Bueno, este fic será de pequeños Drabbles, contando un poco de Coraline, una chica que espero les agrade con el paso del tiempo. Espero y les guste ya saben, sus comentarios son bien recibidos. Gracias por leer. § Cartas a la muerte. §Marzo de 2016Querida muerte, me pregunto ¿Cuándo acabaras con esto?, ¿no crees que ya es suficiente sufrimiento?, ¿tan mala persona soy qué merezco sufrir?. Si tan sólo pudieras sentir ese desprecio creo que te pondrías en la lista para ser la primera en morir. Querida muerte, cada noche sollozo en la inmensa oscuridad mi sufrimiento. Cada día muero un poco más no sé qué esperas para ya acabar con esto. Querida muerte te espero. Atentamente: yo Suspire pesadamente mientras guardaba aquella pequeña carta en una cajita de color negro, con el filo metálico, era regalo de él, cada día dolía guardar una carta nueva en esa caja. Eran recuerdos que mataban cada momento. ―Vas a llegar tarde. —Voy... —no podía ver más allá de lo que mis ojos querían mostrarme, yo simplemente me hundía en mi abismo, mi cuarto era sólo y frío, aunque todo estaba en su lugar simplemente ese cuarto no era mío, no lo sentía como tal. Me alise mi cabello y me puse las tobilleras a donde iban, era cansado ir todos los días a la práctica de música ―, no sé para qué rayos me piden que lleve uniforme ―me miré al espejo y no vi nada más que una chica que sonreía. ―¡¿Sí escuchaste?!, ¡Vas a llegar tarde! ―"¡¿Sí escuchaste?!, ¡Vas a llegar tarde!" ―Arremede a mi hermana era molesto escuchar lo mismo todos los días ―Ya te conteste que voy. ―salí a paso lento de mi cuarto y detalle como siempre las fotos que se encontraban en el pasillo. Eran las mismas, todo era lo mismo, era monótono ver eso, hasta la pequeña araña que estaba en la esquina del cuatro de mi hermana se encontraba ahí como si esperara que fuera a pasar. ―Deja de perder el tiempo en nada, vamos... ―escuche la torpe voz de nuevo de ella, mi querida hermana llamada Sofía no dejaba de molestarme ―. ¿Coraline? ―Ya estoy lista ―gire mi cabeza y la vi con sin ánimos de nada, sabía que no me gustaba ir pero ella a fuerza me metió para que yo no la molestara. ―A veces no te entiendo Cora ―baje un poco mi cabeza mientras tomaba el estuche de la guitarra, vi a mi hermana verme unos segundos, simplemente pensé "¿Qué esperas de mi?" la mire a los ojos y el silencio reino entre nosotras, ya era común pasar por esto cada tarde. Camine un poco pasando a lado suyo y como siempre, cerca de la entrada se encontraba la pequeña foto boca abajo, a ella le molestaba. Negué con mi cabeza un poco y volví a ponerla como era, viendo la entrada. ―Sabes que me molesta que hagas eso... ―le dije mientras la veía de reojo y salía de la casa, cerrando la puerta fuertemente. Los espero en el próximo capítulo.
¡PUF! Palabras durísimas para la señora Muerte, esta frase me quitó el aliento. El capítulo en general lo encuentro bien estructurado y no tuve problemas para detectar la manera en que se desarrollaron las escenas. El título de por sí ya me resultó atractivo para que, de momento, me puedas recibir en la próxima entrega, porque tengo interés por saber el rol que van a cumplir las susodichas cartas y ponerme al tanto sobre la persona que regaló la caja negra a la protagonista. Pero sobre porque también me intriga el desarrollo de Coraline, cuyo nombre, por cierto, me remite a una película de Tim Burton :P. Así, te expreso mi apoyo para actualices pronto. Lo que te voy a señalar, aunque sin necesidad de citar, es que hubo mucha ausencia de tildes, sobre todo en los verbos en pretérito. Recomiendo que realices una re-lectura minuciosa de lo que vayas a escribir, con el fin de corregir cualquier error que, por mínimo que sea, vaya a quitarle cuotas de encanto a tu relato :P. Los demás aspectos de creación, como la trama, el personaje, el manejo del narrador en primera persona, no necesitan ningún señalamiento (de todas formas, ¡no los descuides!) ¡Saludos! Nos vemos en el próximo capítulo.
