Drabble Compañía [ Riverdale G&G | Ty&Janna ]

Ya tenía tiempo durmiendo en esa casa de piscina que tenía Janna, era extraño para Tyler volver a dormir en una cama después de tanto tiempo durmiendo en su hamaca en el bosque, pero sin duda, era reconfortante incluso si algunas veces tenía que compartir cama con la pequeña molestia y despertaba solo para encontrar como se le quedaba viendo haciéndole saber que no había pegado un ojo en toda la noche.

¿Lo malo?

Su cuerpo parecía responder ciertas noches a malos recuerdos haciéndolo sucumbir a varias pesadillas de cuando muchas cosas terminaban sucediendo en su misma celda de solitario que le asignaban por “mal comportamiento” o “peleas causadas”, su corazón golpeaba con fuerza su pecho y lo hacía removerse en la cama entre diversas quejas, sudor y temblores, totalmente incapaz de abrir los ojos para terminar con todo aquello que lo perturbaba.

Allí es cuando de pronto sentía unos brazos rodearlo y todo el repentino frío desaparecía de repente para ser acompañado de unos tranquilizantes latidos que obligaban a su corazón a querer seguirlos, calmarse lo más que podía para sincronizarse. Su cuerpo con lentitud dejaba de temblar e inconscientemente se acurrucaba en su nueva fuente de calor y sus brazos se aferraban a la cintura ajena buscando más cercanía, una forma de evitar que ella se apartara en algún punto de la noche aunque bien sabía que no iba a hacerlo nunca.

Recordaba perfectamente sus palabras para tranquilizarlo, sus caricias en su cabello y sus arrullos aunque al siguiente día fingiera no recordar nada cuando amanecía sin sus brazos enredados en la ajena, la apreciaba mucho aunque realmente no lo demostrara demasiado, había aprendido a quererla al sentir que su compañía podía ser “normal”, fuera de alguna clase de conveniencia que había creído en una primera estancia.

—¿Janna?

Habló bajo, parecía más entre sueños que plenamente consciente, aun así, la castaña sonrió con tranquilidad continuando con las caricias en el cabello de Tyler.

—¿Sí?

—No dejes que me vaya nunca.