Sal & azúcar

Tema en 'Historias Abandonadas Originales' iniciado por Erdilla Von Creation, 22 Mayo 2015.

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¿Del gusto de todos en su paladar?

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    Erdilla Von Creation

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    Sal & azúcar
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    Comedia Romántica
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    Capitulo 1

    “Especias de todos”


    ¿Sienten ese olor? Carne y verduras fritas en una sartén de acero inoxidable. ¿Lo escuchan? Es el aceite que se fríe con ello. ¿Lo sienten? Claro que sí, es el hambre que les provoca a todo aquel que piensa en carne asada con verduras, con toques de vino para darle una sazón más explícita y amarga. Le sigue con romero, ¿un poco de orégano? Claro, aunque existe gente que la odia. Canela ¡¿estás loco?! Claro que no. Eso le va al postre de tiramisú con salsa de caramelo y toques de la canela que casi le hechas a la sartén con la carne. Delicias. O delicias que se funden y combinan con las demás recetas. ¡Curri de arroz listo para servir! ¿Un poco más de bebía? ¡Claro que sí! ¿Cuál quiere? ¿Sprite? ¿Coca-Cola? ¿fantavision? ¡jojojo! ¡broma! Invita la casa. Eso o me demandan.

    Cuchara en la sopa directo a los labios de la mujer con su hijo pequeño embarrado de tallarines con salsa. El tenedor tirado al suelo, y el pequeño riendo. Con ello viene una muchacha que también trae consigo un cuchillo. Acercándose a la mujer de labios rojos le dice.

    -Dama, le daré un consejo- dijo sonriendo la muchacha- córtele los fideos al niño. Es para que se le sea más fácil comerlos- agradecida, la mujer la recibió y le hizo caso.

    Así mismo la muchacha camino hacia la cocina. Su cabello negro oscuro flameaba a lo liso que era. Tomando atención de muchos a su alrededor. Era pálida como la nieve, pero eso no le impedía a lo bonita que era. Tenía ojos oscuros, maquillados muy oscuros para que se vean más filosos y alegres. A su ojo izquierdo se le tapaba por su cabello. Paso por la caja saltando la baranda que separaba el comedor y la cocina. Aunque se devolvió para recoger su sombrero de copa negro con una gran flor que se le había caído. Siguió su camino y entro por fin a donde genios lograban un arte.

    -Miren quien nos viene a supervisar- dijo una de las cocineras jóvenes –Nada más y nada menos que…-

    -la pequeñita jefecita- se burló un cocinero musculoso. La muchacha de mirada serena enfurcio y se lanzó hacia el repostero

    -¡¿a quién viene a decir jefecita don testosterona?!- grito agarrándolo de la camiseta

    -¡Evelyn Felicinda Gamborra!- grito otro repostero de muchos rizos. Ella lo miro- ¿Qué te he dicho? Aquí no se golpea – Evelyn lo soltó y se acercó al rizado con devuelta su rostro sereno y alegre, dándole un abrazo

    - Tienes suerte que solo te hago caso a ti en esta cocina- dijo Evelyn sonriendo en su pecho

    -¿Por qué será?- dijo sarcástico el musculoso con los brazos cruzados mirando al techo. El rizado también se enojo

    -¿No tienes otra cosa que hacer en vez de insultarme?-

    -sí, pero aproveche un segundito para sacarme una burla discreta- dijo sonriendo fríamente –y una observación de que solo te hace caso a ti por ser un maric…- no termino porque una sartén le golpeó la cabeza.

    -compórtate Darren, estamos trabajando. Y tú también Sebastian que estas a un paso de sacarle la madre, si te conozco- dijo con autoridad una mujer alta y bellísima. Rubia algo teñida con una trenza peinada a un costado de su cabeza.

    -Si Jeannette- dijeron en unísono Darren Morraco y Sebastian Burich reposteros encargados de los postres. Jeannette Fonseca, su jefa en esa área sonrió con la sartén en su mano como trofeo de su triunfo.

    Enseguida de esa peleíta llego una practicante que era mesera temporal con las órdenes.

