Alberth y el diablo de jersey

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por christian ortega, 6 Agosto 2011.

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    christian ortega

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    Título:
    Alberth y el diablo de jersey
    Clasificación:
    Para todas las edades
    Género:
    Fantasmas
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    798
    Capítulo I​
    El conflicto familiar

    En un día festivo, se estaba festejando los 24 años de Albert, el cual, se encontraba invadido por la emoción y el júbilo. Estaba en el lugar (correcto) con las personas correctas, justo sonde quería estar. Hasta que llegaron los Johnson. La familia de Albert por parte de su padre, ellos eran arrogantes, prepotentes y creídos de sus familiares, eran a los que más desertaba. Dado que siempre buscaban desafiarlos a pruebas que no pudiera pasar y ellos si para burlarse en su cara y alardear sobre lo superiores a el que eran.
    Su tío Albert Gil, quien (decía que era para sí mismo que su sobrino llevara su mismo nombre sin llevarlo tan alto como él) era ingeniero en diseños de interiores. Lo reto a que hiciera un dibujo simulando el interior de una casa bacía, cuya casa el tendría que llenar con figuras de mobiliario pero Albert no había heredado la habilidad de su tío. Por lo tanto al fracasar se burlo de él despiadadamente. Y eso le sucedía también con sus primos.
    Pero estaba dispuesto a que arruinaran el mejor día de su vida pero desgraciadamente ya los Johnson se habían repartido los papeles. Estando ellos reunidos en grupo en una mesa ven como Albert se aproximo a la mesa de bocadillos a servirse más ponche de frutas cuando del otro extremo contrario a él se acercaba su primo (Jack Johnson), quien simulando tropezarse con la bajilla redonda de cristal reluciente, deja totalmente empapado a Albert (de la cintura a los pies) este frunciendo el enseño. Le reclama.
    -¿Pero qué es lo que te pasa?

    A lo cual Jack responde de forma un poco fría pero muy descarada.

    -Hui lo siento… discúlpame soy un tonto…
    -Si lo eres. ¿Cómo te atreves a hacer esto?

    Pero cuando la conversación se estaba volviendo más acalorada, Jessica la hermana de Albert, entro en terreno de batalla para detener lo que podría ser el principio del desastre de la noche.

    -Está bien chicos eso es todo déjenlo así, yo me ocupo del ponche. Albert ayúdame.

    -¡¿Qué…. Y porque yo?!

    -porque tu lo derramaste.

    -¡¿yo…?! Pero si él fue quien me lo lanzo encima.

    -eso ya no importa. Ahora sin protestar te callaras, tomaras esa bajilla y la llevaras adentro en tanto yo limpio el piso.- A lo cual Albert reacciona de forma totalmente erguida con una mirada que nunca antes había usado que era parecida a la que usan sus tíos y primos. Y dijo de manera que se entendiese que era su última palabra y decisión.- Lo siento, pero no puedo.
    -Pero si no tienes nada que hacer… y necesito ayuda con esto.

    -Lo siento, pero ese no es mi problema. Yo soy el cumpleañero, hoy es mi día, hoy no soy ceniciento, hoy soy la malvada hermana. Así, que no cuentes conmigo. Mientras se alejaba (Albert) Jessica le dije.-el simple hecho de ser el cumpleañero, no te da derecho de tratar de esa forma a tu propio primo.
    A lo que Albert responde con total indignación (dado que, tales palabras, le desgarraban el alma por tanta injusticia).

    -Escúchate Jessica, las locuras que dices. Sabes perfectamente que cada vez que vienen, llegan con la intención de ridiculizarme, humillarme y hacerse de las suyas como si yo fuese otro de sus muñecos inútiles. A los que le presumen lo que pueden hacer. Haber y ¿porque no los reto yo a algo de lo que yo sé hacer? No… y como después terminan en ridículo ellos.

    Jessica, se dirigió a él y con frialdad le dijo.-el ridículo aquí eres tú. Ahora deja de hacer este teatro y lárgate tomando lo poco que te dejaste de dignidad.

