Al ver que les gustó mi primer relato, me estusiasmé y quise escribir otro *-* Pero no fué fácil decidir cual compartir con ustedes... Así que me decidí a contarles algo sobre el rival que todos tenemos, ése rival que nos hizo la vida imposible alguna vez, bueno, esto es sobre el rival de Navaja. ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ Sinnoh no dejaba de ser un reto para mi. El hecho era que estuve sola desde que tomé el ferry desde Hoenn, cuando mi primo Zack que me acompañó durante mis primeros años, quizo tomar su propio rumbo y dedicarse a ser árbitro oficial de las ligas. Me encontraba sola en el sentido que debía hacer siempre lo correcto, ya que nadie estaría para aconsejarme -o para que me cocinara, entre otras cosas- o cuidarme las espaldas. Esto me llevó a recordar los momentos en los cuales debía tomar decisiones yo sola, cuando viajaba por Hoenn. En esa región conocí a Arion, que fué mi rival desde mi primera competencia, aunque siempre lo consideré más un amigo ya que, en los obstáculos que se me presentaban cuando mis Pokémon caían, él estabilizaba mis nervios y lograba sacarme un peso de encima. Admito que aprendí mucho sobre su estilo de batalla y su forma de entrenar, eso me ayudó a descubrir que tener una sola técnica no es del todo efectiva. Sin duda era uno de los rivales de los que uno se enorgullece de haber enfrentado y de los amigos que perduran con el tiempo, pero nunca pasó por mi cabeza que lo encontraría viajando por Sinnoh aunque, reconozco que me alegré bastante. Su estadía no pasaría desapercibida. Llegó con la disposición de vencerlos a todos; retó a cuanto entrenador se le pusiera por delante, enseñó algunos trucos a los más nuevos en el oficio y claro, no se olvidaría de fastidiarme aún cuando me encontraba feliz de verlo. Hubiera echo el récord de ganarle a quien aceptara una batalla con su Sceptile pero, tuvo la mala suerte de encontrarse con Paul y luego de una larga batalla terminaron -por desgracia-en un perfecto empate. Aunque esa batalla no se dió por simple casualidad; Arion lo había estado observando mientras éste aplastaba a un entrenador y aún peor, se enteró que mi cambio de entrenamiento era en parte a causa de querer darle una lección, así que quizo evaluarlo personalmente. Lo que no pude comprender fue el hecho que si Arion y Paul tenían estilos totalmente diferentes, pero tenían el mismo nivel en entrenamiento, ¿Cómes que nunca antes pude vencer a Arion? Solo habían dos explicaciones: Si Arion conocía mi estilo de batalla, podría vencerme sin problema o, mi estilo era más efectivo contra el de Paul. -<<¿Qué pasará ahora?>>- me pregunté mientras caminaba por un sendero rodeado de árboles y de vegetación, aunque no prestaba mucha atención a mi paradero. Solo quería meditar acerca de los hechos: ¿La visita de Arion fué intencional?, ¿Me enfrentaría con él en la liga Sinnoh?, ¿Lograría vencerlo de una vez por todas? Eran muchas preguntas, las cuales no tendrían respuesta a menos que pusiera a prueba mi talento como entrenadora. No podía quitar provecho a que me haya ayudado a crear una táctica. Desgraciadamente en ese momento me sentí frágil, como si le debiera a él mi fortaleza icluso, mi victoria con Paul. En mi interior sabía que no había razón para asustarse, pero preferí darle más vueltas al asunto y ser miserable por un momento. -Él es más que un rival para ti, ¿no? -la voz sonaba cercana y no había sentido ninguna pisada además de las mías. Me volteé rápidamente para ver de frente a mi emisor. -¡Arion, me asustaste! -le dije con un hilo de voz mientras sujetaba mis manos a la altura de mi pecho, mientras lo miraba parado ahí. Él se rió e hizo una mueca. -¿Aún meditas caminando sola? -me preguntó mientras caminaba alrededor mío observando el paraje donde se encontraba. -Eso no es de tu incumbencia -le dije con el tono más seco que pude fingir, no quería demostrarle que me encontraba confundida. -¿Te causa muchos problemas? -¿Quién? -Ese hermítaño pelimorado con cara de rabioso -me dijo mientras se detenía para mirarme con expresión severa. -Paul es todo un personaje -admití con una sonrisa. -Me recuerda a mi cuando comencé a entrenar -su voz sonaba respetuosa pero su tono burlón no se lo quitaba nadie. Metió sus manos en los bolsillos delanteros del pantalón y comenzó a avanzar hacia adelante. -¿Te quedarás en Sinnoh? -No. Otra región espera que conquiste su quinto gimnasio -me dijo esbosando una sonrisa orgullosa. -¡Vaya! Tú no pierdes el tiempo... Yo apenas llevo cuatro -le dije con admiración. Siempre admiré que me llevara ventaja en todo lo que yo hacía. -Pero siempre tengo tiempo para llevarme a un compañero y un buen recuerdo. -Hm... -Fué un placer verte otra vez, filosita. -¿Te irás? -Sí. Ya tengo lo que buscaba y veo que haces un buen trabajo entrenando por tu cuenta -Solo me limité a sonreirleantes que continuara hablando- Eh... Estoy seguro que el rabioso deberá acostumbrarse a ti, ¡Ja, ja, ja! -se rió mientras paraba de avanzar. -¿Dónde irás? -Kanto es mi actual destino. -Mucha suerte, Arion. -Eh... Tengo lo necesario. Gana un buen lugar en la liga y no te olvides de ir a la batalla de la frontera, Sinnoh. -¿Batalla de la frontera? ¡Ah, claro! No te defraudaría -me tomé la libertad de robarle su frase. -No lo dudo -me asintió sonriendo para luego avanzar hacia su nuevo destino, pero no le permitiría una huida sin antes asegurarme de algo. -¡Arion! -le grité una vez lo vi suficientemente lejos. -¿Sí? -¿Nos enfrentaremos otra vez? -Sin lugar a dudas -me aseguró mientras me hacía una seña con la mano a modo de adiós antes de desaparecer entre los arbustos. -Nos vemos luego -murmuré mientras observaba en su dirección. Siempre era un caso con él, ésa no era la última vez que lo vería, después de todo, tenía la televisión para verlo ganar un buen lugar en la Liga Añil.
