Cuando la muerte espera por ti [Sessho&Kago]

Cuando la muerte espera por ti (Sesshome)
Prefacio

Un par de faros iluminaban la media noche.
No tenia mucho tiempo o el se daría cuenta.
“Hoy terminara todo” pensó
Era la hora
Un susurro en el viento... Todo se obscureció.

Capitulo 1. Memorias (Parte 1)
El destino de las personas cambia... Pero no su pasado.
Mi destino es morir... Y mi pasado es la muerte...
Kagome
Flash Back
4 Años antes.
Martes 2 de agosto 2008
Kagome Higurashi una joven de larga cabellera azabache y ojos avellana.
Vivía una vida feliz. Ella “era” feliz.
“Hoy sera un gran día” pensó alegremente.
-Hija baja o llegaras tarde- Grito su madre desde la cocina.
- Ya voy mama- Respindio ella casi instantáneamente. Se miro al espejo. Sonrió y bajo.
-Buenos días Kagome- saludaron todos amablemente.
“Si. Hoy es un estupendo día”
Se despidió de sus padres, abuelo y con un beso en la mejilla a su pequeño hermano.
- Adiós nee-chan -dijo este.
- Adiós Sota y portate bien. Si?
- Si hermana.
Giro sobre sus talones y se dirigió a la puerta. Allí estaba su hermana mayor Kikio, esperándola.
-Vayámonos ya Kagome! Llegare tarde... De nuevo- Grito desde donde estaba, dirigiéndole una mirada de reproche.
-Ya voy Kikio esperame!
Kikio era la mayor de las Higurashi tenia un año mas que su hermana. Sus apariencias eran similares, con ciertas diferencias. Como su cabello, mientras el de ella era lacio y sedoso casi hasta la cintura, siempre atado con una cinta baja, el de Kagome era salvaje, por debajo de su cadera. Ella lo prefería suelto.
Kikio con elegancia y Kagome con un poco de torpeza. Como el agua y el aceite. Distintos, pero unidos en todo momento.
Tomadas de la mano se dirigieron a la escuela. El “ Instituto Shikon”.
Fueron por la ruta mas corta a pie. La ruta 46.
Kagome se detuvo de repente y luego echo a correr arrastrando con sigo a su hermana que protestaba. No había visto lo que ella vio.
Un joven con cabellera color plata y soles de ojos estaba a punto de ser arrollado por un auto fuera de control. Hablaba por su móvil y parecía no percatarse de lo que ocurría.
Soltó a su hermana y salto empujando al chico que la miraba extrañado. Pero ella no le prestaba atención a el sino al hombre que se encontraba detrás de ellos. Vestía un abrigo negro como la noche al igual que su cabello, con ojos color carmesí que la observaban furiosos. Le sonrió.
Un pestañeo , luego nada. El ya no estaba.
Su hermana acababa de llegar y la miraba emocionada.
- Lo has visto?- Le pregunto kagome.
- A quien?- Respondió esta mientras fruncía el ceño.
-No. De vio ser mi imaginación. Note preocupes- Dirigió su vista al joven que acababa de salvar , pero este la seguía observando con los labios apretados. Eso la molesto- Sabes- dijo - Un “gracias por salvarme la vida oh, hermosa dama” no vendría mal algunas veces- le espeto enojada.
- No necesitaba ayuda de alguien como tu. Lo tenia todo bajo control- Respondió el al mismo tiempo que se levantaba del suelo y se sacudía la tierra de su inmaculada camisa blanca. Giro de forma elegante y tan solo comenzó a caminar en dirección opuesta a la de ella.
- Si claro... Imbécil- Habia arriesgado su vida por un idiota.
-Hoi eso- Dijo el- Y no soy ”imbécil” soy sesshomaru- Siguió caminando mientras levantava su celular del suelo donde habia caido y se fue.
Furiosa. Tan solo estaba furiosa.
“Un invercil” pensó “ Un invecil de hermosos ojos y cabello como la luna” miro como el se alejaba “No Kagome que estas pensando, ademas su cabello no es tan lindo y seguro muy descuidado. Prefiero estar una hora viendo el sol directamente antes de esos ojos” Estaba muy irritada.
Se levanto del frió pavimento y al girar vio a su hermana ocultando una sorisa.
Habrio la boca para decir algo pero fue interrumpida por Kagome.
- Tan solo no digas nada y vayámonos- Kikio parecía muy entretenida. Demasiado- También quita esa sonrisita de tu boca.
Se encaminaron nuevamente hacia el instituto.
---------- ○ ----------

“Donde estoy?”- Pensó aturdida – “Hay alguien aquí?”
- “Deverias temer...”- Se escucho un susurro
“Temer? Por que? Espera quien eres?
- “Por que desde hoy tu vida me pertenece...”
“Mi vida? De que estas hablando”
- “... Y deves morir...”
“Por que?”
-... Porque si no lo haces alguien mas lo hará...”
“qu...”
- “... Alguien que amas...”
“esp...”
- “...Morirá por ti...”
“No. Dim...”
- “1 Año Kagome”- Fue lo ultimo que se escucho.

-Kagome despierta!!!- Gritaba Kikio
-Eh? Que ocurre?
-Feliz Cumpleaños hermanita!!!- Dijo felizmente mientras se abalanzaba sobre su hermana y la abrazaba fuertemente.
-Ki... Kik... Kikio no puedo respirar!!- Dijo desesperada Kagome mientras intentaba llenar sus pulmones de aire.
-Claro! Lo siento- Se disculpo mientras de dirija a la puerta- Y ahora... VISTETE QUE LLEGAREMOS TARDE!
-Si. Si – Dijo entre risas.
“Algo ocurrirá hoy” pensó kagome mientras se apretaba el pecho intentando disminuir el dolor que se instalo en el desde que despertó de aquella pesadilla “Tengo un mal presentimiento"
Fin de Flash Back
Actualidad
2 de julio 2012
“Esa tarde mi padre murió” pensé tristemente “En un accidente de transito en esa misma ruta” Me detuve y contemple la nada. Cerre mis ojos y sentí la brisa sobre mi rostro “ Y todo... ¿Por mi?

 

aqui dejo la segunda parte espero q les guste

Capitulo 1. Memorias (Parte 2)

“Esa tarde mi padre murió” pensé tristemente “En un accidente de transito en esa misma ruta” Me detuve y contemple la nada. Cerré mis ojos y sentí la brisa sobre mi rostro “ Y todo... ¿Por mi?”

Flash Back
3 Años antes.
Martes 2 de agosto 2009
- Buenos días! - dijo mientras saludaba a cada miembro de su familia.
- No lo puedo creer – Dijo su hermana mientras imitaba una mueca de terror- ¡Tu te has levantado temprano!¡Que miedo!- Gritaba mientras realizaba gestos un poco bizarros.
-Kikio! Pues mira que yo siempre me “despierto” temprano aunque no me “levante” temprano- Dijo a la defensiva entre risas.
- Entonces vamos ya que no quiero arruinarlo
-Si si... ya vamos- tomo sus cosas- Adiós a todos!
---------- ○ ----------
Al llegar al instituto se encontraron con sus amigos.
Miroku un muchacho oji-azul con cabellos azabaches atados con una elegante cinta baja. Su apariencia no mostraba en nada como era el. La simple palabra que lo definía era: Pervertido
Sango una joven de ojos cafés y largo cabello marrón recogido en una cola de caballo. Ella estaba enamorada de Miruku y el único que parecía no saberlo era el.
Inuyasha un joven de con cabellos plateados y ojos del color del sol. El era el novio de Kikio y mejor amigo de Kagome. El era huérfano. Hasta que un hombre de negocios lo adopto como su hijo.
Shippo, el dos años menor a ellos. Era una dulce niño con rizos rojizos y ojos esmeralda. Lo único que le gustaba mas que los dulces era molestar a Inuyasha.
- Buenos días- vocifero Kagome alegremente mientras se avalansaba a ellos entre risas en un gran abrazo grupal que acabo con 6 jóvenes en el suelo.
---------- ○ ----------
-Va monos Kagome vedemos ir a visitar a papa- dijo Kikio tristemente mientras tomaba protectora mente a su hermana y la abrazaba.
“Este dolor es el mismo de aquella vez”

Fin de Flash Back
Actualidad
“Mi abuelo partió la mañana siguiente”
Flash Back
2 Años antes
Jueves 3 de agosto 2010
- “¿Seguirás soportando esto?”
“Quien eres! Por que lo haces”-Estaba al borde de las lagrimas
- “Lo hago por tu vida... Por que no quieres entregármela”
“ QUEN ERES!?”
- “Yo soy Naraku... La Muerte y reclamo tu vida ….”
---------- ○ ----------
Ring... Ring (Suena el teléfono)
- Puedes atender Kagome?- Gritaron desde la cocina
-Claro hermana.
Ring... Ring
- Hola... si... si Familia Higurashi... Quien es?-Pregunto un poco desinteresada
-Llamamos desde la morgue... Lamentamos informarle que...
-No, no otra vez- Dijo con lagrimas en los ojos- Ahora... Quien es?
-Naomi Higurashi...
-Mama... - Trago saliva sonoramente- Que le ocurrió?-Pregunto casi desde el piso
-Un … accidente de transito en la Ruta 46... - Terminaron los dos al mismo tiempo.

El funeral seria esa misma tarde.

-Feliz Cumpleaños Kagome!- Gritaron todos al entrar a la sala. Sota con una pequeña torta de chocolate y en ella las iniciales “KH”. Detrás de sus hermanos llegaron sus amigos Sango, Miroku, Shippo e Inuyasha de la mano de su hermana.
Una punzada en el corazón. Mariposas en el estomago. Dolor en el pecho. Un amor no correspondido. Mas dolor.
“De la mano de su hermana”
Se detuvieron en ceco al verla llorando en el suelo. Acunando el teléfono en su pecho. Con la vista fija en la nada.
- Kagome?... No Kagome no me digas que... - comenzó a decir su hermana entres lagrimas que caían. Ella sabia que ocurría.
“Una llamada por la mañana”
“Una nueva lapida”
“Un accidente de transito”
Kikio cayo de rodillas junto a su hermana y lloro con ella.
-Ahora quien es Kagome?- pregunto amargamente – Dime quien es Kagome... Por favor... Dime quien fue!
-Fue m.. ma..- No podía decirlo- Fue MAMA!
Sus amigos no comprendían lo que ocurría . La nueva tradición de las Higurashi
“Cada 3 de agosto alguien mas partirá.

Fin de Flash Back
Actualidad
“Los extraño tanto a todos” pensé mientras colocaba las flores “Pero mas que nadie a ti...”
Observo con cariño el nombre de la tumba frente a ella “ Mi querida hermana” Las lagrimas cayeron sobre el suelo “a ti”

Kikio Higurashi
19 Años
Hoy se encuentra junto a sus abuelos y padres en un mejor lugar.

