y he aqui la obra de arte mas grande desde la Monalisa... ok no xD pero si es una de mis mas grandes creaciones y que ha recolectado varios lectores en otros foros, con este fic creo que no habra problemas... Nombre del Fic: ¿Casados desde el nacimiento? tipo: Long-fic. Genero: Accion/Romance/Aventura (se que arriba puse "Epica" pero no encontre el "accion" solito). parejas: NaruHina. Autor original: Yo, osease mi personita "kurogane taichou", en otros lados me encuentran con el mismo nick solo que en la mayoria lo tengo con el guion "-" entre ambas palabras. Advertencias: habra algunos personajes OC, aunque no se si colocar a uno como OC ya que es parte de otro anime... pero la interferencia en la historia es tanto importante como irrelevante... ya me confundi yo mismo @.@ Terminado: Nu Capitulo 1: ¿Casados? La oscuridad predominaba dentro de esa lúgubre cueva, varias figuras se vislumbraban sutilmente por las velas iluminando una pequeña parte del lugar, una de ellas tomo dos copas y se las ofreció a dos mujeres las cuales se vieron mutuamente sonriendo antes de ingerir el líquido dentro de las copas. — Lo que esta noche se ha unido… que nadie lo separe —Habló el hombre que entrego las copas antes de que las mujeres implicadas sonrieran al igual que el resto de los presentes y se felicitaran mutuamente. /-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/ La noche iluminada tenuemente por la luz de la luna, dentro de un bosque un chico rubio, de ojos azules y extrañas marcas zorrunas se encontraba tirado en el césped, su respiración era agitada, cerca de él, un árbol con varios cortes horizontales y una especie de navaja clavado en la ultima línea. De la nada una espesa niebla cubrió el lugar llamando la atención del chico, levantándose como pudo pensó en mantener su guardia en alto, cual fue su sorpresa al notar una pequeña pelota color roja rodando en dirección a él. La tomo en sus manos y se dispuso a buscar al dueño de dicho objeto, no tardo mucho en divisar a una pequeña silueta que asemejaba a un niño de unos 6 años con una capucha blanca cubriéndolo totalmente. Se acercó a paso lento pero antes de que pudiera pronunciar una palabra él infante se adelanto — Es tuya… esos son los conocimientos de tus antepasados, y… lo que hará que tus verdaderas habilidades despierten — Dijo secamente él niño confundiendo al rubio. — ¿Qué quie…? — Antes de terminar su pregunta la pelota estallo cegando al rubio por unos instantes para cuando logro enfocarlos todo había desaparecido intuyendo al niño, reviso el lugar, pero no encontró nada, lo único que pudo visualizar era un pergamino en el piso frente a él. /-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/ La escena era similar, pero en otro punto del mundo, una chica de cabellos negro azulados, piel blanca y orbes perlas, se encontraba confusa después de escuchar las misma palabras repetidas al rubio y una pelota del mismo color estallara igual, repitiéndose los sucesos. /-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/ El chico rubio que segundos atrás estaba inconciente en el piso ahora mostraba una faceta nunca antes vista, sus ojos se teñían de un extraño color morado, con la pequeña pupila de tono azul claro, mientras su oponente enmascarado repetía su acto de introducirse dentro de una especie de espejo, en un parpadeo las facciones del chico cambiaron y ahora desataba una enorme furia al igual que sus ojos volvían a cambiar ahora de un tono rojizo y una pupila rasgada. /-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/ El equipo 7 regresaba triunfante de su misión, aunque algunos, por no decir la mayoría, no parecían darle mucha importancia a el hecho de haber completado una misión de rango A sin problemas. Durante todo el trayecto de regreso la única que había sonreído y charlado o por lo menos lo intento fue la, chica de pelo rosa y orbes jade, claro todo en su inútil intento de llamar la atención del chico de cabellos azabaches y ojos negros, mientras el jounnin de cabellos blancos y rostro cubierto, no despegaba su vista del libro que traía en sus manos. Por su parte el de las marcas zorrunas se encontraba sumido en sus recuerdos y en especial, analizando algo que lo tenía inquieto desde que encontró a ese niño y después de su batalla con el chico de las técnicas de hielo. Las cosas continuaron así hasta después de arribar a su aldea natal. /-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/-/ Después de un “percance” con algunos shinobis de otra aldea el rubio se encontraba realmente furioso, para empezar las técnicas de ese ninja de cara pintada lo hicieron quedar mal frente a su alumno-rival, haciéndolo quedar como un debilucho, y para colmo su mas odiado rival aparece y salva el día, y para rematar, por milésima vez, lo habían ignorado de la peor manera por charlar con el Uchiha, eso si era el colmo. — Uzumaki Naruto, Hiashi-sama solicita que vaya a su casa lo antes posible —Habló un sujeto castaño, piel blanca, de ojos perla con una banda en su cabeza, que claramente denotaba su procedencia. — ¿Que? Yo no hice nada, acabo de regresar de una misión —Reclamó el rubio, como defendiéndose de cualquier acusación. — Se me ordeno informarle de esto y llevarlo a la fuerza si es necesario —Exclamó fríamente el sujeto de ojos blancos. — Esta bien —Accedió con fastidio el de ojos azules, después de todo ya estaba más que acostumbrado a ese tipo de tratos. — Sígueme —Ordenó el hombre comenzando su camino hacia la mansión del líder de uno de los clanes mas prestigiosos de la aldea de konoha. El Uzumaki solo decidió seguirlo, “genial ¿y ahora que?” repetía mentalmente el chico una y otra vez hasta que llego a su destino. — Hiashi-sama, aquí esta Uzumaki Naruto, tal y como usted lo pidió —Dijo de forma respetuosa y haciendo una leve reverencia el de la banda a un hombre del mismo aspecto físico que él, pero con la diferencia que este tenia una mirada mas fría que el de la banda. — Muy bien, retírate y asegúrate que nadie se acerque a este lugar hasta que lo ordene —Ordenó el líder del clan, mientras el otro asentía y se retiraba a cumplir sus ordenes. El de ojos azules solo observaba la escena, pero pronto sus dudas crecieron al ver que también se encontraba hay una de sus ex-compañeras de la academia, al ver el parecido rápidamente llego a la conclusión de que esa era su familia. — Hola Hinata, ¿Cómo has estado? —Saludo alegremente el rubio a la de ojos perlas. — Ho-hola N-Naruto-kun… —Devolvió tímidamente el saludo la de pelo negro azulado. — Al fin llegas… —Comentó secamente el castaño llamando la atención de los chicos — Bien ahora podremos comenzar —Dijo colocándose cerca de los dos. — Padre… ¿para que es todo esto? Y ¿Por qué insiste en que llamaran a Naruto-kun? —Cuestionó la chica mientras el rubio se confundía más y mas conforme permanecía en ese lugar. — Porque lo que tengo que decirles les concierne a los dos —Exclamo secamente confundiendo a ambos jóvenes. — ¿Oiga de que se trata todo esto? Y ¿yo que tengo que ver? —Preguntó algo molesto el joven de ojos azules. — No andaré con rodeos…ustedes dos están casados —Expresó seriamente tomando a los dos chicos por sorpresa… ¿casados? ¿Desde cuando? *.-.-.-.-.-.-.-.-.* PD: lamento las faltas de ortografia, prometo mejorar... ¬¬ si me dicen donde estan... sayo!
waaaa!!! ¿casados? siiiiii!!!!! estan super casados!!! *...* asi es como debe quedar xD, ya habia leido este fic en otro foro hehe pero me quede con mas ganas de seguir leyendo aunque no hubo mas conti, espero que aqui si logre leer todo tu fic la idea me parece genial lo que... bueno lo que pasa en los dos siguientes capitulos xD no lo dire por que seria adelantarme a los hechos, y con respecto a errores no vi ninguno o al menos no detalle del resto esta super chevere me gusto y quiero seguir leyendo ^^ espero con ansias la conti y si no es mucho pedir avisame cuando este lista :p
dejo capi dos.... Capitulo 2: ¿Destino o maldición? Aun no era capaz de asimilarlo del todo cuando un ruido junto a él lo distrajo, giro un poco su cabeza y se encontró con la menor de los Hyuga en el piso completamente roja. — ¡Hinata! —La llamó él Uzumaki al verla en el piso e inmediatamente se acerco a revisarla — ¿Estas bien?... ¡Oye! —Llamaba inútilmente él rubio a la inconciente chica. — ¿¡Qué significa todo esto!? —Preguntó con molestia él menor con molestia al castaño frente a ellos. — Es justamente lo que escucharon, ustedes dos están casados desde el día de su nacimiento —Contestó él patriarca Hyuga de forma seria y cortante. — Eso es a lo que me refiero, ¿¡Qué quiere decir con eso!? —Volvió a cuestionar con molestia — ¿¡Me esta diciendo que estoy casado con ella desde que nací!? ¿¡Cómo es posible eso!? Y si eso es verdad ¿Por qué hasta ahora? —Vociferaba fuera de si, si eso era una broma, le parecía de muy mal gusto. — Lo creas o no es la verdad —Exclamó sin inmutarse Hiashi — y si no se los dije antes fue por una buena razón —Continuó sin perder su compostura. — ¿C-cuál es esa razón padre? —Interrogó la de cabellos negros incorporándose lentamente. — Hinata, ¿ya estas mejor? —Preguntó él de marcas en las mejillas a la chica recibiendo una afirmación casi audible. Aun no podía creerlo, realmente era cierto, estaba casada con Naruto, al principio creyó que era un sueño, pero después comprobó que no era así, se sintió feliz, mas feliz que nunca, pero su felicidad duro poco al escuchar la reacción de él rubio. Estaba claro que él no tomo las cosas como ella y no era para menos, a él le gustaba Sakura y de pronto enterarse que estaba casado con ella, seguramente le había destrozado sus ilusiones, pero por el momento no podía hacer otra cosa mas que aclarar sus dudas y las de Naruto. — Padre… ¿Cuál es la razón? —Cuestionó la Hyuga en un tono ligero pero audible. — Creo que esa parte me corresponde contestarla a mi —Habló una persona que se encontraba justo en un rincón de la habitación, su estatura y complexiones físicas no eran distintas de un niño de 6 o 7 años cuando mucho cubierto totalmente por una túnica blanca y en sus mano un pequeño balón de color azul celeste, el cual giraba constantemente con sus palmas frente a él, su voz, a pesar de su apariencia, era similar a la de un joven o un adulto. — A pasado mucho tiempo, Shiro-sama —Saludó él líder de los Hyuga al pequeño que se encontraba en la esquina de la habitación. — ¿L-lo conoces padre? —Preguntó tímidamente la chica girando su rostro al mencionado, recibiendo una simple afirmación con afirmación con la cabeza. — ¿¡Quién es usted!? Y ¿¡Qué quiere decir con todo eso!? —Interrogó acusadoramente él Joven de ojos azules. — Usted es… —Susurró la Hyuga después de observarlo de una forma mas detenida. — Veo que me recuerdas, hime-chan —Exclamó de forma tranquila el chico de blanco. — ¡Ah! ¡Eres él niño del bosque! —Gritó algo alterado él Uzumaki — ¿Qué haces aquí? —Cuestionó, no solo confuso, si no también bastante intrigado. Él “niño” rió un poco antes de contestar sin soltar su pelota ni dejar de girarla. — ¿Tú también me recuerdas? Que sorpresa… —Comentó con algo de ironía en su voz molestando al rubio — Pero bueno… dejemos eso de lado y concentrémonos en le tema —Exclamó con la misma calma de antes mientras los presentes también guardaban silencio. — Querían saber la razón del porque se les oculto todo ¿cierto? —Inquirió con algo de burla él de blanco recibiendo la aceptación de los involucrados — Bueno verán, es simple… yo se los pedí —Habló secamente pero su tono de voz se notaba divertido. — ¡Eso no nos dice absolutamente nada! ¡Y ¿Por qué precisamente tú pediste algo como eso?! ¡Además aun no nos explican eso de que estamos casados! —Gritaba exasperado él de marcas en las mejillas al borde de la ira. — Tranquilízate… si querías que te explicara eso debiste preguntarlo desde el principio —Exclamó con la misma calma el de capucha blanca mientras él rubio permanecía con un tic en el ojo — Bueno… en primera deben sentirse extraños con todo esto… y es cierto que esto es poco común y lo admito, nada agradable en la mayoría de los casos —Expresó mirando a ambos chicos alternadamente. — Pero… los case porque así lo quisieron sus padres, o mejor dicho madres, ya que sus padres no parecían muy convencidos —Explicó virando su vista al patriarca Hyuga que no se molesto en evadir la mirada del mas pequeño. — ¿Quieres decir que fuiste tú quien nos caso? —Preguntó bastante asombrado él portador del kyuubi. — Claro, soy más viejo de lo que parezco —Comentó con algo de orgullo el de ropas blancas — Pero si llegas a llamarme o insinuar que soy viejo no respondo —Amenazó con una voz gélida asustando al joven ninja. — Entendí… de veras —Exclamó asustado el gennin — Entonces… ¿e-es cierto que estamos c-ca-casados? —Intervino la Hyuga bastante sonrojada y nerviosa por su propia pregunta. — Por supuesto, pero claro no podían decirles nada a ustedes hasta que cumplieran cierta edad —Respondió con mas calma él de la pelota. — ¿Y eso por que? —Preguntó entre molesto y curioso él joven Uzumaki. — Bueno, en primera porque siendo unos niños no comprenderían el significado real de estar casados —Habló con su tono de costumbre — Segundo; porque aunque la ceremonia fue realizada hace varios años la única forma de que todo concluya oficialmente es cuando los poderes ambos comienzan a despertar —Explicó él de túnicas blancas ganándose una mirada de confusión por parte del rubio. — ¿Qué quiere decir con eso? No entiendo —Comentó él de marcas zorrunas con su rostro evidenciando la ignorancia a las palabras del “niño”, él cual simplemente negó con la cabeza en señal de rendición. — Lo que quiero decir es que ustedes están casados desde el mismo instante en que nacieron, aunque realmente fue un poco antes pero eso no importa, lo que importa es que esa unión pueden romperla o consumarla —Explicó nuevamente él misterioso chico. — Con… ¿Quién? —Murmuró él Uzumaki con la misma expresión de antes logrando que a los Hyuga resbalara una gota de sudor por su sien. — Consumarla, es decir que acepten la unión sellándola de alguna forma —Habló intentando ser mas claro — Me refiero a una muestra de afecto como un beso o algo mas —Expresó con un tono mas serio al ver la reacción del chico y adelantándose a otra torpe pregunta. — ¿Entonces quiere decir que podemos cancelar todo esto si queremos? —Interrogó emocionado él joven shinobi sin notar la desilusión de la de su “esposa”. — Básicamente si, pero para eso tendrías que encontrar a alguien que te ame y te demuestre que su amor es sincero y verdadero, que esta dispuesta a todo incluso dar su vida por ti si es necesario —Respondió seriamente él de la pelota. — Ese no es problema, ¡yo se quien es esa persona! —Exclamó sin contener su emoción él chico, mientras la Hyuga se hundía más en su tristeza. — ¿Enserio? —Inquirió con sarcasmo él de capa blanca sacando al ninja hiperactivo de su fantasía — Ten mucho cuidado, porque si te equivocas no solo terminaras dañándote a ti mismo, si no, en el proceso prácticamente todos los que conoces pagarían el precio —Advirtió algo divertido al ver la expresión del poseedor de los ojos azules — ¿Q-qué quieres decir con eso? —Preguntó temeroso por las palabras del de la capa blanca. — Tú sabes bien a que me refiero, si te equivocas el tarde o temprano se saldrá de control y créeme que no será el único que lo hará y si eso pasa… bueno… solo digamos que no será nada agradable para los que los rodean —Exclamó con una media sonrisa la cual no se noto debido a la capa. Por su parte él Uzumaki había quedado en silencio, acaso él sabia la verdad sobre él, y dijo que si se equivocaba al escoger el se saldría de control, entonces… ¿Qué hacer? — Piénsenlo… es su decisión —Comentó en un ademán de irse pero fue detenido. — ¿Por qué me amenazas con esto? ¿¡Acaso quieres que acepte las cosas por la fuerza!? —Gritó molesto sin notar como esas palabras hirieron en lo más profundo a la heredera Hyuga. Era obvio que reaccionara así, después de todo nunca la tomo en cuenta, era invisible para él, y además él siempre estuvo enamorado de Sakura Haruno, porque iba a aceptar estar con ella así de repente. — No te estoy obligando a nada… te di una salida o ¿no? —Inquirió él de la pelota con bastante seriedad — Solo te dije que lo pensaras bien antes de hacer algo de lo que podrías arrepentirte —Argumentó sin perder su pose seria. — Pero… si alguno de ustedes tiene alguna duda puede simplemente abrir los pergaminos que les di, hay encontraran no solo las respuestas que buscan, si no también un basto conocimiento ninja, considérenlo como mi regalo de bodas —Exclamó antes de desvanecerse del lugar.