    -¡Gnocchi con camarón!- grito la cocina más bajita de la cocina -¡Sofí encargarte de la salsa blanca y luego con la salsa boloñesa de la orden siguiente!-

    -¡Si Rosy!- dijo Sofía Delgado que era una cocinera pero muy alegre. Mucho más alta que su mejor amiga Rosana Pereira y más ancha por su gordura. Empezaron a preparar las ordenes rápidamente y con mucho entusiasmo.

    Tengo una gran seguridad de que se preguntan

    Quienes son estos cocineros y por qué estoy hablando de ellos. Primero que nada diré que todo se sabe lentamente y segundo, les daré la bienvenida como corresponde a esta situación de llegar a un punto divertido y extravagante y que no se cofundan.

    Pues como remedio de compensación. Les doy la bienvenida a “Sal & azúcar” un restaurant pequeño pro muy famoso por sus deliciosos postres y platillos que algunos cuentan, poseen mágica de la pasión, amor y esfuerzo de manos artistas de la cocina. Verdaderos artistas que ni maestros tenían y ahora ellos son los genios. Si genios con diferentes fuentes de información ¿damos un recorrido? Que va, si se seguirá contando. Por qué a los años que ha existido este restaurant, hoy sucederá algo. Alguien viene y cambia a quien debe ser la jefa.

    Todo va continuo.

    ¿Cómo? Distintas formas

    ¿Cuándo? Le faltan unos pasos.

    ¿Cuántos? ¿Hablas de ellos?

    ¿Todos? No más que un cambio, es la verdad generalidad.


    En la puerta detrás se abre entrando alguien. Un hombre alto mirando a cada lado. No hay nadie en la oficina. Lleva un papel en la mano y sonríe viendo una fotografía dela muchacha de cabello negro con todos de la cocina y un hombre viejo de muchas canas sonriendo. La sonrisa más cálida del recuadro.

    -su sonrisa llega a darnos alegría a todos. Es como una opción de confianza- dijo Evelyn llegando a la oficina. El hombre se dio vuelta mirándola desde arriba – ¿viene s por el trabajo? – el hombre asintió -¿tienes experiencia en lo raro y lo poco común?- el hombre quedo confundido –parece que no ¿sabes de encargarte con alguien de mala actitud y otro de una alegría que te dar asco?- el hombre asintió –hablas poco, me parece que no tendiste. Te lo digo, ¿eres homofóbico? ¿Respetas a las gorditas? ¿Eres un fan de las revistas de modelos? Ejemplando ¡Verónica Secret? ¿Posees un complejo de superioridad? Respóndeme cada una de las preguntas en una sola respuesta sin mover los, labios- el hombre negó con la cabeza. Está muy extrañado ¿era la entrevista? –Me alegro- sonriera Evelyn como gato pícaro -Tu nombre-

    -Dominic Nicollini- dijo Dominic sorprendido

    -¿Dominic? Tal vez te me harás conocido, pero no importa- se dio media vuelta –acompáñame- Dominic la siguió.

    Por el pasillo no evito en preguntar.

    -¿Qué no había un dueño aquí? ¿Es usted?- pregunto

    -temporalmente. Mi padre está en el hospital, es por mientras pero volverá luego- respondió Evelyn –soy la menor de sus hijos, mis hermanos tiene otros trabajos así que no pueden estar aquí- Dominic asintió

    -¿Dónde vamos por sí acaso?-

    -a conocer a tu compañeros ¿Qué más crees?- a Dominic se le abrieron los ojos notando lo verde que eran

    -¿Cómo? ¿Ya tengo el trabajo?- dijo asombrado

    -pues claro. Yo nunca me equivoco cuando miro algo que se ve prometedor- dijo s ¿muy segura y alegre la sombrera –me gusta que entiendas rápido. Te adaptaras bien- se detuvo de pronto y Dominic choco con ella -¿Dónde estará este punk de pacotilla? Si lo encuentro de nuevo durmiendo le despido. Aunque no puedo hacer eso ¡Jonathan!- rápido llego un chico muy joven con un corte rojo punk, muchos piercin y pantalones rotos bajo una teñida de camarero

    -¿Qué pasa Doña Jefa?- pregunto Jonathan Bonnett

    -trae un delantal de… ¿cocinero cierto?- pregunto Evelyn a Dominic, el asintió –que bueno, me hacía falta. Trae uno ¿ok? Rapidito que falta poco para la cena.- Jonathan se fue por un rincón volviendo con un delantal blanco –después estamparemos tu nombre, acompáñame- le tomo el brazo arrastrándolo a la cocina.

