1. Nueva incorporación a la familia Una nube de humo amarillo se había formado en el salón de la casa de los Tendo. ¿Qué que había pasado? Bueno, esa mañana soleada Ryoga Hibiki había llegado de visita después de haber estado perdido días intentando buscar el camino de regreso, aunque el aseguro como siempre que no se había perdido. Akane fue tan amable de invitar al chico de la banda amarilla a pasar y comer algo con ella y Ranma, ya que la familia había salido cada uno a sus propias cosas. Por supuesto Ranma y Ryoga empezaron a discutir entre ellos con Akane de por medio, la cual solo trataba de calmar la situación y le dio algún capón al chico de la trenza. -¡¿Por qué has hecho eso?!- se quejó el herido -¡Porque eres un maleducado con los invitados!- -¡El chico cerdo no es un invitado solo es un estorbo!- recibió ante ese comentario un capón de Ryoga -¡Cuidado con lo que dices!- aunque el chico de la banda agradecía que Akane no comprendiese las palabras del otro. -¡Solo digo que eres un aprovechado por venir aquí a comer!- La chica suspiro rodando los ojos, ya empezaban otra vez ¿Es que no podían estar sin pelear alguna vez? Mientras ambos chicos discutían ella vio al maestro Happosai entrar por el jardín, ciertamente había estado mucho tiempo sin saber de él, le miro con desconfianza, mientras el solo saco un mazo grande de madera con una cara sonriente. -¿Para qué es eso?- ella le preguntó curiosa, mientras ambos chicos seguían discutiendo sin darse cuenta de la nueva presencia ni escuchar lo que pasaba a su alrededor. El anciano carraspeó – estuve viajando un tiempo y encontré algo interesante- -¿A parte de robar ropa interior viejo pervertido?- volvió a mirarle desconfiada -¡Sí!- alzo el mazo- ¡Esto ayudara a Ranma a ser un hombre por completo!- Akane aún estaba confundida, no comprendía lo que el anciano quería decir o a que se refería, miro de reojo a los chicos que aun discutían, sobre todo a Ranma, ¿Quería decir Happosai que encontró algo bueno para Ranma? Ella suspiró y miro de nuevo al anciano que parecía concentrado agarrando el mango del mazo. -No debo equivocarme, solo puede usarse una vez- La chica grito por el susto, ya que Happosai salto sobre su cabeza alzando al mazo, pensó que iba a golpearla, pero el anciano golpeó en la cabeza de Ranma provocando la explosión de humo amarillo anteriormente mencionada. La fuerza de la explosión mando a Ranma y Akane lejos de Ryoga y Happosai. El chico de la trenza acabó encima de la chica, aunque se sujetó con los brazos para no aplastarla, cuando el humo se disipó se quedaron mirando a los ojos, con sus rostros muy cerca el uno del otro. Akane le dio un empujón avergonzada haciendo que el chico de la trenza se golpeara contra la pared. -¡¿Pero qué haces?!- -¡Estabas muy cerca pervertido!- -¡A sido un accidente!- chasqueó la lengua mirando a otro lado-¿Por qué querría yo estar cerca de una niña tan poco femenina?- Le golpeo de nuevo dejándole un chichón, a lo que Ranma se quejó sobándose y pensando que debió morderse la lengua por decir cosas que en verdad no pensaba, todo por culpa del orgullo. Se giraron para ver a Ryoga cuando este exclamo, pues encima de él había una chica de cabello rojo recogido en una trenza…, no podía ser… ¡La parte femenina de Ranma! -¡Duele!- la chica pelirroja se quejó separándose y sobándose la cabeza mientras el chico de la banda amarilla la miraba sin poder creérselo -Hay dos Ranmas…-Akane no podía casi creérselo y su prometido estaba a su lado con la boca abierta. Happosai carraspeo de nuevo para llamar la atención de todos y explicarse -En mi viaje encontré este mazo especial en un templo, sirve en verdad para separar espíritus que están dentro como huéspedes en el cuerpo de un vivo, pero pensé que serviría para esto- -¿Pero entonces somos los dos Ranma?