Flash Back
1 Años antes
Jueves 3 de agosto 2011
Todo ocurrió tan rápido. Fue tan solo un instante.
El instante en el que sus manos se soltaron.
En el que aquel auto perdió el control.
En el que el ultimo susurro de escucho.
Aquel instante en el que sus ojos se serraron y su respiración se paro. La vida salia lentamente de sus rosados labios.
Aquel instante eterno en el que ella murió.
- Noo!!! NO!!! - Grito con toda la fuerza, el dolor, el amor. Contado lo que sentía. Grito- KIKIO!!! NOO!!!
Fin de Flash Back


Recordo sus ultimas palabras dichas para ella...
"Vive lo que yo no pude vivir"
Sus rodillas cedieron en un peso que ya no podía soportar. En el peso de la muerte de su familia.
“Perdónenme por favor perdónenme” Suplico.
-Los vengare – Grito en medio del oscuro cementerio- juro por “la maldita muerte” que los vengare a cada uno de ustedes.

---------- ○ ----------
3 de julio 2012
05:12 a.m

Me deslice del pequeño departamento intentando hacer el menor ruido posible. No quería que el se diera cuenta de que yo no estaba.
No quería dejarlo. Solo.
Pero sino... El moriría.
“Adiós Sota”
Vivieron juntos desde la muerte de Kikio en un apartamento dejado por sus padres. Sota ya tenia 14 años y sabia cuidarse solo.
Estaba hecho. Dejo las cartas en los tribunales junto al dinero de sus padres y los papeles del departamento. Una dirijida a el y otras a sus amigos pidiendo que lo cuiden cuando ella ya no este para hacerlo.
Devia apurarse.
Salio del gran edificio y se dirigió a aquella ruta que le causo tanto sufrimiento. “La ruta 46”
Caminaba lentamente. Tenia que ser rápida y prisa o el la comenzaría a buscar.
Desde la muerte de su hermana intento varias veces suicidarse pero el siempre estaba para ella.
No queríaabandonarlo pero devia hacerlo.

07:01 a.m
Llegó.
Un par de faros iluminaban la media noche.
No tenia mucho tiempo . Después de todo su cumpleaños era en un mes.
“Hoy terminara todo” pensó
Era la hora.
El auto se acercaba.
Tenia miedo pero no se movió de donde estaba, en medio de la estrecha ruta.
Con su muerte todo acabaría.
Tan solo quedaba una calle de distancia.
El terror la consumió, y cayo de rodillas. Su campo visual tenia manchas negras.
“Al menos no sentiré dolor” pensó con sarcasmo e ironía. Si su hermana la viera en ese momento seguro la golpearía en la cabeza y le daría un largo sermón. Sonrió y cayo de espaldas sobre el frió pavimento, golpeando su cabeza.
Sentía un liquido a su alrededor “Raro” se dijo a si misma. Unos metros mas y adiós sufrimiento... Hola nada.
-Es que acaso eres una “inbecil” o solo quieres morir?- sonidos metal siendo maltratado. Sususrros en el viento y restos de coherencia.
Hebras de plata y dos soles … fue lo ultimo que pensó
Todo se oscureció.

 

Capitulo 2. Quien eres? Por que no puedo olvidarte?
¿Es que acaso eres una bruja?¿Me has hechizado?¿Que me has hecho? No puedo olvidarte y tampoco quiero hacerlo. Todas las tardes voy a aquel lugar donde te vi por primera vez. Busco entre aquellas personas tu rostro. Pero nunca estas. Daría todo por volverte a ver, daría los recuerdos de lo que nunca fue, las alegrías que nunca tuve. Lo daría todo. Por ti daría mi inmortalidad.
Sesshomaru

Jueves 3 de julio 2012
06:58 a.m
Como todas las monótonas mañanas tome esa ruta. Todavía no amanecía. “es extraño, ya es muy tarde” Le reste importancia, pues no era gran cosa.
Cruce la esquina y me quede perplejo con lo que vi aunque mi rostro no cambio.
La silueta de una joven en medio del camino. Ves como el se aproximaba a ti. Pero no te mueves. Caes de rodillas. El terror se instalo en tu rostro y apesar de todo sonríes. Tu cuerpo cede y golpeas tu cabeza contra el pavimento. El auto se seguía aproximando y tu tan solo perdías sangre.
Un gruñido se escapo de mis labios. Comencé a correr a una velocidad sobrehumana. Después de todo no era uno.
-Es que acaso eres una “imbécil” o solo quieres morir?- Le pregunte mas bien a la nada en particular. Mientras con mis manos detenía el auto. El sonido del metal se esparció por todo el lugar- Hn.
Al parecer el conductor se había quedado dormido. Gire en redondo y te vi.
Un charco de liquido carmesí se formaba a tu alrededor. Pero seguías con vida. Aunque te vi una sola vez no te olvidaría. No tan fácil. Has sido la uncia persona que me dijo lo que en verdad pensaba.
Te tome en brazos y examine tu herida. Te estas desangrando. Eche a correr hacia el hospital llevándote con migo.

Flash Back
- No padre. El es tan solo un humano.
- Sesshomaru, sabes lo que opino sobre eso.
- Hn. El es inferior a nosotros.
- No lo es. Ahora es tu hermano.¿Oíste?- se detuvo de repente - Y sessh...
No oí lo que mi padre me decía pues “algo” o mas bien “alguien” me arrojo al suelo, al tiempo que un auto a toda velocidad donde anteriormente me encontraba.
Fije mi vista en la causa del problema. Una muchacha azabache de ojos avellana. La chica se encontraba en el suelo a mi lado pero no me miraba-lo cual me molesto, no solo me había tirado al pavimento frió sino que se tomaba el lujo de siquiera prestarme atención- Miraba “detrás de mi”
- Lo has visto?- Le pregunto a otra joven muy parecida a ella que acababa de llegar.
- A quien?
-No. De vio ser mi imaginación. Note preocupes- Giro y se percato de mi mirada. Al parecer le molesto.
- Sabes- me dijo - Un “gracias por salvarme la vida oh, hermosa dama” no vendría mal algunas veces- ese comentario me divirtió de sobremanera pero no lo demostré.
- No necesitaba ayuda de alguien como tu. Lo tenia todo bajo control- le dije mientras me levantaba y sacudía el polvo de mi camisa. Gire en dirección opuesta.
- Si claro...- dijo casi en un susurro- Imbécil
Me estaba irritando. Era bastante entretenido pero me irritaba.
-Hoi eso- Le dije sin girarme pues si veía su rostro no sabría si podría controlarme y empezar a reír como un enfermo mental o solo matarla- Y no soy ”imbécil” soy Sesshomaru.
Fin de Flash Back
Habían pasado tres días ya. Tres días desde que estuve encerrado en una habitación de paredes blancas mirando un paisaje compuesto por edificios, edificios y oh sorpresa mas edificios. 72 horas exactamente sintiéndome como un estúpido esperando que alguien del cual ni siquiera se su nombre despierte de un coma. Y 48 con una duda.
“Por que sigo aquí? Si no quiere despertar que no lo haga puede hacer lo que quiera con su vida... o muerte”
Flash Back
Entre al hospital. Fui directamente a la oficina de un doctor en especifico.
Apenas traspase la puerta y levante el rostro el ya estaba frente a mi observando mis movimientos con ojos como platos.
- Que has hecho ahora?- Dijo el medico examinando a la chica que reposaba en la camilla.
No tenia bues aspecto. Su piel con un lugumbre color amarillento y su cabello pegado al cráneo por la sangre seca y la que seguía fluyendo por la herida.
- Hn- Me senté en el sillón blanco manchandolo en el proceso- Me ofende lo que piensas “padre”
Inutaisho era el cardiologo mas famoso del país. Con mismo cabello plateado de su hijo recogido en una cola alta y ojos dorado. Le sonreí cinicamente- La encontré en la ruta, al parecer se desmallo y golpeo su cabeza. Ademas un auto estaba apunto de arrollarla. No podía dejarla hai . Pensé que estarías orgulloso.
Fijo su vista en mi. No me creí, pero no era de extrañar.
¿Quien creería que Sesshomaru-el “Príncipe Oscuro” como lo llamaban-salvaría a una muchacha de la muerte y no solo eso, sino que en vez de dejarla desangrarse a un lado de la calle la llevo al hospital de su padre? Sin mencionar sobre manchar su ropa.
No, Nadie lo creería.
- Si te hace sentir mejor. Yo no era el que manejaba- Dejo de mirarme y siguió su trabajo.
Unos minutos después.
- Tiene una conmoción. Por eso sangra tanto- Aseguro- No se si despertara pero are lo que este a mi alcance- Se detuvo al ver unas largas marcas en las pequeñas muñecas de la chica- ¿ Es que acaso quiso suicidarse?
- Como quieres que lo cepa. No entiendo los pensamientos de los humanos.
- Termine- Giro inesperadamente- Al menos sabes como se llama?
Lo único que pude hacer fue. Mirarla. Fruncir el ceño entreabriendo un poco la boca. Y se seguro parecer un idiota por no responder una “ pregunta idiota”
- Hn
-Esta bien- Suspiro- Vamos debemos hacerle una transfusión de sangre. Perdió mucha- La tomo en brazos y luego me observo- Ella entro en coma.
Comenzó a caminar para luego detenerse y entrar en un cuarto de paredes blancas.
Fin de Flash Back
- Demonios. Hnn. Maldito, eres un idiota. El tarado-comenzó a reírse con una extraña maldad lo cual me asusto un poco "¿Que esta soñando?"- ¿tu?-murmuraba ella. No me sorprendía, con el paso de las horas había comenzado a decir cosas sin sentido- Hermana. Perdónenme. Los vengare y sera lo ultimo que haga. Noo, Noo. Maldito!- Cada vez mas fuerte- KIKIO!NOO!-Se reincorporo de la cama de un violento salto. Respiraba agitadamente y sus ojos estaban desorientados.
- Donde estoy? Que hago aquí? - Miraba por todos lado- Lo ultimo que recuerdo es que...- Habrio un poco los ojos y con las manos toco su rostro- Estoy muerta?- Se percato de mi presencia.
No le respondí y camine en dirección a la puerta de vidrio en busca de mi padre.
- Sesshomaru?- Me detuve en seco y gire lentamente- Donde estoy Sesshomaru?
Acaso me recordó? Bueno eso era obvio. ¿Pero como?
Le había dicho mi nombre. Si. Pero no esperaba que me reconociera. La mire.
- Intentaste suicidarte- No era una pregunta mas bien una afirmación.
Me sorprendió su reacción. Una sonrisa triste asomo por su rostro. Apretó las sabanas con las manos y comenzó a llorar amargamente.
Era el momento de mis respuestas.

 

Aqui les dejo el tercer cap. :D
Capitulo 3. Sueños... O pesadillas?
Hebras de plata y dos soles … fue lo ultimo que pensó
Todo se oscureció.