    Todos estaban sirviendo rápidamente comida en los paltos redondos y cuadrados pequeños si era postre. Grandes cantidades si era necesario. Pequeños si era muy llenador. Dulces iban de por allá, con los gritos de Darren y Sebastian peleando a palabras feas por como sus visión el flan de vainilla. Aunque en realidad debía de ser de chocolate. Como el que entregaba Jeannette a la camarera. La gordita y la chiquita eran una cocinando un gran palto para cuatro de carnes pastas. La carne era servida en otra habitación y los jugos eran servidos por los camareros.

    -espera. ¿Cómo sabes que me encargo de las masas?- dijo muy sorprendido

    -¿te encargas de las masas?- preguntó Evelyn. Dominic sintió caerse ¿Dónde se acababa de meter? –vaya, vaya, otra adivinación mía. Bueno ve a trabajar. A Sofía y Rosy le falta ayuda- en eso se dio la vuelta y salió de la cocina dejando a Dominic perplejo.

    No tuvo remedio. Se colocó el delantal blanco y se acercó a las chicas quienes trabajaban a risas y juegos. Lo vieron y le dieron la bienvenida. Dominic es en algunos sentidos tímido, pero al poco rato trabajando con ellas se sintió más cómodo como para hablar más en la hora de la cena.

    -¿La jefa es así siempre?- pregunto cortando vegetales

    -¿Evelyn? ¿Quieres decir así de rara y rápida para sus dediciones?- dijo Rosana probando si la pasta estaba lista. Su compañero asintió –lo aprendió del gran hombre de su padre. El dueño –

    -¿el dueño? ¿Ella es la hija del dueño autentico de aquí? – Sofía le aclaro enseguida que ella era la menor y la hija de su segunda mujer quien era menor que el dueño –ha con razón. Me lo dijo cuando llegue- hecho los vegetales en un bol y siguió picando más

    -ella es buena niña. Es increíble que apenas tiene dieciocho años y ya es la jefa- dijo Sofía y a Dominic casi se cortó un dedo

    -¡¿dieciocho?! Apenas sale del colegio y ya es la jefa ¿al menos sabe cocinar?-

    -es una suerte que no cocine- dijo Darren desde lejos- la última vez que lo hizo tuvimos que llamar a los bomberos. Y luego a un abogado- Jeannette le dio un codazo para que se callara- ¿Qué? quemo dos establecimientos más ¡uno era una heladería! –

    -Pero a pesar de eso, la chiquita es buena en los negocios. Hasta nos subió el sueldo- dijo Sebastian revolviendo un muesse -organiza todo y arregla todo cuando se descompone algo. A todo esto, oye Domi ¿Cuántos años tienes?-

    -ya coqueteando este floreció de la Rosa – dijo disgustado Darren. Sebastian se enojo

    -Mira en primer lugar, no es mi tipo. En segunda se te quema la levadura – musculoso se dio la vuelta y apago la sartén –fastidias más que trabajas. Típico comportamiento primitivo-

    -Cállate mariposa. Que sé que te encantaría acostarte con el nuevo-

    -¡deja de decirme así! ¡Cabeza de primate musculoso!- dejo el bol con muesse tomando el delantal de Darren para pelear. Pero fue Jeannette otra vez quien los detiene

    -perdona por estos tontos. Se la pasan peleando por nada o ir todo- dijo con seriedad irritada –yo soy Jeannette y soy la jefa de estos dos-

    -Gracias Jeannette- dijo Dominic sonrojado –yo... yo… bueno han sabes mi nombre… así que mejor doy mi edad ¿no?- Rosy a su lado asintió –tengo veintidós años y me acabo de graduar de la escuela culinaria-

    -otro más- dijo Rosy alegre. Dominic la miro dudoso –otro más que le gusta Jeannette- el muchacho se sonrojo más aun y volvió a su trabajo. Todos se rieron a la gracia del nuevo.

