Long-fic de Pokémon - "Accidentalmente una historia de amor"

"Accidentalmente una historia de amor"

Si, ya me gustó esto de estar haciendo fics u_u En fin, este fic va dedicado a todos los del foro pero en especial a Drusky, a not good boy, a metal_blood, a elneto_090@, a Alter Ego y que no se me olvide Anjira20. Bien, los dejo con el primer capítulo, espero que les guste.

“La chica del intercambio”​

Ser hijo único es difícil, pero hospedar a una chica en tu casa es aún más difícil.
Un chico de trece años, con cabello algo largo y muy negro, los ojos verdes y la piel blanca descansaba bajo un árbol, a su lado yacía su fiel pokémon Mightyena.
Enfrente del macizo estaban tierras para cultivar. Muchas de ellas ya estaban arreadas y sembradas, pero aún faltaba diseminar algunas, aunque con la lluvia que caía cada noche era imposible.
El chico abrió los ojos cuando escuchó la voz de su padre, que le gritaba desde la choza donde vivían.
Perezosamente se levantó y despertó a su mascota, que dando un gran bostezo se paró y siguió a su entrenador, que ya le llevaba ventaja.
Cuando llegaron, el chico puso una cara seria. Su madre estaba sentada en aquella mesa de madera y al lado tenía una chica.
Esta era de un cabello muy negro y lo tenía recogido en una media cola, su piel era un poco más blanca que la del chico y sus ojos eran de un color añil, muy lindo.

Padre: Hijo, te presento a Danielle
Madre: Es la chica del intercambio, viene desde Inglaterra
Danielle: Hola, me alegra conocerte
Chico: Para venir de Inglaterra hablas muy bien español
Danielle: Si, tomé varias clases
Madre: Bien, Danielle, mi esposo y yo tenemos que ir al pueblo
Padre: Y creo que sería buena idea que vinieras, podrías conocer el mercado y a algunas personas, pero si estás cansada lo entenderemos
Danielle: Oh, no, me encantaría
Madre: Eso es una gran noticia. Hijo, lleva las maletas de Danielle a su habitación y prepara la carreta
Chico: ¡Oye! ¿Por qué yo? De eso se encarga mi padre
Madre: Calla y haz lo que te he dicho
Danielle: (Se levanta de donde estaba) Oh, no, yo podría subir las maletas, sólo díganme dónde está la habitación
Chico: No, está bien, yo las llevo. Mightyena, ve a cuidar el ganado
Padre: Está bien. Yo alistaré la carreta. Hijo, tú y Danielle vengan rápidamente
Madre: Te acompaño

Dejando a los dos chicos solos, los padres salieron. El muchacho cargó las maletas de su compañera y subió las escaleras de madera, seguido de la joven.
Él ya se estaba sintiendo incómodo con la presencia de Danielle, nunca había tenido una chica de su edad, o casi de su edad, hospedada en su casa.
Danielle caminó un poco más rápido y se colocó al lado del chico, que por no fijarse en el camino sino en la chica, chocó contra la puerta de la habitación y cayó.

Danielle: ¿Estás bien?
Chico: Si, si, si. Vaya, creí que la puerta estaba abierta. Esta es tu habitación… (Se levanta rápidamente y carga nuevamente las cosas de la chica)
Danielle: Oh, bien, de algún modo llegamos
Chico: Si. ¿Dónde dejo tus cosas?
Danielle: Yo puedo con ellas, gracias. Oye, no me has dicho tu nombre
Chico: Créeme que no te interesa (Sale de la habitación y baja)
Danielle: Pero qué extraño chico, comienzo a pensar que no le agrado

La joven se apresuró a dejar sus cosas en la cama y salió corriendo en busca de las personas que habitaban ese lugar.
Los señores ya estaban en la carreta y el chico estaba amarrando al Rapidash que jalaría. Los padres del muchacho le hicieron una seña que indicaba que Danielle se sentara a su lado, pero la chica, a lugar de eso, fue y tomó una cuerda para ayudar a amarrar al caballo.

Danielle: Déjame ayudarte con esto
Chico: Yo puedo solo
Danielle: (Sin hacer caso al comentario del chico) Me encantan los Rapidash. Son los pokémones más lindos que existen
Madre: Querida, no te molestes en ayudarle. Si ocurriera algo, que esperemos que no, mi hijo te dará la culpa a ti, lo sé
Padre: Después de todo lo que dice mi esposa es cierto, Mejor ven
Danielle: Oh, gracias, pero me gusta ayudar y además adoro estos pokémones
Chico: Ya terminamos
Padre: Bien. Ahora suban

El muchacho, algo enfadado, ayudó a Danielle a subir y después subió él, se sentó al lado de la chica y esperó a que su padre arreara las cuerdas.
Cuando el padre se aseguró que nadie corría peligro, ligeramente movió las cuerdas y el Rapidash comenzó a trotar, primero lentamente, pero cuando consiguió que la carreta se moviera, corría cada vez más y más fuerte.
La madre se sujetaba el cabello castaño, mientras que la chica sólo disfrutaba ese viaje, además su cabello estaba en orden.
Después de una media hora, por fin leyeron a lo lejos “Roses Town”. Como su nombre lo decía, era el pueblo de las rosas. En todas las colinas, en los caminos, en las macetas, e incluso en las jardineras de las terrazas, se podían ver rosas ya fueran blancas, rosadas o rojas, eso tenía fascinada a Danielle.
Cuando por fin estacionaron la carreta y bajaron, la chica siguió viendo las hermosas flores, hasta que fue sacada de su impresión por la voz del chico.

