A Summer In Laguna Beach

A Summer In Laguna Beach

“Un verano, una playa, un montón de adolescentes y una competencia por quitarse la virginidad.”


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~ Advertencias: UA / Rated T / Mucho OCC / Futuro Lemmon /
~ Disclaimer: Naruto y sus personajes, no me pertenecen, son propiedad total de Masashi Kishimoto. No obstante, la historia presentada a continuación es de mi propiedad, por lo tanto, no la tomes sin mi consentimiento.

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Α sυммєя ιη ℓαgυηα bєαcн
Prólogo.
“Living with fun”
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Ellos siempre habían sido buenos hijos. Enserio. Trataban de sacar buenas notas en la escuela, a veces ganaban su propio dinero y, de vez en cuando, ayudaban a sus padres en labores domésticas. Para tener dieciséis años, eran de lo mejor. No veían el porqué de la negativa de sus progenitores.

Estaban reunidos en casa de Ino, como cada viernes; desde que tenían siete años. Siempre habían sido vecinos, frecuentándose siempre, además de que iban a la misma escuela y sus padres eran muy amigos. Prácticamente habían pasado toda su vida juntos.

— ¿Todos consiguieron el permiso? — Pregunto Sakura a los presentes, mientras les repartía a todos limonada.

— Por supuesto que no — respondió Sasuke por todos, en un tono frío.

— Rayos… y pensar que trabajamos todo el año para esto — Comentó Sai, mostrando una sonrisa, al mismo tiempo que se sentaba en una silla.

— Me rompí las uñas en la florería por nada — se quejó Ino.

— Deberíamos rogarles a nuestros padres todos juntos — Propuso Tenten —En ese caso, creo que tendríamos éxito.

— En tus sueños — Le dijo Neji — Hay que planear algo más inteligente. — Agregó, con un tono orgulloso.

— Que problemático — Susurró Shikamaru, acostado uno de los tres sofás de la amplia sala.

— Por lo menos, propone algo, “genio” —Expresó Temari, recostada en el piso, justo a su lado.

— Propongo que aceptemos la situación y ya, mujer — le contestó.

— E… Estoy de… de acuerdo co-con Shikamaru — dijo tímidamente Hinata.

— ¡No Hinata-chan, debemos convencer a nuestros padres! — Insistió Naruto, dejando a un lado su ramen instantáneo.

— Na-Naruto-kun…— y se sonrojó.

— Ahh — Suspiró la chica de pelo rosa — ¿Qué podremos hacer?

— No le veo caso — comentó Sasuke, mirando fijamente al techo — Habrá que gastar en otra cosa el dinero.

— No sé para que nos ilusionamos con ir a la playa… — Susurró Sakura.

El silencio inundó la habitación. Todos miraban el techo o el piso, decepcionados por trabajar tanto y no poder viajar a la playa.

— ¡Tengo una idea! — Anunció la rubia de ojos azulados. — ¿Por qué no nos escapamos?

— Que “gran” idea — Dijo sarcásticamente Neji — Dime algo chica lista, ¿No crees que nuestros padres nos encontrarían? Ya les dijimos a donde deseábamos ir.

— No tenemos que ir a Hawaii después de todo — comentó Temari, adoptando una posición en la que podía observar a todos.

— He oído maravillas de Laguna Beach — agregó Sai, emocionado.

— En el aeropuerto, venden boletos para ir, bastante baratos. — Comentó Ino, comenzando a celebrar con sus amigas.

— Decidido, ¡Iremos a Laguna Beach! — Anunció Naruto, con gran energía.

— ¿Cuándo? — Interrogó Sasuke a todos los presentes, haciendo que dejasen de celebrar de golpe.

— Esta noche, todos vayamos a empacar nuestras cosas — decidió la castaña por todos.

— Nos encontraremos a las nueve, en el aeropuerto del centro — planeó la chica de ojos jade.

— ¿Dejan fumar ahí? — pregunto Shikamaru, jugando con su encendedor.

— ¡Maldito vago! — Temari le golpeó el hombro. El chico solo rió.

Sí, no era el mejor plan del mundo. Sin embargo, eso no los detendría. Ellos habían trabajado arduamente para ese viaje, para divertirse con sus mejores amigos, para crear una experiencia inolvidable.

Pero, para los chicos, esto representaba más que un simple viaje…

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Sasuke guardó su último par de pantalones y cerró la maleta. Sus padres estaban en una cena del trabajo. Lo más seguro era que nadie le descubriría.

— Estúpido hermano — Y apareció Itachi en el marco de su puerta, sonriendo. — ¿A dónde piensas ir?

— Hn. Eso no te interesa — Respondió indiferente.

— Vamos hermanito, por cinco billetes, yo no sabré nada — advirtió.

— Iremos a Laguna Beach — dijo, abriendo de nuevo la maleta, tratando de acomodar mejor sus cosas — Esta noche.

— ¿Iremos? —Se le formó una sonrisita pícara — ¿Te refieres a ti y esa chica de cabello rosa que siempre te acompaña hasta la entrada?

— Todos — No negó nada, solo corrigió. Sacó su billetera y tomó el dinero solicitado por su hermano, tendiéndoselo, este lo tomo complacido. — Le dejaré una nota a mis padres, pero, si preguntan, tú no sabes nada; o les diré lo de Naomi— amenazó.

— Esta bien, puedes irte tranquilo.

— Por cierto Itachi… — En su cara se formó una extraña mueca, combinada con un color carmín que se podía notar apenas. — Sexo. Dime todo. — agregó seriamente.