Los sueños son portales a otras dimensiones . Dimensiones quizás conocidas. Algunas las cuales quisiéramos hacer realidad. Otras que no hacen mas que crear sufrimiento en nuestras muertes. ¿Cambiarías tu sueño perfecto por esa maldita realidad?
Kagome
Escucho voces. Pero no me atrevo a abrir los ojos … Que vería cuando los abriera? No quiero encontrar esas miradas de indignación por lo que hice. Prefiero no abrirlos y esperar.
Una punzada de dolor en la nuca.
La inconsciencia me llamo de forma demasiado tentadora , tome su mano y me sumi en un profundo sueño.
---------- ○ ----------
- “Acaso pensaste que acabarías con esto pequeña? No tienes la suficiente fuerza para lograrlo. Eres débil”
“Estoy muerta?”
- “No, No lo estas... por ahora”
“ Por que? POR QUE!”
- “Por el”
“Por quien”
- “...”
“Quiero ver tu rostro”
- “Todo a su tiempo, aunque tu ya me viste”
Sentí como si cayera y grite pero ningún sonido salio. Básicamente me estampe el rostro contra el suelo.
- Demonios- Al menos tenia los cinco sentidos funcionando. Podía hablar, ver, oír, sentir olores y mas que nada sentir dolor.
-Hnn, Maldito.
Me levante y quede estática con lo que encontré frente a mi. Un recuerdo. El día en que todo comenzó.
Reconocí al instante aquella imagen. Retrocediendo cuatro años. A mi antiguo yo salvando a aquel joven.
-Imbécil- No pude evitar decirlo- Eres un Idiota.
Mi corazón se detuvo un instante al ver a la persona frente a mi a aquella que le sonreía a mi antiguo yo.
Un rostro vino a mi mente. Cabello negro como la noche y ojos rojos como la sangre. Fue tan solo un segundo. No le preste atención. Recordé a aquella persona que seguía sonriendo.
No quise seguir viendo. Sin mas opciones gire en redondo y clave mi vista en aquel joven que se alejaba lenta y elegantemente. Lo seguí mirando. Me aleje también con...
- El tarado- me gustaba llamarlo de esa forma y mas di el no se daba cuenta de eso. Una extraña y macabra risa se escapo de mis labios. Me entretuve con la idea de poder decirle todo lo que yo creía pero mis pensamientos fueron interrumpidos por sus palabras.
-Hoi eso y no soy ”imbécil” soy Sesshomaru.
-¿Tu?- Detalle su rostro. Era endiabladamente bello “con que Sesshomaru eh?”
El tendría aproximadamente unos 20 años.
“Inhumanamente prefecto, Keh Kagome tonta ¿Que es lo que estabas pensado? El es otro estúpido mas... No, no es “un” estúpido, es “el” estúpido”
Continuabas caminando pero no pude seguirte. Mi cuerpo no respondía los mandatos básicos.
La imagen cambio ahora me encontraba en el funeral de mi padre.
La vista se me nublo nuevamente, esta vez era el funeral de mi abuelo.
Otra vez, ahora el dia de la muerte de mi madre. Por ultimo el de Kikio.
-Hermana.
“Vive lo que no pude vivir”
-Los vengare y sera lo ultimo que haga
La voz de Naraku me llego.
-“Todos ellos murieron por tu culpa pequeña”
-Noo, noo. Maldito!
Mi mente revivía una y otra vez la muerte de mi hermana. Grave cada detalle, cada movimiento y cada exprecion de su rostro.
- KIKIO!NOO!
Abrí los ojos.
-Donde estoy? Que hago aquí?- Mire a mi alrededor en busca de algo vagamente familiar. Pero lo que conseguí fueron paredes blancas, Muebles blancos. Absolutamente todo en aquella habitación era blanco.
A mi mente llego el recuerdo de lo ultimo que viví. Un par de luces. Golpee mi cabeza , alguien sosteniéndome en brazos y luego nada
- Lo ultimo que recuerdo es que...-Intente poner mi mente en claro. Levante las manos y toque mi rostro- Estoy muerta?- Me dije a mi misma.
Seguí buscando algo alta que me percate de una figura masculina, cabellos de plata y ojos de oro. Sabia exactamente quien era el. Lo había soñado, ademas ¿ Como olvidar aquel rostro?
El maldito era “lindo” debía admitirlo. Me dolía la cabeza.
Se dirigía a la puerta.
- Sesshomaru?- Le pregunte asegurando que el no era un producto de mi retorcida imaginación- Donde estoy Sesshomaru?-Seguí cuestionando.
El se detuvo y lentamente giro parecía ligeramente ¿Aburrido, sorprendido quizás? No lo sabia.
- Intentaste suicidarte- Mi mente se puso en blanco y una pequeña sonrisa de vergüenza asomo por mi rostro.
El tenia razón y no era por eso mi exprecion sino, porque podría sel la única persona de la cual no esperaría eso. A lo mejor Sota si pero no el.
“Sota” Lagrimas traicioneras inundaron mi rostro al recordarlo. “Mi pequeño Sota lo siento” El debe estar muy preocupado. Eso me hacia llorar mas. “Y mis amigos... Indudablemente me he convertido en una masoquista”
- Muy bien- Sesshomaru parecía irritado y mas aburrido, por mi llanto, lo cual me molesto de sobremanera- Ahora quiero respuestas.
Estaba apunto de colapsar por tres razones especificas. Uno, una palpitación en la cabeza.
Dos, tenia a un idiota sin sentimientos enfrente mio comportándose como los que era un verdadero estúpido. Y tres, un re-descubierto mal genio que no ayudaba mucho.

 

Capitulo 4. Respuestas. Quiero respuestas. Donde están mis malditas respuestas.

Me sorprendió su reacción. Una sonrisa triste asomo por su rostro. Apretó las sabanas con las manos y comenzó a llorar amargamente.
Era el momento de mis respuestas.
Sesshomaru
-Comencemos de nuevo- Me apoye contra la pared bastante frustrado. Cerré los ojos-Dime. Como. Te. Llamas-Intente hablale como a un riño. Quizá funcione y entienda.
- Por que debería hacerlo?- Parecía molesta. Muy bien ya eramos dos- Nunca te dijeron “No hablar con extraños?
- No- Conteste secamente- Para llamar a tu familia quizás? Y que mi cerebro no se convierta en gelatina?
-Entonces abisme cuando logres comunicarte con “todos” ellos- El sarcasmo se noto. Una cínica y triste sonrisa asomo por su rostro.
-...- Fui al grano- Por que intentas suicidarte?-Agudice mi vista y la fije en sus muñecas. Finas cicatrices las atravesaban. Se percato de mi mirada y las oculto apartando la vista.
-Eso no te incumbe.
Ella podría ser la única persona en el mundo que me irritara de ese modo “Y viviera para contarlo” Ademas de tan rápido.

Era tan difícil? En serio? Al parecer si. “No pido mucho, tan solo respuestas de preguntas fáciles como “¿cual es tu nombre?” “¿Que ocurre con tu familia?” O “¿por que intentas suicidarte?” Quizás también un... “Hay formas mas fáciles sabes?” Aunque creo que esa pregunta no la pondría extremadamente feliz”
- Dime... Por que demonios sigues aquí!- Me grito.
-No debí haberte salvado- Respondí al borde de un colapso mental.
- Oh estoy muy de acuerdo con eso- Ella estaba parada frente a mi- No debiste meterte en mi vida! Eres un tonto!
Listo la mataría. Me importaban un cuerno lo que mi padre pensara. Estaba a punto y con una almohada me alcanzaba y sobraba para hacerlo. La solución a todos mis problemas “Es tan simple...”
La puerta se abrió dejando entrar a un medico peli-plateado muy sorprendido. “¿Como se habrá dado cuenta de que ella estaba despierta? Tina dos posibles soluciones. Uno o pensó que me volví loco y comencé a hablar solo O.... Por los gritos ella despertó , comenzamos a discutir e intentaba asesinarla, por lo que decidió venir. Genio”
Me aleje de la muchacha que con los brazos cruzados observaba detenidamente a mi padre.
Con un ademan de las manos Inutaisho hiso que ella se sentara nuevamente en la camilla.
- Dime.¿Como te llamas pequeña?- Sonreí para mis adentros. Ella jamas se lo diria. Menos a la primera. No perdí tres días de mi larga vida por nada.
- Kagome. Higurashi Kagome- Mi padre le sonrió.
Los mire con una mezcla de enojo, irritación, divercion , aburrimiento y sorpresa aunque mi rostro ni se inmuto. “Años de practica”
- Muy bien. Te duele algo?- Pregunto amablemente.
- Me palpita la nuca un poco pero no es gran cosa- Sonrió algo apenada- Puedo irme ya?
- No lo siento. Pero debo avisarle a tu familia.
Su mirada cambio a una preocupada y luego alarmada.
- Es necesario?- Sentí su incomodidad.
- Si- Cambio de tema- No tienes nada grave. Are un pequeño chequeo y podrás irte.
- Esta bien se resigno- Podre volver al instituto hoy?- Miro hacia el reloj en la pared. Anunciaba las once en ponto de la mañana- Entro en tres horas- Dijo ella para si misma.
Mi padre me miro preocupado.
-HN- Fue mi respuesta.
- Ejem. Pequeña- Lamo su atención- Hoy es sábado. Estuviste tres días en coma.
- Tres días- Susurro ella. Se levanto de la cama con un salto. Tomo sus zapatillas que llacian a un lado de la camilla y se las puso en un instante.
Estaba tan sorprendido por su reacción que no me di cuenta lo que hacia hasta que ella apoyo la mano sobre la perilla.
Un mareo la invadió- lo note y en un segundo a su lado me encontraba- sus rodillas cedieron y callo de espaldas. Antes de que colisionara contra el suelo, la tome entre mis brazos.
“Fantástico sencillamente, fantástico” 3 días esperando a que despertase y cuando lo hace, ademas de no responder a mis preguntas lo único que logra es desmallarse de nuevo.
La recosté nuevamente sobre la camilla.
El medico que parecía haberse dormido dentro de mi padre despertó y comenzó a revisarla- por enésima vez- dio su veredicto
- Se desmayo- concluyo el, lo observe ¿Era u medico tan prestigiado por eso? Porque sencillamente parecía un idiota.
- No me mires de esa forma,hijo. Lo que trato de decir es que se desmayo por estar tres días en coma. Tan solo se agoto.
No entendía como alguien que durmiera durante tres días este cansado.
- Avisare a su familia. Quedate aquí por si despierta
Adonde mas iría?
---------- ○ ----------
Tanto podría dormir una persona? Al parecer Si.
Bingo! Respuesta correcta. Exactamente 3 días y 3 horas.
Envidiaba su forma de dormir. Eran las dos de la tarde en punto. Cerre los ojos .
Por fin Morfeo decidió echarle un vistazo a mi aviso publicitario.
HAZME DORMIR O MUERE
Y ese fue el momento que ella eligió para despertar.
- Mm. Sesshomaru? Estas dormido- No recibió respuestas- SESSHOMARU!
Abrí bruscamente los ojos. Mi mente formulaba varias preguntas a la vez.
“¿Que? ¿Donde? ¿Cuando? Y … ¿Que demonios...?
La observe con los ojos entrecerrados. Ella ronreia, la maldita me sonreia. Mire el reloj. 14:05 p.m.
“ Matarla, dormir, matarla, dormir, dormir, dormir”
Cerré los ojos dispuesto a apuñalar a Mofeo si me cruzara con el.
- Sesshomaru!- “Matar, matar, matar, dormir” Me gusto esa idea. Me levante de donde estaba acercándome sigilosamente. No pude concluir mi plan cuando vi su rostro.
Tenia un leve puchero y ojos llorosos. Eso me causo “Pena?” . Rodé los ojos y suspire imperceptiblemente.
- Sesshomaru. Puedo hacerte una pregunta?- Dijo tímidamente. Descanse mi cuerpo contra la pared y cerré los ojos. Que mas daba.
- Hn- Ella lo tomo como un si.
- Cuantos años tienes?- Dijo curiosa- No pareces haber cambiado nada.
Se había dado cuenta. Tenia razón. Yo no “Había cambiado nada”- Tengo 22- Escuche un leve -ohh- y sonreí de lado
- Y tu?- Le pregunte. Ella aparentaba unos 17 años. Me sorprendió que respondiera.
- Cumpliré 19- No parecía muy feliz- Sabes sesshomaru? Me recuerdas a mi hermano.
- Oye, Kagome cierto?
- Si- La mire estaba por hacerle la pregunta del siglo. Algo así como “Algo curioso ¿Por que cuando te encontré estabas a punto de suicidarte?, o quizá... Intentaste suicidarte y casi te matas, Gracioso cierto?”
Fui interrumpido cuando la puerta se abrió.