Chico: Mis padres fueron a dejar la mercancía al mercado. Para volver, se tardan bastante, así que me dijeron que te mostrara el lugar
Danielle: Bien
Chico: ¿Quieres ir… para… allá, o para allá? (Señalando el este y oeste)
Danielle: Creo que me gustaría ir a donde haya más edificios
Chico: Entonces es para allá (Señaló el norte)
Danielle: (Riendo) Oye, una pregunta, ¿El Rapidash se queda solo?
Chico: Si, se sabe cuidar. Vamos

El muchacho se dio la vuelta y empezó a caminar, seguido de Danielle. Por cada calle que pasaban, los chicos se le quedaban viendo a la joven y ponían muy nervioso al muchacho, que no se explicaba el por qué.
Y si, quién no se le quedara viendo a Danielle con esa atracción exótica. Traía puestos unos pesqueros (Esos pantalones que llegan hasta antes de la rodilla más o menos) negros y muy pegados, asimismo, también traía encima de los pantalones una minifalda jean y un polo (Esas camisetas de tirantes) blanco, además el cabello suelto le daba aquel toque inocente que toda chica posee.

Danielle: Oye, ¿Por qué todos se me quedan viendo?
Chico: ¿Aún lo preguntas? Es por que das una… apariencia… inglesa
Danielle: u_u Es incómodo
Chico: ¿Quieres regresar?
Danielle: No… bueno si… verás, quiero venir cuando no haya demasiada gente… mirona
Chico: Está bien, otro día venimos
Danielle: ¿Hablas en serio? o.o
Chico: Si, vamos, hay que regresar a la carreta

El muchacho dio media vuelta y siguió caminando para donde estaba la carreta, seguido de la inglesa, hasta que escucharon.

Chico: Vaya, pero qué preciosura has sacado Smith. Lo único malo es que está contigo
Chico: Ya cállate Roberts. Vamos Danielle, no le hagas caso a un payaso
Danielle: Bien
Roberts: Vaya, qué inocente chica, hasta le haces caso a un marciano. Vamos, ven, yo te mostraré la ciudad (Avanzando hacia donde estaba Danielle)
Danielle: No gracias, no la quiero ver contigo
Roberts: Vamos, no seas así. No todos los días invito a una joven a ver la ciudad
Chico: Ya déjala. Ella viene de intercambio, no a aprender a salir con tontos
Roberts: No he hablado contigo. Danielle, vamos, te mostraré la ciudad (La jala de la muñeca y la aprieta fuertemente)
Danielle: Oye no, no quiero, suéltame
Chico: Roberts ya déjala
Roberts: Vamos, no me digas que me equivoqué contigo y sólo eres una de esas idiotas que se juntan con chicos que ni al caso con ellas
Danielle: ¡Me estás lastimando! (Tratando que el chico la soltara pero no lo lograba)
Chico: Ya, tú te lo buscaste

El chico soltó un puñetazo al otro muchacho (El que estaba lastimando a Danielle) y este cayó al suelo, mientras una línea de sangre se podía ver en su boca.

Roberts: Si, veo que me equivoqué con respecto a ti y a tu noviecito. Me las pagarás algún día (Se va corriendo)
Danielle: Gracias (Acaricia su muñeca)
Chico: No importa. Él no debió molestarte
Danielle: ¿No te meterás en problemas?
Chico: Seguramente si, pero no me importa, siempre termino en problemas
Danielle: Pues… siento que esta vez termines por mi culpa castigado
Chico: No importa. Las veces que necesites un amigo aquí estaré. Ahora, hay que regresar
Danielle: Si, ¡Oye, aún no me dices tu nombre!
Chico: ¡Y dure y dale con eso!
Danielle: Algún día me tendrás que decir
Chico: Si, algún día. Vamos, mis padres están allá, por ahora no les digas nada de lo ocurrido y todo estará bien, ¿De acuerdo?
Danielle: Si. A propósito de eso (Le besa la mejilla) Gracias…

Continuará…

PD: lone, en verdad extraño tus comentarios, vuelve, pero ¡Ya! :(

 

Re: "Accidentalmente una historia de amor"

Ooooh, gracias a todos por sus comentarios, no saben lo feliz que me pusieron ^^ Bien, aquí les traigo la continuación, si se preguntan cómo la hice tan rápido fue por presión (Si, sabes que te estoy hablando a ti ¬¬) Pero en fin, sin más comentarios les agradezco mucho que la hayan leído y aquí les dejo el capítulo ^^

“La tormenta especial”​

​

En el camino de vuelta a la choza, los chicos estaban muy callados. De Danielle no era extraño, pero del chico demasiado.
Él siempre tenía cosas qué hablar, así que, los adultos se miraron diciéndose que tenían que sacar charla a los muchachos.

Padre: ¿Y qué vieron en el pueblo?
Danielle: Rosas, muchas rosas. También su hijo me mostró esa enorme fuente
Madre: Eso queda muy cerca de donde estábamos. Dean, ¿No la llevaste a conocer el lugar verdad?
Danielle: Así que Dean es tu nombre. Muy lindo, en realidad
Madre: ¿Así que ni siquiera te habías presentado? Creo que te hemos educado muy mal
Dean: Pero mamá yo…
Danielle: Lamento entrometerme en esta… discusión familiar, pero señora, déjeme decirle que yo le dije a… Dean… que no me dijera su nombre hasta que ustedes lo nombraran. Se me hace más fácil… eh… memorizar cuando el nombre lo dice una voz… ¿Femenina?
Padre: Si, la chica tiene razón, es más fácil recordar una voz femenina que una masculina
Madre: Oh, bien, si así lo prefieres…
Chico: (En voz baja a Danielle) Gracias…
Danielle: (Responde el mensaje con el mismo volumen de voz) Te lo debía
Padre: Miren, ya hemos llegado, sin cargamento es más fácil, ¿Verdad Rapidash?
Rapidash: (Relincha)
Madre: (Se baja de la carreta algo mareada) Vaya, de nuevo ya viene la lluvia, el tiempo está muy raro. Iré a meter la ropa
Padre: Te ayudo. Danielle, entra a la casa e hijo, asegúrate de meter al ganado al establo y que tu Mightyena entre a la casa
Dean: Si
Danielle: ¡Espera! ¿Puedo acompañarte?
Dean: Papá, ¿Puede venir conmigo?
Padre: Si, pero dense prisa

