Confianza, un viaje del destino.

Confianza, un viaje del destino.

Hola!
Ya sé que es el mismo ffic. de antes, pero como se cerro y prefiero ponerlo de nuevo, ya que lo mejoré.
Si, soy la misma autora de Fanfiction.net
Espero que os guste.

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Capitulo 1
Confianza​

Por una autopista, iba un coche de color rojo y negro, dentro de este estaba una chica castaña de ojos miel que aparentaba unos trece años, un chico de dieciocho, pelinegro de ojos verdes que era el que conducía, y un chico rubio de ojos azules de aproximadamente seis anos.
— ¡Oye, Jazz! ¿Cuánto falta hasta que lleguemos?—pregunto la chica de ojos miel que estaba al lado del conductor mientras escuchaba música con su Ipod.
— ¡No fastidies! Sabes muy bien que falta mucho, si no, no estaríamos en el medio del campo…—dijo el pelinegro de ojos verdes, que se llamaba Jazz.
—Solo era una pregunta—dijo la castaña algo molesta—No es para que te pongas así.
—Es que te conozco Mily, siempre buscas líos de algún lado, y si no los encuentras, te inventas uno.
—Bueno…—dijo la castaña algo divertida mientras escuchaba música.
— ¡Tengo hambre!—dijo el chiquillo rubio.
—Ya Nick, toma…—dijo Mily mientras sacaba un sándwich de su mochila azul celeste y se lo daba.
Después de que el chico coma, por alguna extraña razón, el Ipod de Mily dejo de funcionar. La chica quedo algo confundida.
—Qué raro…—dijo la chica en un susurro— recuerdo haberlo cargado, no tendría razón para apagarse.
***
En otra parte, cerca de un precipicio muy grande, unos robots pequeños estaban luchando.
Había dos, uno era de color negro y naranja, el otro era blanco y lila. El blanco tenía una espada amarilla en uno de sus brazos, la usaba con mucha habilidad. El negro lanzaba rayos y también misiles, parecía que el robot blanco era el más dañado.
— ¡No ganaras, Blackbeetle! —grito el robot blanco mientras lo atacaba con la espada, el otro intercepto el ataque protegiéndose con uno de sus brazos.
— ¿Ah, sí? ¿Y quién lo dice?—dijo el robot negro, cuyo nombre era Blackbeetle. Con empujar un poco logro recuperar la distancia ente el robot blanco. Este parecía estar cansado, estaba a poca distancia del precipicio.
El robot negro se acercaba a paso lento— Admítelo, esta vez gané yo.
La batalla empezó de nuevo, el robot negro empezó a disparar, le dio en el brazo en el que el robot blanco tenia la espada, ya no la podría utilizar bien. El robot negro lanzo misiles, estas empujaron al robot blanco hasta el precipicio, logro no caer utilizando la otra mano para sujetarse.
Blackbeetle se acerco lentamente hacia el precipicio— ¿Qué decías? ¿Algo con que ibas a ganar algo?—dijo solo para fastidiarle.
Unos diez metros debajo de donde estaba el robot blanco, apareció un torbellino de color azul oscuro.
—Tienes otra oportunidad, te ayudaré si admites que soy mejor que tu.
El medabot blanco, cuyos ojos eran de color rojo, por un momento parecían un línea— Nunca…—fue la respuesta que dio con algo de odio en su voz robótica.
—Como quieras…—respondió el robot negro en tono de burla mientras le disparo la mano, el robot blanco no resistió más, se soltó y cayó en el torbellino azul oscuro que en ese momento se desvaneció.
***
Volvamos con Mily, Jazz y Nick. Seguían por la carretera, Jazz conducía, mientras Nick estaba muy aburrido.
— ¡Me aburro!—exclamo el niño.
— ¿Y qué quieres que te haga?—preguntó Mily, que teniendo en cuenta todas las circunstancias, debería estar aburrida, pero no lo estaba. Sentía algo extraño…algo le decía que su vida cambiara para siempre. Estaba nerviosa.
Mily saco la cabeza fuera de la ventana para variar, miro el cielo sonriendo, después de un rato su cara era de desconcierto.
— ¿Qué será eso?—pregunto Mily en voz alta. — ¡Oye Jazz!—dijo Mily volviendo a sentarse bien— ¡mira el cielo!—exclamo confundida.