Inu Taisho

11:15 p.m
Deje a mi hijo con la muchacha. Al parecer ella le caía bien.
Sonreí dirigiéndome a la sala archivadora.
11:42 p.m
Encontré el historial de la familia Higurashi., casi al final del cuarto. Al parecer fue actualizado recientemente.
Tome la sección de mi nueva paciente y comencé a leerla.
Kagome Higurashi 18 años. Nacida el 3 de agosto de 1996
11:53 p.m
No había nada fuera de lo normal, aunque ella era claustrofovica. Cerré la pequeña carpeta que guardaba la información.
La curiosidad me gano y ojee el informe familiar.
Kojaru Higurashi 38 años. Fallecimiento día 3 de agosto 2008.
Aerico Higurashi 53 años. Fallecimiento día 3 de agosto 2009.
Naomi Higurashi 36 años. Fallecimiento día 3 de agosto 2010.
Kikio Higurashi 19 años. Fallecimiento día 3 de agosto 2011.
Tome la ultimia hoja.
Souta Higurashi 14 años.
Ahora entendia sus reacciones.
12:31 p.m
Llame al teléfono encontrado en los documentos. Nadie contesto.
13:20 p.m
Intente llamar por cuarta vez. La voz de un muchacho respondió.
- Si? Familia Higurashi.- Parecia cansado.
- Quería informarle que la paciente Kagome Higurashi sera dada de alta esta tarde.
- Kagome? Gracias a Dios! Espere dada de alta?¿Que ocurrió?
- No se preocupe. El horario de visitas comienza a la 15:00 hs.
- Claro. Hasta luego y gracias por todo.
- No hay de que este es mi trabajo.
15:02 p.m
Unos golpes me distrajeron y dirigí mi mirada hacia allí.
- Adelante- Permití pasar.
La puerta se abrió dejando entrar a un muchacho pelinegro de ojos azules. Tendría unos 14 o 15 años. Lo reconocí por las fotos en los archivos leídos.
- Souta Higurashi- Le sonreí para que se tranquilizara. Me devolvió el gesto.
- Dígame la verdad- Dijo con repentina seriedad- Que hizo ahora.
- Siéntate por favor- Respondí a su formalidad- Mi hijo la encontró el día jueves. Ella se paro en medio de la ruta.
El no parecía sorprendido.
- Ese mismo día entro en coma por perdida de sangre. Tuvimos que realisarle una transfusión de emergencia- El afirmo con la cabeza- Esta mañana despertó.
- Entiendo ¿Cuando tendrá el alta?
- Esta noche.
- Muy bien. Si no hay mas que decir me retiro- Comenzó a alejarse.
- Espera. Puedo hacerte una pregunta?
Se detuvo frente a mi- Es sobre las cicatrices . Cierto?
- Si. Entiendo que sus padres murieron- Estaba nervioso pero el asintió con un leve gesto- Ella ha intentado suicidarse?
- Desde la muerte de mi hermana mayor ella se culpa- Cerro los ojos apretando fuertemente los puños- Desde ese día... Tijeras, autos, edificios. Siempre estuve con ella. Evitándolo. Piensa que no me he dado cuenta.
Me puse a su lado y apoye mi mano en el hombro del joven que lloraba.
- Esta bien muchacho.
Seco las lagrimas que surcaban su rostro con la mano derecha.
-Gracias por ayudarla- Se fue entre susurros- Porque ella es la única familia que me queda.

 

Este cap explica por que naraku le hacia eso a Kagome
Para Sesshoyasha
Capitulo 5. Tu Historia de Terror.
Lo ultimo que recuerdo fue la perilla de la puerta de vidrio. La vista ladeo y mis rodillas flaquearon.
Ni siquiera tus brazos pudieron protegerme de la obscuridad.
Kagome
No sabia donde estaba. Tenia miedo. En mi cabeza parecieron imágenes que no pude reconocer. Gente asesinada por hombres de belleza infrahumana. “Demonios” la palabra salio de mis labios de forma involuntaria. Mas imágenes.
Luchas, guerras sin sentido. Ríos teñido de color carmesí. El ultimo recuerdo quedo gravado en mi mente.
“Las guerras sin sentido ni fin, comenzaron desde los primeros tiempos a causa de la estupidez humana” Una monótona voz femenina se escucho. Una voz sin vida que comenzaba aquel relato.
“ La furia de los dioses se incremento y fusiono creando una nueva raza”
Mas imágenes. El mundo divido en cuatro reinos Norte, Sur, Este y Oeste. Las tierras de los generales Daiyokai.
“Una raza de seres sobrenaturales con apariencia humana y belleza divina. Los Youkai. Su misión fue hacer recapacitar a los humanos, aunque el odio y la vanidad involuntaria fue la perdición de ambos bandos.” Detuvo su narración para luego volver a comenzar “Después del lapso de un siglo de guerra, los hermosos e inmortales seres fueron castigados por sus creadores. Los sentimiento de aquellos que creyeron inferiores fueron su maldición.”
Mujeres y niños muriendo de hambre y enfermedades. Hombres y demonios luchando, en un campo de batalla compuesto por cadáveres de ambos grupos.
“ Los dioses decidieron entonces conceder dones a las criaturas mas deviles. Surgieron los exterminadores, monjes y sacerdotizas que se unieron a la lucha”
- “Y yo que tengo que ver en esto?”- Hable por primera vez.
“La maldición de los inmortales los ato a este mundo. Su fortaleza se volvió su mayor pecado. La vulnerabilidad de perder a alguien amado o ser traicionados. Almas deviles encerradas en corazones de piedra y expresiones de hielo. Cubiertos por su orgullo nato.
Las imágenes acabaron. Me encontraba en un hermoso bosque. Flores adornaban el lugar y animales silvestres recorrían el terreno.
- “Quien eres?”- Pregunte confundida. No encontraba un cuerpo material pero sentía su presencia con migo.
- “Soy Midoriko. La Diosa de la Astucia y Sabiduría. La Diosa guerrera.
- “Tus podrás responder a mis preguntas?”
- “Para eso estoy aquí”- Su voz sin alma poco a poco tomaba vida.
- “Dime”- Deje a un lado mi miedo- “Por que Naraku simplemente no me mata?”
- “El planeaba matarlo. Ellos no son los últimos que quedan pero si los mas fuertes. El comandante y su heredero. Cuando enfrentaste a la muerte tu sangro ocupo su lugar. Vida por vida. Un año es el limite. El liquido vital que corre por tus venas devia ser derramado. Anualmente alguien de tu misma sangre moriría. Pero sus sacrificios no alcanzan. Tu alma fue bendecida, por uno de los dones otorgados a los humanos. Sacerdotisa. Cuando de la familia de sangre solo que des tu. La familia de alma ocupara su lugar en una cadena sin fin. Sus vidas y la tuya se encuentra a tu merced”
Todo se orcurecio nuevamente. Un susurro. Mi mente seguia recordando aquella ultima imagen.
Un joven de cabellera blanca-platina y ojos dorados. La luna unida a su frente. Marcas rojizas atravesaban sus mejillas. Aquel ser de extrema belleza luchava con un demonio de horrible apariencia, que intentaba llegar hasta “Algo” detrás de el.
Un pequeño youkai verde peleaba junto a el con un báculo de dos cabezas despidiendo fuego de cada una de ellas. Destruyendo a sus oponentes.
La pequeña lucha acabo. De detrás de ellos apareció una hermosa niña. Con ojos avellana y cabello chocolate atado en una pequeña coleta.. Vestía un bello quimono naranja . La pequeña sonrió.
- “ El amor puede llevarte a la muerte”

 

Capitulo 6. Fraternidad. Es lo único que no siento por ti... hermano.
- “ El amor puede llevarte a la muerte”.
Fueron las ultimas palabras de Midoriko.
Kagome
Desperté con un tremendo dolor de cabeza.
-Mm... Sesshomaru?- El estaba acostado sobre un sillón- Estas dormido?- No quería despertarlo pero me sentía sola- SESSHOMARU
El dio un respingo en el lugar para luego mirarme. Le sonreí. Giro nuevamente y cerro los ojos.
- Sesshomaru- Con sigilo se acerco a mi. Hice un leve puchero.
- ¿Sesshomaru puedo hacerte una pregunta?- Luego de unos segundos el se apoyo en la pared cerrando nuevamente los ojos.
-Hn- Lo tome como un si.
-¿Cuantos años tienes?- La curiosidad me gano, pues el estaba “exactamente” igual a como lo recordaba- No pareces haber cambiado nada.
- Tengo 22
- ohh- El parecía mas joven.
- Y tu?- me dijo aun sin abrir los ojos.
- Cumpliré 19 – No sabia porque le había respondido- Sabes?- Le dije lo primero que vino a mi mente- Me recuerdas a mi hermano.
- Oye- Llamo mi atención- Kagome. ¿Cierto?
- Si.
Abrió la boca para continuar, pero fue interrumpido por la puerta al abrirse. Mire a las personas que acababan de entrar. Una muchacha y dos muchachos, que me sonreían mientras corrían hacia mi para abrazarme.
- Sango! Miruku! Shippo!- Busque con la mirada a las personas que faltaban- Y...?
-Souta fue a hacer... algo- Respondió Shippo alegremente.
-Y...?
- Dijo que ya vendría- Dios no me dejaban hablar.
- Esta bien- El sonido de la puerta al abrirse llamo mi atención. Un joven peli-plata entro a la habitación prácticamente corriendo.
- Kagome hermanita!- Se abalanzo sobre mi abrazándome- Que alivio.
- Hermano!- Estaba realmente feliz aunque no podía respirar- Aire Inuyasha.
- Oh lo siento- Seguía abrazándome pero con menos precion. Sentí un leve dolor en la cabeza producido por un pequeño golpe de el- Auch- masajee la zona afectada. El me sonreia. Devolvi el gesto.
- Hermanita?- Oí un murmullo proveniente de la pared donde Sesshomaru se encontraba. Inuyasha también lo escucho. Su cuerpo se tenso mientras giraba lentamente.
- Sesshomaru?
InuYasha
Sencillamente desesperado. Así me sentía. Ya era el tercer día sin rastro de ella. “Donde te has metido ahora... hermana”
Flash Back
Sonó la campana. Salí como un rayo del salón.
- Espera- Frente a mi se encontraba ella imperventilando por correr. Era dos años menor a mi. La hermana de mi novia.
- Que te ocurre InuYasha?- Me pregunto ella acercándose.
- No me pasa nada. ¿Por que?
- Estas extraño y me evitas todo el tiempo- aparto la vista.
- Escucha- No quería que ella sufriera- ¿Yo te gusto?
Comenzó a reír hasta las lagrimas. Noto mi expresión.
- Oh es enserio?- Asentí con un movimiento de la cabeza – Por eso te alejabas...- Seguía riendo- Tontito.
Me sonrió de oreja a oreja – Yo te siento como parte de mi … pequeña familia- Su rostro ensombrecio – Me respondes una pregunta?
- Claro¿Que es?
- ¿Quieres ser mi hermano mayor?- dijo tímidamente aunque la alegría se notaba en su voz.
Estaba muy sorprendido – Para mi también eres mi hermanita- Era cierto. Ella siempre habia formado parte de mi familia.
Abrí los brazos invitándola a hacer lo que quería . Corrió hacia mi y en el ultimo momento salto abriendo también sus pequeñas extremidades, abrazándome.
- Kagome- Susurre entres sus cabellos azabaches. Al separarnos pode la mano en su pequeña cabeza, como una niña- Mi pequeña hermanita.
Fin de Flash Back
Me encontraba apunto de llamar a “Personas Desaparecidas” cuando el móvil dentro de mi pantalón comenzó a sonar.

