Descendencia [Inu&Kago]

Hola amigos y seguidores de mis fics aquí les tengo otro que escribí hace unos meses (Obvio de inuxaome) pero que apenas vengo a publicar, espero les guste

Descendencia​

PRÓLOGO:​

En los años decadentes donde el machismo y la crueldad de la vida humana eran más que evidentes, una joven de nombre Aome llevaba una vida atada en matrimonio con Kouga Hakato, un joven millonario heredero de una gran fortuna, pero que por el mandato de él testamento de su padre no podía dar uso de ella sino hasta que tuviese un heredero que llevase su apellido, sin embargo para su pesar a causa de la mala suerte en su contra tuvo que optar por otra decisión, decisión que cambiaría para siempre su vida y la de su esposa.​

CAPITULO1: Todo por un hijo

TOKIO 1875

Esa mañana era normal como cualquier otra, la luz atravesaba las delgadas cortinas de aquel cuarto, en él dormía plácidamente una joven de cabellos negros azabache, la luz al cubrir su rostro hizo que esta despertara de repente, parpadeo unos segundos para luego abrir los ojos completamente se sentó en la cama y se extrañó de que su esposo no estuviera allí.

—Debió irse a trabajar más temprano de lo normal— pensó la chica al mismo tiempo que se levantaba de su cama

La pelinegra se dispuso a levantarse, era una chica de familia rica, sus padres arreglaron su matrimonio con un joven heredero de una gran fortuna y sabían que a su lado ella estaría bien y protegida, la joven acepto resignada a pesar de no estar enamorada de él y se casaron sin más preámbulo, con el tiempo la chica comenzó a querer a su esposo pero aun así sentía que él era frio con ella todo el tiempo.

La mansion Hakato era una de las mansiones mas hemosas de la ciudad muy al estilo clásico pero con hermosas decoraciones que la hacian unica y muy fina ya que estaba evaluada en muchos millones y eso la hacia unica en toda la ciudad, tenia hermosas fuentes a los lados y jardines que abarcaban todo el alrededor y dos albercas en la parte trasera de esta.

Ya en la noche el joven esposo llego de trabajar.

—¿Hola cariño como te fue?-— le dijo la chica recibiéndolo

—Normal Aome ya lo sabes — le contesto sin mucho interés

—Kouga fui esta mañana al doctor a hacerme la prueba de embarazo— le dijo ella con la mirada baja

—¿Y bien? ¿lo estás?— dijo el emocionado

—No quede— dijo ella tristemente mientras apartaba la mirada

—¡Maldita sea Aome hasta cuando ¡ ¡ te hecho el amor todas las noches y no quedas embarazada¡— dijo el muchacho entrando en furia

—¡No es culpa mía si no eh quedado Kouga¡— dijo ella igualmente enojada

—Aome tiene que haber algo mal en ti por lo que no quedas embarazada—

—-¿No te has puesto a pensar que quizá eres tú el del problema?—dijo ella con enojo

—¿Acaso piensas que yo tengo la culpa de que no quedes embarazada?— dijo el joven en tono ofendido

—No lo sé Kouga, porque no nos hacemos unos estudios y así averiguamos quien de los dos es del problema—

—¡Bah¡ no veo por qué— dijo el joven molesto y con indiferencia

—Por favor Kouga no te cuesta nada— dijo ella tratando de convencerlo

—Ah bien mañana mismo nos los haremos ¿contenta?— dijo el joven resignado

Dos días después el joven matrimonio fue a al médico para saber los resultados de los estudios que previamente se habían practicado.

