión por ningún motivo.
-¡Pero lo están secuestrando! ¿Por qué no haces algo?
-¿Qué es secuestrar?
-¡Aaaj! Olvídalo, iré yo, aunque no consiga nada.

 

Me han pedido que haga mayores saltos de línea para mi texto, pero pegando con o sin formato, no puedo hacer doble espaciado. Mis disculpas, es un asunto estilístico.


7.- Lady Saiyaman al rescate

Como si ya no tuviera suficiente, Videl olvidó sacarse la toalla, y ante la más mínima corriente de viento esta se le pegó a la cara impidiéndole ver. Por poco choca con el letrero gigante de la universidad Satán, pero tuvo tiempo de eludirlo. No vio a la mujer misteriosa ni a la número 18 con su padre por ningún sitio, así que se concentró todo lo que pudo, e intentó sentir sus ki.
-Gohan me lo enseñó… no debe ser tan difícil.
-De pronto sintió el ki de su padre, y muy cerca una presencia extraña. No parecía ser maligna, pero estaba confundida sobre eso. No había podido sacar mayores conclusiones sobre aquel ki raro. Tampoco pudo sentir la energía de número 18.
-Bueno, mi padre no sabe volar, así que esa androide todavía lo debe estar llevando.
Partió en su dirección a toda velocidad, pero ella no era muy rápida. De todos modos recordó apretar un botón de su reloj y así apareció el traje de Lady Saiyaman que la mamá de Trunks le había confeccionado. Así podía volar sin temor a ser descubierta.

Número 18 se alejó lo suficiente, saliendo de la ciudad. Había un monte bastante alto, y se posó en el borde de un precipicio, bajo amenaza de tirar a Satán por el abismo.
-¡Tú me debes dinero!
-Te juro que te lo voy a pagar, todo todito. ¿Sí?
-Lo quiero en este mismo momento, míster Patán. ¿Me oyes? Tengo cosas que comprar.
-Pe… pero todavía no me dan el dinero del torneo, no te lo puedo pagar todo.
-No digas idioteces. Sé muy bien que tienes mucho más dinero que ese, así que no te será problema pagarme.- Y se le ocurrió una idea- ¿O qué? ¿Quieres que te suelte aquí, a la vista de todo el pueblo, para que te vean caer y quedar sumamente herido? ¿Y que todos se enteren que eres un farsante?
-¡No no no! Por favor, tengo una reputación que cuidar.
-¿¿Reputación??- La mujer misteriosa había llegado y revisó el nivel de Satán- Spiritia… ¿Siete?
Y comenzó a dar alaridos altisonantes de decepción. El hombre más fuerte del mundo sólo tenía 7, y de hecho la chica que estaba en su casa era la persona más fuerte que había comprobado en todo el planeta.
-Eeem… como iba diciendo, señorita número 18, yo le puedo pagar todo lo que quiera, pero el dinero está en mi casa.
-No digas eso, no soy tonta ¿Acaso me quieres llevar a tu mansión para que la bola rosa se deshaga de mí?
-¡No! ¿Cómo cree? Además, tienes amigos muy poderosos y no quiero que Boo se meta en problemas. ¡Además también son mis amigos! Todos somos amigos ¿Verdad? No hay para qué ponernos así.
-Amigos poderosos…- La mujer tuvo una nueva esperanza. Su búsqueda de Spiritia no estaba teniendo resultados, pero tal vez sus amigos sí fuesen poderosos, pues eran capaces de volar y disparar energía.
Así que se aproximó rápido hasta la androide 18 y le miró fijamente a los ojos. Buscó lo más posible dentro de ella, intentando encontrar lo que estaba pensando… pero 18 no se dejaba hipnotizar así de fácil.
-¿Qué es lo que quieres?
Un chillido muy agudo le bastó, y sus ojos y la gema en su frente comenzaron a brillar. Pronto los ojos de la androide 18 también lo hicieron, y ella soltó involuntariamente a Satán, quien dio un grito y trató de volar así como el novio de Videl, pero sin resultado alguno.
De pronto la mujer misteriosa desapareció dentro del cuerpo de 18, y ella pareció desmayada un segundo, pero se compuso.
-Recuerdos… Krillin ¡Alta Spiritia!
Y se envolvió en una esfera de energía luminosa, para moverse más rápido que la luz hacia otro lugar.
-¡Kame House!- Como ahora era la N° 18, podría pasar desapercibida.

Mientras tanto, Míster Satán caía irremediablemente, y ahora intentaba nadar en el aire, o lo que fuera con tal de poder volar y salvarse. Pero apareció Lady Saiyaman y ella con un gritó asustado fue a por él.
-¡Aaaah! ¡Me caigo sálvame!
Ella lo persiguió en un descenso en picada, pero no podía alcanzarlo.
-¡No puedo volar tan rápido! ¡Vas cayendo muy velozmente!
-¡No te preocupes Lady Saiyaman! ¡Yo soy míster Satán, el hombre más fuerte del mundo! Caeré y no me haré nada de daño.- Pero en realidad estaba muerto de miedo- Yo derroté a Majin Boo, ¿Por qué crees que una simple caidita me va a hacer daño?
-Ay, esto no puede ser…- Se sacó el casco- ¡Soy yo, Videl!
-¡Oh! Con qué esa era la identidad secreta de Lady Saiyaman… ¿Por qué mi hijita está usando esos atuendos tan ridículos? ¡Yo no te eduqué para eso!
-Mejor me concentro en tratar de salvarte… creí que sabías que era yo, era muy obvio.
Volvió a volar a su máxima velocidad, pero no lo alcanzaba.
-¡Ya sé! Papá, sácate tu capa de campeón mundial y trata de usarla como un paracaídas.
Era buena idea, así que él desesperado lo intentó, pero en vez de tener un paracaídas, consiguió quedar atrapado en una raíz de árbol que estaba creciendo por fuera del precipicio.
-Se va a rasgar, y luego caeré directo al suelo…
Hasta que Videl por fin pudo agarrarlo. Una vez en el piso ella se quitó el traje, pero quedó preocupada por los acontecimientos que su padre le contó.
-¿Es decir que la androide 18 fue poseída, o algo así?
-Sí, gritó “Kame House”, y se fue volando.
Era un alivio para él, porque ahora no iba a necesitar pagar. Pero Videl tenía ganas de investigar, y había una gran bola rosa adecuada para ello.

 

8.- Krillin en problemas

El duende tortuga disfrutaba de la vista, puro océano hasta el horizonte. De pronto se veía una ballena saltar, pero tan lejos que era como un punto. En su silla de playa, prefería ver revistas que el mar, pero aun así estaba atento a lo que pasaba a su alrededor.
Pero no vio a número 18 llegar. Tampoco estaba su lancha en alguna parte, y si la hubiera vuelto cápsula eso suena, y él tiene el oído de un maestro de las artes marciales, así que no pudo pasar inadvertida.
-Oh que temprano llegas número 18. Hace mucho calor ¿Por qué no te pones el bikini que te regalé y te das un baño? Yo te puedo poner bloqueador, y…
-Spiritia… 139. Por lo menos.
Roshi se levantó, pues se dio cuenta de que Marron no estaba por ninguna parte. Tal vez estuviese jugando con la tortuga, pero entonces notó algo raro en número 18. Tenía un ki, un ki indescifrable y que nunca había sentido desde que había aprendido a sentir presencias.
-Te ves distinta.- Aseguró- Más pálida.
-¡139!- Y lo tomó con fuerza de los hombros, pero antes de hacer nada apareció Krillin desde dentro de la casa y le saludó.
-¡Ya llegaste 18! Parece que no te costó mucho sacarle a Satán el dinero de tu trato, ¿Eh?
Número 18 miró a Krillin atentamente. Tenía muchos recuerdos de él, aunque en cierta forma sabía que se los estaba transmitiendo a la mujer que se alojó en su interior. En realidad, ni siquiera sabía si era la androide 18, o la mujer rara. Pero le urgía estudiar a Krillin.
-Spiritia…
Y un grito de placer le envolvió.
-¡Spiritia 1.283.214! ¡Sueño de Spiritia, paraíso!- Y comenzó a reír descontroladamente, tirando a Roshi lejos. Este rebotó un par de veces en la arena y se incorporó rápidamente.
-Oye, no te enfades con el maestro Roshi. Él es un viejo verde, pero es buena gente.
Ahora era la hora de tomar a Krillin por los hombros. Le dio un beso, y él no se resistió en lo más mínimo a los deseos de su esposa. Pero de pronto comenzó a sentirse un poco raro. Un hormigueo le recorrió entero, y empezó a sentirse un poco cansado, cada vez más. Su cuerpo empezaba a sentirse pesado.
-No Krillin, ten cuidado ¡Esa no es 18!
No sabía por qué el duende tortuga le decía eso, pero 18 estaba exhibiendo un ki muy extraño. Además, ella no era tan abrupta y aunque el maestro Roshi le sacaba de quicio, nunca le había tratado así.
-¡Spiritia!- Fue la palabra cuando sus bocas se separaron.
-¿De qué estás hablando, 18?
-¡No puedo, no puedo!- Y uno de sus gritos agudos resonó en toda la isla, suficiente para comenzar a resquebrajar las tablas de que estaba hecha la Kame House. De pronto un gran crujido anunció cómo los cimientos iban a ceder.
-¡No puedo! Demasiados sentimientos…
La mente de dieciocho le estaba jugando malas pasadas ¡Ella jamás atacaría a Krillin, y menos consumir toda su energía por completo! Ya que su cuerpo humano le estaba traicionando, debía abandonarlo, pues sólo era un envoltorio inútil. Salió envuelta en su esfera de energía, y extendiendo todo su cuerpo se concentró en el discípulo del duende tortuga. Krillin se sintió debilitar, y una especie de aura verde salía de su cuerpo y entraba en el de la mujer misteriosa.
-¡Dieciocho!- En vez de tratar de entender qué estaba sucediendo, fue a ayudar a la androide, que se hallaba inconsciente en el suelo.
Pero todo eso era inútil, pues se sentía cada vez más cansado. Tenía que pelear. Aunque esa mujer hubiese derrotado a 18 de algún modo, no iba a permitirle destrozar la Kame House, o quitarle su energía.
-¡Si quieres pelear, entonces busquemos un lugar mejor que este!
-¿Pelear? Yo quiero tu Spiritia.
La mujer nuevamente intentó seguir su extracción, pero Krillin se resistió moviéndose alrededor suyo, buscando un punto débil. Se elevó en el aire, y trató de alejarse de la isla.
-No te preocupes Krillin, yo me ocuparé de 18. Ten mucho cuidado, tengo un mal presentimiento.
-Está bien, maestro Roshi.
-¿Pelear por Spiritia?- Preguntó la mujer.
-Sí. Pero me deberás explicar que es esa Spiritia, y qué le hiciste a 18.
-Como sea.
Se elevó en el cielo a tal velocidad que a Krillin le costó trabajo seguirle con la vista.
-Rayos… por qué estas cosas siempre me pasan a mí. Espero que los chicos ya hayan notado este ki, y vengan a investigar qué sucede.
-No estés tan seguro Krillin. Esté ki no es necesariamente maligno.
Por lo menos Krillin sabía que Dende lo veía todo, y tal vez Piccolo estuviera intrigado por el origen de esta posible amenaza.

 

9.- Observando desde el templo

En el templo sagrado de Kamisama, Piccolo levitaba tranquilamente. Era evidente que él también había sentido ese ki tan extraño, y Dende junto a él revisaban los acontecimientos. No sabían que se avecinaba algo peor, así que sacaban conclusiones sobre el hacer de la mujer.
-Al parecer tiene la capacidad de extraer la energía de las personas.- Le explicó Piccolo a Dende y a Mr. Popo- Sin embargo, no entiendo por qué le fue tan fácil poseer el cuerpo de la androide 18, y en cambio tuvo esos problemas con Krillin. La diferencia de poderes es muy grande, debe haber algo más que no tenemos en cuenta.
Una figura apareció teletransportada al templo.
-Yo tengo la respuesta a eso.
Dende se impresionó de ver a la fusión de Kibito y el supremo Kaiosama allí, y Piccolo también se expresó de igual manera.
-Supuse que nunca iba a volver a verlo, supremo kaio. Entonces eso significa que esto es más grave de lo que pensábamos. De otra forma, no hubiera bajado a nuestro planeta a vigilar la aparición de esta mujer extraña.
-No tengo idea cuáles son sus intenciones.- Declaró la deidad- Sim embargo, he decidido venir puesto que la aparición de ella es muy inusual. En toda mi vida, jamás había aparecido una visitante de otra dimensión.
-¿De otra dimensión dices?- Piccolo prefirió dejar de levitar en su estado de meditación.
-Así es. Pero no me refiero a otra dimensión como el más allá, o el mundo de los demonios. Proviene de un universo diferente.
-¿Otro universo?- Se asustó Dende- Entonces, por eso debe tener esa velocidad. Atravesó el planeta en cuestión de un segundo.
-Sí, también atravesó la mitad de la galaxia del norte en cosa de minutos.
-Ni siquiera Gohan podría llegar a tal velocidad. De poder sobrevivir en el espacio, claro.
Guardaron silencio un momento, y Piccolo prosiguió con sus conjeturas.
-Si existe una criatura proveniente de otros universo, entonces se sometió a otras condiciones totalmente distintas a las nuestras.- Al namekuseijin eso no le gustaba para nada- Es difícil imaginar qué amenazas nos puede presentar un ser de otra realidad absolutamente diferentes a esta, está fuera de nuestro alcance.
-Es por eso que como supremo kaiosama debo averiguar todo lo referente a estas criaturas. Y si esto resulta ser una amenaza para nuestro universo, es mi deber defenderlo. Esa es la verdadera razón por la que he bajado.
-Acaso… ¿Viene a pelear?
-Así es, Dende. En el enfrentamiento contra Boo no ayudé para nada, y es mi deber como Kasioshin redimirme y ser de utilidad para ustedes, en el peor de los casos.
Era una redención, pero por supuesto esperaba que no se produjese, y que esta visitante de otro universo no fuese malintencionada, o en caso de serlo, no fuese poderosa. Acerca de eso le preguntó a Piccolo.
-Por las características incomprensibles de su ki es imposible definir su poder, pero hasta el momento, aparte de una velocidad asombrosa, no ha demostrado nada más. Las conclusiones acerca de la fuerza de esa mujer deben esperar a que tenga su batalla con Krillin, ahora mismo están buscando alguna isla pequeña y deshabitada.
-La mujer no parece interesada en el combate.- Comentó Dende- De hecho, observa por los alrededores a ver si no aparece un ki más grande que el de Krillin.
-Eso es buena noticia.- Observó Piccolo- Significa que no es capaz de sentir nuestras presencias. Creo que no es capaz de sentir la energía de las personas, a menos que esté mirándolas.
-Bueno.- Se despidió Kititoshin- Yo iré a investigar el asunto. Espero volver con buenas noticias ¡Nos vemos!
Lo despidieron y él se fue volando… pero a otra dirección.
-¿Y hacia dónde va?
-Esto es más preocupante de lo que parece. Kaioshin no nos reveló toda la información, es por eso que fue hacia otro sitio, en vez de hacia la batalla. Lo escuché claramente decir que él, como supremo Kaio Sama, debía averiguar todo lo referente a “esas criaturas”. Eso es plural.
-¿Quiere decir que entonces son más?
-Eso parece. El supremo Kaio fue a encontrarse con ellos antes de que aparezcan.
Piccolo se aproximó a una orilla del templo, y miró hacia abajo y al horizonte el cielo.
-Desde luego, yo tampoco me quedaré aquí sentado sin hacer nada. Anteriormente una parte de mí fue el dios de la Tierra, por lo tanto también tengo la obligación de proteger este lugar.
-Ya veo… no cree que Gohan llegue a tiempo de ayudar a Krillin.
-No lo sé, él todavía no sabe acerca de la batalla. En cuanto note que el ki de Krillin comience a disminuir, aumentará su velocidad.
Bajó a toda prisa, pero antes debía hacer una parada rápida con Karin.
-Maestro Karin, ¿De casualidad no han brotado algunas semillas del ermitaño?
-Claro claro, pero sólo me queda 1. Hay que usarla sólo si es verdaderamente urgente.
-¿Qué? ¿Sólo una?
Yayirobe dejó de comer una pierna de avestruz para entrometerse.
-¿Ya se te olvidó que la batalla con Majin Boo fue hace menos de 2 meses? No ha dado tiempo de que crezcan nuevas. Además cuídate de que no te maten, porque ya estás bien débil eh.
-¿¡Y tú que te crees, gordo pendenciero!? No eres precisamente el que más nos ha ayudado.
-Como digas, déjame en paz. Yo no voy a ir a pelear con enemigos como Cell o Boo, eso sería suicido. Todavía soy joven y tengo mucho por comer.
Piccolo decidió no perder el tiempo e ir con aquella única semilla al sitio de la batalla. En realidad estaba muy confiado de sus poderes, si es que tenía que pelear contra aquella mujer extravagante. El que le preocupaba era Kaioshin, quien tal vez iba a meterse de lleno en todos los problemas.

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Mañana habrá pelea ^^

 

10.- Comienza la pelea

Krillin había estado ganando tiempo, paseando en busca de una isla sólo habitada por pequeños animales. Había sentido la presencia de Gohan aproximarse, pero aún faltaba bastante tiempo para que llegase. Además traía a su hija Marron, lo cual le sacaba un peso de encima, pero a su vez significaba que tardaría un poco más en prestarle apoyo, si es que su oponente resultaba ser poderosa.
-¿Te parece bien en esa isla?
-¡Rápido! ¡Spiritia!
La impaciencia de la mujer estaba en aumento, así que mejor comenzar de inmediato y no hacer más rodeos.
-Bien… cuando quieras.- Krillin ya estaba asumiendo una posición defensiva, y le pareció irónico que lo hiciera instintivamente aún sin saber el poder de su enemiga. Pero ella había dejado sin conocimiento a 18, así que era obvio que se trataba de alguien más poderoso que él.
Sorprendentemente la mujer se le acercó caminando, y se quedó mirando su postura, con los ojos bien abiertos.
-¿Eh? Qué estás haciendo.
La mujer incluso lo olió, y de pronto recordó.
-Ah… pelear por Spiritia.- Y también asumió una postura de combate, aunque bastante precaria. Puso los brazos muy altos para cuidar su rostro, y eso dejaba vulnerable su estómago. Así que Krillin sin pensarlo dos veces se abalanzó contra ella con una patada directo a su vientre.