• Hola?... Souta?
• La encontré.
• Donde?! Que ocurrió?
• Hoy le darán el alta en el Hospital Central.
• ¿Que ocurrió Souta?
• Yo... Yo creo que lo intento de nuevo- Sus palabras salieron entrecortadas.
• Esta bien. Luego veremos.
• Si – Cambio de tema- a la tres podremos ir a verla.
• Ok. Allí estaré. Hasta luego.
• Adiós Souta.

“Que te has hecho pequeña?” Debía cumplir mi promesa.
Flash Back
El funeral de Kikio acabó. Todos se fueron excepto mi hermana que no paraba de llorar. La deje sola. No sabia que pensar. Mi mente tan solo estaba en blanco.
Camine varias horas hasta llegar a un parque. Sobre el húmedo pasto vi el atardecer. Llovía pero no me importaba.
Ya era de noche. Volví a la “mansión” Taisho. Mi padre y hermano no estaban.
El sonido de la puerta me saco de mis pensamientos. Tome las llaves y abri.
Frente a mis ojos había un muchacho azabache de ojos azules. Estaba empapado por la lluvia y lagrimas caían por su joven rostro.
- Que ocurre Souta?- Una pregunta estúpida lo reconozco.
- Ella... Ella... - El tartamudeaba. Parecía estar en shock- Ella intento... Yo … ella.
- Que ocurre con Kagome- Entramos a la casa- Dime que pasó.
- Ella- En ese momento sus ojos miraban la nada. Una repentina seriedad y tristeza lo invadió- Ella se había encerrado en el baño... luego yo entre.... había un poco de sangre... Unas gotas en el piso... Y... Y fui a preguntarle... pero ella se había dormido por el cansancio y de tanto llorar.
Lo mire expectante.
- Sus muñecas- me miro a los ojos por primera vez- Ella se corto las muñecas- abrí la boca pero no sabia que decir. Una mueca de horror me invadió- ella se culpa... por su muerte... Ella... ELLA INTENTO SUICIDARSE! Pensó que no me di cuenta pero lo hice... Y no... no sabia que hacer... InuYasha no pude hacer nada!
- Ka... Kagome.
- InuYasha necesito que me hagas una promesa... ¿Me ayudaras a proteger a nuestra hermana?
- Yo... Yo te lo prometo Souta.
Fin de Flash Back
Desperté y observe el reloj. 15:05 p.m. Tome las llaves y me diriji al hospital.

---------- ○ ----------
- ¿Podría decirme donde se encuentra la paciente Higurashi?- pregunte la recepcionista.
- Claro- Chequeo la computadora- Habitación 503. 5º piso.
- Muchas gracias.
-No hay problema- sonrió- Hasta luego joven InuYasha.
Marque el numero indicado en el elevador.
498...499...500 gire a la derecha... 501... 502... 503.
Entre como un rayo a la habitación. Ella estaba medio sentada sobre la camilla sonriendo. No le preste atención a las demás personas en la sala.
- Kagome hermanita!- Me abalense sobre ella tomando su pequeño cuerpo entre mis razos- Que alivio.
- Hermano!- Se escuchaba un poco trastornada- Aire Inuyasha.
- Oh lo siento- Seguí abrazándola con menor presión – Que alivio.
Golpee su pequeña cabeza con la mano en un gesto de reproche.
- Auch- Coloco las manos en su cabeza.
Le di una gran sonrisa. Ella me devolvió el gesto.
- Hermanita?- Conocía esa voz. Lentamente gire escondiendo a Kagome detrás de mi espalda. Conté mentalmente la cantidad de personas en el cuarto. Sango, uno. Miruku, dos. Shippo, tres. Alguien mas se encontraba allí. Cuatro.
Mi cuerpo se tenso. El estaba recostado contra una esquina. Parecía ademas de aburrido, algo ¿Entretenido? Aún no sabría decirlo.
- Sesshomaru?- Sin duda era el.
Hice un gesto con la cabeza en dirección a la puerta.
-Hn.
- Esperame aquí pequeña- Salí de aquel lugar con el siguiéndome. No vi el rostro de ella.
Paramos en medio del pasillo. No había nadie.
- Ya me cambiaste?- Su tono era vagamente sarcástico- Hermano.
- No se cambia algo que jamas fue- Lo mire resentido- Medio hermano.
- Muy de acuerdo.
- Acabemos con estas estupideces Sesshomaru- fui al grano- ¿Que haces aquí?
- No te enojes tanto. Ademas de que me tome la molestia de cuidar a tu “hermanita” . Deberías callarte y agradecérmelo.
- Que hiso ella- Mi voz ensombresio- que hiso para que debas ayudarla. Cuéntame que pasó.
- Caminaba por la ruta y la encontré. Estaba frente a un auto- cerre los ojos esperando que el relato acabe- Se golpeo la cabeza. Sangraba mucho y la traje aquí. Paso tres días en coma- se encogió de hombros- El resto ya lo sabes- asentí seriamente.
Di media vuelta. Lo mire de lado.
- No se por que lo hiciste pero... Gracias por salvarla- Coloque una sonrisa en mi rostro y entre nuevamente a su cuarto.

Prox. Capitulo 7. Encerrados. La Suicida y El Príncipe Obscuro.

 

Capitulo 7. Encerrados. La Suicida y El Príncipe Obscuro.
- Hermanita?- Oí un murmullo proveniente de la pared donde Sesshomaru se encontraba. Inuyasha también lo escucho. Su cuerpo se tenso mientras giraba lentamente.
Kagome
Me sentía realmente aburrida. Ya eran las 10:42 de la noche. Los muchachos se fueron hace mas de dos horas ya que el horario de visita acabo. InuYasha actuaba algo extraño pero no quise preguntarle.
Me contó que tendría que viajar a Capital por una beca, pero no estaba muy seguro por estar yo en el hospital. Le asegure estaría bien. Esta noche partiría.
Según Inu Taisho - al parecer ese era el nombre del medico- los últimos estudios tardaron demasiado por una falla en los envíos y hasta que llegaran los resultados no podría irme.
-Listo Kagome- la voz en la puerta me despertó de la pequeña ensoñación.
-Si. Gracias Dr. Taisho
-De nada pequeña- me sonrió amablemente.
Salí de la habitación blanca en dirección a las escaleras.
-Porque no tomas el ascensor como las personas normales?- Gire en busca de la voz.
-Simplemente no quiero- No le daría detalles para que el me diga algo como “Inútil” o “Anormal” por lo que preferí ignorarlo.
-Como quieras- Dijo en tono arrogante- Bajar las escaleras es de idiotas.
Estaba estupefacta ¿Como se atrevía a decirme eso? Las puertas se abrieron. Entró elegantemente sin siquiera dirigirme la vista.
“No, claro que no” me acerque a el “Este niñato mimado no va a hablarme así”
-Oye tu.
-Si?- Aun me daba la espalda.
-Dos cosas. Una mirame cuando hablo maleducado y dos eres un tonto engreído ¿Que te crees mi dueño? No voy a hacer lo que tu digas o quieras.
-A ¿Si?- Giro sonriendo. Instintivamente di un paso atrás apoyándome contra una pared- ¿Yo soy el tonto?
“Su sonrisa me asusta. Ahora entiendo porque nunca sonríe”
Reflexione sus palabras cayendo en cuenta de donde estaba. Demasiado tarde.
Las puertas del elevador se cerraron. Empezó a moverse.
“Demonios” Miraba a todos lados. Mi garganta comenzó a cerrarse.
“ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala” En la pantalla se marcó el segundo piso. “Tan solo falta uno” Cerré los ojos .
Nada se movió. Literalmente el ascensor se detuvo. Las luces titilaron.
Una pequeña turbulencia luego nada.
El corazón se aceleró al igual que mi respiración. El aire salia pero no lograba ingresar.
Cai contra la pared quedando sentada, con una mano en el pecho y otra en el suelo.
-Eres un estúpido- Me dirigí a el por primera vez. Se acercó sigilosamente. Sentía como las paredes se cerraban a mi alrededor.
-No pienses en eso- “Muy gracioso me estoy asfixiando y solo eso se le ocurre”- Coloca la cabeza entre las rodillas- se agacho hasta quedar a mi altura
Hice lo que me dijo. “ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala”
-Debes distraerte- Había manchas en mi campo visual. Distraerme. Distraerme.
-Que eres de InuYasha?- Fue lo único que se ocurrió a mi retorcida mente.
¿Por que quieres saberlo?
-Dijiste que me distraiga- Me sentía mejor- ¿Y?
-Es mi hermano.
-¿Tu hermano? Oh. Espera ¿Tu eres el engreído, idiota, estúpido, esgoista y arrogante por el cual se mudo a un departamento?-“ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala”
-Hn
-Eso explica mucho.
-Mi padre Inu Taisho, lo adopto cuando era un niño y se comporto como un imbécil. Cuando cumplió 18 se fue- se encogió de hombros.
-Tu padre es el doctor?
-Si- Ahora entendía el parecido entre ambos. El me miraba fijamente.“ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala
-¿Eres claustrofóvica cierto?- se dio cuenta “Que mente tan desarrollada”
-¿No es obvio eso?-“ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala”
-Ya. Lo siento.
-¿Que dijiste? No te oí- hice una mueca de inocencia.
-No lo repetiré.
-Eso me temía- “ Inhala, Exhala, Inhala, Exhala” Le ofrecí una sonrisa algo rota por la falta de aliento.
-¿Que pasa con tu familia? - Se sentó a mi lado mirando hacia el frente. La melancolía lleno mi rostro.
-Digamos que simplemente no están ¿Eso responde tu pregunta? Aunque no estoy sola. Tengo a mis hermanos.
-¿Tus hermanos?
-Si. Souta e InuYasha.
-¿Por que lo llamas hermano?
-Porque eso es lo que el es- Nos miramos mutuamente. Parecía no entender. Mi querida hermana era su novia. Siempre fuimos mejore amigos hasta convertirnos en eso... hermanos.
-No entiendo.
-No hace falta entender Sesshomaru. Tan solo debes querer.
-Hn
- Y tu familia ¿Que hay de ella?
- No hay mucho que saber. Mi madre murió hace... Demasiado tiempo- Su rostro no se inmuto aunque en sus ojos note tristeza- Mi padre se convirtió en un prestigiado medico. El resto ya lo sabes.
Parecía no sentir nada. Con el paso de tiempo descubrí que el no era un idiota... siquiera un imbécil. Era un Cubito de Hielo andante.
- ¿Que es eso?- Pregunte de golpe al percatarme de algo color azul entre sus flequillos plateados.
Lentamente me hacer que a el colocando la mano derecha en su frente. Corriendo aquella hebras plateadas que obstruían el camino.
Una luna menguante color azul se encontraba allí. El parecía MUY sorprendido por mis acciones.
“Que extraño tatuaje. Aunque... estoy segura de haberlo visto antes. Pero ¿Donde?”
- Pero... Que demonios haces- Una mano mas grande aparto la miá.
-Es solo que... Lo siento- Sonreí algo avergonzada.
- Dime – Un bostezo interrumpió la oración - ¿Cuando es tu cumpleaños?
-Hn. ¿Por que quieres saber?
-¿Curiosidad?-Parecía meditar mis palabras.
-El 1 de agosto - “El día de la luna llena”
- ¿Cuando piensas que nos sacaran de aquí?- Repose la cabeza en las paredes de metal.
- Hn
- Estoy cansada- Me miro perplejo
- ¿ Lo dices en serio?
- ¿Por que?
- ¿Como logras dormir tanto? ¿Sabes que dormiste por 76 horas consecutivas? Me das algo de envidia.
- Sip- Me encogí de hombros- Es como un don- Comencé a reírme de mi misma. El sonrió ladino.
Cerré los ojos. Morfeo tomo mi manos. Los labios cansadamente se curvaron al oír sus últimas palabras.
- Enserio te envidio.
---------- ○ ----------
Veo como el joven de la luna en la frente luchaba protegiéndola una pequeña que se escondía detrás de el. Ella tendría diez años.
Los enemigos muertos estaban. La niña sonrió al muchacho.
- “¿Quien eres?”- Pensé que nadie podría oírme. La niña giro el rostro en mi dirección y sonrió.
- AMO BONITO- Grito un pequeño demonio verde que se acercaba corriendo. La pequeña sonrió mas abiertamente.
- Hn- escuche – con mucho esfuerzo- decir al muchacho.
- ¿Que sucede Rin?- Pregunto el pequeño ser.
- “¿Rin?”- También cuestione. Ella asintió con un leve gesto de la cabeza. Luego giro.
- Nada Señor Jaken. Vayámonos- Salio corriendo detrás del joven que sigilosamente se había retirado.
- Eh? Esperame mocosa!- El renacuajo salio corriendo en la misma dirección- AMO BONITO!