—Doctor díganos como salieron los estudios— dijo la joven pelinegra

—Bueno señora Hakato los estudios revelan que su esposo… es Estéril— dijo el doctor seriamente

—¡¿QUE?¡ ¡ Eso no puedes ser doctor ¡— dijo el muchacho enojado y frustrado

—Lo siento señor Hakato— dijo el doctor lamentandolo

—¡No debe haber un error yo no puedo ser estéril ¡— dijo el muchacho furioso tomando al doctor del cuello

—¡Kouga cálmate por dios ¡— dijo la chica exaltada y asustada al ver la reacción tal viloenta que había tenido su esposo

-Los estudios son verdaderos señor Hakato no hay duda alguna que usted es estéril-dijo el doctor tratando de respirar

—Vámonos Aome vamos a hacernos los estudios con otro médico— dijo el muchacho tomando la mano de su esposa de manera violenta

—Kouga el doctor ya nos dijo que…— dijo ella con timidez cuando fue interrumpida por su esposo de manera violente

—¡No voy a aceptar esto¡ quiero escuchar otra opinión— dijo aún más enojado

Fueron con otro doctor, y con otro y con otro y el resultado era el mismo tanto que Kouga termino aceptándolo y precisamente esa noche el joven hablaría seriamente con su esposa

—Aome eh tomado una decisión— dijo seriamente mientras dejaba de comer de su plato

—Dime— dijo ella algo preocupada

—Como ya sabes soy estéril y no puedo embarazarte pero necesito tener un hijo para que este herede mi fortuna y tenga mi apellido por esa razón eh decidido que otro hombre te embarace— dijo el muchacho friamente

—¡¿Qué?¡ ¡ pero como puedes pensar eso! ¡no estoy dispuesta a entregarme a un hombre que no amo ¡ — dijo ella indiganada

—Entiende que no hay otra forma de que tengas un hijo ¡ estoy dispuesto a doblegar mi orgullo para que otro hombre te toque ¡— dijo enojado

—Pero yo no estoy de acuerdo en esto, podemos encontrar otra forma— decia ella tomando con ternura su hombro

—¡ No la hay Aome entiéndelo ¡— dijo soltandose de aquel agarre con violencia

Después de unos días la muchacha acepto resignada ante las exigencias de su esposo, sabía que no podía oponerse yan que ella era suya y él podia mandarla , no importara que fuese un acto inmoral , aunque ella en el fondo realmente quería tener un hijo pero sabía bien que su esposo no podría engendrarlo nunca.

Después de dos días se presentó un muchacho en la mansión Hakato.

—¿Que se le ofrece joven?—pregunto la empleada al abrir la puerta

Se trataba de un apuesto joven de cabello negro largo hasta la cintura y de raros pero bellisimos ojos dorados.

—Buenos días soy Inuyasha Taisho vine a hablar con el señor Kouga Hakato —dijo el joven pelinegro

—Bien el señor Kouga no se encuentra pero su esposa puede recibirlo—

—Gracias— contesto el ojidorado mientras entraba al recibidor

Mientras adentro Aome platicaba con su amiga Sango Kihato amiga de Aome desde que eran niñas ya que sus familias se conocian desde tiempo atrás.

—Valla no creí que Kouga fuese a llegar a tanto para poder tener un hijo— dijo la chica de cabello castaño atado en una coleta

—Si él a toda forma quiere que le dé un hijo— dijo la pelinegra molesta

—¿De verdad no le importa que el hijo no sea de él? Digo pues dices que quiere que otro hombre te embarace—

—Eso parece pero estoy nerviosa jamás eh estado con otro hombre que no sea Kouga— dijo la chica temerosa

—¿De verdad? Pero dime la verdad ¿tu eres feliz con Kouga? ¿Realmente crees que él te ama?— pregunto seriamente la castaña a su amiga mientras esta expresaba una cara de nostalgia

—A veces cuando él es frio conmigo pienso que no , que solo se casó conmigo para poder tomar posesión de la fortuna de su padre— dijo la chica tristemente

En ese momento la empleada que había recibido a inuyasha llamó de repente a Aome.

—Disculpe señora Aome en la puerta hay un joven que quiere ver a su esposo pero le dije que no se encuentra ¿lo hago pasar?— dijo la empleada

—Ah sí Kiyami hazlo pasar por favor— dijo la pelinegra

—Pasa muchacho—le indico al ojidorado

El joven entro hasta la sala, donde se encontraban las dos mujeres platicando, de inmediato Aome al verlo creyó ver a un angel caído del cielo, le pareció sumamente atractivo, demasiado.