Ella lo recibió como si no se hubiera fijado de los movimientos de Krillin, pero no se afectó en lo más mínimo. Él aprovechó la aparente sorpresa de la mujer, y prosiguió con sus golpes. Pero era igual que pelear con una estatua, y no le pasaba nada.
-Vaya, creo que tendré que ser más rudo.
Con un salto hacia atrás tomó unos veinte metros de distancia, y preparó sus manos.
-Kame… hame… ¡Ha!
El ataque viajó rápidamente en dirección a la mujer, y ella decidió moverse al fin y esquivarlo. El kame hame se perdió en el océano y sólo agitó las aguas.
-Es muy rápida. Deberé tomarla por sorpresa.
La mujer misteriosa se quedó flotando en el aire, analizando la energía que Krillin había disparado.
-Disparo… ¿De Spiritia? ¡¡Asombroso!!- Y comenzó a reír emocionada ante su descubrimiento.
-De qué estará riéndose…- Krillin comenzó a preparar un nuevo Kame-Hame, pero la mujer le miraba muy atenta a sus movimientos. Era la hora del factor sorpresa. A toda velocidad se plantó detrás de ella en el aire, y ella comenzó a buscarle con la vista.
-¡Aquí estoy!- Le dijo, y le lanzó su Kame-Hame antes de que ella alcanzara a voltear.
La mandó al suelo y una potente explosión se formó en el área del impacto.
-¡Qué bien! Es menos fuerte de lo que pensaba.
Faltaba que el polvo se disipara y así él comprobaría su victoria… pero el ki tan anormal de ella seguía intacto, sin absolutamente ningún cambio. Las ropas de la mujer estaban intactas, y ni un rasmillón tenía.
-Eso no es posible ¡Le di de lleno!
La mujer creó una ráfaga de viento a su alrededor y comenzó a elevarse nuevamente, mientras miraba su cuerpo por todos lados.
-Jaja… absorción de Spiritia.
Para comprobar que estaba rebosante de Spiritia incluso se dio el lujo de derrocharla generando energía con su voz, y arrasó una porción de la vegetación a su alrededor. El mar comenzó a incrementar su turbulencia, y la tierra se resquebrajaba de a poco. Krillin se vio obligado a taparse los oídos, y la mujer aprovechó el momento de indefensión del guerrero para acercarse a él y darle un golpe en el pecho.
Eso le quitó la respiración al guerrero, pero se dio cuenta de que la mujer había controlado sus fuerzas para no agredirlo demasiado. Estaba jugando con él.
-¡Otra vez!- Le pidió la chica, e hizo con sus manos el gesto del Kame Hame Ha.
-¿Qué? ¡Ni creas, ya comprobé que eso no me ayuda en nada!
Krillin respiró hondo y lanzó una patada al cuello de la mujer, pero esta se alcanzó a cubrir con una mano.
-¡Otra vez!
-¡¡No!!- Krillin se sentía cada vez más furioso ante la idea de que la mujer en realidad se había beneficiado, de algún modo, con su Kame Ha.
Planeó algo distinto. La mujer tenía el pelo demasiado largo, y sería fácil sujetarlo y comenzar a tirarle sin que ella tenga posibilidad de soltarse. Siguió peleando cuerpo a cuerpo con ella sin parecer demasiado obvio en su plan, pero ella se notaba aburrida de la situación y decidió propinarle un golpe en la boca del estómago de un rodillazo.
-¡¡Otra vez!! ¡Spiritia!
Krillin lo resistió y, fingiendo estar adolorido, le tomó por sorpresa el pelo con ambos brazos, para luego girar en el aire a toda velocidad y lanzarla al piso.
Se acercó a ella mientras seguía cayendo y le propinó un golpe poderoso para acelerarla aún más hacia el piso, y finalmente la mujer cayó golpeándose de lleno contra las rocas.
-Ahora… no quería hacer esto, pero te daré algo que no podrás absorber.- Extendió una mano- ¡Kienzan!
El disco de energía se precipitó hacia la mujer, pero ella se incorporó rápidamente y voló hacia aquel poder.
-¿Qué? ¡Pero qué está haciendo!
-¡Spiritia fresca!- Sujetó el disco con ambas manos, y poco a poco este fue perdiendo su tamaño, hasta disolverse.
Krillin terminó asustándose con eso, pues no tenía sentido. El Kienzan podía cortar cualquier cosa, incluso cortó a Freezer aún con la gran diferencia de poderes que había en aquella lejana época. Pero ¡La mujer solamente lo absorbió!
De pronto estaba frente a él con cara de pocos amigos, y de un golpe le mandó al suelo, justo donde ella había caído. En un parpadeó ya estaba frente a él de nuevo, y empezó a propinarle golpes en el estómago, pero Krillin se zafó y procuró mantener la distancia.
-Pero en realidad no debo alejarme… mis ataques de energía no surten efecto en ella. Debo luchar cuerpo a cuerpo, aunque supere mis fuerzas.
Decidió concentrar toda su energía restante en su puño, y viajar a ella a toda velocidad para propinarle un gran golpe en el rostro. Ella otra vez parecía estar divagando y mirándose a sí misma, tal vez sorprendida de algo. Así que era ahora o nunca.
-¡Toma esto!- En fracción de segundos llegó hacia su cara, y le propinó el golpe más fuerte del que era capaz. Pero ella no se inmutó, y apenas le hizo retroceder un metro en el aire.
-Así que eso se llama pelear.- Habló la mujer mirando el puño de Krillin- Ahora que lo sé, te quitaré toda tu Spiritia, y sólo tendrás suficiente para reaccionar tras varios días.
La mujer comenzó a usar sus largos cabellos para sujetar las extremidades de Krillin, y enrolló un mechón muy grueso en su cuello. Ahora ya no podría moverse, aunque él de todos modos podía usar su técnica de Bukujutsu para volar y moverse algunos centímetros. Oponía resistencia, pero ya no lo iba a hacer. De pronto una luz verdosa comenzó a salir de su interior, y producto de ello se sentía cada vez más débil.
Aquella luz verdosa comenzaba a entrar en el cuerpo de la mujer, y esta reía de alegría. Era un muy buen suministro de Spiritia, y Krillin por sí mismo tenía una mayor cantidad que la de ciudades terrícolas enteras de otros universos.

A la mujer le pareció un buen negocio eso de pelear por Spiritia.

 

11.- Una espera incierta

Krillin se sentía desmayar, pero antes de eso, pudo sentir una ráfaga de viento y una voz femenina. Alguien había llegado, y le costó a reconocer a su esposa, pues veía todo borroso.
-Número 18… qué alegría. Había pensado lo peor…
-Suelta a Krillin en este mismo instante.- Ordenó ella.
La mujer estudió a la androide, y esta seguía con sus 4 unidades. Era muy raro, pero prefirió soltar a Krillin, pues él ya nada podía ofrecerle. Este no tenía energías para volar, así que cayó en picada.
-¡Krillin!- La androide rápidamente fue en su ayuda, y la extraña mujer miró la escena, pensando hacia donde más ir, y si acaso habría más sujetos del mismo nivel de Krillin. Seguramente 18 intentaría pelear con ella para proteger a su marido, pero no veía nada de Spiritia en ella, por lo que no valía la pena. Así que partió volando.

No obstante, se encontró con alguien en el camino. Era Piccolo, quien se le plantó en frente.
-No sé qué intención tienes, pero si tu idea es ir derrotando guerreros por donde pases, y robarles su energía, te aseguro que no te va a salir nada de fácil. Es más, estoy seguro de vencerte, así que hasta aquí llegas.
-¡Déjamelo a mí, Piccolo! Y lleva de vuelta a Kame House a Krillin.
La androide venía volando a lo lejos, cargando a Krillin, el que había terminado de desvanecerse.
-No digas eso, 18. Sabes perfectamente quién de nosotros dos es más fuerte, y en este caso prefiero no arriesgarme. ¡Así que yo seré tu oponente! ¿Escuchaste, mujer de morado?
-Sivil.- Dijo ella.
-Así que ese es tu nombre.
-Piccolo, en serio. ¡Ella va a pelear conmigo!
Y sin más, la androide arrojó al aire a Krillin y se abalanzó contra la mujer misteriosa, Sivil. Su esposo alcanzó a decirle antes de desmayarse que no debía lanzarle energía por ningún motivo, así que bastaría con sus puños para derrotarla. Pero Sivil resultó ser bastante rápida, y casi sin esfuerzo logró bloquear todos los golpes. Tomó a 18 de un brazo y giró con ella por el aire recordando lo que Krillin había hecho; luego la arrojó por los aires, para que se impactase con el propio Krillin, quien seguía cayendo. Piccolo iba en su rescate, y logró sujetarlo antes de que cayese al mar.
-¡Pero tú sí que eres porfiada, 18! Te dije que yo iba a pelear con ella.
-¿No entiendes? Debo ser yo. Por poco mata a Krillin, y además también se burló de mi antes.
-Y comí de tu lasagna.- Puntualizó Sivil para añadir.
-¡Eso no tiene importancia! Piccolo, llévate a Krillin a la Kame House de una buena vez.
Piccolo dio un gruñido y terminó accediendo.
-Está bien, y si te termina matando será culpa tuya. Me ocuparé de Krillin, pero es mejor llevármelo de regreso al templo. Allí Dende podrá curarlo.
Comenzó a volar por donde vino, y mientras tanto analizó la situación. Si no la detenían, esa tal Sivil tenía la capacidad de absorber la energía de toda la gente del planeta, aunque eso era una idea que no parecía encajar. El ki de ella no había variado en lo más mínimo a pesar de lograr quitarle casi toda a Krillin, por lo cual no estaba a la busca de un poder más grande.
-La forma en que se defendió de 18 es muy extraña.- Se fue pensando- Sólo movió sus brazos acorde a los ataques; no tiene un método de pelea, sólo estaba repeliendo los golpes como mejor podía ¡Tal vez ni siquiera sepa pelear, pero a pesar de eso tiene unas habilidades impresionantes!

Mientras tanto en otro lugar, Kibitoshin se detenía en las alturas. Estaba mucho más alto que el templo sagrado, casi en el espacio exterior. Según pudo ver en la bola de cristal, después de la tal Sivil, una flota de naves espaciales apareció, y habían vuelto a desaparecer. El supremo Kaiosama de 15 generaciones atrás dijo que no habían desaparecido, sino que estaban viajando por el hiperespacio, y aparecerían cerca de la tierra.
-Por qué todos los problemas tienen relación con este planeta…
Ahora estaba esperando a las naves, y a sus tripulantes de naturaleza desconocida. Esperaba poder hablar con ellos, y en el caso de que no pudiera conocer sus intenciones y fuesen personas de naturaleza maligna, debía encargarse de averiguar si eran o no un peligro para el universo.
No debía precipitarse en su misión. Tal vez esos seres sólo estuviesen de paso, o tal vez sí fuesen enemigos, pero aunque les diesen dolores de cabeza a los saiyajines, no se trataran de una real amenaza para el universo. Como el dios de todo lo que existía, su deber era procurar la integridad del universo, pero no intervenir en otros asuntos aunque se tratasen de seres viles o malignos. Por eso jamás hizo nada contra Freezer. Su poder era insuficiente para hacer peligrar el universo, y aún con él la vida continuaría. El monstruo boo era otro asunto distinto, y esperaba que fuera la última amenaza real.

De pronto, una presencia bien conocida hizo aparición detrás de él.
-¡Hola, supremo kaiosama!
-¡Oh! Señor Goku, ¿Qué hace en este lugar?
-Yo creo que lo mismo que tú, o sea investigar qué es lo que está sucediendo. A decir verdad mi intención era ir a ayudar a Krillin, pero Piccolo está con él y Gohan va en camino, así que preferí venir para acá… rayos ¡Está muy alto! Nunca había subido tanto, jeje. Me falta la respiración.
Y se quedaron esperando a los posibles enemigos.
-Ah, si no te molesta, supremo Kaio ¿Qué te hiciste en el pelo?
-Qué… ¿Acaso no recuerda que en realidad yo soy la fusión de Kibito con Kaioshin? Sin saber, usamos los pendientes Pothara, y…
-¡Ah, claro, sí que me acuerdo! Oye, voy a esperar un poco más abajo, acá cuesta respirar ¡Y hace un frío como en los polos!
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Y mañana N° 18 pelea con todo...

 

12.- Número 18 al ataque

-Escúchame bien. No te perdonaré el haberle hecho eso a Krillin. Ahora te voy a dar tu merecido.
Sin esperar respuesta número 18 se abalanzó, pero al ver que Sivil iba a cubrirse, prefirió dar una vuelta en el aire para quedar debajo suyo y tratar de tomar sus piernas para incapacitarla. Pero Sivil fue más rápida y se recogió en el aire. Ahora 18 estaba en notoria desventaja, puesto que estaba demasiado expuesta a una patada, cosa que la mujer de violeta intentó mientras se le aproximaba.
-Perfecto.
Dieciocho en ese momento notó que a Sivil le faltaba algo de experiencia en el combate. Decidió aprovechar la novicia de la mujer y le sujetó por la pantorrilla, para darle un codazo en ella y así dejarle cojeando. En el aire, pero coja.

No fue tan sencillo. Sivil recogió su pierna y trató de defenderse con la otra, así que dieciocho le soltó, pero de una voltereta en el aire le dio un golpe en todo el cuello, mandándola directo hacia las nubes. La mujer se frenó en el aire antes de llegar a una, y antes de que 18 subiese para propinarle más golpes, ella se adelantó en sus intenciones. Sivil fue hábil en notar que era mucho más rápida, y aprovechó esa ventaja para quedar directamente encima de la androide e intentar darle algún golpe. La defensa de la mujer ciborg era buena, pero no contaba con que el pelo de Sivil era prensil, y la sujetó por una pierna, dejándole de cabeza. Luego comenzó a propinarle rodillazos en su cara, dos y tres hasta que 18 atinó a poner los brazos y cubrirse. Logró sujetar ella también una pierna de Sivil, y jalando hacia arriba, ambas quedaron girando sobre la otra en el aire, como si fuesen una rueda.
Finalmente Sivil decidió soltar a 18, y lo mismo la androide.
-Peleas mejor que Krillin.- Admitió la muchacha- ¿Por qué tu Spiritia es más baja?
-¡Yo no sé qué es eso de la Spiritia!
La androide no quería dar tiempo a descansos y se abalanzó nuevamente, aunque le molestaba el no poder usar ataques de energía en la batalla. Sivil otra vez bloqueó sus golpes, aunque en sus ojos rojos 18 comprobó que estaba buscando algún punto débil, y pronto lo encontró. La mujer se alejó hacia atrás tan rápido que 18 no fue capaz de seguirla, y un aura de color verde le envolvió de repente.
-¡Haaaa!- Y múltiples bolas fueron lloviendo hacia la androide a gran velocidad. Prácticamente tuvo que hacer piruetas para eludir cada una de ellas, pero Sivil aprovechó uno de sus movimientos de esquive para acercase y golpearle justo cuando no se podía defender. Dos, tres, cuatro y cinco golpes a la boca del estómago, y luego juntó sus manos para darle directo a la cabeza y botarla al agua. Pero la rubia lo logró bloquear, y preparó su mejor patada luego de un giro.

Mandó volando a Sivil a decenas de metros, y aunque no pudiera usar ataques de energía, al menos sabía que si se aplicaba, le podría vencer. Ambas se limpiaron sus labios ensangrentados, pero ella era quien ganaría a la larga. Sivil era increíblemente rápida, pero sus golpes no eran muy contundentes, cosa en lo que ella difería. Tal vez golpease menos veces, pero le causaba más daño.
Mientras volaba hacia ella, fue Sivil quien tomó la iniciativa, y bajó a la altura del agua, para con sus brazos y la fuerza del viento crear olas gigantescas que debieran cortar la visibilidad de 18.
-Novata… ¿Acaso no sabe que puedo detectar las energías?
Era algo que Krillin le había enseñado, bastante útil. Pero en lo que acababa de decir aquella frase, sintió un golpe fuerte en la nuca, la cual le mandó directo al agua. Luego Sivil acumuló energía verdosa en sus manos y lanzó rayos hacia el océano, comenzando a calentarlo hasta que este comenzó a evaporarse.
-¡Quema, agh!- Había olvidado que debajo del agua no convenía hablar. Así que tragó agua y comenzaba a faltarle el oxígeno. Decidió nadar a gran velocidad para planear un ataque por sorpresa.
Aunque Krillin le prohibió arrojar energía, lanzó un par de ataques hacia arriba, cosa que funcionó de acuerdo al plan. Sivil se acercó según veía el agua levantarse, pensando que era ella quien salía. La androide emergió detrás suyo y le sujetó del pelo, para no ser interrumpida mientras la inmovilizaba con una llave.
-¡Aaah! ¡Noo! Suelta, suelta.
Pero ahora que la tenía, voló hacia la isla que estaba en ruinas, a fin de estamparla contra el piso tantas veces como fuese necesario para hacer el daño suficiente. Esperaba encontrar una roca bien resistente y filosa, a ver si lograba derrotarla de una vez por todas.
-¡Suéltame! ¡Rápido!
-Ni lo sueñes, ahora verás lo que te ocurre.
Empezó a descender a gran velocidad hacia el suelo, pero Sivil tenía un método para zafarse. Era tan fácil como robarle algo de su Spiritia, y luego irse en la búsqueda de un suministro estable de esta. Tal vez el sujeto llamado Piccolo tuviese un gran poder, lástima que no se molestara en escanearlo.
Se opuso con toda su fuerza al movimiento de 18, consiguiendo que ella cediera un poco en su sujeción. Lo suficiente para voltear la cabeza y mirarle a los ojos. La gema en su frente se encargó de robar su Spiritia, y la androide 18 se desvaneció rápidamente.
Ahora que ella estaba casi inconsciente, le fue fácil zafarse. La tiró al piso y comenzó a volar alejándose. Pero volteó, y la miró allí tirada. Hizo su mejor esfuerzo y fracasó… era inofensiva, pues dejarle sin Spiritia era demasiado fácil. Se acercó a ella y le cedió un poco de vuelta.