—Sí, claro, mira Mily, no puedo, hay unas leyes de trafico—dijo Jazz aburrido mientras seguía el camino, sin hacerle caso a su prima. La castaña empezó a protestar, pero pensándolo nuevamente, se olvido de Jazz y lo ignoró, estaba de mas en más nerviosa. Sentía que algo iba a pasar, pero no sabía qué.
—Algo pasara, lo sé—dijo la chica nerviosa en un susurro.
Por un momento, el suelo tembló como si fuese una explosión cerca. Jazz freno de golpe asustado mientras que Nick empezaba a llorar, solo Mily mantenía la calma de una manera sorprendente, a pesar de su nerviosismo, que se empezó a desvanecer.
— ¿Qué rayos fue eso?—grito Jazz confundido y asustado una vez que el coche freno, empezó a salir humo de un lugar cercano. Mily abrió la puerta y salió, noto que el humo empezaba a desvanecerse, vio como un hueco en la tierra y por un momento noto un brillo rojo.
Jazz aun asustado y confuso abrió la puerta del coche y salió— ¡Mily, no te acerques!—grito en tono de orden, cosa que Mily tenía muy claro ignorar.
Una silueta se distinguió de entre lo que quedaba del humo, lo primero que noto Mily fueron unos ojos rojos. Cuando la figura salió del humo, se distinguió claramente: era un robot blanco, de ojos rojos, de cuernos de color lila y también tenía una espada amarilla. Nick salió del coche y se acerco a Jazz asustado.
El robot miro a la chica de una manera que, a pesar de la emoción que tenia Mily, la hizo temblar por un momento. El robot fue rodeado por una corriente eléctrica azul celeste que parecía venir de él mismo, se arrodillo apoyándose con su espada en el suelo gritando.
Mily, por pura preocupación, se acerco al robot ante el grito unánime de Nick y Jazz que gritaron— ¡No!—se arrodillo junto a él preocupada mientras lo ayudaba para que no cayera al suelo. — ¿Estás bien?—le pregunto preocupada mientras lo sostenía un poco, a pesar que sentir una pequeña corriente eléctrica.
— ¿P-por-qué-ha-haces esto? ¿Por-qué me a-ayudas?—pregunto el robot mientras levantaba su cabeza con dificultad para ver a Mily, por un momento puso su espada al lado del cuello de la chica, esta sintió el contacto del metal que era frio, pero no le importo—P-podría hacerte da-daño…—dijo mirando hacia Nick y Jazz que estaban gritando— ¡Prima!—preocupados, cuando se dieron cuenta que el robot los vio, dieron un paso para atrás y se callaron los dos.
—Confió en que no lo harás—dijo Mily tranquila, el robot al ver la sinceridad con la que hablaba, bajo la espada para apoyarse. Jazz y Nick dijeron al mismo tiempo— ¡Hiuf!
—Vamos, necesitas ayuda…—dijo la chica mientras se levantaba y le tendía la mano, el robot la miro algo desconcentrado, mientras Mily le sonreía con sinceridad y empezó a sentirse algo nerviosa. El robot se quedo dudando un poco, luego le cogió la mano y con esfuerzo se levanto ante el total desconcierto de Jazz y Nick, que ya no pillaban una.
Mientras el robot y Mily se acercaban hacia el coche, Mily le pregunto: — ¿Cómo te llamas?
—Yo…me llamo…—dijo el robot, parecía que estaba indeciso en decir su nombre o no, miro a Mily por un segundo—Rokusho…—dijo al final.
—O-oye Mily ¿q-qué pa-pasa?—pregunto Jazz aun con temor, mirando hacia el robot como a un grave peligro.
—Debemos ayudarle—dijo la chica triste—necesita nuestra ayuda…—comento decidida.
— ¿En serio?—dijo Jazz algo incrédulo— ¿Y por qué te amenazo?—pregunto algo molesto.
—Yo…lo siento—dijo el robot claramente arrepentido.
— ¿Y por qué deberíamos creerle? ¿Y si nos ataca? ¿Quién nos garantiza que no quiere dañarnos?—dijo Jazz pregunta por pregunta.
—Yo—dijo Mily con mucha decisión. La castaña ayudo a Rokusho a que suba en la parte trasera del coche.
— ¡Ah, no! ¡Con Nick, no!—dijo Jazz molesto al ver que lo sentaba detrás donde estaba Nick.
—Está bien, Nick, siéntate delante—comento resignada.
A pesar de todo, Jazz entro en el coche y arranco, a pesar de todo. Nick, porque era el más pequeño, aun no asimilaba todo con claridad, así que se durmió. Mily se sentía ya más tranquila, a pesar de todo. Decidió ponerse a escuchar música con su Ipod. Rokusho francamente no sabía ni siquiera que pensar. Estaba totalmente confundido.

