Amistad verdadera

Hola, ¿cómo están? Para los que me conocen saben que soy la escritora del fic 'Sígueme' actualmente en proceso x'D. Bueno, este fic fue basado en un sueño que tuvo una amiga. Cabe aclarar que no soñó precisamente con los personajes de Naruto x'3. Y sí les parece muy loco o cursi, bueno lo siento, a mí me gustó para hacer un one-shot. Y por favor, no piensen que es un SasuHina. Los personajes no me pertenecen a mí, si no que a Masashi Kishimoto-sama. Espero que lo disfruten...

Amistad verdadera.​

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Era de casi de noche, el sol casi se ocultaba, el viento hacia mover las hojas de los árboles. Había cuatro amigos sentados en una banca, que se encontraba en un pequeño parque. Una de las dos chicas, estaba sentada al lado de su amigo de cabellera rubia, el cual no paraba de reír con los chistes que él mismo decía. Ella al estar cerca de él se pone muy nerviosa, y tiende a sonrojarse para luego hacer un juego con sus manos en señal de nerviosismo.

―¿Hinata te sientes bien? Te noto algo sonrojada, pareciera que tienes fiebre. ―pronunció su amiga Sakura Haruno preocupada. Hinata, asintió rápidamente.

―Descuida, Sakura-san. ―respondió con una sonrisa. Sakura le correspondió, para luego mirar al chico que tenía al lado. Sasuke Uchiha, estaba serio y con mirada serena hacia los árboles mientras que el viento movía sus hebras azabaches. Sakura debía admitir que siempre sintió algo hacia él, desde el día en que lo conoció en la preparatoria, cuando lo vio allí sentado y con mirada fría y que para su suerte, Naruto se lo presentó. Y desde ese día, ha compartido grandes momentos como su amiga, y estaba feliz por ello. Pero también le gustaría mucho que él dejara de ser tan frío y cortante, como suele hacerlo. El sol estaba cayendo entonces Sasuke se fue corriendo de repente, dejando a Naruto, Sakura y Hinata helados.

―¿Qué fue eso? ―preguntó sorprendido el rubio.

―No sé. ―respondió Sakura confusa. Hinata negó con su cabeza, indicando que no sabía que pasaba.

―Creo que debemos irnos a nuestras casas, ¿de acuerdo? ―comentó la Haruno. Los otros dos asintieron, y luego se despidieron y se marcharon para sus casas. Hinata era la que vivía más cerca del parque, entonces no le tomaría mucho tiempo llegar. Estaba caminando en la esquina de una calle, que estaba alumbrada por luces en las columnas. Estuvo caminando unos pocos pasos hasta observar que había una silueta muy familiar para ella…decidió acercarse lentamente hasta allí para observar a Sasuke, mirando la luna.

―¿Sasuke-kun? ―pensó. Observó como Sasuke se sentaba en una roca que había allí, pero su forma de sentarse, era como una silueta de un gato. Luego de unos momentos, la imagen de Sasuke se empezó a oscurecer, le salieron unos finos dientes, y unos leves bigotes― ¿Qué significa esto? Sasuke-kun… ¿acaso es un gato? ―pensó confundida. Pudo observar como Sasuke se dio vuelta y observó a Hinata. Este se bajó de la roca donde estaba sentado, y se acercó a ella― ¿Sasuke-kun? ¿Q-Qué eres?

―Yo estoy, digamos, ‘hechizado’. Como verás, por las noches yo me convierto en una especie de gato. ―comentó un tanto deprimido.

―Entonces…es por eso que te ibas cuando estaba por llover, y antes de que el sol se ocultara… ―dedujo. Sasuke asintió― ¿Hay alguna cura?

―Sí, pero ni yo sé cuál es. Lo único que sé, es que estoy cerca de mi muerte. Este hechizo hace que mi vida se acorte, me queda prácticamente una semana de vida.

―No puede ser… ¿Quién más sabe de esto? ¿Sakura-san? ¿N-Naruto-kun? ―preguntó. Sasuke negó con su cabeza, dejando confundida a la azabache.

―Nadie sabe de esto, y tampoco tenía planeado que tú me descubrieras. ―explicó. Hinata pronunció un ‘ah’ aun paralizada por tal noticia.

―Sasuke…-kun. ―susurró deprimida. Sasuke se fue del lugar, y Hinata quedó pensativa allí. Decidió volver a su casa y dejar ese tema atrás. Se recostó en su cama, pero vio que había una especia de ‘carta’ en su ventana, ella se acercó rápidamente y la abrió.

