Rodeada de un hermoso e imponente valle, la Villa de las Plumas es la pequeña capital de la Región de las Aves; los comerciantes han aprovechado el mercadeo con cientos de distintas aves y artesanía derivada de las mismas. Los edificios suelen tener dos o tres niveles al igual que las tiendas y suelen haber calles superiores interconectadas por puentes a través de toda la ciudad. La pequeña villa ha crecido en gran manera en la última década por lo que se le considera un pueblo y no una villa; sin embargo, el nombre simbólico no ha sido reemplazado todavía. ® ® Zonas Adyacentes Purezanguru (5 Post) ®
El sol arreciaba sobre el gran valle donde estaba ubicada la pequeña villa Umo no Mura, lugar en el cual naciste y creciste. Como hoy es tu día libre, has podido salir a la villa a disfrutar de un paseo y observar algunas cosas. Los mercaderes tenían variedades propias de la región, como poderosos Tessen, hasta pequeños abanicos y bufandas de plumas; por otro lado, comerciantes extranjeros traían de otras regiones tanto comida exquisita y única, como artesanías singulares, las cuales eran muy costosas. Kurai debes realizar tres post. Luego acontecerá algo inesperado.
Kurai Al parecer, mi amo me había dado un día libre de mis labores como sirviente, así que decidí simplemente disfrutar del día de hoy. Me dispuse a pasear por el mercado de la villa, buscando por allí papeles coloridos que estuvieran tirados en la calle, para añadirlos a mi colección y poder experimentar con ellos. Mientras caminaba, tenía ambas manos en el bolsillo, haciendo origami con los papeles que tenía allí guardados, realizando pequeñas figurillas abstractas sin mucho sentido, pero que servían como ejercicio para calentar los dedos. Miraba todo alrededor con mis ojos cansados, sin ningún rumbo fijo.
Mientras Kurai se paseaba por la afamada villa de la pequeña región de las aves, algo acontecía en la frontera oeste con la región de los Osos. Ya hacía un tiempo que espías enemigos se infiltraban en la región para recaudar información muy vital e importante para la seguridad del clan Origami y de la villa de la región. Kurai había escuchado sobre los rumores, no obstante, sabía que no estaba preparada para algún enfrentamiento abierto, o al menos, eso creía.
Kurai A pesar de las tensiones que había entre la villa y la Región de los Osos, al oeste, con todos los rumores de espías infiltrados, el lugar seguía teniendo la misma energía vibrante que siempre había despedido, o al menos, el mercado de la ciudad. Gente se movía a mi alrededor, prestándome poca atención, ocupados cada uno en sus asuntos. Me dediqué a simplemente trepar algún edificio o saliente, para poder mirar todo desde arriba, y tener un lugar tranquilo en el cual hacer pájaros de papel y lanzarlos a que volaran por encima de las cabezas de todos.
Kurai se encontraba sobre un edificio sobre volando algunos pájaros de papel, de pronto, desde lo alto, observó a un ninja muy sospechoso. Caminando hacia un callejón de comerciantes, según tu deducción, el tipejo no parecía de estos lares y llevaba una ropa con capa, quizá, para ocultar su apariencia. Bajar al callejón e investigar Espiar desde los lejos Esperar al instructor y recibir nuevas instrucciones
Kurai Siguiendo con la mirada a uno de mis pájaros, pude detectar a un hombre extraño caminando por la calle, hacia un callejón. Era obvio que no era de por aquí, y la capa que llevaba encima ocultado su apariencia tan solo acentuaba ese sentimiento. Me incorporé y comencé a seguirlo, yendo de tejado en tejado, mantieniendo mi distancia. Tenía curiosidad para ver quien era, pero no era tan arrojado como para seguirlo de cerca. La seguridad de los tejados me venía bastante bien. [Espiar desde lejos]
De repente, el hombre comenzó a hablar con los mercaderes y comerciantes del lugar, preguntaba por telas, abanicos y demás, luego de seguirlo por dicho callejón comenzó a caminar por un callejón desolado y con pocas personas en él. Debías de tomar una decisión, pues, el aspecto del tipo era bastante inusual. Seguir desde el tejado Bajar al callejón desolado Volver y esperar al instructor
Kurai Hum, un comportamiento interesante. Tal vez quería simplemente pasar desapercibido, y disimulaba preguntando por las telas y demás productos. Sin embargo, prontamente abandonó los lugares más transitados y se metió en un callejón casi desértico. Lo mejor sería seguirlo por las alturas. Las aves de presa siempre volaban por encima de su objetivo. [Seguir desde el tejado]
El sujeto al que perseguías entró en uno de los edificios, aparentemente abandonado. La sensación de sospecha y desconfianza se avivaban en ti, de pronto, otro sujeto con vestimenta similar entró luego al edificio abandonado. Entrar al Edificio Esperar Volver al punto de encuentro con el Instructor
Kurai La cosa se puso mucho más interesante cuando otro sujeto similar entró al edificio. Mis instintos me decían que lo más sensato sería volver a mis propios asuntos, pero la curiosidad y las ganas de romper con la monotonía diaria fueron mucho más fuerte. Suspiré, me guardé los papeles en el bolsillo, y me dirigí hacia el techo del edificio, buscando alguna ventana por la cual entrar. La altura seguiría siendo mi aliada, por ahora. [Entrar al Edificio]
