T-T ya me tienes llorando de nuevo Yunne. Voy a apuntar ahora mismo tu nombre en mi Death Note porque te odio por matar a Soul pero... nah no te mato porque tienes que continuar eeh ;) no pero ahora en serio me declaro (yo misma) llorona oficial de este fic. PD: oh por favor sube pronto, presiento que volvere a llorar
**Shibusen- 19:07 hrs. ** **3 Días después de la pelea** Ya habían pasado 3 días y Maka no despertaba, al igual que Wes. Ambos estaban en la enfermería de la institución. Wes, bastante más grave que Maka pero igual de inconsciente. Se supone que al romperse los lazos alma-alma y cuerpo-cuerpo entre Maka y Soul como Familiares y al quedar ella como la superviviente, debía morir, pero algo la mantenía viva, y aunque decían que no le duraría mucho antes de preparar otros 2 ataúdes en vez de 1, una parte de Maka seguía aferrada a la vida. ***---***---*** Todo está a oscuras, no veo nada… Siento que me hundo en un vacío que me consume, que me debilita, que me atrapa…. Los ojos no quieren abrirse, pero ninguna luz se filtra a través de mis parpados, lo cual; no es muy esperanzador. Al final, consigo abrirlos ¿O siguen cerrados? No, lo sé, todo parece igual…. ―Ven Me llama alguna voz…Una extrañamente familiar… ¿Es él? ―Despierta Una luz fuerte se filtra entre mis pupilas, como esa supuesta “luz al final del túnel” y como todos los que dicen haberla visto, una extraña fuerza me hace dirigirme hacia ella. Siento los pies pesados y el suelo muy blando, como si estuviera caminando sobre almohadas, que me dificultan el paso. Cuando estoy ante ella, me doy cuenta de que no es solo luz, es agua que irradia luz. Agua azulada, brillante, cristalina. Extiendo la mano hacia ella, está fresca, a la temperatura perfecta, se siente perfecta entre mis dedos. Introduzco todos los dedos, luego la palma, y sigo hasta que veo una sombra al otro lado del agua… La sombra extraña tiene forma humana… Y cabello blanco… ― ¡Sal ahora mismo! Otra mano, algo más grande que la mía me jala de la muñeca desde el otro lado del agua. Cuando me jala, me introduzco de pies a cabeza en el agua, y salgo poco después, y el suelo cambia de lugar, yo estaba abajo, de cabeza y ahora tengo que sujetarme de la extraña mano que me sujeta para ajustarme a mi nueva realidad. Salgo del agua, y toco tierra. Cuando consigo enfocar, enfoco primero el cielo azul, un azul claro, con algunas nubes blancas y el Sol brillante. Después enfoco el pasto verde con lo que parece ser un bosque a varios kilómetros, y entre tanto, siento unos golpecitos leves en el hombro, y al voltear lo vuelvo a ver. Con el cabello blanco medianamente peinado y la sonrisa de ganador. Pantalones finos y blancos con alguna especie de brillo azulado y una camisa blanca igual, con los primeros botones desabrochados. ―Oye, no di mi alma por ti para que te dejes morir allá afuera. Mientras lo dice, señala con el pulgar una puerta colocada en la nada a otros kilómetros. Desde donde lo veo, parece de madera. ―Emm… ¿Se supone que debo agradecerte eso? Nadie te lo pidió.― Respondo secamente. ―Recuerda que aun puedo arrepentirme. Técnicamente, los dos estamos muertos. Y ninguno lo está. Entrecierro los ojos… Aun me queda algo por preguntar a este imbécil. ―Y…Exactamente… ¿Por qué lo hiciste? Pudiste dejarme morir, no estaba muy lejos de lograrlo, para ser precisos. Se rasca nerviosamente la cabeza. ―Supongo que te lo debía. Además, tú tienes más razones por las cuales quedarte. Lo dice como si realmente no importara, pero ni se detuvo a pensar cuando cambiamos lugares. ¿Se supone que debo agradecerle? Cuando estoy por hablar, en el cielo aparece un rayo, acompañado por un trueno en el mismo momento, y cuando el rayo desaparece, el cielo azul también, y ahora no hay más que nubes negras que cubren por completo el cielo, dejando la luz en algún otro lugar completamente ajeno al mundo. ―No podremos estar los dos aquí mucho tiempo, después de todo, no caben dos almas en un solo cuerpo. ―Entonces, ahora me dirás que el que salga por esa puerta…― Digo con sarcasmo, apuntando a la puerta de antes, que ahora parece tener algo que no es madera en su centro, algo oscuro, del color del cielo. ―Es el que despertara. Se hecha a reír, y luego me da una palmadita en la espalda, para luego comenzar a avanzar. ―Ay, ¿Qué comes que adivinas? ― De nuevo el tono sarcástico. Sonrió de lado, niego con la cabeza sin dejar la sonrisa, y voy a su lado, tiene los brazos cruzados. ―Oye… ¿Qué pasara con quien se quede? Lo escucho suspirar, pero no deja de avanzar. La puerta se va haciendo cada vez más grande. En el orificio de la puerta, empiezo a distinguir dos figuras que van completamente de blanco. Un blanco que brilla entre la oscuridad de las nueves negras. ―Bueno, desaparecerá. Desapareceré. Lo miro con extrañeza, sin entender del todo ― ¿Me estás diciendo que su alma se ira? Y, además. ¿Quién te dijo que el que se quedaría serias tú? Se ríe, con alegría o quizá inocencia. Me sonríe, aun sin dejar de avanzar. En la puerta, a la que nos vamos acercando, las figuras se hacen más grandes. ―Exactamente. ¿Por algo intercambie lugares, no es así? Y me quedare yo, porque tú tienes a alguien esperándote allá afuera. Yo solo te tengo a ti, y prefiero que tú te quedes. La puerta está a muy pocos metros, y al fin descubrí la verdad de la puerta. Las figuras somos nosotros. Es un espejo. Desde este punto, me doy cuenta que somos muy parecidos, más de lo que ya éramos. Ambos hemos cambiado, y ahora hasta yo podría confundirnos. A exceptuar varias coritas. ―Quiero remediar lo que he hecho. Esta es mi única y verdadera oportunidad de hacerlo. Estando de frente a la puerta, puedo ver nuestros reflejos con mucha claridad. Pero, cuando me quedo mirando el reflejo, la imagen se transforma. Ahora es un cuerpo, recostado en una cama de hospital… ― ¿Vez?...