Neee :s Que malo es Naruto estara perdiendo una oportunidad muy linda jimmm :s jimmm sabes me gusto muchoo que diversion espero que ese rubio abra su cerebro y se de cuenta por q si no io lo mato jajajjajajja, pero tiempo ¿nunca entendi que la pasara a los demas? y si juro q el esta pensando en Sakura lo matare muy lindo tu fic me encanto espero contii =D
este es cortito... Capitulo 3: ¿Secretos? La tarde recaía en la poderosa aldea de konoha, los tonos naranjas poco a poco comenzaban a cubrir las que antes fueron blancas nubes empujadas por el viento, al igual que el cielo que fue azulado poco a poco cambio la textura de su apariencia. Dentro de un pequeño departamento, algo maltratado por la parte de afuera, pero por dentro se podía observar un modesto lugar, con un gran contraste de la parte de afuera, mostrando un apartamento bastante bien cuidado. En el, un chico rubio, de ojos azules y con tres marcas en sus mejillas con formas de bigotes de zorro daba vueltas en círculos mientras trataba de asimilar lo que momentos antes se le había informado. ¡Estaba casado! Sus padres lo habían arreglado todo incluso antes de que ambos nacieran, ¿Qué no pensaron el daño que les causarían a ambos?, no estaba seguro, pero creía que Hinata debería estar como él, aunque sin hacer tanto escándalo claro, pero seguramente ella también tenia a alguien “especial” y ahora los planes de los dos estaban arruinados, ¿Cómo le diría a Sakura que ya tenia esposa? Esta mas que claro que ella siempre lo rechazo, pero con esto todo lo que, según él, había progresado se iba a la basura. Por otro lado, estaba también el como se lo dirían al resto de sus amigos, si bien habían acordado el no decir nada hasta que cumplieran cierta edad, también estaba el no decir nada y hacer como que nada paso, eso claro en caso de que el “matrimonio” se disolviera y continuaran las cosas como si nada hubiera pasado. Pero eso lo llevaba a su siguiente problema, si bien les dijo que si encontraban a alguien mas que los amara mas que a ninguna otra cosa el matrimonio se rompía, también le advirtió que si no era así todo seria mucho peor si “el” se salía de control. Seguía dando vueltas en círculos como animal enjaulado, jalando de sus rubios cabellos con frustración y molestia, ¿Por qué la vida jugaba de esa manera con él? Salio de sus pensamientos al sentir a alguien dentro de su casa y retomo una postura seria. — ¿Qué quieres? —Preguntó de forma molesta él rubio. Un sujeto de capucha y mascara apareció de entre las sombras del departamento de manera tranquila. — Hokage-sama solicita su presencia —Anunció sin mas él enmascarado. Perfecto, mas problemas, pero después de analizarlo un poco recordó lo que le dijo su “querido suegro”. — Dile al viejo que iré de inmediato… yo también necesito hablar con él —Respondió aun con su tono molesto — Y una cosa mas, no quiero que vuelvan a entrar así, si los descubren echarían todo a perder, ¿Quedo claro? —Inquirió de forma ruda recibiendo un asentimiento de su acompañante antes de desparecer en una explosión de humo. Por otro lado una chica de cabellos cortos, negros con retoques azulados, piel blanca y ocelos perlas se encontraba pensativa en su habitación, aunque en su aspecto se notara tranquila, en su interior todo era un completo caos. Admitía que se sentía inmensamente feliz por ser la esposa de Naruto, después de todo era su mas grande sueño, estar a su lado, pero por otra parte recordó que él estaba perdidamente enamorado de su compañera de equipo y en medio de su discusión cuando se les dio la noticia de su “matrimonio” él pregunto por una forma de disolverlo, eso era lo que mas le lastimaba, Naruto no sentía lo mismo por ella y retenerlo por la fuerza solo lo lastimaría a la larga. Suspiró, no tenia caso hacerse de falsas ilusiones, Naruto no la amaba, él amaba a su compañera de equipo, Sakura Haruno era la única chica para él y con todo el dolor del mundo, si había una forma de romper ese compromiso, ella lo apoyaría en todo para que él fuera feliz con la chica que ama. Pero entre sus pensamientos aun una pregunta rondaba por su mente, ¿Quién era a quien tanto mencionaron durante su charla? Lo único que sabia era que se referían como el, pero fuera de eso no sabia nada y ¿Qué querían decir con que se saldría de control?, lo mejor era olvidar el tema y descansar. La oscuridad de la noche poco a poco cubría la aldea de konoha y sus habitantes regresaban a sus casas por un merecido descanso después de sus labores diurnas, la brisa de los árboles por el danzar del viento y las nubes que poco a poco se acumulaban en el que anteriormente fue un claro azul cielo anunciaban la una pronta lluvia sobre el lugar, dentro de el edificio mas grande en dicha aldea, donde claramente se mostraba un letrero en forma de circulo con el kanji del fuego en el, la oscuridad cubría la mayor parte del despacho donde un anciano veía por su ventana a la mencionada aldea mientras fumaba su pipa. Aspiro fuertemente de su pipa y después libero el humo de forma tranquila sabiendo perfectamente que lo estaba apunto de suceder seria toda una batalla que no sabia si podía ganar. — Pudiste haber usado la puerta —Comentó aparentemente a la nada. — Hoy no estoy de humor viejo hokage —La voz perteneciente a un chico resonó en respuesta. — Escuche que fuiste a la mansión Hyuga, ¿Qué fue lo que sucedió? —Preguntó sin apartar la vista de la aldea. — Si sabes eso, entonces supongo que sabrás lo demás y también el porque estoy así —Definitivamente sonaba bastante irritado. Él viejo cerró sus ojos y volteo en dirección a donde provenía la voz. — Entiendo que estés molesto, pero eso no es algo que yo debía decirte —Se excuso él mayor. — ¿Y Qué se supone que haga ahora? ¡Me dicen que estoy casado con Hinata y que si tomo una mala decisión el podría liberarse! —Gritó hastiado y saliendo de la penumbra. — Naruto, se que es algo difícil de asimilar, pero ten paciencia y piensa las cosas, tus padres no lo habría hecho si no creyeran que fue lo mejor para ti —Intentó calmar el sandaime al joven rubio que estaba mas que molesto con la situación. — ¿Qué quiere decir con eso viejo? —Cuestionó esta vez él Uzumaki con molestia. — Eso tienes que descubrirlo por ti mismo —Respondió él viejo fumando su pipa, irritando mas al rubio. Había hablado de más y eso lo sabia. “Recuerde sandaime-sama no le diga nada de lo que le dije a Naruto, quiero que él encuentre sus propias respuestas, si no, esto no seria divertido” Recordó las palabras que Shiro le había dicho y también recordó el como los padres de Naruto estaban de acuerdo con lo dicho. Él rubio estaba mas confuso que antes y claramente impaciente. — Cambiando de tema, dime Naruto, ¿Qué tal Sasuke? —Interrogó el anciano para distraer un poco al Uzumaki. — Sigue siendo un teme que se cree superior a todos —Respondió molesto — Con solo verlo me dan ganas de mostrarle todo lo que en verdad puedo hacer y darle una buena paliza —Concluyó lanzando un puñetazo al aire. — Ten paciencia, si haces eso pondrías en riesgo tu misión —Advirtió algo divertido él sandaime. — Si, si, ya se, cuando me llamaste para una gran misión, pensé que por ser un ambu me darías una misión de buscara a algún criminal de clase S o algo así, no cuidar de un teme con aires de superioridad —Se quejó él rubio con un ligero puchero. — Lo siento, pero eras el único al que podía encargarle esta misión, cuento contigo —Habló lo mas serio que pudo, pero con algo de diversión por ver la actitud infantil del Uzumaki. — De acuerdo, nos vemos mañana viejo hokage —Exclamó y acto seguido estallo en una explosión de humo. “Un clon de sombra” pensó al ver a Naruto desaparecer de esa forma. Giró nuevamente posando su vista en la aldea que juro proteger, preguntándose si las decisiones de que tomaron fueron las correctas y cual será el destino de esos dos de ahora en adelante.