- el chico de la trenza estaba confundido. -En verdad no, ella conserva tus recuerdos, pero acaba de nacer como una persona nueva e independiente, ya no hay nada que compartáis a parte de tus recuerdos pasados- Todos se quedaron en silencio intentando asimilarlo, aquello era demasiado, toda la seriedad se fue al garete cuando el anciano se lanzó a los pechos de la pelirroja, la cual chillo y lo tiro contra el suelo comenzando a pisotearlo repetidas veces como si de un bicho se tratase. -¿Entonces cómo te llamas?- Ryoga trato de romper el hielo -Y yo que sé, acabo de nacer- contesto la pelirroja. Ranma se acercó a ella y ambos se quedaron mirándose, para a continuación tirarse de las mejillas mutuamente, vaya par de tontos estaban hechos… Akane suspiró pesadamente, debían explicar mucho de esto a sus padre, mientras Ryoga miraba el mazó, pero este ya estaba roto, al parecer su uso solo podía ser para una vez. -Está bien habrá que ponerte un nombre- decidió el chico de la trenza La pelirroja correteo abrazándose al brazo de Akane y sonrió -Quiero que lo elija ella- -¿Yo?, ¿Estas segura?- La pelirroja asintió y les saco la lengua a los chicos, no iba a permitir que le pusieran un nombre de mal gusto un par de tipos como esos. Akane la miro pensativa, tampoco tenía mucha idea de que nombre podría ir con ella. -¿Qué tal Ranko?- rió nerviosa Se produjo un silencio escalofriante en el salón, ¿Qué pasaba?, los chicos miraron expectantes a la pelirroja -¡Me encanta!- se abrazó a Akane mientras los otros dos se caen al suelo de la sorpresa, por un momento pensaron que habría discusión por el nombre. Ryoga se retiró, temía que Ranko aunque había nacido como alguien independiente a Ranma, esta podría también hacerle imposible la vida, era otra más cerca de Akane que sabía su secreto como P-chan. Horas después el resto de la familia llego, no podían creérselo, tardaron en asimilar la explicación que Ranma y Akane dieron de la presencia de Ranko, Happosai no podía explicar nada, ya que la pelirroja le hecho de una patada por pervertido. Genma tomo la decisión, Ranko seria registrada como Ranko Saotome, la hermana menor de Ranma y asistiría al instituto Furinkan con ellos. A la pelirroja parecía hacerle ilusión y a Soun Tendo no le importo un miembro más en la casa, menos cuando la chica aseguraba que quería encontrar un empleo a medio tiempo, le parecía alguien responsable y muy diferente a Ranma, así que no quería que ya pensaran por mucho más en ellos como una sola persona. -Deberías tomar ejemplo de tu hermana Ran… ¿Dónde está Ranma?- de pronto había desaparecido -Yo sé dónde está- Nabiki rodo los ojos escuchando el agua del baño mientras el chico de la trenza reía como un maniático. Cenaron tranquilamente, aunque era raro tener a la chica allí, pero ella parecía feliz, aunque no fuera Ranma, tenía sus recuerdos y sentía que aquel era un ambiente familiar muy agradable y eso le gustaba. -¿Quieres dormir en la habitación?- Akane se ofreció amablemente -¿De verdad?- a Ranko le brillaban los ojos -Claro, espero que seamos buenas amigas- Akane exclamo sorprendida, pues a la pelirroja salto abrazándola muy fuerte, esa era su nueva vida ahora y estaba deseando de salir al exterior. Continuara...
2. La verdad… El domingo fue un día bastante ajetreado, tuvieron que hacer algunos trámites del registro para darle a Ranko una identidad que fuera real. A Ranma el echo de tener una “hermana” le era totalmente nuevo y a la vez inquietante, después de todo ella surgió de una forma poco peculiar, pero al menos ya no debía preocuparse por el agua fría. Después de todo el papeleo Akane y ella fueron al centro comercial para buscarle ropa, además de que debían pagar el uniforme para el instituto Furinkan, aunque la chica Tendo miraba a la pelirroja de reojo sintiéndose algo extraña. Le costaba caminar junto a esa apariencia sin que esta fuera Ranma. -Se en lo que estás pensando- dijo de repente la pelirroja -¿En serio?