― Apunta a la figura…Una figura femenina ―Ella te espera… ―…Maka…. **…**…** Siento que todo pesa, Mis brazos…Mis piernas… Todo pesa… Y esa fastidiosa luz me encandila… ― ¿Cuándo crees que despierte? ―Espero que pronto….Ya lleva 5 días así. Incluso Wes parece estar recuperándose mejor. Escucho voces… ¿BlackStar? Y… ¿Chrona? Un momento…. ¿Chorna está bien? ― ¡Chicos! ¡Hey! ― ¿Qué ocurre? ―Tienen que ver esto. Wes despertó…Bueno, algo así. Las voces siguen hablando de algo que no termino de escuchar. Escucho pasos alejarse de la habitación y sé que vuelvo a estar sola… **..**..** ―Esperaba que ya hubiera despertado. …Wes… ―Todos esperábamos lo mismo. Parecía que el condenado eras tú. …Kid... ― ¿Tan mal estuve? …Por cierto ¿Cuándo dices que volveré a la normalidad? ―Cuando ella despierte ―Oh, fantástico. Quiero despertar….Necesito despertar… ¿Qué ha estado pasando este tiempo? ― ¡Mira! ¡Juro que se movió! ― ¿Qué cosa? ¿De qué hablas? ―Sus ojos. Sus ojos se movieron. ***….***….*** Al fin, creo que lo volveré a intentar. Mis parpados siguen pesados, pero últimamente los puedo mover un poco, el otro día, casi lo consigo. Necesito saber que ha pasado, que paso con Soul, con Ragnarok ¿Cómo ha estado Chrona? Que paso exactamente con los sacrificios…Dios, me empieza a doler la cabeza, frunzo el ceño por costumbre… Un momento… ¿Puedo mover la cara? Empiezo a mover los labios, las cejas, a apretar los ojos, es tan sencillo como siempre. ¿Qué veré cuando abra los ojos? Respiro profundamente y exhalo igual, en un suspiro. Abro lentamente los ojos, pero los tengo que mantener entrecerrados por la fuerte luz. Trato de alzar el brazo para mirar, pero no consigo fuerza necesaria para eso. Tranquila Maka, no tienes fuerza, okey. Puede que tu garganta este ronca, pero funcione, anda, intenta. Hago tal como dice mi subconsciente. Separo los labios, frígidos, y resecos. Tardo un poco en encontrar valor para intentarlo. ― ¿A-ah….? Diablos, apenas y tengo voz, esta entrecortada, seca y muy ronca. ― ¿S-ssss-Soul?― Apenas y la controlo, alargue la “s” sin darme cuenta, por no tener control total sobre mí. Cierro los ojos, cansada por mi primer fallido intento, no sé exactamente que esperaba de él. Empiezo a escuchar pasos y abro los ojos de nuevo, con fuerzas renovadas por la emoción. Veo un pequeño, tímido y tierno ramo de lilas que tapa el rostro de quien sea que venga detrás. No dejo de mirar a ese pequeño y tierno ramo de lilas, entonces, veo que la persona detrás de ellos lleva ropa negra. Deja el ramo con su jarrón transparente en la mesita, no puedo girar la cabeza, pero creo saber quién es… ― ¿C-Chrona…?― Apenas y consigo escucharme a mí misma. ― ¡Maka!― Deja lo que estaba haciendo con el ramo, y voltea bruscamente a verme, asombrada. Se sienta en el suelo a lado mío, de rodillas. Me toma de las manos mientras me mira fijamente. Con fuerzas, consigo mover un poco la cabeza hacia ella, sus ojos brillan como hace mucho no lo hacía. Le sonrió. ―Cuéntame ¿Cómo te sientes? ¿Quieres algo? Puedo traerte agua si quieres…― Me lo dice con tanta fluidez que en serio debe de estar muy emocionada si no tartamudea ni un poco. ―E-el agua está bien… Se voltea a la mesa donde dejo el jarrón, y toma de detrás de este una jarra de cristal y un vaso, también de cristal, después de llenarlo a la mitad me lo da. Entonces yo trato de sentarme, pero como no tengo tanta fuerza, ella deja el vaso a un lado, y le sujeta de las manos para ayudarme. Un minuto después, ya con el vaso vacío, continua el interrogatorio. ― ¿Entonces? ¿Cómo te sientes? ―Algo débil. ¿Cuánto tiempo he estado dormida? ―Una semana… ―Y….― Se me quiebra aún más la voz… Creo conocer la respuesta a mi pregunta, pero aun así quiero hacerla. ― ¿Q-que paso con…Con Soul…? Me sonríe tristemente. Y me mira con ternura. Luego, confirmando mis sospechas, niega con la cabeza… ―No lo logro Maka. Pero Wes sí. ***---***---*** ― Maka, Wes quiere verte. Creo que te agradara verlo. Te tiene una sorpresa. Asiento con la cabeza. Ya todos pasaron por mi habitación. Después de que Chrona me confirmara la muerte de Soul, ella se fue un momento, para decirle a todos que ya había despertado, hubo muchos abrazos, BlackStar literalmente ilumino la habitación -Se puso luces navideñas sobre la ropa- Tsubaki me trajo unos dulces, Liz me prometió ir de compras cuando me sintiera mejor, Patty no paraba de darme besos, y Kid trataba de mantenerse firme, pero le salieron lágrimas cuando me vio. Niggs-Sensei* me ayudo a levantarme, y a ponerme en silla de ruedas. Ella misma me llevo hasta otra habitación. Pasamos por muchos pasillos, todo me parecía distinto, y me gustaba. Por alguna razón, cuando estuve cerca de la habitación 203 -que es la de Wes- me empecé a sentir muy nerviosa, y emocionada. Abrieron la puerta, lo primero que veo, es a Wes sentado en la cama, con las piernas separadas, los antebrazos sobre los muslos, y encorvado, mirando al suelo. Por un momento, me parece como si estuviera viendo a Soul, pero sé que eso no es posible. La habitación es como cualquiera en la enfermería, todo blanco y bien iluminado. Me dejan en la habitación, y cierran la puerta. Wes alza lentamente la mirada, esta algo demacrado, tiene ojeras pronunciadas, y aun está conectado por las muñecas a lo que