tiempo del capi 4 Capitulo 4: ¿Aliados o enemigos? Lluvia, simple, tranquila, un pequeño regalo de la naturaleza para los seres vivos que habitan el planeta, el caer de las finas y delicadas gotas de una pequeña llovizna era visualizada de dos diferentes formas en dos sectores de la reconocida aldea de Konoha, una de las mas poderosas dentro del mundo ninja. Por una parte una chica de cabellera negro azulada, orbes perlas y piel blanca como la porcelana veía la pequeña capa de agua en forma de gotas que caía en la parte trasera de su casa. Desde su ventana vigilaba atenta el jardín que una vez perteneció a su madre y ahora era ella quien lo cuidaba con esmero, o por lo menos eso era lo que intentaba ya que su mente divagaba en la charla que tuvieron ella y él chico del que se había enamorado con su padre. Estaba inmensamente feliz de saber que era su esposa, pero triste al darse cuenta que pensar en eso era egoísta sabiendo que él esta enamorado de otra chica, y como su esposa ella debía apoyarlo en todo, aun sabiendo que de hacerlo lo perdería para siempre. El rollo que mantenía en sus manos comenzaba a arrojarse de tantas veces que lo había apretado con fuerza cada vez que pensaba en eso. Tal vez ese pergamino tendría alguna pista de cómo arreglar todo ese embrollo. Lenta y temerosamente comenzó a abrirlo, no sabia si su temor era por que fuera una trampa o porque si lo leía y encontraba una forma de que Naruto y ella fuera libres del compromiso y él corría a brazos de Sakura al terminar. Suspiro, no, no tenia que pensar en eso, su felicidad era la de ella y por esa razón no debía temer, tomando la confianza suficiente abrió el pergamino completamente y al hacerlo una explosión de humo cubrió el lugar. La Hyuga mantenía una posición de combate con su el estilo de su clan y doujutsu activo intentando visualizar algún rastro de ataque, pero en su lugar observo a una pequeña figura entre el humo que poco a poco se disperso dejando claramente a la vista a una chica de cabellos blancos en dos coletas, ocelos verdes y de una apariencia de una niña de entre 10 a 12 años, sentada tranquilamente en la cama de la primogénita Hyuga. —Hola, pequeña ninfa —Saludó la niña con una sonrisa divertida. Hinata no tenia ni la menor idea de lo que estaba pasando, ¿Quién era esa niña? Y ¿Por qué la llamo pequeña ninfa? En todo caso… ¿Qué era una ninfa? — ¿Di-disculpa? —Pronunció confundida la de cabellera negra. En otro sector de la aldea un chico de cabellos rubios, ojos azules y tres singulares marcas en sus mejillas parecidas a los bigotes de algún animal, se encontraba en su habitación dando vueltas de un lugar a otro como fiera enjaulada observando el pequeño pergamino que se debatía entre tomar o no. Desesperado por sus propias acciones y su impotencia se detuvo alborotándose su cabellera aun más de lo que ya estaba, un grito de frustración se escapo de sus labios seguido de un suspiro cansado. Finalmente camino al papel y decidido a enfrentar lo que fuera que contuviera, nuevamente dudo al levantar un poco el borde, ¿Y si no había esperanzas para él? ¿Y si resultaba que al final tenia que aceptar todo y rendirse a ese destino? o ¿si había una solución y podía salir de esa?, con lo ultimo en mente recobro su confianza, seguro que Hinata tampoco quería algo como eso, estar casado con quien no quieres, pero ahora que lo pensaba… ¿Hinata tenia a un chico que le guste? Sacudió la cabeza al preguntarse eso, ni él supo porque lo hizo, tal vez solo curiosidad ya que no conocía mucho de ella que digamos, aprovecharía esos días libres que tenían antes del examen chunin y dado que su “querido suegro” le dio la orden de que tenia que visitarlos los próximos días y pasar algo de tiempo dentro del territorio del clan Hyuga podía aprovecharlos bien. Nuevamente suspiro, se abofeteó tratando de concentrarse en lo que iba a hacer en lugar de perderse en el hilo de sus pensamientos nuevamente, finalmente abrió el pergamino por completo y al igual que con Hinata una explosión de humo cubrió el lugar, pero este se disperso de manera mas rápida dejando ver al joven en pose de pelea y con un kunai en mano. Lo que vio al dispersarse el humo lo dejo perplejo, no era ni mas ni menos que una rara criatura de aspecto tierno con una apariencia de un lindo zorro blanco con unas extrañas extensiones parecidas a las orejas de un conejo con bordes rosas, tres puntos rojos cerca de estos y un par de aros dorados, saliendo de sus propias orejas, con un circulo en su espalda y un rostro parecido a los de los muñecos de felpa. —Pero que… —Murmuró Naruto sorprendido por la pequeña criatura que no media mas que cualquier muñeco promedio. —Vaya, al fin abriste el pergamino, creí que nunca lo harías —Él rubio escucho una voz dentro de su cabeza e intento encontrar al dueño de ella. — ¿Quién es? Sal de donde estés —Ordenó volviendo a su pose de combate. —Tranquilízate, soy yo —Profirió la extraña vocecita y la vista del chico paro en el pequeño zorro —Me llamo Kyubey, tu debes ser Naruto —Comentó meneando su cabeza de forma interrogatorio pero sin mover los labios o abrir su hocico. — ¿Tú...? ¿Cómo es que te escucho si ni abres la boca ni nada? —Interrogó un aterrado Naruto en una esquina señalándolo con su dedo índice. Kyubey lo observo confundido. —Se llama telepatía, me comunico contigo a través de tu cerebro también puedo hacer que otros convencen de esta manera, claro eso siempre y cuando este dentro de mi rango —Respondió el animalito. — ¿Y quién eres o qué eres? —Cuestionó nuevamente Naruto. —Bueno… sobre eso… — —Lo siento, me disculpo Hinata-sama —Habló la niña de cabellos blancos con una leve reverencia —Yo soy su nueva compañera —Sonrió de forma prepotente señalándose a si misma con el pulgar. — ¿C-compañera? —Murmuró aun en estado de shock. —Exacto, soy una shinigami, pero no me gusta que llamen así —Declaro claramente molesta. — ¿Shinigami? —Repitió con miedo. La shinigami lo noto. —No se preocupe no voy a dañarla ni llevarme su alma, ya le dije que soy su compañera, además no tengo ese poder, a pesar de ser shinigami fui creada de un modo… diferente —Explicó de una forma sonriente pero sin darle importancia al asunto. — ¿Creada? —Preguntó nuevamente la Hyuga. La invocación entrecerró la mirada. —Empieza a molestarme que solo repita lo que digo — —L-lo siento… —Susurró avergonzada. La extraña suspiro. —Esta bien, yo también lo siento, y si, fui creada por Shiro-sama y a pesar de no ser una shinigami como el resto no quiere decir que no pueda matar, mis poderes se basan en drenado de energía y puedo hacerlo sin que el enemigo lo note y para cuando lo haga… pues todo habrá acabado —Comentó de forma sádica que Hinata sintió algo de temor pero algo llego a su mente. — ¿Dijiste Shiro-sama? ¿Acaso es el mismo que nos caso a Naruto-kun y a mí? —Interrogó nuevamente la Hyuga. —El mismo, pero toma diferentes formas y es difícil saber como referirse a él —Miró a través de la ventana la lluvia y las nubes oscuras en el cielo. — ¿Diferentes formas? —La shinigami volteo con molestia —L-lo siento… — —A veces es un joven, otras un adulto, pero la mayoría del tiempo se la vive con la apariencia de un niño, es difícil saber cual es su verdadera apariencia de esa forma —Exclamó revolviéndose su blanca cabellera. —Pero… —Comenzó nuevamente la Hyuga llamando la atención de su compañera —Dijiste que eras mi compañera… ¿Qué quieres decir con eso? —Cuestionó con más confianza. — ¡Ah!, eso… Shiro-sama nos nombro sus “compañeros”… pero la verdad sospecho que mas bien nos coloco esos términos para no llamarnos sirvientes —Respondió con un aura oscura y con una mano en la pared de una esquina. Hinata rió de forma nerviosa pero logro preguntar. — ¿Sirvientes? ¿Por qué? No lo creo necesario — —Al parecer a un no lo entienden… usted y su esposo, al igual que todo lo que los rodea no son mas que un experimento, pura diversión de Shiro-sama —Exclamó sorprendiendo a la Hyuga. — ¿¡Un juego!? —Bramó molesto Naruto al escuchar las palabras del zorro. —Sigo sin entender el porque los humanos reaccionan de esa manera, las emociones son algo extrañas y complicadas —Comentó el animalito ladeando su cabeza. Naruto lo miro rabioso. — ¿¡Y cómo se supone que reaccione!? ¡Acabas de decirme que ese mocoso solo nos esta ultimando para su diversión! —Definitivamente estaba fuera de si. —Es por eso que no lo entiendo, ustedes tienen mascotas, ganado y utilizan a muchos otros animales de este planeta, la única diferencia es que ellos no tienen libertad y ustedes pueden hacer algo, Shiro-sama organizo todo esto pero quiere que todo fluya por su propia cuenta y que ustedes sean quien tomen las decisiones sobre eso, nosotros solo estamos para observar y ser una guía con las habilidades que surgirán en ustedes, pero no tenemos ni debemos interferir —Explicó el del circulo en la espalda. —Espera, durante todo el tiempo hablas en plural, eso quiere decir ¿Qué Hinata también tiene un compañero? — —Exacto, tanto usted como su esposo tienen un compañero asignado como guía que estaba sellado dentro del pergamino y creo que él también lo ha abierto —Exclamó la shinigami sonriente. Hinata no pudo evitar una mueca de preocupación mientras su vista giraba en dirección a la casa del rubio. —Se ve que lo quiere mucho —Comentó la niña logrando un rojo intenso en su ama. — ¡Shi-chan! —Chilló la ruborizada Hyuga. — ¡No me llame Shi! —Gritó con furia asustando a la de ocelos perlas —Lo odio —Murmuró haciendo un puchero. —P-Perdón… pero… ¿Cómo quieres que te llame entonces? —Cuestionó la primogénita Hyuga. —Nory —Respondió sonriente —Son las siglas que tenia mi proyecto al ser creada, New Organism Revitalizador Young…N-O-R-Y — La chica de cabellos negros quedo confundida por la extraña explicación, pero sonrió dulcemente —Muy bien, Nori-chan — Nory también sonrió. —De acuerdo, le ayudare a atrapar a su hombre Hinata-sama —Declaró de forma enérgica. —P-pero… creí que no tenias permitido interferir —Replicó nerviosa y ruborizada. —De hecho la orden textualmente fue “No quiero que haya interferencia de su parte, no les den consejos sobre que hacer y no les den ninguna opinión sobre cual es la mejor decisión” pero nunca dijo que no podía darle consejos para verse mas linda —Dijo sonriente. — ¿Qué es lo que harás? —Cuestionó Kyubey. —No lo se, pero grandiosa ayuda resultaste ser y el pergamino también —Se quejo él rubio al no tener nada con que solucionar su problema. —Ya te lo dije, no podemos interferir, la decisión que tomes, debes hacerla tú solo —Contestó el zorro. —Lo mejor será que vaya a dormir, mañana va a ser un largo día —Comentó él dueño del Kyuubi dirigiéndose a su habitación. El animalito solo lo contemplo mientras lo veía de forma curiosa, de verdad no entendía a los humanos y su comportamiento, pero lo que menos entendía era eso que llamaban emociones, todo eso era complicado e inútil ya que nublan el juicio, definitivamente esa experiencia podía servirle para conocer mas de sus costumbres y sus sentimientos.
perdon... me perdi en los caminos de la vida... ok no, la verdad habia olvidado subir el cap aqui ^^u lo siento... bueno les dejo el cap 5 Capitulo 5: ¿Enemigo? La lluvia había cesado y con ella un largo día termino y otro se preparaba, dentro de sus respectivas habitaciones cada uno de los ahora “esposos” descansaban tranquilamente después de un largo y agotador día, cada uno buscando sus propias respuestas e intentando buscar la solución a sus problemas. Dentro de la mente del chico de rubia cabellera se encontraba un malhumorado ser, con aspecto de zorro naranja con nueve colas, el cual no paraba de gruñir todo el tiempo. — ¿Qué sucede? ¿Tienes pulgas? —Preguntó una diminuta figura a espaldas del zorro obligándolo a girar para ver a su visitante. —Tú… —Masculló con rabia al ver al chico — ¡Maldito tramposo! —Gritó lanzándose contra él pero una especie de tela apareció de la nada atándolo de todas partes impidiéndole moverse. — ¿No son pulgas? Entonces debe ser rabia —Comentó él infante de forma bromista irritando aun más al zorro. —Desgraciado… — —Cuida ese hocico Kyuubi —Exclamó él niño cambiando su semblante a uno serio. — ¡Me engañaste! —Vociferó realmente molesto. —Yo no te engañe —Respondió tranquilamente él niño —El trato era simple, te liberaba de esa prisión y convivías con él chico compartiendo tu chacra y quien cediera al final se quedaba con el cuerpo —Recordó con semblante despreocupado. —Pero ahora que sabe todo lo de la niña y lo que tienes preparado cambia mucho —Él Kyuubi parecía realmente molesto pero su tono fue mas extraño. — ¿Qué pasa? ¿Tienes miedo de perder contra un niño? —Cuestionó burlón — ¡Insolente! —Gritó tratando inútilmente de liberarse —Yo soy el todo poderoso Kyuubi no le temo a nada y menos a un niño —Aseguró — ¿En serio? ¿Entonces qué es? ¿No me digas que después de tantos años te estas encariñando y lo que no quieres es que salga herido por alguna razón? —Continuó con su misma pose. —Por supuesto que no —Argumentó el bijuu. —Has cambiado kyuubi —El zorro lo observo receloso —Recuerdo que cuando te saque estabas feliz y deseoso de destruir todo, incluso trataste de atacarme, pero esta vez fue diferente, me atacaste pero por razones distintas… te lo dije ¿No? El chacra de ese niño es especial y creo que incluso a ti, te ha influenciado — — ¡No bromees conmigo, yo soy el kyuubi, soy la encarnación del odio, si lo he soportado es porque tu estúpido sello no me permite devorarlo y tengo que hacer las cosas a tu manera! —La furia había estallado dentro de él, tratando de liberarse para devorarlo. Él niño rió divertido. —Kyuubi, Kyuubi, Kyuubi —Repitió negando con la cabeza —Sabes perfectamente que ese sello dejo de ser efectivo hace mucho, si aun no tomas posesión de él es por el miedo de enfrentar nuevamente a sus padres o tal vez… porque ya te acostumbraste a él y realmente llegaste a apreciarlo —Comentó desvaneciéndose del lugar y liberando al zorro de su captura el cual soltó un enorme rugido. —Yo no le tengo miedo a nadie y no he sido influenciado por ningún humano, tomare el control de este cuerpo y te derrotare en tu propio juego —La mirada afilada que poseía se encontraba llena de decisión y furia por la conversación. La fría noche por fin dio paso a una agradable mañana, nada que ver con la oscura y tormentosa noche del día anterior, todo parecía en clama, la tranquilidad podía encontrarse en cualquier parte, bueno menos en dos hogares. En la mansión Hyuga todo se asimilaba al resto pero las inconformidades entre los miembros de ambas ramas estaban a flor de piel después de la noticia de que la heredera del clan estaba “casada” con él demonio de las nueve colas. Hinata aun no se acostumbraba a su nueva “guardia” que no dejaba de bombardearla con preguntas como una niñita de guardería, afortunadamente para ella no estaba sola y su familia podía evitar algunas cosas aunque las preguntas incomodas continuaban, parecía no importarle que todos la vieran de forma extraña o de forma amenazante. Suspiró, al menos tendría paz en el lugar a donde se dirigía, ya que ese sitio siempre fue tranquilo. Llego al lugar del encuentro predeterminado con anterioridad por su sensei, aun estaba bastante molesto y pensativo como para notar las miradas interrogantes de sus compañeros de equipo. Ni siquiera había peleado con Sasuke o propuesto salir a la chica de cabellos rosas cosa que los tenia realmente intrigados, a pesar de que él Uchiha trataba de disimularlo no podía evitar preguntarse