Misión "vuelo invisible" Despierto sobresaltada, miro a mi alrededor para asegurarme que la oscuridad que me rodea es total, prendo mi lampara que esta sobre la mesilla, trato de recordar el sueño, aunque lo intento solo recuerdo que alguien me dice -recuérdame en lo mas profundo de tu ser, no me… sepas que yo te… , me bastara para … vive por mi.- las palabras me inundan, se que, por mas que me esfuerce no conseguiré mas que recordad esas cortas frases, poco sentido tienen pero siempre logran que me caigan algunas lagrimas. Suena la puerta de mi habitación, de seguro es Miranae. -Naomi, ya es hora, despierta – Da tres golpes en la puerta para avisarme que tengo tres minutos para salir. Mientras me visto pienso en el sueño, me pregunto porque aquel sueño se me repetirá con tanta frecuencia, suena desde lejos las campanas de el monasterio y recuerdo que hoy parto a una misión. Me apresuro para no llegar tarde. --Miranae, estoy lista – --yo nunca estaré lista para verte partir, ¿seguro que tienes que ir tan aprisa?- me mira con pena, se que le recuerdo a su hermana, y aunque no hablemos del tema ella no deja de verme como Nía. --deja de verme con es cara, ya no soy una niña y no tengo porque hacerte caso. --ha, ya no eres una niña, claro si tener 14 años es ser todo un adulto.- me dice con un tono irónico que me altera. La miro con desdén, no me agradan sus comentarios. -Mira chiquita- me dice-las guerras son muy crudas, tú no eres un adulto, apenas has vivido. Y recuerda cuando hay catástrofes la salida de emergencia es la familia. Nunca te impediría que hagas tu deber, piensa que tu familia soy yo ¿vale? La abraso con fuerza y grabo en mi memoria todo de ella, su cabello blanco, sus ojos cansados, su olor a leña quemada, sus prendas baratas y como por ultimo sus finas manos siempre decoradas con miles de anillos. -Miranae me voy se me hace tarde, adiós. --Adiós Naomi, tu familia, tu escape pase lo que pase -dice apuntándose al pecho Giro sobre mis talones para dirigirme hacia la puerta, a encaminarme asia la U.F.I.R.E. (unidad de fuerzas independientes requeridas especiales) /////////////////(Archivo n 1)/////////////////////////////// La UFIRE es un centro del gobierno del norte, es conocido por su eficacia en las misiones, el manejo de armas blancas y de fuego (tanto así como pistolas, metralletas, cañones, etc.) Quienes están en UFIRE son solo los descendientes del país y que hayan tenido familiares anteriores en la organización, no se le permite el ingreso a nadie más. Las instalaciones de la organización están bajo el mando directo del país del norte, lo que es ultra secreto y nombrarlo ante otras personas es alta traición sin importar el rango. Las instalaciones se encuentran en la montaña de Fénix . //////////////////////////////(Fin del archivo)/////////////////////////// Entro a la base un poco apurada y miro a mí alrededor, todo me resulta familiar y acogedor. Veo el gran reloj para cerciorarme que he llegado a la hora, entro al campo de entrenamiento y me encuentro con el general en jefe. -Naomi, llegas tan puntual como siempre, te esperan en el patio de despedida ¿traes todo? Asiento y me dirijo junto al general al patio de despedida, se le llama así por que es el más amplio de la base y aquí se velas los cuerpos de los que mueren en batalla. Esta Jiboa que es quien estrega las misiones y las fichas, se acerca al general y dice: -Se hace presente el comandante en jefe y Naomi Tukusama para la partida de la misión “vuelo invisible” pero para dar inicio se leerán las fichas con las muestras de las armas. Naomi saca su daga y el general unas pistolas, Jiboa las revisa y da inicio a leernos nuestras fichas. -Fudo