sea que haiga en la bolsa. Su piel se ve grisácea verdosa y sus labios se ven secos y cuarteados. Seguro yo no tengo mejor aspecto. Se levanta lentamente, mirándome fijo. Cuando esta frente a mí, me sonríe, y aunque sus labios se rompen al estirarse, y sus ojeras se acentúan, añadiendo unas pequeñas arrugas a los lados, siento en sus ojos una vieja calidez que me tranquiliza. Le correspondo a la sonrisa, y se inclina, me toma de la cintura y me levanta de la silla de un abrazo. Yo me sujeto a sus hombros por miedo a caer, dado que no confío en mis piernas. ―O-oye, tranquilo, je je―Me rio un poco por la excesiva muestra de afecto. Pero no me suelta. ―Tenía muchísimas ganas de verte, Maka. ―… Extraño a Soul… No es la mejor cosa que puedes decir cuando alguien te dice algo tierno, pero no puedo decir nada más, es todo, y él probablemente es la única persona con la que podría hablar de lo que paso con Soul. No debería querer hablar de ello, pero eso es justo lo que quiero. ―Yo no. Me separo lentamente de él, cuando lo miro a los ojos, aun me esta sonriendo. ―Pero es tu hermano, o lo era… ¿Cómo puedes decir eso? Niega con la cabeza, mientras yo lo miro confundida. ―No lo entiendes Maka. ― Me pone las manos en las mejillas y me mira fijamente… ¿Se está acercando? Pues lo detengo haciéndome para atrás. ― ¿Qué pretendes Wes? Él suspira. ―Bésame y lo sabrás. ― ¿Disculpa? ― Solo hazlo. ― Claro que no. ―Por favor. Solo hazlo, lo entenderás todo cuando lo hagas ―Pues no te creo. El suspira nuevamente y se voltea, quita las manos de mis mejillas y se rasca la nuca nerviosamente. ―Maka, mírame… ¿No encuentras algo distinto? Lo miro, pues claro ―Tienes muchas ojeras. Y la piel verdosa ¿Algo más? Niega con la cabeza. ―No Maka, mira más atenta. A los ojos. Solo a los ojos. A las ventanas del alma. Tuerzo la boca ¿Qué diablos pretendes Wes? Sea lo que sea, lo miro, muy enfadada, pero lo miro. Sus ojos, castaños oscuro, como siempre. Pero luego veo algo, no sé qué es, pero me hace acercarme a él, hay algo distinto en sus ojos. Cuando logro enfocarlo, no sé qué pensar… ―Se están volviendo… ―Si Maka, están volviéndose rojos. Los sigo viendo, y ahora me parece muy obvio el color, no sé por qué no lo percibí. ― ¿Porque? ―Maka… Wes intercambio nuestras almas… Estoy atrapado en su cuerpo… Por eso sigues viva. Por eso se están volviendo rojos. Y por eso necesito un beso tuyo… Nuestras almas siguen unidas, pero nuestros cuerpos perdieron conexión. Abro mucho los ojos. No puedo terminar de asimilarlo. Creo que he empezado a llorar… ― ¿Soul…?― Mi voz se empieza a romper por el llanto. ―Si.― El también suelta lágrimas, pero no tan escandalosas como las mías. Me arrojo a sus brazos, que me sostienen en el aire y me aprietan contra él. ―Oye, aun me debes ese beso―Me dice al oído. ― Idiota― Digo mientras me rio. Me separo de él lentamente, y muy poco, lo suficiente para verle el rostro. Siento como si fuera a besar a Wes y no me gusta la idea, pero veo sus ojos, y siento que es Soul… Sin perderles la pista, para no pensar de más, me le acerco… Él se acerca… Cierro los ojos… Me muevo lentamente… Separo los labios… Y siento la presión de los suyos. Al primer contacto están tiesos, duros, pero cuando se funden con los míos, se vuelven suaves y deslizables por la saliva. Siento un cambio en la temperatura de su piel, se vuelve más fría. Poco a poco toda su piel se vuelve fría, y cuando me separo de sus labios, y abro los ojos. Wes no está… En su lugar solo queda Soul… ―Te extrañe. ― Y yo a ti. ―Y pensar que pudiste haber muerto ―Me sacrificaría por ti, una y otra vez si así fuera necesario. Estoy listo para morir por ti -“Estoy listo para morir por mi técnico” <3 * No se cómo se llama la enfermera compañera arma de Sid-Sensei, pero se trata de esa enfermera Próximamente… Epilogo. No me maten por tardar tanto YnY
;.; ...Humano...Estuve esperando este glorioso momento durante meses...Estoy llorando de veras, no es mentira, esto llega justo al corazón, gracias por actualizar TvT...Por cierto la enfermera es Nigus-sensei, Felicidades por tu tercera pagina, cuesta llegar aquí! casi no hay faltas de ortografia, y la narracion impecable, claro como el agua, pero te lo digo para no ser spam...T^T. Hiciste llorar a Dary de felicidad...te mereces lo mejor de mi... Gracias YunneMiku c: espero con pañuelos el le final :)
¡oh por Dios! lloré, lloré y más lloré, ame todo el capitulo desde que comenzó hasta que término; lloré al saber que lo que hizo Wes fue realmente conmovedor, y cuando Soul volvió, lloré más Hasta un punto en que no sabia si lloraba de felicidad o tristeza. da algo de nostalgia saber que se acaba pero lo disfrute al máximo y ansío ese final. besos y abrazos y no te tardes mucho con ese epílogo *se va a comprar más pañuelos desechables*
Vaya que lograste atraparme ame tu historia con desirte que me la avente en un solo dia, aqui estoy yo leyendola desde las 6 de la mañana y ahorita son las 12:57am de el otro dia por asi desirlo y tengo que levantarme 4:30am para ir a trabajar enserio, espero mi desvelada valga la pena ¡la ame! Espero ese epilogo con ansias!! Jiji vale vale bye bye.
De nuevo, lloro de nuevo (╥_╥) Ya me esperaba que fuese Soul en vez de Wes pero aun asi lloré. A ver, que mas te iba a decir yo... que me ha encantado toda la historia, que me ha encantado como narras, que me ha encantado como escribes y la facilidad que pareces tener para desarrollar lo todo. Y que espero con ansias el epílogo aunque me habría gustado que el momento de terminar esto no hubiese sido tan "pronto".