 

Perdón por no colgar el capítulo ayer, viajé y creí que alcanzaría mi tiempo para hacer el copy- paste, pero no xD


13.- La mejor combatiente

Cuando número 18 se incorporó, se sacudió el polvo y divisó a Sivil en la lejanía, ya tan alejada que solamente se veía como un punto. Se aproximó a ella a toda velocidad, pues el problema que tenían ambas todavía no acababa.
-¡Adónde crees que vas! No he terminado contigo.
-Yo sí, vete.
En realidad era un riesgo continuar, porque a pesar de poder con ella, podía hacer esa cosa de absorber el Spiritia, lo que sea que eso fuere, y de ese modo desmayarla. Pero ya había notado como eso sucedía, en todas las veces que le pilló desprevenida. Sus ojos rojos se iluminaban, al igual que la perla que tenía en la frente. Debía tener cuidado cuando viese esas señales. Y no dejarse tocar por el pelo de la mujer, pues le podía traer malas pasadas.
-Anteriormente no estuve peleando en serio. Ahora comienza la verdadera batalla.
Sivil jamás había visto a alguien que llegase a herirle, así que se alegró por 18. Pero no era buena fuente de Spiritia, y no estaba interesada en pelear. Además, Krillin volvería a estar como nuevo en cosa de días.
-Déjalo así. No puedes hacer nada.
-¡No voy a permitir que sigas extrayendo la energía de la gente! Me recuerdas a cierta persona a la cual odié mucho en el pasado, así que no te lo permitiré.
Sivil de pronto apuntó hacia un punto del horizonte. Fue casualidad que Gohan estuviese llegando con una pequeña niña, ya que la estratagema de Sivil era hacer mirar a 18 a cualquier lugar y luego cuando ella estuviese desprevenida golpearle. Así lo intentó, pero la androide no caía en esa clase de trampas. Sivil se zafó y entendió que la pelea no podía ser evitada.
Por lo tanto, extendió la palma de una de sus manos hacia arriba.
-No me vas a hacer mirar otra vez…
-¡Ki-enzan!- Y un disco verde se formó, arrojándolo hacia 18, quien sorprendida por poco no alcanza a reaccionar.
-Pero… co… cómo puedes?
-¡Aaah! Kame… hame…
¡Al diablo el no usar poderes en la batalla! Si ella había aprendido esas técnicas por el hecho de haber tomado las energías de su marido, entonces podía llegar a ser más peligrosa de lo que pensaba. Mejor pelear de la forma que quisiera, y así retomar la ventaja.
-Con que sí ¿Eh? ¡Kame hame haaaa!
Dieciocho no usó todas sus energías en la técnica, más bien porque Sivil ya había disparado su propio Kame-hame y no tuvo tiempo de acumular más energía en sus manos. Cuando ambos poderes chocaron, Sivil dio señales de comenzar a ceder, y el aura verde volvió a envolverla dándole mayores fuerzas. 18 también incrementó la energía y finalmente Sivil vio cómo su Kame Hame perdía terreno. Antes de que el de la androide le llegase a tocar, se movió para esquivarlo, pero N° 18 ya estaba allí para propinarle una feroz patada, arrojándole al mar y dando un par de rebotes en el agua igual que si fuese una piedra.
-¡Excelente! Esa estúpida no sabe pelear, y ya comprobé que es más débil que yo, así que sólo debo tener cuidado de su gran velocidad, y la batalla será mía.

La androide dejó de preocuparse tanto de Sivil entonces, y comprobó con su vista que Gohan se desviaba. Iba a la Kame House a dejar a Marron a salvo, lo que significaba que ella podría acabar ese combate antes de que él se metiera a estorbar con sus payasadas de Saiyaman. Había volado con el traje y casco todo el camino, y 18 recordó que Krillin se burlaba mucho de la apariencia de Gohan. Probablemente Marron había copiado eso, y se fue riendo del Saiyaman todo el viaje.
-Bien, acabaré con esa tal Sivil, Piccolo llevará a Krillin a curarse con ese otro verdoso del templo, y mi hija ya está en casa. Tendré que ir a reclamarle a Satán otra vez, y soltar algo de dinero en reparar la Kame House, pero qué se le va a hacer, es lo de menos.
Dieciocho voló en dirección a donde Sivil debía estar, pero no la encontró. Tal vez se hallaba oculta bajo el agua, pues era evidente que con esa simple técnica no la había derrotado.
-¡Te voy a obligar a salir!- Juntó una gran cantidad de energía en sus manos y la lanzó debajo suyo, formando una gran explosión de agua. Una ballena salió volando, misma que el Maestro Roshi viera minutos antes.
18 se escondió en toda el agua que había salido despedida con el impacto, atenta a cualquier señal del ki de Sivil. Finalmente lo sintió, y partió hacia ella a toda velocidad. Estaba un poco cansada, pero logró esquivar el disparo de energía que dio Sivil al verla, y continuó aproximándose sin importar los Energy Ha de la mujer. Golpeó uno con su mano para devolvérselo, pero Sivil también lo eludió y se cruzó de brazos, también recogió las piernas, quedando en una postura fetal.
-Esta tipa va a intentar algo.
18 dejó de acercarse, mirando con atención lo que la mujer haría. Ella se envolvió en una esfera blanca que le cegó unos segundos, y al volver a una postura normal lanzó un chillido agudo, consiguiendo que la esfera a su alrededor aumentase. Con la esfera de ki causando una explosión, Sivil arrasó con todo lo que estaba a su paso, aunque sólo había agua hasta donde podía verse. Número 18 se vio forzada a alejarse, pero cargó la suficiente energía para comenzar a arrojar múltiples rayos con sus dedos, los cuales Sivil esquivó si mayor problema a la vez que se acercaba.
-Haré lo mismo que ella, pero sin poses inútiles.
Esperó a que Sivil estuviese suficientemente cerca, y causó una onda de choque alrededor de su cuerpo, seguido por un desplante de energía que atrapó a Sivil en medio de la explosión. Salió nuevamente mandada hacia el océano, pero frenó su cuerpo antes de ingresar al mar.
-Por qué… no le hice tanto daño.- La androide se había cansado mucho más en despedir su ki, en cambio Sivil sólo se veía levemente herida, aunque con señales de cansancio. Se arregló las hombreras de su traje violeta, y 2 especies de antenas mecánicas que usaba sobre la cabeza.
-Debo controlar más mis fuerzas. Si sigo gastando energía de ese modo, voy a terminar exhausta.
-Me cansé de tu pelea.- Le dijo Sivil.
-¿Eso es una amenaza?
La mujer se envolvió otra vez en su esfera de energía, y apareció frente a la androide a increíble velocidad. Tan rápido que 18 no fue capaz de evitar los golpes de Sivil, y cada vez que intentaba defenderse, ella se ubicaba justo detrás de ella y de una patada en la espalda le mandaba hacia el mar.
-Es demasiado rápid… ¡Aghj!-Los golpes le estaban lloviendo de forma interminable. Por lo menos, cada uno no era muy fuerte, así que podría soportar en ese estado por algún tiempo hasta descubrir cómo zafarse.
Finalmente 18 tuvo una idea, envolvió su cuerpo que su propio ki, y cuando Sivil le golpeó, se quemó la mano y la retiró. La androide aprovechó ese descuido para disparar con ambas palmas su mejor ataque de energía, el que Sivil recibió de lleno.
Se generó otra onda expansiva en el agua, y ahora comenzaron a llover peces. Uno le cayó a dieciocho en la cabeza, y se lo retiró a la espera de que Sivil saliese del agua.
-¡Con eso fue suficiente, estúpida!- La androide estaba cansada, pero era imposible que Sivil hubiese quedado bien parada luego de aquello.
-¡Vaya, eso fue asombroso, número 18!- Era Gohan, quien había llegado al lugar del combate. Seguía vestido como Saiyaman, pero sin el casco. Marron se quedó jugando con él en Kame House, usándolo para imitar a la tortuga amiga de Roshi- Inclusive yo tenía problemas para seguir los movimientos de esa mujer, pero tú idea fue magnífica.
-Esperemos que ya no vuelva a molestar. Sólo fue un dolor de cabeza ¡Mira cómo ha dejado mi ropa! Y ella en cambio podía reparar la suya con magia, eso no es justo.
Gohan dio una risita nerviosa mientras 18 le ignoró y fue de vuelta a la isla. Tomaría a su hija y partiría al templo de Kamisama a ver cómo se encontraba Krillin.
-Bueno… entonces a mí me toca buscar a esa mujer, tal vez siga con vida.

 

14.- Spiritia de alta pureza

Gohan buscó por la superficie del agua, esperando que Sivil saliese del mar.
-Bueno, como 18 no me explicó nada más que el nombre de Sivil, me toca buscarla y averiguar cuál es el problema que tiene con la gente de este planeta. Espero que se vaya de aquí luego de ver lo fuerte que somos.
Gohan ideó un plan, la idea era no soltarla por nada del mundo, ya que se podría querer fugar, y ella era definitivamente más veloz que él. Por fin Sivil apareció desde debajo del agua, envuelta en una nueva esfera de energía que había desarrollado a su alrededor para evitar mojarse. Un pez había quedado atrapado, y Sivil no tuvo piedad en absorber su insignificante cantidad de Spiritia, aunque le dejó lo suficiente para vivir. Estuvo recolectando la Spirita de las criaturas marinas, y de eso forma volvió a recobrar fuerzas.
Al ver a Gohan, se llevó una sorpresa.
-… ¡Spiritia muy pura!
Gohan se acercó a ella para luego no soltarla, pero al llegar recibió una bofetada en el rostro por parte de Sivil. Ser más veloz también conllevaba poder leer el movimiento de los demás, sobre todo luego de aprender un poco sobre el pelear con la androide dieciocho.
-Spiritia pura.- Repitió- La necesito.
-¿Qué? A mí no me vas a hacer eso que hiciste con Krillin, lo pude sentir todo leyendo su ki. Desde que le robaste energía, tu ki se parece un poco al de él.
-¿Ki?- Preguntó ella.
-Sí, tú absorbes el ki de los individuos con quienes peleas.
-¡No! Yo absorbo la Spiritia, ¡La Spiritia! La tuya también.
-¿Y qué diferencia habrá… no te entiendo mucho. ¡Pero no voy a permitir que lo sigas haciendo!- Y la sujetó fuertemente.
Sivil le miró la mano y le clavó sus uñas.
-Valiosa Spiritia Pura…
Gohan notó como la mujer le estaba extrayendo algo de su fuerza. Aunque a tal velocidad que quizá para Krillin significase algo, pero no para él.
-¡Ah, suéltame!- Gohan tomó la mano de Sivil, pero ella le sujetó con su cabello por el cuello. Finalmente tuvo que separarse con una onda de ki- Creo que no va a funcionar eso de sujetarle para que no huya.
La mujer sufrió la iluminación de sus ojos y de la joya en su frente, pero Gohan lo creyó el inicio de un ataque y se acercó golpeándole, cosa que Sivil repelió montando una barrera a su alrededor. Similar a sus esferas de energía. Ahora Gohan no podría tocarle.
-Eso lo veremos, Sivil. ¡Y no me robarás lo que sea que robes!
Le dio un golpe con toda su velocidad a la barrera, pero su puño no hizo más que rebotar.
-Entonces deberé hacerlo de otro modo.
Tomó distancia y preparó sus manos. Iba a hacer el clásico Kame-hame-ha. Si número 18 logró mantener bajo control a esa desconocida, él con mayor razón.
-Kame…
Sivil vio como la esfera de energía se formó en las manos de Gohan.
-¡Ajaja! Spiritia pura.
-Hame… ¡Haaaaaa!
Antes de que llegase a la barrera esta desapareció y Sivil decidió recibir de lleno el ataque, extendiendo bien sus piernas y brazos.
-¡Aghh! Alta Spiritia…
Pero se dio cuenta de que le costaba demasiado mantenerse absorbiendo. Gohan era demasiado poderoso para ella, pero aun así no desistió y continuó tomando la Spiritia de aquel Kame-Hame.
-¡Qué nivel de pureza! ¡Aaaaah!- El poder de Gohan brotaba de sí mismo y le envolvía sin él notarlo- ¡Demasiado, demasiado!
-¡Desiste! Si sigues podrías morir.- Pero aun así incrementó la potencia de su Kame-Ha, hasta que la mujer cediese.
Número 18 regresó, al ver el desplante de poder de Gohan. Aunque lo encontraba absurdo, era un guerrero con cualidades excepcionales.
-¡Spiritia muy pura! ¡No la aguanto, nooo!
Comenzó a recoger los brazos, y sus ropas empezaron a desintegrarse. Ya no soportaba más.
-Debo obtener… esa Spiritia.
Se incorporó con fuerzas y soltó toda la Spiritia que había acumulado en una ráfaga destructora, de la que 18 tuvo que huir. Pero era más que una ráfaga destructora. La única manera de deshacerse de la Spiritia que no necesitaba era despidiéndola por el alrededor, y esta naturalmente era absorbida por las formas de vida y por el agua o el aire. Dieciocho sintió su energía volver por completo, así como también Gohan.
-¿Pero qué…
Eso no le impidió aumentar nuevamente la potencia de su poder. Una vez que Sivil colapsara, sería hora de interrogarle y entender por fin de dónde ella provenía, y cuál era su intención en la Tierra.
-¡¡Spiritia pura!! ¡La necesito!
Por fin libre de la Spiritia innecesaria podía canalizar la de Gohan, aunque se sentía cada vez más débil. El ataque era demasiado fuerte, y todo lo que no alcanzaba a absorber le hacía daño. Sus manos estaban envueltas de su sangre, pero la Spiritia era de una pureza de la que se estaba impregnando. ¡Tenía que impregnarse con ella más y más!
Tanto fue, que incluso Gohan se sintió debilitar enormemente, hasta que ya no pudo seguir aportando energía a su Kame-Hame-Ha.
-¿Qué me está pasando? No puede ser que lo haya absorbido todo.
Sivil ya había logrado su objetivo, pero estaba sumamente herida. Se sintió desvanecer, y cayó al agua inconsciente.
-Dieciocho… debes rescatarla, de otro modo se ahogará en el fondo del mar.
-¡Ni hablar! Se lo merece.
-¡Dieciocho! Necesitamos saber por qué hace eso. Hasta que despierte, habrá tiempo de idear algo para controlarla. ¿Cómo sabes si no vienen amigos suyos a ayudarla? Nos podrían poner en apuros.
-¡Ya, ya! Pero la infeliz no usará mi cama ni la de Krillin, que use la de Roshi o la del cerdito.
-¡Jaja! Eso no tiene importancia… yo estoy fatigado, creo que apenas puedo volar de regreso a Kame House.
-A mí me dio algo de pelea, pero no entiendo cómo pudo resistir todo ese tiempo tu ataque. Se ve que estás fuera de condición física, ponte a entrenar.
Y bajó hacia el agua.
-Pero, pero… bueno, mi papá y el señor Vegeta decían lo mismo, pero eso no tiene nada que ver ahora.
Volvió a Kame House pensando en qué había sido lo que pasó. Era cierto que ella resistió sus ataques casi con todas sus energías, misma cosa que Súper Boo no pudo hacer hasta que absorbió a los niños fusionados. Y en cambio, no pudo con los ataques de número 18. ¿Tendría que ver la llamada Spiritia en ello? Todo eso era muy raro y no lo entendía. Ojalá estuviese cerca el señor Piccolo para preguntarle, pero lo sintió llevarse a Krillin al templo.
Estaba muy agotado para llegar hasta allí, necesitaba un pequeño descanso.

 

15.- Llegan los invasores

-Cinco segundos para terminar el despliegue fold, señor.
Gepernitch sonrió. Eso significaba que estaban realmente cerca de la mayor fuente de Spiritia que había visto en todos los universos.
-¡Cuando acabe el despliegue, quiero que todas las naves asuman las posiciones ya establecidas!
-¡Sí!- El soldado se fue, y solamente Gepernitch y Gavil quedaron en el salón de mando.
-Va a rodear a la tierra entera.
-Sí… la máquina que me has traído sí me pareció interesante, en realidad. Significa que puedo detectar la energía de las personas con un simple artefacto. Es por eso que las naves rodearan la Tierra, para encontrar así la mayor fuente constructora de tecnología.
-Oh, es un hermoso plan.
-No puedo detectar la Spiritia a menos que sea demasiado intensa, pero con un rastreador hecho con tecnología, podré localizar a cada individuo que pueda servir a mis propósitos. Mientras, tengo otra idea que puede ser de utilidad.
Gavil lo encontraba fabuloso ¡Una fuente de Spiritia que podrían usar durante miles de años sin que se agotase! Si los individuos eran en realidad tan poderosos como Gepernitch había estimado, el suministro quedaría garantizado.
-Este es un universo al que podemos llamar hogar ¿No lo cree, Lord Gepernitch? Con toda la Spiritia que se siente en este planeta, no habrá necesidad de emigrar a otro nuevo universo hasta muchas generaciones más.
Gepernitch sonrió caprichoso.
-Tal vez sea el universo de mis sueños. Pero antes debo comprobar que mi sueño es correcto, y es por eso que ejecutaré mi plan, con o sin los rastreadores. Pero según parece, nos esperaban.
Gepernicth manipuló telekinéticamente los controles para aumentar la imagen del monitor gigante que poseía el salón. Había un sujeto de cabello largo y blanquecino suspendido en el aire, vestido con ropas extrañas. Su piel era ligeramente violeta, y tenía una cara bastante decidida.
-Debe ser uno de los guerreros que usted mencionaba, señor.
Gepernitch ordenó a una de las naves que tomaran una lectura sobre él.
-Oh… ya veo. Tiene una Spiritia de una excelente pureza.
Más abajo había otra persona con un traje naranja, y el pelo negro y alborotado. Gepernitch tuvo un presentimiento raro cuando hizo zoom en su imagen en pantalla.
-Ese sujeto…

Kibitoshin se elevó un poco más, y Goku mantuvo la misma distancia, para no asfixiarse. El frío le tenía entumecido, pero no era problema notar un ki algo poderoso que se encontraba en el interior de la nave insignia. Seguramente era el jefe, y tanto Goku como el supremo Kaio así lo esperaban, pues el sujeto no tenía grandes poderes… a menos que estuviese ocultando su ki.
-Debe tener un poder parecido al de Piccolo.- Estimó el Saiyajin, pero cerró su boca para dejar que Kaioshin hablase.
-¡Yo soy Kibitoshin! Soy el dios supremo de este universo. Estaba esperándolos, pues necesito saber cuál es el propósito de su venida. Son bienvenidos a esta realidad, en tanto no sean una amenaza para las personas que viven en las cuatro galaxias que la conforman.
-Oh… no necesito contestar a eso.- Dijo Gepernitch dentro de su nave- Que nadie establezca comunicaciones con el sujeto de rojo, ni con el de naranja. ¡Sigan todo de acuerdo a las instrucciones ya dadas!
Las naves de batalla fueron a tomar sus posiciones. Algunas necesitaron hacer un nuevo fold que les teletransportase al otro lado del mundo, pues la intención era rodearlo por completo.
-Gavil. Veo tus intenciones de salir a enfrentar a esos individuos, pero te lo prohíbo.
-¡Pero, señor Gepernitch!
-Hay que actuar con cautela. La Spiritia de uno de ellos es imposible de esconder, y me temo que es más poderoso que tú.
-¡Entonces será la belleza de su absorción!
-¡No, Gavil! No conviene apoderarnos de toda la Spiritia de un momento a otro. Sería igual que en el resto de los universos, y tengo planeado algo especial. Es mucha Spiritia para que sólo sea desperdiciada por nosotros.
-¿A qué se refiere…?
-¡Me refiero a mi sueño de Spiritia! Pero ahora, no quiero perder a la tripulación que tengo bajo mi control mental en un ataque sin sentido. Por lo tanto, los pilotos que saldrán a combatir a esos 2, serán los que tú mismo hagas germinar. No salgas de esta nave hasta que tenga instrucciones para ti.
-Así será, Lord Gepernitch- Y desapareció, para ir a preparar todo.