Jakimioto, 57 años, hombre, rango 30, especialista en el manejo de doble pistolas, nombrado general en jefe y es el testigo. Naomi Tukusama, 14 años, Mujer, rango 15, especialista en el manejo de su daga y artes marciales, es quien realizara la misión.La misión “vuelo invisible” consiste en que te infiltres a territorio enemigo y encuentres a lo que definimos como un “dragón”. Me sorprendo, nunca se han equivocado al escribir una misión y conociendo a Jiboa se que no me toman el pelo.Lo miro con incertidumbre tratando de entender lo que dijo -Perdón pero creo que dijiste dragón y… aquello no existe… -Lose, enviamos algunos agentes antes que a ti, pero desaparecieron sin dejar rastro, lo único que llego fue una hoja de papel manchada de sangre en una paloma contando un brutal ataque de un dragón. Tememos que el enemigo tenga armas más fuertes que las nuestras, por eso te enviaremos a ti ya que creemos que te adaptaras bien en esta misión. -y ¿que quieren que haga? --Te enviaremos al mismo lugar que los otros agentes, lo que harás será averiguar sus muertes, encontrar el arma y si es una persona, matarla. El lugar es una escuela del territorio del Sur, el viaje será normal –fija su mirada penetrante en mi—no te confíes Naomi. Eso es todo. -el general se dirige a mi severo -no tengo porque decirte que esta misión es esencialmente importante Naomi, partirás ahora mismo, cumple con tu deber sin dudar. Fin del primer capitulo.
Hola! aquí de nuevo, espero que les guste y si les gusta ¡comenten! y sino ¡comenten igual! ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Colegio nuevo Llegé hasta el portal del instituto, (observe que era realmente mas grande que en los planos de la U.F.I.R.E.) al entrar me encuentro con una muchacha de ojos claros y dulces. Buenos días... tu debes ser la chica nueva ¿no? -- Si, me llamo Naomi. -- ¡Que bien! me llamo Akira y para tu suerte soy la encargada de dar las habitaciones a los estudiantes de 2 grado -- agarra un lapiz y unos papeles -- rellena este formulario y pásamelo después, tu pieza será la 333 en la primera torre. -- Gracias, ¿esos son nuestros uniformes? -- Casi lo olvido, toma este es el tuyo, son bastante bonitos -- Si claro, ¿cuando empiezan las clases? -- llegaste justo en tiempo de descanso, serán en una semana más, luego te veo ¿vale? Se fue casi corriendo, dejándome sola en lo que pareciera una sala de estar, con sillones y un escritorio cuadrado. <<donde rayos esta la primera torre y ¿como encontrare la habitación 333 sin siquiera saber el piso?>> me fui caminando por cualquier parte, buscando un ascensor o a alguien, de repente sentí que una sombra se desliza detrás mío, levante sutilmente mi polera para tener la empuñadura de mi daga a mano por si la necesitaba. Me giro para encontrarme con un chico de pelo rubio y vestido de uniforme. -- ¡Ey! ¿eres la chica nueva? -- Si, mucho gusto -- ¿Vienes a comer conmigo chiquita? -- ¡¿Que?! yo no... haay, yo solo busco mi habitación, está en la torre 1 pero... -- ¿Torre uno? pero estas en la torre tres y es la que lleva a la cafetería -- Creo que estoy perdida -- Bastante ¿cual es tu habitación? -- Mi habitación no te importa -- respondo malhumorada, sentía que perdía el tiempo con el -- ¿No te dijeron que no se habla con extraños? -- Ey, no seas tan agresiva... Me llamo Shiro Ahuno ¿ves que ya no soy un extraño? -- Naomi, ahora dime como llegar, es la 333 -- Ven mejor te llevo yo mismo, trata de memorizar el camino, es muy fácil perderse, Naomi No respondo, prefiero seguirlo, nos dirigimos hacia unos ascensores (nunca pensé que bien ocultos estarían) noto que el se mucho mas alto que yo. Tuvimos que doblar por muchos pasillos hasta