Fanfic basado en el juego Pokémon Masters, y en el más reciente evento basado en Elesa. No se si alguien más lo juega, pero a mi me encanta ese juego XD Espero les guste :) PD: No sabía en qué género clasificar esto, así que le metí drama, aunque creo que no se adecúa mucho xDDD ———————————— Con Brillo Propio Elesa era brillante. No solamente su luminoso atuendo amarillo, hecho específicamente para ella, pero todo sobre ella. Su actitud, su porte, incluso la forma en que comandaba a sus pokémon en batalla. Tenía un brillo que la ponía en una liga superior a todos los demás entrenadores en la región. Siempre había sido así. Desde que Marley la había conocido, Elesa no había sido otra que una brillante bola de luz y alegría. Su amabilidad y sus pésimos chistes nunca fallaban en hacerla sonreír, incluso en las peores situaciones. Era, sin lugar a dudas, única en su tipo. Sin embargo, Elesa no compartía esta opinión. Cuando se encontró nuevamente con ella en Pasio, fuera del campo de batalla del PML, Marley dejó escapar un comentario de que, en cierto nivel, envidiaba un poco la brillante personalidad de la líder de gimnasio de Unova. Marley era tímida y algo insegura; le costaba imaginar que podía compararse con alguien como ella. —¿De verdad crees eso? —había dicho Elesa con un suspiro—. Yo creo que todas las personas tienen su propio brillo, su propio encanto... sólo tienen que dejarlo salir. Estoy segura de que si te esfuerzas, puedes ser tan brillante como el sol, Marley. —Brillante como el sol... —musitó la chica, llevándose una mano al pecho, dubitativa—. ¿Y... yo? —Mm-hm —asintió Elesa con energía—. Tienes tu propio brillo, Marley, y estoy segura de que cuando lo muestres, nos deslumbrarás a todos. ¡Nunca te rindas, Marley! La entrenadora de Unova le regaló una gran sonrisa. Ahí estaba. El agradable brillo de Elesa. Se sentía tan cálido, tan bien, tener a alguien como ella alentando por ella... Marley dejó escapar una tímida sonrisa. —L-lo intentaré. Daré lo mejor de mi en este torneo, y... en todo... así que... —Marley se volvió hacia la otra chica, un poco sonrojada por la vergüenza que le daba pronunciar estas palabras—. Así que mírame, Elesa... Elesa le devolvió la sonrisa, contenta de ver la determinación en los ojos de la otra entrenadora. —Estaré en primera fila —contestó Elesa, sonriente.