¿Quienes son las Presas y Quienes son los Cazadores?

Titulo: ¿Quienes son las presas y quienes son los cazadores?

Trama:
Muchos humanos creen que viven en un mundo completamente normal, que sus rutinarias vidas siempre están llenas de emoción, que nada podría arruinar sus alegres y sencillas vidas, pero… ¿Qué pasaría si lo que ellos piensan no es del todo cierto?, ¿Qué pasaría si a su alrededor habitara algo más que los de su propia especie?. Vayamos a lugar donde se ve este caso, específicamente a la hermosa ciudad de Paris, todos sus habitantes llevan vidas normales como cualquier humano pero hay algo que ellos no saben, justo a su lado disfrazados como simples mortales criaturas míticas convivían con ellos, criaturas que solo se ven en sueños y en los cuentos de dormir para los niños, distintas criaturas desde elfos hasta brujas Vivian alrededor de estos seres humanos.

Aquí comienza nuestra aventura, 6 jóvenes de 6 razas diferentes han sido enviados para aniquilar al otro, 3 chicas hermosas y 3 chicos atractivos los cuales tenía única misión, acabar con su contrincante, pero… ¿y si las cosas les salen con una mala jugada? ¿Qué pasaría si algo mas fuerte que las ganas de asesinarse llega a su corazones?.

Si quieres saberlo únete con ellos en esta aventura donde algo más que una reputación y un odio entre razas está en juego en donde 3 serán presas y 3 serán cazadores, aunque hay una gran duda…¿Quiénes son las presas y quiénes son los cazadores?....

Número de personas que participarán y tiempo: Serán 7 personas incluyéndome en esos 7 usuaros, una de ellas es un personaje especial que se vera en un momento indicado en el trama, el tiempo para cada avance será de una semana, para darle tiempo a los escritores de discutir en grupo la trama y cómo avanzar.

Ficha: lastimosamente me adelante a eso y no se si se pueda pero eh repartido las fichas a usuarios que harán este trama conmigo por lo cual ya la selección de personajes esta hecha.

Bueno @Nyxbel @Nurii-Chan @MartinaDragneel @Fersaw @Mio Hyakuya @Yumy Hinaban ya es hora de comenzar por favor pasen a dejar sus fichas y que empiece la cazeria :3

 

primero que nada un saludo a todos los lectores del foro colectivo, soy nueva en esto pero espero que esta historia que voy a publicar junto a mis compañeros @Fersaw @Nurii-Chan @MartinaDragneel @Mio Hinazuki @Yumy Hinaban y @Nyxbel sea de su agrado es algo que ya se venia cultivando y es horita que por fin empieza a florecer, bueno sin mas que decir disfruten de este fic :3.

capitulo 1:
"Kailyn Arkeiden"

Por donde empezaría este relato , a si ya se por donde empezar, comenzare relatando el como fui enviada a esta absurda misión para trabajar acompañada junto a especies que no creo poder soportar:

"Era un hermoso día en los preciosos bosques blancos de mi amada Escocia. andaba patrullando junto a mi escuadrón de elfos ya que últimamente la magia en ellos se desvanecía, sus animales y seres mágicos empezaban a morir repentinamente, y no solo eso sus arboles, flores y demás vegetación se marchitaba de forma muy rápida:

— Ark Kailyn este es el informe de la parte norte del bosque — me dijo un elfo de ojos y cabellos castaños vestido con una ligera armadura elfica plateada, el cual me entregaba un pergamino con un sello de oro.

— Todo empeora cada vez mas — dije de forma seria leyendo aquel pergamino — Sera mejor volver a Lord Elrod le interesara saber esto — después de eso jale las riendas de mi hermoso kirin del trueno, un bello caballo mitad dragón el cual solo me obedecía a mi.

Tardamos unas 2 horas, pero por fin habíamos llegado a nuestro hogar, Eldirian, la legendaria cuidad de plata de los elfos del bosque blanco. Al llegar varios soldados se acercaron sujetaron a mi hermoso kirin y pude bajar tranquilamente, agarre sus riendas y me dirigí a los establos, no tardo mucho en llegar un joven elfo vestido con trajes principescos, de ojos azules y cabello negro:

— ¿Príncipe Elian que se le ofrece? — pregunte tratando de no sonar cortante pero no podía evitarlo, desde hacia meses me había dado cuenta de su extraña obsesión conmigo.

— Veras mi hermosa Ark Kailyn mi padre quiere verte urgente en el salón del trono — me dijo este viéndome de arriba para abajo devorándome con la mirada, lo cual me desagrado mucho.