— Que apresurado. ¿Por qué quieres saber?

— Yo pregunté primero.

— Bueno, tomaría demasiado tiempo explicártelo, así que ven conmigo— dijo, salieron de la habitación y recorrieron un largo pasillo, hasta llegar a la alcoba de Itachi. Fue hacia su armario y de ahí extrajo una caja, de donde sacó un par de revistas y un pequeño libro.

— Toma — y se los dio — Las revistas te ayudaran a conocer todo lo que tiene una mujer, y el libro te dará trucos. Ahora dime.

— Hmp. — Entonces Sasuke comenzó a recordar, al mismo tiempo que le relataba a su hermano…

Estaban Naruto, Sai, Neji y Sasuke en un pequeño café. Como es de esperarse, se hacían varias bromas, llenas de obscenidades, entonces, Naruto preguntó.

— Oigan… ¿Y alguno ya se estrenó?

— Yo aún no. — Confesó Shikamaru — No podría hacerlo con nadie que no fuese Temari… Pero ella ni siquiera sabe que me gusta.

— No. — dijo fríamente el chico de pelo azabache.

— Por el momento, no — expresó Sai.

— La tradición de mi familia es hasta el matrimonio — aclaró Neji — Pero, además de eso, por ahora no me interesa mucho el tema de las mujeres.

— ¿No será que le tiras al otro lado, Neji-kun? — Preguntó Sai, aparentemente con una sonrisa inocente.

— ¡Maldito homo! ¡Tan solo mírate! Con tu ropa pegadita y tu estúpida sonrisita.

— Ya dejen de pelear, que problemáticos.

— ¡Oigan, tengo una idea! — Anunció Naruto — Hagamos una apuesta.

— ¿Sobre qué, dobe? — interrogó Sasuke.

— ¿Recuerdan el viaje que haremos en verano? — Todos asintieron — Pues, en el, veremos quién logra quitarse lo virgen con alguna de las chicas.

— ¿Y cómo sabremos que realmente lo hicieron? —pregunto Neji.

— Traeremos la ropa interior de nuestra chica como prueba, pero deberá estar toda rasgada — Agregó el rubio.

— ¿Cuánto dinero habrá? — preguntó Sasuke.

— Cada uno cien dólares. — Entonces todos pusieron el dinero en una pequeña caja, la cuál sería guardada por Shikamaru, el más confiable…

— Y eso fue lo que sucedió — terminó de relatar.

— Que divertido, ¿Con quién te estrenarás? — Río.

—No lo sé, yo solo quiero ganar… — respondió a su hermano, luego salió de ahí y se fue a su habitación a guardar los artículos que le había proporcionado Itachi, al mismo tiempo que trataba de evitarlo, no obstante, el mayor lo siguió, se sentó en su cama y siguió hablando.

— Vamos, no seas amargado.

— La que caiga primero — respondió, agregándole a su rostro una sonrisa arrogante.

— Es ella, ¿verdad? — y mostró una sonrisa triunfante.

— Hn. — Tomó su maleta y se dirigió a las escaleras, bajó, dejó su nota en el refrigerador de la cocina y salió por la puerta.

— ¡Hey, al menos di adiós! — le gritó Itachi justó cuando acababa de irse.

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Fue el primero en llegar; aunque no era de sorprenderse, ya que el Uchiha era muy estricto en cuanto la puntualidad. Se sentó en la sala de espera, examinando disimuladamente el libro dado por su hermano mayor.

— ¡Teme! — alcanzó oír a lo lejos. Giró su cabeza un poco, encontrándose con Naruto y todos los demás, con sus enormes maletas.

— ¿Ya tienen los boletos? — Pregunto, en lugar de corresponder el “saludo”.

— Sí — y se los mostró Ino. — Temari hizo reservación en un hotel.

— Una amiga trabaja ahí — presumió la rubia.
La voz de una mujer anunció que el vuelo hacia Laguna Beach salía en veinte minutos. Se repartieron los boletos y los entregaron respectivamente. Pasaron por las pruebas correspondientes y finalmente subieron al avión.

Ahora no había vuelta atrás. Ahí empezaba el viaje, la aventura. Los esperaba Laguna Beach.

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Mikoto abrió la puerta de su hogar, entrando junto con su esposo. Colgó su abrigo y se cambio a una ropa más cómoda.

— Ya llegamos Ita-kun — le anunció a su hijo, asomándose por el marco de la puerta de su habitación. — ¿Has visto a tu hermano? No lo encuentro.

— Hola mamá. — Saludó — No, no lo he visto, he estado dormido todo este tiempo — mintió.

— ¡Mikoto! — Gritó horrorizado Fugaku, desde la planta inferior. Su esposa bajo de inmediato, su hijo le siguió.

— ¿Qué pasa, querido? — pregunto curiosa.

— Mira esto — Y le extendió una pequeña hoja de papel. Mikoto comenzó a leerla.

Mamá y papá:
Ya que no quisieron que me fuera de viaje por las buenas, lo hice por las malas.
Regresaré a dentro de un mes y medio. No me busquen.
Solo disfruten.
Sasuke.
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— ¡Fugaku, llama a los demás vecinos, debemos encontrar a esos niños! — le indicó la mujer a su esposo. Itachi solo reía.

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Continuará…

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Hola, soy Lady Starr, y vengo de fanfiction.net. Este es es uno de mis fics, y como recientemente me inscribí a la página de CZ, decidí subir alguno.​

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Gracias por leer.​

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​

Lady Starr.​

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