Kibitoshin se quedó en el mismo sitio, flotando a la espera de una respuesta. Pero durante minutos no sucedía nada, así que se vio obligado a insistir en sus palabras, sin tener respuesta.
-Creo que no saben nuestro idioma. Ya había pensado en ello, porque provienen de un universo diferente al nuestro.
-¡Mira! Unas cosas están saliendo de esa nave.
Goku y el supremo Kaiosama vieron cómo una tropa de naves similares a aviones salieron.
-Tal vez sean embajadores, o algo así.- Se le ocurrió al dios.
-Mmmm, no lo sé, más parecen aviones.
-¡Ya sé que son aviones! Pero dentro debe haber gente que los maneja.
-Ah, en eso tienes razón. Se puede sentir el ki de las personas, pero es muy pequeñito. Creo que Míster Satán sería capaz de derrotarlos.
-Eso no viene al caso, señor Goku. Es mejor que estemos atentos a ver qué hacen.
Atentamente vieron como los aviones les empezaban a disparar.
-¡Creo que no eran embajadores, supremo Kaio!
-¡La diplomacia falló! Es una lástima, pero tendré que defender al universo a toda costa.
Y partió al encuentro de las naves, destruyéndolas sin ninguna piedad.
-Oye… no hay que tomárselo tan drástico. Sus balitas no causan nada de daño, son unos debiluchos ¿Mira!
Y Goku se mantuvo quieto para recibir los disparos, los cuales rebotaron en su cara.
-¿Ves? Son inofensi… ¡Aaaah! ¡Ayayayayayaii!
Una de las balas le había llegado en un ojo, y eso sí que le dolió.
-¡Aaaah! ¡Arde arde arde!
-Como sea, nos han atacado, y yo debo limpiar este universo de toda amenaza.- Con una onda de ki destruyó al robot que atacó a Goku, y con una serie de ataques de energía destruía a los demás uno por uno.
Los aviones de pronto empezaron a transformarse en robots humanoides, de algún modo.
-¡Oh! Mire, señor Goku. Parece que esas naves tienen un mecanismo que les permite transformarse.
-Yo no sé nada ¡Me duele mi ojo!
Pero decidió mirar a unos de los robots, y de pronto la alegría le hizo olvidar su ojo.
-Ah ¡Perfecto! Ahora que tienen brazos y piernas, se puede pelear con ellos. Cuando eran aviones hubiera sido un poco raro.
Y Goku fue hacia el que estaba más cercano, y le propinó un rodillazo en la cara. Pero el robot gigante se trizó y terminó explotando.
-¿Ves? Ya decía yo que eran muy débiles. Creo que estos enemigos no significarán ninguna dificultad.
-No se confíe, señor Goku. Ya vio como en un principio, ustedes se confiaron de Majin Boo antes de que saliera de su huevo, y al final eso desembocó en un terrible caos.
-Bueno, hay que estar alerta. ¡¿Qué es eso?!- Se sorprendió el Saiyajin.
-Son… bolas luminosas.
-¡Los pilotos de los aviones eran esas bolas!
Goku tocó la que piloteaba el robot que destruyó, y le dio cosquillas. Las esferas regresaron todas juntas a la nave madre, dejando sólo los escombros de los cazas. Los robots que todavía estaban en perfecto estado se convirtieron en aviones nuevamente y regresaron a la nave.
-Eso sí que fue raro.

 

16.- Otra vez separados

Gepernitch se esperaba que esos dos guerreros venciesen a las naves sin ningún problema. En casi todos los universos sus cazas variables hacían todo el trabajo sucio, pero aquí eran simples chatarras inútiles. Eso era señal de que el poder de esos sujetos era muy alto, y que su Spiritia también. Pero Gepernitch seguía con ese presentimiento acerca del hombre de cabello negro. Tenía la segunda Spiritia más alta del planeta, siendo la primera una que se había difuminado de pronto.
-Es evidente que está escondiendo su verdadera fuerza; necesito comprobarla, y ya sé cómo lo haré.
Se sacó su casco y su antifaz, ya no los necesitaría.
-¡Gavil! Ven aquí.
Él llegó a los pocos segundos.
-Cuando te lo indique, tu misión será ir en busca de Sivil. Tengo algo grande entre manos, y no quiero que sea rebelde a mis mandatos nuevamente. La traerás de regreso a esta nave.
-¡Sí, Lord Gepernitch! Pero… ¿Acaso usted ha decidido pelear?
-Claro que no. Ellos son dos, y tengo a dos criaturas indicadas para la tarea. Mientras Goram y Zomd estén distrayéndolos, tú bajarás hasta el planeta y la buscarás.
-¿¡Goram y Zomd!? Pero ellos están muertos. ¡Yo mismo fui testigo de la desaparición de ambos! Usted estuvo cerca de hacerme desaparecer a mí también, en su hermoso frenesí, antes de volvernos errantes a través de los universos.
-Oh… efectivamente. Ellos murieron absorbidos dentro de mí persona. Pero así como sus personalidades entraron en mí, también pueden salir. No te lo mencioné porque no era necesario; traerlos de vuelta sólo consumiría más rápido la Spiritia de esos universos. Pero ahora que son útiles, les daré una nueva oportunidad.
Sacó sus brazos de la capa que le cubría, y llenó el ambiente de una luz verde.
-¡Goram, Zomd! ¡Ahora los necesito nuevamente!
No obstante, los dos eran demasiado grandes para aparecer directamente en ese salón. La corriente de Spiritia se trasladó hacia fuera de la nave, en frente de Goku y Kibitoshin. Ahora dos criaturas gigantes de seis brazos les miraban con aire condescendiente. Un séptimo brazo afloraba tras la espalda de ambos.
-¡Pero qué son esas cosas!- Goku se impresionó de tener que pelear contra algo tan ridículamente gigantesco. Tenían el porte de muchos edificios, incluso él cuando se convertía en un mono gigante a la luz de la luna era del tamaño de una de las manos de los seres.
-Eso es… absolutamente de otro universo.- Declaró el supremo Kaio.
Uno de los seres era una mujer, y el otro un hombre, y ambos se rieron a coro.
-Estamos…
-… de vuelta.
-¡Jajaja!
-¡Jo jo jo!
Gepernitch les enseñó que estaban a muchos siglos de lo ocurrido la última vez que existieron. Ahora su labor era enfrentarse cada uno a alguno de los dos adversarios, y les advirtió que aquel de ropas anaranjadas seguramente sería más fuerte que ellos.
-Eso no será problema.
-¡Más Spiritia!
-Se los prohíbo.- Les dijo Gepernitch- El objetivo será medir la fuerza de ese individuo… tan sólo mírenlo.
-Oh…- Ambos le vieron detalladamente, pero no dijeron nada más.
-¿¡Qué están esperando!?- Les instó Goku- Si creen que su tamaño me es problema les aseguro que no me molesta.
-¿Acaso quiere…
-… pelear con nosotros?
-Señor Goku ¿De verdad cree que tengamos alguna posibilidad frente a esas inmensas cosas?
-No olvides leer sus ki, en realidad no son tan fuertes como lo parece, aunque te recomendaría que vayas con cuidado, supremo kaiosama.
-Mi nombre es Kibitoshin.
-Entonces ve con cuidado, supremo kibitosama.
-¡Qué me llamo… ay, como sea. Yo iré contra la que es de color rosa y verde, y usted irá contra el de color amarillo.
-¡Muy bien!- Goku iba a convertirse en súper saiyajin, pero vio una pequeña bola de luz avanzar a toda velocidad en dirección hacia el planeta.
-¡Creo que ese era su jefe! ¡Es el ki que podía sentirse desde adentro de esa nave!
Ahora dudó de si perseguirlo o quedarse a luchar, y por supuesto, prefirió lo último.
-Supremo Kibitoshin, es mejor que vaya a seguir a aquel otro individuo. Yo seré quien pelee contra estos dos monstruos.
-¿¿Qué?? Ni pensarlo, señor Goku, esas criaturas pueden tener toda clase de habilidades insospechadas, es mejor que peleemos ambos.
-¡Oh!- Se sorprendieron de pronto las criaturas- Qué Spiritia más inusual, la del sujeto de cabello blanco.
-¿De qué están hablando, criaturas?
-Es como si fueran 2 clases de acordes de Spiritia diferentes.
Lord Gepernitch así lo comprobó con los scaners de la nave. Eso era muy inusual.
-¿Dos Spiritias en un solo cuerpo? Sólo he visto algo así de Grabil junto a Gavil… eso sólo significa una cosa… y su Spiritia es muy pura, entonces sí es un Dios en este universo alterno. Eso lo explica.

Entonces el líder de toda la flota tomó una decisión.
-¡Goram, Zomd! Les voy a simplificar el trabajo. Sólo encárguense de aquél que tiene deseos de pelear. Yo me encargaré del otro sujeto, y entonces les permitiré obtener una nueva forma de poder… así como Grabil junto a Gavil tienen.
-¡Ja ja ja!
-¡Jojojo!
Gepernitch dejó su podio y se transportó justo frente a Kibitoshin.
-Así que tú eres el dios de todo este universo.
-¿Y tú quién eres?- El Kaioshin no le vio venir y quedó asombrado.
-Mi nombre es Gepernitch.
-¿Geper cuánto?- Se quejó Goku- Bueno, eres de otro universo, así que supongo será natural que tengas ese nombre tan raro.
El hombre lucía un cabello largo y rubio, tez pálida y labios pintados de color negro. Sus ojos también eran oscuros, pero se estaban iluminando cada vez más.
-Hay en ti dos clases distintas de Spiritia, y eso significa que pueden ser separadas.
Extendió sus brazos, despidió una luz verde y se teleportó directo a su podio en la sala de control. Cuando Goku pudo volver a mirar, Kaioshin lucía como antes.
-¡Pero qué significa esto!- Se lamentó el dios- Esto no puede estar pasándome, he vuelto a ser el mismo de siempre.
-Y, y, y… yo también estoy acá, separado de usted, supremo Kaiosama.
Kibito se miraba sus manos, sin creer que había vuelto a ser él.
-Esa mujer Geper nosecuanto los separó ¡Eso fue asombroso!
-¡Esto es terrible!- Protestó Kaioshin- ¡Ahora de nuevo soy incapaz de cumplir mi rol como protector del universo!
-Aunque ahora que lo pienso.- Goku estaba hablando solo- Tal vez era hombre, tenía voz masculina. Creo que tendré que preguntarle cuando vuelva a verla… verlo, ¡No! Verla, ya no sé… debe ser otra cosa rara de su universo.
-¡Supremo Kaiosama!- Kibito tuvo una idea desesperada- ¿Y si intentamos la fusión metamoru? Los pasos no son tan difíciles, y tal vez…
-¡Ni pensarlo! De partida somos muy diferentes físicamente, y además las personas que se fusionen por ese método tienen que igualar sus ki. ¡Yo tendría que reducirlo mucho, y el resultado de la fusión sería más débil!
Kibito se hirió en su amor propio, pero era la verdad.
-Como sea, voy a tener que pelear yo solo.- Goku se transformó en Súper Saiyajin- ¡Cuando quieran, cosas grandotas! ¡Estoy listo!

 

17.- Un trato con el monstruo

Gavil tenía que buscar a Sivil a toda costa antes de que se convirtiera en un dolor de cabeza y obstruyera los planes de Gepernitch. En cada universo ella se iba por su cuenta, robaba algo de Spiritia para sobrevivir y se alejaba de ellos lo más posible, pues era contraria a casi todo lo que hacían. Sólo cuando la cantidad de Spiritia del universo descendía drásticamente, Sivil les buscaba para migrar hacia otro lugar.
-¡Debiera dejarla abandonada en cualquier universo! Así aprendería. Lo que hace no tiene belleza.
Pero Gepernitch confiaba en que ella podría ser útil en algún momento, así que fingía que nada ocurría y continuaba el curso normal de las cosas. Ahora había vuelto a irse, pero era obvio que estaba en el mismo planeta. En el resto de la galaxia, la Spiritia era más bien poca, y la de la Tierra era posible percibirla a años luz de distancia.
-Seguramente habrá atacado alguna ciudad. Debo buscar algún sitio donde todos sus habitantes estén comatosos.
A la distancia vio algo que le llamó la atención. Era una edificación que aparentemente flotaba a muchos kilómetros de altura. Más que nada por curiosidad, decidió indagar primero en ese lugar, pues era el primero al que cualquiera iría si llegaba desde el espacio exterior. Era muy simple localizarlo, alejado de todo en kilómetros a la redonda.

En el templo sagrado, Piccolo acababa de llegar con Krillin. Este mantenía sus ojos abiertos, y respiraba levemente, pero no parecía tener conciencia, aunque podía oír y notar el alrededor.
-Es como si se hubiera quedado sin pensamientos.
Pero Piccolo prefirió dejar las conclusiones para después. Dejó a Krillin en el piso, y Dende corrió rápido a curarlo.
-No quise usar en él la única semilla que Karin me dio.- Explicó- Si las cosas se ponen peores, deberemos usarla como último recurso. Aparecieron unos ki realmente extraños, y de hecho…
Piccolo miró hacia el cielo, pero Dende le pidió su atención.
-No sé qué pasa. Lo he curado, sus heridas físicas sanaron, pero Krillin sigue sin reaccionar.
-¿Cómo dices? Eso no es posible.
-¡Oh, claro que es posible!- Una voz desconocida se les sumó- Él tiene una cantidad mínima de Spiritia, así que no reaccionará. La voluntad de existir ha abandonado ese cuerpo.
Piccolo incrementó su ki de forma instintiva. Otro de esos seres extraños estaba frente a ellos, y aunque era más pequeño que la otra mujer, parecía más fuerte. Exhibía un ki ligeramente superior al de él.
-¿Qué… qué rayos eres tú?
La criatura tenía rostro humano y forma humanoide, pero la diferencia es que tenía dos grandes alas blancas cubiertas de plumas, y que estaba cubierto de un pelaje blanco y morado en todo el cuerpo menos en la cara. Algo como un cuerno enrollado sobresalía arriba de su cabeza, y sus orejas alargadas a Piccolo le indicaron el posible parecido que debía tener con Sivil.
-Esa no es una bella forma de saludar. Ahora, quiero que me digan en dónde está la mujer que absorbió la Spiritia de ese triste sujeto.
-Ni creas, pajarraco súper desarrollado. Primero deberás contestar todas mis preguntas.
-¡Oh! Así que eres agresivo, y verde como un sapo. Hum… a decir verdad mi señor Gepernitch me tiene prohibido absorber la Spiritia de gente como ustedes, así que no tiene sentido pelear, no lo necesito.
-Entonces devuélvete por donde viniste. En el templo sagrado no admitimos payasos.
-Mmmm, veo que estás muy confiado de tus poderes, verdoso. Así me dan ganas de darte una lección, pero no tengo tiempo para eso. Así que dime rápido donde está la mujer que dejó así a ese otro inútil, y a cambio les permitiré seguir existiendo.
-Esa clase de declaraciones no te va a llevar a ningún lado, pajarraco.
Pero Piccolo tuvo una idea, tal vez mucho más efectivo que pelear. Además Gohan estaba en Kame House todavía, era irrelevante si esa criatura iba hacia allí, porque le darían una buena paliza, en tanto Gohan no cometiera los mismos errores que con Sivil.
-Está bien, pajarraco. Te propongo esto. Tú nos explicarás en este preciso momento qué es eso que llaman “Spiritia” y además curarás a Krillin. A cambio yo te diré en dónde está tu amiga.
-Creo que ese trato es injusto y falto de belleza. Si quieres, curaré a tu insignificante compañero, pero no tengo que explicarte nada. O bien, puedes optar por oír mi explicación, pero entonces no curaré al infeliz.
-Quiero que hagas ambas cosas. De otro modo, tienes todo este planeta para buscar a esa otra mujer.
-Sería más fácil acabar con ustedes 2 y sacarles esa información, pero no veo sentido a desgastarme si no puedo poseer su Spiritia, así que está bien. Como sea.
Gavil se acercó a Krillin y de su boca expulsó energía verde hacia él, la cual bastó para que este volviera en sí, aunque un poco sorprendido de ver a otro sujeto raro. Se puso en posición defensiva, a la espera de que lo que fuese.
-Tranquilízate Krillin.- Le pidió Piccolo- De momento, no tenemos ningún problema con este individuo.
-Pero… él es uno de los amigos de esa mujer.
-¿Por qué insisten en pensar que yo sería amigo de alguien con tan poca belleza como ella? Simplemente tengo que encontrarla, porque es alguien descontrolada y rebelde.
-Ya veo… ahora te acompañaré hacia el lugar donde ella está. Y en el camino, me tendrás que explicar todo lo que te pregunte ¿Entendiste?
Gavil rió, pero con sus alas se alzó en el aire.
-Creo que estás muy asustado de todo esto. Pero tranquilo, seguramente te dejaremos vivir, si es que tienes grandes poderes.
La criatura emprendió el vuelo y Piccolo comenzó a volar también.
-Krillin, es mejor que te quedes aquí con Dende. Gohan está allí, y derrotó a la tal Sivil, por lo cual no será problema llevar a este individuo con ella.
-Oh… ya veo. ¿Y 18, qué pasó con ella?
-Ella mantuvo bajo control a Sivil hasta que Gohan por fin pudo entrar al combate. Es una excelente guerrera.
Krillin entonces se despreocupó, y se sentó en el piso del templo.
-Ah, ya veo. Entonces la situación no es tan grave como parece.
-Eso no se puedes saber.- Llegó Popo- Hay 2 ki muy enormes que van a pelear contra Gokus.