    -¿Sabes qué? Si me voy. En este preciso momento tomare mis cosas y me largare de esta casa. Jessica y Jack, abrieron los ojos completamente en señal de sorpresa. Jack sorprendido y un poco arrepentido por lo que había provocado. Le dice a Albert.-Albert lo siento, de verdad eso no era lo que quería. Yo solo…

    -¿No era lo que querías?... oh… espera creo que ya entiendo. No querías que me fuera, querías que me quedara a aguantar las humillaciones, ridiculizaciones de ti y de tu familia, más la injusticia de mi familia. Lo siento mucho porque no pienso aguantármelos ni un minuto más.

    Albert sube las escaleras y al llegar a su cuarto descuelga toda su ropa de un ropero (antiguo) de madera y la acomoda dentro de una maleta de cuero. Luego de un rato termina de hacer la maleta, bajo las escaleras nuevamente. Salió de la casa a toda prisa frunciendo el enseño, subió a su mercedes se perdió en el horizonte.
     
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    Alberth y el diablo de jersey
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    Fantasmas
    Total de capítulos:
    3
     
    Palabras:
    688
    Capítulo II​
    El encuentro con el diablo de Jersey

    ientras Albert conducía sin rumbo llamó a su amigo Alex. Preguntándole.

    -Hola, Alex, ¿Cómo te va? Mira quería saber si ¿tienes un lugar donde me pueda quedar durante un tiempo? A lo que Alex le contesto de forma afirmativa. “Claro, en Salem, pero no en el Delaware, en el condado de Salem”.

    -Gracias, amigo pero ¿no voy a interrumpir o incomodar a nadie cierto?

    -No, no te preocupes. De hecho como es mi casa de veraneo no voy sino todos los veranos.- Al colgar el teléfono, después de pasar a la casa de Alex a buscar las llaves de la que iba a ser su nueva casa.

    Alex alrededor de las 3:30pm ya podía ver en la lejanía, acercándose, un letrero grande y verde con letras blancas.

    “Bienvenido al condado de Salem en Nueva Jersey”

    Al llegar Albert desempaco todo y se preparo para dormir. Pero lo él no esperaba lo que esa noche pasaría al despertar cambiara su vida.

    Alrededor de las once da la noche (todo cambia radicalmente). Los vientos se vuelven huracanados y de pronto se da una tormenta eléctrica. Se escuchaban pasos y ruidos extraños, en ese momento terrorífico Albert, abre los ojos lentamente. Al ver a su hermana Jessica, se sorprende y le pregunta seria y silenciosamente, todavía son el sueño sobre él.-¿Qué haces aquí?

    A lo que ella responde de la misma forma.-Hable con Alex y me conto lo que pensabas hacer.

    -Sí, y lo hice.

    -Y yo vine para que lo deshagas.

    -Lo siento, Jessica. Pero no pienso volver aquí estoy bien (gracias). Sin dolores ni penas.

    -Bueno, tan siquiera deja que me quede aquí. Por esta noche.

    Dándole la espalda mientras se acurrucaba en la cama. Le dice.-Si no me haces la vida imposible puedes quedarte todo lo que tú quieras.-

    Jessica se despidió de su hermano con un beso en su mejilla. Cual a Albert lo tomo de sorpresa, nunca su hermana había tenido ese gesto de amor (fraternal) sincero hacia él. Luego se fue no dejando más que el dulce olor de su perfume de melón.

    Albert oyó cosa debajo, despierta rápidamente se levanta de la cama y baja lentamente las escaleras que va la cocina con vista un establo (en el que Alex guardaba a sus caballos), ve algo extraño y se dirige lentamente al establo. Cuyas puertas se encontraban entre abiertas.
    Las puertas tenían 10cm de separación del piso. Por tal abertura Albert lograba distinguir una sombra en el suelo, abrió las puertas y ahí estaba “el diablo de Jersey”. Albert palideció al ver esa monstruosidad se preguntaba a sí mismos ¿pero no se suponía que era, un mito o una leyenda? Con alas de de murciélago, lo miro y al correr el diablo de Jersey desplego sus alas se elevo por los cielos y lo persiguió durante horas.