—Disculpe señora soy Inuyasha Taisho vine a hablar con su esposo para proponerle unos negocios pero me dijeron que no se encuentra— dijo el joven empezando a ponerse algo nervioso, al ver la hermosa mirada de Aome, su belleza descomunal y sus labios atrayentes creyó estar hipnotizado por ella

—Así es mi esposo no se encuentra por ahora tuvo que salir de emergencia si gusta puede esperarlo— dijo la chica

—No gracias tengo unos asuntos importantes vendré en otro momento con permiso señoritas— dijo el muchacho con cortesía abandonando la sala, mientras miraba por ultima vez a Aome

—¿Escuchaste? nos llamó señoritas que lindo— dijo Sango riendo

—Obviamente fue solo por cortesía Sango— dijoAome en forma sarcástica

—Oye ese hombre eta guapísimo ¿será casado?— dijo la castaña entusiasmada

—Por favor Sango no empieces con eso tu eres casada— le dijo Aome en forma de regaño

—Oh vamos Aome sabes que solo me case con Houjo porque mis padres me comprometieron, yo no lo amo— dijo seriamente

—Aún asi Sango no me parece apropiado que andes con otros hombres—

—Aome por favor tu tampoco eres un pan de dios ya quisieras estar en mi lugar— dijo ella en tono de burla

—De que hablas claro que no yo si respeto mi matrimonio— dijo la pelinegra tomando una postura seria

—Mira en el fondo todas las mujeres queremos un amante un hombre que nos bese, que nos acaricie y que nos haga el amor de forma diferente a la forma de nuestros esposos o no me vas a negar que no quisieras saber que se siente estar con otro hombre que no sea tu esposo— dijo sonriendo con una sonrisa perversa

—No te voy a negar que a veces lo eh pensado pero nunca me eh atrevido a hacerlo- contesto algo sonrojada la pelinegra

—Pues ya tienes la oportunidad, tu esposo te está dejando estar con otro hombre así que disfrútalo créeme, esa oportunidad ningún otro hombre se la daría a su esposa— me dijo sango mientras me sonreía picaramente

—Hay Sango eres increíble-— dijo aome moviendo la cabeza de forma horizontal

—Afortunada mejor dicho ja ja— dijo entre risas la castaña

Al dia siguiente Inuyasha se presentó en la Mansión Hakato para hablar con Kouga, planeaba proponerle unos negocios al ojiazul sin embargo no imaginaba que después de aquella plática su vida cambiaría por completo.

—Disculpe señor Kouga pero el señor Taisho está aquí— dijo la empleada alertando al ojiazul

—Si si Kiyami hazlo pasar a mi oficina por favor— le indicó

—Como usted diga señor— obedecio

—Buenas tardes señor Hakato al fin lo encuentro— dijo el joven entrando ala oficina

—Dejemos las formalidades por favor llámame Kouga-dijo el muchacho saludándolo de mano

—Muy bien entonces llámame Inuyasha— contesto el ojidorado sonriendo

—Me dijeron que viniste el día de ayer pero que te recibió mi esposa- dijo al mismo tiempo que servia licor en dos copas mientras le ofrecia a inuyasha y este rechazaba con cortesía

—Si fue muy amable pero como no estaba decidí venir hoy vengo a proponerle unos negocios mis padres acaban de morir y me dejaron a cargo su empresa pero necesito tener cuenta bancaria y sé que eres el dueño de la mayoría de los bancos de la ciudad en realidad no es mucho ya que mis padres tenían muchas deudas y necesito saldarlas para poder restaurar la empresa, en pocas palabras necesito un préstamo —

-Entiendo sabes yo también tengo un negocio que proponerte-dijo Kouga pensativo

Después de un rato Inuyasha salía de la oficina de Kouga cuando en el pasillo se encontró con Aome, que se sorprendió de inmediato al verlo

—No eh tenido el placer de conocerla bien señora Hakato Inuyasha Taisho a su servicio — dijo besando la mano de la joven con cortesía

—El gusto es mío señor Taisho— contesto la pelinegra con cortesia y con un leve sonrojo en sus mejillas que no pudo evitar, ese joven la ponía muy nerviosa