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Lo de Mr. Popo no es falta de ortografía. Recuerden que él ya habla medio raro xD

 

18.- Goku entra en acción

Casi en el espacio, Goram y Zomd esperaban a que el gran Gepernitch terminase lo que había prometido. Incluso el mismo Goku se dio el lujo de esperarles un momento, ya que quería pelear contra el máximo poder de aquellos sujetos, y de otro modo sería aburrido. Cambiaron el escenario de la pelea para bajar algunos kilómetros, y que tanto Goku como las dos criaturas estuvieran en igualdad de condiciones.
-Tienes muchas ganas…
-… de pelear contra nosotros.
-Eso es muy raro.
-¡Raro!
-Claro que no es raro. En toda mi vida han aparecido oponentes muy fuertes, y entonces he tenido que superar mis propias fuerzas y vencerlos.
Mientras, tanto Kibito como Kaioshin intentaban volver a unirse por cualquier forma. Ahora estaban chocándose unos a otros, a ver si la energía de los pendientes volvía a activarse cuando sus cuerpos se tocasen. Pero nada.
-¡La única opción es la fusión metamoru! Y seguramente luego de pasada media hora, nos mantendremos unidos gracias a los pendientes.
-No Kibito, eso disminuirá nuestros poderes enormemente.
-¿Todavía no están listos?- Se impacientaba Goku- Ya me estoy aburriendo. ¿Están seguros de que no quieren pelear porque son unos debiluchos?
-Perdón por hacerte…
-… esperar tanto.
-Lord Gepernitch por fin lo ha conseguido.
-La forma de mezclar dos Spiritias en un cuerpo.
-Al igual que Gavil.
-Y Grabil.
-Entonces… ¿Van a hacer la misma fusión que ya no tenemos nosotros?- Se sorprendió Kaioshin- ¡Pero si lo hacen, ya no habrá vuelta atrás! Se quedarán así para siempre.
Pero a Goram y Zomd no les interesaba eso, sólo iban a cumplir órdenes, y pelear contra el saiyajin. En algún momento sus cuerpos se volvieron solamente luz, y se mezclaron entre sí, aumentando su tamaño todavía más. En ese instante Goku comprobó que el ki del nuevo individuo aumentaba considerablemente.
-Ah, entonces era verdad.
-¡Señor Goku, usted debe derrotarlo a toda costa! Tengo la idea de que si lo derrota, entonces volveré a estar fusionado con Kibito. ¡Eso será lo mejor para hacer frente a cualquier nueva amenaza!
Goku no le contestó a Kaioshin, puesto que no veía necesidad de matar a nadie. Con dejarlo derrotado era suficiente, y seguramente entendería y se marcharía a su dimensión.
-¡Vaya! ¿Cuántos brazos tiene esa cosa?
Eran catorce brazos, 6 pares provenientes del tronco de la criatura, y dos saliendo directo de su espalda. Además, tenía varios apéndices que no estaban unidos a su cuerpo, y hablaba con la voz de Goram y Zomd, así como Vegetto con la voz de ambos Saiyajin que lo conformaban.
-¡Ja ja ja! Ahora somos invencibles, absolutamente. Ni siquiera tu motivación por pelear nos detendrá.
-Antes de decir todas esas cosas es mejor demostrarlas.
Goku avanzó a la etapa de SSj, dispuesto a comenzar de una buena vez.
-Oh… su Spiritia sigue siendo la misma, pero la demostración de ella ha subido. En ese estado, tu voluntad para pelear aumenta…
Pero no había para qué hacer esperar a Goku. Zoramd comenzó a reducir su tamaño de a poco, explicando que así serviría mejor para su propósito de medir las capacidades del Saiyajin. Además, el mismo poder en un cuerpo más pequeño significaba mayor resistencia.
-¡Eso es perfecto!- Se alegró Goku- Aunque tienes muchos brazos y ninguna pierna, así que será muy raro pelear contigo.
-Comencemos.- Zoramd desapareció delante de los ojos de Goku, y apareció tras de él para sostenerlo con 4 de sus brazos. No iba a absorber su Spiritia, pero al menos podía tratar de apretarlo para romper sus huesos. El saiyajin no podía zafarse, así que no tuvo más opción que convertirse en súper saiyajin 2. Con la sola onda expansiva de su poder, fue capaz de liberarse.
-¡Bien, me tomaste desprevenido esta vez, pero ya no te será tan fácil!
-Supremo Kaiosama.- Empezó Kibito- Nosotros debiéramos hacer algo útil en este momento, ¿No lo cree?
-Shhh, guarda silencio que quiero ver el combate. Necesito proteger el universo, así que necesito ver cómo pelean los Saiyajin, para luego aplicar eso en combate.

Zoramd se percató nuevamente que el ímpetu de pelea de Goku se incrementaba.
-Entonces, tu vida es sólo para pelear y tener contrincantes poderosos.- Aceptó.
-¡Así es! Es porque me gusta, y es lo que mejor hago. Pero ya basta de diálogos.
Goku se aproximó hacia él para propinarle un rodillazo en el pecho, pero Zoramd se cubrió con un par de brazos, y con otro sujetó a Goku por la pierna. El tercer par de brazos le golpeó la pantorrilla y con un cuarto par cargó energía y se la disparó al rostro, pero Goku logró inclinarse y evadirla. Con un giro violento se zafó y dio otro giro sobre sí mismo para dar una patada en la nuca a su adversario. Zoramd descendió en el aire y aprovechó su enorme cantidad de extremidades para lanzar una lluvia de ráfagas de ki sobre Goku, las que él esquivó hábilmente. Disimuladamente también lanzó algunas pocas hacia el supremo Kaiosama, para disuadirlo de participar en el combate, en caso de que se le ocurriese entrometerse.
El saiyajin bajó a gran velocidad esquivando hábilmente cada disparo y, al ser cada bola de energía tan débil por separado, elevó su ki violentamente para reflejar algunas de vuelta a Zoramd, pero este simplemente las absorbía y las volvía a disparar.
-Va a resultar difícil acercarme de ese modo.
Pero no necesitaba acercarse. Aunque no tenía tiempo para lanzar su técnica preferida, al menos era capaz de hacer lo mismo que Zoramd, aunque con varios brazos menos. Se lanzó en picada hacia él y sus ataques de ki chocaban con de él, dejándole el camino más libre para avanzar, aunque todavía debía esquivar varios tiros. Finalmente logra alcanzarlo, y esquiva dos puñetazos del individuo. Logra sujetar un brazo izquierdo de Zoramd con ambas manos, y tirando bien fuerte logra arrancárselo.
-Lo siento, pero es un poco difícil pelear contra ti con todos esos brazos. Así que decidí quitarte algunos.
Pero el brazo que sujetaba Goku se desvanecía, y uno nuevo se reintegró en Zoramd.
-Ah, es como me lo imaginaba; entonces puedes regenerarte. Va a ser un poco más difícil entonces.
Goku aprovechó el corto diálogo para cargar una gran cantidad de energía, y se la lanzó por sorpresa a su enemigo a menos de un metro de distancia. Le destruyó casi por completo, sólo su parte inferior siguió completa, y a partir de ahí el resto del cuerpo se reintegró.
-Rayos… yo siempre quise poder regenerar mi cuerpo a ese nivel.- Comentó el saiyajin- Es bien útil, pero a la vez significa que se está menos preocupado por el propio cuerpo, y ocurren descuidos como ese.
-¡Señor Goku, por qué conversa con el enemigo! ¡Deshágase de él!
-¿Eh? Bueno… es que todavía no me dicen a qué vinieron, ni si van a conquistar el mundo, o a matarnos a todos, y como no tienen un ki completamente maligno, entonces no sé qué pensar.
-¡Esto no es un espectáculo señor Goku! ¡Es una amenaza seria!
-¿Descuido?- Se quejó Zoramd- ¡Ese no fue un descuido! Era muy útil recibir ese ataque, pero… no se pudo absorber la Spiritia de esa técnica. Es un misterio el porqué.
Ahora fue Zoramd quien aprovechó el diálogo y cargó energía en todas sus manos para dispararla toda hacia Goku, pero él no se iba con descuidos y la esquivó. El disparo se perdió en el espacio, sin lograr caer a la tierra.
-Bien… no creo que estés peleando enserio, porque tu misión es determinar lo poderoso que soy. Pero te demostraré todos mis poderes, y por fin podremos pelear como se debe ¿Te parece bien?
-¡Claro!

 

19.- Una muerte suprema

A Goku se le ocurrió un plan. Si entraba en combate cuerpo a cuerpo, tanta cantidad de brazos era peligrosa, y por lo tanto Zoramd necesitaría esforzarse menos que él en repeler sus golpes y en propinar los suyos. Él tendría que hacer los bloqueos con su único par de brazos y con las piernas, y por eso necesitaba superar la velocidad de Zoramd para golpearle. Además, seguramente no iba a poder evitar recibir algunos golpes de parte del monstruo que venía de otro universo, así que cada vez que él golpease, tenía que hacerlo con más fuerza que Goram y Zomd fusionados. Tal vez le conviniera convertirse en un súper saiyajin 3 y así mejorar su velocidad y fuerza, pero eso sería muy desgastador a esa altura, con tan poco oxígeno. Además, Zoramd tenía un poder de pelea similar al suyo en fase 2, y por lo tanto era más desafiante vencerle sin transformaciones innecesarias.
¡Ya lo tenía decidido! A la hora de requerir un aumento de velocidad, pelearía en un estado SSj 2 normal, y a la hora de pegarle, tendría que aumentar su masa muscular y derrochar algo de energía. Era algo idéntico a la transformación rara que hacía Trunks del futuro, pero solamente usado en los momentos correctos. Así que se abalanzó a él a toda prisa, frenándose antes de llegar a Zoramd para inclinarse y ofrecerle una menor superficie que el pudiese aprovechar para golpear. Peleó solamente con sus piernas por 10 o 15 segundos, para ver la forma en que su contrincante utilizaba sus brazos. Ya seguro de los juegos y movimientos que Zoramd solía hacer, entro con todo el cuerpo y partió por intentar golpear su estómago, para que así menor cantidad de brazos le intentasen eludir. Si le daba directo a la cara, todos sus brazos le podrían evitar, pues anatómicamente cada una de sus extremidades era capaz de alcanzar su cabeza, pero no todas podían tocar su vientre.
-Creo que debo tratar de hacer que se enrede.- Pensó- Pero será algo bastante complicado.
Peleó sin querer golpearle por unos momentos, y luego giró sus piernas hacia arriba como si quisiera dar un mortal en el aire. Eso para que Zoramd quisiera agarrarle y se enredase entre tanto brazo, pero no resultó como lo esperaba, y al terminar el giro por poco recibe un energy-ha en pleno rostro.
Se iba a abalanzar nuevamente, pero de pronto apareció Gepernitch en pleno aire, muy cerca de Kibito y Kaioshin.
-Me parece adecuado presenciar esta pelea directamente. Hay algo que requiero averiguar.- Dijo.
-¡Ah! Ahora no me queda duda de que eres un hombre. No tienes montañitas.
Pero más le valía no distraerse. Ahora fue Zoramd quién se arrojó hacia él y trató de cogerle de los brazos y piernas, para luego golpearle en el pecho con todos sus brazos restantes. Pero sólo consiguió sujetarle la pierna derecha, y Goku aprovechó la oportunidad de poner en práctica su idea y aumentar su musculatura para zafarse pateando a Zoramd hasta que le soltase. Así sucedió, aunque sólo logró pegar a los antebrazos de la criatura.
Ahora era el momento de volver al SSj 2 normal y tomar distancia. A menos que Zoramd nuevamente disparase energía con cada brazo, tendría tiempo para un Kame-hame-ha. Estaba alineado con Geper nosecuanto, así que tal vez atravesara su cuerpo y le diera a él de pasada.
-Deberíamos atacar al jefe de esas criaturas.- Susurró Kibito- ¿No cree, supremo kaiosama?
-Shhh, estoy viendo la pelea. Comienza a ponerse interesante.
Kibito no podía quedarse de brazos cruzados, lo atacaría sin consultar. Tal vez dándole un buen escarmiento al jefe de la flota, y de los monstruos, rectificasen y volvieran al universo del que llegaron. Además Gepernitch no vestía ropas que parecieran las más adecuadas para el combate, y esa capa tan enorme seguramente le dificultaría los movimientos. Por lo que simplemente se lanzó, y le propinó un golpe directo al cuello.
-Inútil. Ninguna Spiritia, por muy pura que sea, puede abatirme.
Pero Kibito no estaba para escuchar impertinencias. Siguió golpeándole con todas sus fuerzas, y Gepernitch se mantenía inmóvil como una estatua.
-Zoramd.
-¿Sí, Lord Gepernitch?
-Encárgate de esta molestia.
Antes de que Kaioshin alcanzara a reaccionar de ningún modo, Zoramd extendió uno de sus brazos espaldares apuntando a Kibito, y los demás los abrió; luego los movió todos en dirección a un solo punto. De pronto, Kibito estaba frente a él dando golpes al aire, y este vio con terror como Goku ya había acabado su Kame-hame y acababa de lanzarlo.
-¡Aaaaaaahhg!- La técnica de Goku le atravesó, bajo la atónita mirada de este.
-¡No puede ser!
Zoramd pretendía recibir el ataque y absorber la Spiritia para recuperarse, pero ante un grito de Gepernitch lo elude, aunque no a tiempo para evitar perder parte de su torso. No obstante, un poco preocupado lo regeneró en segundos.
-¡¿Cómo fuiste capaz de hacer eso?! ¡Ahora me queda claro que ustedes sí son malvados! ¡Ahora ya no estoy para juegos!
-Oh…- Se sorprendió Gepernitch- Las ansias de pelear han incrementado en el cuerpo de este sujeto, y su Spiritia cambia su intensidad… ¿Acaso es movido sólo por el simple deseo de tener peleas?
La furia del Saiyajin despertó profundamente la atención de Gepernitch, y todos miraron como un perforado Kibito caía sin vida hasta perderse en la distancia.
-¡No te lo voy a perdonar, ¿Me oíste?!
-Zoramd.- Le instruyó su maestro- No vayas a recibir directamente sus ataques de energía. Aunque quieras, te será imposible absorber la Spiritia que en ellos despide.
Zoramd también lo sospechaba. Las características de este guerrero y su motivación se lo indicaban, pero ahora su jefe se lo estaba confirmando.
-Oh… ¡Anima Spiritia!
-Así es, este guerrero es el Anima Spiritia del universo.
-¡No sé de qué están hablando, pero ya no soportaré sus charlas!
El saiyajin se arrojó nuevamente contra Zoramd, y esta vez sin una pizca de curiosidad por su adversario. Había provocado la muerte de Kibito, que no se lo merecía.
-Tú no te metas en ese combate.- Gepernitch miró desafiante a Kaioshin del este, que estaba pálido de la indignación- Aunque ya comprobé que él es el Anima Spiritia, y ya no necesito ver más. Debes estar feliz, la muerte de tu amigo me hizo darme cuenta de ello.
Kaioshin no soportó la rabia y atacó a Gepernitch, pero este desapareció sin mayor aviso. Seguramente había regresado a su nave principal.
-¡No te voy a dejar escapar!
La nave era sólo un montón de fierro, así que la destruiría con una de sus técnicas. Pero la nave también desapareció. Había sido un despliegue Fold hacia otra parte del globo.

Ahora Goku iba a poder luchar sin intervenciones. Sin Gepernitch hablando cosas incomprensibles, y con Kaioshin volando a recuperar el cadáver de Kibito; no tendría interrupción.
-No te voy a perdonar lo que hiciste.- Repitió furioso, y la risa malsonante de Zoramd sólo le irritó más.