Epilogo: Todo sale bien al final El cuerpo se había convertido en ceniza, y el otro cuerpo había cambiado y había sido acorde al alma que en el habitaba, por lo que, el féretro solo era representativo, la tumba solo era representativa. El alma y espíritu habían sido liberados y formado parte en las estrellas, y aun así, todos miraban la lápida y leían el nombre dolorosamente, sabían que no estaba ahí, no había nada ahí, y aun así habían dejado rosas blancas por todas partes y expresaban su dolor y profundo agradecimiento, todos la miraban, todos vestían de negro, pero nadie lloraba. Todos sabían claramente la verdad de la muerte del mayor de los Evans. “Wes Evans” “Hermano. Amigo. Héroe” “Su muerte valió otra vida” “Su cuerpo vive con otra alma” “Su alma vive en otros corazones” “Su muerte no fue muerte” “Fue sacrificio de amor” A quien había dejado Wes su cuerpo, estaba al frente de todos. Miraba fijamente el nombre inscrito. No paraba de pensar en su hermano y en una palabra. “Gracias” La chica, la que ahora tenía en sus manos a quien más amaba, pensaba la misma palabra. “Gracias” En otro extremo del cementerio, una chica sufría en completo silencio. Al igual que la de Wes, la lápida y el féretro de Ragnarok eran representativos. Simbólicos. Solo eran un lugar al cual clamar, ante el cual sufrir, un lugar donde su hermana, aquella larga y delgada figura vestida de negro podía cumplir un sueño. No llevaba la misma ropa de siempre, la mayor Thomson había insistido, vestir igual que siempre no expresaría nada. Se había arreglado el cabello, calmándolo con listones negros, llevaba una falda holgada, un saco, tacones. Ragnarok siempre se burlaba, decía que el día que su hermana vistiera femeninamente se moría –lo cual era cruelmente irónico- pero en el fondo, sí que quería ver eso. Él tenía fe en su hermana, sabía que no daba todo de sí. Chrona se había esmerado solo para cumplir un deseo de su hermano. ―Lo lamento. Fue lo único que su amado pudo decir en condolencia. No se arrepentía de haberla alejado de Ragnarok cuando este había muerto, pero sabía que Chrona sufría por no haberse despedido. Nunca fue cariñosa con él. Nunca fue especialmente cariñosa con muchas personas; pero vaya si lo quería mucho. Su rostro. Su pequeño rostro pálido y húmedo en lágrimas. No hacía gestos. No hacia sonidos. Solo lloraba y su al alma llamaba a su hermano. “No pude despedirme” Pensaba… “No pude decirte tantas cosas” “Puede que sea tarde, pero espero que tu alma escuche el llanto de la mía” “He de extrañarte. Ya te extraño” “Siempre me pareciste muy irritante” “Siempre me hacías llorar… Y aun lo haces” “Y aunque llegué a decir que mi vida sería mejor sin ti…” “Me equivoque” “Vaya si me equivoque. Sin ti falta una parte de mi” “Prometo para tu descanso que seguiré en pie” “Lo hare solo porque sé que no querrías que me derrumbase” “Seré fuerte por ti como tú lo fuste por mi” “Lo prometo” La tarde caía, parecía a punto de llover. Todos empezaron a marcharse. Al final, solo los más dolidos se quedaron, un pequeño grupo de 4. Chrona. Kid. Maka. Soul. Cuando el cielo rugió y la lluvia empezó a caer, las parejas sacaron sombrillas, se tomaron de las manos, y se fueron unos junto a otros, expresando su dolor mutuo en los ojos. ****Tiempo después**** Había pasado ya una semana de que Chrona dejase de llorar por las noches, aunque empezaba a recuperar su humor habitual, tampoco es que este fuera muy mimoso. Soul y Maka ya tenían una “Relación” de forma oficial. No hubo un “¿Quieres ser mi novia?” solo se habían besado, bueno, él se había puesto al frente de la clase -Stein sabía el plan, por lo que no lo detuvo-llamo a Maka a pasar y cuando la desconcertada chica estuvo a su lado, él la beso tiernamente sujetándole las mejillas y cuando el beso hubo terminado declaro: ―Ella es mía En voz alta, fuerte, con ternura, sin dejar de mirarla. ****------**** ―Black, estoy listo ―Pues adelante hermano. ¡Demuestra quien manda! ―Yo mando― No sonaba muy convencido. ― ¡Tu mandas!― BlackStar sí. ― ¿Seguro?― Estaba nervioso. ― ¡Se hombre, carajo!― Grito. ―Soy un hombre― Repitió. ― ¡Eres un hombre!― Se golpe a puño cerrado dos veces el pecho. ― ¡Soy un hombre!―Hizo lo mismo. ― ¡Eres un hombre!― Grito empujándolo.― ¡Anda, muestra quien manda!― Lo empujo fuera de la habitación. ― ¡Yo mando!― Avanzo animadamente por el pasillo. ― ¡Él manda!― Lo señalo con 2 índices mientras salían del pasillo hacia la fiesta. ― ¡Yo mando!― Se señaló a si mismo mientras giraba por el pasillo, dejando a la vista la fiesta. Ella estaba ahí, y en cuanto lo vio, le brillaron los ojos y no pudo reprimir una sonrisita. Soul titubea. ― ¿Sabes que viejo?― Dijo embelesado en sus ojos verdes. ― La amas ¿No?― Dijo con el mismo tono ilusionado que Soul. ―No. Es que no puedo, creo vomitare― Trato de volver corriendo al pasillo, pero BlackStar lo detuvo. ― De eso nada, ya estamos acá, así que no jodas ―P-pero… ―Solo hazlo ¡Coño!― Lo abofeteo, y Soul se paralizo. ― Tienes razón…― Dijo. ―Siempre la tengo, ahora, hazlo. Soul suspiro y avanzo hacia la fiesta. Los músicos sabían la señal, sabían lo que debían hacer, lo habían ensayado ya muchas veces, pero nada como el momento. La música paro. Los murmullos de quejas no se hicieron esperar. Soul subió al escenario que habían montado en el gran vestíbulo de la mansión de Wes, que ahora era suya, aunque solo la usara para fiestas o cualquier otra cosa. La había redecorado y parecía un castillo inglés, supusieron que a Maka le gustaría. ―Quisiera dar un anuncio― Dijo Soul, Maka parecía no entender nada.―Maka Albarn, al frente― Maka parpadeo varias veces antes de que le dieran cariñosos empujones las hermanas Thomson y subiera. Una vez al frente, Soul la miro a los ojos ―De antemano me disculpo si esto sale mal― Le dijo. Lo primero que pensó Black fue “Esto no era parte del plan” ―Maka, lleva casi un año que nos conocemos― Empezó a decir, y la tomo de las mano, las de ella temblaban. Sabía bien lo que Soul pretendía en cuanto la hizo pasar. La fiesta ostentosa, el smoking negro, todo lo hacía muy evidente, ella era una chica lista. ― Debo admitir que de buenas a primeras, me parecías irritante y sosa― Maka quiso responder, pero supuso que no era buena idea, así que solo se rio y algunos en el publico hicieron los mismo. ―Pero ahora te conozco, y tú eres la que más me conoce a mí. Tal vez sea un poco apresurado, tal vez lo más sensato sea esperar, pero sabes que no suelo ser muy sensato. Mi hermano me dio su lugar, más que nada por que esperaba que este día llegara. Lo hizo más por ti que por mí. Lo hizo… ― Se metió una mano en el bolsillo de los pantalones― Para que un día…― Saco una cajita roja― Yo fuera capaz de decirte…― Se puso de rodillas― ¿Quieres casarte conmigo?