Bien, hasta la proxima.
Sayo~
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Capitulo 2

Hola's! ;)
Aqui esta el segundo capitulo.
Nyaa~ Feliz navidad a todos! n.n

Capitulo 2
Reparaciones
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Lo que acababa de sucerder era muy extraño, pero pese a la rara situación, Mily estaba tranquila escuchando música, como si el aparecer de un robot de la nada fuese lo más normal del mundo. Este empezaba a sentirse algo cansado.
— ¿A dónde vamos?—pregunto el robot mirando a Mily.
—Pues vamos a la casa de mi tío que está al lado de la playa…—respondió la castaña.
—Mily, quiero agua…—se quejo Nick, que ya empezaba a estar despertarse. La chica saco una botella de agua de su bolso azul celeste.
En el camino no hubo más interrupciones. Empezaron a aparecer a la vista algunos coches que también se dirigían allí.
—Oye, Rokusho…creo que será mejor que no te vea más gente, eso podría complicar mucho las cosas.—comento Mily.
— ¿Por qué?—pregunto el robot algo confundido.
—Pues…—empezó diciendo Mily, intentando encontrar la manera de explicar.
—Por que no es normal ver robots por las calles—dijo Jazz con rapidez, y a la vez con enojo.
—Eso mismo…
—No hay problema...—dijo Rokusho—creo.
Pasado un tiempo, la carretera por la que pasaban empezaba a ser de más en más poblada. El viaje fue muy largo, cuando llegaron a su destinación, el coche freno con ligera brusquedad. Mily fue la primera en salir fuera del coche.
— ¡Sí! ¡Llegamos!—dijo la castaña muy feliz, Rokusho saco la cabeza fuera del auto. Delante estaba una casa grande de tres pisos, con un jardín. No había personas por los alrededores, luego se dio cuenta que, más allá, estaba la playa.
Mily se volteo hacia Rokusho—Normalmente por aquí pasa muchísima gente, pero como son las siete de la mañana…
—Entiendo—dijo saliendo del coche, una corriente azul volvió a aparecer en su brazo haciendo que se arrodille.
—Vamos, necesitas que te reparen…—dijo la chica preocupada mientras se acerco al robot para ayudarlo a entrar más rápido en la casa.
—Mily cuidado que no te electrocutes…—dijo Jazz mientras cerraba las puertas del coche, más preocupado por Mily que por el robot. Nick estaba allí parado, miro a Jazz por un momento— ¿Qué es “electrocutes”?
—Bue… luego te explico.
Mientras tanto, Mily y Rokusho ya habían entrado, Mily le dijo que se quede ahí quieto mientras se fue corriendo hacia la cocina.
— ¡Tío! ¡Tío! ¡Tío!—decía Mily con mucha prisa, encontró a su tío, que era pelinegro de ojos verdes mientras preparaba un té y leía un libro de robótica.
El hombre levanto la vista de su libro mientras el té que preparaba ya estaba echando vapor— ¡Mily! Qué bien que estas aquí, sobrina…—dijo sonriendo a la chica.
— ¡Tío Adrian! —Dijo Mily— ¡Tienes que ayudarme en una cosa, porfa, porfa, porfa…!—dijo mientras sacaba a su tío de la cocina.
— ¿Qué pasa?—trastornado.
—Tú sabes mucho de robótica, ¿verdad?
—Claro…
—Tienes que ayudarme en reparar a un robot, vamos, que está en el salón—dijo mientras empujaba a su tío.
—Mily…—dijo mirándola con incredulidad mientras Mily tenía una cara de preocupación—Sabes, cuando era pequeño, siempre creía que podía encontrar robots para ayudarlos, pero entiende chica, no es como coger un gato de la calle para llevarlo a…—dijo el tío, pero cuando llego al salón y vio a Rokusho se quedo como estatua— ¿veterinario?—dijo acabando la frase. —Este… Mily.
—Vamos, que no tenemos tiempo que perder—dijo la chica con prisas con medio aire de organizadora—llévalo al laboratorio ese tuyo, a ver qué podemos hacer.