que le pasaba. Gritó una maldición al aire mientras se revolvía sus cabellos extrañando mas a sus compañeros. — ¿Qué demonios te pasa Naruto? —Inquirió su compañera harta de verlo actuar como un idiota… bueno mas de lo usual. — ¿Eh? Ah no nada, es solo que no entiendo en que se puede entretener tanto Kakashi-sensei como para llegar siempre tan tarde —Mintió rezando para que le creyeran. —Yo tampoco se como puede llegar a ser tan irresponsable —Comentó la Haruno sin creerle mucho al rubio. Para alivio de él antes de que su amiga volviera a abrir la boca para preguntar algo mas apareció su sensei con unas hojas en mano. Después de su patética excusa del gato negro y la viejita les entrego los papeles con las indicaciones sobre los exámenes chunin advirtiéndoles que si no se sentían capases podrían dejarlo pasar e intentarlo para la próxima. Fue un alivio para Naruto que les otorgaran el resto del día libre no se sentía con ánimos de realizar alguna misión y además aun tenia que visitar a su “suegro” como habían acordado, seria una larga semana. Sin pensarlo dos veces se despidió de ambos compañeros en su intento de evitar preguntas pero no contó con que su alumno-rival lo abordara junto a su equipo con la idea de jugar a los ninjas. Las burlas de su mayor rival no se hicieron esperar y después de irse al rubio no le quedo de otra que aceptar, pero apenas y lo hizo un ninja extraño secuestro a la niña y rápidamente comenzó una persecución y a pesar de lograr rescatarla el sujeto escapo. Apenas logro quitarse al trío de encima se dirigió a los territorios Hyuga donde se suponía debería estar desde hace ya unas horas. En cuanto llego fue conducido con el líder del clan, Hiashi parecía no tener la paciencia suficiente como para esperar por una resolución y las preguntas sobre ¿Cómo toma la situación? y ¿Qué piensa hacer? no se hicieron esperar claro que Naruto no se quedo atrás con el mal genio y no dio una respuesta clara. —Entiendo… en tal caso creo que lo mejor será que vengas aquí por lo menos una vez al día y permanezcas un tiempo dentro del clan —Comentó seriamente el Hyuga, pero por su tono pareció mas una orden. — ¿No cree que seria muy sospechoso que yo viniera todos los días? —Interrogó con el seño fruncido el rubio. —Como esperaba de un cazador anbu —Naruto abrió los ojos con sorpresa —No deberías sorprenderte, al ser mi yerno tengo que saber todo sobre ti —Expresó Hiashi sin cambiar de pose. —Así que me ha estado vigilando —Comentó el Uzumaki restándole importancia. —Volviendo al tema, no creo que el venir aquí sin ser visto sea un problema para ti o ¿Si? —Inquirió el mayor. —Muy bien… pero aun no entiendo el ¿Por qué tengo que venir aquí? — —Si quieres obtener las respuestas que buscas debes buscar donde puedes hallarlas —Exclamó una tercera voz. Ambos giraron sus rostros encontrándose con un pequeño zorro blanco con rojo, el cual camino de forma despreocupada al rubio y subió a su hombro. — ¿Dónde demonios estabas? —Cuestionó él chico al zorro con molestia. —Fui a investigar un poco, quería saber si este lugar es tan interesante como él lo dijo —Respondió de forma natural. — ¿Él es tu compañero? —Preguntó el castaño observando al zorro. —Si, pero esa es otra historia, ¿Qué quisiste decir con lo de hace un momento? —Volvió al preguntar al animal. —Si quieres saber si continuar o no con tu matrimonio debes investigar las ventajas y desventajas y comparar cual es la mejor opción — —Hablas como si se tratara de un negocio —Reprendió Naruto. — ¿No lo es? —Inquirió Kyubei un tanto confuso. —Por supuesto que no, se supone que casarse es… bueno, es… cuando —El sonrojo de sus mejillas comenzó como algo pequeño y termino extendiéndose por todo su rostro. —Es una unión de dos seres de sexos opuestos con el fin de tener compañía y procrear a su descendencia —Al chico de ojos azules no le agrado mucho la forma en la que el animal lo describió —Esa es la definición que tengo, pero he notado que muchos lo hacen por conveniencia en cuanto fines monetarios o con el fin de ganar poder, creí que este era el caso — La mandibula del rubio se tensó al igual que el resto de su cuerpo, empuñó con fuerza sus manos y su mirada era de enfado, kyubei tenia razón y se lo había dicho la noche anterior, todo eso no era mas que un juego, entonces ¿Qué hacer? —Dejaremos esta charla para después, pero tu compañero tiene razón si quieres respuestas deberías buscarlas —Hiashi se levantó de su asiento y se dirigió a la ventana tenía que ser paciente o si no solo causaría mas problemas —Hinata esta en el jardín en el lado este de la mansión, se encuentra con su hermana ¿Por qué no vas con ella? —La pregunta sonó mas como una orden que como consejo. El rubio miro furioso al poseedor del byakugan pero después de meditarlo unos segundos decidió seguir el “consejo” del Hyuga. Muchas preguntas sin respuesta rodeaban la mente de Naruto y en especial las palabras “juego”, “conveniencia”, “poder” eran las que mas repasaba en su mente. —Oye chico, parece que te están obligando a estar con esa Hyuga —Comentó una maléfica voz en la mente del joven. —No quiero escuchar algo como eso viniendo de ti —Masculló dentro de sí. —Solo te digo lo que veo, no te están dejando muchas alternativas, prácticamente te están diciendo que la aceptes y que aceptes tu destino de estar con esa mocosa —Resonó esa voz en su mente. — ¡Ja! Y ¿Desde cuando al gran kyuubi le interesa lo que me pase? — —Mocoso estoy diciéndote que no tienes que aceptar, vamos juntos podemos acabar con quien sea, no tenemos porque seguir las ordenes de nadie, terminemos con todos —Sugirió la lúgubre voz del zorro de nueve colas. —No caeré en eso zorro —Comentó el rubio con seriedad. —Te estoy dando la oportunidad de vengarte de todos aquellos que te maltrataron y tener lo que quisieras —Musitó con furia la bestia. —No lo necesito y además… — Sus pensamientos fueron cortados de golpe, siguió las indicaciones que le habían dado para llegar al lugar donde estaba su “esposa” pero al llegar no se espero verla de esa forma. Siempre la vio como alguien rara y sombría, pero ahora se encontraba con lo que parecían ser unas pequeñas tijeras de jardinería arreglando un pequeño árbol, vestía una yukata blanca con bordes florales en tonalidades naranjas, amarillas y rojas, su rostro era claramente iluminado por el sol y su rostro denotaba una pequeña y calida sonrisa de manera que denotaba su gusto por lo que hacía. Por un momento Naruto se quedo estático observándola y mas aun al ver como su sonrisa creció un poco mas y como de forma casi maternal ayudo a su hermana que había llegado con otra planta y al parecer preguntando por indicaciones de que cuidados darle. —Se ve tan linda —Comentó una infantil voz a su derecha sacándolo de sus pensamientos de golpe causando un sonrojo en él. —Y-yo… no… bueno… si, pero no… este —Se había trabado con sus propias palabras, ¿Cómo termino en esa situación? Al parecer ella lo ignoro ya que suspiro de forma soñadora. —Esa yukata si que resalta su belleza —Exclamó sin despegar su vista de la Hyuga —Y vaya que no necesita algo como maquillaje, su piel es tan blanca y pura que resalta por si sola —Siguió con su juego observando de reojo las reacciones del rubio. La curiosidad lo venció y su vista se dirigió de nuevo a la chica y comprobó las palabras de la extraña, realmente Hinata se veía linda, tal vez mas que Sakura, se abofeteo mentalmente, ¿En qué demonios estaba pensado? — ¿Quién eres? —Interrogó Naruto a la niña. — ¿Yo? Soy la compañera de Hinata-sama, puede llamarme Nory, mucho gusto —Respondió sonriente la albina. — ¿Nori-chan? —Repitió pensativo. — ¿Qué pasa? —Preguntó curiosa la shinigami. —No es nada, tengo que hablar con Hinata —Exclamó dirigiéndose a la chica. —Se supone que no debemos interferir en ningún sentido ¿Lo has olvidado? —Argumentó el zorro de forma seria. — ¿Qué? Yo no interferí en nada, solo pensaba en voz alta, nunca nos prohibió hacer algo así y tampoco prohibió que demos algunos consejos de belleza, o “accidentalmente” lograr un ambiente romántico —Se defendió la pequeña sonriente, como si acabara de jugar una bromita blanca. —Siempre has sido buena encontrando los huecos en los contratos, pero no puedes interferir en su decisión final —Comentó kyubei con su tono inexpresivo de siempre. Por otra parte en un sitio completamente oscuro iluminado tenuemente por un resplandor azulado se encontraba un niño de túnicas blancas frente a la esfera que producía esa luz mostrando una pequeña sonrisa. —Nory… fue bueno que contemplara sus “interferencias” ahora el juego real comienza —Su sonrisa crece y en la esfera se muestran varias imágenes. Naruto luchando contra un chico de cabellera castaña y ojos platas, los genin reunidos en una sala, un chico de cabellos rojos frente a los dos con una expresión de pocos amigos, Naruto contra un chico de cabellera castaña y ojos felinos y un cachorro de un perro blanco, Hinata expulsando un chacra azulino brillante, Naruto y Hinata mostrando unos extraños ojos, Hinata contra el chico castaño de ojos perla, Naruto contra el chico de cabellos rojos de la arena, la aldea semidestruida, una versión mayor de ambos donde Sasuke cargaba a Hinata en brazos y un furioso Naruto frente a ellos y finalmente un hombre de capa negra con nubes rojas y una mascara naranja con un solo agujero. —Ahora veamos si puedes cambiar los acontecimientos… quiero ver que me sorprendas Naruto, hazlo divertido —Comentó él niño sosteniendo la esfera girándola nuevamente riendo de una forma infantil. y lo que viene sera un poco extraño... sayo!!
meresco un buen sape.... T.T lo siento... me olvide de subir la conti aqui... alguien deberia recordarmelo de alguna forma.... bueno les dejo la conti... eye sr.! Capitulo 6: ¿Deseo? El perfume de las flores y el ambiente tranquilo del pequeño jardín siempre mantenían a la joven Hyuga aislada del resto del mundo, para ella estar en ese lugar era como transportarse a otro mundo, cuando se encontraba en ese lugar nadie la molestaba, incluso su padre rara vez llegaba a interrumpir el tiempo en el que Hinata permanecía así. Era el único momento en el que podía convivir con su hermana menor sin la presión de quien era la mejor para el liderato del clan y le agradaba ser ella quien le enseñara a Hanabi sobre como cuidar adecuadamente de cada planta. —Hinata —Dio un respingo y sus pómulos adquirieron un tono rojizo al reconocer al dueño de esa voz detrás de ella. —Na-Naruto-kun —Susurró la chica encarando al Uzumaki. —Hola, tu casa si que es grande, casi me pierdo —Comentó algo nervioso, aun le rondaba la mente la forma en que la encontró. —S-si… —Asintió la Hyuga nerviosa, ahora recordaba que su padre le había dicho que tenia que visitar por una semana su casa antes de los exámenes chunin para conocer al clan, y claro después de estos darle una respuesta de su “matrimonio”. — ¿Vi-viniste a ver a mi padre? —Preguntó tímidamente. —Si, pero no era a él a quien quería ver realmente —Respondió volteando a otro lado —Q-quiero decir, que quería hablar contigo… digo sobre lo que nos impusieron nuestros padres —Explicaba nerviosamente pero ante lo último bajo su tono de voz. Hinata entristeció al recordar que el rubio no conoció a sus padres, pero también al intuir a donde los llevaría esa conversación. De pronto recordó algo muy importante, Hanabi pudo haberlos escuchado, pero cuando la busco con la mirada ya no estaba, al parecer se fue cuando Naruto llego. — ¿Qué pasa? —Inquirió el de ojos zafiro. —N-no, no es nada, ¿Qué querías saber? —Cuestionó tratando de sonar tranquila. —Bueno… según entendí la niña que anda por hay es tu compañera — —Si, s-se llama Nory — —Lo se —Hinata se sorprendió —Ella me lo dijo —Se apresuró a agregar. Hubo un raro silencio entre los dos antes de que el chico lo rompiera. —Hinata —Comenzó seriamente —Esa niña no te dijo nada de cómo romper nuestro… bueno… tu sabes —Hinata bajó su mirada triste, lo sabia, pero escucharlo de él era otra cosa. —N-no, solo me dijo lo que ya sabíamos — Naruto se mantuvo observando a la chica con su cabeza gacha, pensó que ella estaría triste y frustrada como él, eso lo llevo a recordar en la conclusión a la que había llegado la noche anterior. —Hinata, tú… bueno… ¿Hay alguien que te guste? —Interrogó de forma nerviosa, después de todo él no era alguien quien se la pasara preguntando cosas como esa a los demás. La Hyuga enrojeció por completo al escuchar su pregunta. —Oye, Hinata ¿Estas bien?, estas toda roja, ¿No tienes fiebre? —Interrogó el Uzumaki colocando su mano en la frente de la heredera. —N-no es nada, no te preocupes Naruto-kun —Respondió alejándose unos pasos de él. Naruto no quedo muy convencido pero mejor decidió no hacer más preguntas, de verdad esa chica era rara. —Y bien… ¿Me vas a responder? —Insistió, aunque ni él mismo supo porque. —B-b-bueno… si, hay alguien —Respondió evitando ver al chico a la cara. — ¿En serio? —Espera cualquier cosa menos eso, bueno tal vez no, y seguramente era Sasuke, pero recordó que ella nunca estuvo entre todo el club de fans del Uchiha. —Él es alguien que siempre me ha gustado… desde la academia, aunque no muchos lo toman en serio él se esfuerza mucho por que lo reconozcan, además siempre se preocupa por los demás, para mi es alguien muy importante y es la persona que mas admiro —Confesó reuniendo todo el valor que tenia. Naruto se quedo sorprendido, nunca pensó que Hinata fuera a decir algo como eso, pero ahora más que nunca sintió curiosidad por saber quien era ese chico, según dijo le gusta desde la academia, entonces debía ser uno de sus compañeros, pero ¿Quién?, bueno eso no importaba mucho ahora. Una idea se le vino a la mente. —Muy bien Hinata, te ayudare a estar con ese chico, aunque sea el teme de Sasuke, pero primero tenemos que encontrar una forma de salir de esto —Hinata abrió sus ojos perlados totalmente sorprendida, pensó que para esas alturas ya se habría dado cuenta pero tal parecía ser que no era así, ahora creía que hablaba de Sasuke ¿Cómo llegó a esa conclusión?, bueno, después de todo era Naruto, el ninja mas despistado de Konoha. —Supongo que estará bien, así tú estarás con Sasuke-teme y yo estaré con Sakura-chan —Ante la mención de su compañera de equipo Hinata bajo su mirada nuevamente. Claro, a él solo le interesaba Sakura y ese matrimonio se lo estaba impidiendo. —E-esta bien, Naruto-kun, e-encontrare la forma de romper ese trato y te ayudare con Sakura-san —Dijo sin levantar la vista. — ¿De verdad? ¡Que bien! —Celebró feliz sin notar la tristeza de la azabache —Ya veras que lo conseguiremos Hinata — —S-si, lo haremos —Exclamó sin muchos ánimos. — ¿He? ¿Qué pasa? —Preguntó extrañado. —Na-nada, supongo que después de todo no me siento bien —Respondió evitando la mirada de su “esposo”. Naruto la miro de forma confusa. —T-tengo que hablar con Nori-chan, adiós — —Hina… — No terminó de decir su nombre cuando la chica había salido corriendo, ¿Qué ocurría con ella?, estaba mas rara que de costumbre. — ¡Es un idiota, suéltame Kyuubei le daré una buena paliza para ver si puedo quitarle la estupidez! —Gritaba molesta la compañera de Hinata después de ver y oír la conversación. Kyuubei se limitaba a sujetarla con su cola evitando que matara al rubio, que era lo mas seguro que pasaría. —No puedes, no debemos interferir —Recordó tranquilamente. —Pero se lo merece, después de todo tengo que velar por la felicidad de mi ama —Respondió la niña. —Lo que tienes que hacer es acompañarla —Dijo sin cambiar de