— Bien, iré enseguida — dije de forma fría pasando por su lado — de no ser porque eres el príncipe, te habría castrado hace meses — espete amenazante consiguiendo mi objetivo, asustar a ese niño mimado lo cual me hizo reír arrogante.

Camine al impotente palacio de la familia real elfica, subí las escaleras apreciando la decoración, todo de color blanco con decoraciones de plata, estatuas elficas de mármol y nuestras exquisitas pinturas. Al cabo de 15 minutos llegue al salón del trono, en frente justo en el medio yacían mis reyes, mi rey Lord Elrod y mi reina tan hermosa Lady Elidir, ambos vestidos con sus trajes reales de color blanco y plata, con miradas serias pero a las vez cálidas, en serio nunca me cansaría de estar frente a ellos, justo a su lado estaban mis antiguos maestros Ark Aron y Ark Aria, lideres principales de los ejércitos elficos. Me acerque hasta quedar a una distancia prudente de ellos, me arrodille y baje la cabeza de forma respetuosa a mis maestros y a mis reyes:

— Levantate joven Kailyn, recuerda que estas a la altura de poder vernos sin reverenciarnos — me dijo mi reina con el tono mas dulce que podía existir, casi maternal lo que me hizo recordar a mi madre, asentí levemente y me levante pero aun me daba nervios verlos a los ojos.

— Mis reyes han mandado a llamar a su humilde sierva — dije respetuosa sin levantar la mirada.

— Así es joven elfa — me dijo serio pero amable el rey poniéndome nerviosa — nuestra razón por la cual te hemos mandado a llamar es por la situación que sucede en los bosques — me dijo el suspirando de forma preocupada lo cual me alarmo.

— Lo se señor mio — comente por fin levantando la mirada — hoy recibí un informe sobre la parte norte del bosque, las plantas mueren con rapidez y los animales no quiero ni decirlo — explique de forma nerviosa ante su posible reacción.

— Lo sabemos Kailyn — me calmo mi maestra Aria — es por esa razón que estas aquí — me dijo ella viéndome con sus bellos ojos violetas.

— No entiendo — dije nerviosa ya sintiéndome intimidada por sus miradas — ¿Que tiene que ver esto conmigo? — empece a temblar tenia un presentimiento que no me gustaba para nada.

— Ark Kailyn — me llamo la reina lo cual me puso nerviosa — Debes viajar a otro país, junto con otras dos chicas para buscar, cazar y exterminar a tres chicos que según nuestros informantes, son los causantes de todo esto — me explico ella viendo directamente a los ojos.

Simplemente me quede en estado de shock, no respondí ni refute nada sencillamente hice una reverencia y me retire del palacio. Esa noche solamente estaba mi hermana mayor Kiara Arkeiden, a sus 32 años Kiara era la mas hermosas de las elfas, ella era muy amable y comprensiva, era la madre que perdí hace años.

— Hermana — escuche la dulce voz de Kiara llamarme, así que dirigí mi mirada a ella y sonreí al verla, aunque se que mi sonrisa no era para nada feliz.

Por primera vez en mucho tiempo detalle a mi hermana, su hermoso cabello rubio mas oscuro que el mio, sus preciosos ojos azules como el océano mismo, su piel blanca de porcelana tan fina y delicada, y sus cuerpo igual de hermoso como siempre cubierto por aquel delicado vestido azul celeste amarrado al cuello y para decorarlo un hermoso cinturón de plata.

— Te ves hermosa Kiara — respondí con una dulce sonrisa al haberla detallado, en serio no importaban los años ella seguiría siendo las mas hermosa de todas.

—Gracias hermanita — respondió ella devolviendo la sonrisa mientras se acercaba a mi y me acariciaba maternalmente el cabello lo cual me hizo suspirar de forma tranquila y relajada, regrese la vista a la ventana suspirando preocupada — Hermana se que algo te preocupa puedes contarme y lo sabes — me dijo ella dulcemente, en serio la amaba era la madre que perdí hace años.

— Kiara — llame de forma suave a mi hermana la cual me miro atenta — ¿Crees que sea buena idea ir a esa misión? — pregunte temerosa a su reacción ya que no había querido hablar de este tema con mis hermanos desde que había regresado del palacio.

— Kailyn — me llamo ella suspirando lo cual me hizo temblar del susto — eres mi hermana menor y sea lo que sea que elijas yo lo aceptare — me dijo sonriéndome, no aguante mas y me lance a sus brazos abrazándola de forma suave.

Un mes mas paso desde eso, ya estaba en el aeropuerto escoses esperando mi vuelo para irme a París, dirigí mi mirada a mis hermanos, a mis maestros y mis reyes, los cuales me habían acompañado ese día. Me daba dolor alejarme de mis hermanos, era la primera vez que nos separaríamos tanto tiempo y se que si a mi me dolía a ellos les dolía mucho mas, mis hermanos se acercaron a mi y me abrazaron con necesidad mientras sollozaban.