Sesshomaru
Gire el rostro y la vi “¿Como puede dormir tanto?” Clabe la vista al frente... A la nada.
La presión en el hombro y brazo izquierdo llamo mi atención. Entre sueños ella se aferro a mi. Normalmente esto me irritaría. Pero ella era la excepción a mis reglas. Rompía “Casi” todos los estereotipos.
Una cortina de cabellos azabaches cubría parte de su rostro. Con la mano libre corrí aquella hebras de ébano.
“Me recuerda tanto a... Pero no. No es ella”
Que te la mano bruscamente.
- Mmm ¿Quien eres?- Ella aun hablaba dormida.
- ¿Rin?- Mi cuerpo se tenso. “Acaso dijo... no es posible” Deje de lado aquel pensamiento.
Ella temblaba levemente. Lentamente me quite el grueso saco que llevaba sobre los hombros y la cubrí.
Cerré los ojos. Por esta vez acepte dormir junto a un humano. Nuevamente.

---------- ○ ----------
Un brusco movimiento me despertó. Las puertas del ascensor se abrieron.
- Ogh. Maldita sea- No me había dado cuenta que estábamos sobre las puertas ahora abiertas.
Cai de espaldas entre la abertura del elevador y la receptora del hospital. Kagome cayo sobre mi. Aun no despertaba. “¿ Como demonios hace? ¿Sera que entro en coma nuevamente?”
- Ejem. Sesshomaru- Alce la vista. Mi padre se encontraba parado frente a mi con las manos en la cadera y una exprecion de divercion en el rostro- ¿Se puede saber que haces?
- Hn.
Lentamente me senté . Ella seguía aferrada a mi lado. La tome entre brazos reincorporandome “¿Y ahora?”
- Dejala en aquel sillón- Dijo mi padre casi leyéndome los pensamientos.
Así lo hice . La acomode lo mejor posible. Ella seguía tapada con mi abrigo.
Antes de soltarla tomo mi mano.
- ¿Sesshomaru?- Una sonrisa quiso asomarse en mi rostro pero al instante la quite. Me soltó y giro- Adiós Sesshomaru.
“Adiós Kagome”







Prox. Capitulo 8. Invierno . Fiestas de mascaras.
Adiós Sesshomaru.
“Adiós Kagome”

 

Capitulo 8. Invierno . Fiestas de mascaras.
Adiós Sesshomaru.
“Adiós Kagome”

Kagome
- ¿Como te esta yendo en Capital?¿Te aceptaron para la beca?
- Keh. Tonta ¿Que pensabas? Me ofende tu falta de confianza.
- Ay. Ya callate.
- Me aceptaron. Comenzare en septiembre pero debo quedarme por lo menos un mes para hacer los chequeos generales.
-¿Tanto?
-Si. Lo siento.
- Esta bien- Pensé un momento como preguntarle- Oye...
-¿Si?
-¿Donde vive Sesshomaru?
Flash Back
-Mm- “Tengo que levantarme” Pero estoy tan cómoda- 5 minutos mas Souta- Gire sobre mi eje intentando cubrirme “Que frió que hace”
Caí al piso al lograr voltear completamente.
- Pero que demoni... Esperen ¿Donde estoy?- Me di cuenta de que no me hallaba en mi habitación.
Frente a mi se encontraba un hombre de cabello plateado y mirada divertida.
- Em... Inu Taisho?- El sonreía- ¿Donde estoy?
- Lo siento. No quería despertarte. Por la mañana descubrí que ascensor se había detenido. Al arreglarlo los descubrí a ti y a mi hijo.
- Oh... Y el ¿Donde esta?
- Se pues esta mañana a salir.
- ¿Qué hora es?
- Son las cuatro y media pasada- Dijo sin intentar ocultar la sonrisa de su rostro- A el le sorprendió que alguien tan pequeña como tu pudiera dormir tanto.
-¿Lo siento?- Me reincorpore.
- Dormir es una de las cosas que el mas ama. Pero sufre insomnio.
Mire a mi alrededor sorprendiéndome al descubrir un costoso abrigo de piel a mi lado.
- Inu Tai...- Tarde. El se había ido.
Fin de Flash Back
Llamaron a la puerta.
- ¿Quien es?
- Soy yo!- Respondió alegremente una voz femenina.
- Hola yo- Abrí la puerta para encontrarme con Sango.
- Kagome!
- ¿Que ocurre?
- Tengo una sorpresa para ti.
- ¿Que es?- Dije mas animada.
- La escuela hará un baile de Invierno- Nos sentamos en uno de los sillones de la sala- Es de mascaras. Te traje dos boletos- Me entrego un pequeño sobre color azul con dibujos de pequeñas estrellas que anunciaban el acontecimiento- Es una especie de regalo de bienvenida.
- Gracias Sango.
- Debo irme- Se levanto dirigiéndose a la salida- Casi lo olvidaba. Puedes llevara a algún amigo. Todos son recibidos.
- Esta bien. Adiós Sango.
- Adiós.
“¿A quien llevare?”
---------- ○ ----------
Me encontraba frente a la casa. O mejor dicho “Mansión”. Marque el timbre de voz.
Sesshomaru respondió.
- Hn. ¿Quien es?- Parecía fastidiado. Sonreí.
- Soy Kagome.
Un timbre se escucho y las puertas se abrieron. Entre.
- Wouw- Esa era la exacta palabra para definir aquel lugar “Wouw”
Exquisitos mueble combinados en colores blancos y dorados. Cortinas de encaje en color ámbar también combinadas. En el centro un gran piano en incrustaciones dorada.
A un lado un escritorio de espaldas a mi. Sesshomaru se levanto del escritorio caminado lentamente. Su rostro no expresaba sentimiento alguno.
- Que es lo que quieres.
- Yo, yo vi...vine a traerte esto- Le enseñe el abrigo. Me sentía algo perdida- Y... y también...
- Habla claro- Suspire. Era imposible hablar con el.
- Puf. Esta bien. A pesar de todo vine a agradecerte.
- ¿Y?
-Y... Para agradecerte te invito a una fiesta.
- ¿Fiesta?
- Si es una especie de baile de mascaras para invierno- Le entregue uno de los sobres.
El solo me miraba fijamente.
- ¿Sabes que? Tienes razón es algo estúpido buscare a alguien mas- Me acerque para tomar el sobre pero el corrió su brazo- No es divertido. Vamos dámela.
Intente varias veces tomarlo pero era demasiado rápido.
Cruce los brazos y fruncí el ceño. Cuando bajo la guardia tome el sobre.
- Ja- Pero el seguía son soltarlo. Coloque la mano libre en su mejilla acariciadora suavemente. Su sorpresa lo distrajo y aproveche para- literalmente- arrancar la entrada de sus manos.
- Pero que...- Parecía muy enojado.
-Lero lero- Refregué el sobre en su rostro. El volvió a poner sus característico rostro aristocrático.
Comense a alejarme en dirección a la puerta.
-Nunca dije que no- Sus palabras me paralizaron. Lentamente se acerco a mi para tomar el maltratado papel azul.
- ¿Iras?
-Sorprendete. Capitulo 9. La Reina sin sonrisa y El Príncipe olvidado.
-Nunca dije que no- Sus palabras me paralizaron. Lentamente se acerco a mi para tomar el maltratado papel azul.
- ¿Iras?
-Sorprendete.

 

Capitulo 9. La Reina sin sonrisa y El Príncipe olvidado.
-Nunca dije que no- Sus palabras me paralizaron. Lentamente se acerco a mi para tomar el maltratado papel azul.
- ¿Iras?
-Sorprendete.