No digas nada a nadie sobre mi secreto.

Sasuke.

Hinata guardó la carta en una pequeña caja, y luego se decidió dormir.
Así pasaron los días, Sasuke se fue distanciando de los chicos lo cual a Naruto y Sakura les preocupaba. Hinata pasaba con él por las noches, acompañando a su amigo en su lento sufrimiento. Finalmente se completó la semana. Sakura y Naruto estaban sentados allí riendo, mientras que Hinata estaba con un semblante triste. Ambos amigos se percataron de eso.

―¿Hinata pasa algo? ―preguntó preocupada Sakura. La azabache negó con su cabeza.

―No es nada. Chicos, me tengo que ir. ―pronunció al ver que se estaba formando la noche. Salió corriendo de repente yendo por la esquina en donde se encontró con Sasuke y descubrió su secreto más sagrado. Y allí lo vio, tirado en el pasto tocando su pecho. Hinata se acercó rápidamente y lo sostuvo con sus brazos.

―¿H-Hinata? ―pronunció con dificultad. Luego sonrió algo arrogante― no era necesario que vinieras.

―Claro que sí. ―pronunció con lágrimas escapándose de sus ojos― Estas muriendo, y yo no puedo hacer nada. ―siguió derramando lágrimas que caían en el rostro y pecho del azabache.

―Hinata, n-necesito un favor ¿Puede ser? ―preguntó. La azabache asintió rápidamente y escuchó atentamente al Uchiha.

―Dile a Sakura…que la amo. ―susurró con dificultad. Hinata se sorprendió ante tal noticia.

―¿Qué? Pero…debes decírselo tú. Ella también te ama, Sasuke-kun, por favor…no mueras, amigo. ―siguió derramando más lágrimas. Que seguían cayendo en su pecho― Quiero que seas feliz estando con ella, y estando con tus amigos, N-Naruto-kun y yo.

―Ahora que recuerdo…tú amas a Naruto… ¿Verdad? ―preguntó casi en susurro. Hinata se sonrojó levemente, y Sasuke rió de ello― Tonta, ¿qué haces perdiendo el tiempo? El dobe también te ama a ti. ―Hinata abrió los ojos sorprendida. Sasuke tosió, liberando un poco de sangre. La joven de orbes perla seguía derramando lágrimas, las cuales continuaban cayendo en el pecho y rostro del Uchiha. Finalmente, Sasuke cerró los ojos. Hinata no sabía qué hacer, estaba devastada. Sasuke, su amigo, acaba de morir por culpa de un hechizo que le hizo una persona desconocida.

―Me pregunto… ¿cuál era la solución para evitar tú muerte? ―se preguntó aun derramando lágrimas. Dejo a Sasuke en el piso y se las secó.



Sakura sintió un fuerte dolor punzante en su pecho, estaba aún sentada con Naruto en aquella banca.

―¿Sucede algo Sakura-chan? ―preguntó el Uzumaki.

―Sentí un dolor punzante, en mi pecho. ―pronunció confundida, mirando el piso― Tengo un mal presentimiento de todo esto.

―Ahora que lo dices, yo también tuve una leve molestia, es como si algo malo acaba de pasar. ―mencionó con un tono preocupado.





Hinata se marchó del lugar, dejando a Sasuke allí. Debía ir a contarles a sus amigos lo sucedido con el Uchiha. No podía llevarlo hasta allí, o sino la gente sospecharía cualquier cosa. Al llegar, se acercó a Sakura y a Naruto, los cuales al verla derramando intensas lágrimas se preocuparon.

―¡¿Hinata que pasa?! ―preguntó Naruto exaltado.

―¡Sasuke-kun ha muerto! ―exclamó derramando más lágrimas. Sakura y Naruto se quedaron helados al escuchar eso, pasaron unos minutos hasta que Sakura se tiró de rodillas al suelo y empezó a llorar. El Uzumaki empezó a derramar finas lágrimas…esa noticia…es muy repentina.

―¿Cómo? ¿Cómo fue que paso? ―exigió saber el rubio. Sakura estaba helada, pero aun así quería escuchar esa respuesta.

―Él…tenía un secreto. Algo que nosotros nunca supimos, hasta que yo lo descubrí. ―mencionó. Naruto no entendió bien.

―¿De qué hablas?

