Sencillo poemilla que hice para el cumpleaños de mi profesora de Lengua; nada del otro mundo :'3 Cero El cero antes del primer segundo, el uno del primer año. En el dos, a dos piernas, tropezando; y en el tres, finalmente, alumno. Cuatro, cinco, seis. Aprendiste los números, a contar. Siete, ocho, nueve. En nada, las tablas de multiplicar. Ahora, vamos con dos dígitos. El diez de tus segundos cuadernos, el once de los indicativos y subjuntivos. Y el doce, hum, retos nuevos. Trece, catorce, quince. Con Bécquer, Unamuno y más, mucho más. Dieciséis, diecisiete, dieciocho. ¿Parar? ¡Si esto solo acaba de empezar! El diecinueve, adiós inocencia mía. El veinte, adiós al uno del grupo diez. Con el veintiuno regresa el uno de ayer, y, de nuevo, se va con el veintidós de hoy. Hasta la vista. Veintitrés, veinticuatro, veinticinco. La nostalgia de querer volver atrás. Veintiséis, veintisiete, veintiocho. No cesa el caer, el llorar, para, al fin, el avanzar. Veintinueve, vuelves a verlo, aquello que hay tras tu espalda. Y, finalmente, el treinta te mantiene la cabeza alta. Es como un diez, y, al mismo tiempo, un cero. Un cero que se repite, se escribe y se vive.
Oh, wow, qué bonito poema le has dedicado a tu maestra, seguro se sintió orgullosa de eso. La parte final me encantó, porque aunque el cero parece no tener valor, es valiosísimo a la derecha y es verdad, se repite, se escribe y se vive. Yo comencé con un minuto de vida, luego diez, después veinte, treinta y así hasta llegar a un día, diez, veinte, treinta que se convirtió en un mes... diez meses, un año, diez años, veinte años, treinta, cuarenta y... todavía no completo la siguiente década, pero ya la rondo xD Hasta la vista =)
"Un cero que se repite, se escribe y se vive." Los números representan tantas cosas, recuerdos, fechas, preocupaciones... Jajaja, está muy lindo realmente. Porque sí, los números caminan con nosotros a lo largo de nuestra vida. Gracias a esa persona que nos enseña.