llegar a la 333 -- Llegamos Naomi y... ¿No crees que merezco una recompensa? -- No, sinceramente -- Que chica mas dura-- mormura--bueno, por lo menos come algo conmigo, yo invito. -- No creo que... --Toco mis bolsillos al darme cuenta que no me dieron ninguna llave-- no tengo llaves... --Tranquila, soy el indicado para solucionar tu problema--saco un pedaso de alambre y lo metió en la cerradura, al momento abre la puerta la cual le responde con un crujido. --Ahora ¿me merezco un regalo? --Comeré contigo, nada mas --¡Que bien! nos vemos en dos horas mas, en la cafetería Ni siquiera se despidió, se fue con una sonrisa infantil y saltando de contento. Entre a mi habitación, contenía unos sillones en la esquina mas alejada, una mesita de luz al lado de la cama, un armario de anticuario y una mini-biblioteca. <<Que pequeño, hasta ya empiezo a sentirme a gusto>> sonreí, estaba acostumbrada a los espacios reducidos, en mi hogar (aunque sea solo de dos) no teníamos muchos recursos y mi tía Miranae solía decir <<A pequeño espacio, gran cobijo>> volví a sonreír al pensar en Fénix, mi casa. Miro el reloj y decido que tengo que empezar a instalarme, empiezo a tener hambre y la U.F.I.R.E no es muy conocida por mandar grandes cantidades de dinero, mas valía jugárselas consiguiendo un pequeño trabajo y lo mas importante conseguir información. ---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
HOLASSSS!! tanto tiempo, espero y agradezco que se hayan pasado por aquí a leer mi Fanfic. Un cordial saludo y muchas gracias!!! --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Estaba perdida entre lo millares de pasillos de la escuela, ya me sentía cansada de tanto caminar -a este paso terminare toda la tarde aquí- me dije mientras doblaba por otro pasillo. Trataba de hacerme un mapa mental de los caminos recorridos, pero me parecía imposible, recordaba que había bajado el ascensor hasta el primer piso, pero al doblar no podía recordar nada mas... Intento encontrar a alguien, pero creo que todos deben andar en otro sitio, veo desde la distancia un muchacho de espaldas con el pelo blanco voy corriendo hasta el cuando me detengo justo cuando se da vuelta. Nos quedamos mirando fijo durante unos instantes mientras le miro mas detenidamente su pelo es extremadamente desordenado y sus ojos son casi transparente con un toque verdoso. soy Huro-- se presenta soltando una cámara fotográfica profesional. lo miro de pies a cabeza, me parecía raramente sospechoso y no tenia pinta de ser otro chico colegial. usaba la camisa abierta dejando ver una polera ploma y sin corbata, sus zapatillas estaban gastadas, lo demás era normal excepto por las manchas de tierra que se esparcían en su pantalón. --Soy Naomi--digo mirándolo fijo a sus ojos. Me sonríe y se pone algo incomodo- ¿estas perdida verdad?-- Me sorprendo un poco, creo que el ya sabia que estaba aquí--¿Me seguías? --ha-a yo em... --Responde-- digo algo impaciente Sonríe y me dice--¿Es natural?-- La pregunta estaba dirigida a mi pelo --¿De que hablas?-- digo molesta. Toma un mechón de mi cabello y lo analiza entre sus dedos-- no se encuentra a menudo una chica pelirroja.. no, no es rojo es... -- --anaranjado--digo quitándote el mechón de mi pelo. Sonríe con naturalidad y se dirige hacia el otro lado del pasillo. --oye ¿ha donde vas? No he terminado de hablar contigo!-- --¿He? te diriges a mi? creí que estabas molesta.-- --Adonde te diriges?-- --Hacia la cafetería--me dice dándose media vuelta y camina hacia el final del pasillo--¿no vienes? --No-- digo al seco aunque se que sola no llegare, pero prefiero seguirlo a una distancia prudente antes que estar tan cerca de este tipo. Mi entras camino me fijo en su pelo y sin querer salta en mi una pregunta. --¿es natural?