Bueno, creó que tarde mucho para la conti, pero no se me olvida este fic, por alguna razón quiero continuar, no tengo nada planeado, simplemente es lo que sale en el momento, gracias por sus comentarios c: Sin más que decir, les dejo la continuación~ Abril 2016Querida muerte, cada día es lo mismo, te lo pido por lo que más quieras, ven por mí. Cada mañana es un sufrimiento despertar, yo ya no quiero esto, por favor ven. ¿Qué esperas? Yo que te estoy entregando mi alma y tú no vienes. Es que... Sólo piensas en ti, te gusta ver sufrir, eso lo sé, pero ya es suficiente. Que-Querida muerte, como cada día te espero. Atentamente: Coraline. Eran las seis de la mañana de aquel Lunes de Abril, no quería despertar, simplemente la ilusión moría al verme otro día más con vida. ¿Por qué simplemente no puedo quedarme dormida y ya?, pero no, lo único que haces que muera es la ilusión. ―Ya es tarde, levántate para ir a la escuela Cora... ―vi la puerta de mi cuarto abrirse un poco, ¿qué nadie sabe leer?, ahí hay un letreo que dice muy claramente no entrar, no abrir y se pasan el letrero por un tubo, siempre es lo mismo. ~ Horas más tarde~ ―¿Cora?, ¿Trajiste la tarea? ―Carajo, me maldigo mil veces, sabía que algo se me olvidaba, lo sabía algo sentía, ese algo era la cochina tarea, suspire pesadamente y vi el rostro de mi amiga quien me observaba con tristeza, ella ya se imaginaba que había olvidado la tarea. ―¿L-lo siento? ―Me disculpé casi preguntando, ella sólo dio la vuelta y se marcho ―, que más da. ~De regreso a casa~ Era fácil que me perdiera en mis pensamientos de regreso a casa, normalmente me iba sola, desde ese momento... Todo cambió para mi desde ese momento. ―Hola hermosa, ¿quieres que te demos un aventón? ―Unos tipos que se creían unos galanes se acercaron lentamente en su ¿carro?, no sabía que era un carro o no, pues era viejo y feo, él chico que me hablo tenia aproximadamente unos 20 años, portaba una playera que lo hacía ver malo y unos grandes, muy grandes lentes de sol su cabello largo y alborotado, un bigote negro que lo hacía ver viejo. Simplemente hice una mueca y seguí mi camino, no preste atención a lo que decían y por un rato ellos me siguieron, yo simplemente me perdí en las líneas de la música que venía escuchando. Después de un rato y sin fijarme llegue a ese lugar, mi respiración se aceleró y mis piernas comenzaron a falsear. ―Di-diablos ―lleve mi mano a mi pecho tratando de calmarme, tantos recuerdos me traía ese lugar, como no me fijé que venía hacía acá, los recuerdos comenzaron a llegar como bombas... "―Cora, vamos que no te puedo ganar, se supone eres mejor que yo ¿no?..... ¡Cora! ¡Corre!...¡Tienes que salir de aquí ahora! ―Basta, basta, ¿qué hago aquí?, esto... Esto ya lo viví. ¡Ya! ―Grité desesperada y regresé de esos recuerdos, la gente me miraba raro, yo simplemente corrí alejándome de ahí. ―¿Por qué a ti?... ¿Por qué? ―al momento que llegue a mi casa, fui directamente a mi cuarto y comencé a llorar de nuevo..