- la otra contesto algo avergonzada -No te preocupes, soy una persona completamente diferente a Ranma, solo que conservo sus recuerdos y algunas habilidades- -Es un alivio saberlo- suspira- debe ser difícil tener los recuerdos de otra persona- -Un poco, pero ahora tengo mi propia identidad así que no hay mayor problema, creare mis propios recuerdos- Durante el tiempo que estuvieron de compras Akane noto que era como cualquier chica de su edad, quizás…no controlaba su fuerza y a veces era hiperactiva, pero como cualquier chica, poco a poco empezó a verla como alguien independiente de Ranma, y le gustaba pasar tiempo con una nueva amiga. Regresaron casi para la hora del almuerzo, reían cargadas de bolsas entrando a la casa, Ryoga se acercó rápido a cargar las bolsas de Akane. -No esperaba que estuvieras hoy aquí – -Bu-Bueno yo…quería visitarte y….- -Para no perderse a dormido cerca del jardín – de forma burlona apareció Ranma de brazos cruzados. -¡No es cierto!- se quejó el chico de la banda -¡Claro que sí! ¡¿Cómo puedo dormir tranquilo si roncas como un cerdo?!- -¡Ya basta!- Akane les miro de forma sebera, ambos chicos se dieron la espalda, eran como un par de críos Ambos se volvieron después de un pequeño momento de silencio incomodo hacia Akane y sonrieron de forma tensa. -Déjame que te lleve el resto de las bolsas- -No escuches al cerdo, deja que yo las lleve- se quejó el chico de la trenza -¡¿Cómo me has llamado?!- -¡Cerdo! ¡Eres un tío que es un cerdo…!- Ranko le tiro una bolsa en la cara a su “hermano” y sonrió de forma tensa también, aunque tenía un tic en la ceja de “os voy a aniquilar” –Que amables sois, podéis llevar todo esto – les tira el resto de las bolsas haciendo que con tantas los chicos apenas se vean. Ellos comenzaron a mascullar y se marcharon al piso de arriba para dejar todas las bolsas en el nuevo cuarto de la pelirroja. Era evidente que ella sabía perfectamente sobre la maldición de Ryoga al conservar los recuerdos de Ranma, el chico temía que ambos Saotomes acabasen contándole algo a su querida Akane. No tardo la chica de la trenza en subir y mirarles de forma asesina a ambos mientras ponía sus brazos en jarra, estos tragaron saliva asustados, ni siquiera Ranma sabía porque la temía. -Podríais ser más discretos par de bobos, ya sé que sois dos mandriles peleando por el amor de Akane, pero no está bien que tu Ranma hables de la maldición- luego miro a Ryoga- Y tú no deberías usarla en tu favor para dormir con ella pervertido- le puso el pie en la cara y el puño lo puso sobre la cabeza de su hermano. Al día siguiente, su primer día de clases en el Furinkan ambos chicos estaban más controlados, Ranma no decía nada enfurruñado y Ryoga se paseaba por los alrededores. Akane le contaba por el camino a Ranko sobre el instituto, sobre algunos amigos y como eran las clases, iban hablando amenamente hasta que alguien corrió hacia ellas de forma frenética. -¡Pero si son mi hermosa Akane y la chica pelirroja!- Kuno como siempre dejaba caer la baba -Tenemos prisa Kuno- Akane trato de pasar, pero por supuesto el chico no la dejo. -¿Es que estas sordo?, ha dicho que tenemos prisa- la pelirroja frunció el ceño -Dejad que os escolte amada pelirroja- -Solo quítate y me llamo Ranko- dijo ofendida dándole tal empujón que lo aparto contra una pared Kuno las miro con corazones saliéndoles casi de los ojos – me encanta cuando os hacéis las difíciles- Para suerte de ambas no tendrían que hacer nada ya que Ranma y el comenzaron su pleito matutino, así que se fueron directamente a clases. Fue presentada a la clase y saludo de la manera más animada posible, llamo la atención esa manera tan ingenua e infantil de presentarse, no tardo en caer bien a casi toda la clase. En descansos entre clase y clase Ryoga estaba subido a un árbol mirando por la ventana de los pasillos, esperaba ver a Akane por alguna parte, pero de momento no encontró nada. -Con que estabas ahí, llevo buscándote todo el día- cuando Ryoga miro hacia