—Llámeme Inuyasha— me dijo sonriendo lo que me hizo ponerme nerviosa

—Entonces llámeme Aome— conteste tratando de disimular mi nerviosismo

—Si me permite decirlo es usted una mujer muy hermosa— me dijo mientras me miraba casi de forma descarada

—Gracias por el cumplido ¿hablo con mi esposo?— conteste tratando de evadir aquello

—Si estuvimos hablando de algunos negocios— decía serio mirando hacia el suelo que yo lo noté de inmediato

—Me alegro—

—Bueno me retiro Aome fue un placer conocerla hasta luego— dijo el joven caminando a la salida no sin antes haber besado la mano de la joven de nuevo

—Realmente es apuesto…¡¿Pero que cosas digo yo soy una mujer casada?¡ —dijo pensando para sí misma la joven

Esa misma noche en la cena, Kouga se mantenía serio y Aome se dio cuenta pero decidió no decir nada hasta que este rompió el silencio.

—Aome eh elegido al hombre que engendrara a mi hijo— dijo friamente

—¿De quien se trata?— pregunto temerosa de saber a que hombre tendria que entregarse sin amor

—Inuyasha Taisho será quien te embarace— dijo con mirada fria

—¡¿Que?¡ Pero si apenas lo conozco no puedo entregarme a él sin conocerlo— dijo indignada la pelinegra

—Por favor Aome no hay tiempo para esas estupideces solo te va embarazar y ya y para eso no necesitas conocerlo— le dijo de la forma mas fria que jamas ella imagino

—¿Cómo puedes ser así de cruel y frio? ¿que acaso piensas que no siento? ¿que no tengo sentimientos? ¡ Soy humana maldita sea ¡—dijo la chica furiosa abandonando el comedor

—Lo siento Aome pero las cosas se harán como yo digo—dijo pensando Kouga




Bueno hasta aquí el primer cap, espero les guste y comenten si les pareció bien

¡¡Saludos y sayonara¡¡;)

 

Hola ya regresé y créanme que traté de esforzarme mucho en esta conti, espero les guste mis fieles lectoras.
ADVERTENCIA: Lemon (Semi-Elaborado) en mi blog


CAPITULO 2: En los brazos de otro hombre

Mientras tanto Inuyasha pensaba en lo que le había propuesto Kouga esa tarde, mientras se recriminaba a sí mismo como había podido aceptar aquella indecorosa proposición.

—¿Que como puedes proponerme eso? ¿Estás loco?— dijo el ojidorado sobresaltado​

—Ya te dije porque además te pagare una muy buena cantidad de dinero para que tu empresa mejore considerablemente y por favor no te costara trabajo mi esposa es una mujer muy hermosa— contesto de forma obvia​

—Sí pero...— decia nervioso el pelinegro​

—Pero nada entonces ¿aceptas?—dijo Kouga mostrando su mano​

—Está bien acepto—dijo estrechando su mano​

—Tenemos un trato amigo Inuyasha— dijo mientras tomaba la mano del ojidorado en señal de que habían cerrado el trato​

—Soy un sinvergüenza como pude aceptar hacer eso ella debe pensar que soy un hombre sin escrúpulos…Pero Aome realmente eres una mujer hermosa tengo que admitir que jamás había conocido a una joven tan dulce y bella como tú— dijo el joven para sí mismo

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Al otro día en la mansión Hakato, el joven matrimonio desayunaba sin decir palabra alguna, hasta que Kouga hablo de repente.

—Solo te aviso que hoy vendrá Inuyasha a visitarte así que trata de arreglarte lo más que puedas ¿Entendiste?— le dijo sin siquiera mirar a la joven pelinegra

—No necesitas decírmelo— dijo ella haciendo lo mismo

—Hoy saldré unos días de viaje, dos semanas quizá así que el podrá venir a verte mientras no estoy y más vale que cuando regrese ya estés embarazada— dijo levantándose de la mesa, mientras su joven esposa le dirigía una mirada de odio a su esposo

La joven se sentía indignada de lo que su esposo la obligaría hacer, por un hijo que ni siquiera llevaría su sangre; pero le importaba más el apellido que otra cosa, y eso era lo que mas le dolia en su corazón.
Kouga abandonaba la casa para irse de viaje dejando a Aome enojada del hecho de tener que acostarse con un hombre que no conocía y mucho menos amaba.