Cuando Danielle se dio cuenta, Dean ya le llevaba mucha ventaja, así que corrió y se colocó a un lado de él.
Más adelante, se podía ver claramente el cielo nublado y gris, y el ganado muy asustado. Los Torchick revoloteaban a los lados de los Miltank, y estos, asustados, trataban de pisotearlos. El que verdaderamente ponía orden allí era el Mightyena.
Ladraba furiosamente para calmar a todos, pero en Danielle corría un escalofrío al escuchar aquel furioso ladrido.

Dean: ¡Eso! ¡Muy bien Mightyena! ¡A la próxima te los comes!
Danielle: ¿A la próxima qué? o.O
Dean: Es un decir, Mightyena, ven aquí. Bien, ¿Danielle, quieres ayudar?
Danielle: ¡Claro! ¿Qué tengo que hacer?
Dean: Abre la puerta del establo y espera a que pasen todos los animales
Danielle: ¿Y cómo entrarán?
Dean: De eso me encargo yo. ¿Listos?

Danielle sólo asintió con la cabeza y corrió a abrir la puerta de madera del establo. Mientras tanto, Dean ordenó a su Mightyena que usara un Aullido.
Cuando el lobo lo hizo, todo el ganado corrió despavoridamente, unos chocaban contra otros y los demás corrían hacia el establo.
Como el chico había dicho, cuando entró el último pokémon, la inglesa cerró la puerta. Así, todas las criaturas estaban a salvo y calientes.
Justo después que la puerta fue atrancada por la chica, algunas gotas de agua, escasas pero muy pesadas, comenzaron a caer.

Dean: Ya empezará a llover. Hay que entrar
Danielle: Si. Oye, te lo agradezco
Dean: ¿Qué me agradeces?
Danielle: Que me hayas dejado ayudarte. Según tu madre, es raro el día en que compartes tu trabajo
Dean: Supongo que será por que… somos amigos, ¿No?
Danielle: Claro
Padre: ¡Dean! ¡Danielle! ¡Entren ya!
Madre: ¡Esta tormenta va a ser de las grandes!
Danielle: ¿A qué se refiere con eso de que la tormenta va a ser de las grandes? ._.
Dean: Adentro te explico, vamos

Cuando entraron a la casa, la madre de Dean ya estaba preparando la cena. Mientras tanto, el padre estaba leyendo un libro, algo antiguo, pero un libro.
Cuando los señores vieron llegar a los dos chicos, algo mojados, y al Mightyena, que estaba empapado, sólo se miraron extraño.
La señora indicó que todos fueran a la mesa. Cuando los chicos y el señor se sentaron, empezó a servir la cena.
Danielle trataba de encontrar la mirada del muchacho, se estaba sintiendo incómoda con eso que lo fueran a castigar por su culpa, pero no lo lograba.

Padre: Danielle, ¿Necesitas algo?
Danielle: ¿Uh? Oh, no, sólo estaba… viendo… ese… retrato (Señala el retrato de un paisaje) No me había dado cuenta que era tan hermoso
Dean: Qué bueno que te guste. Mi madre lo pintó
Danielle: ¿En serio? Vaya señora, es muy buena con esto
Madre: Gracias Danielle ^.^ Por cierto, puedes llamarme Jessica
Danielle: Bien, gracias
Padre: Bien, yo ya he terminado. Iré al taller (Dijo besándole la mejilla a su esposa y revolviéndole el cabello a su hijo) Regresaré tarde
Jessica: Bien… (Pronunció esto para ella misma mientras escuchaba la puerta azotar y el automóvil andando)
Danielle: ¿No es peligroso que salga en la lluvia? (Se dio cuenta que no era conveniente decir eso)
Jessica: Él se sabe cuidar solo, ya es adulto
Dean: Es cierto. ¿Mightyena, quieres un poco?
Mightyena: (Se acerca y espera a que le den)
Dean: Ten amigo (Le da lo que restaba de su cena y se levanta) Ya he terminado, iré a bañarme
Jessica: ¡Algún día te vas a desnutrir! Este muchacho…
Danielle: ¿Así de poco come? (Dio el primer bocado a su comida)
Jessica: Todos en esta casa comen muy poco, no lo entiendo
Danielle: ._. (A punto de escupir la comida) ¿Sabe? Yo no he trabajado nada hoy y el pequeño lobo si, creo que será mejor darle a él la comida, toma Mightyena (Le da toda la comida) Y si me disculpa tengo que… que… seguir con mi informe
Jessica: Oh, claro linda ^.^ (Ve que la chica sale corriendo y sube las escaleras) Vaya, pero qué energías tienen estos chicos, ojalá yo tuviera la mitad… Mmm… pediré comida rápida