 

20.- La petición del viejo Kaioshin

La nave de Gepernitch simplemente había cambiado de ubicación, pues así acortaría el viaje hacia su destino. De sus hombres recibió la información de que ya habían rastreado con sus naves toda la superficie del mundo, y se había localizado el mayor centro de tecnología de ese planeta: la corporación Capsula. Pero él no iba a hacer el trabajo que le encomendaría a Gavil luego de que trajese de vuelta a Sivil. Esperaría un poco, y ahora estaba en el lugar necesario.
-Así que esta es la capital del mundo.- Susurró para sí mismo- Parece insignificante.
Se hallaba ahora sobre un pequeño monte, pues había salido volando desde su nave insignia. Contempló desde lo alto la ciudad, e identificó el edificio que parecía más imponente.
-En casi todos los universos, la Tierra es liderada por un solo rey. Espero que acá no sea la excepción.
Pero antes de continuar con su plan, debía seguir vigilante la batalla de Zoramd con el llamado Goku.
-Zoramd… Zoramd ¿Me oyes? Me estoy comunicando contigo por medio de mi telepatía.
-Diga usted, Lord Gepernitch.
Como Zomd y Goram habían sido generados a partir de su propia Spirtia, no fue cosa difícil controlar su cuerpo durante un rato.
-Goku… yo soy Lord Gepernitch. Ya no necesito seguir estudiando tus fuerzas. Tu Spiritia derramada puede hacer mucho más de lo que demuestras en combate, así que no estás usando tu poder completo. Si quieres vengar a tu amigo, es mejor que destruyas a este mi sirviente, y desemboques toda tu furia.
-¿¿Qué?? ¿Acaso no te importa que destruya a uno de los tuyos? ¿Qué clase de persona eres?
-Oh, jo jo. Zoramd siempre será uno de los míos, esté vivo o muerto. Cuando lo remates, su Spiritia volverá a mi persona, como lo estaba en un principio. Eso es todo lo que importa.
-¡No puedo creer lo que estás diciendo!
En ese momento, dejó de controlar a su subordinado, y se quedó esperando. Goku vendría pronto hasta él…

Goku no tenía más alternativa que seguir el plan de Geper comosellame, y derrotar a Zoramd. El tiempo de jugarretas había acabado, luego de asesinar a sangre fría a Kibito. Además ahora el supremo kaiosama no podría volver a unir su cuerpo con él, y sus poderes no le bastarían para su misión de proteger el universo de cualquier amenaza.
-Prepárate.
Goku incrementó su ki con violencia, y la onda expansiva hizo retroceder a Zoramd. De pronto el saiyajin sufrió una fuerte corriente de luz, y su cabello dorado se fue alargando poco a poco. Su rostro cambiaba, y su frente se hacía prominente hasta que sus cejas desaparecieron. Su musculatura aumentó, y también su frialdad. Era un súper saiyajin 3.
-¡Esos son los verdaderos poderes del Anima Spiritia!- Se asombró Zoramd- No importa lo que Lord Gepernitch me dijo, la única alternativa para vencer, es drenar toda su Spiritia hasta convertirlo en un cascarón seco.
-¡Ni lo creas!- Goku con una sola mano despidió gran cantidad de energía, impactando al ser de lleno.
-Debo absorber… ¡No puedo, es demasiado para resistirlo! ¡¡Aaaaaaahh…
Y Zoramd desapareció de la faz de la Tierra. Goku volvió a su estado base, pues la fase 3 sólo debía usarla de forma razonable.
-Lamento que todo esto haya pasado de esta forma. ¿Por qué aguantó tan poco frente a mi poder cómo súper Saiyayin 3? No lo entiendo…
Goku pudo haber utilizado su Shunkanido para teleportarse frente a Gepernitch y terminar con eso, pero primero debía alcanzar al Supremo Kaiosama.
-Ya no hay nada que hacer.- Le dijo el dios- Kibito está muerto, y sus esferas siguen desactivadas por cuatro meses aún. ¡Esto es terrible!
-Oiga Supremo Kaio… ¿Acaso usted no tiene forma de ayudarle? Tal vez puedan buscarle en el otro mundo, seguramente Enma Daioh lo atenderá pronto y lo mande al paraíso.
-¿Y eso para qué? Ya no tiene caso…
-¡No, piénselo! Ahora que Zoramd ha desaparecido, ustedes dos pueden volver a fusionarse en un solo ser, y si él puede conservar su cuerpo en el más allá, entonces pueden intentar usar los pendientes de nuevo, y formar al Supremo Kibitosama de nuevo.
-¡Se llama Kibitoshin, y es una excelente idea! Así como usted y el señor Vegeta se fusionaron para derrotar a Majin Boo, estando él muerto, yo puedo hacer lo mismo. Aunque eso significa que Kibito no podrá vivir por separado a mí, debe fusionarse conmigo por obligación.
-¡Entonces vayamos con Enma Daioh para buscar a Kibito! Yo puedo llevarnos con la teletransportación.
-¡No! No es adecuado que yo vaya para allá. Soy el dios supremo, y si me ven en ese lugar se armará un gran alboroto. ¡Es igual que si Dende bajase a la tierra!
-Ah, ya entiendo…
-Yo lo esperaré aquí, estoy seguro de que volverá inmediatamente.
Goku rápidamente ubicó el Ki de Enma en el otro mundo, y apareció frente a su escritorio gigante. Unas pocas almas de color blanquecino hacían la fila, pero ninguna pareció reconocerle. A lo mejor Kibito ya había sido recibido.
-Oh, Goku, ¿Qué haces aquí? Generalmente cuando te apareces en este sitio, es que hay problemas.
-¡Por desgracia sí, pero ahora no puedo explicar! Sólo vine a buscar a Kibito, que es amigo del supremo Kaiosama ¿No ha pasado por aquí?
-¡Oh, precisamente el honorabilísimo, ilustrísimo y maravillosísimo señor Supremo Kaiosama de hace 15 generaciones atrás, me informó que él acababa de fallecer! Le permitió conservar su cuerpo, así que no está aquí, debe estar en el perfecto, grandioso, inimaginable planeta supremo.
-Pero si ese planeta no es la gran cosa…
Enma Daioh por poco se atraganta, pero Goku se despidió y volvió a la Tierra para buscar a Kaioshin. Una vez lo tocó, Goku se esforzó por sentir el Ki de Kibito, y una vez localizado bastó un segundo para aparecer en el planeta supremo.
-¡Qué!- El anciano Kaioshin se molestó con su presencia- Qué haces aquí, por si no sabes este es un planeta sólo para que lo habiten los dioses, los simples mortales no tiene permiso para entrar. ¡El mismo Kibito hubiese ido a por el kaio supremo luego de que termine de barrer este planeta! ¡¡Irrespetuoso!!
-¡Aaaah… pero para qué se enoja tanto. Sólo quería ayudarles un poquito, y comprobar que ahora pueden volver a fusionarse otra vez.
-Yo ya estoy muerto, y no debería involucrarme en asuntos del mundo de los vivos.- Dijo Kibito mientras se hacía el que barría.
-¡De todas formas esta es una urgencia!- Dijo Kaioshin- Debemos formar un mismo cuerpo otra vez.
-Oigan… ¿Y cómo van a hacerlo? Porque yo veo que los dos tienen puestos los arcillos, y no pasa nada de nada.
Kaioshin se espantó con lo que Goku había notado ¡Ahora se tendrían que quedar separados para siempre!
-¿No recuerdan que les expliqué que la unión Pothala se hace sólo una vez en la vida?- Les dijo el anciano Kaioshin- Si se separaron por razones inexplicables, entonces qué remedio.
-¿Y eso de una vez en la vida cuenta para mí? Yo ya estoy muerto.
-¡Ah, ahora que lo dices es cierto! Entonces debería funcionar, sáquense los pendientes y vuélvanselos a poner.
Goku por poco se parte de la risa ante la cara de Kibito y el supremo Kaio. Rápidamente estos se sacaron sus pendientes Pothara y se los pusieron, provocando que los cuerpos de ambos se vieran atraídos, hasta que la fusión se produjo.
-¡He vuelto a nacer!- Se alegró Kibitoshin- ¡Ahora tengo nuevos poderes para…
-… ponerte a barrer! Rápido, que el planeta no se limpia solo. Para mí es una lástima que se hayan vuelto a fusionar, ahora sólo una persona se quedará barriendo.
-Pero… ¡Venerable antepasado, debo ir a ayudar a Goku y a los saiyajines en la batalla que están teniendo! ¡El destino del universo está en juego!
-No seas tan dramático, tu poder es bajo y sólo les estorbas. ¡Asume la verdad!
Eso deprimió profundamente a Kibitoshin, pues estaba siendo incompetente en su labor como dios, y producto de ello, se dejaba mandonear por su antepasado.
-A mí también me molesta, pero es cierto. Debemos depender de estos saiyajin nuevamente. Es por eso que necesito que se presente en este planeta ese hijo tuyo, Goku. ¿Eh, dónde está? Parece que ya se fue…
-Oiga… pero si no saca los ojos de su revista obscena, es difícil que vea que sigo aquí.
-¡Esta muy interesante, sólo mírenla… jeje! En fin, quiero que traigas a tu hijo hasta acá.
-¿A cuál, a Goten?
-¡No ese, cómo se te ocurre! Me refiero a Gohan, él ya estuvo en este planeta antes, así que le permitiré venir otra vez. Tráelo rápido, y luego te vas, que le doy autorización a él pero no a ti. Y te recuerdo que me prometiste traer a una chica a este mundo, ¡No te olvides de eso, que es muy importante!
-¡Oh no, debo derrotar a Geper nosecuanto, y además convencer a Bulma de venir hasta aquí! Creo que es la mayor amenaza a la que me he enfrentado.
Pero sin más charla, Goku se teletransportó hacia la Tierra.

 

Perdonen el retraso, he estado atareada

21.- Convenciendo a 18

Una vez Zoramd fue derrotado, Gepernitch se quedó esperando a que Goku llegase a enfrentarse con él, pero este no venía. Sin embargo, la Spiritia del saiyajin rebosaba al ser tanta cantidad, y era posible sentirle en cualquier lugar en que se encontrase.
-Ha salido de este planeta… ha salido de esta dimensión. Ahora está en otro plano distinto.
Comprendió que este universo estaba compuesto de al menos otra dimensión alterna, hacia donde Goku había ido por algún motivo.
-Tal vez así pueda lograr que el Anima Spiritia deje de estorbar.
Se transportó volando de vuelta hacia la nave principal, y volvió a su puente de mando. Llamó a su primer oficial y le dio unas instrucciones.
-Liberen al Natter Valgo y pónganlo en medio de la Tierra y la Luna. ¡Se encargará de hacer un bloqueo Fold! Las naves acorazadas servirán para reflejar su bloqueo, y así envolver al planeta entero.
Pronto reactivaron al Natter Valgo, mientras que Gepernitch sentía que Goku había vuelto a la Tierra. Pero el saiyajin no estaba buscándole, así que pudiera ser que volviese a salir del planeta para ir a ese otro plano alternativo del universo. Cuando así ocurrió, el Natter Valgo ya estaba en su posición.
-Valgo, o lo que queda de ti. Procede con el plan, impide que nadie entre o salga de este planeta usando Fold, o cualquier otra forma de transmisión instantánea.
El robot que simulaba al Valgo original, muerto en el primero de los universos, comenzó con su tarea. De sus manos demoníacas comenzó a expeler Spiritia pura, transformándola en interferencia hiperespacial que en dos líneas rectas llegaron a las naves de Gepernitch más lejanas del horizonte. Luego esas naves repitieron la interferencia hacia las otras naves más lejanas, y así hasta que el mundo quedó rodeado por completo.
-Je je… ahora será más fácil tomar este pequeño planeta.

Gohan se había quedado en la Kame House vigilando hasta que Sivil despertase. 18 estaba ahí intentando que su hija dejara de jugar a ser Tortuga, y Oolong junto al maestro Roshi eran los más interesados en la desconocida.
-Lo interesante es que ocupa las bragas encima del traje… jeje.- Oolong se encontraba totalmente fascinado, pero Roshi le quitó el puesto; quería estar presente cuando despertase Sivil.
-Quítese, viejo.- Le dijo Oolong- Cuando despierte, lo primero que haré será transformarme en un hombre que parezca millonario, y así al conquistaré.
-Eso no te va a funcionar, tu transformación dura sólo cinco minutos. En cambio yo ya soy muy apuesto, y en cuanto despierte me verá y quedará absolutamente flechada.
-Dejen de decir tonterías.- Les recriminó 18, quien entraba recién al cuarto- Por si no se recuerda, anciano, ella ya lo vio, y su primera reacción fue arrojarlo al piso para poner la mayor distancia posible.
-Es que estaba influenciada por ti.- Le defendió él- Y si te fijas, fue incapaz de pelear con Krillin en tu cuerpo. Por eso, cuando despierte va a quedar absolutamente enamorada de mí, y yo no pienso poner muy exigente con ella, jejeje.
-Oh, pedazos de…
-Oye 18.- Gohan miraba por la ventana- Se supone que ibas a cobrar el dinero de Satán ¿Cierto? Y te topaste con ella accidentalmente.
-Así es. Alguien le dijo que Satán era el más fuerte del mundo, y decidió ir a investigar.
-¡Jeje! Ya veo, Satán va a tener muchos problemas por su título mundial. Quizá le sirva de lección de humildad.
-No le servirá de nada. Sivil se dio cuenta de que era un debilucho y no le tomó en consideración.
De pronto apareció Goku en la habitación, y saludó a todos. Olvidó el nombre de Marron, pero se dio cuenta de que jugaba a ser tortuga y le quitó el caso de Saiyaman de encima. Con eso bastó para que asumiera que era humana nuevamente.
-Oh, yo tuve que haber pensado eso.- Dijo la androide, y Gohan aprovechó de tomar su casco y guardarlo junto con el resto del traje, apretando la tecla correspondiente en su reloj. Tenía un mal presentimiento, y la capa le podría estorbar si llegaba la hora de pelear en serio.
-Oye Gohan… ¿Sabes? Te ves un poco diferente.
-¿Tú crees papá? Debe ser que todavía estoy un poco cansado por el corto combate que tuve contra ella.
Y señaló hacia la cama.
-Ah ya veo, pero no se ve muy fuerte que digamos.
-De hecho.- Le comentó el duende tortuga- Su ki se incrementó luego de caer inconsciente. Lo hemos estado pensando, y creemos que es porque absorbió algo de los poderes de Gohan. De todos modos su ki no ha aumentado tanto como para que se salga de control, pues Gohan tiene poderes suficientes para derrotarla con un golpe si es que se lo propone.
-Mmm... entonces estamos en un gran problema.
Goku les explicó que en su pelea contra un monstruo llamado Zoramd, este intentó absorber la energía de su Kame Hame Ha, pero no lo consiguió. A lo mejor todos los enemigos como ellos tenían la misma habilidad, así que tendrían que optar por el combate físico.
Dieciocho estuvo de acuerdo.
-Ya… esta mujer absorbió los ataques de energía de Krillin y también los de Gohan. Sólo yo le logré causar daño con mis habilidades. No sé qué tendré de distinta, pero ya veo que voy a tener que inventar nuevas técnicas que causen gran cantidad de daño. O si no ustedes serán derrotados.
Goku observó a 18, y luego miró a Gohan. ¡Entonces tuvo una excelente idea!
-Oye Gohan, estoy aquí porque el antepasado del supremo Kaioshin me pidió que te llevase de vuelta a su planeta. No me explicó para qué, pero tenía una cara enigmática. Arrugada, pero enigmática.
-Pero… en este momento no puedo salir de aquí, si Sivil despierta en esta oportunidad a 18 le costaría más trabajo vencerle. Tengo que quedarme para evitar cualquier desastre.
-Lo entiendo perfectamente Gohan, pero siento el ki de Piccolo aproximarse hacia acá. Él es muy inteligente, y estoy seguro de que sabrá controlar esta situación sin la necesidad de pelear. Viene con otro de los amigos de Geper nosequé, así que significa que de momento tiene la situación controlada.
-No lo sé, papá. Tengo un mal presentimiento.
-Ya lo sé, Gohan, pero el anciano Kaioshin sólo te necesita a ti; yo volveré a este planeta y me quedaré aquí en Kame House hasta que Piccolo llegue. Luego iré a enfrentarme con el Geper comosellame.
-¡Ah, entonces iré! Si es el anciano Kaioshin, debe tener un plan, o algo por el estilo.
Pero antes de teletransportarse al planeta supremo, tenía que pedirle algo a la androide 18. No tenía tiempo de ir por Bulma, pero en cambio supuso que la androide sería la más indicada para que el anciano dios se regodeara. Le había hecho una tonta promesa al anciano, pero tenía que cumplirla, y 18 era la única alternativa.
-Oye… androide dieciocho… emm, no sé cómo pedírtelo, pero ¿No quieres venir al planeta supremo? Allí hay un anciano muy simpático que se parece en el carácter a Roshi, y como eres amiga de él, ¡Seguramente te caerá muy bien!
-Se ve que tú no tienes idea. El maestro roshi es el viejo más desagradable de todos.
-¡Ah, humm… ¡Entonces si el duende tortuga es el más desagradable de todos, el anciano supremo kaiosama no te será tan desagradable!
Todos miraron a Goku, pues no entendían nada de nada.
-Oiga, Maestro Roshi.- Se acercó Goku a su viejo mentor, susurrándole- ¿Me puede ayudar con esto? Al igual que usted, el viejito kaioshin me pidió que le llevara una chica muy linda, y no sé cómo pedirle eso a 18, porque se va a enfadar.
-¡Oh, ya veo Goku! Claro que te ayudaré.
El duende tortuga se paró frente a la androide, y tras un solemne silencio, le tocó los senos.
-¡¡Aaaah!! ¡Maldito viejo, qué se ha creído!
Dieciocho de una bofetada le estampó contra un muro.
-¡Al diablo! ¿Adónde se supone que tengo que ir, Goku? ¡No pienso quedarme ni un segundo más con este abuelo decrépito!
-Vaya…- Gohan se asombró- Se ve que el maestro Roshi todavía tiene una gran resistencia física.
-¡Genial! Entonces vayámonos. ¡Hasta luego Oolong, gracias maestro Roshi! Nos vemos, hija de Krillin de la cual no recuerdo su nombre.
-Se llama Marron.
-Oye 18… ¡Creo que le Krillin le puso de nombre el de su antigua novia! Se llamaba igual.
-Nada que ver. Eso fue relleno del anime, en realidad eso no pasó jamás.
-No entiendo lo que estás diciendo, pero no hay tiempo que perder.
Y desaparecieron de la habitación.
-Valió la pena…- Roshi recién se estaba levantando- Sólo espero que Piccolo llegue pronto hasta aquí, antes de que esta lindura despierte.