Cuando entraste al Edificio con cautela, debías seguir los pasos cuidadosamente. El lugar parecía abandonado y de pronto, escuchaste algunas voces en las plantas inferiores. Debías acercarte lo suficiente para lograr escuchar muy bien la conversación. Sin embargo, debías analizar muy bien la zona en que te encontrabas, podías bajar por las escaleras que aparentemente era la zona más segura ya que simplemente habían papeles tirados en el suelo y no se observaba ningún enemigo. Podías intentar salir y bajar por otras ventanas, pero si las personas dentro te observaban a través de las mismas, podrían escapar probablemente. Y la otra opción era intentar utilizar el elevador del edificio, pero seguramente haría un ruido descomunal ya que se veía viejo y oxidado. Bajar por las Escaleras Bajar por el Ascensor Bajar por las Ventanas
Kurai Bueno, ya estaba adentro. No había sido demasiado difícil. Los alrededores parecían vacíos de enemigos, así que por el momento, estaba seguro. Sin embargo, algo llamó mi atención. Papeles. En la escalera. Solos, sin nadie que los vigilara. Intenté resistir el impulso, debía concentrarme en buscar a aquellos hombres y ser lo más cauteloso posible. Sin embargo, la presión fue más fuerte que mi sabiduría, y me dirigí hacia la escalera, recogiendo los distintos papeles que estaban tirados. Sin embargo, mantenía el oído aguzado alrededor, y observaba el área con atención. Debía todavía averiguar cual era el tema con esos hombres. [Bajar por las escaleras]
Tras haber bajado por las escaleras y comenzar a tomar los pápeles con tus manos, llegaste sigilosamente a un puerta abierta donde podías ver dos sombras reflejandose en la pared frente a dicha entrada. Al acercar tu oído para escuchar pudiste entender levemente una parte de la conversación. - Aquí teneis el pergamino con la información acordada. - De acuerdo. Wang estará encantado. —escuchaste el sonido de una bolsa de monedas. —Aquí está tu pago. — Un placer negociar con los Terumi —comentó una de las voces. — El placer es nuestro, sin embargo... — Con que te has dado cuenta ¿no? — Era muy obvio, los niños siempre son curiosos. —se escuchó una carcajada del sujeto. —¿Tú como lo has detectado? para ser un niño es bastante ágil. — Cayó en mi trampa de papeles. —comentó el sujeto Los nervios se te ponían de punta. — El chico es hábil, pero estúpido. He percibido su chakra desde que bajo las escaleras y tocó mis hojas. — Estoy sorprendido, entonces, yo me encargo. — ¿Como cree? déjame los honor... —¡No!, no nos podemos arriesgar a que te descubran. Eres nuestro contacto. —comentó el sujeto. — De acuerdo, nos vemos luego. Acto seguido escuchaste una ventana abrirse y tras pocos segundos de silencio, tu cuerpo sudaba frío, de pronto, la voz del sujeto desde dentro de la habitación llamó tu atención — Hey niño, ven aquí. Sal de tu escondite. Tras escuchar al sujeto debías tomar una decisión de manera rápida. — No intentes huir, será peor si me cabreo. Entrar a la Habitación Correr hasta las Escaleras Correr hasta el Ascensor Esperar
Kurai Maldición, era algo demasiado obvio. Nadie deja papeles tirados por allí. Por lo menos, sabía que uno de esas dos personas era de mi mismo clan. Nadie podía sentir el chakra de esa manera, excepto nosotros, obviamente. Y había un Terumi metido en el asunto, también. La situación era peliaguda. Podía ver de correr hasta las escaleras, pero la otra persona seguramente era más rápida. El ascensor estaba completamente descartado, no podía controlar su velocidad de subida o bajada. Y entrar sería sinónimo de suicidio. Así que simplemente me quedé esperando, intentando pasar lo más desapercibido posible. [Esperar]
El silencio invadió el lugar que se escuchaba la caminada de las pequeñas cucarachas por el pasillo hasta que de pronto, el sujeto te volvió a hablar al cabo de no más de diez segundos. — De acuerdo, si no vienes voy hasta ti. —respondió. Comenzaste a escuchar los pasos que se acercaban a la entrada de la habitación, ahora, aún con los nervios debías tomar una decisión. Esperar Pararse frente a la puerta de la habitación Correr hasta las escaleras Correr hasta el ascensor
Kurai Bueno, quedarse quieto no funcionó. Debí haber salido antes, cuando tenía cierta ventaja. Ahora no tenía mucho sentido correr. Pero lo intentaría igual. Así que apenas escuché los pasos acercarse, me dirigí raudo hacia las escaleras. Al menos, podía sacar un poco más de distancia de mi posible agresor. Intenté ser lo más sigiloso posible, para evitar dar una idea sobre mis acciones. [Correr hacia las escaleras]
Una vez en las escaleras debías seguir tomando decisiones rápidas. Ahora te tocaba o subir o bajar por las escaleras, sin embargo, al ver la sombra del hombre acercarse al marco de la puerta los nervios no te dejaban pensar con claridad. Subes las Escaleras Bajas las Escaleras Esperar
Kurai No quedaba demasiado tiempo, así que decidí subir por las escaleras. Cuanto más cerca estuviera de la entrada, más fácil sería escapar, o incluso pedir ayuda, en caso de que fuera necesario. [Subir las escaleras]
Corriste por el lugar mientras subías por las escaleras y lograbas dar con la habitación por donde entraste de pronto el suelo se rompe frente a tus pies y allí se encontraba un hombre de aspecto bastante joven. El enemigo te ha dado la cara y ahora si te encontrabas en un apuro. —Por eso odio a los niñatos... —se quejó el joven, mientras que caminaba hacia tu persona. —¿Algo que decir? —te preguntó