Ya arriba, la inglesa entró a su habitación y la mira desconfiada.
Las cortinas algo empolvadas y blancas, la colcha del mismo color y estilo y también espolvoreadas, los muebles con una ligera capa de tierra… no era lo que una chica de Inglaterra hubiera querido, pero daría cualquier cosa por viajar y conocer lugares y personas.
Danielle entró con algo de temor y cogió una de las maletas que estaban allí. La abrió y sacó su pijama, era un camisón blanco con algunos bordados dorados.
Seguido, cerró la puerta, suspiró un momento y empezó a cambiarse.
Con el chico, él ya se había terminado de duchar (Ya saben que los chicos se tardan mucho menos ¬¬) y de vestirse, sólo estaba recostado en el suelo de su cuarto, viendo el techo.
Era algo que le gustaba hacer, le gustaba estar solo y además eso le ayudaba a pensar y a recapacitar.
Pero su mayor duda era por qué había defendido a Danielle, para él era sólo una chica, ¿Y por qué había dicho que cuando necesitara un amigo estaría él?
Justo estaba pensando en la inglesa cuando escuchó que tocaban a la puerta.

Jessica: Hijo, ¿Puedo pasar?
Dean: Si, entra, ¿Qué pasa?
Jessica: Sucede que he notado alguna conexión especial entre tú y Danielle, quería saber si pasaba algo
Dean: (Se sonroja con tal sólo pensar en esa posibilidad) ¡¡Mamá!!
Jessica: Está bien, está bien, no me entrometo xD Sólo quiero que me tengas más confianza para hablar de lo que sea. Si te gusta alguna chica o algo, puedes decirme, quizá te pueda ayudar
Dean: Mamá, aún no me gusta nadie
Jessica: Bien ^.^ Iré a dormir, estoy cansada, tú deberías hacer lo mismo. Hasta mañana cielo (Le da un beso en la frente)
Dean: Hasta mañana mamá…

El muchacho sólo siguió el ejemplo de su madre y se metió en la cama, dándose cuenta que el Mightyena se había acostado en sus pies.

Dean: Hasta mañana amigo
Mightyena: Graour

Toda la casa estaba en silencio, de no ser por la incansable lluvia y los truenos que resonaban.
El ganado estaba inquieto, pero no hacían ruidos, era la primera vez que todos estaban callados. El Mightyena no paraba de retorcerse en la cama del chico, estaba muy nervioso, pero no era por la lluvia.
Y Danielle… ella estaba más intranquila que todos los pokémones de la granja juntos. Daba vueltas y vueltas en la cama, ya iban dos veces que casi se caía, aventaba la almohada, se cubría con las sábanas… La inglesa no sabía qué pasaba, no estaba acostumbrada a las tormentas pero lo que sucedía es que sentía que alguien la estaba mirando pero no de buena manera, sino con otras intenciones (Esto tiene doble sentido o.o No mal piensen)
Después de varios intentos de dormir, la chica se paró y salió de su habitación. Afuera, todo estaba oscuro, de no ser por los rayos que iluminaban muy feo aquel lugar.

Danielle: ¿Pero qué estoy haciendo? Esto ya me asustó o_o
Dean: ¿Danielle? ¿Qué haces despierta a estas horas?
Danielle: (Se dio cuenta que había entrado a la habitación del chico) Ehm… lo siento, ya me voy u_uU
Dean: (Se levanta de su cama) Oye, respóndeme. ¿Tienes miedo verdad?
Danielle: Digamos que no estoy acostumbrada a las tormentas…
Dean: Bien…
Danielle: Hasta mañana (Se disponía a salir de la habitación, pero un escalofrío recorrió su cuerpo cuando se dio cuenta que la puerta de su habitación estaba cerrada, y ella la había dejado abierta) Ehm… Dean… ¿Me puedes hacer un favor?
Dean: Claro, ¿Qué pasa?
Danielle: ¿Puedo dormir, hoy, sólo hoy, contigo?
Dean: (Sonrojado) B… bien, supongo… que… supongo que si…
Danielle: Gracias ^.^
Dean: Vamos, ven

La inglesa se acercó a la cama y se recostó al lado del muchacho, que sólo se volteó.
Danielle ya estaba un poco más calmada, pero aún tenía esa sensación de que la estaban viendo. Primero, se tapó completamente con las cobijas, pero pensó que eso sería peor. Después, se recostó de un lado y de otro, pero se sentía aún más insegura, y, para terminar, se recostó boca arriba, pero no podía dormir.
Aún la tormenta no paraba, es más, a veces se podía escuchar que aumentaban las gotas que caían.
La inglesa veía hacia todos lados, pero sólo encontraba las paredes y los muebles, nada la podía estar viendo, pero de repente escuchó esa voz tan conocida para ella.

Dean: Danielle, ¿Por qué estás tan intranquila?
Danielle: Lo siento, lo que pasa es que tengo miedo
Dean: Aaah, es eso, vamos

Casi sin pensarlo, el chico abrazó a Danielle y la juntó a él. Era la primera vez que hacía algo así, nunca se había tornado tan protector con alguien, ni siquiera con su Mightyena.