-- --Claro, igual que el tuyo- -¿Y tus ojos no son?-- --Soy 100% de carne, ni mas ni menos-- -- El color es...-- de repente fija su mirada en mi y puedo distinguir mas claramente el color transparente verdoso de sus ojos, lo que me deja inquieta es que me mira de una forma casi natural, como si ya me conociera. --Es de mala educación mirar fijo--digo apartando otra ves su mirada. --Y seguir también es de mala educación--me responde con una sonrisa sarcástica. Llegamos al rato a la cafetería. esta llena de mesas redondas y sillas de color rojo, al fondo hay unas repisas con paquetes de comida instantánea y a los costados hay de todo tipo de comida rápida o maquinas de café. Veo de lejos a Shiro que me saluda con la mano, a su lado había una chica con lentes y pelo corto -¡Hey Huro! ¡por aquí!-le grita la muchacha. Huro se acerca la mesa y se pone a conversar animada mente con ella.--¿Te quedas ahí o vienes a comer?--dice Shiro pasándome una bolsista color marrón. --toma, la cafetería deja de vender a esta hora así que le pedí a Mía que te la eligiera .-- --Espera... ¿ya se conocen?--dice Mía mirándome a mi y Huro. --Nos encontramos en el camino-- digo Huro me mira burlón y dice--Ella estaba muuuyy perdida, es más, casi llega al otro lado del colegio... --No estaba perdida--respondo de malas Shiro nos mira a los dos un rato y toma a Huro y a mi, dejándonos a la misma altura--¡hey! esperen un poco... ustedes dos... son... ¡chiquitos!-saca una sonora carcajada y Mia se ríe por detrás, Huro se pone rojo como un tomate y yo lo quedo mirando algo sorprendida de que se fijaran tanto en mi <<primero mi pelo, luego mi estatura, ¿que sera después?>> me saca de mis pensamientos las palabras de Huro. --Oye Shiro, ¿hoy hay Taller de pelea?-- --Ahora que lo pienso creo que si... y creo que es ahora... ¿sabias Naomi que Huro es genial en artes marciales?-- --¿a si? --digo mirando para otro lado. --Me ha ganado todas las peleas y hasta gano cuando peleo con el Profesor Ryusei.-- Shiro me muestra su brazo y agrega-- y eso que soy el mas fuerte del grupo. Pienso otra ves en mi casa, apuesto que lo que enseñan aquí no es mas que un juego de niños para mi. Pero creo que me equivoco.
Esta genial!! tienes que tener en cuenta unos pocos errores de ortografía, pero la trama esta genial y quiero leer el resto ¡ya! porque esta historia esta muuuuy interesante.
¡Gracias por detenerse a leer mi Fanfic!, espero que les guste. La clase de entrenamiento. —¿Naomi, quieres comer ahora o después?— me pregunta Shiro con cierta decepción.—Lo que pasa es que tenemos que ir a este entrenamiento... —Esta bien, no tengo tanta hambre, así que comeré luego.—En si realidad si me moría de hambre. Ha Shiro se le ilumina el rostro y me responde—¿Quieres venir?-- —Si, claro seria... interesante ¿puedo verdad?— —¡Claro que si-—dice Shiro con verdadero entusiasmo. —¡¿Entonces que estamos esperando?!— Sale Huro corriendo hasta la puerta de la cafetería—-Vamos chicos, ¡ya saben lo que pasa a los que llegan tarde! —¡Cierto!— dice Mía tomando la misma ruta que Huro —Apúrense ustedes dos, ¡Shiro! tu mas que nadie debes saber que esta ves no puedes llegar tarde... ¿O quieres otro castigo de pelea con el maestro? Ha Shiro se le oscurece el rostro y me toma fuertemente de la mano— esta ves tengo un As bajo la manga...—me mira y me ofrece una amplia sonrisa infantil— Pero aun así no hay que subestimar al Maestro, por lo tanto, Naomi, si me lo permites correremos un pequeño tramo ¿no te molesta? —Hamm.. nooo ¡Aaaaaa...!