Bueno hace poco he escrito este fanfic que en realidad es yaoi pero como es propio he decidido de cambiar la tematica de homosexual a hetero :3 jeje bueno espero que les guste... les dejo un resumen pequeñito de la historia mas un capitulo que explica mas o menos como serán las cosas por aqui... un beso y que disfruten!! (al ser un fanfic que cambiare las terminaciones de hombre a mujer puede que tenga algunos errores, de ser asi les pido que me lo hagan saber; de esta forma podré corregirlos. Gracias!) (si, ya se... soy re pesada con las aclaraciones, pero son necesarias jeje, les cuento que si ustedes buscan en internet el fic lo podran encontrar y podrán notar que hay frases que cambian ya que el original es TWC jeje) RESUMEN: (chiquito chiquitito jeje) Ella lo ama, pero sabe que es imposible. Alejarlo? una opción, quedarse a su lado? Imposible, sería nada más que problemas... Pero sabe que su amigo no le dejará irse tan fácil, se conocen, son libro abierto el uno al otro... entonces... Cómo?... ‘‘-Fácil!- respondió su conciencia. -No te entiendo- se habló a si misma. -Has que te odie... O mejor... ódialo-’’ Capitulo 1: Almost... Casi... Almost Human. (Casi humano) Era diferente, sus rasgos eran suaves y finos. Sus manos eran delicadas y su piel… su piel era tan blanca como la nieve, y tan dorada como sus ojos, delineados por una, nada modesta, curva de delineador negro. Sus largas pestañas se alzaban suaves y arqueadas en la punta, dándole un efecto delicado. Sus labios eran pequeños y rosados, tan apetecibles a la vista de cualquier ser humano. Pero ella no era una humana común, es más, dudo saber algún día, si ella es humana. Solía tener un estilo bastante andrógino, y por mucho que la criticasen ella eludía con maestría todos aquellos insultos. Pero ignorar no significa falto de sentimientos no, por más que ignoremos, el dolor persigue y tarde o temprano llega a la puerta y si piedad patea nuestra calma. Así veía yo a mi gemelo, a mi Bill. No había ser más fuerte pero a la vez dulce y apasionado, no existía aquella armonía en seres comunes y corrientes que integraban nuestra banal sociedad. Y así era, y así seguiría… yo no cambiaría lo que tengo por algo mejor, porque… no existe algo mejor. Y todo fue escrito en pasado, porque… para mi desgracia… ella ya no forma parte de mi vida… hace muchos años… seis años, exactamente, ella me gritó cuanto me odiaba, cuanto aborrecía mi sola existencia y lo que más me dolió, el profundo odio que le profesaba nuestra alguna vez, amistad… odió el simple hecho de que la naturaleza nos quisiera iguales, por eso cambió… por eso me abandonó, y hoy… hoy se cumplen ya siete años de que no la he visto y no se absolutamente nada de ella. Georg y Gustav, mis incondicionales amigos, mi familia… lo único que me queda si no tengo a Jess. Me apoyan cada día, hora, minuto, segundo… porque saben… porque duele… porque a ellos también los abandonó. Pero Dios fue bueno, no dejó que los olvidara como hizo con migo y les explicó el porqué de su partida, el porqué de sus palabras de odio hacia mí, y les rogó que jamás me dijeran ninguna palabra. Y en su momento, esa fue la gota de rebalsó el vaso… la busqué tres años enteros, sin descansos suficientes, sin comer, sin dormir durante las noches y todo porque su rostro aparecía en mi cabeza y cerrar los ojos me torturaba. Y luego hoy, siete años más tarde, me mudé de Alemania a Los Ángeles, por el simple hecho de que seguir allí me traía recuerdos y mis G’s estuvieron de acuerdo en mi nuevo comienzo, prometieron que me visitarían apenas pudieran y que buscaríamos nuestro principio del fin.