Contenido oculto: Importante~ ➤Este escrito está participando en la actividad "Un Valentín Diario". ➤Esta historia es un UA para los personajes de un colectivo propio. ➤Este tipo de escritos carecen de una trama concreta. Son solo situaciones sueltas. Pd. tengo tantos problemas para las etiquetas del escrito, lo siento si hay inconvenientes. Noah nunca había experimentado esa sensación en el estómago, como un ardor horrible mezclado con ganas de vomitar. Noah nunca había sentido tantas ganas de llorar, de gritar, de aferrarse de su cabello y preguntarse el por qué… ¿qué hizo mal? ¿Merecía acaso eso? Llegó a su casa con el corazón roto y todas las fuerzas que tenía cuando quería gritar, abandonaron su cuerpo. Se sentí como una bolsa de escombros, todos los desechos dentro de él. Caminó pesado hasta su cuarto, ni siquiera se preocupó por quitarse la ropa sudada, se tiró directo a su cama y se envolvió en un montón de mantas, y ahí se dejó morir un poquito más. No era normal que doliera tanto, ¿no? ¿Acaso estaba exagerando? Pero era tan serio lo que sentía, que se permitió dejarse llorar. No supo cuánto tiempo, ni cuando llegó su hermano mayor, pero de repente sintió los brazos de este rodeándolo, preguntando el porqué de sus lágrimas. –Él... –hipó con dificultad cuando por fin se descubrió de las sábanas, y se pegaba más al cuerpo de su hermano, que lo consolaba con pequeños toques –, él me dejó–rompió de nuevo en llanto, aferrándose al cuerpo de Cam, sintiendo los músculos tensarse bajo su propio cuerpo. Cam permitió que Noah llorara esa noche en su regazo, lo consoló con caricias suaves hasta que se durmió; le dio su espacio para su duelo, y lo acompañó en todo momento, no permitiendo que se sintiera en ningún momento solo. Cam salió suavemente de la cama que había estado compartiendo con su hermano menor, procurando que el chico quedase bien cubierto antes de ir a vestirse. Se puso una sudadera suelta y una camisa de deporte, salió de la casa estirando un poco su cuello y haciendo tronar los huesecillos de sus dedos, con la mirada firme en el camino que ya sabía de memoria. Había permitido que Noah viviera su primer despecho y sabía que este no sería el último que tendría, pero al menos sería el último con ese desgraciado que se había hecho llamar “su novio”. Tocó a la familiar puerta de madera, y esperó paciente dando un paso atrás, sonriendo con malicia cuando la cara pálida del exnovio de su hermano apareció por la puerta, sin darle tiempo de cerrarla de nuevo. –Hola, Mike, creo que tú y yo tenemos asuntos que discutir.
Me encanta cuándo me dejan a la imaginación lo que pudo haber pasado con él. Ah, una satisfacción de conocerte y saber lo que pudo pasar. Decir pobre Noah, sonaría algo a debilitarlo, y más bien es un sentimiento de empatía con él. De por qué tuvo qué... pero es parte de vivir, es normal. Con un hermano como Cameron es más que suficiente para que quién te rompió los sentimientos, se le rompan ciertas partes nobles que de seguro no necesitará más. (◕‿◕) Gracias por compartirlo, me encantó.