—Tú... ¿Tú sabes de eso…?—dijo Adrian asombradísimo.
—Sí, cuando era pequeña siempre me preguntaba a donde ibas todo el rato, un día te seguí y encontré el laboratorio ese.
En ese preciso momento, llegaron Jazz y Nick. Vieron que Mily se dirigía hacia una alfombra, la cogió, debajo había una puerta. Los dos se quedaron boquiabiertos.
—Mily…—dijeron Jazz y Nick al mismo tiempo.
—Os explico luego—dijo Mily mientras el tío Adrian, Mily y Rokusho estaban bajando.
Jazz y Nick los siguieron, la escalera era muy corta, como para un piso. Cuando llegaron abajo, había muchísimos aparatos extraños, pero todo parecía como si perteneciera al siglo siguiente, no al siglo 21, que era en el que estaban.
—Bueno, primero tenemos que escanearlo, para ver qué es lo que no funciona bien…
—El brazo…
— ¿Qué?—pregunto Mily, que era la única que le prestó atención, ya que los demás estaban concentrados en otras cosas. — ¡Ah!—luego entendió lo que quería decir, se lo dijo a su tío.
—Bueno, pero es mejor revisarlo, si tiene otros fallos lo podremos reparar…—explico Adrian. El tío de Mily cogió algo parecido a un mando a distancia. El tío se fue hacia el laptop que tenía, estaba leyendo algo.
—Bueno, hay unos fallos muy importantes en el sistema de… ¿Cómo te llamas?—pregunto al robot, que aun no sabía su nombre.
—Rokusho—dijo cansinamente.
—Bueno, eso… tardara como dos horas hasta repararlo completamente.
—Dos horas no está mal…—dijo Mily algo menos preocupada.
—Pero…—dijo Adrian, pero Mily nada más escuchar la palabra pero, se alarmo un poco.
— ¡Ay tío!—se quejo Mily—nunca me gusto cuando dices “pero”, siempre me dio una mala espina…
—Pero para repararlo, habrá que desmontarlo.
Todos se quedaron mirando a Rokusho, para ver que decía, este estaba mirando el suelo confundido pero otra descarga se hizo visible. El robot se cogió del brazo—Va-vale.
—Okey, bueno, ala, todos fuera…—dijo Adrian mientras sacaba a Jazz y Nick. Adrian busco a Mily con la mirada, ya que no recordaba haberla sacado. Estaba hablando con el robot.
—Mily…
— ¿Si?
—Cuando se acabe la reparación, inserta esta medalla de nuevo…—dijo Rokusho mientras le daba la espalda, un compartimiento pequeño se abrió dejando ver una pequeña medalla hexagonal de color dorado, en el centro estaba la figura de un escarabajo.
—Vale, ¿pero qué es?—pregunto Mily.
—Es…mí alma, te la confió…—dijo cerrando los ojos despacio, después de decir eso, la medalla se eyecto y Mily la atrapo. La castaña de ojos miel se quedo asombrada mirando la medalla— Tu…—dijo aun confusa y conmovida, se fue delante del medabot para ver, pero los ojos ya no brillaban.
—Bueno…—dijo Mily mientras miraba la medalla que estaba en su mano.
— ¡Mily!—la llamo su tío—Anda, haz el favor de irte…
—Si crees que eres el único aquí que sabe de robótica, estas equivocado—dijo medio sonriendo. Su tío la miro confuso y asombrado a la vez—Cada vez me parece conocerte menos…—dijo extrañado.
***
Dos horas y media más tarde, el tío Adrian se saco las gafas de protección, Mily también. El tío miro con orgullo a su nieta—De verdad Mily, lo tuyo es la robótica—dijo divertido.
— Ya lo sé—dijo la chica algo emocionada. Mily cogió el robot y lo puso de pie, abrió el compartimiento de detrás e insertó la medalla. Los ojos de color rojo del robot se encendieron, parpadeo un par de veces, luego se volteo hacia Mily.
—…gracias Mily—dijo el robot mientras se movía para comprobar qué tal le iba.
—De nada—dijo la chica sonriendo.

Fin del capitulo 2
Sayo~