― Y entonces la abrió. Sí, todos sabemos bien que lo que había ahí era lo que era. Y Soul, solo para hacerlo más íntimo, hizo poner no solo el clásico diamante, una pequeña esmeralda y un pequeño rubí estaban uno a cada lado del diamante, no muy grande, nuevamente, así era más íntimo. Ella sabía bien que quería, y aun así no pudo reprimir las lágrimas y las sonrisas. Todos esperaban la respuesta y ella nunca la dijo. Solo fue capaz de asentir con la cabeza, la voz la traicionaría si hablaba. Soul sonrió de lado, le tomo la mano izquierda, y le coloco el precioso anillo en el dedo anular de su amada. Cuando lo hubo hecho, le tomo en brazos, la cargo sujetándola de la cintura y la hizo girar en el aire, todos aplaudían, pero ellos dos apenas y se enteraron. Cuando al fin dejaron de girar, él la beso. La boda fue muy linda, en un puerto, se acabó por el atardecer y la recepción fue bastante cerca, en un hotel muy bonito. Hubo baile y todos la pasaron bien. Soul apenas pudo dejar de bailar con Maka, apenas y pudo dejar de mirarla, con diversas flores en la cabeza, que primero hecho una trenza y luego sujetado todo en una cebolla, la hacían ver tan extravagantemente hermosa. El vestido no fue muy ostentoso, fue bastante simple para ser precisos, pero Maka lucia preciosa y todas esas flores fueron adorno suficiente, aunque llevo unas cuantas cosas más, detalles pequeños. Las flores lucían tan hermosas en su cabello, que Soul no reparo en lo difícil que sería deshacerse del peinado y sacar las flores en la noche de bodas hasta que el momento llego. ― ¡Auh! Oye, eso duele. ― Lo siento…E-está muy apretado. ― ¡Para! Duele mucho. Mejor lo hago yo. ― E-está bien… Maka se levantó de la silla y fue al baño. Una vez ahí y una vez se fueron las trenzas y las flores, decidió otra cosa. ― ¡Soul! El chico corrió hacia la puerta del baño y luego de tocarla con fuerza dijo. ― ¿Si? ¿Pasa algo Maka?― Aunque él no lo admitiese, esperaba que la chica abriera la puerta con el cuerpo desnudo y proponiéndole usar la tina juntos, y no estaba muy equivocado. ―Me voy a bañar. Pero, como era muy obvio, ella decía bañarse sola, sin compañía… ― ¿No quieres ayuda, amor~?― El tono seductor que uso Soul hizo muy evidente la proposición, y ella, al darse cuenta, no supo que decir. ―C-creo que no…― Dijo mientras se abrazaba el pecho, como si pudiese verla. ―Oh~ vamos~ ―Y-ya, déjalo. Me voy a bañar. Puso cerrojo al baño -prevención nunca está de más- se había empezado a quitar el vestido y cuando el cierre llego al inicio de su trasero, se dio cuenta de su error: Vamos ¿Seguir con el decoro? ¿En su noche de bodas? ¿Qué no se supone que es el novio el que page y quite el vestido? Se sostuvo el vestido sujetándolo con las manos en el pecho y se miró en el espejo de cuerpo completo que estaba junto a la hermosa ducha de mármol negro. Tenía el cabello en ondas gracias a las trenzas, se había quitado el velo y la tiara, también los aretes, el collar, los brazaletes, los guantes…Por lo que su piel clara, rosada y suave quedaba sin nada más que el vestido obstruyendo la vista, al verse en el espejo su inseguridad acumulada por los años la hizo ver mil y un defectos… “Mi cabello esta tan enmarañado y reseco” “Mira esta piel ¡Soy gris!” “Mis ojos son tan opacos… Y tengo ojeras…” “Mis labios son tan delgados” “Mis brazos y mis piernas parecen 4 palillos” “Mis pechos son tan pequeños…” “Y así me quedare por el resto de mi vida…” Por un momento quiso arrepentirse. Quedarse en la ducha hasta que Soul se cansara de esperarla y se quedara dormido, pero no podía hacer eso… Vamos, estaban casados, eso tendría que pasar en algún momento por más que lo aplazara y cuando lo aplazara, no habría diferencia. No se desarrollaría más, ¿Por qué hacer esperar más a Soul si no tenía caso entonces? Suspiro, trato de tomar valor y no pudo hasta que fue al espejo y lo volteo para no verse más en él. Volvió a suspirar. Mientras todo esto pasaba, Soul permanecía tumbado en la cama. Empezaba a pensar que esa noche no seria. Ya se había aflojado la corbata, se había desabotonado un poco la camisa y se había quitado el saco junto con los zapatos, se sentía cansado ¿En serio debería esperar más aun en su noche de bodas? “Tranquilo viejo. Así es Maka… En tanto sea capaz de salir del baño y al menos dormir juntos está bien… Pero si no...” Empezaba a desanimarse… A pensar que no saldría… Y entonces se escuchó el sonido del cerrojo siendo quitado y se levantó de golpe, quedando sentado en la cama. Maka salió del baño y se quedó parada frente a la puerta sujetándose el vestido de la misma forma, sonrojándose por lo inevitable, esperaba no arrepentirse. Soul también empezaba a sonrojarse, pero mucho menos, a él casi no se le notaba entre la baja luz que había en la habitación… La enorme cama blanca con forma de corazón los esperaba y nadie daba el primer paso… Soul se levantó lentamente y avanzo hacia Maka con la misma velocidad. Ella estaba muy nerviosa y no se atrevió a ver como el chico se le acercaba y miraba el contorno de sus ojos, las ondas de su cabello y la curva tambaleante de sus temblorosos labios. Cuando llego frente a ella, con la yema de los dedos le recorrió la mandíbula y al llevar a la barbilla la hizo hacia arriba, obligando a la sonrojada chica a levantar la mirada. ― Cariño, no tienes que hacer esto.― Le dijo el chico con voz suave cuando vio lo insegura y nerviosa que se sentía ella. ― Si no lo hago hoy… No sé si tenga valor para hacerlo luego… ― Le dijo mirándolo a los ojos, aunque le había costado mucho mantenerle la mirada. ― No puedes fingir. Te conozco mejor de lo que crees. Lo haces para no quedar mal conmigo. Maka… No te obligare nunca a nada ¿Entendido? Y eso también incluye nuestra noche de bodas. Ella lo miro unos segundos para asegurarse de que no fuera un sueño o un impostor ¿Su Soul le estaba diciendo todo aquello? Sin saber desde donde, sin saber que, ni porque… Le nació el fuerte deseo de besarlo… De besarlo y no dejar de hacerlo. Y siendo ya su esposa, y sintiéndose con el derecho de hacerlo cuando, y tanto como quisiera, no se contuvo. Ya se había quitado los zapatos y tuvo que ponerse de puntitas para alcanzarlo. Se sujetó de sus hombros para no caer y todo sumado le llevo solo 2 segundos unir sus labios con los suyos y que Soul la tomara de la piel desnuda de su espalda aceptando de corazón el beso de su amada. La empezó a jalar hacia la cama, cuando la recostó encima de él, el vestido estuvo a punto de caerse de su pecho dada la falta de mangas. La chica exclamo asustada y se llevó las manos al pecho y para no caer se sentó sobre él. Él la tomó por sorpresa, la abrazo y la sujeto a su pecho y la hizo girar quedando abajo. ―O-oye… Estaba a punto de seguir reclamándole, pero él la hizo callar con un beso, un beso que ella siguió con gusto, sin importarle el hecho de que el chico estuviera pasando las manos por la piel de su pierna izquierda. Cuando sus dedos llegaron de la pantorrilla al muslo, lo sujetaron con fuerza suficiente y lo subieron lentamente hasta que su pierna rodeara su cadera. Ella empezaba a sentirse cómoda con la situación -seguro la comodidad se le iría cuando el chico le quitase el vestido.