Kagome
Los días transcurrieron normalmente. Souta no se alejaba de mi e InuYasha llamaba constantemente. Cuando me di cuenta ya era 28 de julio. Mañana seria el baile.
“Mm ahora que lo pienso ¿Que me pondré?”Hasta ahora no se me había ocurrido que usaría. Las tiendas de ropas estaban cerradas.
Salí casi corriendo del departamento. Todo cerrado. A lo lejos divise una pequeña tienda de antigüedades que llamo mi atención. Entré.
- Bienvenida señorita- Saludo amablemente la vendedora. Una anciana de cabellos grises por la edad y un parche en el ojo derecho.
- Hola- repondi con una leve sonrisa.
- Mi nombre es Kaede. ¿Que es lo que estas buscando?
Sonreí apenada- Mm me preguntaba... no lo se... ¿Hay aquí quizás algún vestido?- No sabia que podría encontrar.
-¿Un vestido?- Pareció pensarlo. De repente su rostro se ilumino- Creo que tengo lo que buscas.
Salio del escritorio dirigiéndose a unas escaleras en espiral que se encontraban en medio del lugar.
Me acerque a una vitrina en la que había todo tipo de objetos relojes, collares, coronas, y demás. Uno en particular llamo mi atención. El antifaz de rostro entero color negro con incrustaciones de piedras entre arabescos formados por este. En el centro una pequeña perla color plata con destellos del mismo tono.
Estaba tan consentidora examinando la pieza que no se percato de la llegada de Kaede.
- Hermoso ¿Cierto?- Di un pequeño salto por es susto- Lo siento. Bien aquí esta.
En sus manos traía un hermoso vestido. Era color marfil con un casi imperceptible brillo dorado. Consistía en dos parte, una pollera color marfil con encaje al mismo tono. Legaba hasta las rodillas y crecía hasta formar una pequeña cola que se expandía. Y un corset del mismo tono con la parte superior en forma de corazón bordado con hilos dorados que se deslisaban en arabescos hasta llegar a centro del pecho donde se unían.
“Es sencillamente perfecto”
- Es... es- No encontraba palabra para describirlo- Es hermoso
-Lo se- me sonrió- no estaba a la venta pero ¿sabes? Te pareces mucho a su dueña- acaricio el vestido- Tiene una gran historia. Un amor que llevo a la tragedia.
- ¿Enserio?¿Podría contármela?
- Claro- Se acomodo en un sillón- Ven siéntate.
“En una época que no recuerdo, existió un prospero reino. La princesa sin un nombre preciso fue amada por todos los plevellos por su hermosa sonrisa.
Una trágica noche los reyes desaparecieron sin explacacion alguna para no volberselos a ver.
Ante tal hecho la princesa acepto tomar el trono. Dejando atrás su sonrisa.
Con el paso de los años muchos intentaron devolvérsela, ninguno lo logro.
El reino poco a poco se marchitaba a igual que el corazón de la joven.
La tarde mas fria de invierno mas largo, el prometido de la reina llego a palacio.
Un ser de exprecion bacía.
Los años pasaron nuevamente. Mientras lentamente los prometidos se enamoraron.
La mañana de la boda el príncipe desapareció.
La joven llena de una profunda tristeza sin descanso lo busco. Para encontrar su moribundo cuerpo en la entrada de los oscuros bosques,con una rosa blanca en las manos.
Al caer la noche escucho sus últimas palabras dedicadas a la Reina.
“No llores. No vale la pena”
La princesa llena de dolor se colocó el vestido del día utilizado al conocerlo.
Recordando su frió ser ingirió el veneno mas poderoso, siguiendo a su amado.
La mañana siguiente los guardias encontraron ambos cuerpos, con una pequeña nota en la mano de su antigua reina y una rosa en la otra.
“Si en verdad amas. No llores. No vale la pena”
Ninguno de los pueblerinos lloro. Plantando campos de rosas en conmemoración al amor de sus reyes”
Lagrimas asomaban mi rostro. Rápidamente las limpie.
- Es la historia de un trágico amor- Kaede me sonrió.
- Quiero mostrarte algo- Se levanto de su asiento a mi lado, dirigiéndose a un rincón del lugar. La seguí.
Allí había un cuadro bordeado por un antiguo cuadro tallado a mano.
El retrato mostraba a una hermosa joven de cabellera azabache y ojos chocolate. Se encontraba con las piernas cruzadas en un lujoso sillón. Traía puesto el vestido.
Aunque su belleza era fácilmente vista algo faltaba. La muchacha no sonreía. Al igual que una rosa. Agraciada pero bacía.
Involuntariamente me acerque a cuadro.
Una fina lagrima rodó por el rostro de porcelana de la Reina sin Sonrisa.

Prox. Capitulo 10. La Cenicienta de las 11 p.m.
Una fina lagrima rodó por el rostro de porcelana de la Reina sin Sonrisa.

 

Capitulo 10. La Cenicienta de las 11 p.m.
Una fina lagrima rodó por el rostro de porcelana de la Reina sin Sonrisa.

Kagome
Ajuste el antifaz “Listo”. Eche un último vistazo al espejo.
El vestido marfil se ajustaba perfecto a mi cuerpo, unos delicados zapatos color negro, y guantes hasta los codos, de encaje negro también.
El cabello medio recogido que caía en cascada hasta la cintura bajo la mascara negra. No llevaba maquillaje, tan solo un leve brillo en los labios que resaltaba la pálida pies.
- Vámonos hermana- Llamó Souta desde la puerta. El traía puesto un esmoquin estilo “James Bones” y una pequeña mascara que solo cubría sus azules ojos.
- Si.
---------- ○ ----------
El lugar se veía excelente. Las paredes cubierta del tela en variaciones de color azul. Imitaciones de copos de nieve caían del techo. En el centro una pista de baila con una gran esfera plateada sobre ella y luces de colores. Alrededor mesas de bocadillos. Y por último un escenario donde tocaban las bandas o el DJ , en el cual se anunciaría al Rey y a la Reina.
Busque a mis amigos que parecían no estar por ningún lado. Sentía varias miradas clavadas sobre mi lo cual me puso mas nerviosa. Muchos se acercaron sigilosamente intentando reconocerme. Al parecer ninguno lo logró o todos lo isieron, por lo cual se alejaron nuevamente.
- ¿Kagome?- Esa voz femenina me alegró. Voltee y sonreí a su portadora.
- Sango
Llevaba puesto un vestido corto color turquesa, que llegaba hasta sus rodillas , se anidaba en dos cintas del mismo color en su cuello. Zapatos color negro y una mascara también negra que sostenía con la mano derecha en su rostro.
- Te ves bellísima Sango- Sonrió tomándome de la mano.
- Vamos a bailar.
---------- ○ ----------
Danzamos al compás de varios tipos de música . Miroku se nos unió después de ser rechazado varias veces.
El traía un traje completamente blanco sobre una camisa negra y un antifaz que solo cubría su ojo derecho.
- Ya regreso. Buscare algo de beber.
-Esta bien Kagome- Acepto Sango- Pero apresurate.
- Vale Sango.
Me dirigía a la mesa de bebidas cuando advertí a un grupo de chicas gritando y saltando alrededor de alguien en la pared. A la única que reconocí fue a Kagura, una muchacha que se encontraba un curso inferior a mi. Era realmente fastidiosa. Bestia un provocativo y -por así decirlo- trozo de tela color sangre que con suerte llegaba a cubrir sus muslos. El cabello recogido en un rodete con una ¿Pluma? Y excesivo maquillaje.
Lentamente y con esfuerzo me introducí entre la multitud.
- Ya... ya no no asesinen a... -Di media vuelta para ver al pobre- ¿Tu?
- Vete de aquí Higurashi- dijo ásperamente Kagura, aunque en su tono de voz note algo de envidia. Sonreí interiormente- aquí nadie te llamo- le preste mi menor atención a aquel aviso.
- Al fin te encuentro – Observe al dueño de aquella voz. En sus ojos note un brillo que no pude reconocer.
- En serio se nota que me buscaste – El se alejo de la pares. Bestia un traje completamente negro con una con un extraño brillo dorado que al parecer siempre lo seguía. Una mascara de rostro entero del mismo color que se ajustaba a su rostro en arabescos y el cabello suelto- … Sesshomaru.
- Hn- El sonrió de lado
- ¿Tu la conoces a … esta?- Pregunto Kagura con el enojo tatuado en el rostro. Estaba a punto de contestarle pero el me ganó.
- Pues veras... A- Ti- No- Te- In- Por- Ta- Le hablo como un niño pequeño lo cual provoco muchas risas de parte de las demás.
- Ven. Vamos- Estire la mano derecha invitándolo. El acepto dejando atrás a un grupo de muchachas histéricas.
Caminamos lentamente y nos chocamos con una cola de muchachos que sonreían sin parar. Era para la foro de pareja.
- Ven- Tome su mano. La fila avanzaba rápidamente. El parecía aburrido aunque en sus ojos note sorpresa y fastidio.
La foto se tomo.
- Mm- Llame su atención- Te ves bien... Creo- Dije distraidamente.
- Hn. Lo mismo digo.
-¿Eso es algo bueno o malo?
- Averigualo tu- Sonrió siniestramente. Un escalofrió me recorrió.
- Ya. Por piedad no sonrías- Comenzare a reírme ante la expresión de su rostro.
- Eres rara- Ese comentario me habría enojado de no ser por la ceja que levanto jugetonamente.
- Pues no soy la única- Le ofrecí una gran sonrisa – Gracias por venir.
- Hn.
El escenario se ilumino y la directora Tsubaki subió.
- Y ahora... Presentaremos al Rey y la Reina del Baile de Invierno
Una muchacha vestida de negro de entrego un pequeño sobre.
- Los Reyes del Baile son... - Abrió el sobre- Higurashi Kagome y Taisho Sesshomaru
Comencé a aplaudir a los nuevos reyes.
- Esperen un momento... ¿Que acaba de decir?- Mire a Sesshomaru que parecía realmente divertido.
- Pasen los Reyes- Volvió a llamar Tsubaki.
Un muchacho que se encontraba detrás nuestro me dio un leve empujón. Subimos al escenario y la muchacha de negra vestimenta nos coronó.
- El Rey y la Reina realizaran el primer baile.
El vals comenzó a sonar. Sentí un apretón en la mano.
- ¿Me concedes el honor?- Susurro el mientras ofrecía su brazo.
Danzamos guiados por la música. Me sentía bolar sobre aquella pista.
Varias parejas se sumaron al baile. Sentía la felicidad a mi alrededor.
“Es tan hermoso” Una risa en particular llamo mi atención.
Allí estaba Souta junto a sus amigos que le daban empujones. El tomo la mano de una muchacha , minutos después ellos también se unieron al vals. Se percato de mi mirada ofreciéndome una gran sonrisa con el rostro sonrojado. “El... El es tan joven”
Sentí una gran presión en el pecho. Involuntariamente mi mano se poso allí. “En cuatro días es... es mi cumpleaños”
El dolor se intensifico .
“Ya no puedo continuar”
Las campanas sonaron a las once en punto. Solté a Sesshomaru.
- Yo... Yo- No me atrevía a ver sus ojos- Lo siento.
Sali corriendo de su lado en dirección al patio que poseía el edificio. Gruesas lagrimas rodaban mi rostro hasta caer sobre el pavimento.
“Es todo mi culpa” Abrase mis hombros.
-¿Que olvidaste?- Sentí una cálida presión en los hombros donde ahora reposaba el grueso saco de Sesshomaru.
-¿Por que lo dices?
- No recuerdo en nombre- Parecía pensativo- Aquella histérica princesa que se fue a mitas de la fiesta dejando al idiota del príncipe.
-¿Crees que soy Cenicienta?
-¿Eso me deja como el Príncipe idiota?
-¿Entonces tu quieres ser cenicienta?