Yo en particular quería mas la ultima vez... pero me nos diste mucho mas de lo que estaba en mis expectativas... Los rivales son importantes para ti no?? Digo, mas que un simple amigo que te hace competencia, escribes sobre un buen rival que te ayude y te aconseje aunque sea de manera un poco mas dura de lo particular -como entre derrotas y consejos de tono seco y profundo - Creí ver que en el principio pusiste "Pero no fué fácil decidir cual compartir con ustedes" Tienes otros??... No creo que haga falta decir que puedes hacer con ellos sierto ^^ Nos vemos!!
Vaya, ahora haces un bonito one-shot acerca de algo que nos impulsa a los entrenadores a ganar... los rivales. Aunque ese rival fue muy especial para vos, porque parece más tu mentor xP. No hubo mucha estructura en tu fic pero al menos dejaste claro tu punto: Los rivales son algo muy importante para ti. Una teoría que yo aplicaría a los entrenadores recién empezados es la siguiente: -Cuando tienes entre 10 y 13 años, busca alguien mayor y mejor preparado, que tenga experiencia y sepa cocinar. Él te apoyará en tood -Cuando tienes entre 14 y 17 años, lo más recomendable es viajar solo -Cuando ya eres mayorcito de edad y sabes cocinar y sabes más o menos como es el aventurarse en regiones, puedes buscar algún jovencito y ayudarlo con su viaje. Es una sensación muy satisfactoria el ayudar a los más peques n__n Claro que esta teoría no es aplicable a Ash Ketchum xD. Pero bueeeeh... Ojalá que algún día narres la batalla que tuvieron Paul y tú, porque siendo honestos, con lo fácil para ti que es ponerte nerviosa, me extraña que lo hayas vencido xDDDDD (no es que dude de tus capacidades, eh). Yo tendría que analizarlo MUY bien para poder tener alguna oportunidad contra él -w- En fin, espero que pronto sigas con más escritos, linda ^^ Atte. Nathan
sklañdjsakldjakd *__* me gusta me gusta es muy lindo como planteaste la situacion de tener otro rival que es tu "amigo" y te ayuda con el otro rival que puede ser algo mas xDD de nuevo... tu narracion es muy fluida y hace que cualquiera pueda entenderla, eso me gusta ;D espero ver mas de estos fics >.< creo que me pasare mas tiempo en este foro... bueno.. a este one shot le doy un pulgar arriba :DD
Wow! Qué estilo de narración más bello *-*! La historia es buena, con lo esencial, me encantó sinceramente. Te demuestra que no todos los rivales son unos... "ermitaños pelimorados con caras de rabiosos" XDDDDDDDDDDDDDDD esa frase hay que conservarla en un estante y en palabras de oro :P. Tu historia me hizo sentir cada palabra, cada paso que daban *-*. Y que Paul es un ermitaño pelimorado con cara de rabioso XDDDD ok, ya lo dejo :P. Ya quiero ver la batalla de Navaja vs. Paul, y Navaja vs. Arion... ¡Serán tan épicas como la frase de Arion sobre Paul XDD! Bueno, con esto se despide la MarQUESA de la Luna ;D Hasta tu próxima historia =D!
No me agrada el termino para referirse a Paul. No es un ermitaño amargado, es feliz a su manera. Cómo no salé Paul, no me gusta, ok no. Algunos errores de dedo, yo tengo que poner más atención en mis errores de dedo, comienzo a comprender al lector un poco más. Aunque no se por qué, yo siento que Arion tiene algo de Paul. ¿Filosita? bastante gracioso, a mi me agrada Arion. Porque de alguna manera, yo lo veo bastante maduro. Y siento que es un celoso con su amiga, pero son pensamientos mios, que ya alucino con tanta matematica. Sigue así.
Iba a leer sólo el encuentro contra Paul pero, quedé atrapado compañera... sin dudas me decidí a leer éste también, muy buenas reflexiones la entrenadora frente a sus rivales ¿eh? imagino que pronto nos caerá con sorpresas; bueno, lo digo porque Navajita se toma la molestia de meditar las cosas con un espíritu crítico. x'3 Saludos! sigue así.
Ñip, veo que esta zona comienza a llenarse de mucha calidad otra vez, casi puedo decir que ya no me duele la partida de muchos viejos escritores... Navaja, el avance de tu experiencia como escritora cada día mas sube y sube y sigue así... Espero que con este gran avance no se te termine las ganas de seguir escribiendo, mas que todo, me gusta que siempre buscas un estilo original, usas cosas o temas o personajes que no suelen verse en una historia así nada mas =). Te quedó lindo el one shot, y creo que ya los de arriba dijeron todo lo que se te puede decir, no quiero sonar repetitiva, pero bueno igual Excelente trabajo. Los rivales siempre te impulsan a mejorar, claro, cuando son dignos ;D Ñip