expresión. —Eres fastidioso ¿Sabias? —Comentó la niña con un ligero puchero. —De cualquier forma, creo que actuare más pronto de lo que había pensado —Dijo de forma tranquila Nory se calmo de inmediato. — ¿Quieres decir que usaras eso? —Interrogó sorprendida. Kyuubei asintió tranquilamente. — ¡Quiero ver! —Exclamó efusiva y con un rostro lleno de ilusión. —Tienes que permanecer al lado de tu dueña —Expresó el zorro. —Siempre tienes que ser un aguafiestas —Se quejó la menor. Naruto se mantuvo un tiempo indeciso en si seguir a Hinata o no, hasta que finalmente decidió buscarla, para su mala suerte se había perdido en medio de la mansión y recorría pasillos que creía haber visto antes una y otra vez. — ¿Cómo es que Hinata no se pierde en este lugar? —Masculló algo molesto por su situación hasta escuchar el sonido de algunas voces una de ellas le resulto familiar. Caminó hasta llegar al origen de las voces encontrando a Hinata y a un chico de cabellos castaños largos, de ojos perlas, bastante parecido con la Hyuga. — ¿Quién es ese chico-ttebayo? —Susurró escondido asegurándose de no ser descubierto. —Debería dejarlo, usted no tiene posibilidad —Comentó el castaño con frialdad. De acuerdo, era un arrogante al igual que Sasuke y seguramente era igual de molesto, pensó Naruto al escuchar sus palabras. —Y-yo… quiero intentarlo —Apenas susurró la chica. —No se porque se molesta en intentar algo que sabe que será inútil — Confirmado, era tan molesto como el Uchiha. ¿Quién se creía para decirle eso a Hinata?, esperen, y ¿Si ese era el chico al que le gustaba Hinata?, de verdad ¿Cómo puede gustarle alguien que le hable de esa manera? —Es demasiado débil —Esa fue la gota que derramó el vaso. —Oye tú ¿Quién te crees para decir eso? —Retó el rubio saliendo de su escondite. Ambos voltearon sorprendidos, ¿Desde cuando estaba hay? Hinata estaba sonrojada al escucharlo y verlo frente a ella, y el castaño solo pensaba frustrado en como no se había dado cuenta de que estaba hay. — ¿Quién eres tú? —Replicó el de ojos perlas. —Yo pregunte primero —Recalcó Naruto con molestia. —Solo dije la verdad, nadie puede escapar a su destino —Respondió con frialdad. Su molestia aumentó. — ¿Así? Y ¿¡Quién crees que eres para decidir eso!? —Gritó molesto. —Cada persona nace con un destino trazado y nadie puede cambiarlo, esa es la verdad —Comentó, permaneció en silencio observando al chico rubio. Naruto estuvo a punto de gritarle o molerlo a golpes hay mismo pero una voz los freno a ambos. —Neji-nii-san basta, por favor, Naruto-kun —Exclamó Hinata colocándose entre ambos antes de que comenzara una batalla. — ¿Es tu hermano Hinata? —Preguntó con molestia, su propio hermano la trataba así, ¿Qué clase de familia era esa? —N-no, él es mi primo —Respondió con timidez. — ¿Tu primo? —Inquirió sorprendido. —Así que él es su esposo Hinata-sama, no se como Hiashi-sama permitió algo como eso, bueno no es de extrañar que los perdedores estén con otros perdedores, después de todo es su destino —Sus insultos y cuentos del destino estaban colmando la paciencia del rubio. — ¿Qué pasa aquí? —Interrogó la voz perteneciente a Hiashi Hyuga. —P-padre —Susurró la heredera al ver al imponente patriarca. —No es nada Hiashi-sama —Respondió tranquilamente el joven castaño. ¿No es nada? Él era peor que Sasuke, pero no se saldría con la suya. — ¿Qué no es nada? Tú estabas — —Naruto-kun —Llamó Hinata captando la atención del rubio que la observo negar con su cabeza. Bufó molesto, por ahora lo dejaría así. —No, nada —Hiashi permaneció confundido —Supongo que es hora de que me vaya —Exclamó caminando a la salida, la cual se podía ver a espaldas del líder Hyuga. —Espero que vuelvas mañana —Más que petición eso pareció una orden del mayor. Naruto masculló un si antes de pasar por su lado. —N-Naruto-kun —Giró levemente observando a la Hyuga algo sonrosada —Ha-hasta mañana —Dijo moviendo su mano en señal de despedida. —Hasta mañana —Sonrió levemente causando un sonrojo mayor en la chica. Caminó hasta la salida encontrando a Kyuubei esperándolo en la puerta, no le dio mucha importancia y ambos volvieron al departamento del rubio. —Pareces confundido —Comentó el zorro después de un largo silencio. — ¿Y cómo quieres qué este? No tengo ni la mas mínima idea de que hacer-dattebayo —Explotó finalmente. —Puedo hacer algo para ayudarte con eso —Dijo confundiendo al Uzumaki. — ¿Creí que no podías intervenir? —Inquirió dudoso de aceptar su ayuda. —No ese tipo de ayuda, nosotros no podemos darte consejos ni ayudarte en nada que influya con su decisión, pero se me dio el permiso de concederte un deseo y no hay ningún problema con eso —Explicó tranquilamente. — ¿En serio? —Naruto saltó de la cama donde estaba recostado — ¿Cualquiera? —Interrogó ilusionado. —Por supuesto, siempre y cuando no pidas anular el matrimonio o ver que pasara en un futuro al elegir una de las dos opciones —Respondió destrozando nuevamente las esperanzas del chico. — Pero ¿Por qué? —Cuestionó molesto. —Porque de ser así le quitaría la diversión al juego, eso fue lo que dijo Shiro-sama —Explicó sin inmutarse. Naruto suspiró, en ese caso… ¿Qué iba a hacer? —Dijiste que no podía desear ver el futuro, ¿Por qué? — —Porque al verlo descubrirías si elegiste bien o mal y después corregirías lo que quieres y eso también arruinaría su diversión —Respondió Kyuubei. Permaneció meditando por un tiempo hasta que escuchó una voz dentro de él. —Chico, creo tener la solución a tu problema —Exclamo un enorme zorro naranja de nueve colas y sonrisa burlona, con expresión siniestra. — ¿Así? Y según tú ¿Cuál es? —Preguntó de forma sarcástica el rubio. —Si no puedes ver que pasara con todo esto en este lugar ve hacia otro —Dijo confundiendo al Uzumaki. — ¿De que demonios estas hablando Zorro? —Interrogó molesto por no entender lo que dijo. —Hablo de que viajes a otra dimensión y veas que tan mala idea es toda esta situación —Explicó el zorro naranja. — ¿Otra dimensión? —Ladeó su cabeza confundido. —Sigues siendo un cabeza hueca chico, de no ser por mí jamás habrías llegado al nivel Ambu —Comentó causando la molestia del de ojos zafiro —Las dimensiones son otros mundos donde existen otros como tú o tus amigos, pero viviendo diferente vidas, puedes pedir ver una dimensión donde vivan una situación familiar para encontrar una respuesta —Explicó confiado, si todo salía de acuerdo a sus planes podría persuadirlo más fácilmente. —Supongo que no es mala idea —Expresó de forma afirmativa, pero desconfiado. —De acuerdo, Kyuubei, deseo ver otra dimensión que me permita encontrar la respuesta que necesito —Pidió Naruto decidido. —Entendido —Afirmó el zorro blanco colocando su cola en el pecho del rubio para después introducirla mientras una luz blanca surgía del lugar cubriendo todo el departamento. Naruto soltó un alarido al ser “atravesado” de esa manera, pronto dejo de sentirlo y el lugar donde se encontraba no era su departamento. jujujujujuju... a dos capis del mas controvercial de mi fic... por favor pido de antemano no usar tomates u otra verdura/fruta podrida.... sayo!!
he aqui la conti... al menos tarde menos xD Capitulo 7: ¿Déjà vu? — ¿Dónde estoy? —Preguntó el rubio abriendo lentamente sus ojos acostumbrándose a la luz del sol que se filtraba a través de una ventana, la cual jamás había visto. De pronto una manta lo cubrió por completo dejándolo nuevamente en la oscuridad. —Oigan ¿Quién apago la luz? —Inquirió e intentó quitar la manta pero algo raro ocurrió, su cuerpo parecía no responder a sus órdenes — ¿Qué esta pasando? ¿Acaso es un jutsu? —Por mas que intentaba parecía no poder mover un solo músculo hasta que una voz femenina llamó su atención. — ¡Naruto, despierta de una vez! —El tono parecía ser de molestia y resignación, pero ¿Quién lo llamaba? No recordaba esa voz, pero extrañamente se le hacia familiar. Escuchó la puerta abrirse y unos pasos acercarse. —Naruto, levántate ya flojo o llegaremos tarde —Habló de forma autoritaria la dueña de la voz. —Cinco minutos más —Pidió ¿Él? Un momento, ¿Cómo fue que dijo eso si él ni siquiera sabia quien era? Además el tono parecía somnoliento y él ya estaba despierto, entonces ¿Quién lo hizo? —Vamos hijo, no me hagas repetirlo, arriba —Reprendió la mujer. ¿Mamá? Pero ella estaba muerta, desde él ataque del Kyuubi, ella se sacrificó por él al igual que su padre, entonces ¿Cómo?, ¿Acaso le mintieron?, antes de que pudiera pensar en algo mas las sabanas fueron retiradas y Naruto sufrió de la intensa luz del sol en sus ojos. —Esta bien ya voy mamá —Exclamó tallándose los ojos. —Cielos, nunca vas a cambiar-ttebane —Comentó con cansancio la mujer de larga cabellera roja. ¿Acaso estaba soñando? O tal vez Kyuubei lo mato, eso explicaría toda esa locura. —Buenos días mamá —Dijo con una sonrisa el de marcas zorrunas. —Buenos días hijo —Respondió con la misma sonrisa. Pero él nunca dijo nada, al menos no de forma conciente, intentó preguntar pero lo único que salio de su boca fue un bostezo y ¿Estiró su cuerpo? Pero él no quería hacer eso, era incapaz de moverse por su cuenta, su cuerpo se movía por si solo. —Te espero abajo para que podamos desayunar —Informó la mujer saliendo de la habitación. Naruto salió de la cama y fue cuando lo noto, parecía mas alto y la habitación era totalmente diferente a la de su apartamento, caminó hasta el baño y se vio en el espejo, sus facciones eran distintas, parecía un joven de 19 o tal vez 20 años, ¿Entonces si estaba en otra dimensión? Pero ¿Por qué no podía moverse a voluntad? Terminó sus preparativos matutinos intentando hacer algo distinto a lo que su cuerpo hacia pero todo intento fue inútil, lo único que podía hacer era sentir. Sin más remedio que solo hacer el papel de espectador se dedico a poner atención a cada detalle. —Ya era hora, llevamos media hora esperándote —Regañó la mujer. —Lo siento y ¿A dónde vamos? —Preguntó curioso. El Naruto ninja contempló a las personas que tenia frente a él, la mujer era sin duda su madre y junto a ella un hombre rubio de ojos azules era su mas grande ídolo, modelo a seguir pero principalmente, su padre. En ese momento se sintió sumamente feliz por tenerlos frente a frente y no en una proyección de chacra, pero le intrigo ver a una niñita de cabellera roja y ojos verdes, su apariencia era infantil y fácilmente se podían notar en ella unos 11 o 12 años, se encontraba en total calma a diferencia de sus pies que se movían como si hormigas estuvieran desfilando en ellos. Naruto rió un poco al ver la escena. —Parece que alguien esta impaciente —Comentó burlón. —N-no es cierto —Replicó la niñita molesta y sonrojada. —Esta bien, pero no han respondido mi pregunta —Dijo de forma relajada. —Bueno hijo, lo que pasa es que tenemos que ir con los Hyuga por un acuerdo que tenemos con ellos —Explicó el rubio mayor. —Eso explica porque Mito-chan esta así pero, ¿Por qué tengo que ir yo? —Inquirió extrañado. El viajero dimensional no entendió mucho esa parte, lo único que entendió fue que en ese lugar también Vivian los Hyuga y que la niña se llamaba Mito. —Bueno, es porque dicho asunto también te incumbe —Respondió el mayor. Naruto ladeo la cabeza mas confundido. —No entiendo ¿Qué tengo que ver? — —Eso lo sabrás cuando lleguemos, y gracias a ti ya vamos retrasados así que andando —Interrumpió la mujer de forma autoritaria. El Naruto menor observo todo con detenimiento y le pareció extraño el temor y angustia que se veía claramente en sus ojos, pero decidió dejarlo de lado y continuar observando todo. Las sorpresas no terminaron en el transcurso del viaje, primero notar que el lugar donde vivía era muy diferente a la aldea que tanto conocía y también a muchas otras, todas las casas en ese lugar eran enormes y después la extraña carroza de metal donde se subieron, pero no había animales para tirar de ella, le extrañó mas que se moviera por si sola, se preguntó si seria algún mecanismo con chacra. Durante el recorrido fue asombrándose cada vez más con el estilo de vida de esas personas y los extraños lugares, también se sorprendió en saber que esa niñita era su hermana menor y al parecer era una buena amiga de la hermana menor de Hinata. Cuando llegaron se sorprendió de ver el lugar donde vivían los Hyuga, era enorme. Los sirvientes los atendieron hasta la llegada de los miembros de la familia. —Hola Neji, Hinata ¿Cómo han estado? —Saludó con toda naturalidad. Se sorprendió al ver como el castaño que era el primo de Hinata le devolvía el saludo de manera formal con un gesto de su cabeza, arrogante, pero no tanto como el otro que conoció antes. —H-hola Naruto-kun, bien gracias —Respondió el saludo de forma algo tímida pero con una mayor claridad que la Hinata que conocía. Al parecer en ese mundo tenían una buena relación ya que los padres de ambos charlaban como viejos amigos, su hermana había desaparecido junto con la hermana de Hinata y Neji no decía una sola palabra a menos que fuera necesario, en cuanto a él charlaba tranquilamente con la Hyuga, bueno él hablaba y ella lo escuchaba. —Bueno, supongo que ya es hora —Hablo Hiashi llamando la atención de todos. —Es cierto ¿Qué era ese negocio que tenias que hacer aquí papá? —Cuestionó curioso Naruto. —Hijo, no es un negocio —Respondió el padre. — ¿No? Entonces ¿Qué es? — —Minato, ¿Quieres hacerlo tú o se los digo yo? —Preguntó el mayor de los Hyuga. —Decirnos ¿Qué? —Inquirió el de marcas zorrunas. —Naruto, hijo, esta reunión no fue para un negocio, es para formalizar tu compromiso —Informó Minato de forma seria. — ¿Compromiso? ¿De qué estas hablando? No recuerdo… —Quedó paralizado al entender el significado de sus palabras — ¿Es una broma? —Cuestionó esperanzado en eso. Minato negó con su cabeza y el Naruto ninja comprendió todo eso era algo muy similar a su situación y si no se equivocaba Hinata también estaría implicada en eso. —Desde que tú y Hinata nacieron nosotros decidimos este compromiso para unir nuestras empresas —Dijo él Namikaze. — ¿Hinata? —Naruto volteó hacia la joven que se encontraba igual o más confundida que él y claramente sonrojada — ¿Cómo es posible? Se supone que ambas están unidas ¿Qué es todo eso de que estamos comprometidos? —Su voz subía cada vez más de intensidad. —Naruto tranquilízate —Pidió su madre en un intento por controlarlo. — ¿¡Qué me clame!? ¿¡Cómo demonios quieres que me calme después de oír algo así!? —Reclamó furioso. — ¡Ten mas respeto jovencito! —Reprendió la mujer de cabellera roja de forma autoritaria haciendo que el rubio menor se asustara un poco y se calmara. —Lo siento mamá — —Es cierto que las empresas están unidas, pero no esta de todo estable y para eso es el compromiso, si ustedes se casan ese hueco legal quedara lleno y no habrá problemas —Explicó de forma seria Hiashi. — ¿Cómo pueden escoger algo como eso? ¿Qué hay de nosotros? ¿No pensaron en eso? —Interrogó intentando controlar su furia. Minato solo se disculpó con su hijo y Hiashi parecía impasible. — ¿Qué pasaría si no aceptamos casarnos? —Preguntó de forma seria. —El trato se rompería y ambas empresas quedarían a manos de los inversionistas —Respondió de la misma forma el castaño mayor. El menor de los Naruto no supo que significaba todo eso, pero lo que sentía le decía que otra vez lo habían dejado sin opciones, ahora solo quedaba esperar a saber que decisiones tomaría este Naruto y esperar que eso también le sirviera de ayuda a él bien... como dije en el proximo capi vendra la aprte controversial del fic.... no me maten T.T o no les dejare contis y este fic estara incompleto... sayo!!!