Al girar quede atrapada en sus dorados ojos.
- Aunque son las once- Dije con un deje de melancolía.
- La cenicienta de las 11 p.m- El sonrió. No una siniestra o cínica sonrisa. Sino una pequeña pero sincera. Algo en mi interior se rompió.
- Bien dicho- Observe la brillante noche.
-¿Que has olvidado Cenicienta?- Me miraba fijamente.
Mas lagrimas cayeron. Con el dedo indice las quito. Acariciando levemente mi rostro en el proceso.
Instintivamente me aleje.
- Olvide que no debo amar- susurre entre el intensificado llanto- Tan solo ocasiono cosas malas si lo hago.
Salí corriendo de aquel lugar.
-Aunque no pueda evitarlo.

Capitulo 11. Tan solo queria ver nuevamente tu sonrisa.
- Olvide que no debo amar- susurre entre el intensificado llanto- Tan solo ocasiono cosas malas si lo hago.
Salí corriendo de aquel lugar.
-Aunque no pueda evitarlo.

 

Capitulo 11. Tan solo quería ver nuevamente tu sonrisa.
- Olvide que no debo amar- susurre entre el intensificado llanto- Tan solo ocasiono cosas malas si lo hago.
Salí corriendo de aquel lugar.
-Aunque no pueda evitarlo.

Kagome
Una niña trenzaba flores. Ahora tendría 12 o 13 años. Ella reía sin cesar.
- ¿Rin?- Me vio y sonrió. Saludo con la meno libre.
- ¿Quien eres pequeña?- La niña negó con la cabeza.
En mi mente se oyó un susurro “Casi es el momento”
---------- ○ ----------
Recorrí cada tienda de la ciudad pero aun no tenia nada . Ademas el deveria estar enfadado por quedar como el príncipe idiota.
“¿Pero que puedo regalarle?” Hoy es su cumpleaños y no tenia un estúpido regalo. Vi todo tipo de objetos. Algunas cosas eran basura y otras simplemente me parecían demasiado.
Caminaba sin rumbo. Nuevamente esa tienda llamo mi atención.
- Hola niña- Saludo con alegría la anciana.
-Buenos días Kaede.
-¿Que se te ofrece?
- No lo se. Busco un regalo.
- Pues bien querida- Me ofreció una amable sonrisa- Busca lo que quieras y si algo te gusta dime.
- Esta bien. Gracias.
Sigilosamente me acerque a una mesada llena de extraños objetos.
Los minutos pasaban y aun no encontraba nada. Estaba a puno de rendirme cuando un brillo llamo mi atención.
Una luna y un sol. Se trataba de un viejo marco hecho en plata. Con la mano lo limpie quedando asombrada por el producto final.
Era color plata bastante simple, en la punta al lado derecho se encontraba una luna menguante color azul claro, en su centro un pequeño sol que se entrelazaba con ella.
“¿Pero donde?... Keh Kagome tonta. Si tienes la foto perfecta”
Sesshomaru
“Quien se cree que es?” Estaba realmente enojado“Aun recuerdo sus palabras”
Flash Back
- Olvide que no debo amar- su llanto se intensifico- Tan solo ocasiono cosas malas si lo hago.
Algo en mi interior me incitaba a consolar su llanto “Me recuerda tanto a ...”
Salio corriendo de mi lado.
-Aunque no pueda evitarlo.
Fin de Flash Back
Las puertas se abrieron “Soy un idiota, ni siquiera puse llave”
- Pase- Una muchacha pelinegra de gran sonrisa entro.
- Hola Sesshomaru- Me dijo alegremente- Feliz Cumpleaños.
- ¿Que quieres?
- Mm. Te traje algo- Ella estaba-a diferencia mía- Muy feliz.
Me entrego una pequeña caja color negro con gran moño al lado. Di media vuelta y lo arroje sobre un sillón. Eso pareció lastimara. No me importo. Devia alejarla de mi. “Me recuerda...”
- Si solo es eso vete.
-¿Que te ocurre?
-¿A mi? Nada- No la miraba directamente- Te he dicho que te vallas.
-¿Por que actuás así?
- Por que tú actuás así- Estaba muy enojado y sin razón aparente- Me sigues como un cachorro sin dueño ¿Es que acaso no tienes nada que hacer?¿No tienes una familia? O solo se avergüenzan de ti.
- Yo.. Yo...- Ella cerro lo ojos apretando fuertemente los puños. Contuvo las lagrimas que amenazaban con salir.
- ¡TU QUE! ¡¿QUE ES LO QUE QUIERES?!
-Yo... Tan solo quería ver nuevamente tu sonrisa- El olor salino invadió mis sentidos.
Cuando gire ya era demasiado tarde. Ella se había ido dejando atrás las gruesas lagrimas que cayeron al pavimento.
Suspire.
Me senté en el gran sillón tomando la pequeña caja color negro. Con melancolía la abrí.
Un pequeño cuadro era su contenido. El cuadro color plateado con una luna menguante color azul y un sol a su lado.
En su centro un imagen. La foto mostraba a Kagome y a mi el día del baile. Su rostro demostraba mucha alegría, junto a ella me encontraba yo. Detrás a un lado dos jóvenes. Una muchacha de cabellera chocolate que tenia el puño en alto y los ojos cerrados, a su junto un joven peli-negro con una marca en el rostro. Del otro lado el hermano de Kagome sonriendo.
Entendí tres cosas esa tarde. Primero salve a una humana. Segundo me encapriche terriblemente con ella. Tercero la ice llorar como un imbécil.
“ Eres el príncipe ¿Idiota?”

Capitulo 12. Mi pequeño Ángel
Entendí tres cosas esa tarde. Primero salve a una humana. Segundo me encapriche terriblemente con ella. Tercero la ice llorar como un imbécil.
“ Eres el príncipe ¿Idiota?”

 

Capitulo 12. Mi pequeño Ángel
Entendí tres cosas esa tarde. Primero salve a una humana. Segundo me encapriche terriblemente con ella. Tercero la ice llorar como un imbécil.
“ Eres el príncipe ¿Idiota?”
Kagome
El molesto sonido de la alarma me despertó. Eran las diez de la mañana. Gire en la cama quedando frente al pequeño calendario que colgaba en la pared.
“ Sábado 3 de agosto 2012”
- Souta!- Me levante de golpe arrastrando todo a mi paso.
La casa se encontraba vaciá. Con desesperación busque a mi hermano. No había rastros de el.
Volví a mi habitación a cambiarte.
Fue tal mi desquicio que no note la pequeña nota pegada al respaldar de la cama.
Con ternura la tome.
“Hermana.
Fui al mercado por algunas cosas para comer. No quise despertarte pues últimamente note que estas deprimida. Cuando llegue veremos una película juntos al igual que cuando eramos pequeños.
Con amor Souta”.
Siquiera termine de cambiarme – Ahora mas calmada- Cuando el teléfono comenzó a sonar.
Dolor. Palpitaciones en el pecho. Mas dolor.
Una solitaria lagrima recorrió mi rostro. Atendí.
- Si? Si... Higurashi- Con el paso de las palabras caí de rodillas. El encargado de la funeraria no acabó de hablar. Corte.
- SOUTA!- Metí la cabeza entre las rodillas. Incapaz de volver a levantarme. No después de aquellas palabras que se clavaron como dagas en lo mas profundo de mi ser.
“Lamentamos informarle que Souta Higurashi ha tenido un accidente de transito el dial de hoy. Hora de fallecimiento 9:51 a.m. Sus últimas palabras fueron dedicadas a su hermana.
- Yo seré tu ángel”
Sesshomaru
No supe nada de ella los siguientes dos días. Siquiera atendía mis llamados lo que me frustraba aun mas. “Es su problema”
El teléfono comenzó a sonar. Con fastidio lo atendí.
-¿Si?
-Que le has hecho.
-¿De que me hablas InuYasha?
-Sabes de “quien” hablo.
-Para tu corta información no he hecho nada. Tan solo le dije la verdad.
-¿Que verdad?
-Que anda detrás de mi como un cachorro y que sus familiares parecen avergonzarse de ella por eso nunca están- InuYasha no contesto por varios segundos.
-¡Pero es que acaso eres Estúpido! ¿Como se te ocurre decirle eso?
-¿Que cosa?
-¿Es que acaso no te lo dijo ella?
-¿De que demonios hablas?
- Su familia... Entro una llamada... espera. El ella. No cortes.
-Hn
-¿ Kagome?¿Que ocurre?¿Por que lloras?- “¿Esta llorando?”- No ¿Que? ¡Demonios!-Volvió a la llamada principal- Debo cortar Sesshomaru- Susurro como despedida con un deje de tristeza en la voz. La llamada acabó.
“¿Que te ocurrió... Kagome?
---------- ○ ----------
Intente llamar varias veces a InuYasha pero el inútil no respondía. Ya eran alrededor de las diez de la noche. Al décimo intento se digno a atender.
-¿Donde esta?- Fui al grano. No quería mas escusas.
- Eres un idiota.
- Dime donde esta.
- En el cementerio su...- Corté. No necesitaba saber mas.
---------- ○ ----------

La noche inundaba el lugar . A lo lejos divise una pequeña figura encobada sobre un sepulcro.
Sigilosamente me acerque leyendo en el proceso los nombres de las tumbas a su alrededor... Kojaru Higurashi, Aerico ,Higurashi ,Naomi Higurashi , Kikio Higurashi . Por último la mas reciente...La tierra aun se encontraba removida.
Souta Higurashi... 14 Años. La lapida tallada sobre un ángel en el cual se leía el epitafio.
Mi pequeño ángel.
“Caíste a la tierra para cuidarme y ahora volviste para guiarme “
En mi mente apareció la imagen de un joven de ojos azules.
La muchacha se percato de mi presencia. Con el rostro hinchado y los ojos rojos de tanto llorar. Kagome se abalanzo sobre mi abrazando mi pecho.
La acune entre brazo. El paso del tiempo se alentaba.
Repentinamente me soltó.
- Lo Siento- Ni siquiera unas simples disculpas podrían calmar el vació que sentía ella en esos momentos.

Capitulo 13. Manchas Carmesí
- Lo Siento- Ni siquiera unas simples disculpas podrían calmar el vació que sentía ella en esos momentos.