Contenido oculto: Antes de leer Breves spoilers del manga, no leer en caso de no ir al corriente con el mismo. O, en todo caso, espero que al menos tengan un poco de contexto para no confundirse por la forma tan inusual en la que está redactada, inusual —claramente— para mí, tomando en cuenta mi estilo. Es algo así como un breve pedacito de cómo reaccionó nuestro Ciel a todo lo ocurrido hasta el capítulo 148 del manga. (Actualmente va ya por el 155). Espero que al menos lo disfruten. . . . . . . Ciel te mira, con esa sonrisa molesta que te provoca escalofríos, te mira ya no como un hermano sino como a una molestia de la cual sólo quiere deshacerse para continuar con la vida que se le arrebató tan bruscamente en aquel incendio hacía ya varios años. Lizzie llora y tú te preguntas entonces si todos aquellos sacrificios no tuvieron valor alguno, tus manos tiemblan sin saber ya si es por enojo o miedo... y quieres reír, porque el miedo te es ya algo tan desconocido que el volver a saborear algo de él sólo te dan ganas de vomitar. Quieres reclamar, decir algo en tu defensa. Quieres tomar la postura del Conde que eras tan sólo unos minutos antes, pero tu cuerpo se niega a responder; Sebastián te mira, sin cambiar nada en su postura mas el brillo en sus ojos te hace entender cuan molesta es la situación para él. La boca te sabe a ceniza. Y el olor de la mansión quemándose resurge de tus memorias para incomodarte aún más. La puerta de la mansión se abre con brusquedad para dar paso a la policía y Undertaker sonríe. Entonces despiertas, con la ira burbujeando desde lo más profundo mientras Sebastián abre las cortinas de la diminuta habitación en un intento de seguir la rutina que dejaron atrás. Lo miras y él sonríe, al tiempo en que sus ojos carmesís comienzan a brillar, recordando el discurso de la noche anterior. Si Ciel regresó sólo para quitarte todo aquello por lo que luchaste en reconstruir, entonces era tiempo de tomar nuevamente las riendas de tu maltrecha vida y proclamarte vencedor una vez más. Ya que el único Ciel Phantomhive eras tú y tu hermano bien podría regresar al ataúd del cual nunca debió haber salido.
Puedo decir que en su gran mayoría has puesto tenue el sentimiento confuso que llevaba el pequeño Conde al ser envuelto en dicha situación. Pues si bien es un punto importante en toda la historia, termino siendo abrumador para el mismo. Yo en mi caso, voy al corriente en el manga y me parece que es basante concreta tu forma de relatar y ese punto de vista. Este párrafo fue muy bueno a decir verdad, podría pensar que él pensó exactamente lo mismo. Además. Esta bien escrito y es legible de corrido. Siento que, para mi al menos, pudiste expresar a más profundidad, añadiendo un poco más de "Ciel". Si bien el en su momento estaba "sumiso", su actitud siempre fue imponente y cuando se trataba de su vida personal a veces parecía "enloquecer" y sus sentimientos eran aun más "profundos". Si bien es llamativo, darle ese pequeño "chispazo" atrapa aún más al lector. Creo que es lo único que podría decir que esta un tanto faltante. De allí en más, como referí antes, esta bastante acertado. Me ha gustado mucho tu fic. Saludos~
Oh, oh, me pasé antes por aquí pero con los problemitas que tenía mi computadora no me di a la tarea de comentarle. He de decir que aunque no leo el manga estoy al corriente de algunas cosas, y fue tan sorprendente como inesperada esta revelación de los dos Ciel (que dicho sea de paso yo sigo considerando a quien conocimos como Ciel como el único Ciel) Ese aparecido se proclama como el verdadero Ciel, pero a mi parecer el que halla llegado de repente le quita algo (su primogenitura la perdió al "morir"), de verdad que no me gusta. Además Ciel fue quien sufrió todo mientras él únicamente fue dado por muerto y ahora regresa para adueñarse de lo que ya no le pertenece. ¿Pues quien se cree? Como dijo Liux, es el Ciel que conocemos el que ha sabido soportar el dolor condenando su alma pero sin perder del todo la inocencia, lo que a veces hace el peso más abrumador; y sin embargo se levanta de una mejor manera a como lo haría un adulto en su lugar. Es lógico que a nuestro Sebas-chan se le haga incómodo eso puesto que su contrato está firmado con Ciel Phantomhive, y la situación así le supone una complicación porque a ese niño no lo conoce por más que se haga llamar Ciel Phantomhive. Buenísima frase final, regresar al ataúd del cual nunca debió salir... y la pregunta es ¿Undertaker lo sabía? Felicidades por escribir.