Dean: Así estarás bien. Hasta mañana
Danielle: (Estaba más que roja) H… Hasta mañ… mañana… y… gracias de nuevo…

Continuará…:P

 

Re: "Accidentalmente una historia de amor"

No, comparado con una personita muy singular aquí... xD Bueno, les agradezco sus comentarios muchos y espero que hayan querido continuación por que son doce hojas de Word o.O En fin, para ti y para todos pero en especial para ti ojalá que les guste

“La cabaña en mitad de la nada”​

​

Danielle se había levantado muy temprano, no quería causar malos pensamientos a los padres de Dean.
Aún hacía mucho frío y el sol no estaba dando luz, así que la inglesa, temerosa aún por la experiencia de un día anterior, cruzó silenciosamente el pasillo, no sin antes dar un beso en la frente a su amigo.
Cuando llegó a su habitación y abrió cuidadosamente la puerta, se encontró con todas sus cosas tiradas. Cuidadosamente, recogió cada cosa que estaba en el suelo y la guardó en aquella maleta café oscuro, hasta que encontró una fotografía.
La tomó entre sus helados dedos y la contempló un momento, para después romper en llanto y aventarla lo más lejos posible, rompiendo el vidrio del marco que la protegía.
El vidrio se hizo pedazos, algunos más pequeños que otros y algunos pasaban desapercibidos por el tamaño diminuto que tenían, aún así, todos cortaban igual.
La inglesa se secó rápidamente las lágrimas y corrió a recoger los cristales y el marco, rezando por que nadie hubiera escuchado el golpe.
Mientras tanto, en la habitación del chico, el lobo se levantó algo alterado. Con su oído tan fino había captado el ruido. Silenciosamente, se bajó de la cama con un salto y salió al pasillo, a lo lejos se podía ver a una chica sollozando y recogiendo algo.
El Mightyena se acercó alerta, pero justo cuando había pasado el portal de la habitación, la inglesa se paró de donde estaba y cargó al pokémon, colocándolo en su cama.

Danielle: No, no, no. Quédate aquí, te puedes cortar
Mightyena: ¿? ¿Grau?
Danielle: Lo que pasa es que se me cayó un retrato, perdón por haberte asustado
Mightyena: ¿Graour Graur?
Danielle: Si, estoy bien, gracias (Se seca las lágrimas que en ese momento habían caído) Ahora, ¿Qué te parece si me acompañas por una bolsa? De algún modo tengo que recoger todos los vidrios antes que alguien se corte

El pequeño lobo, aún confundido por la actitud de la inglesa, bajó de la cama y llevó a la chica por varios pasillos y por las escaleras hasta que llegaron a la cocina.
El Mightyena cogió una bolsa de papel y se la dio a la chica, que después de dar las gracias, subió corriendo silenciosamente.
El lobo, confundido, sólo siguió los pasos de la chica y al llegar a la habitación de esta, se recostó en la cama mientras la observaba.
Luego de ese incidente, pasaron algunas horas, en las que la chica aprovechó para acomodar sus cosas y limpiar un poco el lugar, la fotografía simplemente la volteó y la guardó en su maleta.
No pasó mucho tiempo después de eso antes que los padres de Dean despertaran y fueran a ver cómo estaba la inglesa.

Jessica: ¡Hola Danielle! ¿Cómo dormiste?
Danielle: Bien, gracias
Padre: Veo que el pokémon de mi hijo se ha encariñado contigo. Ese pokémon es muy huraño, ha atacado a varios del intercambio que se han quedado aquí, pero supongo que en ti vio algo especial. ¿Has tenido contacto con estas criaturas antes?
Danielle: En realidad no, en mi casa no me dejan tener…
Jessica: Entonces creo que tendrías que aprovechar el tiempo con Mightyena. Bien pequeña, arréglate un poco, en una hora los llevaremos a Dean y a ti al colegio
Danielle: Oh, bien ^.^
Padre: Iré a despertar a mi hijo, ¿Mightyena, vienes?
Mightyena: Graour

Dejaron sola a la chica, que, cerrando la puerta, fue hacia el ropero y sacó varias prendas. Mientras tanto, en la habitación del chico, era el mismo problema de siempre: no se quería levantar.

Padre: ¡Dean! ¡Llegarán tarde a la escuela!
Dean: Entonces no voy yo (Se tapa con la almohada)
Jessica: ¡Hijo! ¡Ya! Danielle está esperando desde hace quince minutos
Dean: Está bien, me levanto (Dijo levantándose torpemente)
Padre/Jessica/Mightyena: o.O
Dean: ¿Por qué se me quedan viendo de esa manera?
Jessica: Por que te levantaste cariño n_nU. Nunca antes habías cedido a levantarte tan fácilmente
Padre: Si, pero espero que siga así todos los días jovencito. Bien, te dejamos solo para que te cambies, no tardes tanto
Dean: Como si me tardara en vestirme
Mightyena: Graour

Cuando el muchacho salió de la habitación, se le quedó viendo sonrojado a Danielle.
Ella también iba saliendo y estaba vestida de una manera algo provocativa, una falda algo larga pero muy pegada color negra, una blusa con un escote en V blanca y unos tenis blancos, su cabello estaba completamente suelto y un mechón algo rebelde sobresalía, esta también estaba mirando sonrojada a Dean.
El chico sólo vestía una camiseta azul muy holgada y pantalones de mezclilla, igual holgados, también traía tenis pero estos eran de color azul, mientras que su cabello estaba igual que siempre, despeinado y sin orden. Una chamarra se podía ver amarrada en su cintura.

Danielle: Ehm… hola…
Dean: Ho… Hola
Mightyena: (Al ver el sonrojo de los dos chicos, empujó a su entrenador, que quedó muy cerca de Danielle)
Dean: ¡Ay, Mightyena!
Jessica: ¿Ustedes de nuevo peleando? ¿Cuándo se dejarán de llevar mal? (Ve que Danielle y Dean estaban muy cercanos) Disculpen, ¿Interrumpo algo?
Danielle/Dean: ¿Eh? (Se dan cuenta de su cercanía, y se hacen para atrás lo más rápido que pueden) ¡Aaaaaaaaaaaah!
Jessica: Tenían que ser ustedes. Vamos chicos, si quieren desayunar dense prisa
Danielle/Dean: Ah desayuno, no gracias, estoy muy llena/lleno ayer cené mucho
Jessica: Bien, si así deciden… vamos, que llegarán tarde a la escuela

Los chicos, después de despedir a la señora, salieron. El clima estaba frío y húmedo, aún estaba cayendo la brisa, pero parecía un buen día.
Esperaron unos minutos antes que el señor pasara por ellos en la carreta y se apresurara a llevarlos al colegio.
En una media hora, llegaron al pueblo.