- lo suficiente para que sus manos, ya ubicadas en su pecho, con temblorosos y nervioso movimientos fueran quitando la corbata, de buenas a primeras lo único que consiguió al no ver, fue ajustarla más, a lo que el chico rio, aparto con suavidad las manos de ella, se separó de sus labios, se sentó y se quitó lentamente la corbata sin dejar de mirarla a los ojos. Tenerlo encima, desnudándose para ella, mirándola con deseo, y estando a una prenda de estar medio desnuda, todo eso la hizo sonrojarse. El chico, una vez quitada la corbata, empezó a desabotonar la camisa mirándola con lujuria y moviendo los dedos con suavidad provocativa. La chica volteo la mirada. Le gustaba la vista que tenía desde abajo, eso no se negaba, pero aun así se sentía tan intimidada por él, por sus ojos que si ya tenían un rojo intenso, ahora parecían a punto de arder en llamas. Eran demasiadas cosas en muy poco tiempo. Cuando el chico se enteró por sus gestos lo nerviosa que la ponía, no pudo evitar sentirse culpable. Pretendía ser juguetón para que ella también lo fuera, para que todo fuese mutuo, para que no se sintiera tan chiquitita e insignificante a su lado, y solo conseguía lo contrario. Tendría que intentar disparar desde otro ángulo. Ir al otro extremo. La beso de nuevo. Trato de contener la fogosidad que le empezaba a nacer, remplazarla por confianza. Por cariño. No toco sus piernas, ni porque le enredaran la cadera. No toco su espalda, ni porque ella la arqueaba suave y notoriamente y estuviera descubierta. No trato de tocar sus pechos, ni porque con solo bajar un poco el vestido estuvieran descubiertos. No jaloneo apasionadamente su cabello, ni porque se extendiera en provocativas y hermosas ondas sobre la almohada. Toco su rostro. Sus mejillas. Las acaricio con los pulgares. Con suavidad. Como si temiera que su piel caliente la quemara, la derritiera, la lastimara. Ella no sabía qué hacer, primero tierno, luego seductor, y ahora tierno de nuevo. No entendía porque tantos cambios. Sabía que trataba de comunicarle algo, pero a pesar de ser una chica lista y siempre enorgullecerse de ello, su cerebro parecía no conectar con sus deseos. Ni tampoco con él. Y ahora sus labios tampoco respondían del todo. Tenía demasiadas cosas en la cabeza. Demasiados “¿Por qué?”. Empezó a besarlo de forma muy torpe, no seguía el ritmo, y mientras más trataba de seguir el ritmo, más se entorpecía. Al final, él se separó. La inspecciono con la mirada “¿En qué estoy fallando? ¿Eh sido muy directo? O… ¿Tal vez muy suave?... ¿Preferiría un beso más apasionado acaso? No, con ese nivel de nerviosismo no puedo hacer eso… Pero suave tampoco funciona… Tal vez no quiere besos ¿Debería intentar en el cuello? No lo sé… No lo creo… ¿Preferirá que le quite el vestido ya y esta disgustada porque no lo he hecho? No, eso no tiene sentido… No lo entiendo…” “¿Y ahora? ¿Porque se detiene? Seguro es porque no he podido seguir el beso… Oh no… ¿Qué querrá? ¿Quiere que me quite el vestido yo…? O quizá… ¿Un oral tal vez? Eso tendría sentido pero… Ay, no lo sé… Lo he arruinado todo. Bien sabía que debía quedarme en la ducha, todo sería mejor que esto… Ninguno lo está disfrutando. Joder” Al final, el chico decidió ir por lo seguro. Le dio un beso superficial sobre los labios. Se quitó de encima de ella. Se acostó a su lado. No quería dormir dándole la espalda, pero estaba muy nervioso y apenado para verla a la cara, así que simplemente la tomo en brazos y la recargo en su pecho. Estaba demasiado confundido. Si no iba a funcionar, mejor intentarlo otro día. Su erección había durado tan poco por culpa del nerviosismo. Ni él, ni Maka, ni su “amigo” parecían en condiciones de continuar. Ella suspiro cansada y se dejó abrazar sintiendo una gran culpabilidad. Si no hubiera estado tan nerviosa todo habría salido mejor. No dejaba de culparse. Apretó los ojos con mucho nerviosismo. No podía quedarse sin pedir disculpas. ―L-lo lamento Soul… E-es culpa mía. Él al escuchar eso se puso tenso. ¿Qué no había sido culpa de él? No supo que decir. Se quedó callado. Maka pensaba que estaba furioso ¿Cómo se atrevía a pedir disculpas en vez de continuar? Seguro eso pensaba Soul. Se sintió tan mal, tan poca cosa, que al final se dio la vuelta. Le dio la espalda a su recién adquirido esposo en la noche de bodas. ¿Podría hacer algo más para arruinarlo? Sentía ganas de llorar. Ya tenía el nudo en la garganta y las lágrimas ya le decían a previo aviso que se estaban reuniendo para salir cuando más quisiera que se quedaran dentro, que esperaban el peor momento para surcar su rostro. Soul no sabía si debía decir “No, no te culpes, fue cosa mía”, “No, perdóname tú a mí”, ¿Algo conseguiría consolarla? Pues lo intento, no lo pensó, solo hizo lo que quiso. Le rodeo la cintura con los brazos y ella se tensó cuando sintió la suave presión de sus labios contra su cuello. No lo hacía de forma lujuriosa, era más bien de una forma pura, por así decirlo. Sin intenciones otras más que tranquilizarla. Ella suspiro. Se sentía bien. Era tranquilizador, se empezaba a relajar. Estiro el cuello y el hombro para que tuviera más espacio que besar. Soul recorrió el largo de su hombro y su cuello juntos al derecho y al revés. Maka se dio la vuelta para mirarlo, pero no soporto mucho la fuerza de su mirada y se puso de cara a su pecho. Pudo haberlo recordado antes, o después, pero en ese momento, no pudo evitar pensar una noche de lluvia, más bien de tormenta, la primera vez que durmió con Soul, cuando aún no sabía nada de Demonios, de familiares, de lo que pasaba en la zona restringida de Shibusen, cuando el mundo era más tranquilo y aunque empezaba a saber cosas, no tenía ni idea de lo que le esperaba. Ahora, casi un año después, volvía a estar en sus brazos, pero entonces recordó algo más sobre esa noche lluviosa. Soul nunca estuvo ahí. Ese “Te amo” esas palabras en italiano que sonaban tan hermosas aun sin saber su significado, esa disculpa, todo lo había inventado ella. Pero, si lo había hecho ¿Por qué Soul también tenía un recuerdo de esa noche? ¿Por qué también pensaba en eso en ese mismo momento? ¿Por qué recordaba con muy poca niebla lo que le había dicho? ―” ¿Tenias miedo, no?...”