One-shot Discurso presidencial [academia meltdown]

Todos nos encontramos en el auditorio: enfrente estamos los nominados y los demás alumnos nos miran, quizá emocionados o no. Soy el primero en pasar, tal parece que recibí varios votos, por eso estoy aquí. Los directivos se encuentran hasta atrás del auditorio, escondidos entre las sombras pero por extraño que parezca, sé que me miran. Después de haberme negado a dar el discurso y de que me amenazaran con expulsarme, me tienen aquí.

Podría hacer lo de Len y arruinar mi discurso pero seguramente los directivos lo verían como una estrategia más para negarme al puesto: no me conviene. Suspiro de resignación, tengo que hacerlo.

—Buenas tardes compañeros, como ya saben mi nombre es Kamui Gakupo —inicio con voz alta, poniéndome erguido detrás del estrado. No activo el micrófono, mi voz es demasiado fuerte para hacerse escuchar por todo el salón. Mi rostro es serio, recuerdo las juntas que tenía en la empresa de mi padre, solo tengo que actuar normal—. Gracias a su apoyo he sido nominado a representar el papel como presidente de la clase. Antes que nada, quiero agradecerles por la confianza que depositaron en mí y por haberme dado la oportunidad de aspirar a este puesto, sin ustedes no estaría aquí –sonrío para carraspear un poco y continuar—. Ahora bien, siguiendo con las órdenes de nuestra “maravillosa” dirección —no puedo evitar decirlo con sarcasmo—, continuaré con el objetivo de esta reunión: dar puntos a mi favor para que me elijan como su presidente.

Miro a cada uno de las personas que están sentadas esperando a que hable, sonrío de forma natural, ¿quién imaginaría que estaría en esta situación? Alejo los pensamientos ajenos a este momento y prosigo:

—En primer lugar, quisiera decirles que los alumnos forman la escuela y no al revés, es por eso que siempre buscaré la forma en la que se sientan cómodos en este lugar, que lo vean como un segundo hogar y en el que sus compañeros de clases sean también como una segunda familia. Trataré de crear un ambiente ameno para todos.

“En segundo lugar, escucharé todas sus propuestas; aquellas que sean para el beneficio en general de los alumnos y/o escuela, serán puestas en práctica de inmediato después de un consenso con los estudiantes, porque la participación hace más sana una convivencia.

“En último lugar, no quiero que sientan una brecha entre mi papel con el suyo. Así como me verán como presidente, quiero que me vean como un compañero, un amigo, un hermano o incluso un padre con el que pueden contar. No existirán diferencias entre nosotros, porque todos venimos a esta Academia con una sola meta o sueño: estudiar música y ser los mejores. Gracias por su tiempo".

Me doy la vuelta, escucho los aplausos y suspiro de alivio, no sé si lo he hecho bien pero espero que a los directivos les parezca bueno. Me siento en la silla vacía, al lado de Luki, el próximo en dar su discurso. Me cruzo de brazos, cierro los ojos y espero a que todos pasen a hablar, considerando el número de nominados… Sería una larga espera.