antes que nada quiero aclarar algo... ¬¬ de lo cual me estoy empezando a artar... soy hombre!, chico, varon de sexo maculino! por dios porque siempre me confunden con una chica -en una esquina con aura depresiva - y yo que trato de llevarme bien con ustedes... bueno les dejo la conti mientras salgo de mi depresion... Capitulo 8: ¿Error? La historia comenzaba a repetirse para el Naruto shinobi quien presenció toda la discusión, claro sin entender mucho de esta, al final resulto que ese Naruto aceptó el compromiso y acordó con sus padres el salir con Hinata algunas veces para poder conocerse mejor antes del matrimonio. Al principio al Naruto menor le pareció ver a una Hinata muy similar a la que conoce y al parecer esa versión suya de él también lo era, no conocía muchas cosas de esa Hinata e incluso llego a la misma conclusión que él, dando por resultado que le hiciera una propuesta similar a la que le hizo a su esposa. Esa Hinata admitió que tenia a alguien especial y ese Naruto le propuso buscar una forma de romper el compromiso sin poner en riesgo las empresas, la Hyuga aceptó pero al parecer del menor parecía deprimida, cosa que no noto su yo mayor. Como estuvo acordado salieron en varias citas en cada una de ellas descubriendo algo que no sabia de la heredera Hyuga y si eran tan similares el ninja pensó que definitivamente debería pasar más tiempo con ella cuando regresara, si es que lo hacía. Un raro sentimiento crecía en ambos o eso creía el menor de los rubios mientras mas tiempo pasaban con la joven de ojos perlas, había reconocido a varios de sus amigos y en ese lugar parecían ser los mismos. En una ocasión se encontró con los chicos de la arena y le sorprendió lo bien que se llevo con ellos, en especial con el que llamaban Gaara, eso lo dejo confuso, pero no tanto como ver a Ino salir con alguien llamado Sai, un chico pálido de ojos y cabello negro, que se la pasa sonriendo todo el tiempo además de decir las cosa antes de pensarlas. Los únicos a los que no vio en todo el tiempo que había estado hay eran a Sasuke y Sakura y se preguntaba ¿Qué pasó con ellos? Poco a poco las cosas mejoraban entre él y Hinata y la idea de casarse con ella ya no le parecía tan mala y casi estaba seguro que a ella tampoco, pero aun estaba el problema del otro joven misterioso al que le gustaba Hinata, nunca le contó nada mas de él, pero ¿Si aun le gustaba?, no estaba seguro de que pensar si la respuesta fuera positiva. Cierto día una de sus preguntas fueron respondidas cuando noto un mensaje de Sakura en lo que ellos llamaban celular, eso le alegro bastante a los dos y pronto fueron a recibirla ya que según el mensaje llegaría a la ciudad ese mismo día. Después de un calido recibimiento en el aeropuerto por parte de todos sus amigos se dirigieron a una fiesta que resulto ser muy divertida para todos. A partir de ese momento poco a poco comenzó a pasar más tiempo con Sakura y menos con Hinata, en algunas ocasiones cancelando citas a último minuto o mintiendo sobre algunos trabajos, según por lo que entendió Sasuke y ella se habían ido del país siendo pareja, pero día a día el Uchiha la trataba con menos cariño y mas fríamente, hasta que no lo soportó y regresó a su lugar de origen. En un principio se sintió feliz de volver a ver a su amiga y las charlas que tenían, pero no dejaba de sentirse culpable por dejar a Hinata cancelando citas, pensó que después la recompensaría hasta que un día Sakura lo beso de forma repentina, él no supo como reaccionar en un principio. El menor de los Naruto se encontraba en la misma situación, siempre deseó un beso de la Haruno, pero en ese momento estaba confundido y no sabía que pensar, justo después del beso ella se disculpó pero aclaró que si regresó solo fue por él y que deseaba que pudieran darse una oportunidad. No supo exactamente ¿Qué? O ¿Cómo? Pasó, pero cuando recobró la razón estaba en una cama de hotel a la mañana siguiente desnudo junto a Sakura, eso lo hizo sentirse como basura. Naruto intentó convencer a Sakura y a él mismo que eso había sido un error y que nunca mas se repetiría, por desgracia para él no resulto y los encuentros eran cada vez mas frecuentes. Cada vez descuidaba más a Hinata y ella intentaba contactarlo, pero el solo verla le causaba repulsión a si mismo por engañarla de esa forma. Una mañana le habían informado que Hinata lo había estado buscando para hablar con él y también le informaron que su boda seria en dos semanas, sin decir nada se dirigió a su puesto en la empresa de su familia, no quería saber más del tema ya que este lo hacía sentirse peor. Al poco tiempo de ingresar a su oficina entró la persona que menos quería ver en ese momento. —Sakura, dejemos esto de una vez —Dijo Naruto abatido. —Vamos Naruto, no me digas que no te gusta — —No es eso Sakura, entiéndelo, estoy comprometido con Hinata y voy a casarme con ella — —Eso no impidió que disfrutáramos de tantos momentos de pasión, admítelo, soy mejor que tu “prometida” ella no te da lo que yo si puedo —Habló con superioridad. —Hablo enserio, ya no quiero seguir con esto, ella no se lo merece —Exclamó sintiéndose cada vez mas culpable. — ¿Por qué no la dejas? —Propuso sorprendiendo al Namikaze —Si lo haces no tendrías este problema — —No es tan censillo y ya lo sabes —Respondió rápidamente, aunque no supo si fue por no causar malentendidos o porque simplemente quería una excusa. —De acuerdo pero —Comentó robándole un beso Naruto quien de inmediato la empujó. —Te dije que basta Sakura — —Vamos solo una más, ¿Quien se enterara? —Expresó restándole importancia, como si se tratara de cualquier cosa. Nuevamente lo beso, pero esta vez él correspondió volviéndolo más exigente, pronto la tenía debajo de él en su escritorio besándola, ni siquiera noto la puerta abrirse. Hinata caminaba feliz por la empresa de su amado, últimamente se habían distanciado mucho y creyó que tal vez tenía mucho trabajo por sus excusas, pero esta vez no era así, habló con Minato y le aseguró que el rubio tendría mas que tiempo libre para salir con ella y quería sorprenderlo, incluso se compro un nuevo vestido solo para él y ese día. Saludó a la secretaria de su prometido y le pidió que no le dijera nada de su sorpresa, se dirigió al despacho y abrió la puerta sonriente. —Naruto quería —Calló al ver a su prometido sobre la joven Haruno besándose. Naruto levanto la vista al escucharla quedando petrificado al ver a su prometida de pie en la puerta con sus ojos abiertos al máximo. —Hinata esto… te lo puedo explicar yo —Sintió como la tierra se abría y el caía por esa grieta profunda. Hinata bajo la vista cubriendo sus orbes con su flequillo. —Hi-Hinata, no… esto, veras —Su mente no parecía estar dispuesta a ayudarlo en nada. —Solo venia a decirte que Neji encontró una forma de romper el compromiso sin afectar nuestras empresas —Exclamó levantando el rostro mostrando una sonrisa. Naruto quedó sorprendido unos segundos pensando que eso no le había molestado en nada y eso le dolió pero no tanto comparado con ver una traicionera lagrima escapar de su ojo. Al sentir como no podía soportar mucho tiempo rápidamente secó su lágrima. —Bueno, los dejo, siento haber interrumpido, adiós Naruto, eres libre —Dijo cerrando la puerta tras de si. Eres libre, esas palabras hacían eco en su cabeza junto a la imagen de una Hinata llorando por su culpa, ¿Qué había hecho? Perdió a la mujer de la que se enamoro, porque si, lo admitía, se había enamorado de Hinata Hyuga y por culpa de su estupidez la había perdido. — ¿Qué paso aquí? —Preguntó en el mismo estado que su otro yo —Hinata… ¿¡Qué estas esperando idiota ve tras ella!? —Gritó desesperado. —Hinata —Nombró su versión de ese mundo saliendo disparado de su oficina en busca de la joven, tenía que explicarle y arreglar todo, él era Naruto Namikaze y no se rendiría hasta que lo perdonara y aceptara ser su esposa. Corrió por todo el edificio preguntando por ella y todos los indicios lo llevaron al estacionamiento donde la vio entrar a su auto y arrancar alejándose de hay. — ¡Espera Hinata! —Gritó en un intento de detenerla, pero al parecer ella no lo escucho. Corrió hasta su auto dispuesto a seguirla, no la perdería al menos no sin luchar. Maldijo con fuerza, la había perdido de vista, pero aun así no se daría por vencido, se encaminó hacia su casa, seguro que llegaría tarde o temprano, hay la esperaría para arreglar las cosas. Giró en un una esquina quedando sorprendido al ver un accidente y un grupo de personas acercarse lentamente, al parecer no era el único con desgracias, de pronto el color se fue de su rostro y sus ojos se dilataron, ese auto era el de Hinata. Aceleró hasta llegar al lugar del accidente y con dolor confirmó lo que temía, Hinata había sufrido un accidente y era ella quien estaba en el auto. —No, no puede ser, Hinata, tú, no, ¡No! —Vociferó saliendo del auto en dirección a la joven. Con dificultad logro sacarla pero notó que no respiraba y sus golpes parecían bastante severos. —Hinata, por favor amor, no me hagas esto, lo siento, perdóname por ser tan estúpido, grítame, ódiame, golpéame, pero por el amor de dios no me dejes, ¡Hinata! —Rogaba llorando sobre el cuerpo inerte de la joven a igual que su contraparte shinobi. — ¡Maldición! —Gritó con todas sus fuerzas el chico antes de que nuevamente la luz blanca lo cubriera. Abrió sus orbes zafiro respirando agitadamente, el sudor en su rostro se hizo presente de forma rápida y su piel parecía mas blanca, de sus ojos brotaron lagrimas, observó el lugar confundido antes de enfocar bien sus sentidos y reconocerlo, era su departamento, pero no el del otro mundo, el propio. — ¿Y bien? ¿Encontraste la respuesta que buscabas? —Cuestionó el pequeño zorro blanco frente a él. — ¿Kyuubei? —Inquirió el portador del Kyuubi — ¿Eso quiere decir que volví? —Aun permanecía confundido. Su compañero ladeó su cabeza de igual forma. — ¿Cuánto tiempo me fui? —Preguntó limpiando sus lágrimas. —No te preocupes, no se cuanto tiempo pasaste en ese lugar pero aquí no fue mas que un segundo —Respondió tranquilamente. — ¿Solo un segundo? —Preguntó asombrado. —Exacto, no tengo idea a que lugar fuiste llevado por tú deseo, solo lo concedí, así que tampoco sé cuanto tiempo te tomo encontrar tu respuesta, por lo que sin importar cuanto tiempo pasaste hay en este lugar solo pasaría un segundo para no alterar nada ni levantar sospechas —Explicó con su tranquilidad de siempre. —Ya veo —Susurró casi sin ánimos. El Kyuubi sonrió ampliamente, ahora parecía más confundido, será una tarea fácil engañarlo. —Kyuubei —Llamó al zorro de forma tranquila —Lo que vi y sentí en ese lugar ¿Es lo que pasara aquí? — —No se que fue lo que viste, pero lo que sentiste no fuiste tú exactamente —Respondió confundiendo al chico —Si eras capas de sentir algo eso no era lo que tú sentías, si no lo que sentía tu otro yo, en tu deseo pediste que se te permitiera encontrar la respuesta que necesitabas y para eso necesitabas sentir lo mismo que tu contraparte — —Entiendo — —Por supuesto, algunos rasgos pueden variar, y obviamente lo que sentías en ese lugar no lo sientes ahora, así que dime cual es tu respuesta — —Chico, no tienes buena cara, ¡ja! Te dije que todo esto era una trampa, ahora vamos, acabemos con todos —Propuso el zorro en su interior. —Es cierto —Sonrió —Ya no siento lo mismo, pero muchas cosas eran muy similares y si las cosas entre esta Hinata y yo resultan ser iguales no cometeré el mismo error —Exclamó decidido. El bijuu maldijo mentalmente, su plan había fallado por completo. —Pero, antes hablaste con ella sobre todo esto e incluso admitiste que le ayudarías ¿Qué harás con respecto a eso? —Cuestionó curioso, al parecer las cosas comenzaban a volverse interesantes. —Es cierto, Hinata dijo que le gustaba alguien —Meditó unos segundos —En ese caso, tendré que conquistar a mi esposa —Expresó sonriendo de oreja a oreja. —Es un idiota —Comentó una voz infantil dentro de un cuarto oscuro solo iluminado por la pequeña esfera que traía entre manos —Pero es un idiota bastante divertido —Sonrió complacido. — ¿¡Por qué!? —Gritó otra voz infantil pero esta vez de una niña al lado del pequeño quien gritó asustado. — ¿¡Cuántas veces te he dicho qué no hagas eso!? —Regañó el niño de la esfera. —L-lo siento pero —Sorbió su nariz — ¡Fue muy triste lo que paso en esa otra dimensión! —Exclamó tomando la capa del niño para después usarla como un pañuelo. A Shiro se le marco una vena en su frente. — ¡Deja de usar mi capa como pañuelo! — —Lo siento —Repuso nerviosa. Shiro suspiró. — ¿Qué haces aquí Nory?, ¿No deberías estar con Hinata? —Preguntó más clamado. —Si pero tenia curiosidad por saber que tonterías haría ese bruto en otra dimensión y sabía que este era el único lugar donde lo averiguaría mas rápido que nadie — — ¿Por qué no me sorprende? —Comentó sarcástico. — ¡No me culpes, soy tu curiosidad! así que si alguien tiene la culpa de cómo soy ese eres tú —Se defendió la niña cruzándose de brazos con un puchero. —Regresa a donde debes —Ordenó tajante, ignorando por completo la última acusación. —Lo haré con una condición — —No estas en posición de negociar — De pronto se vieron envueltos en una rara discusión donde Nory no dejaba de repetir “por favor” y Shiro “No”, tardando mas de 3 horas. —Está bien, ¿Cuál es? —Preguntó arto de la insistencia de la niña. — ¡Si! —Celebró —Quiero un final feliz en esa dimensión… y que me permitas castrar a ese Naruto —Pidió materializando una guadaña con algo de oxido. — ¿Tu vieja guadaña? Hace años que no la usas —Meditó —Si lo castras esa Hinata no podrá tener hijos y creo que eso la deprimiría —Argumentó. —Buen punto —Exclamó desapareciendo su arma —Entonces me conformo con tortura mental, esa es tu especialidad —Sonrió. —De acuerdo, lo haré pero vete —Ordenó molesto. Nory saludó en pose militar y desapareció del lugar. Shiro giró la esfera un poco localizando el punto donde Naruto regresó a su mundo y de inmediato tomo una pequeña perla y la introdujo en la esfera, al instante Hinata tosió volviendo a respirar pero sin despertar. —Sin memorias del engaño para que esto pueda resultar y ahora vivirás sufriendo por las dos semanas que tienes antes de tu boda, espero no te moleste dormir viviendo pesadillas similares al tsukiyomi durante 14 días Namikaze —Comentó divertido el niño. pido perdon por las faltas de ortografia... prometo mejorar... sayo! PD: no me maten!!!
WAaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa increibleee que historia mas waaa la va a conquistar no ma... waaaaa lo amee hombre juro que lo ameee lo ameee Es decir naruto...¿tratara d conquistar a hinata por que le gusta? jajajaj ame la parte d q lo queria castrar xD pobresito y lo del pañuelo jajajajaja muy bueno, a una historia que comenzo tiste...le pusiste algo de comedia xD eso si es bueno... bueno yo espero la conti ii lamento que te confunfan con una mujer xD eso pasaa no te preocupes Felizes fiestas !!!
hola hola!!! estuvo wow la conti k maldito desgrasiado se acosto con sakura estando comprometido con hinata!!!! maldito!!! bueno esta bien esta bien tratare de ser comprensiva. espero conti pronto!!!! y disculpa si yo en algun momento te confundi con chica...
y les dejo el nueve antes de que se me olvide Capitulo 9: ¿Enfrentamiento? —Veamos… ¿Qué debería hacer ahora? —Se cuestionó a si mismo el niño frente a su esfera con expresión confusa — ¡Nah!, supongo que ya interferid emaciado, será mejor dejar las cosas como van —Hizo una pausa —Por un tiempo — —Tiempo, esos es precisamente lo que hace falta para que te atrapen “Shiro” —Comentó una voz masculina detrás del niño. — ¿Qué haces aquí Adrián? —Interrogó el menor. —Primero que nada regresa a tu forma real, no me agrada discutir con un niño — —Y tú ¿Podrías quitarte la capucha?, estas en mi casa, no debes ser descortés —Dijo el menor tomando una a apariencia mas adulta. El “invitado” obedeció dejando ver a un hombre de cabellera morada y ojos del mismo color. —Lo que haces es peligroso, si ellos se llegan a enterar — —No se enteraran, y aunque lo hicieran, no me importa lo que un montón de ancianos piensen —Interrumpió la advertencia de forma despreocupada —Además la dimensión que elegí es neutral, un lienzo en blanco en donde puedo crear mi arte — —Eres irritante — —Cuidado con tus palabras, recuerda que soy un superior —Exclamó el de la esfera. —Siempre tomas las cosas con calma sin importarte las órdenes, haces lo que se te da la gana y además — — ¿Celoso? —Preguntó divertido causando la molestia de su acompañante —Relájate, ya te dije que no habrá problemas lo tengo todo controlado y si lo descubren no pueden hacerme nada — —Si lo que sea que hagas en ese lugar se sale de control —Advirtió seriamente. —Es que no escuchas, odio repetir las cosas, lo tengo todo bajo control, y si llegara el caso de que se me saliera de las manos —Pausó unos segundos —Simplemente destruiré la dimensión y asunto resuelto, siempre puedo reiniciar —Comentó con simpleza. —Siempre haces lo mismo, nunca se si realmente te importa tan poco lo que pase a tu alrededor o si simplemente actúas así para alejar a los demás —Comentó receloso Adrián. —Un poco de ambas tal vez, o tal vez tengas una idea muy errónea de mi, ¿Quién sabe? —Expresó sin darle importancia. Adrián frunció el seño. —Si solo era eso ya puedes irte —Exclamó regresando a su forma infantil. Su acompañante estuvo a punto de replicar algo pero prefirió callar. —No hace falta que me digas nada, se que tengo que cuidarme la espalda, en especial de ciertos sujetos indeseables —Habló Shiro de forma tranquila observando de reojo al hombre de cabellos morados —Y por cierto, la próxima vez que entres sin mi permiso, te matare —Advirtió de una forma natural como si lo acabara de saludar. Adrián se cubrió con su capucha y desapareció sin decir nada. —Algunos subordinados son tan idiotas como sus superiores —Comentó a la nada —Ahora mejor avancemos al siguiente día —Giró su esfera cambiando el escenario en ella. Naruto caminaba pensativo, dijo que conquistaría a Hinata la noche anterior, pero sencillamente aun estaba confundido, de hecho lo que sintió durante su estancia en aquella dimensión no fue realmente él, pero al mismo tiempo si lo era, además de que las emociones de ese lugar se esfumaron en unos minutos, Kyuubei le dijo que era algo normal, pero los recuerdos permanecían y eso no lo dejo dormir muy bien, se encontraba confundido. — ¡No entiendo nada! —Gritó de pronto frotando su cabellera llamando la atención de los aldeanos que transitaban por el lugar. No tardó en sentir las miradas sobre él por lo que rió de forma nerviosa antes de salir del lugar lo más rápido posible. Suspiró una vez dentro de la mansión Hyuga buscando a Hinata, ya se había encontrado con Hiashi y cruzaron un par de palabras, realmente solo fue Naruto el que hablo y el líder del clan apenas y pareció prestarle intención. Escuchó la voz de la persona que buscaba más adelante, al parecer estaba entrenando. Hinata había despertado temprano para poder entrenar y distraerse, además faltaba poco para los exámenes chunin y tenía que mejorar por ella y su equipo, observando tranquilamente se encontraba Nory, quien parecía estar atenta a cada movimiento de la Hyuga. La puerta del dojo se abrió dejando ver a Naruto quien recorrió el lugar con la mirada hasta recaer en Hinata quien permaneció inmóvil al verlo, bajo la mirada levemente sonrojada. —Hola Hinata —Saludó con naturalidad. —Ho-hola —Aún no se acostumbraba del todo a sus visitas, bueno solo era el tercer día después de todo. —Veo que estas entrenando, ¿Participaras en los exámenes chunin? —Preguntó sonriente. —S-si, es decir Shino-kun y Kiba-kun están muy emocionados y yo no quiero defraudarlos, por eso daré mi mejor esfuerzo — —Ya veo —Comentó recorriendo el lugar hasta toparse con una no muy amigable mirada de parte de Nory que parecía contener sus deseos de golpearlo o algo peor, pero se preguntó el ¿Por qué? — ¿T-tú también vas a entrar? —Cuestionó cohibida. — ¿Eh? ¡Ah!, si, si claro Kakashi-sensei ya nos lo dijo, también entraran el teme y —Calló al recordar a su compañera de equipo recordando lo pasado en su viaje. Nory entrecerró la mirada. —Naruto-kun ¿Estás bien? —Preguntó preocupada al ver como el color del Uzumaki desapareció. —S-si, si estoy, estoy bien, no te preocupes Hina —Cubrió su boca de forma inmediata, así la llamaba su yo de ese otro mundo y la manía al parecer se le quedo. El sonrojo de Hinata no podía llegar a un nivel mayor, la había llamado “Hina”, bajo su rostro tratando de evitar que viera su sonrojo. —L-lo siento, se me salió, no quería incomodarte Hinata — —N-no te pre-preocupes Naruto-kun, e-está bien — Naruto sonrió, al verla de forma detenida si era muy similar a la otra Hinata, pero era muy pronto para sacar conclusiones. —Hinata —Llamó tranquilamente — ¿Qué te parece si entrenamos juntos? —Propuso sonriente. — ¿E-entrenar ju-juntos? —La sorpresa en sus ojos era evidente. En su lugar Nory pareció suavizar su mirada. —Si, bueno, ya que ambos participaremos en los exámenes chunin yo también necesito entrenar y creo que es mejor si lo hacemos los dos ¿Qué te parece? —Dijo volteando su vista a otro punto diferente de su esposa. —Solo están perdiendo el tiempo —Ambos giraron su vista a la entrada. —Neji-nii-san —Susurró la Hyuga. Había olvidado por completo al pesado del primo de Hinata. — ¿Qué quieres decir con eso? —Cuestionó el rubio de forma seria. —Que no ganaran nada entrenando un fracasado siempre será un fracasado, ese es su destino y no pueden cambiarlo —Sentenció el castaño. Naruto frunció el seño, ya era hora de que alguien le pusiera un alto a ese engreído Hyuga. — ¿Así? Si eso piensas ¿Por qué no lo comprobamos? — —Naruto-kun — —No gracias, no tengo intención de mancharme las manos con un perdedor como tú —Respondió sin inmutarse. —Neji-nii-san ya basta —Pidió Hinata en un intento de aliviar la situación. — ¿No será que tienes miedo? —Provocó el de ojos zafiros. —Naruto-kun detente, por favor — —Si tanto deseas perder con gusto te lo concederé — —Basta por favor —Pidió nuevamente Hinata cada vez mas desesperada —Naruto-kun, por favor no, Neji es muy fuerte, fue el mejor de la academia el año pasado tu — —Hinata —Interrumpió con actitud seria —No te preocupes, voy a ganarle, lo prometo — —Eso es imposible, no puedes ir contra tu destino —Comentó nuevamente el genio del clan. —Cuando quieras —Expresó el rubio colocándose en pose de pelea. —No podrás si quiera tocarme —Aseguró con arrogancia el castaño. Hinata solo veía a ambos sin saber que hacer para detener la pelea. —No se a quien apoyar —Exclamó de pronto Nory captando la atención de su ama —El rubio es un idiota, sin ofender Hinata-sama —Aclaró de forma inmediata —Pero su primo también, supongo que con que ambos terminen hospitalizados me doy por bien servida —Sonrió de forma infantil. Hinata se quedó sorprendida, podía tener la apariencia de una niña pura e inocente, pero su mente era completamente diferente a eso. Dirigió nuevamente su vista preocupada hacia ambos chicos, si no se le ocurría algo pronto, eso acabaría muy mal. Nory lanzó una moneda al aire y en cuanto cayó Naruto fue el primero en moverse en un ataque directo, Neji activó su línea sucesoria, empleando el estilo de su familia bloqueó cada golpe que el poseedor del Kyuubi lanzaba en su contra sin ninguna dificultad. — ¿Eso es todo? Que decepción —Comentó golpeando en el estomago al rubio lanzándolo unos metros lejos de él —No eres más que un fracasado — Hinata intentó acercarse a su esposo para comprobar su estado pero Nory la detuvo. —Mire mejor Hinata-sama —Dijo tranquilamente la niña. Hinata centró su vista en el chico rubio, quien mantenía una sonrisa en sus labios. Ante el asombro de ambos Hyuga desapareció en una nube de humo. — ¿Qué? —Exclamó sorprendido el genio Hyuga. Antes de reactivar sus ojos ya tenía un kunai en su garganta, otro en su espalda, uno en su abdomen y uno justo frente a sus ojos, completamente rodeado por 4 Naruto. —I-increíble —Susurró sorprendida la Hyuga, jamás pensó que Naruto pudiera atrapar tan fácil a Neji. —Escucha bien Neji, no te muevas, estos son clones sólidos así que no te muevas —La mandíbula de Neji se tenso y sus manos se volvieron puños ¿Cómo cayó tan fácilmente? —Fácil, te estas enfrentando a un ninja de un rango muy superior al tuyo Hyuga —Exclamó confundiendo a ambos ¿Un rango superior? ¿Qué quiso decir con eso? Ambos eran Genin. —Debí esperarlo —Comentó la de hebras blancas en un tono que parecía decepcionado. —Escúchame atentamente Neji, no tengo la menor idea del porque estas tan obsesionado con el destino y esas cosas pero de ningún modo pienso dejar ¿Qué hables mal de Hinata te quedo claro? —Advirtió mostrando su molestia. — ¿Qué no sabes? Por supuesto que no lo sabes, ¿No sabes nada de este clan maldito? —Reclamó con ira. —Si te refieres a la familia principal y secundaria y todo eso, lo se —Contestó de forma tranquila. — ¿Lo sabes? Supongo que Hiashi-sama te lo contó —Inquirió el Hyuga. —Si, me dijo todo con respecto a este clan, pero ese no es motivo para tratar así a Hinata — — ¿Tú que sabes de llevar una marca que te separe de los demás? — —Se mucho mas de lo que crees —Respondió tranquilamente. Neji lo miró receloso. —Pero ya nos desviamos del punto, tú dijiste que no podría vencerte y mírate —Habló sonriente. —Esto aun no ha terminado —Masculló molesto. —Yo diría que si —De un segundo a otro Neji salió disparado contra una pared del dojo cayendo sin fuerzas para moverse. — ¿Qué demonios? —Murmuró intentando moverse. —No puedo ver los puntos de chacra como los Hyuga, pero hay más de una forma de sellarlos y en esa categoría entra mi clan —Sonrió confiado —No me vengas con esas tonterías del destino, siempre hay forma de cambiar tu futuro —Vociferó seriamente. Hinata quedó sorprendida, ¿Desde cuándo Naruto era tan fuerte? Sin duda estaba lejos de alcázar su sueño, pero feliz porque el de él estaba mas cerca. bueno hay esta... nos leemos en el proximo... sayo!!