 

22.- El descubrimiento de Piccolo

Durante el viaje hasta la pequeña isla de Roshi, Piccolo y el así llamado Gavil no habían dicho palabra. Era un silencio tenso, el cual Piccolo se obligó a romper puesto que ya estaban a punto de llegar, y de lo contrario se quedaría con las dudas.
-Muy bien, ya no voy a seguir esperándote. Quiero que me digas en este mismo instante qué es lo que ustedes llaman “Spiritia”.
-Eso es muy fácil, renacuajo. La Spiritia es la energía que poseen todas las cosas, aunque incluso no sean seres vivientes. Las rocas también poseen Spiritia, y así se teje toda la existencia de esos objetos. Sin Spiritia, la gente pierde la voluntad de actuar, porque no hay ninguna fuerza vital que lo impulse. Es igual a perder toda motivación, o toda comprensión del medio.
-Ya veo. Pero en este universo, a eso le llamamos ki.
-No te equivoques. Ya he comprobado con unos soldados de Freezer qué es lo que llaman “ki”.- Piccolo se asombró con esa afirmación, pero solamente continuó volando- El ki es la energía física que ustedes saben manipular en los combates, por eso la pueden perder, y eso es equivalente al cansancio. Pero la Spiritia sigue siendo la misma cuando las personas se cansan, o descansan. No tiene que ver lo uno con lo otro.
-Ya veo.
Gavil le miró con una sonrisa condescendiente.
-Es por eso que sé que, aunque estás ocultando el total de tus energías, debes ser más poderoso, pues tu Spiritia es imposible de ocultar.
-Entonces no hay necesidad de contenerse.- Dijo el nameku. Inmediatamente dejó liberado todo su ki, y Gavil siguió con su sonrisa.
-Ese es exactamente el poder de calculaba de ti. Tu alta cantidad de Spiritia demuestra que podías llegar hasta esos niveles. De otro modo, no se explica que la tengas.
-Entonces ahora me queda claro por qué tu amiga Sivil no incrementaba sus poderes según absorbía la energía de Krillin o de Gohan, que fue quien la derrotó. Ella estaba absorbiendo la Spiritia que fue disparada conjuntamente con la energía del ataque.
-Así es, rana súper desarrollada. Espero que ahora entiendas que no tiene sentido atacarme con tus poderes de Ki, porque sólo será más Spiritia para nosotros. Y eso significa que nos sentiremos totalmente descansados, pues nuestro grado de vitalidad sube.
Pero Piccolo comprendió que eso era independiente del nivel de heridas que tuvieses aquellos sujetos misteriosos. Seguramente podría dejarlo a punto de morir, pero por tener un alto nivel de Spiritia, no se sentiría dolorido o cansado como si estuviera agónico.
Y también por ese motivo, Krillin al ser curado por Dende no pudo recuperarse, pues estaba bien físicamente, pero sin Spiritia su cuerpo no tenía voluntad para actuar. Solamente le restaba entender por qué los ataques de la androide 18 sí surtían efecto en ellos, sin ser una guerrera demasiado poderosa.
-¿Te puedo hacer otra pregunta? Ya me queda claro que nuestros ataques de energía no servirán de nada, pero ¿De qué forma ustedes pueden ser golpeados?
-¡Qué pregunta tan rara! Se nota que estás buscando la manera de destruirnos, pero todo lo que intentes será inútil.
-Entonces no tendrás problema alguno en contestarme.
-¡Jejeje! Eres una criatura astuta, hay algo de belleza en ti, así que será un placer absorber tu Spiritia cuando así me lo permitan. Está bien, te diré. Es evidente que nos podría afectar cualquier ataque no involucre a la Spiritia. Así que balas, misiles, torpedos, explosiones o un golpe físico nos podrían causar daño… digo, podrían, porque somos demasiado resistentes para que esa clase de trucos nos afecten.
Piccolo siguió volando mientras trataba de conectar sus ideas. Eso quería decir que un cañón lo suficientemente poderoso podría llegar a herirles, o una explosión gigantesca. Eran formas de ataque a distancia, pero tecnológicas…
-¡Ya lo tengo!- Gritó Piccolo por fin entendiéndolo todo.
-¿Ya tienes qué? Es mejor que dejes de decir locuras, o voy a olvidar que no necesito hacerte daño aún. De todas formas ya comprobé que vamos a esa pequeña isla que se ve a lo lejos.
Piccolo siguió pensando esta vez sin exabruptos ¡La número 18 era un androide! Es verdad que tenía una base humana, pero lo que le daba su capacidad para pelear era la tecnología del doctor Maki Gero. Por lo tanto, ella arrojaba sus ataques sin nada de Spiritia, pues su parte humana no dominaba en realidad la capacidad para disparar ki. ¡Era un ataque puramente tecnológico!

Finalmente, llegaron a la Kame House. Piccolo sabía que Goku había aparecido de pronto y se había llevado a Gohan, así que todo se le complicaba. Tal vez si el molesto de Vegeta se dignara a hacer acto de presencia podría controlar mejor la situación, pero por lo que se veía, no estaba interesado en pelear con enemigos tan insignificantes en comparación a él. Era su orgullo de príncipe, pero si seguía con esa mentalidad, todo se iba a complicar más de la cuenta. A menos que el jefe de aquellas criaturas fuera realmente poderoso, Piccolo supuso que Vegeta no movería ni un solo dedo por ayudar, pues a él en realidad le importaba la nada misma.
-Bien, tu amiga Sivil está en el interior de esa casa. Quiero que te la lleves, y no vuelvas a aparecerte frente a nosotros ¿Oíste?
-Eso mientras tanto. Luego, volveremos a por ustedes. Pero por estos minutos todavía pueden hacer sus vidas tranquilas. Mi señor Gepernitch tiene un plan para todos ustedes, así que seguramente nos volveremos a ver.
Gavil entró a la casa y se quejó por todo el desorden. Subió al segundo piso, pues a esa distancia ya podía notar la presencia de Sivil.
-Vaya, su Spiritia ha adoptado un nivel de pureza inusual en ella. Ha adquirido belleza.
-¿No cierto que sí?- Le dijo Oolong todo confianzudo.
-¡Oh, eres un cerdo!... literalmente. No me refiero a esa belleza banal y corporal, sino a una más profunda y elevada. Pero eso no les interesa, aléjense de mi camino si quieren extender sus vidas por un tiempo más.
Con un dedo movió telepáticamente a Sivil y le sacó de su cama. El maestro Roshi aprovechó de dar una última mirada, pero dio también una advertencia.
-Qué te quede claro que no importa lo que ustedes vayan a tramar, ¡Será imposible que logren conseguir sus objetivos! Ustedes no están al nivel de poder que se requiere para poder enfrentar a Goku o a Gohan, o Vegeta tampoco. Es mejor que se marchen y no regresen a menos que tengan buenas intenciones.
-Oh, cállese abuelo.- Pero Gavil memorizó esos tres nombres, pues conocía bien a Lord Gepernitch y tenía alguna idea de en qué podía consistir su plan.
Gavil se envolvió a sí mismo y a Sivil en una esfera de energía.
-¿Qué?- Preguntó Piccolo- ¿Acaso no piensas curarla? ¿Solamente te la llevarás?
-Ella incluso ha incrementado su nivel de Spiritia; está desmayada por el daño de su batalla. Y aunque pudiera curarla, ella siempre nos ha significado un problema. Es mejor que se quede así hasta que Lord Gepernitch decida qué hacer con ella.
Y comenzó su vuelo dentro del cuarto, sin interesarse en paredes; así que la Kame House sufrió aún más destrozos.
-¡Espera!- Le detuvo Piccolo- Todavía no me dices qué clase de criaturas son ustedes. Dame esa sola respuesta.
-Protodeviln.- Contestó Gavil, y se marchó.
-Maldita sea…- Se lamentó el Namekuseijin- Me hubiera gustado mucho darle su merecido, pero en este momento hubiera sido algo inútil. Primero necesitaba saber más acerca de estos sujetos Protodeviln, y comprender cuál es el verdadero peligro.
-No te preocupes Piccolo, nadie te culpa.- Roshi le encontró toda razón- Aunque creo que hubieras podido derrotar a ese sujeto, de momento era poco conveniente intentar combatir.
-De todas maneras no me pienso quedar sin hacer nada, le seguiré hacia donde vaya. Si oculto por completo mi energía no me detectará, a menos que me vea directamente parece que no son capaces de medir la Spiritia. Eso lo sé porque de otro modo, no andarían tan a sus anchas sabiendo de la existencia de Gohan y Goku, o Vegeta. O incluso del gordito de Boo.
Y emprendió el vuelo. Tenía que evitar cualquier acción que Gavil llevase a cabo, y terminar de descubrir qué es lo que tramaban los Protodeviln en este universo.

 

23.- Gohan fue debilitado

Goku, junto a Gohan y la androide 18 llegaron al planeta sagrado de los Kaioshin. Número 18 se sorprendió de que fuese tan amplio, y de que hubiera un dios dignándose a la tarea de barrer el planeta entero.
-Es lo que me toca.- Dijo Kibitoshin- Es un castigo que yo mismo me he impuesto, por ser absolutamente inservible en mi labor de ser un dios todopoderoso.
-Ay, no seas tan dramático.- Se quejó su antepasado- Y supongo que sabes que eso de barrer lo inventé para poder leer mis revistas sin interrupciones ¿Cierto?
-Siempre lo supe, pero ahora sólo me queda barrer, y seguir barriendo hasta dejarlo todo limpio.
-Vaya, sí que entró en depresión el supremo kaiosama.- Se sorprendió Goku- Bueno, espero que supere su crisis de frustración; yo ahora debo irme.
-¡Espera Goku!- Le detuvo la androide- Primero, dime cuánto tiempo deberé quedarme en este lugar.
El anciano Kaioshin ya le estaba mirando con ojos lujuriosos, hasta el punto de olvidar que había llamado a Gohan por algo trascendental.
-Emmm… pues parece que debes quedarte para toda la eternidad, o eso creo.
-¡¿Qué?! ¿Estás demente? Además, ni siquiera tuve que haberme ido, soy la única que puede hacerle daño a esos monstruos con ataques de energía, ¡Y encima dejé a mi hija sola con el cerdo y el viejo!
-Y la tortuga.- Le recordó Gohan- La tortuga es importante también, yo creo que es el alma de Kame House.
-Pero no todo pinta tan mal.- Le dijo Goku- Piccolo ya debe haber llegado, y parece que él ya tiene mucha experiencia en eso de criar niños…
-¡Ah, pero papá! Mejor no digas esa clase de cosas.
Gohan se acercó al supremo kaiosama de hace quince generaciones, y le pidió perdón por la descortesía. Estaban sólo hablando tonterías, y seguramente él le había citado por algo importante.
-¿Para qué me necesita? ¿Acaso se le ocurrió algún plan?
-Necesito que tomes asiento.- Dijo él.
-¿Eh? Bu… bueno.
Cuando Gohan se hubo sentado, el anciano extendió una de sus manos, y la otra la usó para cambiar las hojas de su revista de historietas.
-Tú no te alejes mucho.- Le dijo a dieciocho- Ya que estás aquí para deleitarme la vista, jejeje.
-Ah, es verdad entonces que este vejete es igual que el otro.
-¡¡Aaahh!! ¿Cómo le dices así?- Se espantó Kibitoshin- ¡Él es una de las personas más importantes del universo, ten algo de respeto!
-¡Meh! Mejor usaré mi tiempo en algo útil; aunque soy la única que puede atacar con energía a esas cosas, sé perfectamente que mi poder no está a la altura de los saiyajins. Así que entrenaré un rato, y a ver si se me ocurre una técnica muy eficiente que pueda ayudar.
-Oh, eso es una buena idea.- Le dijo Kibitoshin- Si necesitas ayuda para desarrollar esa técnica, sólo dímelo. Así tal vez podré ser útil, aunque indirectamente… ay, soy una vergüenza para mi raza.
-No te mortifiques.- Le insistió su antepasado.
-Bien, yo ya no debo malgastar más tiempo ¡Nos vemos Gohan! Y dieciocho, volveré por ti en cuanto ya tengas tu nueva técnica desarrollada.
La androide se alejó para comenzar su entrenamiento, y Goku intentó notar el ki de Piccolo para regresar a la Tierra. Pero antes de irse, había algo no le quedaba claro.
-Oiga, anciano Kaioshin. ¿Para qué traje a Gohan hasta aquí?
-Eso me gustaría entender, si es que nos pudiera explicar.
-Eso es muy sencillo.- Dijo él- He llegado a la conclusión de que los Protodeviln son una amenaza seria para este universo, pues según lo que he entendido de todo lo que he visto en mi bola de cristal, esas criaturas absorben la famosa Spiritia de todos los seres vivientes de un universo, hasta agotarla por completo. ¡En ese momento, ese universo se queda sin nadie que sobreviva, y entonces los Protodeviln se van a otro! Y hacen lo mismo en ese nuevo universo, y en el que sigue, y el que sigue, y el que sigue… ¡Y sigue este!
-¡Eso es terrible, venerable antepasado! Debo evitar a toda costa que eso suceda aquí también.
-Debemos, Kibitoshin, debemos; es por eso que he llamado a Gohan. En este momento lo mejor es que todos juntos hagamos frente a la amenaza, y al igual que como ocurrió con Boo, necesitaremos la ayuda de los simples mortales. Por eso lo traje, pues siento que será mejor que él pelee con todas sus fuerzas, en caso necesario.
Y cambió la página de su revista.
-Entonces, anciano Kaioshin ¿Está liberando nuevamente mis fuerzas máximas? Pero si eso ya lo hizo la vez anterior… ¿Acaso todavía puede volverme más fuerte por ese método?
-Yo en ningún momento dije que iba a hacerte más fuerte que antes, dije que volverías a tener las mismas fuerzas que antes.
-De hecho tampoco dijo eso.- Le hizo notar Kibitoshin.
-No hablen con trabalenguas, que me hacen acordarme de uno de los chistes de Kaiosama.
-¡Pero… pero anciano Kaioshin, yo en dos meses no he bajado para nada mi fuerza! De todas maneras sigo en forma, aunque no entrene al ritmo de mi papá o el señor Vegeta.
Goku entonces se dio cuenta de por qué había sentido tan distinto a Gohan en Kame House.
-¡Oh no! Gohan, por favor quiero que sueltes todo tu poder, como cuando peleaste contra Súper Boo.
-¿Eh?- Se levantó- Está bien papá, aunque no sé para qué me lo pides.
-¿Todavía no te convences de que tu poder es menor que antes? Ahora lo comprobarás.
Goku ayudó al anciano a levantarse para que pudiera retirarse un poco, y que así no saliera volando por el repentino aumento de Ki de Gohan.
-Bueno… entonces, liberaré toda mi energía en este momento.
Gohan preparó sus piernas, y elevó todo su ki. Inmediatamente una típica aura lo envolvió, y su cabello se volvió dorado. Unos rayos le rodeaban, y Goku le miraba totalmente espantado.
-¿Qué te sucede papá, por qué… ¡Oh no, no puede ser! ¡¿Qué significa esto?!
Y subió más su ki, sin creer lo que le estaba pasando.
-¡Pero si yo no debiera poder hacer esto! Estoy seguro de que puedo liberar todo mi potencial ¡¡Aaaaaah!! ¡¡¡Aaaaaahh…
La revista del anciano terminó desintegrada, y el cabello dorado de Gohan se fue alargando cada vez más.
-¡Ah, es sorprendente! Ahora me puedo transformar en un Súper Saiyajin 3. Rayos, sí que se siente pesado el cuerpo convertido de este modo.
-A Vegeta esto no le va a gustar nada nadita…
-¡Pero aun siendo un súper Saiyajin 3, mi poder es inferior al que tenía! ¡No puedo creerlo!
El anciano Kaioshin se les acercó.
-Claro que ahora puedes convertirte en el no sé qué 3, ya que antes habías alcanzado más fuerza que esa por medio de mi anterior desbloqueo. Ahora no te desesperes, y siéntate, para que podamos proseguir.
-Eh… ¡Sí, entendido!- Volvió a su estado base y se sentó en el pasto, ya que no había tiempo que perder.
-Ahora me tardaré menos que la vez pasada, pero no te vayas a descuidar y a perder de nuevo ese poder, que no hace nada de gracia andar desbloqueándolo mil veces.
-Pero… si yo acabo de tener un combate, y en mi estado más puro de fuerza, tal como usted lo desbloqueó.
El viejo materializó una nueva historieta y comenzó a leerla.
-Seguramente esa Sivil te absorbió tu Spiritia, o alguna de esas cosas raras que hacen los Protodeviln.- Le dijo su padre.
-Así fue.- Les dijo el anciano- Ella se aprovechó de la pureza de tu Spiritia, y decidió asimilarla para ella. La venciste, pero con menor cantidad de Spiritia, tu cuerpo no pudo mantener su condición mística igual que siempre, así que perdiste ese poder hasta que vuelvas a tener la misma Spiritia de antes.
-O sea… usted ahora sólo va a restablecer mi Spiritia a la cantidad normal, y yo recuperaré mis fuerzas.
-Así mismito como lo dijiste. Pero voy a tomar algo de tiempo, porque jamás había oído de esa Spiritia, y recién estoy comenzando a entenderla.
-A su vez.- Comentó Goku- Sivil parece más fuerte que antes, pero no incrementó demasiado su poder.
-Ahora que su Spiritia es mucho más pura, pues claro.
-No entiendo nada sobre eso de la pureza.- Dijo Goku- Me gustaría comprender bien antes de ir a mi batalla. Ya estoy tardando mucho, espero que en la Tierra aún no esté pasando nada malo.
-La pureza de Spiritia es producto de que nosotros como Kaioshin somos los dioses, y los más puros.- Explicó Kibitoshin dejando de barrer- Y por eso también Gohan tiene un buen grado de pureza, ya que mi respetable antepasado intervino en él de forma divina.
-¡Ya entiendo! Entonces adiós, ya nos veremos. Ahora sí que me he tardado mucho.
Goku se teletransportó a la tierra por medio del Shunkanido, pero a la hora de aparecer, lo hizo en el mismo sitio del planeta supremo.
-¿Qué? ¿Y ahora qué está pasando?