Señor: ¡Espera Rapidash! Hemos llegado
Danielle: (Se baja de la carreta) Gracias señor
Señor: De nada pequeña (Le revuelve el cabello)
Dean: Gracias papá
Señor: (Le revuelve igual el cabello) Si hijo. Bien, hoy no podré pasar por ustedes a la hora concreta, así que deberán esperar un poco, espero que no haya problema
Danielle/Dean: No, no hay problema ^.^

Se despidieron rápidamente, y empezaron a caminar hacia el interior de la ciudad.
Esta olía mucho a esa rosa fresca y más en la mañana, ya que la brisa había refrescado mucho ese lugar.

Danielle: Dean
Dean: ¿Qué pasa?
Danielle: Tan sólo te quería agradecer lo de anoche
Dean: (Se sonroja) Ah… ehm… no… importa
Danielle: ¡Oye, ten cuidado con el…!

La advertencia fue demasiado tarde, el chico ya había golpeado con un farol y caído al suelo.
La inglesa corrió a ayudarlo, mientras los dos reían alegremente, pero no se daban cuenta que un anciano se aproximaba a ellos, y que estaban dando en ese momento el timbre de clases.

Dean: Es la segunda vez que choco contra algo
Danielle: Si ^.^
Anciano: Ah… eh… ¿Hola?
Danielle: Hola
Anciano: Me preguntaba si… me podrían llevar a mi casa. Está pasando un pueblo de aquí, me siento algo inseguro por que hay muchos bandidos
Dean: Pero en este momento tenemos clase… (Ve su reloj) OK lo acompañamos
Danielle: ¡Pero tenemos clases!
Dean: Vamos Danielle, tenemos que ayudar a este buen hombre (Le muestra el reloj)
Anciano: Si no me pueden llevar no importa, iré solo... como siempre…
Danielle: No hay problema, vamos n_nU

El anciano dirigió una sonrisa a los chicos, y, con ayuda de estos, empezaron a caminar.
Lo único malo fue que habían pasado más de cinco horas y ni siquiera se veía el letrero del siguiente pueblo, ¿Por dónde los estaba llevando el anciano?

Dean: No me quiero entrometer, pero, ¿De casualidad sabe a dónde vamos?
Anciano: Oh, claro que si, mi casa es un poco más adelante, no te preocupes
Danielle: Oigan, esperen, yo ya no puedo más (Dijo mientras se acariciaba las piernas) Hemos caminado demasiado tiempo
Anciano. Oh, vamos pequeña, falta poco
Dean: u_u Está bien yo te cargo
Danielle: ¿Eh? °///°
Dean: Vamos, sube a mi espalda (Dijo cargándola en su dorso)
Danielle: °/////////° Gra…ci…as
Anciano: Bien, sin más previstos podemos seguir

Con un giro distraído de vista, Danielle distinguió una choza al lado del camino, un poco más adentro, en el bosque, y varios metros más abajo que el terreno normal.
Estaba empolvada, una de las ventanas estaba rota, dejando ver dentro algunos libros empolvados y antiguos.
También tenía algunos cuadros descolgados y empolvados, tanto que apenas se notaba el dibujo detrás del cristal.

Danielle: ¿Uh, qué es eso?
Dean: ¿Qué? (Se detiene para poder ver a qué se refería Danielle)
Danielle: (Señala la choza) Eso
Dean: Mis padres me contaron que cuando ellos se mudaron aquí, en esa casa vivía una anciana, todos en el pueblo no se le acercaban por que le tenían pavor. Algunos decían que estaba loca por que tenía muchos pokémones fantasma, que, cuando ella murió, se dispersaron por el pueblo
Danielle: Aaaaah ya veo. Espera, Dean, ¿Dónde está el anciano?
Dean: Estaba aquí hace un segundo

Mientras los chicos buscaban por todos lados al anciano, otros los espiaban desde los arbustos.

Roberts: Buen trabajo Irwin
Irwin: Eso espero, este traje de anciano ya me está picando
¿?: No te quejes
Roberts: Dime una vez más por qué estás con nosotros si eres la señorita perfección
¿?: En primer lugar me llamo Julie y en segundo lugar estoy con ustedes por que no puedo dejar que esa Danielle se quede con mi Dean
Roberts: No entiendo cómo te gusta u_u
Julie: Yo no entiendo cómo te gusta esa Danielle
Irwin: Y yo no entiendo por qué estoy vestido así
Julie: ¡Cállense que ahí vienen!
Danielle: Genial, perdimos a un anciano (Dijo mientras se “bajaba” de la espalda del chico)
Irwin: (En voz baja) Mi actuación fue buena
Dean: ¿Qué tu actuación qué?
Danielle: No he abierto la boca
Roberts: (En voz baja) Si, claro
Danielle: ¡Oye! ¿Sabes qué no soporto de las personas? ¡Que no confíen en mi palabra!
Dean: (Con una gota estilo anime) Ehm… pues… gracias por la advertencia
Danielle: ¡Y ahora te haces el inocente!
Dean: ¿El inocente de qué? ¿De tu actuación?
Danielle: ¿Qué actuación?
Dean: ¿Ahora quién es la inocente?
Danielle: ¡Pues si yo actué fue por algo!
Dean: ¿Ves? ¡Ya lo admitiste!
Danielle: ¡No he actuado nada!
Dean: ¡Si ya parece!
Danielle: ¡¿Y tú qué?!
Dean: ¿¡Yo qué de qué!?
Danielle: ¡¡¡NO SÉ!!!
Dean: ¡¡¡PUES YO MENOS!!!
Danielle: ¡BIEN!
Dean: ¡BIEN!
Danielle: ¡Deja de mirarme!
Dean: ¡No te estoy viendo! ¡Tú me estás observando!
Danielle: ¡Claro que no!
Dean: ¡Claro que si!
Danielle: ¡Ya me harté de esto! ¡Me voy! (Dice caminando y adentrándose más en aquel camino extraño)
Dean: ¡Es para el otro lado!
Danielle: ¡No voy a regresar al pueblo! ¡Voy a buscar otro camino para no encontrarme contigo!
Dean: ¡Mejor para mí! (Dice caminando al lado contrario de la chica)
Danielle: ¡Mejor para los dos!
Dean: ¡Si!