Al anochecer Inuyasha se presentó en la mansión Hakato

—Buenas noches¿se encuentrala Aome ?—pregunto el joven algo nervioso

—Si pase le avisaré que está aquí— dijo la empleada dejando pasar al joven

El joven se adentro a la casa mientras un enorme nerviosismo de apoderaba de su ser, no podía negar que Aome le parecía una joven susamente hermosa y deseable sin embargo el sabía que lo unico que haría con ella era lo que había acordado con kouga, embarazarla y solo eso, no pasó mucho cuando el muchacho vio venir a la joven bajando las escaleras, se veía tan hermosa, vestía un vestido en color rojo de manga corta, ajustado en la cintura y con un tentador escote que dejaba ver parte de la división de sus pechos, lo que hizo tragar grueso al pelinegro.

—Ya estoy aquí ven conmigo por favor— le dijo indicándole a que la siguiera

—Ah claro— dijo reaccionando después de haber quedado embelesado mirándola

Subieron las escaleras hacia una de las habitaciones, donde entraron parecía ser la de ella.

—Tiene una casa hermosa Aome— dijo el ojidorado tratando de evadir su nerviosismo

—Terminemos con esto de un vez— dijo ella empujando al joven a la cama mientras que desabotonaba su vestido

—Aome espere si no quiere hacer esto yo lo entendere muy bien créame que yo tampoco estaba de acuerdo y…— dijo cuando ella lo interrumpió de repente colocándose encima de él

—Ya no digas nada si sólo hagamos esto porfavor — dijo al mismo tiempo que unía sus labios con los del muchacho lo que le sorprendio de repente pero que respondió poco a poco dejándose llevar por el dulce sabor de los labios de la chica.

Poco a poco fueron llevándose por la pasión mientras se despojaban rápidamente de sus ropas, cada beso y cada caricia que el joven le brindaba a la pelinegra eran tan excitantes, la chica recordó que cuando estaba con su esposo él nunca era cariñoso con ella pero al estar con Inuyasha se sentía diferente tan especial tan placentero era algo nuevo para ella que disfrutaba plenamente y que no sabía por que.
Ala mañana siguiente los rayos de sol iluminaron la habitación, la joven despertó soñolienta, entonces sintió el calor del cuerpo de Inuyasha pegado a ella se fijó a su rostro pero el permanecía dormido con una mirada tranquila y tan encantadora que cautivo a la joven, pero entonces recobro la postura y se percató de lo sucedido anoche se separó rápidamente de él lo que hizo que el joven despertara de repente.

—¿Q-Que pasa?— dijo el muchacho adormitado mientras parpadeaba

—Nada es que me moví un poco es todo— dijo ella tratando de no mirarlo, y sus mejillas se tornaban sonrojadas

—¿Sucede algo?— pregunto el pelinegro preocupado

—Es que no puedo creer que haya tenido que llegar a esto por complacer a mi esposo cuando él ni siquiera lo merece— dijo ella con rencor en sus palabras

—¿Por qué dices eso? ¿Él acaso no te trata bien?— pregunto a un mas preocupado

—Él siempre es muy frio conmigo desde que nos casamos él es así—dijo ella tristemente mientras unas lagrimas amenazaban con escapar

—¿Te casaste enamorada de él?— pregunto intrigado

—Pues es que mi matrimonio con él fue arreglado— dijo ella con tristeza

—Entiendo— dijo el seriamente, mientras pensaba como era posible que kouga no fuera cariñoso con aquella mujer tan hermosa, buena, y sobre todo deseable para cualquier hombre, sobre todo para él, ya que esa noche que pasó con ella le bastó para saber que se había vuelto adicto a su piel.