―El, estaba hechizado. Por las noches, se convertía en una especia de gato. Y debido a ese hechizo, su vida se acortó. El día que descubrí esa noticia le quedaba una semana de vida. ―explicó en sollozos. Naruto lo único que hizo fue abrazarla y derramas más lágrimas. Luego se separaron, dejando a Hinata sonrojada― Yo…quiero que vengan conmigo, les mostraré donde esta Sasuke-kun.

―Vayan ustedes, yo no iré a ver el cuerpo de Sasuke-kun. ―respondió casi en susurro la Haruno.

―Sakura-san… ―pensó la azabache, luego recordó el favor que le pidió Sasuke― Sakura-san, Sasuke-kun en realidad….

―No quiero que me hables de Sasuke-kun ahora, Hinata. ―interrumpió la joven de hebras rosadas. La azabache asintió, Naruto le pidió que lo llevara hasta allí y esta accedió y se fueron corriendo del lugar.
Al llegar allí, notaron que Sasuke no se encontraba en su sito lo cual Hinata se sorprendió.

―Hinata, ¿estas segura que aquí estaba Sasuke?

―S-Sí, de verdad… ―respondió Hinata segura de ello― Me pregunto, ¿qué habrá pasado con el cuerpo de él? ―se preguntó. Naruto y Hinata se quedaron observando el lugar, muy deprimidos.



Sakura se secó las lágrimas, y resignada se levantó. Para su mala suerte, empezó a llover. Y como no tenía paraguas no podía cubrirse de la lluvia. De repente sintió que un paraguas la cubrió, miró hacia atrás confusa y observó a Sasuke allí.

―¿Sasuke-kun? ―pronunció sorprendida. Sakura quedo frente a frente al azabache, y se formó un tenso silencio. Luego de eso, Sasuke besó de sorpresa a la Haruno. Luego de besarse por unos minutos, se separaron por falta de aire― ¿Cómo? Hinata…ella me contó que tú…

―Al final, descubrí que la cura era las lágrimas de una amistad verdadera. ―interrumpió. Sakura no entendió hasta que comprendió que Hinata estuvo presente en la muerte del Uchiha.

―¿Hinata te salvó?

―Sí, Hinata y Naruto son mis amistades verdaderas. Y tú eres mi amor verdadero. ―respondió― Sakura, puedo ser cortante y sé que este tipo de palabras no van conmigo, pero déjame decirte que, te amo. ―Sakura recordó en ese momento cuando Hinata le quiso decir algo de él, pero la había interrumpido, entonces pensó que se trataba de ello.

―Yo… ¡Yo también te amo Sasuke-kun! ―exclamó sonrojada, para luego tirarse a los brazos del Uchiha. Se quedaron allí abrazados mientras la lluvia seguía.
Al día siguiente, Sasuke les explicó a Naruto y Hinata por qué seguía vivo.

―Gracias al cielo que sigues con vida, Sasuke-kun. ―comentó la azabache con una sonrisa. Naruto asintió con una gran sonrisa.

―También soy muy feliz junto a Sakura. ―mencionó mirando a Hinata, la cual sonrió― Por cierto, ustedes tienen que hablar. Tú ―señaló a Hinata― sabes de lo que hablo. ―finalizó para luego irse de la mano de su novia, Sakura.

―No le entendí ¿Qué quiso decir el teme? ―comentó el rubio confundido. Hinata se sonrojó.

―N-Naruto-kun, quiero decirte que, yo, pues… te amo. ―confesó finalmente roja a más no poder. Naruto quedo quieto, sorprendido. Luego sonrió.


―Hinata-chan, ―comentó acercándose de a poco al rostro de la Hyuuga. Esta enrojeció aún más― ¿sabes? Yo también te amo. ―contestó con un leve sonrojo. De a poco se fue acercando a los labios de la azabache para finalmente unirlos y transformarlos en un lindo beso. Más alejados de ellos dos se podía ver a Sasuke con Sakura, ambos sonriendo ya que sus amigos finalmente confesaron sus sentimientos, y porque al fin son novios. Y así pasaron los días, en que las dos parejas pudieron ser felices al fin, juntos. Y Sasuke, que en un momento antes de todo lo que pasó, dudó de que ellos fueran en realidad sus verdaderos amigos, finalmente se dio cuenta de que en realidad, son una amistad verdadera. Y finalmente puede ser feliz junto a su amor verdadero.

Fin ~


Aclaración: Pasó todo muy rápido, porque en el sueño de mi amiga también paso todo muy rápido, trate de alargarlo un poquito más. Es mi primer One-shot. Espero les halla gustado y dejen su opinión. Dejaré unas preguntas...

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