— Tranquilos regresare tan rápido como pueda lo prometo — les dije sonriendo mientras escuchaba como llamaban a los que tomarían el vuelo a París.

Suspire ante ese llamado, los vi por ultima vez agarre mis maletas y me dirigí al hangar para subir al avión, voltee mi mirada para verlos por ultima vez, sentí como mis ojos ardían así que subí la capucha de mi suéter cubriendo mi rostro para que no vieran mis lagrimas, después me di la vuelta y camine ingresando al avión mientras sentía como una parte de mi se quedaba en Escocia..."

Y esa es mi historia, llevaba 5 horas en el avión desde que salí de Escocia, miraba por la ventana con ojos apagados mientras escuchaba Dernire Danse de Indila, se que era raro de los elfos conociéramos estas cosas que si teléfonos, tablets, laptops, etc etc etc. Pero gracias a infiltrados en el mundo humano conocíamos de esas cosas al igual que de la moda humana, suspire agotada — " espero regresar " — pensé preocupada mientras cerraba los ojos y me dormía esperando por fin llegar a Francia...

 

Capítulo 2: Thanatos

Ya ha caído la noche. Fue un buen día, esos humanos me hicieron correr por todo el bosque, pero logré matarlos a todos, creo que la mujer que cayó por el acantilado no murió, qué más da. Me es interesante, otra vez me dispararon con una pistola, pude sentir un pequeño piquete, sin embargo, como siempre, la bala rebotó en mi piel. Lo que me importa ahora es llegar a casa y limpiarme, estoy llenó de sangre y apestó a viseras humanas, detesto este olor, bueno, quizás no mucho.

Por fin llegué, esta casa me ha servido de refugio durante mucho tiempo, es pequeña y está hecha en su mayor parte de piedra, pero los humanos no se acercan aquí ni de broma, por lo general.

Vaya, hace frio aquí dentro, debo encender la chimenea. Nunca me ha molestado el frio, pero el calor es mejor, iré al baño y luego me cambiaré de ropa. Por cierto, esa cosa negra, alargada, escamosa, con alas y con espinas que duerme cerca de la chimenea es Ithirion, mi dragón, me lo regaló una persona muy especial.

– ¡Hey! Bastardo de fuego, despierta – ¿Un poco rudo quizás?

– ¡Qué demonios quieres Thanatos, déjame dormir en paz! – Tiene una voz bastante gruesa, parece gutural, pero no me intimida.

–Has algo útil y enciende la maldita chimenea – Suelo ser un poco rudo con él, pero es mi amigo y lo más cercano a compañía que tengo.

–Vete al diablo, me despiertas solo para eso – Ithirion es un poco terco, pero siempre me obedece.

–Deberías ser más útil, duermes 12 horas al día – Esa chimenea arde de maravilla cundo Ithirion la enciende.

–Ahora déjame volver a mi sueño, estaba quemando una aldea y devorando ancianos y niños – Es curioso que diga eso, cuando tiene el tamaño de un oso, si, es grande, pero no tanto como para hacer lo que dice – Por cierto, date una ducha, apestas a viseras de humano.

Entre a mi baño para darme una ducha y cambiarme de ropa. Mierda, el agua a estado helada, seguro hubiera matado a un humano, en fin voy a afilar mis espadas y luego iré a dormir.

–Escuché que mañana habrá un campamento de humanos a unos kilómetros de aquí, me gustaría ir y dar rienda suelta a mí deseos homicidas, beber sangre y quizás reírme de su sufrimiento – Le dije al dragón.

– ¿Quieres que yo vaya o qué? – Me respondió sin moverse o abrir los ojos.

–Sí, idiota, eso quiero que hagas, te hace falta un poco de acción. Seria genial que…–Acabó de escuchar ruidos fuera de mi casa.

Debo averiguar quien anda allí, tomaré mis espadas. He salido y me sorprendo por lo que veo, hay un grupo de 6 humanos aquí fuera, tienen armas y me están apuntando, me preguntó si saben quién soy yo.

–Buenas noches – Les digo, obviando el hecho que solo con verlos deseo asesinarlos.

–Tenemos que matarlo, es un demonio – Comenzaron a gritar, cosas de todo el tiempo, humanos que creen que sus armas harán algo en mi contra.

Sí, abrieron fuego, no, no me hicieron nada. Me aburrí de recibir plomo, me desvanecí en la oscuridad, como suelo hacerlo. Es aquí donde ellos comienzan a gritar desesperados y suplicar a su dios que los ayude, humanos tontos. Ellos nos saben que si hay oscuridad yo soy intangible e invisible.