no se si esto esta bien o no ya que hay un comentario pero esta borrado y como nadie mas comenta yo creo que mejor me arriesgo, eso o dejarlo asi y que nadie lo haga y lo cierren... Capitulo 10: ¿Exámenes? Las cosas parecían ir mejor para el matrimonio, además de tener la semana libre donde Naruto fue capas de entrar y salir de la mansión Hyuga sin que ninguno de sus compañeros o alguien más se dieran cuenta o sospechara de ese comportamiento, también pudo acercarse mas a Hinata, definitivamente esa Hinata y la otra era muy similares pero también en cierta forma diferentes, aun no entendía la razón del porque pensaba eso si sus gesto, expresiones y razonamiento eran casi el mismo, a diferencia de que esta tenía cierto complejo de inferioridad. Del mismo modo habiendo despertado la curiosidad de ambos Hyuga de forma involuntaria durante el combate con Neji habló con el hokage pidiendo permiso para informar - al menos a su esposa - sobre su verdadero rango, consideró que si lo seguía manteniendo oculto de ella tal vez le dificultaría la labor y tal vez se vería involucrada así como el clan Hyuga. Al igual que su procedencia y clan, claro sin revelar mas de lo debido. Para su suerte consiguió la autorización de él dejando claro que solo revelaría el cargo y nada con relación al porque actúa como un ninja de rango menor. Para Hinata fue una sorpresa enterarse de su nivel real, al igual que el molesto genin que había derrotado anteriormente, el cual sentía una mayor humillación que antes al creer que Naruto solo se estaba burlando de él. Al mismo tiempo entrenaron algunos jutsus que se encontraban en los pergaminos, dentro del pergamino del Uzumaki se encontraba un gran numero de jutsus de sellado y alguna que otra técnica extraña. Con Hinata era un caso similar, el estilo de pelea y jutsus mostrados en su pergamino eran muy similares al estilo de su clan pero más difíciles de realizar a simple vista y al igual que el de Naruto, contenía algunos jutsus extraños. Lo que mas les sorprendía era que para ser unos rollos muy pequeños por más que los desenrollaban parecía que nunca terminarían. —Eso es por un jutsu especial en los rollos —Comentó Nory al ver la incertidumbre en ellos. A pesar del entrenamiento intensivo al que se sometió la Hyuga no fue capas de dominar por lo menos un jutsu de los que se encontraban en el pergamino, mientras Naruto perfecciono dos y estaba entrenando con el tercero. —Tranquila, es normal si tomamos en cuenta que estoy haciendo trampa —Expresó el rubio sonriente, desconcertando la Hyuga —Luego te lo explico con más calma, ahora es mejor descansar para mañana —Dijo al ver la duda en su rostro. —Aun no entiendo el porque vas a participar en este examen siendo un ambu —Exclamó el castaño Hyuga. —Ya se los dije, eso es algo que no puedo decir —Respondió seriamente —Nos vemos mañana Hinata — —B-buenas noches Naruto-kun —Murmuró apenas audible. —Neji, si le haces algo te las veras con migo —Advirtió mirado al genio del clan. Neji desvió la mirada con fastidio, aun se encontraba molesto por su derrota y que Naruto le recordara todo el tiempo que era capas de barrer el piso con él en cualquier momento no ayudaba a su estado de ánimo. —Ya veremos quien ríe al último en los exámenes Uzumaki —Retó el castaño sin apartar su fría mirada. —No te preocupes, no usare toda mi fuerza en ellos, así que puedes estar tranquilo —Comentó molestando mas al Hyuga. —Naruto-kun, Neji-nii-san, por favor —Pidió nuevamente Hinata, siempre tenía que interferir o esos dos terminarían peleándose nuevamente y conociendo la fuerza real del rubio, ahora le preocupaba mas su primo. Ambos giraron el rostro molestos. —Hinata si necesitas algo no dudes en pedírmelo — Antes de que la chica pudiera contestar el rubio salió volando varios metros en el aire. — ¡Si piensas irte hazlo de una vez, o ¿Qué estás esperando?, ¿Qué el resentido y yo nos vallamos para que pueda hacerle cosas sucias a Hinata-sama?! —Espectó molesta la aparente inocente niña con su puño en alto. — ¿C-co-cosas sucias? —Susurró una sonrojada Hinata, casi al punto del desmayo. — ¿Resentido? —Neji levantó una ceja, ligeramente confundido y molesto. — ¡¿Qué demonios te pasa mocosa?, ¿Por qué me pateas? Y ¿Qué es eso de cosas sucias yo no haría eso con Hinata?! —Gritó de forma inconciente callando casi al instante. Pronto la atención de todos se centró en la Hyuga. —Naruto-kun, se hace tarde, tal vez debas apresurarte —Opinó más calmada. —Hinata —Murmuró pero se detuvo, mejor dejar las cosas así por ahora en lugar de decir algo que después podría resultar en algo desagradable —Nos veremos mañana en los exámenes, te deseo suerte —Y Kyuubei subió a su hombro antes de desparecer. —Me voy a mi habitación, buenas noches —Comentó Hinata una vez que el rubio desapareció. Neji se fue sin decir una palabra. —Grosero —Dijo una vez que el chico se fue — ¡Cada día me dan mas ganas de cortar en pedacitos a ese rubio! ¿¡Por qué no se lo dice y ya!? —Gritó liberando su frustración —No se que divertido le encuentra a todo esto — Cuando se reunió con su equipo al día siguiente se encontraba preocupado, no sabía aun como enfrentaría a Hinata, bueno, lo de su “relación” aun debía mantenerse como un secreto para todos, pero con lo que ocurrió lo único en lo que podía pensar era en como arreglar las cosas con ella, aunque tampoco estaba seguro de que hubiera dicho algo malo, después de todo apenas y estaban entrando en la edad de las hormonas y con todo lo vivido en ese otro mundo aun se encontraba incomodo con el tema. A eso no le ayudaba para nada que sus compañeros le cuestionaran sobre su raro comportamiento. Para su suerte se toparon con lo que fue su primera prueba donde se encontraba su desagradable “cuñado” y su equipo. Después de una leve demostración de habilidades y hacer notar el genjutsu continuaron su camino. — ¡Alto! —Ordenó uno de los compañeros del genio Hyuga, un chico de cabellos negros, grandes ojos y grandes cejas, vistiendo un traje verde. Desde un segundo piso, saltó quedando al mismo nivel. —Mi nombre es Rock Lee y vengo a retarte a una pelea Sasuke Uchiha —Vociferó el del peinado de tazón. —Está bien, me servirá algo de calentamiento antes de que inicien los exámenes —Comentó con una pose de superioridad. —Sasuke, mejor déjalo o no terminaras nada bien —Advirtió el rubio. —Tú no te metas dobe, no quiero escuchar eso viniendo de ti —Respondió con fastidio. —Es cierto Naruto, ¿Cómo te atreves a decir algo como eso a Sasuke-kun? Sabes que el fue el mejor de nuestra generación —Recriminó la Haruno. Naruto rodó los ojos sin verla, aun no se acostumbrada del todo a tenerla cerca después de su viaje. —Hagan lo que quieran —Suspiró —Lee, no vayas a dejarlo muy mal o nos regañaran por llevar un peso extra —Comentó en burla causando la molestia del Uchiha. —Lo intentare, no te preocupes Naruto-kun —Respondió el ninja de grandes cejas. Sakura observó todo confundida. — ¿Lo conoces? — — ¿Eh? Si, un día me encontré con él y conversamos un poco, es un gran tipo —Exclamó riendo de forma nerviosa, si se enteraban que lo conoció cuando Neji invitó a su equipo a la mansión Hyuga le preguntarían ¿Qué hacia él en ese lugar? Para su suerte el interrogatorio nunca llego gracias a la arrogante intervención de Sasuke diciendo que no le importaba donde lo conocía y que lo derrotaría en dos segundos. Completamente contradictorio a sus predicciones fue él quien terminó en el piso y gracias a la intervención de su sensei que era una versión adulta del chico - pero aun más raro – lograron detenerse antes de que terminara en un estado mucho peor. Después del incidente continuaron hasta llegar a su destino entrando en el aula después de unas palabras de su Jounin-sensei. De inmediato las miradas del resto de los participantes se clavaron en ellos cosa que les resultó de poca importancia para el rubio y el azabache pero logro poner nerviosa a su compañera de equipo. Antes de poder darse cuenta ya estaban rodeados del equipo 8 y 10, sorpresivamente la rubia de este último equipo llego colgándose del cuello del Uchiha quien no lo tomo de muy buena manera y entre discusiones unos con otros, especialmente la rubia y Sakura y Naruto con el compañero castaño de Hinata, llamaron mas que antes la atención. El Uzumaki estaba frustrado, desde que vio a su esposa trató de acercarse un poco a ella sin que se notara sospechoso, pero la interrupción de su compañero de equipo no le facilitó nada las cosas, al final terminó discutiendo con él colmando la poca paciencia que le quedaba. Afortunadamente un chico de mayor edad de cabellos blanco, con lentes interrumpió su discusión alegando que estaban llamando mucho la atención de todos, después de explicarles la forma en la que podría serles de ayuda a los genin novatos ofreciéndoles información de otros aspirantes comenzó una nueva discusión sobre los shinobi participantes y sus respectivas aldeas. Durante la charla surgió el tema de la aldea del sonido recién formada en la que no se tenían muchos datos. —No deben ser muy fuertes —Comentó de pronto el castaño de marcas en sus mejillas. —Kiba-kun —Reprendió ligeramente la Hyuga —N-no deberías juzgar a otros sin saber nada de ellos, no sabemos que tan fuertes sean —Completó llamando la atención de mas de uno de sus compañeros, rara vez se atrevía a decir lo que pensaba pero el tiempo que pasó con Naruto al parecer no fue en vano. —Hinata tiene razón —Apoyó el rubio ganando la atención de todos — ¡Pero eso no importa porque voy a vencerlos a todos! —Vociferó señalando al resto de los genin ganándose la mirada asesina por parte de ellos. — ¡Frentona ¿Por qué no callas a tu novio?, es que acaso ¿Quiere qué nos maten?! —Gritó la rubia molesta a la Haruno. — ¿¡Cómo que mi novio Ino-puerca!? —Cuestionó molesta. — ¿Escucharon?, nos llamaron desconocidos —Comentó un chico con su cuerpo completamente vendado. —Y también parecen dudar de nuestras capacidades —Continuó una chica de cabellera azabache y ojos de igual color. —Yo digo que les demos una demostración —Sugirió otro chico de aspecto rebelde de cabellos negros. Los tres sonrieron y rápidamente corrieron a través de todo el salón a una gran velocidad pasando por los asientos del resto de los participantes, solo unos pocos lograron notar la trayectoria e intenciones de ese movimiento. En tan solo unos segundos el chico de vendas atacó al de lentes fallando aparentemente su ataque, mientras tanto sus compañeros atacaron a los miembros del equipo 8. La sorpresa en los ojos de los novatos no podía ser más notoria, muy pocos fueron los que notaron la gran velocidad a la que se movió el rubio colocándose detrás del chico del sonido con un kunai en mano muy cerca de su cuello, justo a unos centímetros de Kiba, del mismo modo otro rubio mantenía un kunai en la espalda de la chica mientras frente a esta se encontraban un par de ojos perlas viéndola fijamente con furia reflejada en ellos. Su equipo apenas fue conciente de cuando dejó su lugar y salió disparado contra ese otro equipo, más especifico contra la chica, sujetó su mano donde portaba la aguja que pensaba lanzar contra su prima y colocó dos de sus dedos en el protector de la chica a modo de advertencia, también pudo apreciar como el Uzumaki se postraba tras ella impidiéndole moverse. Afortunadamente pensó bien las cosas, ayudando a kiba y evitando que alguien creara rumores o investigara sobre alguna posible relación con Hinata, pero como siempre su mente y su boca nunca parecían querer coordinarse. —Más te vale —Comenzó con su amenaza deteniéndose en seco tratando de evitar empeorar mas las cosas. —Que no vuelvas a intentar algo en contra de Hinata-sama —Completó Neji para alivio del portador del kyuubi y asombro de conocidos. —Naruto-kun, Neji-nii-san —Susurró apenas audible la Hyuga. Sin previo aviso el chico de lentes se derrumbó vomitando en el piso, sorprendiendo nuevamente a los ninja más cercanos, pudieron presenciar como logró evadir el ataque entonces ¿Por qué se desplomó? — ¡Ustedes! —Llamó alguien al frente del salón —Dejen de armar escándalo si no quieren que los saque del examen —Amenazó el sujeto al frente. Los chicos rápidamente se separaron. El hombre recién llegado se presentó como Ibiki Morino, el sensor de la primera fase del examen, explicó que el examen se dividía en tres partes y la primera era un examen escrito, cada uno fue colocado al azar en diferentes asientos, después de eso dejó claras las indicaciones para el examen, el tiempo limite, el que estaba prohibido copiar y si eran sorprendidos tres veces quedaban fuera al igual que su equipo y después de que terminaran habría una última pregunta al finalizar. Para suerte y desgracia del Uzumaki tubo que sentarse junto a Hinata, se sintió frustrado nuevamente al no ser capaz de hablar del tema libremente. Le sorprendió un poco ver esa melena dorada entre los aspirantes, pero se mantuvo impasible, si se encontraba en ese lugar debería haber una muy buena razón. Después de un tiempo muchos estudiantes habían sido eliminados, al término la décima pregunta fue planteada y muchos estudiantes optaron por abandonar el examen a contestarla. Cuando el Uzumaki levantó su mano todos creyeron que desistiría pero al contrario, dio todo un discurso sobre nunca rendirse y continuar sin importar las consecuencias. Sorpresivamente todos pasaron después de eso, después de la charla del porque fue que los aprobó llegó interrumpiendo quien seria su segunda sensora tomando por sorpresa a todos los presentes y después de darles las indicaciones del lugar donde tomarían la segunda parte de la prueba les ordenó retirarse. El primer sensor se encontraba recogiendo los exámenes deteniéndose al observar un examen en blanco y el nombre del aspirante. —Uzumaki Naruto —Leyó en voz alta —Ese enano volvió a salirse con la suya —Comentó soltando una carcajada.