Don't leave me

​

Las calles mojadas por la lluvia, aquel día oscuro y triste, parecía que el cielo se había enterado de que se iban a separar y por aquello había llorado el día anterior, iban uno al lado del otro en aquel coche, sus corazones palpitaban y el silencio era sepulcral haciendo que se pongan aun más nerviosos.
Él la miraba, sabia que no podía decirle que se iba a casar con otra persona, si lo hacia quizás podría arrepentirse pero si no se enteraba era mas fácil terminar con la relación, mientras él pensaba aquello, ella solo miraba las calles, no quería que se entere que había llorado y que algunas lágrimas aun rodaban por sus mejillas, la quiso tomar de la mano pero ella la saco, trato de abrazarla pero ella se alejo, no sabía que mas hacer, de pronto el coche se paro, sabían que habían llegado a la estación de trenes
El corazón de la muchacha se estremeció y sintió que le dolió, llevo su mano hacia su rostro y se seco las lagrimas, respiro profundo y le dio la cara al chico
Él la miro y vio que ella, como siempre le dedicaba una de esa linda sonrisa con la cual lo había enamorado, se quedo contemplándola y recordó los meses que paso a su lado, le agradecía que hubiera entrado en su vida, ella lo hacia realmente feliz, tardo en tenerla y ahora se estaba alejando de ella, solo le dijo “Ya no podemos estar juntos” y al decirlo él supo que su cordura se había ido
Sabía que no estaba en condiciones de pedir nada, ni mucho menos un abrazo, extendió el brazo esperando que la estrechara, ella lo hizo y cuando se iba a soltar no puedo, la muchacha lo tenia sujetado
Abrió los ojos sorprendido pues no esperaba aquella reacción de ella, la miro tan frágil, tan delicada, tan hermosa. Sus ojos suplicantes de una explicación desesperada tratando buscar las respuestas posibles para aquella separación, él no pudo más y libro su mano del agarre, camino hacia su tren sin voltear atrás, pero siempre pensando el ella y en su perfecto amor.
Ella cayó de rodillas y se llevo las manos hacia su rostro, lloro, sus ojos nublados por las lagrimas trataron de buscar a su amado. Con el corazón roto y sin fuerzas, hizo lo posible por ponerse de pie, cuando lo logro corrió hacia él y lo abrazo por atrás, el paro y se quedo en aquella posición, ahora él también lloraba, no podía hacerle eso, no podía dejarla sola, después de luchar por estar juntos simplemente no podía irse sin darle una explicación creíble
—¿Solo te vas a ir sin decirme porque? — le pregunto ella casi en un susurro
—¿Que quieres que te diga? —le respondió sin creer lo que había dicho
—Que ya no me ama —la voz se le quebro —, o dime que solo fue una ilusión
—Te amo —él se dio la vuelta y se quedo frente a ella —, pero entiende solo fue un amor pasajero
—No, dime que no es cierto —dio unos cuantos pasos hacia atrás —. Dime que lo que hicimos no fue en vano, que no nos enfrentamos a nuestros padres por nada
—Ya basta —su voz suplicante que parara no se escuchaba, aquello estaba haciendo más difícil su ida
— ¡Dímelo! — grito desesperadamente, él no le dio respuesta — Eres lo único por lo que estoy acá, sabes bien me pude ir cuando me lo propusieron, estaría hoy en Europa con un futuro hecho — el muchacho solo miraba al suelo —. Vales mucho para mi, por eso me quede aquí, contigo, pero ahora se que yo para ti no valgo nada —ellas corrió hacia la salida
Él se quedo viendo como la mujer que amaba se alejaba, dejo caer la maleta y corrió tras ella, grito su nombre pero ella no se volteaba. Cerca de un puente ella se paro y se volvió a mirarlo, allí estaba él, agitado y empezó a caminar hacia ella respirando con dificultad.
La miro a los ojos y limpio una de las lágrimas, miro cada detalle de su rostro, parecía un ángel y ella hizo lo mismo con él, para luego unir sus labios. Entonces él supo que nunca más se separarían, que aquel viaje no se cumpliría y que si tenía que pasar la vida entera con alguien seria con ella
Era noche de luna llena y allí estaban los dos, bajo aquella luz hermosa, abrazados, sin moverse ni un centímetro, sintiendo el corazón del otro, sintiendo un gran amor, sin que nada ni nadie los separara, aquel ADIOS quedo en el pasado, y ahora solo quedaba amarse