Con un golpe de calor. Bueno, aquí estoy otra vez, esta vez para la actividad de El vocaloid del mes, disfruten este one-shot, vamos Lenny, tu puedes. Era una tarde calurosa, un rubio estaba tan aburrido recargado en un árbol para evitar el sol. Rayos…. si tan solo hubiera accedido a ir con Miku y Rin al súper— Decía molesto el chiquillo, ya que el prefirió quedarse en el parque a divertirse, sin contemplar que el sol estaba demasiado fuerte para sus ojos. Enseguida el muchacho se levantó de donde estaba, y molesto decidió marcharse a casa. Pero algo estaba mal, el sol seguía demasiado fuerte, no se podía ver nada. ¡Maldición!—Exclamó el niño de ojos azules. Enseguida el torpe chiquillo volteo a ver al cielo, mala elección. ¡MIS OJOS!— Gritó Len verdaderamente desesperado, ahora sus ojos ardían sin piedad alguna. Cuando de pronto alguien le tomo la mano y se lo llevó fuera del parque. Cegado el niño empezó a asustarse y a retorcerse como un gusano. ¡Tranquilo enano!— Le dijo una voz femenina algo fastidiada. ¡Rin!— Exclamó emocionado el joven rubio. Si Len, vamos a casa— Respondió su hermana con tapando sus ojos con una mano. Cuando llegaron a casa, Len estaba tan emocionado que subió a su habitación a jugar con su consola de videojuegos. ¿Pero que te pasa Len?— Le preguntó su hermana curiosa. Es que, estoy muy feliz, porque creí que moriría de un golpe de calor, y tu me salvaste, ¡GRACIAS RIN!— le agradeció feliz el rubio a su querida hermana. Hay Len, mejor vamos a merendar— Le propuso su hermana algo feliz. Llegando a la mesa, Rin pasó 2 platos y sirvió helado de plátano. Len aquí esta tu……. ¡PERO QUE TE PASA LEN!— Gritó asustada la rubia Kagamine al ver a su hermano desmayarse en frente de ella. Enseguida la chica llamó a la ambulancia, y asustada arrastro por las escaleras hasta llegar a la habitación de ambos. Lo acostó en la cama y lo reviso muy bien, aunque no fue necesario ya que la ambulancia llegó enseguida y llevaron a Len al hospital. Al llegar al hospital, pasaron unos cuantos minutos para que lo atendieran, mientras la pobre gemelita, estaba en la sala de espera. ¿Señorita Kagamine?— Preguntó el doctor buscando a la chica. ¿Que pasa? ¿Len murió? ¿Esta vivo?— Preguntaba triste al borde del llanto la chiquilla. No…. Solo sufrió un golpe de calor— Le informó el doctor a la niña. ¡Que bueno!— Exclamó feliz la rubia saltando. ¿Feliz porque tu hermano esta sufriendo?— Le preguntó sorprendido el doctor. No, estoy feliz porque no se murió— Respondió victoriosa la chiquilla. Enseguida pasó a ver a su hermano, que yacía deshidratado en la camilla. Pobre Len— Susurró la pequeña oji-azul lastimosamente. Rin….. ¡Ah despertaste Len!— Exclamó sorprendida la chica alegre. Rin, ¿y mi helado?— Le preguntó inocente el niño a su gemela. ¡TONTO!—Le gritó molesta la chica, pues su hermano la había preocupado y el solo preguntaba por su helado. Y bien que les pareció, yo amo a los gemelos. Comenten y digan si les gusta.