Después de esa pelea un poco inevitable de parte de los chicos, el trío se miró sorprendido.
Por una plática de ellos en voz baja, habían conseguido su objetivo.

Julie: Wow, nunca he visto a alguien pelear así, hasta ahora
Roberts: Lo sé, pero mira el lado bueno, conseguimos separarlos
Irwin: ¿Y para qué querían separarlos?
Julie: Eso no te incumbe. Ahora hay que regresar al pueblo (Dice mientras salía de los arbustos junto con Roberts)
Irwin: ¡Oigan! ¡Yo hice la mayor parte del trabajo! ¡Exijo una explicación!
Roberts: ¡Pues no tendrás ninguna! ¡Sólo eres un tonto con cara de rábano!
Julie: ¡Oye! ¡Será un tonto pero es mi hermano! (Dijo dando una cachetada a Roberts)
Roberts: ¡Y tú no tienes derecho a golpearme!
Irwin: ¡Y tú no tienes derecho de gritarle así a mi hermana!
Julie: ¡Y tú no te metas!
Irwin: ¡Te estoy defendiendo!
Julie: ¡Pues no me importa!
Roberts: ¡Yo también estoy en la discusión!
Julie/Irwin: ¡No nos importa!
Roberts: ¡Pues a mí si!
Dean/Danielle: ¿¡Y ustedes qué hacen aquí!? (Se miran entre si) ¡Que tú me dejes de mirar!
Roberts: Esto no es algo que hubiera planeado. Smith, ¿Por qué regresaste?
Dean: ¡Por que esta chica que tienes parada enfrente es una necia y además se podía perder!
Julie: ¿Y por qué te preocupa eso?
Dean: ¡Por que ella me preocupa! ¡¿Algún problema?!
Danielle: ¡Si! ¿¡Por qué te tengo que preocupar!?
Dean: ¡Por que te podrías perder por lo necia que eres! ¡Y además eres importante para mí!
Irwin: Uy
Danielle: ¡¿Ah si?! ¡Pues también eres importante para mí!
Dean: ¡Bien!
Danielle: ¡Bien!
Julie: Roberts, estamos en problemas, no quisimos idear algo así
Dean/Danielle: ¡¿Y qué planearon?!
Roberts: Separarlos a ustedes dos, y funcionó mejor de lo que esperaba
Julie: (Le tapa la boca y lo golpea) ¡Idiota!
Dean: ¿Separarnos?
Danielle: ¿De qué hablan?
Irwin: ¡Conste que yo no tuve nada que ver! (Dijo mientras accidentalmente se le caían los pantalones de anciano)
Julie/Danielle/Roberts/Dean: (Se volteaban) ¡¿Qué te pasa ?!
Irwin: ¡Qué les pasa a estos pantalones! (Dijo mientras se los subía)
Danielle: u_u
Julie: Bueno, bueno, nosotros nos vamos, gracias por su tiempo (Dijo mientras trataba de irse arrastrando a los otros dos)
Dean: No, ustedes no se van, vuelvan acá (Los para)
Danielle: ¡Nos hicieron faltar a clase!
Julie: Pero es que…
Dean: ¡No hay excusa!
Roberts: Vaya Smith, ¿Hasta le gritas a una chica?
Danielle: ¿Y qué hay de ti? ¿Hasta lastimas a una chica?
Irwin: Eso no es ser caballeroso, no, no, no
Julie: No estás ayudando, tonto
Roberts: Yo no te lastimé
Danielle: No, qué va
Roberts: ¡Ya verás, muñequita de porcelana! (Dijo mientras caminaba hacia ella y la tomaba de la muñeca, doblándosela) ¡Eso es lastimar!
Danielle: ¡AU! (Cuando el chico la soltó, la chica se colocó muy cerca del “barranco”)
Julie: ¡Roberts! ¡¿Qué te pasa?!
Dean: Así que de nuevo quieres que alguien te golpee, ¿Verdad?
Julie: ¡No empiecen a golpearse aquí!
Danielle: Dean, déjalo
Dean: Bien (Dijo mientras se colocaba al lado de la chica y veía su muñeca) No puedo creer que alguien sea tan… idiota para lastimar a alguien
Roberts: ¿Ah si? ¿Así que tú también quieres ser lastimado?

El chico se acercó violentamente a Dean, pero ese pedazo de tierra no soportó el peso e hizo caer a los tres.
Roberts cayó de cabeza en un tronco, mientras que Dean y Danielle rodaron un poco más pero cayeron en hierba suave, uno encima de otro. (Dean encima de Danielle), pero ninguno de los dos se había dado cuenta.
Mientras tanto, cuando los hermanos se acercaron para ver el chisme, también cayeron, aplastando a Roberts que se estaba empezando a levantar.