    Albert estaba cansado se le acababan las ideas para esconderse y el diablo de Jersey lo perseguía. Albert no encontraba ya donde ocultarse, encontró la entrada a un canal subterráneo, entro y corrió. El diablo de Jersey no lo visualizo por unos árboles.
    Albert iba a salir, subió unas escaleras para salir pero vio al diablo de Jersey, estaba descendiendo (ondeando sus alas) mientras decencia “Albert pudo detallarlo mejor y logro observar que tenia cuerpo de caballo con alas de murciélago y una cola larga y fina. Albert decía.-¿Qué se supone que es eso? Será mejor que me valla antes de que me vea.-para cuando Albert llega a su casa ya estaba amaneciendo (dando paso a un cielo azul marino) pero antes de Albert poder entrar en la casa hasta que volvió a aparecer el diablo de Jersey, volando en la lejanía aproximándose con sus ojos rojos (con intenciones de matarlo). El diablo de Jersey le dijo con una voz tenor y profunda.-Te voy a matar…-

    -Ah…

    En el instante aparece el sol y se desintegra chocando con la casa.
     
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    Capítulo III​
    ¿Quién es Jersey?

    Después de unos tres meses Albert asido atacado por el diablo de Jersey, pero no conocía a lo que se estaba enfrentando pero de una u otra forma se defendería a sí mismo. Una noche se apareció haciéndose una silueta en la oscuridad.

    -Oh no, no, no.

    Al dar la vuelta mirando al lado contrario en el momento en que se vuelve ya no estaba ahí. Se dio la vuelta y estaba a su lado. Se paro en sus pesuñas traseras.

    -¿Qué vas a hacer?

    Lo golpeo con las pesuñas delanteras, siendo impulsado callo a lo lejos. El diablo de Jersey le dice.

    -Te matare…

    -Oh… no, no lo harás. No sin que yo antes te mande al infierno que es donde debes estar.

    Frunciendo el enseño el uno por otro. El diablo de Jersey desapareció una vez mas (volando) y reapareció tras él, dándole con una pesuña en la cabeza dejando a Albert inconsciente. Despertó al siguiente día, y sintió la necesidad de saber que era la cosa que lo atormentaba.
    Fue a una de las bibliotecas del condado de Salen, llegando al mostrador la bibliotecaria le dice.-Escuche, si busca criaturas mejicas o cosas así; váyase por donde dice “Mitos & Leyendas”.

    -Gracias.

    -Adiós.

    Albert vacilaba en voz baja.- Mitos & Leyendas… Mitos & Leyendas. Aquí… esta…

    Busco y rebusco has que encontró. Encontró una fotografía donde se encontraba un cura con un parecido impresionante. En el libro que estaba leyendo bajo la foto había un escrito que decía.

    Una bruja que tenia 12 hijos estaba esperando el decimo tercero pero el hijo en espera fue maldecido y al nacer la cara angelical del niño cambio su quijada se alargo, sus extremidades cambiaron de forma volviéndose pesuñas y su cuerpo cambio a la forma de caballo y unas alas de murciélago salieron en sus omoplatos (espalda), mato a su madre a fuerza de patadas y se fue volando atravesando el techo. Y durante siglos a aterrorizado Salem, y un cura que se asía llamar William Jones le hizo saber al condado de Salem que lograría expulsar al demonio (de Jersey) que hacían llamar “Jersey” pero advirtió que después de cien años volvería buscando venganza.

    Terminando la lectura Albert se dice a sí mismo en voz baja.-Si… pero lo que no sabía era que lo vendría a buscar a él, bueno es decir a mí. Esa cosa “Jersey” cree que yo soy el cura “William Jones”.
     
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    Amara Silberschatz

    Amara Silberschatz Usuario común

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    Hola, acá estoy *-* ¡Comienza mi joda!

    Quedaría mejor sin esa otra coma luego de "cual". ¿He de repetir lo de los números?

    En donde dice: "el lugar correcto con las personas correctas" hallo ese paréntesis innecesario.

    Esta palabra cómo ué: desertaba, ¿no será detestaba?

    Usaste bacía, es vacía.

    Casi aseguraría que es: Frunciendo el ceño, le reclama:

    Bueh, prosigo.

    ¿Por qué no los reto a algo que yo sé hacer?

    Asdf, asdf. Ese no es el guión correcto, es este: —

    Lo otro es lo típico: falta de comas, tildes, alguna que otra palabra extraña y algo de repetición.

    En lo que respecta a trama, me ha llamado la atención. Me pasaré por acá cada vez que publiques, osea serás a como yo digo:

    Besos~

    Att: Amira
     
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    christian ortega

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    jajajajajaja hay.... tienes razón pero ya sabes que la verdad duele pero no te preocupes haré las correcciones en escrituras futuras. Gracias
     

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