    Los platos salían llenos y entraban vacíos. Sin gramos de migajas o de algún hilo de ensalada. Delicias para todos. Grandes a pequeños. Pequeños a grandes. Cada uno con una independencia de su comida y gusto, un bocado, quedan encantados. Devorados pidiendo mas o felicidades al chef. Papas con bistec, espagueti o un sushi, lo que sea se llevaba. Merengue con flan de maracuyá, cheescake de manjar. Vino, vodka, ron. Risas y gritos de alegría. Familias o parejas. Todos sentados en las mesas de madera. Muy familiares de campo decorados con manteles rústicos y un florero encima de todas las mesas. Colgantes y brillantes con las luces a sus alrededor. La noche se presentó fría, pero adentro de ese local parecido a antigua casona antigua en medio de otras más a su lado. Era tan caído que todos olvidaban su mundo de realidad por lo menos hasta que se vaciaba el plato.

    Una noche cualquiera de jueves. Lista. Completa. Misión complete. Evelyn como buena anfitriona despido a todos los que quedan la puerta. Incluyendo a niños durmiendo en los brazos de sus padres. Agotados con una comisura en sus labios.

    -estoy exhausta –dijo Jeannette quitándose el delantal y acostándose en una silla

    -Fue un día bueno, para ser jueves- dujo Rosy mirándose al espejo arreglándose la cara y el moñito que sujetaba su cabello negro ondulado.

    -¿siempre son así de duro los días?- dijo Dominic que a sus primeras horas de trabajo, se sentía sin fuerzas para irse a casa.

    -No mucho. En las tardes es más tranquilo- dijo Darren comiendo una zanahoria cruda –en especial hoy es cuando las empresas vienen a cenar con sus empleados-

    Sebastian apareció por la puerta con Evelyn atrás y paquetes de donas.

    -¡buen día! ¡Muy buen día fue!- grito la chica

    -¿trajiste donas de “Luna Dona”?- dijo entusiasmada Sofía. La jefa asintió. Dejo la caja en una mesa de escritorio y la abrió. ¡Estampida! Todos saltaron a comer dejando solo una para Evelyn.

    -dona entra en mi paladar y lléname de tu dulzura llena de calorías- dijo Evelyn alabando a la dona, dándole un gran mordisco

    -Para ser sincero, este lugar es genial- dijo Dominic en voz alta- todos lo miraron.

    -me gusta su honestidad- dijo Sebastian –también sentí lo mismo cuando llegue aquí-

    -genial ¿Dónde estudiaste?- pregunto incrédulamente Dominic. ¡Hay! Mala idea…a la mirada de Sebastian se torno oscura a la pregunta -¿pregunté algo malo?- todos se miraron con susto y algo de vergüenza en cada uno.

    -hay Dom- dijo Evelyn asustándolo. ¿Cuándo llego a su espalda? -¿te gustaría que te preguntaran sin saber antes? Bueno te pasaremos esta. Eres nuevo ¿a quién le toca explicar?-

    -¡yo! Yo-chillo alegre Rosana – tienes que saber algo muy importante de nosotros Domi domino-

    -¿Qué cosa?- se estaba asustando… ¿tal vez metió la pata?

    -de aquí, la única persona que tiene estudios previos en el arte de la culinario eres tú y yo- Dominic soltó un sonido de asombro.

    -¿Qué? ¿Nadie aquí estudio para esto?- pregunto levantándose

    -nop. Aquí todos tenemos nuestras razones de como trabajamos aquí. Como ejemplo Sofía, es madre soltera pero es una gran cocinera. Al dueño, el grandioso Zael. Le dio trabajo con solo mirarla, ahora ha estado ocho años trabajo para el- confundido. Le costó procesar lo confirmado recientemente.

    -increíble. Pero cocinan de maravilla-

    -El don nos enseñó todo- dijo Darren marcando una mueca de sencillez

    -le agradecemos todo- dijo Sebastian volviendo a sonreír.

    -daríamos todo por el- dijo Jeannette iluminando sus mejillas

    -Nos salvó la vida, literalmente- dijo Sofía

    -no queremos que le pase nada- dijo Rosana

    -Mi padre es el mejor hombre del mundo. Sin el… no sé qué haríamos…- dijo Evelyn con mucho orgullo a su progenitor.