arriba encontró a Ranma con un cubo de agua fría, pero cuando quiso actuar ya fue demasiado tarde y se vio convertido en cerdo –Eso te enseñara a meterte en tus asuntos- sonrió casi con orgullo el chico de la trenza El pobre cae transformado en cerdo del árbol, boto en varias ramas hasta acabar en el suelo, se quejó dando chillidos, pues se torció una patita. Ranma parecía divertido hasta que recibió un golpe en la cara de una zapatilla que le fue lanzada y cae sentado haciéndose daño en el trasero. -Eres muy malo- Ranko le saco la lengua y recogió su zapatilla que cayó al suelo para colocársela. El pobre cerdito siguió chillando hasta que ella le recogió en sus brazos junto a la ropa – que sepas que la mitad de la culpa es tuya, por espiar a Akane- comenzó a caminar a los vestuarios -¿Es que no podéis disputar de forma normal por ella?, de todos modos acabara escogiendo ella no es “ quien primero la pille”- le saca la lengua al cerdito el cual hace ruiditos mirándola con el ceño fruncido como si estuviera discutiendo con ella, pero solo le provoco una sonrisa a la chica era demasiado adorable ver a esa bolita negra enojada. Al llegar a los vestuarios y le dejo bajo la ducha abriendo la llave del agua caliente mientras miraba a otro lado. Ryoga sacude el cabello molesto – ese idiota siempre se mete en lo que no le llaman- -Te equivocas…- -¿Qué es lo que quieres decir….?- -Ella ya ha elegido- le paso la ropa mirando a otro lado, el la recibió y miro tragando saliva- pero te cuesta aceptarlo…ellos están prometidos, pero ya no se trata simplemente de algo planeado por sus padres… ellos se quieren…- Ryoga agacho la cabeza- ¿Eso donde me deja a mí?- -Somos jóvenes no es para tanto- -¿Qué quieres decir?- molesto -Encontraras a alguien más, es por tu bien, no sigas luchando por algo imposible- le mira y sonríe ampliamente- encontraras otra chica linda y buena como Akane-chan- se agacho y tomo su muñeca, él se quejó por el dolor. La chica se quitó la cinta que sujetaba su trenza y la uso para vendar la muñeca – tengo que irme, piensa en lo que he dicho- Ryoga se quedó allí solo pensando en que la pelirroja tenía razón por mucho que doliera, pero también que se sentía agradecido porque alguien más le tratase con esa amabilidad. Pero entonces ella asomo la cabeza por la puerta- a si, como te he ayudado me invitaras a comer y a los recreativos el sábado, chao- dijo de forma animada marchándose. El resoplo, había sido todo demasiado bonito para ser verdad… Al finalizar las clases Ranko no paraba de contarle muy entusiasmada a su amiga sobre cómo se había sentido en su primer día de clase, pero claro Kuno las detuvo de nuevo a la salida. -Espero que ahora me dejéis acompañaros a casa, aunque antes podemos ir a tomar algo los tres-se puso entre ellas pasando ambos brazos por los hombros de cada una. Ambas se miraron mientras el parloteaba sobre planes. -¿Qué hacemos?, ¿Corremos o le pateamos el trasero?- la pelirroja ladea la cabeza con esa duda -Que tal ambas- Akane responde con un tic en la ceja. Las dos retrocedieron y le dieron una patada en el trasero al chico tirándolo al suelo, después saltaron sobre él y huyeron tomadas de las manos mientras la pelirroja se carcajeaba. -Algún…vuestro mundo será mío…- Kuno lloraba a moco tendido de forma sobre actuada mientras las miraba irse. Continuara...