Lo siguiente que escucharon era el sonido de mis espadas, de los huesos rompiéndose, gritos de dolor, otros de terror, sangre salpicando, una flatulencia, porque no, y esas cosas. Para no hacer largo, ni muy descriptivo – porque me censuran – terminé por matarlos a todos, pero que creen, uno de esos insectos logró escapar, no estaba muy lejos, y había suficiente oscuridad para alcanzarlo en menos de un segundo, no obstante, por extraño que parezca, no quise matarlo, como que no me daba gana, decidí regresar a casa.

Sin embargo y de la nada, escuché un fogonazo y claro, la luz de dicha llama, seguida de un grito, obviamente del sujeto que había dejado escapar. Volví la mirada y si, allí estaba ella.

–Buenas noches querido – Detesto cuando me llama así, además de su voz, que sí, es bastante sensual, pero nunca quita ese tono pervertido.

–Justo lo que me faltaba ¿Qué quieres ahora Skyla? – La verdad no me agrada mucho esa mujer

Qué por cierto, para que lo sepáis, no es una mujer, es una súcubo de alto rango, creo que se codea con los demonios mayores.

– ¿Por qué siempre me recibes así? – Se acercó a mí fingiendo una cara inocente.

Debo admitir que es muy hermosa. Cabello largo negro como la noche, piel ligeramente morena, ojos rojos, labios rosados y considerablemente carnosos, cuernos algo pequeños en color negro carbón, alas pequeñas también negras con rojo, grandes pechos, obviamente, curvilínea, de piernas gruesas y claro, su cola, propia de los demonios, es de color negro y termina en una punta de flecha. Viste algo así como una chaqueta de mezclilla, pero nunca la cierra dejando ver su sostén, negro por cierto, debajo lleva un short de mezclilla igual demasiado corto, no llega ni a la mitad de sus muslos y finalmente botas tan altas que llegan debajo de sus rodillas, creo que son de cuero.

– ¿No me vas a invitar a pasar a tu casa? ¿Acaso no eres un caballero? – No sé qué le pasa, pero ahora me está abrazando, y detesto que lo haga.

–No, no soy caballero, suéltame y dime que quieres – No me molesté, porque no puedo enojarme con ella, pero si la aparté de mí.

–Eres un grosero. Pero está bien te diré lo que quiero. Veras se están suscitando ciertos acontecimientos en la ciudad de Paris…. –La interrumpí.

– ¿Dónde mierda es eso? – ¿Qué? Soy un demonio asesino, no un maestro de geografía.

–Cállate y déjame continuar. Como decía, estas cosas están pasando y te tengo una misión muy interesante cariño. Existen 3 mujeres de razas diferentes, una ángel, una elfa y una hanyo…–Volví a interrumpirla.

– ¿Qué es una hanio? – En mi vida había escuchado eso.

–Hanyo, Thanatos, hanyo – Detesto que me repitan las cosas.

–Hanyo, hanio, hato, es igual. ¿Qué es eso?

–Es como tú, ¿Si? Con eso es suficiente ¿Me dejas terminar ahora? –Creo que se enojó, no me importa – Como decía, tu misión consiste en asesinar a esas tres mujeres, estas son sus fotos – Me dio las fotos – Un detalle más hay otros…–Y si, la volví a interrumpir, esta vez lo hice apropósito, para molestarla más.

–Oye está apenas es una niña – Dije mostrando la foto de una.

– ¿Y te importa su edad? – Oficialmente, Skyla está molesta.

–No, no, la verdad no, igual la voy a matar, continua.

–Como decía, tienes que matar a esas tres mujeres, pero hay un detalle más.

–Perfecto, busco un mapa, llego a parís y las mato, nada complicado – Que más me da, más difícil será encontrar París.

–Espera, aun no te he dicho un detalle, también hay otros dos hombres de razas diferentes, ellos te ayudaran, toma – Me dio la foto.

–Vaya este tipo si es raro – Su ropa me parece rara.

–Mira quién habla, el demonio que vive en el bosque con un dragón y tiene tatuajes por todo el cuerpo.

–Bueno ya cállate ¿Quién es el otro?

–Toma – Y me dio otra foto.

– ¡Vaya pero que tipo más raro, quien viste así hoy día!

– ¡Quieres dejar de burlarte Thanatos, no tienes ni idea de quien estás hablando! – Me gritó, no puedo creerlo, me gritó. Lo hace todo el tiempo – Como te descuides te parten a la mitad.

– ¿Y qué? Como si me importara morir – Bueno, si voy a morir que al menos sea a manos de alguien más fuerte que yo – En fin, prefiero hacer esto solo.