― Maka alzo la vista a él. Soul miraba al frente de forma inexpresiva. Maka había pasado tanto tiempo pensando que lo había imaginado… Siendo que en realidad todo lo había planeado Soul así, solo para salvar su orgullo. Un chico cool jamás diría esas cosas. Estaba por interrumpirlo, cuando continúo ―”Yo solo… Solo quería protegerte del miedo… Además, creo que… Yo… Me… Me excedí con lo que dije, perdón, es que no sé cómo...Como tenerte cerca…” Maka abrió mucho los ojos y lo miro con atención, él la miro, esperaba que lo recordase y le siguiera el juego, que continuara el dialogo, si es que lo recordaba. ― “¿Qué? ¿Qué acabas de decir Soul? No te aproveches, podrías haberme insultado” Claro que lo recordaba, con todo detalle. Ambos lo recordaban. Pero esta vez, Maka sabría exactamente qué le dijo durante esa noche de tormenta. ― “¿Insultarte? No, para eso soy directo. No Maka, además ¿Por qué te insultaría?Si eres la cosa más bella de mi vida” Maka no pudo evitar sonreír igual que lo hizo Soul cuando repitió las palabras y le volvieron a salir del corazón. Sus palabras, sabiéndolas reales y entendiéndolas con toda claridad, la atontaron, Soul alzo una ceja y sonrió de lado, como diciéndole: “Sigues cariño” —“Deja de hacer eso...Eres todo un idiota.” Se rio por lo que dijo ¿En serio había sido tan infantil? ―”Pero soy tu idiota.”―No contuvo la risita. ¿Cómo podía ser Soul tan cursi? Se sentía realmente feliz en ese momento. ―”Te querré siempre a mi lado, quiero protegerte, incluso si tengo que dar mi vida para ello... Porque tú eres mi ángel” Suavizo la voz, pronuncio letra a letra con el alma en mano. Ahora, el ser llamada “ángel” tenía mucho más sentido que antes, y aunque no era el único título que tenía entonces, ahora podría ser ángel, familiar, y también su esposa. Maka le sonrío, no se lo había imaginado, y aun le quedaba un par de pequeñas dudas. ―Las otras veces. En las que… En las que pensé que lo había imaginado todo… ¿También fueron reales? ―”Si él no te ama… Entonces yo sí” Fue el mejor “si” indirecto que ella podría haber recibido en toda su vida. Se besaron. No es que uno se haya lanzado sobre otro, es que sus almas se conectaron, al fin entendieron los deseos del otro, lo que quería, lo que sentía, lo que le gustaba, y, de forma natural, sin que nadie tuviese miedo de intimidar o poner nervioso al otro, sus labios se unieron y fue como si se hubieran pegado. No se separaban. Sus corazones latían fuerte y rápido. Sentían ganas de besarse a morir. De tocarse. De abrazarse. De sentirse mutuamente. De fundirse juntos por la eternidad. De forma automática, y olvidándose de sus inseguridades, Maka llevo la mano de Soul, que la rodeaba por la cintura, a su espalda baja por la parte desnuda… …Y lentamente la hizo llegar más abajo… *******7u7w7u7w7u7w7u7******* Despertaron agotados. Habían hecho el amor toda la noche, sin parar y sin descanso. Maka había suplicado por más varias veces, y tampoco es que Soul pudiese -o más bien, quisiese- negarse. Habían respirado agitadamente, se habían empapado de diversos fluidos y sus gargantas habían acabado resecas de tanto acelerar sus respiraciones -en el caso de Maka, no solo por eso.- Daba igual lo que habían hecho, lo habían disfrutado al por mayor. Maka cuando abrió los ojos, lo primero que vio fue el rostro de Soul, las ventanas dejaban entrar la luz de la mañana y ella no pudo evitar pensar que le favorecía mucho. Aún tenía una ligera capa de sudor sobre el cuerpo y su cabello seguía revuelto de tanto movimiento. Ante los ojos de Maka, se veía tan adorable, tan apacible, y, recordando los hechos de la noche anterior, también podía incluir salvaje a la lista. Se removió ligeramente en la cama, y se dio cuenta de que había dormido abrazada a su pecho, que él la rodeaba con los brazos, que sus piernas estaban entrelazadas y si se movía, podía sentir todos los detalles de TODO su cuerpo, de no ser porque él estaba dormido, se habría removido mas solo para sentirlo. Cerró los ojos para disfrutar de eso un poco más, sentir el calor que despedía su piel. Sintió unos labios rodear su cuello y aunque se tensó por un momento, siguió con los ojos cerrados. Los labios que daban caricias a su cuello, fueron recorriéndolo con lentitud y suavidad, dejando beso a beso una pequeña presión y una marca de humedad. Lo recorrieron completo, pasaron por su hombro y cuando se apartaron, ella lo miro a los ojos y su sonrisa fue mutua. Él se acomodó sobre su codo y la miro aun con la sonrisa. ― ¿Cómo dormiste, cariño? Ella rio. ―Pues apenas y he dormido… Ambos se rieron. Le acaricio la mejilla mientras sonreía. Habían pasado una noche fantástica… Él no podía esperar a que llegara la segunda… Se levantó de la cama y empezó a buscar su ropa. ¿Dónde la había dejado? O más bien, donde la había arrojado. Maka se rio al verlo recorrer de arriba abajo desnudo la habitación, soltó una risita y cuando el chico al fin encontró su ropa interior y se la puso, no contuvo el impulso y jalo la sabana que cubría el cuerpo desnudo de ella. Ya lo había visto, y quería verlo de nuevo, y Maka, pudorosa nuevamente, jalo la sabana para que no la viera y empezaron un juego de estira y afloja entre los dos, donde, obviamente, perdió Maka. No había libros cerca, de eso se había encargado Soul. La chica para cubrir parte de su cuerpo, se sentó de rodillas con las piernas separadas, junto sus manos sobre su intimidad para cubrirla y que sus brazos hicieran lo mismo con sus pechos. Él le guiño el ojo y salió de la habitación. Maka aprovecho ese tiempo para ponerse ropa, pero cuando vio la camisa de Soul no pudo resistirse y en vez de ponerse cualquier otra cosa, decidió ponerse esa. Salió dudosa de la habitación y descubrió a Soul buscando en la cocina, se rascaba meticulosamente la nuca. Parecía completamente perdido. Ella lego a su lado y lo abrazo desde detrás y a través de la tela fue capaz de sentir los músculos formados de su espalda y el calor que esta misma daba. Soul, por su parte, sintió sus delgados bracitos y la presión suave de sus pequeños pechos entre la ropa. Sonrió suavemente. Ella ya era suya. En todos los sentidos. Miro su anillo mientras disfrutaba del calor de su esposa. Su mano se veía tan extraña con la joya, parecía haber crecido muchos años, y entonces tomo la mano de Maka, la que llevaba el anillo y las comparo. Se veían tan extrañas, tan diferentes. Pero le encantaba lo que veía. Se dio la vuelta y miro la tenue sonrisa de ella. La beso de nuevo, sabiendo que ahora tenía la eternidad de su vida para disfrutar de sus labios, y también de su cuerpo. Se inclinó y la tomo por la curva de su trasero provocando una pequeña sonrisa de parte de ella, la subió a la mesa y se quedó entre sus piernas con las manos en sus caderas. Maka se separó aun con la sonrisa. ― ¿No crees que deberíamos comer antes?