Kengan Ashura [UVD 2.0]And the blood you bleed is just the blood you owe.

Tema en 'Fanfics de Anime y Manga' iniciado por Eternatus, 14 Febrero 2020.

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    Eternatus

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    Escritor
    Título:
    [UVD 2.0]And the blood you bleed is just the blood you owe.
    Clasificación:
    Para adolescentes maduros. 16 años y mayores
    Género:
    Drama
    Total de capítulos:
    1
     
    Palabras:
    625
    Escrito #7 para la actividad Un Valentín Diario 2.0. No puedo dejar de escribir Kengan Ashura/Omega, los feels son demasiado. Más después del capi de ayer (que hace que nada de lo que escribí sobre KA/KO tenga sentido, pero no pasa na xD).

    Este escrito está situado después del capítulo 50 de Kengan Omega, aunque no creo que haya spoilers. Los taggeo igual just in case.

    Día 14: Para/sobre el amor.

    The blood you bleed is just the blood you owe
    Rojo.

    Rojo es lo único que puede ver. Es sus manos, en su sangre, chorreando de sus heridas, en los cuchillos clavados profundamente en su piel. Rojo en el suelo, en las paredes, rojo salpicando los rostros de sus asaltantes.

    La muerte, entiende entonces Koga, es rojo.

    La inconsciencia amenaza con llevárselo demasiado pronto, pero el luchador se resiste. Si cierra los ojos está muerto. Si no consigue parar las múltiples hemorragias, está muerto.

    Si no mata a sus enemigos, está muerto.

    La parte fría y racional del hombre entiende esto, pero su moralidad se interpone entre él y su propia supervivencia. ¿Cómo podía ir por ahí predicando que matar estaba mal cuando él mismo recurría a tan aborrecible acto cuando estaba contra la espada y la pared?

    Piensa en ellos como insectos y será más fácil. Eso es lo que dice el abuelo.

    Koga grita cuando un cuarto cuchillo le atraviesa, esta vez en la baja espalda. Unos centímetros a la izquierda y le habría atravesado la columna.

    Ah, ¿tú piensas que son humanos?

    El luchador intenta mantener la calma, pero su mente lo bombardea con las palabras de Ryuki. Al borde de la inconsciencia e incapaz de concentrarse, las palabras de su amigo empiezan a tomar sentido.

    Los maté porque estaban en mi camino.

    Narushima siente como bilis sube por su garganta, pero contiene la arcada. La negrura en su visión lo cubre todo cuando los cinco hombres se lanzan sobre él, y Koga lanza el cuchillo que tenía clavado en la pierna. Acertando sin tener que comprobarlo.

    Podía no haberlos matado.

    Sangre le salpica en la cara y fuertes brazos detienen su caída. El olor es familiar, y Narushima presiona su rostro contra la fuente de calor. Un pitido impide que escuche con claridad, pero el luchador cree escuchar los gritos del hijo de Yamashita, ¿pidiendo ayuda, tal vez?

    Unas manos cubiertas de durezas, no diferentes a las suyas, toman con delicadeza su rostro, y Koga se obliga a abrir los ojos para encontrarse cara a cara con la mirada preocupada de su mejor amigo. Su corazón, que se había relentizado hasta niveles preocupantes, da un salto, y su ritmo finalmente se acelera. Gaoh Ryuki le afectaba demasiado.

    Los labios del de gafas se mueven, pero Koga no puede escuchar nada. El joven se obliga a fijar la vista en los ojos de su amigo, sabiendo lo que encontraría si se atrevía a mirar a su alrededor. Las manos de Ryuki se sienten pegajosas y húmedas, pero Narushima se obliga a no pensar en ello.

    No en los 4 cadáveres a su alrededor.

    No en el hombre al que había clavado a la pared con un cuchillo en el cuello.

    Sólo en Ryuki y en lo jodidamente mal que estaba amarlo. Nada más.

    (No en cómo acababa de tomar su primera vida, no en cómo Ryuki lo sostenía, aún manchado de la sangre de los muertos a su alrededor. ¿Cuándo se había perdido a sí mismo de tal forma?)
     

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