–Pues no, tienes que trabajar en equipo.

–Puedo matarlos a ellos por “accidente” – Hagamos énfasis en accidente.

–No, tienes que trabajar con ellos y no les puedes hacer daño, si te atreves a hacerles daño – pausa, aquí es donde sale de sus casillas.

En este punto esa sensual forma femenina desaparece y da paso a una bestia del averno. Enorme, de piel roja, músculos más grandes que los de un fisicoculturista, garras negras y afiladas, un par de ojos en color rojo fuego, una dentadura compuesta de puros colmillos y va, que no se diga más, patas de cabra y claro, su cabello se prende en llamas.

– ¡Si te atreves a hacerles daño, yo misma te arrastraré al 7mo nivel del averno y mi padre te torturara por toda la eternidad y más te vale matarlas a ellas, es una orden!– Si, da miedo y tiene mucha fuerza. Sí, me acabo de mear en los pantalones. Bueno, si alguno se preguntaba porque la obedezco, pues es por esta razón y otra, pero está es la principal.

–Vaya. Bunas noches mi señora, veo que está conversando muy a gusto con mi compañero – Maldito dragón, solo aparece para burlarse de mí, puedo escuchar su risa.

Ahora regresa a su forma sexy y la mancha en mi pantalón no se ve por qué es negro.

–Bien mi querido Thanatos, espero hayas entendido y espero, cumplas con lo que te pedí – De poco le sirve usar una voz tan tierna, me acaba de amenazar con un futuro lleno de dolor en el averno, el daño psicológico ya está hecho.

–Sí, haré lo que dijiste – Que más me queda hacer.

–Perfecto, por eso te quiero –Esas palabras lo que en realidad quisieron decir fue “Sabes que eres mi esclavo más fiel y por eso no te mato” y tuvo que aderezar el momento con un beso en mi mejilla, ella sabe que odio eso – Te veo luego guapo.

–Ya lárgate – Quería parecer rudo.

Por lo menos ya se fue. Ahora estoy solo con el imbécil de Ithirion que no ha parado de reírse y cree que no lo escucho.

– ¡Ya cállate imbécil! – Detesto su risa, bueno no, solo cuando se ríe de mí, lo cual es muy seguido. “# hashtag: maldito dragón”

–Bien Thanatos ¿Qué haremos ahora? No creo que te hayas orinado por nada – Como se dio cuenta.

–Tenemos que ir a Paris a matar unas mujeres y seremos ayudados por otros dos hombres – Mi pantalón está muy húmedo, mierda.

–Eso suena interesante ¿Los mataras? – Eso quiero, pero por algún motivo creo que no es buena idea.

–Creo que no. Lo que importa ahora es saber dónde carajos está Paris – Ni siquiera sé donde vivo, con eso lo digo todo.

–Entonces vamos de una vez.

–No, tengo que hacer algo antes de irnos – Creo que ya saben a qué me refiero.

–¿Qué cosa?

–Cambiarme de pantalón – Que bueno que tengo como 50 pantalones iguales.

Una horas más tarde, ya por la madrugada. Bueno, por allí andaba yo, cerca del bosque hay una carretera decidí tomarla para saber a dónde llega. Pero para que mi estúpido dragón dejara de burlase hice algo.

–Te odio Thanatos, eres un imbécil – ¿Qué hice? Pues lo estoy cabalgando.

–¡Arre, arre! – Me gusta humillar a todos, excepto a Skyla, porque no puedo.

– ¡No soy un maldito caballo! – Creo que está molesto

–Ithirion vas muy lento, mis botas tienen espuelas ¿Quieres probarlas?

–Corre Ithirion, ¡corre! – Y así mis pequeños padawans se hace correr a un dragón.

Después de algunos minutos llegué a lo que los humanos llaman una gasolinera. Aparque mi dragón aun lado de una bomba y bajé.

–Oye Ithirion ¿De cuál usas, de la verde o de la roja? – Tomé una de las pistolas de gasolina para molestarlo.

–No soy un maldito auto – Creo que la gasolina lo incomoda.

– ¡Tanque lleno!

– ¡Aleja esa mierda de mi o volaremos en pedazos! – Si, le incomoda la gasolina.

No lo había notado, pero al otro lado de la bomba había un humano, y creo que estaba algo asustado.

–Tranquilo, es que es último modelo y está algo nervioso – ¿Qué? Me gusta el sarcasmo.

Me acerque a él para mostrarme amable y social.

– ¿Oye ya viste la frambuesa? – Eso lo dije yo.

–Que, que, ¿qué frambuesa? – Creo que está nervioso.

– ¡La que te corta la cabeza! – y si, lo decapite al instante.