    -es un héroe… desearía conocerlo…- dijo Dominic sin pensar. Así que fue otra el centro de atención -¿estaba en el hospital? ¿No?- Evelyn asintió

    -sí. Y si quieres conocerlo me debes de responder la última pregunta del día- Dominic la miro entusiasmado -¿te quedarás y formaras parte de “Sal& Azúcar”?-

    Se quedaron callados. Esto era como una familia. Pequeña y ruidosa. Glamurosa en una unión por un hombre grandioso. El de la foto que se majestuosa al llegar. Respuesta, respuesta. Diga luego que te miran raro.

    -Claro. Claro que formare parte de esta extraña unión de sabores-

    -¡salud por eso!- grito Darren con una cerveza en la mano. Todos tomaron una, la sujetaron gritando:

    -¡Salud!- arriba los brazos- ¡por “Sal & Azúcar”!-
     
    Última edición: 22 Mayo 2015
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    The Condesce

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    Hola!!!

    Un gustazo leerte! bsdvfgad

    Lo que he leído en este capítulo me ha agradado mucho, yo también pude sentir esa sensación de la calidez en este restaurante, de la familia. Muy lindo, en serio.

    La idea me parece interesante, no es una cosa que se salga por completo de todos los esquemas y presente una idea totalmente nueva y original, pero está entretenida, te mantiene picado, pero sobretodo, en ningún momento disgusta.

    He leído muchas personas que empiezan sus historias, y son sinceramente tan pretenciosas, tratando de sonar bien hecho y pretendiendo parecer inteligentes... simplemente dejan un saber de hiel en la boca y me revuelven el estómago.

    Leerte a ti, no obstante, es bastante ameno.

    Me gustan las expresiones que usas para describir, como la de la comida al mero principio, genial. Un estilo bastante particular.

    Pero también tengo varios puntos negativos a señalarte. De entre varios de los errores, aquí te cito algunos y te digo cómo corregirlos; aunque no te preocupes, son meramente técnicos:

    aquí, no es "hechas" sino "echas". ¿Por qué? porque "hechas" viene del verbo "hacer": "Las pulseras están hechas". Y "echas" viene del verbo "echar": "Echas las pulseras en la bolsa".

    Aquí, al ser un nombre, debería ir con mayúscula.

    Acá, ojo, dos cosas. Primero, una que aplica a todos los diálogos, y es, que en vez de guión corto, se debe usar largo: "—", entre el menú de opciones del editor de texto de FFL viene, pero si lo que haces es primero escribirlo en word y luego copiarlo acá, como la mayoría hacemos, te diré que yo siempre le pongo "copiar y pegar".

    La otra cosa es que viene después de un punto y aparte, debe tener mayúscula.

    Quedaría así:

    —¡¿A quién viene a decir jefecita don testosterona?! —grito agarrándolo de la camiseta

    Otra cosa, la última letra antes del guión va separada por un espacio, y la primera después del guión va pegada sin espacios.

    Acá, igual, el guión y las mayúsculas, pero también es que el verbo está conjugado en pasado, por lo consiguiente sería "aproveché", con tilde. Si les quitas la tilde, cambia la palabra, es otra conjugación.. "aproveche" sin tilde es como en la frase "que aproveche la situación", no "yo aproveché la situación".

    Aquí igual, pusiste "estas" en vez de "estás", "estas" es de "estas cosas" y "estás" es del verbo "estar".

    Aquí el "Sí", también lleva tilde, y debería haber una coma entre eso y Jeannete nwn

    Adaptarás*

    :0 aquí, una aclaración, por favor. Esto ya se lo había mencionado Evelyn, no? la reacción de Dominic fue como si no lo supiera aún.

    Aquí, en vez de "al" es "el"

    quedaría algo así:

    "El dueño, el grandioso Zael, le dio trabajo con sólo. Ahora ha estado ocho años trabajando para él".

    Si ves, hay varios errores técnicos, tienes que aprenderte las reglas de acentuación y todo eso, pero tu manejo del lenguaje, de forma lógica está bastante bien nwn

    Yo soy Beta (los beta corregimos historias), este es mi primer mes, así que es gratis, si quisieras, podrías irme pasando los capítulos para que te ayudara a poner todos los acentos y arreglar la puntuación, etc.


    Nos vemos~
     
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    Erdilla Von Creation

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    Gracias , ya corregi lo mas notable
     

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