Roberts: ¡Oigan, qué les pasa!
Julie: ¡También nos podemos caer señor perfección!
Irwin: Pero nos caímos muy estúpidamente
Julie: ¡No estás ayudando, tonto!
Danielle: ¡Ay, mi cabeza!
Dean: ¿Estás bien?
Roberts/Julie/Irwin: 0.0
Danielle/Dean: ¿Por qué nos ven de esa forma?
Danielle: ¡Ay, oye, quítate de encima! (Avienta a Dean) °//////////°
Dean: Aaaaah eso era xD No me había dado cuenta
Roberts: Pero miren dónde fuimos a parar
Julie: ¡Rayos! ¡Debemos salir de aquí!
Irwin: ¿Cómo piensas escalar esa pared con minifalda?
Julie: 0.0 Buena pregunta. Danielle tiene suerte de tener falda larga
Danielle: Si ^.^
Roberts: Bueno, de algún modo u otro tenemos que salir
Dean: Si, pero nadie puede escalar una pared tan empinada
Danielle: Tiene razón
Julie: Oigan, miren

Los chicos vieron hacia donde la joven estaba señalando.
Había dos hombres peleándose, los dos a golpes, pero alcanzaron a ver en uno un arma, seguramente era uno de esos bandidos.
Ya algo asustados y nerviosos, decidieron esconderse en la cabaña hasta que pasara ese mal rato, pero duró mucho más de lo que creyeron, hasta que el cielo se nubló, y empezó a caer la tormenta de siempre.

Julie: Papá nos va a matar Irwin
Irwin: Lo sé
Roberts: Los padres de todos nos van a matar
Dean: En especial el mío…
Danielle: Genial, llego a un nuevo lugar, me doblan una mano y me meto en problemas… u_u todos estamos en problemas
Roberts: ¿Tienen alguna excusa?
Julie/Irwin/Danielle/Dean: No
Danielle: Deberíamos inventar alguna

Después de esa frase, un relámpago se estrelló muy cerca de donde estaba la choza, haciendo que Julie y Danielle corrieran a los brazos de Roberts (La primera) y de Dean.

Dean: Ehm… Danielle
Danielle: Tengo miedo (Mientras se aferraba más al chico)
Dean: Danielle, estás encima de mí
Danielle: Ah, oh, uh, si claro n_nU (Se sentó a un lado del chico)
Roberts: ¿Tú igual tienes miedo? (Se dirigió hacia Julie)
Julie: Si u_u
Irwin: ¿Por qué no hay ninguna chica en mis brazos? (Dijo extendiendo los brazos y para su sorpresa, cayó sobre ellos un retrato de la anciana que vivía allí, haciendo que lo aventara) ¡AAAAAAAH!
Dean/Danielle/Julie/Roberts: (Se ríen) *No sé poner efectos de sonido xD*
Danielle: Tengo sueño (Se frotó los ojos)
Julie: Yo igual
Dean: Y yo
Roberts: Y después de todo, yo
Irwin: Yo tenía, pero esa cosa me asustó
Dean: Pero no podemos quedarnos a dormir aquí
Danielle: Al menos tenemos un lugar donde pasar la noche, a menos que quieras salir
Dean: OK, tienes razón
Julie: Buenas noches…
Danielle/Dean/Irwin/Roberts: Igual

Cada quien se acomodó en un lugar cómodo que hallaran en esa húmeda cabaña y cerraron los ojos, al cabo de algunos quince minutos casi todos estaban dormidos, excepto Danielle, que nuevamente tenía esa sensación que alguien la veía y además estar tan cerca de la tormenta la asustaba cada vez más.

Danielle: Es inútil (Dijo sentándose rendida)
Dean: ¿Qué es inútil? (Se dio la vuelta encontrándose con su amiga) ¿De nuevo no puedes dormir?
Danielle: De nuevo no puedo dormir
Dean: (Se levantó y se sentó al lado de la chica, abrazándola) Si te sirve de algo, yo tampoco me diento muy seguro con esto, me da miedo
Danielle: Dean, lamento haber… desconfiado de ti hace rato, cuando nos jugaron esa broma pesada
Dean: También yo no debí gritarte, eso no se hace
Danielle: Está bien. Ehm… también te quería decir que lo que dijiste hace un tiempo, que era importante para ti… significó mucho para mí
Dean: ¿Ah si?
Danielle: Si, nunca antes alguien me había tratado así de bien. Me alegra meterme en problemas cuando estoy contigo ^.^
Dean: También pienso lo mismo
Danielle: Bien, ahora hay que intentar dormir, ¿Te parece?
Dean: Si

Cuando cada quien se recostó nuevamente en su respectivo lugar, volvieron a sentir esa inseguridad que cuando habían estado juntos no sentían.
La inglesa, aún al dudar un poco, se giró y abrazó a su amigo, que se sonrojó bastante al sentir a la chica.
Después, con la chamarra que este tenía, tapó a Danielle, ya que esta estaba muy fría.

Danielle: ¿Uh? Ah, gracias
Dean: No hay problema
Danielle: Has hecho demasiadas cosas por mí, ¿Por qué?
Dean: Ya lo dije antes, por que me importas mucho
Danielle: (Sonrió cariñosamente) Gracias, pero te debo creo que tres con esta
Dean: No importa, algún día te las cobraré
Danielle: Eso espero. Buenas noches (Se recostó en el pecho de su amigo)
Dean: Buenas noches…