–Eres un bárbaro Thanatos – Eso lo dijo Ithirion.

– ¡Ithirion! No seas gay, matar es muy divertido y más si lo haces con una rima muy ingeniosa – No sé ustedes, pero matar me divierte mucho.

En fin entré en la tienda de autoservicio que está a un lado de la gasolinera. Solo hay una chica, creo que tiene 19, la verdad no sé y no me voy a poner a averiguar.

–Oye niña, necesito un mapa, el más grande que tengas.

–Allí señor – Me señaló un anaquel

–Gracias, por cierto, tienes algo en la cara – La joven tomó un espejo para verse, entonces le arrojé mi espada y le atravesó el cráneo, pero fui muy rudo y se clavó en la pared – Quizás no me creas, pero creo que es mi espada.

En fin, obviando mi broma tan ingeniosa y cruel, bueno eso de cruel lo dice Ithirion, creo que no fue cruel. Cruel es que la planten en la primera cita, que le clavé una espada en la cara no es cruel, es un poco violento.

Tomé algunos mapas y me fui. Unas horas después y a lomos de mi auto, digo, mi dragón. Miré los mapas todo el tiempo.

– ¡Andá! – En mi vida había visto un mapa tan grande – Oye Ithirion ¿A que no sabes en qué país vivimos?

–Por el amor al averno Thanatos, te he dicho mil veces que vivimos en Alemania, ¡Alemania!

–Según este mapa los humanos llaman a mi bonita residencia “El bosque negro” que nombre tan curioso.

–Thanatos, también te había dicho ya eso – No lo recuerdo.

–El punto. De aquí a Paris hay 640 kilómetros, eso es mucho, más te vale que te muevas más rápido, cuando amanezca tendrás que volar.

–Maldito seas Thanatos – Lo que realmente quiso decir fue “Te quiero y eres mi mejor amigo”

–Yo también te quiero Ithirion mío amigo.

 

Capitulo 3: Midori Suzuki

¿Por que me sucede esto a mi?... ¿sera por que no soy como las personas normales? ¿sera por que solo quise ser alguien de ayuda?...
Solo recordar eso me hace sentirme como una cosa rara... Mas bien, ya lo soy...

(Hace unos días)
Todo comenzó una mañana que parecía ser de lo mas normal...

Iba de camino al pueblo con mi capa puesta y con Mimi escondida dentro de ella para comprar, ya que me había quedado sin comida para Mimi y sin hilo para coser mis ropas. Cerca de la entrada sur del pueblo me encontré con un pequeño niño, la cual parecía perdido. Me acerque y le pregunte:

-¿Que haces aquí solo pequeño? -Me agache quedando a su altura-

-N-no e-encuentro a m-mi m-madre... -Decía mientras unas lagrimas pequeñas brotaban de sus ojos-

-Ven, te llevare con alguien que pueda ayudarnos... -Le miro con una sonrisa mientras tomo su mano, acto seguido, me dirigí a un guardia que estaba por el área- Perdóneme, señor guardia, he encontrado a este niño extraviado por una de las entradas-

-Ven conmigo niño... -En un tono serio, el guardia le dijo al niño, haciendo que este se ocultara detrás mío-

-No te preocupes, estarás bien. -Le digo tratando de tranquilizarlo-

El niño con un poco de desconfianza se asoma y mira al guardia, pero por el miedo se esconde nuevamente

-No tengas miedo, no te pasara nada malo, confía en mi... -vuelvo a agacharme para quedar nuevamente a su altura-

-Gracias señorita... - El niño me abraza, dejando caer mi capucha y dejando al descubierto mis orejas-

El guardia, al ver las orejas de esta, se pone en posición de ataque - ¡Oye! ¡Aléjese de ese niño! - Dicho esto, mas guardias vinieron a ver que sucedía-

Una señora, con aspecto de ama de casa se acerca a tal escena - Tom! Mi pequeño niño! - El niño, al oír a su madre se fue corriendo a abrazarla-

-A-Aléjense! T-Todos! - Dije en alto,sacando mi katana, tratando de no ponerme nerviosa, ya que no puedo controlar bien mis poderes estando muy nerviosa

-¡Esta armada! -uno de los guardias grita, haciendo que todos se alejaran unos pasos

Yo cada vez me ponía mas nerviosa por las cosas que se oían entre el murmullo

-C-Cállense... - Dije conteniendo mis poderes lo mas fuerte que pude. Pero al oír que los murmullos se convertían en gritos no pude contener mas tanta presión - ¡Eh dicho que se callen! - Al gritar eso, una ráfaga de viento se formo a mi alrededor, haciendo caer a todos menos a un que otro guardia -

Después de lo sucedido me eche a correr pero los guardias fueron demasiados rápidos y me capturaron.