― Se rio un poco y espero su respuesta. ―Aún tenemos mucho más tiempo para comer. ―Y para otras cosas… ― ¿Un hijo está entre esas cosas? ― ¡Soul! Ni si quiera sabemos si es posible. ―Entonces hay que intentarlo a ver si se puede. ― Idiota. Se volvieron a besar entre risitas y bueno… Que más. Y si se pudo. Maka se mostró bastante recia a tener hijos los primeros años. Tenían ya 8 años de casados cuando tuvieron a su primer hijo: Tenia todas las facciones de su padre, y también su cabello, pero sus ojos fueron de un verde esmeralda como Maka. Soul no pudo evitar pensar en él cuando lo vio, así que, sin pensarlo dos veces, y aunque lo detesto toda su vida, insistió en ponerle el nombre de su hermano: “Wes Evans Albarn” Tiempo después, ya entrados en el tema, tuvieron una hija. No se parecía un a Maka, ni a Soul, era el vivo e idéntico ejemplo de su abuelo. Una pequeña pelirroja oscura de ojos azules. Su abuelo estaba encantado y casi exige que la niña se llamara como el, pero al final, la pequeña se llamó Alice, como la pequeña familiar de Wes. Siempre estaban juntos, nunca se separaban. A veces Wes molestaba a Alice, pero generalmente era al revés. Alice tenía la personalidad seria de Maka y Wes tenía un poco más de Soul, aunque ninguno desarrollo especial gusto por la palabra “Cool” o por hacer “Maka-Chops”. Ambos eran únicos entre ellos, no se parecían demasiado a nadie. Soul consentía a Alice, y Maka consentía a Wes, siempre que los pequeños querían jugar y tenían que hacer equipos, siempre eran así. Kid y Chrona también tuvieron una pequeña hija. Con el cabello lila de chorna, aunque con las líneas blancas de su padre, aunque también era asimétrica, para Kid su niña era perfecta. Se llamó Anni. La pequeña era perfeccionista como su padre, pero era muy tímida en la gran mayoría de ocasiones. Era una pequeña tierna y algo difícil de entender. Black y Tsubaki tuvieron no 2, tuvieron 3. Benjamin. Harry. Y la mayor, Whith Star. Black insistió en el nombre, aunque fuese la mayor, Whith siempre fue su princesita. Era idéntica a Black en todos los sentidos, salvo, porque saco el tono de cabello blanco de su abuelo y también su nombre. Benjamin era una combinación de Black y Tsubaki, tenía el físico parecido a su padre, pero la personalidad de su madre, Harry, por otro lado, fue idéntica a Tsubaki. Todos estudiaron en Shibusen, y todos nacieron sabiendo sus secretos, además, todos nacieron o siendo Demonios, o mitad de ellos. Algunos se volvieron familiares, e incluso se convirtieron en compañeros unos de otros, como si el destino les jugara una treta graciosa. Los que eran demonios de nacimiento, dejaron de crecer a los 18, los que se hicieron familiares, se quedaron en la edad en la que se convirtieron -aunque entre esa edad y los 18 tampoco hubo mucha diferencia-. Maka y Soul, luego de un tiempo, se “jubilaron” por así decirlo. Llegados los años –que fueron muchísimos- Soul decidió que la eternidad no era nada cool, que ya había hecho tanto como había querido y lo único que quería era descansar. Maka tuvo sus dudas en un inicio, pero al final se dejó convencer. Un día, luego de haberlo hablado durante horas, se presentaron ante Shinigami-Sama, y le pidieron algo que él ya había escuchado pedir, pero no por un motivo como ese. Le pidieron que les sacara sus almas. Que las fusionara juntas. Que los dejara vivir en las estrellas. Que les dejara descansar. Shinigami-Sama dudo, pero al final, al ver la decisión de la pareja, acepto. El 13 de Enero de ese año, luego de despedirse de todos, de sus amigos, de sus familias, de todos, Shinigami-Sama les absorbió el alma. No, si se lo preguntan, no fue doloroso. Si ellos dos pudieran dar testimonio, lo describirían como algo aliviante, relajante, algo que los hacia respirar con más facilidad. Algo que los dejo en paz. Sus cuerpos se desvanecieron. Las luces que eran sus almas se fusionaron. Todos lo vieron y algunos lloraron. Todos los extrañarían. Sus tumbas se mantuvieron juntas, y junto a la de Wes, las tres, simbólicas. “Te amo” “Es todo lo que quiero decir” “Mira, la próxima estación ha venido a visitarnos”* Eso era lo que se leía en sus tumbas. Solo ellos sabrían que significaba. Años después, sus hijos, aun creían sentirlos mirándolos durante la noche, asegurándose que durmieran bien. Fin. Agradecimientos: Bueno, supongo que no puedo quedarme sin decir gracias. Este es el primer fanfic que he hecho, y el primero que termino, obviamente no será el último, aún tengo ganas de escribir, sin embargo, ”Maka to Soru” siempre significara algo en mi interior, un inicio al que le di final casi un año después. Gracias a todos los que lo han leído, y se han tomado el tiempo y la molestia de seguirlo -sobre todo tiempo, ya que para estos últimos capítulos, me he tomado DEMACIADO tiempo.- A todos los que lo han leído en silencio, los que han reído, los que han llorado, los que han gritado -también soy lectora, sé que se grita- los que me dejaron comentarios, los que dieron a notar mis errores y mis aciertos. A todos gracias. Desde el fondo de su querida escritora, Yunne Miku. Gracias. Espero hayan disfrutado este viaje, el primero de muchos, y gracias por acompañarme en él. *Muy probablemente nadie se dio cuenta, pero, el capítulo en que Soul rescata a Maka del calabozo de Aracnofobia, fue más un song-fic que un capitulo, o al menos esa parte en particular, y ese es un trozo de la canción que utilice para ello. Quería darle un significado, y no encontré mejor que ese* Gracias por llegar hasta aquí. Nos leemos luego. ¡Bye bye! <3
bien creo que lloré tanto que mis lagrimales pedirán jubilación después de tu fic, me alegro haberlo leído, cada palabra, cada oración llegaron tan profundo en mi corazón; lloré, reí, sufrí, odie y muchos otros sentimientos sentí al leer tu fic, es uno de los pocos fic que me han hecho agonizar por un capítulo nuevo y me siento feliz por eso. Me alegro mucho que terminarás y créeme que cada capítulo se notaba como ibas mejorando. espero que hagas muchos fic más y creeme que si haces otros estaré ahí. me encantó este epílogo fue tan tierno y romántico y algo nostálgico sobretodo al final cuando piden descansar. espere mucho por este epílogo y valió la pena cada palabra. sin mas que decir. besos y abrazos. :*
Nunca se que decir... me odio por eso. Y si, obviamente, lloré. Lloré como si fuese mi único objetivo en estos momentos. Y me siento triste por que se haya acabado pero dios mio, como he disfrutado leyendo todo esto. Aún sigo llorando pero bueno, no me importa. Gracias a ti por crear una historia tan (y resalto la palabra tan) maravillosa. Y gracias por no rendirte y terminar la. Y bueno, ya que no se que mas decir adiós y gracias.