 

24.- Apoderándose del mundo

Gepernitch había vuelto a su monte, a la espera de noticias de Gavil. Finalmente este se comunicó telepáticamente.
-Lord Gepernith… ¿Puede oírme?
-Sí. Y me doy cuenta de que encontraste a Sivil.
Lamentablemente no tenía forma de encerrarla, pero sus cazas variables Saubergeran tenían la capacidad de drenar la Spiritia, así que le ordenó a Gavil que la dejara atada frente a un escolta que vigilase atentamente hasta que ella despertarse. Si intentaba huir, sólo había que drenar su Spiritia, y más debilitada se controlaría mejor.
-Ahora tengo tu siguiente tarea, Gavil. La Tierra ya está completamente escaneada, por lo que el personal de control táctico sabe la ubicación de Capsule Corp. Han reparado el rastreador que encontraste; quiero que lo lleves hacia Capsule Corp y les obligues a que construyan uno mejor.
-¡Entendido! Entonces, lo que usted busca es averiguar cuántos guerreros poderosos hay, no sólo los más fuertes que puede sentir por su cuenta.
-Así es, mientras mejor pueda localizarlos, más fácil será llevar a cabo mi proyecto. Así que no demores.
-¿Y usted qué hará mientras tanto, Lord Gepernitch?
-Jojo… te vas a enterar pronto de eso.
Antes de proseguir, el líder de los Protodeviln le recordó a Gavil que no intentase usar a Grabil, pues estaba reservándolo para cualquier emergencia. No debía derrochar su existencia así como hizo con Goram y Zomd.
-Ahora… debo ir al castillo del rey del mundo. No parece nada de grande.
Voló con prisa hasta allí, y llegó en menos de un parpadeo. Caminó hacia la puerta de entrada y miró a dos guardias armados.
-Ustedes parecen bastante fuertes.- Les dijo a los hombres sólo para conseguir alguna información extra.
-Así es, somos soldados expertos entrenados en varios estilos de artes marciales. Desde que el rey de los demonios Piccolo Daimaoh quiso apoderarse del mundo, se nos entrena muy bien, señorita.
Gepernitch alzó una ceja. Universo al que iba, creían que era mujer.
-Y aparte de ese Daimaoh, ¿Hubo más amenazas a este mundo?
-¡Pero claro que sí, ¿Acaso estuvo viviendo bajo una roca?! Luego llegó el terrible monstruo Cell, y hace poco todos fuimos asesinados a manos del monstruo Majin Boo; aunque estamos vivos, a lo mejor fue un sueño.
-Pero gracias a nuestro salvador Míster Satán estamos en una era de paz nuevamente.- Se involucró el otro guardia.
-Ya veo. Ahora su planeta tendrá que temer nuevamente, pero creo que ustedes ni siquiera tendrán tiempo para el miedo…
Los dos guardias cayeron a sus pies sin nada de Spiritia en sus cuerpos. Como era el líder de todos los Protodeviln sus poderes eran radicalmente distintos, y si él así lo decidía, la Spiritia vendría sola hacia su interior, atrayéndola toda como un agujero negro de Spiritia que secaría al universo de toda vida. En su universo de origen sufrió algo así sin poder controlarlo, y por poco acaba con toda la existencia. Ahora había evolucionado, y podía controlar sus capacidades a la perfección.
-Me divertiré un rato.
Tocó la reja y trató de verse lo más femenino posible, aunque no tuviera “montañitas”.
-Emm… mire usted, caballero, estas dos escori… estos dos hombres se han desmayado. ¡Que alguien venga a ayudarlos!
Era raro verle hacer el payaso, pero no había ninguno de sus subordinados allí para tener que aparentar ser imponente. Era una persona muy densa, más le valía alivianarse aunque fuera durante 1 solo universo. Ya en el otro volvería a una postura solemne y a su manera de hablar apagada y sombría.
-¡Oh!- Una de los escoltas del rey estaba parado en el jardín real, y se aproximó a la reja- Eso debe ser por el calor, está haciendo demasiado calor y la gente no lo aguanta… ¡Señorita, usted sí que debe andar acalorada, con esa ropa! Con botas, pantalón largo, ese traje militar, la capa y con ¿Hombreras con espinas? ¿O qué es eso?
El hombre abrió la reja para ayudar a los hombres, y Gepernitch aprovechó de entrar.
-¡Oiga, está prohibido el ingreso!
-Soy embajador de los extraterrestres. Vengo en son de paz en las naves que han rodeado su mundo, y requiero hablar con el rey de este planeta.
-Ah… ya entiendo. Deme un segundo.
El escolta real se echó un guardia en cada hombro, y mientras los sostenía pidió por radio camillas, para llevarse a los desmayados. También ordenó que otros 2 hombres les remplazaran.
-Me indican que el rey está dispuesto a verle, aunque primero debemos asegurarnos de que en realidad sea extraterrestre y no alguien farsante.
-Está bien… usted estará dispuesto a creer que yo soy extraterrestre, y yo estaré dispuesto a creer que pudo usar la radio sosteniendo a esos dos hombres.
-¡Maldita narradora de pacotilla… está bien, sígame. Le llevaré con el rey.
Condujeron a Gepernitch por un pasillo hasta una de las torres, donde estaba el despacho real. Cuando entró, pusieron un televisor en una mesa con ruedas y se la pusieron en frente. Alguien encendió la TV y apareció la imagen del rey del mundo.
-Oh… el rey del mundo es un perro con bigote.
-No no, se equivoca. Es un señor perro.
El rey del mundo ya estaba bastante viejo, y muy paranoico luego de tantos enemigos mundiales en un lapso de tan pocos años. Tuvo que ir a terapia por lo de Piccolo Daimaoh, pero Cell y Boo ya eran demasiado, y por su propia seguridad mejor atendía al extraterrestre por video conferencia.
-Le doy la bienvenida al planeta Tierra, honorable amiga de mundos lejanos. ¿Cuál es el motivo de su visita?
-Nada especial, sólo usarlos para cosechar Spiritia… absorberla, dejarlos en estado vegetal hasta que la regeneren de a poco, y luego volver a absorberla. Así que, si no es molestia, voy a conquistar su planeta.
Los hombres le apuntaron con sus armas, mientras el rey del mundo se quejaba de que nuevamente había aparecido un enemigo.
-Es una descortesía no recibirme en persona, así que actuaré rápido. Ni siquiera sentirá nada, sólo un gran cansancio.
El rey no estaba allí en persona, pero seguramente estaba en algún sitio del castillo, así que alzó sus brazos y dejó que la Spiritia llegara a su cuerpo en una gran oleada de energía verdosa. Las personas sintieron sus armas cada vez más pesadas, y ya no le apuntaban. Caían al piso una por una.
-Ya no hay nadie consciente dentro de todo este castillo. Solo la gente con alta cantidad de Spiritia podría haber resistido.
El rey del mundo yacía tirado en su escritorio, según la imagen del televisor, así que Gepernitch buscó el salón más amplio y un buen sillón que pudiera hacer las veces de Trono.
-Ahora soy el rey del mundo… necesito comunicarme con el resto de mis esclavos.
Caminó tranquilamente hacia el jardín y se elevó en el cielo. Telepáticamente todos le podrían ver y escuchar su voz; nada mejor que con el castillo del rey como fondo. Así a todas las personas les quedaría claro que estaba hablando en serio.
-Habitantes de la Tierra… sé que pueden oír mi voz.

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Por si había impaciencia, en el próximo capítulo al fin aparece Vegeta.

 

25.- El príncipe frustrado

En Capsule Corp. todo estaba en calma. Goten y Trunks jugaban, y Bulma con Milk estaban chismorreando alguna clase de cosas que decían las mujeres terrícolas acerca de matrimonios y hombres poco atentos.
-Meh, para mí todo eso no son más que tonterías. ¡Voy a estar entrenando! Tengo que ponerme al corriente, ahora que vi la gran diferencia de poderes que hay entre Kakarotto y yo.
Y le dio un portazo a su cámara de gravedad.
-Oh… este Vegeta, creo que nunca cambiará.- Bulma siguió tomando el té con su amiga Milk, quien ya había demostrado su preocupación. Goku sólo dijo “Siento un ki muy preocupante, iré a investigar” y se había marchado poniendo 2 dedos en su frente.
-¡Todavía no regresa! Me pregunto qué estará pasando, me tiene preocupada.
-¿En serio Goku sintió un ki extraño? Espera… voy a preguntarle a Vegeta.
Se levantó y golpeó la puerta.
-Vegeta, ¿Puedes salir un momento?
-¡No! ¿No ves que acabo de entrar para ponerme a entrenar de una vez por todas?
-¡¡Escúchame bien, sal en este mismo instante que te quiero preguntar algo!!
-¡Ah, pero cómo molestas!- Dijo el príncipe de los Saiyajin abriendo la puerta- Ojalá que me preguntes algo interesante tan siquiera.
-¿No has sentido ningún ki misterioso últimamente?
-Sí. Kakarotto me pidió que fuera a investigar con él, pero yo no quise.
-¿Qué? ¿Y lo dices tan tranquilo?
-¿Por qué habría de interesarme? Demostraban poderes ridículos, hubiera podido vencer a esos oponentes con los ojos cerrados; y no estoy para perder mi tiempo, ya voy muy atrasado con los entrenamientos.
-¡Pero si ayer te quedaste hasta la madrugada entrenando! En estos dos meses lo único que has hecho es entrenar ¿No te dio nada de curiosidad ese ki misterioso, tan siquiera?
-Nada. Ya te dije que tenía un poder ridículo… aunque luego llegó ese montón de naves espaciales que salieron en la televisión, y aparecieron otros ki más grandes, pero aun así ridículos. Kakarotto fue a meter sus narices, cuando lo veas pregúntale a él.- Y cerró la puerta, pero sin darle portazo. Los portazos según Bulma eran una señal de frustración, y él estaba intentando contenerse.

Ahora por fin podría entrenar un par de decenas de horas, sin Bulmas preguntonas, Milks quejándose de que los saiyajines son rebeldes, Grandes Saiyamanes por la televisión o Kakarottos comiéndose toda la comida que era para él. Iniciaría con una gravedad aumentada 120 veces, para evitar calambres. Y si le daba calambre, entrenaría su resistencia al dolor.
Pero no pudo.
-Oye, ¿Y qué hace ese botón de ahí?
-Sirve para aumentar la gravedad ¡Mira!
Trunks lo presionó, y luego en el teclado numérico puso la cifra de trescientos. Apretó enter, y eso provocó que ambos niños cayeran al piso como rocas, y trizaran el suelo.
-¡Ah, niños latosos! ¿En qué momento entraron a mi cuarto de gravedad?
Vegeta se hacía el duro, pero resistir esa gravedad sin volverse Súper Saiyajin era un poco complicado.
-¡Ya apaga esa máquina, Trunks!
-No… puedo… moverme… siento que mis huesos hacen sonidos.
-Crrrkir, crock, chac.- Hizo Goten las onomatopeyas.
Vegeta intentó no seguir reclamando, y avanzó como pudo hasta el teclado, donde puso una gravedad sólo 120 veces mayor a la terrestre, como era la idea.
-¡No toquen ningún otro botón! ¿No ven que son mecanismos complicados? Además no sé qué hacen aquí.
-Ah… es que Goten me dijo que si nos fusionábamos en Gotenks, íbamos a ser capaces de soportar una gravedad aumentada 3 mil veces, pero yo le dije que Gotenks podría aguantar una gravedad de 10.000 así que entramos para comprobar.
-¡Ustedes no tienen idea de lo que hablan, no jueguen con eso! Ahora voy a entrenar; no me interesa si se quedan, pero no hagan lloriqueos si la gravedad es muy dura y no la aguantan. Esta cámara no es para sus jugarretas.
-¡Qué amargado eres papá! ¿Acaso nunca jugaste cuando eras niño?
-¡No, jamás! Yo no jugué en toda mi vida, era un soldado de Freezer y mi único juego era plantar semillas de Saibaiman y luego derrotarlos.
-Ahora me acuerdo que no te gusta hablar de eso… vámonos Goten.
Hasta ese momento seguían tirados en el piso, pero con un poco de esfuerzo se reincorporaron y caminaron hacia la salida.
-Meh, chiquillos molestos. A ver si de una vez por todas puedo tener un entrenamiento decente.
Comenzó con unas cuantas flexiones, y cuando por fin la primera gota de sudor corría por su frente, sintió una voz desconocida.
-Habitantes de la Tierra… sé que pueden oír mi voz. Mi nombre es Gepernitch, y a partir de ahora, soy el nuevo líder de este mundo.
-Vaya, Kakarotto ya fue muy amable con un oponente, y ahora este decide reinar el planeta. Se ve que nunca aprenderá.
No le dio importancia al mensaje, pero cerró los ojos al enjugar su frente, y vio a una mujer con labios negros flotar frente al castillo del rey. Eso efectivamente indicaba que Kakarotto le estaba dejando hacer a los enemigos; seguramente la tal Geper nosecuanto le engañó de algún modo y ahora ni siquiera se sentía su ki. Sintió durante un buen rato la presencia del incompetente de Kibitoshin, así que seguramente se habían marchado ambos al planeta de los supremos kaiosamas.
-A menos que tenga un poder digno de mí, no moveré ni un solo dedo. A mí no me interesa quien reina este planeta. Además ese perro con bigote estaba viejo, ya era hora de que dejara de dar lástima.
Y siguió con los ojos cerrados oyendo lo que decía el nuevo enemigo, pero sin interrumpir sus flexiones. Llevar la cuenta mientras ponía atención era un trabajo de coordinación mínimo.
-Como pueden ver, humanos, estoy volando al frente del castillo del rey del mundo, en señal de mi superioridad. Ahora este en mi planeta, y si veo el menor movimiento de los ejércitos de este planeta, mis naves en órbita los destruirán, y los disuadirán de atacar.
Vegeta siguió sus flexiones. Le faltaba al menos 1 hora para terminar ese pequeño calentamiento.
-Sin embargo, cualquier guerrero puede acercarse aquí individualmente, y seré yo en persona quien les quite todos sus sueños de triunfo, y sus ilusiones de hacer este un mundo mejor. ¡Ahora el planeta está a mi merced!
Gepernitch tuvo que interrumpirse un momento, puesto que algunas personas fuera del castillo le comenzaban a disparar. Incluso un misil le llegó en el rostro, y la explosión destruyó sus hombreras gigantes. Su capa comenzó a arder, pero apagó el fuego sin mayor enojo.
-Eso es inútil.- Les dijo en voz alta- Igual que su baja cantidad de Spiritia.
Pero aun así la absorbió, y los hombres cayeron al suelo, inanimados.
-Como ya han visto, humanos, soy invulnerable a sus ataques. Yo soy más poderoso que Piccolo Daimaoh, que Cell o que Majin Buu, ¡Soy la peor de todas las amenaza, y nadie logrará detenerme! Pero aun así, hay gente que tiene deseos de intentarlo. Por lo tanto, recibiré a cualquiera que quiera enfrentarme, pero sucumbirá ante mi poder.
Vegeta se mofó en silencio. Por su forma de hablar, el enemigo resultó no ser mujer, y además presumía de ser superior a Piccolo Daimaoh.
-Supongo que se referirá al mismo Piccolo que yo conozco, hay que ser muy idiota para presumir ser más fuerte que él.
Sin embargo podía ser posible. Se sentía un ki aproximarse, y con un poder un poco superior al del Nameku. Así que el jefe seguramente era más poderoso que eso, pero aun así dudaba mucho que pudiera alcanzar los poderes de Cell, mucho menos los de Boo.
-¿Quién se ha creído ese fanfarrón? Ni siquiera me molestaré en darle su merecido, no hace falta.
Vegeta finalmente perdió la cuenta de sus flexiones, y con molestia comprobó que se había desconcentrado por el murmurar de los niños, detrás de la puerta. Al parecer se reían de qué estaba hablando solos.
-¡¡Oigan mocosos!! Dejen de molestar de una buena vez; ahora tendré que empezar desde el principio. Cómo es posible que no sean capaces de irse lejos de aquí, y dejarme entrenar.
-¿Quieres que vayamos lejos de aquí?- Le preguntó Trunks tras la puerta.
-Por supuesto que quiero que se vayan, en este momento sólo están siendo una molestia.
Se escucharon risitas y el ki de los niños se incrementó una pequeña cantidad. Entonces Vegeta notó el tono de voz que había usado su hijo en aquellas palabras.
-¡Ni siquiera se te ocurra ir a luchar con ese Geper nosequé! A no ser que quieras quedarte un mes castigado sin videojuegos, Trunks.
-Pe… pero, ¡Ese enemigo no es nada de fuerte! Además si resulta que tiene poderes ocultos, podemos convertirnos en súper Gotenks y ser invencibles. Le podríamos ganar a Boo muy fácil así.
Vegeta se incorporó rápidamente y caminó hasta los mandos de su máquina de gravedad.
-Parece que voy a tener que resolver este problema si quiero entrenar tranquilo de una buena vez…
Apagó la gravedad artificial y les abrió la puerta a los niños.
-Estoy seguro de que vencerían sin problemas a ese adversario, pero es mejor que se queden aquí. Díganme niños ¿No han sentido ningún ki extraño viviendo en nuestra dirección?
Los niños se miraron con curiosidad, y afinaron sus sentidos.
-¡Es cierto!- Dijeron a coro- Se aproxima un ki muy raro.
Y entendieron inmediatamente lo que Vegeta les estaba queriendo decir, así que comenzaron a emocionarse debido a su sangre saiyajin, y ya pensaban en cómo pelearían con el enemigo desconocido.
-Pero Trunks.- Se preocupó Gotenks- También viene el señor Piccolo, no vamos a tener tiempo para divertirnos.
-¡Oh, rayos! Parece que tendremos que usar todas nuestras fuerzas; luego esperamos a que llegue Piccolo y le damos el golpe final, para que vea que somos los más poderosos.
A Goten eso le pareció divertido.
-Hagan lo que quieran.- Les dijo Vegeta- Tan sólo avísenle a sus madres, para que vayan a esconderse a algún otro lado. Y no destrocen mucho la casa, les sugiero que cambien el escenario de la batalla.
El príncipe de los saiyajin, frustrado por no poder hacer su entrenamiento, se comenzó a alejar de ellos sin decirles nada más.
-Oye papá… ¿Y ahora irás a devolverle el trono del mundo al señor perro?
-¡Agh, a mí no me interesa ese perro con bigote para nada! Por mí que gobierne un caballo con bigote, o Kakarotto de bigote, me da igual.
De la frustración salió volando y destrozando el techo, junto a los pisos subsiguientes. No le importó, puesto que seguramente esos dos niños iban a demoler la casa entera en su pelea con el individuo que se acercaba.

Tal vez fuera buena idea vencer a Geper nosequé, ya que quedaría él como rey del mundo. Así tendría autoridad para crear una ley que evitara que lo molestasen con impertinencias.