—nisiquiera espero a que terminara de contestarle, de un fuerte tirón me llevo casi volando por los pasillos del establecimiento. Paramos frente a una puerta deslizante junto a Nía y Huro, no se que estaban esperando, pero Shiro me aprieta mas la mano y me dice— Ryusei es nuestro Sensei, tiene cierta amabilidad con los nuevos, así que aprovéchate de eso ademas trata de parecer lo mas normal y ordinaria posible ¿vale? Abren la puerta de golpe y veo una cara conocida, era Akira —¡Aquí están ustedes tres! ¡¿saben cuanto tiempo se retrasaron esta vez?! ¡cuatro minutos con cincuenta segundos! eso equivale a cuatro sanciones y veinticinco trabajos escritos de historia sobre peleas callejeras, de aikijutsu, aijutsu, Jujitsu, Karate Pancration, Jogo do pau, kali, Arnis ... Shiro me levanta del brazo como si fuera una muñeca—Fuimos a preguntarle a la chica nueva si quería venir... Akira me mira unos segundos frunciendo el ceño, como si tratara de recordarme—¡Hola Naomi!, chicos.... se salvaron de esta, pero... si quieren hacen algunos informes... Akira habré mas la puerta deslizadera y nos deja entrar a un salón amplio, con ventanas al patio interior del instituto, también tenían algunas alfombras en los pisos donde se encontraban varios alumnos sentados en posiciones de loto. Las paredes estaban pintadas de blanco dándole un toque luminoso, parecía ideal para este tipo de clase. Pensé en lo diferente que se veía a la sala de entrenamiento de la UFIRE. El profesor Ryusei era un hombre alto y con grandes músculos en los brazos, llevaba un traje de entrenamiento, en su hombro un katana en su funda. Me di cuenta que cuando entre a la sala el no se encontraba en ella, aparentemente solo apareció ante nosotros, a nadie le impresiono esto así que me mantuve firme para no dar muestras de asombro. La voz grave pero suave del Sensei rompió el silencio. —Shiro esa es tu cuanta ves que llegas tarde, Mía es tu segunda, Bienvenida chica nueva y Huro no llevas corbata.— —¿Mi Corbata? no se de que me hablas Ryunsei, yo estaba seguro de habérmela puesto... Mire a shiro y le pregunte en un susurro. ¿No le dirá nada ha Huro por llegar tarde? Shiro me guiña el ojo y agrega— Quizás lo entenderás mas tarde—. me toma del brazo y me pone delante del Profesor Ryunsei —Hay que empezar con la tradición, ya sebes sensei, el que llega pelea.— —¡¿Que has dicho?! ¡No pienso pelear!— Digo realmente alterada. —¡Vamos Naomi, tu puedes!— me anima Mía Veo que todos me empiezan a animarme para que pelee, sinceramente podría acabar con todos, pero ¿valdría la pena? —Si no lo quieres hacer por ser mujer... Miro desafiante al chico que dijo eso, ¿conque vamos con esto? —Okey lo haré el profesor llevaba un pito en los labios, de esos que usan los entrenadores, pero y no recuerdo el porque se me izo familiar y aterrador a la vez, como si ya había vivido algo parecido. —Naomi, ponte adelante de Huro, el sera tu oponente hoy... —mira a este por unos momentos y menciona -Huro, ¿se amable por favor? Nos posicionamos en medio de la sala con todas esas personas mirándonos. Sonríe y me mira como si esto fuera pan comido. Me puse al frente de el y hice el típico saludo, en cuanto sonó el pito, empece a moverme. No sentí cuando entre en el trance solo sentí rabia, mucho rencor y que me hervía la sangre. No me di cuenta que mi mente estaba en blanco, ni menos que estaba viendo a otra niña, esta se defendía a mis golpes, tratando de protegerse la cabeza, escucho el pito por segunda vez y la agarro por el cuello, ella me mira suplicante y yo empiezo a apretarla de apoco, conteniendo la respiración como si yo fuera ella. --¡Ya es suficiente!-- Grita el sensei impresionado y sorprendido, de apoco aclaro mi vista y me doy cuenta que estoy encima de Huro... tomándolo por el cuello...