3. Pequeña salida Ryoga aún no entendía como acabo así, pues estaba siendo arrastrado de un lugar para otro por el centro, resopla sin poder decir que no a la insistencia de la pelirroja. Esa misma mañana ella había ido expresamente a recogerle a su casa, bueno si es que a aquello podía llamársele casa, pues vivía en una tienda de campaña cerca de un parque infantil que limitaba con un pequeño bosquecillo. Ella le aseguro que él podría perderse u olvidarse de su “deuda”, en cierto modo si se sintió en deuda con ella, con la pata rota en el instituto podría haber sido atrapado por cualquiera, pero ella le había ayudado. Bueno la petición de Ranko no era nada comprometedora, simplemente quería comer algún helado e ir a la recreativas, no era nada como una cita…el moreno sacudió la cabeza, aun no olvidaba a Akane…aquello no era nada ¿Por qué lo estaba pensando tanto? -Oye te estoy hablando- la pelirroja lo sacude -Ah sí… ¿Qué pasa? - -Deja esa cara larga y vamos a jugar – ella sonríe entusiasmada señalando una de las consolas -Juega tú …- -No te e traído solo para que me invites, es aburrido jugar sola- tira de él acercándose a la consola. El chico resopla y paga para poder jugar juntos, el juego era una simulación a los árcade de antes, él no había jugado mucho anteriormente y para ella a pesar de tener los recuerdos de Ranma también parecía algo nuevo. Al principio estaban algo torpes, pero se animaron y se molestaban el uno al otro con bromas cuando iban mejor que el otro. Ryoga se dio cuenta de que se estaba riendo de verdad y miro de reojo a la chica que sacaba la lengua con el ceño fruncido, haciendo un gesto bastante divertido mientras estaba concentrada casi aporreando algunos botones. - ¡Oye no te distraigas! - -E-etto si…- él trago saliva volviendo su vista a la apantalla. Debía quitarse esas ideas absurdas de la cabeza, después de todo ella…bueno le costaba pensar al principio que fuera otra persona diferente a su rival…pero lo era…tenia similitudes con el carácter de Ranma, sin embargo, Ranko era una chica diferente en la mayoría de sus acciones… si la miraba como una chica era linda, escandalosa quizás…y bastante hiperactiva a veces…, pero no parecía una mala chica. - ¡Vamos a batir el record! - grito ella sobresaltándolo. Cuando se percató ya lo habían batido, y ella chillaba entusiasmada saltando junto a él posando las manos en sus hombros, contagiándole su sonrisa, sonreían como un par de críos llamando la atención de los otros chavales que estaba por allí. -Y eso que éramos novatos- -Hay que celebrarlo con un helado y esta vez invito yo- tiro de su mano arrastrándolo fuera de los recreativos Ella compro un par de cucuruchos de vainilla y se sentó junto a él en un banco del parque cercano, le entrego el helado lamiendo ella el suyo - ¿Por qué eres tan callado conmigo? - - ¿Qué dices…? - -Con Ranma y Akane no paras nunca de parlotear, pero apenas dices nada hoy…supongo que te he hecho sentir obligado a venir- -Al principio si- -Vaya que sincero- la pelirroja le saca la lengua -Pero…quizás era porque al principio te veía como a Ranma…pero ahora…- - ¿Pero ahora…? - ladea la cabeza -Eres Ranko…solo Ranko, podría ser bueno tener una amiga como tú- sonríe el ligeramente - ¡Por supuesto que lo es! - dice muy digna, tenía la cara manchada de helado. Ryoga no puede evitar reírse y tomo un pañuelo limpiándole la boca y las mejillas, le pelirroja de deja hacer, aunque protesta un poco -Eres como una niña, estate quieta- - ¡Que te quede algo claro! - se pone en pie mirándole seria sorprendiéndolo por el cambio tan repentino- voy a ser la mejor Ranko del universo- sonrió de forma infantil de nuevo- y te encandilare con mi chispa- le beso la mejilla y salió corriendo divertida ¿La salida había terminado ya? vaya…. -Está loca…- Ryoga rio, aunque se tocó la mejilla algo sonrojado, era bastante encantadora. ¿Qué estaba diciendo?, no podía ser…apenas pensó en Akane en todo el día…quizás fue por lo que le dijo Ranko cuando le ayudó el otro día, quizás podría ser que se sentía atraído a la chica que le hacía caso…probablemente eso no era bueno, pensar que sentía eso por soledad era…hiriente…aunque no estaba seguro, ella le agradaba…quizás solo era eso. Al menos tenía una buena amiga ahora. Saco su cartera mirando si podría comprar algo de camino a su tienda de campaña…si es que recordaba donde estaba el parque infantil…al ver que solo había unas cuantas monedas suspiró pesadamente- necesito un trabajo nuevo- Continuara...