(En el presente)

Yo estoy en una celda prisionera, con Mimi aún escondida en la capa.

Un guardia abre la puerta de mi celda y me toma bruscamente, llevándome con un guardia de un rango mas alto

-Tengo una noticias para ti... - Empezó a hablar el guardia - Has sido elegida para una misión en París con otras 2 chicas para exterminar a 3 chicos, si completas la misión te entregaremos tu libertad, pero si no lo haces... - Hizo una seña con su dedo, pasándose su dedo por su cuello- Pueden llevarla a su celda muchachos - Finalizo-

(2 días después)

Ahora estoy en una carroza en dirección al aeropuerto con la poca ropa que me dieron en la maleta

-Solo quiero que esta tortura termine... - Dije casi susurrando para que nadie oiga-

Fin del capitulo número 3... :3

 

Cap. 4: Yusei Blad

Otro día más, otro día aburrido y mediocre, me levante de la cama mire por un orificio en la cortina, el sol estaba en su máximo esplendor, me aleje del orificio, no es que me dañara o algo simplemente odiaba el sol. Me levante, mi departamento solo contaba con una cama, un buro, un baño y una cocina pequeña la cual nunca usaba. Me puse rápidamente una sudadera negra y un pantalón negro, tenía mucha hambre... Vamos a ver... en el parque ya casi nadie iba, en las calles corría peligro de ser descubierto pero no tenía opción. Tal vez en el edificio aun había gente... Abrí la puerta del que sería mi apartamento y justo frente mío note pasos.

— ¡Buen día vecino!

Alce la mirada, era la familia de enfrente, conformada solo de padre e hijo, traían cajas y mochilas...seguro se mudarían, el niño se notaba de unos 8 años más o menos, se escondía detrás de su padre y miraba cauteloso.

—Hola...— respondí serio y con voz fría, encontré mi almuerzo, mis ojos se tornaron rojos.
— ¿se encuentra bien?

No respondí y me lance a su cuello, clave mis colmillos en su cuello y succione su sangre rápidamente, cayó al suelo sin vida, el pequeño temblaba de miedo, horrorizado por la escena, dejaría al niño con vida pero no deseo que sufra con la usencia de su padre igual que yo con los míos...
Intento huir pero lo levante del suelo haciendo que flotara y tome su sangre... muy poca pero era suficiente para satisfacer mi sed.
Los regrese a su apartamento, revise sus pertenencias, tenían bastante dinero, lo tome y volví al mío; Satisfecho, tape bien las ventanas con las cortinas, me metí de nuevo a la cama, y me arrincone en esta, cerré mis ojos haciendo que volvieran a marrón. Ya hacía tiempo que no podía sentir nada ni dolor, ni odio, ni felicidad pero si hambre y necesidad de algo… mi corazón se había vuelto roca eh iba despedazándose poco a poco. Ya no me importaba nada, incluso si me torturaran o mataran, harían un gran favor.

Sabía bien que no solucionaría nada encerrándome, claro está pero, ¿Qué podía hacer?, vengar a mis padres no funcionaría pero aun si vengarlos me aria feliz o eso creo yo. Quería salir de las sombras y tomar el lugar que alguna vez fue mío.

Me decidí por salir, no hacía falta cerrar el apartamento. La calle estaba vacía, alguna que otra persona corriendo, logre ver a una niña pequeña llevaba una barra de pan tomada de la mano de su madre, baje la cabeza y seguí caminando. El sol no traspasaba la sudadera, un punto a mi favor, llegue a un callejón y me recargue en una de las paredes; Un gato blanco se me acerco y me miro detenidamente… No es que no me agraden los gatos pero no me gusta su mirada, lo ahuyente y me senté en el suelo recargando mis brazos en mis rodillas. Me quede ahí aproximadamente tres horas, reflexionando, ¿sobre qué?, no lo sé.
Siento pasos… alguien se acerca a mí, no eran buenas intenciones, o eso creo yo, claro cualquiera lo pensaría si te estuvieras escondiendo toda tu vida… En un movimiento rápido le lance la espada, se movió para esquivarla y luego tomarla entre los dedos índice y pulgar, de no haber sido así se hubiera clavado en su pecho.

—Genial, tienes buenos reflejos —. Comento divertido, soltando la espada.

Se acercaba, podía oírlo… una vez que estaba a centímetros de mi voltee a verlo amenazante, nadie que se me acercara a esa distancia saldría con vida. Sonrió, me levante y tome su cuello psíquicamente y lo tire al suelo, no me gustaba ser molestado y quería demostrárselo. A decir verdad no era muy alto unos… no sé, ¿1.60?, traía una capucha así que no lograba ver su rostro solo esa estúpida sonrisa

—Tranquilo, no te are daño, seamos amigos ¿vale?