MUUUUUYYYYY BBUUUUEEEENNNOOOO!!!!!!!! Esta muy interesante, me muero por ver la cotinuacion pero te digo que esta bueno e interesante! Lo has hecho MUY BIEN!:):):):D
¡Oh! Tiempo sin escribir, espero que os guste. No me odien por escribir esto cada seis meses, pero entre en mi periodo de vacaciones, eso significa que podre dedicarle mas tiempo a mis historias. ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------- Comienzan las clases. ¿Naomi?— La chica de pelo anaranjado se encontraba mirando por un ventanal abierto par en par se giró quedando de frente a quien perturbaba el silencio que reinaba en los pasillos de la escuela.—la que viste y calza…—exclamo. Huro se aproxima a ella, en su cuello se encuentra su cámara fotográfica, siempre lista para la oportunidad de capturar una imagen. —¿Por qué estas despierta tan temprano?.. Son como... las diez de la mañana, a estas horas nadie está despierto y el sol apenas se distingue entre las montañas. —Solo vengo a ver el cielo Huro, creo que está demasiado despejado… Está demasiado tranquilo. —Naomi no mentía del todo, de hace tres meses que se encontraba en la escuela del sur haciendo una misión. Tres fastidiosos meses que no había conseguido ninguna pista que le permitiera saber sobre las misteriosas muertes de otros agentes del norte, donde por temas políticos las clases se habían suspendido durante casi todo el tiempo de su estancia hasta hoy en la tarde. Hace ocho semanas que habían dejado de enviarles mensajes aéreos de la U. F.I.R.E lo cual era grave, no tenia pistas, ni tiempo definido, las muertes no se relacionaban con nada de establecimiento y no se hablaba de eso, además el tiempo muerto tuvo que compartirlo con sus nuevos compañeros, en especial con el grupito de raros de Shiro, Mía y Huro. Se sentía inútil, la inactividad la aburría y pedía a gritos en su interior que algo la sacara de sus pensamientos. Se vio arrancada de su mente por el flash de la cámara.— ¡Que no me saques fotos así!—Grito molesta Naomi al no percatarse de los movimientos de su compañero. —Lo siento, es imposible…— Naomi intento agarrarla pero Huro fue más rápido y la esquivo. --Te propongo algo, si me atrapas te dejo que borres todas las fotos que tengo tuyas.—Huro levanto las manos en alto y ofreció una sonrisa picara. —¿Y si yo pierdo?—Naomi cruzó los brazos, la oferta resultaba tentadora, pero por lo mismo debía de tener un precio. —Es una sorpresa… Lo aceptas o no. --Está bien, pero yo ganare. —La confianza relucía en el rostro de la chica con ojos color Mandarina. —Eso lo veremos—Huro salto por la ventana con habilidad felina y de inmediato se afirmo del primer árbol que tuvo a su alcance. — ¡Te espero abajo! La muchacha quedo impresionada, la agilidad de aquel chico era muy sorprendente, no le tomó importancia y puso en marcha la manera de bajar rápido antes que Huro se le escapase. Calculo que estando en el tercer piso una caída, como lo que hizo Huro, era demasiado arriesgado, pero si lograba llegar a la segunda planta podría encontrar otra forma menos peligrosa. Se aseguro que la ventada que queda bajo estuviera abierta al igual que esta y se trepo por el muro afirmándose del alfeizar, se soltó de las manos haciendo equilibrio por unos segundos con los pies sobre la muralla. Las manos se deslizaron junto todo su cuerpo con el roce de la pared lisa, en segundos se agarro del marco de la otra ventana se sentó sobre esta y decidió en buscar un árbol delgado pero fuerte. Lo encontró a dos metros de ella, se incoó y salto hacia él se afirmó con las manos de la copa del árbol el cual se inclino hacia abajo. Antes que las ramas se rompiesen Naomi se soltó con tan solo pocos metros que la separaban del suelo cayó de pie sin ningún rasguño con una sonrisa triunfal, la ramas seguían oscilando y Huro le aplaudió por el espectáculo y sin nada que decir se lanzó en carrera por los bosques que rodeaban a la Escuela. —¡Espera!