—Por eso es que a veces pienso que él no me quiere— dijo la joven pelinegra con voz nostalgica

—Sabes si tu estuvieras casada conmigo siempre estaría al tanto de ti eres una gran mujer, hermosa y buena y si tu esposo no se da cuenta perdón por decirlo pero es un idiota—dijo el ojidorado tomando la barbilla de la chica mientras esta se sonrojaba

—Eres muy amable— dijo ella sonrojada

—Sera mejor que me valla— dijo el joven levantándose mientras comenzaba a vestirse

—¿Por qué? Mi esposo no está en la casa— dijo ella mientras al mismo tiempo pensaba: ¿que ma pasa? ¿Por que me preocupa que se valla?

—Tengo que ir a mi empresa, vuelvo al atardecer lo prometo—dijo el muchacho terminando de vestirse

—Está bien— dijo ella mientras ella lo veía irse

El chico se dispuso a salir de la mansión, mientras adentro la joven se sentía confundida esa noche con Inuyasha había sido la más maravillosa de su vida y ella lo sabía, incluso pensaba que había sido mejor que la noche de bodas con su esposo, pero ¿porque sentía aquello? acaso estaba empezando a sentir algo por Inuyasha a pesar de no conocerlo lo suficiente, comenzó a recordar la noche anterior los besos del ojidorado estaban tan llenos de pasión que ella los podía sentir tan profundos y tan delirantes, pero lo que más le había gustado era que él había sido tan atento como si sintiese algo por ella, pero era imposible pensaba la chica ya que apenas acababa de conocerla.

Esa noche no pudo dormir solo pensaba en eso se había convertido en una obsesion para ella, una obsesión que la abrumaba.

Al atardecer Inuyasha fue de nuevo a ver a Aome como lo habia prometido, el joven llego a hasta la biblioteca donde se encontraba Aome leyendo un libro muy atenta

—Me dijeron que estabas aquí— dijo el ojidorado entrando ala biblioteca lo que hizo que la chica se pusiera nerviosa sin saberlo

—Si es que me gusta leer—dijo ella cerrando el libro timidamente

—Ah valla “Noches de amantes” es muy bueno, veo que te gustan las novelas romanticas— dijo el joven mirando el libro con una cálida sonrisa lo que sonorojo a la joven de inmediato

—Ah s-si siempre me ha gustado leer este tipo de libros— dijo ella algo nerviosa

—Veo que estas algo nerviosa—dijo él mirandola divertido

—¿Nerviosa? no claro que no es solo que…—dijo ella desviando la mirada mientras su sonrojo se hacía más notorio

—Ah casi lo olvido esto es para ti—dijo el joven sacando de su camisa una pequeña cajita

—Pero… ¿porque?—dijo ella confundida mientras tomaba la cajita entre sus manos

—Ábrelo por favor— dijo sonriéndole

La chica abrió la cajita y dentro había un bello prendedor en forma de rosa
—E-Es muy hermoso pero no puedo aceptarlo es que…— decía ella cuando el tomo su mano de forma tierna

—Por favor es solo un pequeño regalo ¿me permites?— dijo el pidiéndole que lo dejara ponérselo

—Se ve muy hermoso— dijo ella mirándolo en su vestido

—Pero no tan hermoso como tú— dijo el mirándola a los ojos mientras Aome se sonrojaba a y le correspondía la mirada

Los dos empezaron a mirarse sintiendo como sus rostros se iban acercando más y más hasta que podían sentir sus alientos el uno al otro mezclándose, rápidamente sus labios se encontraron en un beso apasionado que poco a poco fueron intensificando, separaron sus bocas a causa de falta de aire pero entonces la chica tomo la mano del joven

—Aquí no es un buen lugar— dijo ella mirándolo con deseo

—Entonces vamos a otro lugar— dijo el muchacho saliendo rápidamente de la mano de la joven


Lemon:
http://myspaceofanime.blogspot.com/2011/05/lemon-de-descendencia-semi-elaborado.html

La noche para ellos fue eterna, mientras daba paso al amanecer que se presentaba iluminando completamente la habitación, Aome sintió un rayo de luz que iluminaba su rostro haciendo que despertase de repente

—Valla ya es de mañana— dijo la chica soñolienta mientras parpadeaba



Bueno hasta aquí el cap. 2, espero les guste

¡¡Saludos y sayonara¡¡;)