¿Amigo?, para que quiero un amigo, para perderlo y luego lastimarme más, así eran todos, todos se ganan un lugar en tu corazón y luego desaparecen dejándote herido. Negué comenzando a salir, no quería problemas. Me tomo el hombro, deteniéndome; rápidamente los tome de su camisa y el dorso de este aventándolo al suelo, se quejó pero se levantó algo mareado y adolorido, logre destapar su rostro, tenía ojos negros y cabello largo morado, tez blanca, algo extraño…parecía un verdadero shota, justo ahí me di cuenta que no era humano, esas orejas alargadas no eran de alguien normal.

— ¿Quién te envió? ¡¿Qué quieres?! —Grite algo desesperado, no soportaba el misterio.
—Bueno… mi nombre es Kai… aunque no sea vampiro era muy amigo de tu padre — Lo mire repentinamente algo confundido —, tienes una misión…

Solté una carcajada, odio cuando las personas se quieren hacer las formales, todo es una hipocresía. Quedo un rato en silencio algo confundido por ti actitud supongo yo.

—Se trata Paris…
— ¡Habla claro! … —Alce una ceja, ¿Qué es eso?, ¿Comida?... hablando de comida tengo hambre, sabía que mi rostro cambio a una sonrisa tonta, diablos

Me miro desconcertado, tal vez no tenía ni idea de lo que decía o expresaba mi rostro, claro cualquiera se confundiría.

—Necesito que hagas desaparecer a tres … cada una viene de una raza distinta…
—No cuentes conmigo… —le interrumpí—No me interesa ese tipo de cosas.

No pareció importarle y prosiguió —Como decía son razas distintas… —se quedó en silencio algo atónito, lo mire confundido y se rasco la nuca— No las recuerdo…—Rio nerviosamente. Me agrado el tipo y sonreí un poco, no sinceramente para lo único que lo hacía era la comida.

—Una cosa mas trabajaras con otras dos personas.

Acepte, no tenía otra cosa mejor que hacer pero no quería influenciarme con nadie, aun así acepte de mala gana, me extendió la mano yo lo tome con la mente, esperando que lo sintiera pero no fue así, suspire… no me gustaba mostrar aprecio o interactuar simplemente por timidez, lo ignore, tome mi espada y salí del callejón. Me metí de nuevo al apartamento busque mis antiguas ropas, me puse una camisa blanca de botones, pantalón blanco y enzima botas negras hasta la rodilla, una chaqueta larga hasta las piernas a botones y después de esta la capa que pertenecía a mi padre color rojo, me ate una vaina a la cintura y coloque la espada. Ya hacía mucho tiempo que no vestía así, traía muchos recuerdos tristes pero me agradaba bastante.
Salí y afuera estaba Esperando.

—Partiremos hoy mismo
—Bien…
— ¡Iremos a Pie! — Exclamo entusiasmado
— ¿A pie? ¿Por qué? —Lo acepto, soy un flojo de primera.
—No tengo transporte…
—Eso se puede arreglar...

Silbe una tonada de 4 notas, esperamos un rato y en el horizonte volando apareció mi fiel amigo dragón, mi padre me lo había regalado al cumplir los 10 años, su nombre es Koyhu de pequeños hacíamos miles de travesuras en el castillo de mi padre… amaba su conjunto negro con rojo, él es el único amigo que he tenido desde ese día. Aterrizo justo frente a nosotros, sus ojos reflejaban odio y fuego puro al igual que yo, le acaricie y recargue la frente en una de sus patas.

—Te extrañe amigo…

El gruño y se sacudió, sabía que demostraba su amor a su manera o tal vez de plano no me quería, se acomodó de forma que pudiéramos subir a él, de fondo oí gritos un verdadero escándalo, lo odiaba, solté una onda que moviera toda la tierra del suelo causando un terremoto en esa parte, se callaron por un rato. Subí apresurado a Koyhu, le ayude a subir a también.

— ¿Dónde diablos es esa cosa? ¿Cómo se llamaba? ¿pasia?
— Paris… ¿Puedo dirigir yo al dragón?

Refunfuñe y me pace a la parte de atrás dejándolo a el dirigir, Koyhu no era muy bien portado así que alzo vuelo antes de que él se acomodara, solté una carcajada, lo cual agrado a Koyhu jugo un buen rato a subir a bajar, hasta que el shot… digo Kai vomito.

—Bien… vamos…

Acomodo sus ropas y dirigió mareado, estaba aburrido y tenia mucha hambre .

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Amen el peor escrito que hesho, es besho, besho :’v