—Corrieron entre arboles de pinos, arbustos de moras que dejaron el uniforme rasguñado y rocas de tamaños irregulares que prometían ser la trampa para el torpe. De vez en cuando encontraba robles o manzanos, Huro llevaba ventaja por su claro conocimiento del lugar, Naomi le seguía los pasos pendiente de recordar el camino y no perderle de vista. Ya llevaban unas cuantas horas persiguiéndose cuando Huro se detuvo—Desde aquí termina los terrenos del instituto—Naomi no vio ninguna señal que delimitara el terreno. — Mas allá de este punto es terreno desconocido para mí. —¿Cómo sabes que aquí termina? No veo ninguna señal—observó Naomi. Huro se encogió de hombros—Instintos… Supongo—Apunto al este y oeste con las manos. —Es un cuadrado, cuatro hectáreas que pertenecen al Director, en este minuto estamos en el lado suroeste a tres metros de la línea que divide en dos al terreno. —Me vas a decir que es también tu instinto ¿no?—Dije con un tono irónico. —En realidad no, ayer estaba dibujando planos aquí y se me callo mi lápiz—Huro hurgo entre las hojas y saco una pluma manchada de tinta ya seca. No reprimí la risa, debía de aceptar que me había hecho creer que tenía una brújula mental. —Te vez bien cuando no estás seria—Me callé de inmediato, me sentí algo avergonzada. Huro noto mi cambio de actitud y sacó sus planos, que estaban meticulosamente dibujados la vista aérea de toda la escuela, dentro de algunas salas, partes del bosque y el patio interior del establecimiento, las hojas de los arboles, las piedras las bancas de los patios y los pupitres rayados de las salas estaban ahí cuidadosamente plasmados en el papel, sin olvidar ningún detalle tan así que en algunas mesas se podían ver cuadernos con apuntes y lápices recién afilados, en los arboles se encontraban minúsculas aves descansando en las ramas. Me las quede mirando por unos momentos--Eres muy bueno, entonces ¿Para eso son las fotografías que sacas?— le dirige lanzándose una mirada inquisitiva. El solo me sonrió, sus ojos mostraban un tinte verdoso, pero sin dejar de tenderse al blanco transparente. Las fotos son un hobby, dibujo esto para mi tío… ¿No se te olvida algo, Naomi?—La pregunta me devolvió al asunto que me había traído. Estire la mano para que me entregase la cámara. —No ganaste—Dijo él con un tono burlesco que me sacaba de las casillas. —Tu tampoco—El levantó las manos, ninguno de los dos había ganado o perdido la apuesta, yo podía seguir corriendo detrás de el todo el día hasta atraparlo. —Conozco demasiado bien el lugar y tú eres muy persistente, mejor lo dejamos para otro día. —Lo mire fijo, pero en fin de cuentas ¿Qué daño me hacia unas cuantas fotos en un lugar olvidado del sur? —Está bien…—Huro me tomo del brazo y retomo otra ruta distinta con la que habíamos llegado.—¡¿A dónde crees que vamos?!— no pude disimular el tono alarmado de mi voz. —Tengo hambre, así que iremos a la cafetería Shiro se lleva bien con las cocineras le dijeron que hoy darán Fideos con verduras. ¿Así que para que perdérselo?—Me sentí algo aliviada devolví mi mano que involuntariamente se había aferrado al puño de la daga. —¿Fideos con verduras?—Mencione con poco entusiasmo. —Exacto, muy ricas verduras…— -------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Debo admitirlo... me enamoré de Huro... Está muy interesante XD tenes que seguirla ¿por favor? Hay un par de errores de ortografía por aquí y allá, pero yo no soy muy buena en ello y no me atrevo a señalarlos ._. Como siempre, Rosée, lo que escribís me interesa demasiado, y si no lo continuas voy a enojarme >:/ y por último, solo espero que tenga un final feliz... ¿lo harías? ¿por mi? :3 Sea como sea, espero que me avises cuando sigas, está genial. Aixa-chan, fuera~